JUNTO A TI, POR ÚLTIMA VEZ

Capitulo 2

"Mojados"

Un estremecimiento se apoderó de él al pensar en lo cerca que ella se encontraba, y en un segundo todas sus dudas se evaporaron como si nunca hubiesen existido, e instintivamente siguió aquella fragancia dejando olvidado el campamento con cada paso.

Se guió por el aroma que paresia conducirlo a algún lugar… No, ella quería alejarse. Pero el no se lo permitiría, la vería aunque le costara toda la noche alcanzarla. Corrió desesperado, con el corazón latiéndole tan violentamente, tanto que le parecía doloroso, pero no importaba el dolor, solo quería verla… "¿Por que huyes Kikyo…?" Pensaba al tiempo que apresuraba la marcha. Pero justo cuando creyó que ya la había alcanzado el olor por el que se guiaba se desvaneció, dejando solo un leve rastro imposible de seguir. Pero no se daría por vencido, tenía que verla. Se agachó hasta que su nariz rozaba el suelo decidido a encontrarla, con dificultad avanzaba buscando el rastro correcto, hasta que este lo condujo a un río ¡Un río! Ahora le seria imposible encontrarla. Se quedó mirando el río aun en el suelo con semblante de desilusión y frustración "Se ha ido…" y golpeó el suelo tan fuerte como pudo dejando una grieta profunda en la tierra húmeda. Apretaba los dientes de coraje, habían estado tan cerca el uno del otro y no había podido verla. Luego de unos segundos se percató un sonido que no pertenecía al cantar del río y levantó la vista esperanzado examinando el lugar, aguzó el oído y lo notó claramente, lo que no havia podido percibir debido a su enojo anterior… Algo rompía la suave marcha del agua y eso solo podía ser…

Miró atentamente el lugar en su busca, al tiempo que se paraba del suelo, y por fin, luego de forzar un poco la vista la pudo ver. A lo lejos se podía ver una figura borrosa que avanzaba lentamente. ¡Era ella!

-¡Kikyo!-y se aproximó tan rápido como el agua le permitía moverse.

Inuyasha estaba ya a mitad de camino cuando Kikyo volteó a verle; ya resignada a perder su plan de estudiarlo manteniéndose alejada, no hizo más que esperar que llegara a su lado. Después de todo; muy en el fondo, ella también anhelaba aquel encuentro. Inuyasha al volver a mirar aquellos ojos castaños posados sobre el sintió como el corazón se le volvía a acelerar.

Cuando estuvieron a unos pasos de distancia quedaron en silencio, Inuyasha se sintió estúpido al haber emprendido tal carrera en su busca para que al fin solo se le quedara mirando. Al verla le habían pasado mil cosas por la cabeza que podría decirle o preguntarle, pero en aquellos momentos solo la miraba, por que solo una mirada de ella le bastaba… Así que fue ella quien habló primero.

-Parece que mi estrategia no funcionó… creí que ya no me buscarías – dijo con aquella voz pausada y apacible que usaba desde su "resurrección"-. Pero cuando te acercaste demasiado solo quise huir.

Inuyasha se sorprendió ante aquellas palabras y volvió a preguntarse por que Kikyo querría huir de él, pero su boca no articuló ningún sonido.

-Que descuidada he sido, pensé que al haber burlado tu olfato no me encontrarías, y sin embargo… – Bajó la mirada como si el contacto que mantenían visualmente le lastimara, y apenas si se le escapó un susurró-… ya casi no recordaba que tenias tan buen oído.

♦ ♦ ♦

Inuyasha le ofreció su brazo para ayudarla a salir del agua y ella; por extraño que le pareciera, acepto su ayuda. Cuando su tuvo contacto con su frágil cuerpo algo –una sensación que desde hacia mucho tiempo había olvidado- volvió a emanar de él. La condujo a la orilla al tiempo que observaba sus movimientos, tan graciosos y pausados ¡Dios! ¿Como podría evitar estrecharla compulsivamente si era tan bella…, tan bella como no la recordaba. Pero a pesar de estar tan ocupado observándola no pudo dejar de notar que sus tersas manos blancas estaban frías y su delicado cuerpo, helado… Su calor había desaparecido. Las ropas de la sacerdotisa estaban muy mojadas, y podía notar el peso que ejercían sobre ella, hubiese querido cargarla, llevarla en sus brazos, pero sabía que ella no era tan frágil como aparentaba su cuerpo y su palidez, ella era una poderosa sacerdotisa enserada en aquel cuerpo hecho de barro y huesos a la que le era imposible subestimar.

Al llegar a un claro cercano al bosque se detuvieron, sinceramente Inuyasha no tenia intención de hacer nada en absoluto, podría haberse quedado allí plantado viendo como las ropas se ceñían delicadamente a su silueta y admirar su tez golpeada por la luz de la luna toda la vida sin desear nada más, pero Kikyo pensaba diferente. Ella le había seguido por una razón y no pensaba quedarse allí a esperar su respuesta –respuesta que sabia él no le iba a plantear sin que se lo preguntara-, por lo que decidió dejar aquel silencio que sabia no iba a extrañar.

-Inuyasha….- pero antes de comenzar siquiera una frase algo la había detenido...

En un extraño arrebato de cariño Inuyasha tuvo deseo de su contacto y la había abrazado con fuerza, como si pensara que en cualquier momento se pudiera desvanecer.

Kikyo no pudo evitar conmoverse y se aferró a el como si aquellos 50 años no los hubieran separado. Y en una forma que ni ella pudo precisar lagrimas comenzaron a brotar de sus ojos. Aquellas lágrimas que durante tanto tiempo se mantuvieron reprimidas por fin podían salir.

Inuyasha, a pesar de la humedad del cuerpo de Kikyo podía sentir como aquellas cálidas gotas caían en su hombro…

El mismo sobre el que el que Ahome se había posado unas horas antes.

♦ ♦ ♦ ♦ ♦

Ahora los dos estaban húmedos. Él se apresuro a encender una fogata para secarse y prestó una de sus camisas a Kikyo mientras su ropa se secaba. Ella no replicó.

Sentados lado a lado frente a la fogata permanecieron unos instantes en silencio, sin saber que es lo que pensaba el otro. De repente Inuyasha decidió que sus dudas espesaban el dulce ambiente y se decidió a disiparlas.

-¿Por que nos seguías, Kikyo? –pregunto quedamente, pero sin voltear a verla, como si el fuego lo hubiese hipnotizado.

-¿Sabes? Ni yo misma tengo una idea clara –respondió mirándolo con seriedad

Se sorprendió de tal respuesta y la volteo a mirar con impaciencia, en realidad hace mucho que no esperaba obtener resultados de las preguntas que le hacia.

-Creo… –continuó, aunque parecía que pronunciar esas palabras le causaba dificultad- Creo que deseaba verte con Ahome.

-¿Qué dices?

-Si, eso es… Deseaba saber como es su relación, si se parecía… a la nuestra

-¿re… relación?

Inuyasha sintió un molesto vacío en el estomago. Lo había visto con Ahome… Hasta ahora no había pensado en ello… ¿Acaso la lastimó?

- En aquel entonces tu eras quien me seguías ¿recuerdas? –dijo mientras apartaba la vista de Inuyasha para mirar hacia el hermoso cielo oscuro, para evocar con satisfacción las viejas memorias- tu deseabas estar a mi lado; y yo te aceptaba con dicha. Ahora resulta al revés… Tu eres quien la acepta

-Kikyo, yo…

-No necesitas darme explicaciones, ya que solo deseas ser feliz… -y en ese momento su dulce voz se tornó taciturna- En cambio, como dijo el monje, yo solo te lleno de nostalgia y tristeza.

-¡Eso no es cierto!-exclamó Inuyasha agitando la cabeza negativamente-, tu nunca me pones triste…-su voz se fue apagando.

Kikyo le miró con ternura y le sonrió tristemente.

-Inuyasha, ¿Recuerdas la vez que me reprochaste que no te matara?

Durante el primer segundo el chico mitad bestia se extrañó de aquella pregunta, pero al siguiente no tuvo mas remedio que responder, claro que lo recordaba.

Continuara…

Notas de la autora: Esta bien, dije una semana…. Que se ha convertido en un mes. Pero estoy aquí publicando por fin el segundo capitulo de mi primera historia. Le cuento querido lector que esta es una historia que cuenta con solo tres capítulos, lo que quiere decir, que el próximo capitulo será el último, pero el final será mucho mas largo (ya lo tengo escrito, solo le faltan retoques y pasarlo a la compu) y terminará por contar lo que realmente quiero dar a entender con este fic

Por cierto, quiero agradecerte Elen-Ses por regalarme tu review. En realidad este no es un fic que hable sobre una pareja especifica… si no de lo que estas dos chicas representan por separado para Inuyasha, ¡Claro que me gustaría que lo siguieras leyendo! Pero como he dicho antes este fic ya lo tenia escrito desde hace mucho y tiene su propósito… Si has leído este capitulo estoy segura que lo has entendido… Te veo en "Complicado Amor" fic del que me pienso ocupar en cuanto termine este… ¡No te espantes! Esta vez me pondré las pilas!

Saluditos!

P.D.: Por favor, deja una opinión, critica, petición ¡lo que sea! Responderé feliz

Hey! Hey! Tuve que hacer una ligera ampliación a este capitulo ya que creo que las proporciones del fic no estaban muy bien distribuidas… bueno disfrútenlo!