centersize 16bCapitulo 10 /biUn Secreto guardado... te vi con él/i/size
bPareja/b: iSaga x Camus x Shura/I
bDedicatoria/bI ScarletDiamond/I/center
Paz... todo era paz desde que Apolo y Artemisa habían regresado al Olimpo y Atenea nos había devuelto a la vida, junto a todos los demás caballeros de bronce, plata... y nosotros los de oro que habíamos perdido la vida en esas cruentas batallas... pero... habrá una batalla que jamás se me olvidará... jamás...
Esa noche... la luna en todo su esplendor, parecía un día negro, el día negro en que todo el Santuario Ateniense se vería revuelto entre un manto de Oscuridad, miedo, terror... y sobre todo... traición... nuestra traición... la traición de Camus... Shura... y yo..
Cierro los ojos y aun veo a Mu tirado en el suelo, mirándome con sorpresa, quizás el se había dado cuenta de lo que sucedía, más entendió bien al luchar contra nosotros... un suspiro y veo a Shaka aun frente a nosotros con su rosario apuntándonos, un parpadeo para abrir mis ojos y me veo de nuevo frente a Camus y Shura guiándolos hacia la estatua, pero frente de nosotros, Aioria, Milo, y Mu... se enfrentaban a nosotros, con la misma técnica...
-... La exclamación de Atenea... – susurré suavemente mientras me miraba al espejo que me reflejaba, reflejaba esa tristeza en mis ojos, que jamás, nunca se podrá borrar... nunca... he escuchado unos pasos, y siento que es Kanon el que se acerca... medio sonrió, me da gusto que el haya decidido ser parte de las tropas de Atenea aunque no haya dejado sus escamas de general marino, el Mismo me lo había dicho hace días... si Poseidón el llamaba de nuevo, el ser iría, para ser el Comandante de las tropas de Poseidón... como yo lo era de los Caballeros de Oro...
Aun me sigo preguntando el por que me dijo eso... ¿acaso soy eso?... el comandante de los doce caballeros de Oro?... pero ... yo... el traidor más grande, que no dudaba en ningún momento matar a Shaka... que no dude un segundo en deshacerme de Seiya... que no dude en matar a Atenea...
Cierro los ojos dejando que el agua se deslice por ella como una suave caricia que apacigua el dolor que aun siento... suspiro debajo del vital liquido y entra mi hermano, Kanon... quien con una sonrisa me dice que podría ahogarme... y me jala del cabello, gruño pero en si me daba gusto tenerlo ahí... junto a mi en la casa de Géminis...
Saga... si sigues ahí te ahogarás, y no voy a poder de nuevo ir a ver el mar por que me recordaba tu "hermosa" cara debajo del agua... – dice en tono juguetón a lo que yo sonrió y por fin saldo del recipiente con agua sacando mi rostro para que le de el aire... Kanon sonrió, tiene una sonrisa picara, una sonrisa tan diferente a mi...
Le aviento un poco de agua al rostro en tono de juego mientras el sonrie y me mira con un puchero después de sentir el agua... me recrimina que sea un aprovechado con su inofensivo hermano, le miro con ironia...
Inofensivo tu?... aja... y yo soy la Reencarnación de Dionisio... .- Kanon me mira con desaprobación y salgo riéndome bajo, como siempre suelo hacerlo, ¿por qué no me sale una risa más viva?... por que?... acaso es el dolor y el recuerdo... o quizás será...
Saga... estás en tu templo?...
Si Camus... adelante, pasa, estoy de este lado, con Kanon... – Camus se adentra suavemente por entre los pasadizos secretos de la casa de Géminis, los pasadizos que conocía tan bien... al entrar saluda a Kanon con su típica seriedad... Kanon suspira y sale de may alegando que tanta frialdad y terminara siendo un amargado como aquellos dos... Camus no se inmuta y Saga le mira como queriéndole matar... Camus medio sonrie y Saga siente desmayarse... pero corresponde la sonrisa...
Bien he venido a verte Saga, hace tiempo que no te veía... no has subido al Templo de Shion, y sabes como se pondrá cuando te vea... – dice Camus sentándose en el sillón cruzando la pierna... mientras Saga se queda enemismado con esa presencia tan elegante...
Lo sé... Shion me matará si subo... aparte que ahora anda entretenido con Dohko... – digo con una sonrisa que Camus corresponde con una más suave y elegante que la mía tatuada en mis labios... después de una platica de miles de cosas absurdas, sobre Milo, Aioria y el como habían pasado muchas cosas... Camus se levanto del sillon y lo vi salir elegantemente... como me gustaría acercarme y decirle que no se fuera... que se quedara a mi lado... más sabia que eso jamás seria... el... el estaba con alguien más...
Pasaron tres horas exactamente y la aburrición era enteramente desconsoladora... así que bufé un poco y me levanté de donde me encontraba para caminar hacia la salida que daba hacia el sur de mi templo, contemplé la casa de Tauro y la de Aries... donde suspiré, aun recordaba todo... y de pronto, un suave aroma a perfume francés llego a mi nariz... no, Camus no estaba ahí, pero había dejado su aroma por todo el templo... y suspire cerrando los ojos...
... en negro te sienta mejor... – dije en un susurro suave que nadie podría haber escuchado ni aun estando a mi lado... así que solo abrí los ojos y miré hacia el horizonte, el sol estaba sobre el Santuario iluminando suavemente todo lo que podía tocar con los rayos de luz... más aun así, no faltaban más de dos horas para que comenzara a declinar el día...
Esperé todo ese momento sentando en las escaleras de mi templo, admirando el paisaje jugando con mis manos y un colgante del signo de Géminis que Kanon me había regalado ya hace bastante tiempo, era un colgante en forma de estrella y en el centro decía en Francés "Géminis"... y del otro lado con la constelación grabada decía mi nombre "Saga" ... Kanon tenia uno idéntico solo que en la parte de atrás decía su nombre, pero traía un Dragón de Mar grabado en el frío metal dorado...
El atardecer no tardo mucho en caer y yo aun seguía observando con mis pupilas verdes cada detalle de ese anochecer hermoso... aunque sabia que la noche era más hermosa... desde que caí en los brazos de Atenea muerto... la oscuridad reino todo mi ser, cosa que me hizo sentirme muy bien, por que la paz y la calma siempre me habían gustado, cosa que desde que Ares se apoderó de mi cuerpo había perdido...
Cerré los ojos y volví a recordar a Camus con la armadura negra de Acuario, su cuerpo espigado y su fría mirada, sonreí de nuevo... ¿cuántas veces había sonreído por el recuerdo de Camus frente a mis ojos mientras yo enemismado con el recuerdo perdía la cuenta del tiempo que estaba ahí?... no lo sabia... más cuando abrí los ojos me di cuenta que ya las estrellas iluminaban la noche, una noche fresca y tenue, que aprecia ser perfecta para salir a caminar...
Cosa que no rechacé en ningún momento... así que me puse de pie, colocándome el colgante en mi cuello y saliendo de ahí para caminar a donde mis pasos me llevaran... cosa que descubrí muy pronto... el bosque cerca de la casa de Acuario... sonreí al recordar nuevamente a Camus... caminé lentamente por entre la hierva verde que se ponía debajo de mis pies... y seguía y con la mirada perdida, viendo hacia donde podría ir... más... escuche un ruido entre los arbustos... y moví mi mirada hacia el sonido que provenía... parecían risillas...
Así que me acerque lentamente posándome detrás de un árbol para intentar ver entre la oscuridad de los árboles y la negrura de la noche... encontrándome en un pequeño claro,...dos siluetas que me atrajeron mucho la atención...
La primera silueta tenia el cabello largo y un poco lacio con un par de mechones echados hacia delante, su espalda daba contra un árbol el cual parecía soportar todo su peso y el de su acompañante que tenia el cabello corto y algo necio, al parecer era negro su cabello... su espalda daba directamente a mi mientras abrazaba de la cintura a la otra silueta... y escondía su rostro en el cuello del otro, mientras que el de cabello largo cerraba los ojos y comenzaba a suspirar...
En ese momento me di cuenta de quienes se trataba...
Camus... y Shura...
Algo dentro de mi se encendió, y estaba dispuesto a salir cuando escuche un pequeño suspiro más largo y profundo proveniente de la garganta de Camus... así que me detuve y me quedé detrás del árbol... mirando... solo mirando como las manos de Shura viajaban por el bien formado pecho de Camus meciéndose debajo de la camisa de este quien solo suspiraba y pedía más con sus suspiros suaves... enredando sus manos en el cabello revuelto de Shura...
Me hinqué, había algo que no dejaba apartar la mirada de ellos dos... no podía dejar de verles... y solo me hinque con ambas piernas abiertas... sintiendo como debajo de mi pantalón alguien despertaba... negándome a mi mismo a creer que eso me excitara...
De pronto vi como Shura tomaba la pierna de Camus y le hacia que le rodeara la cintura apoyándose en el árbol...Camus suspiró cuando Shura comenzó a frotarse contra el y de los suaves y finos labios franceses salió un jadeo suave agregado a un "si " ... yo solo seguía mirándoles, no podría dejar de hacerlo... mientras entreabría mis labios por que comenzaba a faltarme el aire, y comenzaba a tener una especie de acaloramiento extraño...
Shura termino de sacar la camisa de Camus mientras el propio Shura ya estaba con el torso descubierto... atacando con sus feroces labios el cuello y los hombros de Camus, sin dejar de moverse, se notaba que Camus lo disfrutaba mucho... Camus no dejaba de jadear y cada vez lo hacia mas fuerte... y con un toque de pasión aun más acentuado que el jadeo anterior... era demasiado para mi... pero en lugar de irme, me apoye en el árbol detrás de mi con los labios completamente abiertos jadeando suavemente... sentía que debajo de la tela de mi pantalón alguien me gritaba que le atendiera... y no tarde en hacerlo...
Lleve mi mano a mi muslo el cual acaricie sobre la tela de mi pantalón hasta llegar a la zona donde se encontraba esa parte que pedía atención inmediata y sin dejar de ver el espectáculo que daban Camus y Shura, comencé a masajear levemente sobre la tela... mis pupilas verdes estaban puestas sobre Camus y Shura, que ahora estaba prácticamente desnudos, Shura solo estaba en bóxer y Camus estaba con los pantalones a medias en las rodillas.
Dejé escapar un suspiro cuando vi a Camus de esa manera, era realmente un cuerpo deseable... de pronto miré como Shura bajaba por el abdomen de Camus y este dejaba escapar suspiros suaves, más después de un momento, grito de manera placentera, cosa que me indico dos cosas, una, que Shura había atrapado dentro de su boca la erección de Camus y dos, que yo me había excitado más de la cuenta... ya que me dolía solo masajear sobre la tela... y deseé en ese momento ser Camus...
Bajé el sierre de mi pantalón lentamente sin dejar ver la escena, Shura se movía contra Camus en una insinuante maniobra de sensualidad, Camus tenia en su rostro la expresión del placer infinito... moviendo sus caderas contra el rostro de Shura... una danza completamente enloquecedora... yo deje escapar un gemido cuando mi mano liberó por fin mi erección y con mis dedos abracé esta para comenzar a subir y bajar mi mano a lo largo de mi miembro... cosa queme hizo sentir un inexplicable placer...
Cerré por un momento los ojos y cuando los abrí Camus tenia una de sus piernas sobre el hombro de Shura, y este sin perder su trabajo acariciaba el trasero de Camus, de pronto, este dejo escapar un gemido más alto, al parecer uno de los dedos de Shura habían irrumpido dentro de Camus haciendo que este exhalara aire con fuerza... mientras se seguía moviendo contra Shura... yo detuve por un instante mi trabajo para que mi dedo pulgar se entretuviera en la punta de mi erección, Shura se había detenido... y ponía de espaldas a el a Camus...
Camus suspiro cuando sintió a Shura detrás de el... así que alzo un poco las caderas, sabiendo lo que vendría, y un gemido por ambos se dejo escuchar... me había dado cuenta de que Shura había penetrado a Camus de forma lenta, cosa que a ambos parecía agradarles... Shura se inclino hacia delante para besar la nuca de un jadeante Camus, algo debió susurrarle por que Camus gimió más fuerte... mientras comenzaban a danzar suavemente uno contra el otros...yo por mi parte no dejaba de masturbarme tan suave que aprecia una caricia, una caricia negra... en ese instante desee ser Shura... penetrar a Camus, el ser más frió... aunque sabia, o intuía por el placer que derrochaban ambos, que en este instante era todo lo contrario...
Noté como las embestidas de Shura comenzaban a aumentar mientras que mi mano lo hacia también contra mi erección que sentía tan caliente como jamás lo había sentido suspiré cerrando los ojos cuando en mi vientre el cosquilleo clásico de la eyaculación pico suavemente... calentándome el vientre y de paso a mi miembro que era rodeado por mi mano... abrí los ojos y miré como Shura masturbaba a Camus mientras este seguía penetrándole con una fuerza sorprendente... quizás quería entrar en el hasta el fondo, y parecía lograrlo...
Camus dejo escapar un gemido y Shura al unísono con el... notando como ambos jadeaban y el movimiento iba en decremento, levemente se iban deteniendo, en ese momento sentí como mi mano estaba húmeda y de mi garganta salía un gemido que apagué mordiéndome el labio inferior... para que no descubrieran que había un polizonte cerca que les observaba... más no diría nada de lo que había visto, puesto que podría salir con ellos manchado, así que lo tomaría como entretención cada noche, y quizás... solo quizás... traería a Kanon conmigo...
Shura salió de Camus lentamente y se dejo caer en el pasto... y Camus sobre Shura mientras intentaban regular su respiración se abrazaron suavemente... Shura parecía no tocar a Camus por que con ambos brazos se apoyaba en el suelo, mientras que Camus descansaba sobre el cuerpo del español... poco a poco yo también recupere mi respiración y cerré los ojos... y me di cuenta que mi miembro estaba como si nada dentro de mi mano, sonreí satisfecho y me acodé de nuevo... esperaría a que ellos se fueran APRA salir de mi escondite... y poder irme...
No esperé mucho, puesto que Camus se levantó de nuevo con el semblante frío y tomo su ropa vistiéndose... Shura le acompaño con una sonrisa, pero Camus ni le esperó, solo salió del bosque en dirección de su templo, donde vi que se encendieron las luces por un momento, quizás tomaría un baño, sonreí... tenia ganas de visitar a Camus, pero después de esta escena no sabia ya... y menos con la ultima reacción que tuvo... Shura por su parte miraba el templo de Acuario resignado... escuchando oírle decir...
... siempre es lo mismo contigo Camus... ¿por qué no te olvidas de el y ... me dejas amarte?... – me quedé atónito... Shura amaba a Camus, y más Camus ... amaba a alguien más... alguien que no conocía... o quizás si, pero eso, después lo descubriría...
Shura desapareció entre la maleza... así que me levanté de mi escondite y me pose donde antes Shura... para ver el templo de Acuario, como las luces se apagaban, y algo dentro de mi me decía que fuera a verle... pero tarde ya, parecía ser la casi media noche... así que tome la decisión de ir y suspirando bajé el peñasco que daba justo a la entrada del Templo circular de Camus...
Entré sin darle hacer mucho ruido más... escuche unos sollozos de la parte privada de Camus, así que aceleré el paso para llegar rápido a donde estaba Camus... y lo encontré en su cama, con el cabello húmedo llorando a lagrima suelta... al acerarme una punzada en mi pecho ... algo extraño... mi retrato estaba entre sus brazos, Camus estaba dormido... más aun así lloraba... sonreí suavemente y me senté en la cama haciendo que Camus se exaltara y se levantara corriendo de la cama escondiendo mi retrato... no queriendo que lo viera...
Le sonreí levantándome hacia él... y le tome de las mejillas depositando un beso suave... que para mi sorpresa fue respondido con ternura... tomándome de la nuca... me separé de él suavemente y le vi a los ojos...
Cami... ya vi el retrato... – susurré y el aprecio quedar asombrado, no me dijo nada , mas que sus ojos estaban rojos de tanto llorar... así que le besé nuevamente y le abracé... y bese suavemente su frene...
¿Qué... que haces aquí Saga?
... vine por ti... vine para quedarme a tu lado... – susurré suavemente y sentí como Camus se escondía en mi pecho, sonreí y le tomé del mentón para que me viera a los ojos, sonreí de nuevo... y en mis labios se formo la palabra "Te amo"... después le besé... el comenzó a llorar suavemente, y le limpie las lagrimas con delicadeza con mis labios...
Sa... Saga... te ... te amo Saga... – me dijo con la voz quebrada aun, yo solo le besé con ansias, terminando con una danza de cuerpos suave, que parecía ya no ser solo sexo... si no que estaba impregnado de amor verdadero...
