Hola! bueno aqui esta la quinta parte, no he recibido ningun review asi que creo que si despues de esta parte no recibo por lo menos uno, pues lo quitare, no tiene caso seguirlo publicando si nadie lo lee, asi que ya veremos que pasa, podrian dejar un review por lo menos con un punto para que sepa que alguien lo lee, en fin.

Disfrutenlo!

Todo lo que ya conozcan no me pertenece.


La vida siempre da giros imprevistos y cada uno de ellos trae consigo cosas nuevas. Dentro de mi vida hubo muchos de esos giros, pero mas que imprevistos, fueron sorprendentes e impresionantes; hasta podría decir que algunos fueron agradables, pero definitivamente, todo va con su contraparte.


Salí muy temprano de la enfermería, era un lugar en donde definitivamente no me gustaba estar, tenía tiempo de sobra, así que, al llegar a mi habitación, me deje caer sobre la cama; algo llamo mi atención, sobre las almohadas había una cajita negra.

¿Qué será esto?

Busque algo que me dijera quien lo había enviado pero no encontré nada. La abrí y dentro había un anillo de plata en forma de flor con una pequeña piedra negra en el centro, lo saque de la caja y lo coloque en mi dedo.

Es hermoso.

Lo observe un instante, pero luego recordé que tenia que ir a clases; me apresure y baje a desayunar, para después ir a clases.

º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º

Por primera vez en varias semanas las clases pasaron tranquilas y sin ningún problema, me sentía tan bien que hubiera querido que ese día durara para siempre. Para sentirme mucho mejor me dirigí al campo de Quidditch y me senté en las gradas.

Hola.

¡Pansy! Hola – salude con afecto.

¿Por qué estas tan sola? – pregunto sentándose a un lado de mi.

Pues, siempre lo estoy.

¿Enserio? no me había dado cuenta de eso.

Supongo que tendrás muchas ocupaciones.

Sabes que no, pero tengo que estar con las chicas, no me dejan ni un minuto sola – dijo con fastidio.

¡Debe ser horrible! – asegure arrugando la nariz.

Y que lo digas.

Las dos comenzamos a reír, normalmente nos reíamos por cualquier cosa, incluso de nosotras mismas.

¿Y ahora te deshiciste de ellas?

Si, necesitaba respirar – comento mirando hacia el cielo.

Te compadezco – dije dándole unas palmaditas en el hombro.

¿Este lugar es tu favorito verdad? – pregunto mirándome con cariño.

Si, me parece muy pacifico.

¿No te gusta sentarte en las gradas de arriba?

No, le tengo miedo a las alturas.

¡Ha¡Entonces es por eso nunca participaste para obtener un puesto en el equipo de Quidditch!

Creo que no debí decir eso.

Lo vez te dije que lo descubriría y ni siquiera me esforcé.

Puse una mano en mi cara pensando ´´que tonta soy´´, le había confesado a Pansy algo que no quería que nadie supiera y lo peor era que yo misma se lo había dicho.

¿Qué es eso?

mm¿Cuál? – pregunte mirando hacia todos lados.

Eso que tienes en la mano – dijo señalando mi mano.

¡Ha! Esto, es un anillo.

Es hermoso¿Quién te lo dio?

No lo sé.

Eso no tiene sentido.

Si lo tiene; lo encontré en mi habitación, sobre mi cama, pero no tenia ninguna nota, por lo tanto no sé quien me lo envió.

Vaya, un admirador secreto, uy tienes un admirador – dijo pegándome en las costillas con el codo.

No digas eso.

Su comentario me hizo sonrojar¿Quién podría fijarse en mi? No podía ser ningún chico de las otras casas, ya que, decían que las chicas de Slytherin eran muy superficiales y tampoco podía ser un chico de Slytherin, porque para ese entonces aun no tenia una muy buena reputación.

Alguien se enamoro de ti – dijo abrazándome.

No lo creo.

Entonces como explicas la aparición de este anillo, además, estoy segura de que es alguien de nuestra casa.

Eso es imposible.

Claro que no, dices que estaba en tu habitación ¿No?

Si.

Pues no creo que ningún otro chico sepa la contraseña.

Buen punto, pero prefiero no averiguar nada.

No es justo, yo ya me había emocionado – confeso cruzando los brazos.

No te preocupes, ya llegara otro misterio para resolver, anda vamos a la cena – la anime, para luego levantarme.

¿Podría investigar aunque sea un poquito?

No tienes remedio.

Fuimos juntas hasta el comedor, ella se sentó con sus amigas y yo me senté sola como siempre.

¿Ni siquiera vas a saludarme? – me cuestiono una frívola voz.

¿Qué¡Ha! Hola Malfoy –conteste sirviéndome un poco de ensalada.

¿No vas a hacerme el favor que te pedí? – dijo mirándome inocentemente.

¿Cuál fa…? lo había olvidado¡Hola Draco- corregí ante mi equivocación.

Que mala memoria tienes – aseguro tomando un poco de agua.

La tuya no es mejor que la mía – afirme.

Tal vez si. Por cierto ¿Dónde estuviste ayer?

Lo mire frunciendo el entrecejo, eso si que no lo creía¿No me vio durante el resto del día y no supo donde estaba?

¿Qué donde estuve?

La última vez que te vi fue antes de la clase de Herbología.

Estuve en la enfermería – comente sin mucha importancia.

¿Te sentías mal? – pregunto en tono de preocupación.

Un poco.

Vaya creo que nadie se entero.

Eso quiere decir que la persona que me ayudo si sabe guardar secretos.

¿Quién te ayudo?

No tengo porque decírtelo – dije comenzando a comer mi ensalada.

Gracias por ser tan informativa.

Levante los hombros en signo de confusión, no era común que él y yo platicáramos tanto, pero creo que la tregua nos sentaba bien.

º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º

La cena había sido muy placentera; no tenia mucha tarea que hacer, por lo que me encerré en mi alcoba, para seguir con una tranquilidad perfecta.

Estaba recostada en mi cama leyendo un libro cuando llamaron a la puerta.

Adelante.

¿Puedo pasar?

Claro, pero ¿Qué haces aquí? – pregunte confundida

No quería estar con esos tres tontos – comento cerrando la puerta.

¿Así que soy tu camino fácil no?

Pues… quizás.

Por lo menos eres honesto.

Nunca lo soy.

Eso ya lo sé. Siéntate.

Deje el libro a un lado y mire a Draco, parecía un poco deprimido, aunque no estaba segura. ¿Debería preguntar?

¿Estas… triste? –cuestione.

Podría ser – respondió sin mirarme

Y.. ¿Por qué?

Digamos que no tengo un amigo con quien hablar.

Acaso no los tienes a ellos (los tres tontos).

Tu sabes que ellos no son mis amigos, nunca lo han sido – contesto sintiéndose incomodo.

Si, es cierto.

Por lo que sé tu y Parkinson son amigas ¿verdad?

Si, somos casi como hermanas.

Eso es bueno, las vi platicando en el campo de Quidditch, parece que se conocen bien.

Es posible.

Guardamos silencio durante un instante, él me miro fijamente y después sonrió sin ningún motivo.

¿Qué es lo gracioso? – pregunte levantando una ceja

Nada.

Lo mire con desconfianza, tome mi libro y seguí leyendo, pero el aun me seguía observando.

¿Me estas ignorando? – pregunto divertido.

Si.

Quiero hacerte una proposición.

¿Proposición o petición?

Esta bien, petición.

¿De que se trata? – trate de saber mirándolo con desconfianza

Me gustaría que fuéramos… amigos.

¿Qué¿No crees que eso es demasiado? – pregunte sorprendida.

Tal vez, pero si no aceptas de todas maneras tendrás que soportarme.

Sabía que no lo pondrías tan fácil.

Entonces aceptas ¿si o no?

Esta bien, pero no te prometo nada, que raras peticiones las tuyas.

Perfecto, entonces hasta mañana.

Se levanto y salio de la habitación, esto si que era demasiado, primero me pide una tregua, después que lo llame por su nombre y ahora que fuera su amiga, tal vez se estaba volviendo loco.

º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º

Los meses pasaron volando y estábamos en el último día de clases, todos estaban felices por volver a casa, pero algunos otros, como yo, hubieran preferido quedarse en el colegio hasta el siguiente curso, aunque era algo imposible.

Mientras empacaba mis cosas pensaba en lo que me esperaba con mi familia adoptiva¿serian buenos conmigo¿Me tratarían como a su hija, pero había algo masque me inquietaba ¿Qué tan malo seria el mundo muggle?

¿Ya estas lista? – trato de investigar asomándose por la puerta.

¡Ha Draco! Si, creo que si – volteando hacia él y después regresando a mi baúl.

No te oyes muy contenta.

No puedo estarlo¿sabes donde voy a vivir durante el verano?

Si

¿Y crees que podría estar contenta por eso?

No

La relación entre Draco y yo había mejorado mucho, me había chantajeado algunas veces, pero después de todo no era tan malo ser su amiga. Además se podría decir que yo era igual de chantajista que él.

¿Por qué no hablas con "tus padres" y les dices que se muden al mundo mágico? – propuso.

Lo he pensado pero, no sé si quieran hacerlo, además ni siquiera los conozco.

Podrías intentarlo.

Si, lo haré.

Bien te veré abajo –y salio de la habitación.

Respire profundamente, tal vez no seria tan malo estar en el mundo muggle, pero, definitivamente haría lo posible para convencerlos de mudarse.

Baje con mi equipaje, ya todos abordaban el tren. Inicie la búsqueda de un compartimiento, en el camino encontré a Draco junto con Zabini, Crabbe y Goyle en un compartimiento. Blaise me miro y vi venir la oleada de insultos.

¿No pensaras quedarte con nosotros o si? Y aunque quisieras hacerlo no te dejaríamos pasar, recuerda que ahora formaras parte de los sangre sucia y yo no estoy dispuesto a mezclarme con alguien así. Creo que Draco piensa lo mismo que yo ¿verdad? – pregunto mirando a Draco.

Mire a Draco esperando su respuesta, estaba casi segura que le cerraría la boca a Sabini, pero lamentablemente la desilusión llego. Draco bajo la cabeza y respondió lo que menos hubiera querido escuchar.

Si, pienso lo mismo.

Lo mire con resentimiento y comencé a buscar otro compartimiento. Por fin al fondo del pasillo encontré un lugar vació y ahí me quede. Me sentía realmente desilusionada, justo cuando pensé que Draco y yo podríamos ser buenos amigos, todo se viene abajo.