Capítulo 12: La Copa de la Victoria (parte 1)

Draco Malfoy, un muchacho de dieciseis años, se sorprendió al ver lo que se encontraba frente a él. Estaba en una habitación circular, llena de retratos de antiguos directores de su colegio. En una percha colgaba un ave de plumaje rojo y dorado que era hermosa, detrás de un escritorio atestado de pequeños objetos plateados y zumbantes estaba Albus Dumbledore mirandolo con una mirada inquisidora, tanto a él como a quien lo había llevado allí, su profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, Aldrick Zeller.

" Perdone mi irrupción, Dumbledore" dijo el anciano profesor " pero este tema es de suma importancia. Este pequeño que tengo aquí ha estado llamando "Sangre sucia" a una alumna, y no sólo esp, también se atrevió a desafiarme diciendo que no haría nada de lo que yo le había ordenado.

" Déjalo a mi cargo, Aldrick " la voz del director parecía cansina, como si ya estuviera harto de escuchar sobre discriminación en Hogwarts." Según creo te toca a los de cuarto en cinco minutos."

" Confío en usted para otorgarle el castigo necesario" y diciendo su última palabra, se alejó haciendo un gran estruendo al cerrar la puerta.

" Profesor, yo-"

" No hables más, Draco, ya has hecho suficiente daño con tus palabras. Aparentemente te resulta divertido hacer doler a las personas verbalmente, ¿acaso sabes lo que se siente? ¿Alguna vez has pasado por lo mismo que haces pasar a los magos hijos de muggles?"

" Yo," titubeó por unos segundo, pero luego repondió con voz grave "no."

" Eso esperaba. Y sé que no servirá pedirte que te disculpes con el agredido, muchas veces has dicho esas palabras denigrantes a tus compañeros. La gente no tiene por qué sufrir al escucharte, no tienes el derecho de juzgar a las personas por su procedencia. Esto tiene un limite y lo has roto, por eso creo que es momento de toma medidas más drásticas contigo."

" Profesor, haré lo que usted quiera pero por favor no-"

" Señor Malfoy, no mienta. Soy lo suficientemente avanzado en la práctica de la Legilimensia como para dejarme engañar por una persona como usted." Dumbledore tomó una bocanada de aire antes de continuar " Es mi decisión que sea suspendido por una semana entera: se quedará en su Sala Común, no podrá salir ni hacer magia. La comida se la llevará algun elfo doméstico del colegio."

La cara de Draco apenas se inmutó, su expresión no era la de una persona arrepentida, era claroque no lo estaba " No puedo hacer nada contra su palabra, ¿no es verdad?"

" No, mi palabra es irremovible. Ahora vallase derecho a la Sala Común."

El muchacho se fue tal cual como se había ido Zeller: golpeando muy fuerte la puerta al salir. Mientras bajaba las escaleras, en su cara se dibujó una sonrisa. " Ese viejo tonto, " pensó "creyó que me estaba castigando y en realidad me está favoreciendo, a mí y el Señor Oscuro. Ahora tengo una semana entera sin clases y libre para focalizarme en la Copa de la Victoria."

El joven rubio atravesó rápidamente el vestibulo y bajó las escaleras que conducían a las mazmorras. Caminó a traves de laberinticos corredores hasta que llegó a lo que parecía un muro de piedra sólida.

" Avaricia " dijo con voz decidida y observó cómo los ladrillos de la pared se iban desfigurando hasta convertirse en una puerta.

Malfoy cruzó la abertura con pasos veloces y se adentró en la Sala Común de Slytherin, una habitación larga y hecha de piedra, con antorchas verdes colgantes por medio de cadenas. Casi corriendo, bajó aún más para llegar a su dormitorio donde los esperaba Crabbe y Goyle, cada uno con una porción bastante grande de pastel de carne.

" Necesito que hagan algo, " les dijo serio " vallan ahora al despacho de Snape y diganle que necesito un permiso para la Sección Prohibida. Una vez que obtengan el permiso dirijanse a la biblioteca y diganle a Madam Pince que necesitan los libros: "Abyssus Incendiam" y "Artefactos Oscuros". Cuando los encuentren traiganmelos de inmediato. ¿Entendieron?"

Los dos idiotas asintieron pesadamente, para luego salir de la habitación. Malfoy, por su parte, salió del lugar junto a Vincent y Gregory, pero no salió de la Sala Común, sino que se paró frente a la chimenea, agarró una silla de madera, la acercó y se sentó. Con un movimiento de la varita, y quebrantando la orden del director, un Doble Espejo subió por las escaleras que acababa de subir.

" Pansy Parkinson " murmuró una vez que hubo agarrado el espejo.

En el frío vidrio apareció la cabeza de una chica de pelo oscuro y ojos cafes.

" Hola, mi amor " le saludó la muchacha del espejo.

" Hola, Pansy. ¿Qué estás haciendo?"

" Nada, estoy en una aburrida clase con el Profesor Binns, pero ahora que te veo a ti no parece tan aburrida. Quizá esta noche sea aún más divertida."

" No lo creo. El viejo sucio de Dumbledore me suspendió por una semana sólo por haberle dicho "Sangre Sucia" a esa sabelotodo insufrible de Granger"

En la cara de Pansy apareció una expresión de odio.

" Esa estúpida hija de asquerosos muggles. Siempre pensando que todo gira alrededor de ella."

" Sí, tienes razón. Pero dejemos de hablar de ella, no quiero seguir pensando en la escoria del mundo mágico, quiero pensar en ti, mi vida. Te amo"

" Y yo te amo a ti."

" Espero verte esta tarde. ¿Cuándo tienes un período libre?"

" Justo después de esta clase. Estaremos juntitos y solos."

" Así podremos -"

¡Crack! frente al cuerpo tendido y relajado de Malfoy apareció un ser con ojos enormes y orejas de murcielago. La Aparción repentina del elfo hizo que el joven diera un gritito y se callera de espaldads al piso.

" ¿Kreacher? " preguntó Draco, con una expresión de asombro en su cara.

El elfo lo miró con desgano, pero luego de recordar que él era el hijo de Narcissa Black de Malfoy se le iluminó el resotro.

" ¿Amo Draco? El pobre Kreacher fue puesto a trabajar en este inmundo lugar de sangre sucia por su nuevo Maestro, ese desagradable muchacho. Kreacher ahora se acuerda de usted, la ama Narcissa es su madre. Por suerte usted es de Sangre Limpia, no como la basura de magos que hay aquí"

El rubio le murmuró un suave "Adios" a su novia y cerró el espejo. Se incorporó del suelo y se volvió a sentar en el asiento de madera. El elfo domestico le había traido una bandeja llena de comida: puré de papas, pollo al horno y pastel de carne. También traía una jarra con jugo de calabaza y una compotera con ensalada de frutas.

" El Director Dumbledore le ordenó a Kreacher que le trajera a usted esta comida."

" Eh, sí, dejalá allí en la mesa. " Y vio cómo el elfo hacía lo que él le había dicho. " Asi que... ahora que ese Black ha muerto, ¿quién es tu dueño?."

" Ese asqueroso Sangre Mestiza de...¿cómo se llamaba?...Pater, Potar, Potteri..."

" ¿Potter?"

" ¡SI! ese inmundo.."

" Potter es tu dueño, ¿eh? Esas no son buenas noticias."

" No, no, claro que no."

Se escuchó el rudo como de una sirena y la cara de Kreacher se estremeció.

" Perdone, amo," le dijo a Malfoy " pero Kreacher se tiene que ir."

Sin que Draco pudiera hacer nada, el elfo desapareció dejando nada más que un seco ¡crack!. Justo a tiempo para ver como última cosa en la Sala Común de Slytherin a la puerta principal abriendose y entrar por ella a dos jovenes bastante grandes.

Crabbe y Goyle traían en sus manos a dos tomos grandes y antiguos. Draco, sonriendo, arrancó de las manos de los muchachos los libros y se sentó en la mesa, apuntó a los dos con la varita y murmuró: Reperio Lucero, Copa de la Victoria!

Inmediatamente alguna páginas de los libros comenzaron a brillar fuertemente. Draco siempre había sido excelente en Encantamientos, incluso Ollivander le había dicho que su varita, de pelo de unicornio, era muy buena para Encantamientos y Transformaciones.

Moviendo el dedo hacia la parte del libro que brillaba, abrió primero "Abyssus Incendiam". No se sorprendió al ver que los textos estaban en latín, una lengua de la que él poco sabía. Snape ya le había advertido sobre esos libros y su información, por lo que le había enseñado un Hechizo Traductor: Transcribo.

Utilizando el encantamiento indicado, las letas comenzaron a revolverse y volver a acomodarse, dejando escrito la traducción exacta del texto.

COPA DE LA VICTORIA

Este objeto fue primeramente creada por los trabajos de los alquimistas antiguos. Su poder para hacer inmune al bebedor de cualqiuer dolencia, enfermedad o hechizo, fue el detonante para lograr una intensa busqueda de este objeto.

La Copa de la Victoria fue también llamado Santo Grial entre los primeros cristianos, aunque su paradero no es conocido se cree que esta escondido en algun lugar de Inglaterra.

Asi que eso era la Copa de la Victoria: un grial que proporcionaba inmunidad. Draco no pudo evitar sonreir al pensar en los beneficios de obtener a este artefacto, podría incluso vencer al Señor Oscuro. Pero esos pensamientos se esfumaron al recordar la primera advertencia de Snape: "El Señor Tenebroso siempre sabe, nunca lo desafies"

" ¿Qué pasaría si lo retara? " se dijo a sí mismo, por la cabeza se le cruzó la imágen de su madre, retorciendose y gritando de dolor al ser torturada por el maleficio Cruciatus.

A continuación tomó "Artefactos Oscuros", un libro que a pesar de ser antiguo parecía mas nuevo que el otro. La página con el artículo sobre la copa seguía brillando intensamente

SANTO GRIAL o COPA DE LA VICTORIA (24-...)

Objeto en forma de copón, cuya finalidad es la de dar al que lo use una fuerza de defensa mágica de gran poder. (A continuación venían unos párrafos que hablaban sobre su apariencia, por lo que Draco los salteó)

(...) Una vez capturada por los magos Albus Dumbledore y Aldrick Zeller, fue llevada al colegio Hogwarts de Magia y Hechizería en sumo secreto, donde todavía hoy reside.

De modo que definitivamente el grial se encontraba en su escuela, la cuestión era dónde. Draco bajó la mirada para cerrar el libro y se sorprendió al ver un pedazo de pergamino en la hoja, que no había visto antes. Estaba escrito con letra apretada y casi indescifrable, aunque se reconocía que estaba escrito por una mano de mujer. Haciendo un poco de esfuerzo reconoció la primera palabra.

" Biblioteca,"

Antes de la coma venían dos palabras que no tardó en reconocer.

" Sección Restringida,"

Ahora la letra se volvía mas pequeña y detallada, parecía que fuera un escrito para una hormiga. La cosa había llegado al limite. Draco agarró su varita, apuntó a la hoja escrita y murmuró un leve hechizo agrandador. El pergamino cobró el tamaño de el libro y la escritura fue descifrada hasta el final.

" libro Rescendo, girar a derecha, apoyar, contraseña: Ignio."

Qué significaba aquello, Draco no lo sabía. Se levantó pesadamente y salió de la Sala Común, no sin antes dirigirle una mirada a Crabbe y Goyle que claramente expresaba un No-Me-Sigas.

Los pasadizos estaban vacios, las escaleras deserticas. Tomando el camino a la biblioteca, el joven no encontró a ninguna persona. Sólo escuchó las voces de algunos de los retratos.

Al llegar a el lugar en cuestión, se dirigió a donde se refería la hoja: la Seccion Restringida, un lugar custodiado por la bibliotecaria Madam Pince. Un ligero hechizo Desilusionador bastó para pasar a la mujer, que desde un cierto ángulo de vista parecía un buitre.

"Reperio Lucero, Rescendo!" murmuró, y observó cómo un diminuto libro que estaba en un estante alejado comensaba a brillar.

Casi corriendo alcanzó a el sitio en donde estaba el libro. Lo tomó de un saque y lo miró. Tenía una portada negra azabache, con un relieve del escudo de Hogwarts, pero nada más. En su interior había sólo una hoja escrita.

" Dime la contraseña, si quieres encontrar a el objeto custodiado del castillo."

Giró la cabeza a su derecha, en donde sólo había una pared, pero si uno miraba minusciosamente se veía el contorno del escudo de Hogwarts y la palabra Rescendo arriba. Era exactamente igual a la inscripción de la tapa del libro recién encontrado. Draco puso el tomo sobre la pared y murmuró:

Ignio.

Todo sucedió en un instante. El libro brilló, y su resplandor se extendió por algunas de las resquebrajaduras. La pintura se disolvió en polvo y Draco se encontró enfrente a una puerta de madera antigua.