Hopeless
Capítulo 8. Changes
Sakuragi llegaba tarde a una clase y caminaba rápidamente por uno de los largos y en ese momento silenciosos pasillos de Shohoku cuando fue interceptado por una sorprendentemente furiosa Ayako.
- Tenemos que hablar – le soltó sin ni siquiera saludarle.
- De qué? – preguntó extrañado por el rostro contraído de la chica de rizos.
- De Rukawa.
Al oír ese nombre comenzó a ponerse nervioso, pero lo intentó disimular.
- Y por qué tenemos que hablar del zorro apestoso?
- No sé si sabrás que Rukawa ha estado cinco días sin venir ni a clase ni a los entrenamientos – Ayako hablaba en un tono furioso pero firme - Hoy ha aparecido por fin lleno de moratones, diciendo que se ha caído con la bicicleta.
- Normal, si siempre va dormido… - murmuró aliviado al saber que no le había delatado.
- Fuiste tú, verdad?
- Qué! – exclamó.
- Fuiste tú quien le golpeó, verdad? – repitió cada vez más enfadada.
- Y por qué habríamos de pelearnos? – el pelirrojo ya estaba muy nervioso – Ahora apenas nos vemos…
- No me has entendido – siseó – Te he preguntado sí le golpeaste, no que si os peleasteis.
Sakuragi seguía con cara de no entender. Ayako bufó y en un gesto rápido le cogió la mano derecha y la levantó. Hacía ya demasiados años que trataba con chicos como para no saber las señales que dejaba una pelea.
- Ves esto! – casi gritó señalando sus nudillos despellejados – Bien, pues Rukawa no tiene un solo rasguño en las manos, al contrario que tú! Maldita sea, Sakuragi! Por qué le seguiste pegando al ver que no se defendía!
- Pero qué dices, Ayako! – exclamó Sakuragi soltándose, aterrado ante la posible confirmación de su sospecha – Eso es una tontería! Por qué Rukawa no habría de defenderse!
- PORQUE SE LO PROMETIÓ AL ENTRENADOR ANZAI!
De nuevo se hizo el silencio en el pasillo. Afortunadamente no estaban cerca de ninguna aula, porque sino seguramente habría salido un profesor a reñirles por el grito de la asistente.
- Qué…? – balbuceó finalmente Sakuragi.
- El entrenador Anzai sabe mejor que nadie de la gravedad de tu lesión – explicó Ayako repentinamente más calmada – Y también se enteró de que en la clínica te advirtieron que un sobreesfuerzo como una pelea podrían empeorarla hasta el punto de hacerla crónica. Por eso le pidió a Rukawa que no pelearais, y él aceptó… dijo que estaba de acuerdo... yo lo escuché…
Sakuragi estaba pálido.
- Quieres decir… quieres decir que Rukawa no me devolvió los golpes porque se lo prometió al viejo?
- Exactamente… Y sabes una cosa? Aunque no le hubiera hecho esa promesa al entrenador, estoy segura de que no habría empezado ninguna discusión contigo hasta tu total recuperación…
- …
- Tú la empezaste… no sé porqué lo hiciste, pero le diste una buena paliza… Yo sólo le he visto la cara, pero Ryota me ha dicho que tiene el cuerpo lleno de hematomas… Cómo has podido? Cómo has podido hacerle eso, Sakuragi?
Las palabras de la asistente resonaron en su cabeza.
"Tiene el cuerpo lleno de hematomas."
- U-un momento – tartamudeó el pelirrojo – En el cuerpo? Tiene golpes en el cuerpo?
- Sí… eso es lo que me ha dicho Ryota… Qué sucede? Ya no te acuerdas de donde le golpeaste?
- Te equivocas – repuso Sakuragi firmemente – Me acuerdo perfectamente. Yo sólo le golpeé en la cara.
- Qué quieres decir?
- Pues eso, que yo sólo le golpeé en la cara! – se exasperó – Si tiene más golpes en el cuerpo, te juro que esos no se los hice yo…
Ayako se quedó un momento pensativa, mirando a los ojos castaños que parecían sinceros. Si Sakuragi no mentía, Rukawa se había peleado con alguien más, pero era muy extraño que tampoco se hubiera defendido.
"Quizás fue por la amenaza del entrenador Anzai de castigar sin jugar a los que se pelearan… "
No. La promesa de no pelear que hicieran los jugadores titulares del Shohoku antes del campeonato nacional no incluía el no defenderse de un ataque así, y Rukawa precisamente era un chico muy fácil de provocar.
Se habría caído realmente de la bicicleta?
"No… aquí pasa algo…"
- Te creo – dijo finalmente – Pero has admitido que le pegaste, y como el entrenador Anzai se entere o vuelva a repetirse nadie volverá a preguntarte que tal la rehabilitación porque cuando te cures no regresarás al equipo, me has entendido?
- Sí… - murmuró Sakuragi bajando la cabeza.
Ayako dio media vuelta y se alejó por el pasillo para volver a su clase. Sakuragi se quedó inmóvil hasta que oyó pasos acercándose por detrás y se giró. Eran sus amigos, y no tenían muy buena cara.
- Hola chicos… - saludó sin ganas – Qué os pasa?
- Lo hemos oído todo – dijo Yohei muy serio.
- Qué? Estabais espiando?
- Sí – admitió Takamiya sin remordimientos.
- Hanamichi, nuestra banda siempre ha tenido mala fama – empezó Ookusu – Pero nunca ninguno de nosotros ha comenzado una pelea sin ningún tipo de provocación.
- Qué te hizo Rukawa para que le golpearas, Hanamichi?
"Ser mejor que yo en todo", pensó amargamente.
- Yo… no sé que me pasó…
- Pues cuando lo averigües, nos avisas y nos lo explicas, vale? Porque no estamos dispuestos a ser los amigos de un matón.
- Qué! – exclamó el pelirrojo.
- Lo que has oído. De momento te quedas solo, Hanamichi – sentenció Yohei.
Sakuragi observó como sus amigos se alejaban, dejándole efectivamente solo.
xXx
Dos chicos morenos y muy altos entraron en una de las pocas canchas callejeras que había en la ciudad. Aunque el cielo estaba muy nublado y amenazaba lluvia, no hacía tanto frío como en días pasados, pero de vez en cuando había ráfagas de viento helado.
- Estás seguro de que ya puedes jugar? – preguntó el más alto mientras sacaba un balón de básquet de su mochila.
- Si hace casi una semana que ya puedo entrenar con el equipo puedo enfrentarme a ti en un uno-contra-uno – repitió el otro chico por tercera vez en lo que hacía de tarde.
- Muy bien, pero cuando te gane no me vengas con la excusa de que no estabas al cien por cien.
- Idiota, quien te ha dicho que vas a ganarme?
- No hace falta que nadie me lo diga; yo lo sé.
- Ah si?
- Sí.
- Pues te vas a llevar un chasco, porque te voy a destrozar.
- Inténtalo.
- Ya lo verás.
- Deja de creértelo tanto y empieza.
- Mira quien fue a hablar.
Rukawa comenzó a botar el balón frente a Sendoh; ambos estaban muy concentrados, puede que incluso más que durante los partidos oficiales. De pronto Rukawa hizo un cambio de ritmo y se abalanzó sobre Sendoh, quien le bloqueó fácilmente, pero el chico de ojos azules se detuvo de improviso y botó el balón entre las piernas, lanzó y encestó. Era la misma jugada que había usado en el partido de clasificación contra el Ryonan.
- Pensé que después de varios meses habrías aprendido algo nuevo – se burló Sendoh, pero en realidad estaba algo enfadado consigo mismo por no haber intuido la jugada.
- Esto es solo para calentar – dijo Rukawa.
Sendoh sonrió y recogió el balón. Ahora era su turno de atacar, y lo aprovechó bien. Después de tres amagos seguidos y a una velocidad increíble superó a Rukawa por la izquierda y encestó con un tiro en bandeja.
- Tsk… – musitó Rukawa recogiendo de nuevo el balón bajo la canasta.
El duelo siguió parejo casi media hora, hasta que el capitán del Ryonan comenzó a imponerse. Rukawa intentaba con todas sus fuerzas seguir su ritmo, pero al final fue derrotado por una diferencia de tres puntos. Ambos se sentaron en el suelo para descansar.
- Te dije que te ganaría – dijo Sendo feliz.
- …
- No me digas que te has enfadado por haber perdido.
- No me he enfadado.
- Sí que te has enfadado.
- Que no.
- Que sí.
- Que no.
- Y entonces a que viene esa cara?
- Es mi cara.
- Pero es más hermosa cuando sonríes.
Rukawa se ruborizó al escuchar esas palabras y para que Sendoh no lo viera se dejó caer hacia atrás hasta quedar tumbado boca arriba en el frío y duro suelo de la cancha.
- No me digas esas cosas – murmuró cerrando los ojos.
- Por qué no?
- Porque me hace sentir incómodo.
De pronto sintió un peso sobre él y abrió los ojos como platos. Akira se había colocado encima suyo.
- Qué haces! – exclamó.
- Esto también te hace sentir incómodo? – preguntó Sendoh con una sonrisa pervertida.
- Claro que sí. Quieres hacer el favor de… - se calló de pronto al notar la excitación del chico mayor. Su cara adquirió un tinte granate.
- Qué te pasa? – Akira intentaba aguantarse la risa sin mucho éxito.
- N-nada… Quítate de encima, anda, nos podría ver alguien…
- Y eso te preocupa?
- A ti no?
- Sí… pero ahora no hay nadie…
Antes de que Rukawa replicara de nuevo Sendoh agachó el rostro y le besó en los labios, suavemente al principio, luego metiéndole la lengua hasta la garganta. Eso hizo que Rukawa se excitara también, y Sendoh al notarlo se separó triunfal.
- Ya no estás enfadado?
- Idiota… - murmuró Rukawa poniendo los ojos en blanco.
Sendoh soltó la risa y se levantó del todo. Tenía que hacerlo si quería resistir la tentación de no bajarle los pantalones a su novio ahí mismo.
- Qué hacemos mañana? – preguntó mientras le tendía la mano a Rukawa para que se levantara también.
- No lo sé… Mañana es…?
- Domingo… - "Mira que llega a ser despistado" – Vamos al cine?
- Bueno… pero elijo yo la película, que la de la semana pasada fue malísima…
- Ah, pero te enteraste de que iba?
Rukawa enrojeció de nuevo al recordar que se habían pasado casi toda la película enrollándose.
- Te acompaño a la estación – dijo Sendoh sonriente.
- Ok…
Los dos chicos se pusieron la chaqueta del chándal y después de recoger sus cosas salieron de la cancha. Llevaban unos minutos caminando cuando Sendoh se detuvo de golpe y sujetó a Rukawa del brazo.
- Qué pasa? – preguntó el chico más bajo sin entender.
- Sakuragi – dijo simplemente Sendoh echando chispas por los ojos.
Efectivamente, al otro lado de la calle y paseando solo estaba el pelirrojo. Tenía la vista fija en el suelo; seguramente por eso no les había visto. Rukawa se dio cuenta de que parecía muy deprimido.
- Gilipollas… - murmuraba Sendoh crujiendo los puños.
- Tranquilízate – ordenó Rukawa.
- Pero es que me hierve la sangre al recordar lo que te hizo. No ha vuelto a acercarse a ti, verdad?
- No.
Y era cierto. Desde la pelea en el gimnasio que ni siquiera se habían cruzado por el instituto. En cambio sí que se había cruzado con sus amigos, que ahora por lo visto iban siempre sin él.
- Menos mal… por él… porque sino me lo cargo.
Le observaron cruzar la calle hacia la avenida y alejarse.
"Es curioso…", pensó Rukawa, "Ahora eres tú el que está solo…"
N/A: Holas! Este capítulo ha sido un poco de transición, a partir de aquí empieza la acción y más drama aún… No tengo mucho que comentar así que pasaré directamente a responder reviews:
Kize Gorak: perdona, es que me emocioné con otros fics y perdí un poco la inspiración con este; y no quería continuarlo sin saber bien que tenía que escribir. Pero ahora ya tengo claro el desarrollo de la trama final y lo único que me faltará será un poquito de tiempo. Yo tampoco perdonaría a mi padre… Muchos besos y gracias por el review!
Mashou no tenshi: ola! En este capítulo puedes ver como le va a Hanamichi ahora… Muchos besos y gracias por el review!
Abuelitnt: jeje que bien me conoces… pues no te lo puedo decir, sólo que Rukawa recibirá primero… y que Sendoh puede que también… Muchos besos y gracias por el review!
Hasta el próximo capítulo!
Khira
