Cap. 4 El reencuentro.
Rukawa no podía creer el último mensaje que acababa de recibir. ¿Que quería decir Mitsui con que era mejor así? No entendía nada pero si le había respondido tan rápido era porque estaba cerca del móvil así que decidió volver a llamarle. Pensaba que Mitsui cogería el móvil y podría hablar por fin con él, pero, en vez de eso, se percató de que le había cerrado para no recibir más llamadas suyas. Si realmente le quería, ¿porqué cerraba el teléfono para impedir que hablara con él? De repente lo entendió todo. Mitsui no savia que había cortado con Sendoh y creía que le haría sufrir si hablaban. Esto no podía quedar así. Tenía que descubrir donde se encontraba actualmente Mitsui para ir a buscarlo y hablar con él y solo se le acudía una persona que pudiera saber su paradero: El entrenador.
Al día siguiente cuando acabó el entrenamiento fue a hablar con el entrenador.
- Entrenador, tengo que encontrar a Mitsui. ¿Tú sabes donde se fue?
- Lo siento. Solo sé que fue a Estados Unidos pero no me dijo donde. Aunque seguro que alguien lo sabe.
- ¿Quién?
- Yo no lo sé. No me lo dijo.
Rukawa cogió la bici para ir hacia su casa. ¿Quién podía saber el paradero de Mitsui? De repente oyó el ruido de una moto que se acercaba por su espalda. Al girarse vio a Tetsuo y le pidió que parara. Él era la única persona que podía saberlo.
- Tetsuo, ¿tu sabes donde está Mitsui?
- Si pero él me pidió que no se lo contara a nadie.
- Necesito hablar con él. Es muy urgente.
- ¿Por qué no le llamas?
- Prefiero hablarle en persona. Además a cerrado el móvil para que no pueda llamarle.
- Eso quiere decir que no quiere hablar contigo.
- Lo se pero él cree que si hablo con él le haré sufrir. Pero eso no es cierto. Nunca le haría sufrir porqué… porqué le quiero.
- De acuerdo. Ten. Pero si le haces sufrir te arrepentirás.
Tetsuo alargo la mano y le entregó un papel con una dirección a Rukawa.
- Es la dirección de donde vive actualmente. Espero que le encuentres.
- Gracias.
Por fin había conseguido la dirección. En cuanto llegó a su casa Rukawa cogió dinero y se dirigió a una agencia de viajes para comprar un billete para Estados Unidos. Consiguió uno para las siete de la madrugada. Cuando llegó a casa se hizo la maleta y se fue a dormir. El día siguiente por la tarde por fin volvería a ver a Mitsui.
Eran las cuatro de la tarde y por fin había llegado a Estados Unidos. Ahora solo tenía que ir a la nueva casa de Mitsui que por suerte estaba cerca del aeropuerto. Rukawa cogió un taxi y en una hora se encontraba en la casa de Mitsui. Sin pensarlo mucho llamó al timbre.
Mitsui estaba viendo la tele cuando de repente sonó el timbre de la puerta y le sobresaltó. Mitsui se levantó del sofá y al llegar a la puerta y ver quien era el corazón se le puso a latir mucho. No podía ser, ¿qué hacia Rukawa allí? Si esta aquí ya no podré evitar encontrármele.
- ¿Qué haces aquí?
- Necesitaba hablar contigo. Ábreme por favor.
Mitsui accedió a abrirle la puerta.
- Por fin. Llevó mucho tiempo deseando que llegara este momento.
- ¿Qué… qué momento? –preguntó Mitsui invitándolo a pasar
- El momento en que podría volver a verte y explicarte mis verdaderos sentimientos.
- ¿Tus verdaderos sentimientos? Ya los sé. Tu quieres a Sendoh y por eso estas saliendo con él.
- Eso es mentira. Ya no salgo con Sendoh.
- ¿Y has venido aquí solo para decirme eso? Entonces ya te puedes irte.
- ¿Por qué estas tan frío conmigo? ¿Es que ya no me quieres?
- ¿Para que quieres saberlo Rukawa? ¿Para herirme más? No puedo permitirlo. Ya sé que nunca me corresponderás. No hacia falta que vinieras y me lo recordaras.
- Eso también es mentira. Mi intención nunca a sido herirte. Solo quería saber si me querías para…
- No sigas. Por favor no quiero sufrir más. Solo te he dejado entrar para decírtelo. Sé que lo que quiero oír no me lo dirás nunca.
- Dame un segundo y te prometo que sin decirte nada más te haré entender lo que quiero si me dejas.
- Eso es imposible.
- No lo es. Si me concedes el segundo, cierra los ojos y te lo demostraré.
Mitsui no entendía nada pero decidió hacer caso a Rukawa ya que no tenía nada que perder. Sin esperárselo Rukawa le dio un cálido beso que fue correspondido.
- ¿Por qué me has besado?
- Con este beso quería decirte que deje a Sendoh porque me di cuenta que a quien realmente quería era a ti y no a él. Des de que te di aquel beso y tu me correspondiste me empecé a obsesionar y me di cuenta de que te quería y que solo deseaba volver a tu lado y quedarme para siempre.
- Supongo que compartir los gastos de esta nueva casa me ira bien así que te puedes quedar porqué yo también te quiero y deseo que te quedes. Por cierto, ¿cómo me encontraste?
- Dale las gracias a Tetsuo.
- Me prometió que no daría mi dirección a nadie.
- Le convencí con la condición de que si te hacia sufrir me daría mi merecido.
- Espero que no haga falta.
-.- FIN -.-