Hopeless

Capítulo 3. Caring about you

Era domingo por la mañana, y hacía mucho frío. Tanto que Akira Sendoh había optado por no moverse de la cama, a pesar de las quejas de su madre.

"Sería mejor que los domingos entrenáramos por la mañana, y no por la tarde", pensó el capitán del Ryonan, "Se lo propondré al entrenador Taoka".

Recordó que Hikoichi le había comentado en una ocasión que el Shohoku así lo hacía, y entonces la imagen de Rukawa sentado en aquel banco le vino a la mente de nuevo. Habían pasado tres días desde que se encontraran por casualidad, y no había vuelto a saber de él. Lo cual era normal, ya que normalmente sólo se veían en los partidos.

Qué le pasaba al número 11 del Shohoku? Cuando levantó su rostro para mirarle, en el breve lapso de tiempo que transcurrió antes de que adoptara su típica mirada fría, Sendoh pudo notar mucho dolor en sus ojos azules.

No había podido evitar preocuparse. Y eso que casi no le conocía; habían jugado un par de veces juntos pero apenas habían cruzado unos cuantos piques.

Pero Rukawa tenía algo… a pesar de su inexpresividad, de su antipatía, de su actitud tan poco sociable incluso con sus propios compañeros (según informes de Hikoichi), Sendoh sentía que todo eso no era más que una coraza, una manera de protegerse…

Pero protegerse de qué?

Miró el reloj, y tuvo una idea. Se levantó y comenzó a vestirse.

- Ya era hora, no? – le regañó su madre cuando lo vio entrar en la cocina – Vas a algún sitio?

- Salgo a dar una vuelta – explicó mientras cogía un zumo de la nevera.

- Sin desayunar?

- He cogido un zumo – dijo enseñándoselo.

- Eso no basta para desayunar!

- Me compraré algo por el camino.

- Pero…!

Akane Sendoh suspiró y vio como su hijo se marchaba dejándole con la palabra en la boca.

Cinco minutos después Sendoh llegaba a la estación, y un cuarto de hora más tarde estaba frente al gimnasio del Shohoku. Dentro se oía mucho alboroto, por lo que supuso que el entrenamiento no había terminado. Decidió dar una vuelta por ahí cerca, porque si se quedaba quieto seguro terminaría congelado.

Eran las doce en punto cuando empezó a ver salir chicos del gimnasio. De pronto cayó en la cuenta de que si le veían allí se extrañarían y seguramente le preguntarían; quiso esconderse un poco pero fue demasiado tarde.

- Sendoh? – exclamó una chica acercándose a él.

- Ehm… si, hola… tú eres… - tartamudeó un poco apurado.

- Soy Ayako, la asistente principal del Shohoku.

- Principal?

- Sí, es que ahora somos dos chicas haciendo de asistentes.

- Ah… - "Y porqué nosotros sólo tenemos a Hikoichi?", pensó divertido.

- A que se debe esta visita?

Dos chicos más del equipo se acercaron a ellos curiosos, eran Mitsui y Miyagi, el nuevo capitán.

- Sendoh! – exclamaron – Qué haces aquí?

- Pues…

El chico más alto no sabía que decir. Sabía que le mirarían muy extrañados si les contaba que había venido para hablar con la estrella de su equipo.

- Vengo de parte del entrenador Taoka para proponeros un partido de práctica – soltó sin pensar.

- En serio? Es una buena idea!

- Será un buen entrenamiento de cara a los try-outs de invierno.

- Mañana mismo se lo comentaremos al entrenador Anzai.

- Y para cuando sería?

- A nosotros nos iría bien la semana que viene mismo.

- Sí, el sábado, por ejemplo.

Mientras los tres miembros de Shohoku comentaban entusiasmados su propuesta, vio salir del gimnasio al chico que estaba esperando ver, y una sensación extraña le recorrió todo el cuerpo.

Rukawa caminaba hacia ellos con la mirada perdida, parecía no haber reparado en el pequeño grupito. Llevaba el pelo mojado e iba vestido de calle, con unos vaqueros desgastados y un jersey de color beige que le quedaba muy bien, aunque le hacía una figura muy delgada. En realidad todos los demás chicos que habían salido del gimnasio llevaban el pelo mojado y vestían de calle, pero a ninguno de ellos lo había encontrado tan… tan… sexy.

"En qué tonterías estoy pensando?", se recriminó mentalmente, "Rukawa no es sexy para nada!".

De pronto Kaede levantó un poco más la vista y sus miradas se encontraron. Sendoh vio en sus ojos la extrañeza que le provocó el verlo ahí, y como empezaba a caminar más lento.

- Bueno, yo… el entrenador Taoka ya os llamará para confirmar la fecha – y diciendo esto se escabulló de ellos para ir al encuentro de Rukawa.

Ayako, Ryota y Mitsui observaron sorprendidos como Sendoh se acercaba a Rukawa y ambos salían juntos de la escuela.

- No sabía que eran amigos – dijo una voz tras ellos.

- Hanamichi! – exclamó Ryota – Qué tal?

- Cómo va tu espalda? – le preguntó Mitsui. El mvp era el que más preocupado estaba por la lesión de Sakuragi.

- Bien – masculló el pelirrojo – Qué hacía Sendoh aquí?

- Pues… vino a proponernos un partido de práctica.

- Cuanto te queda de rehabilitación, Hanamichi?

- Un par de meses…

Sakuragi continuó observando al zorro y al puercoespín hasta que desaparecieron tras una esquina. Sabía que Rukawa no le había acusado de haberlo empujado en las escaleras, pero aún así el odio que sentía hacia ese chico engreído no hacía más que aumentar cada vez que lo veía.

xXx

- Sólo has venido a preguntarme lo mismo de nuevo? – preguntó Rukawa exasperado mientras daban un inesperado paseo juntos.

- Es que me dejaste muy preocupado – se excusó Sendoh - En serio que te encuentras bien?

Rukawa bufó y maldijo el no haber ido al entrenamiento en bici por culpa del tobillo, pues parecía que tendría que soportar al pesado capitán del Ryonan todo el trayecto hasta su casa.

- Vale, vale, no lo pregunto más. Vamos a tomar algo?

- Qué? – exclamó sorprendido.

- Venga, yo te invito.

Precisamente en ese momento estaban pasando frente a una cafetería, y Sendoh abrió la puerta indicándole con un gesto que pasara. Al ver que Rukawa dudaba estuvo a punto de cogerle del brazo para estirarle hacia dentro, pero se detuvo al recordar que el chico de piel blanca parecía no tolerar muy bien el contacto físico si no era en un partido. Finalmente Rukawa entró en el local y se sentaron en una mesa junto a la barra.

Una camarera se acercó para atenderles, Sendoh pidió un refresco y Rukawa un café con leche.

- Un café? – se extrañó Sendoh.

- Estamos en una cafetería, no?

- Sí, claro… pero no conozco a muchos chicos de tu edad que beban café.

- De mi edad? Que yo sepa sólo nos llevamos un año.

- Técnicamente dos, porque aunque estoy en segundo ya he cumplido los diecisiete.

- …

- Y tú cuando cumples los dieciséis?

- En enero.

La camarera volvió con el pedido y dejó de nuevo a los dos chicos solos. Sendoh no sabía muy bien de que hablar con Rukawa si no era de básquet, así que optó por este tema. Recordó que el friki pelirrojo del equipo del Shohoku se lesionó durante el campeonato nacional intercolegial y decidió preguntarle por él.

- Cómo está Sakuragi?

Rukawa levantó la vista de su café y le dedicó una mirada glacial.

- Ni lo sé ni me importa – respondió con voz seca.

- Pero… - Sendoh estaba atónito. Sabía que se llevaban mal, pero no hasta ese punto – Es tu compañero de equipo, y está lesionado…

- Me da igual. Ni que fuera el único que tiene problemas.

- Entonces admites que tienes problemas.

- Yo no he dicho eso!

- Está bien, está bien…

Sendoh se devanó los sesos intentando encontrar algún otro tema de conversación; al final empezó a hablar de música y esta vez acertó.

xXx

Sorprendentemente para Rukawa, se lo había pasado muy bien con Sendoh. Era agradable estar con alguien que le sonriera e intentara que él hiciera lo mismo, aunque no lo hubiera conseguido.

Entró en su casa en silencio y subió primero a la habitación para dejar la mochila. Nada más abrir la puerta y ver a su hermano acurrucado en un rincón, supo que algo malo había pasado.

- Touya…! – exclamó – Qué ocurre?

- E-esta mañana han… han discutido… - dijo Touya levantando la vista – Otra vez…

- Maldita sea… le ha pegado?

- Creo que sí… Yo estaba en mi cuarto y ellos en la cocina… escuché gritos, ruidos de cosas cayendo y después un ruido extraño aún más fuerte…

- Donde están?

- Mamá sigue en la cocina, papá creo que ha salido…

Rukawa bajó corriendo, esperando ver cualquier cosa. Pero en lugar de eso se encontró a su madre preparando la comida tranquilamente; no parecía que en la cocina hubiera habido una pelea como la que había descrito Touya.

- Hola Kaede – le saludó su madre - Hoy has venido muy tarde, no?

- Me entretuve con un amigo… Ha pasado algo con papá?

- Qué? – exclamó nerviosa.

- Que si ha pasado algo con papá – repitió.

- Claro que no… que iba a pasar…

- No te hagas la tonta, mamá… - de pronto vio la marca en su cuello – Qué es eso?

- El qué? – preguntó Tomoyo colocándose bien el cuello de la blusa.

- YA SABES DE QUÉ HABLO! – gritó Rukawa bajándoselo de golpe. Su madre tenía un pequeño morado en la clavícula izquierda.

El chico moreno sintió como la sangre le hervía.

- Ha… ha sido un accidente tonto…

- MALDICIÓN, NO EMPIECES CON LO MISMO OTRA VEZ!

En ese momento entró Kaoru por la puerta de la cocina y Rukawa apenas tardó un segundo en cogerle por la camisa y estamparlo contra la pared.

- ERES UN DESGRACIADO! – gritó – SÓLO HAS AGUANTADO DIEZ DÍAS SIN…

No pudo continuar porque su padre le cogió de las muñecas fuertemente y le obligó a soltarle, para acto seguido propinarle un fuerte puñetazo en la cara que le hizo tambalearse hacia atrás hasta apoyarse en una silla. Enseguida recuperó el equilibrio e iba a responder el golpe cuando la voz de su madre le detuvo.

- NO! NO LO HAGAS, KAEDE!

Kaoru aprovechó el momento de duda de su hijo para golpearle de nuevo. Esta vez ninguna silla se interpuso y Rukawa cayó pesadamente al suelo, donde su padre le golpeó por última vez antes de salir de la cocina como si nada.

- Kaede... – murmuró su madre llorando mientras se agachaba junto a él. Quiso ayudarle a levantarse pero Rukawa la rechazó.

- Déjame en paz… - siseó levantándose por si mismo.

La pesadilla volvía a empezar.


N/A: wenasss! Que tal? Yo aquí muriéndome de calor, como siempre… Qué les pareció el capítulo? Rukawa va a sufrir bastante a partir de ahora, pero también le van a ocurrir cosas buenas… Paso a comentar los reviews: Lensaiak: en el próximo capítulo vas a saltar a la yugular de Hanamichi, ya verás… Muchos besos y gracias por el review! Mashou no Tenshi: que fic era ese en el que Sendoh era un bastardo con Rukawa? Aunque te digo yo que hay más de uno… mi preferido es 'Are you still mine?', me encanta ese fic… Anzai hizo prometerle una cosa a Rukawa, no a Hanamichi, y se aclarará próximamente… Bubley: jeje buena definición del fic… es cierto, lo que está haciendo Sakuragi se podría considerar bullying… pobrecito Rukie, violencia tanto dentro de casa como fuera… Kmiloncia: si, pobre Ru, todas a por él XDD Ankin: gracias! Aquí tienes el siguiente capi, que lo disfrutes! Rayka Youko Karuma: hola! Todavía falta para que pase algo 'serio' entre esos dos, pues de momento hay que hacerlos amigos, aunque Sendoh como habrás leído ya se ha saltado esa fase y ya empieza a sentir algo especial por Ru…

Hasta el próximo. Besos,

Khira