Ningun personaje es mio ( por desgracia ) bla,bla,bla,bla...

Por querer ser joven...

Capítulo 3...

La mañana amaneció soleada, como era domingo ambos se levantaron tarde y ni desayunaron. Sirius se estaba bañando tranquilamente en la piscina, mientras Remus que hacía la comida le observaba por la ventana.

Sirius llevaba un bañador nuevo de color negro muy ajustado que le resaltaba su pequeña figura, corrió por el césped y cogiendo carrerilla se tiró en picado a la piscina como solía hacer siempre:

- Sirius ten cuidado! No te tires cerca del bordillo! Y no te vayas muy hacia el fondo que ahora no mides tanto!

- Si cariño, y espera que ahora subo a por el flotador y los manguitos... – ironizó el moreno.

- Vale, vale lo siento pero esque me da cosa...no estoy acostumbrado...

Sirius salió de la piscina y cogiendo su toalla entró en la casa con el pelo chorreando.

- Buah! Tienes que venir a bañarte Moony!

- Si claro y hoy que comemos? Anda pon la mesa

- Shiiiiii

Remus había preparado espaghettis, y ambos los devoraron ambrientos. Al terminar el lobito se puso comodamente en la terraza a leer un libro, Sirius lo observaba atentamente, la cara de concentración que ponían mientras leia línia tas línia, como pasaba con delicadeza las páginas y el suave susurro que emitian las hojas del libro bajos sus dedos.

Moony miró a Padfoot, sintiendose observabo, este se transformó quedando justo en la misma posición que hace unos instantes sentada en la mecedora de debajo del porche, poniendo esa cara de perrito abandonado que siemrpe hacía sonreir a Remus y ahora también estaba el echo de que a esa mirada se le agregaba esos ojos de cachorrito, un cachorrito precioso que tenía hipnotizado al licantropo.

El perro saltó de la mecedora y entró en la casa corriendo para minutos después volver con la lengua colgando y una pelota de tennis entre los dientes.

Remus hizo como que no le veía y siguió con sus ojos fijos en el libro.

El perro ladeó la cabeza, sin entender muy bien la actitud del lobo, ladró llamando su atención, y volvió a ladrar más alto cuando vió que Remus le ignoraba juguetonamente, Moony no pudo resistir los deseperados intentos del perro por atraer su mirada y sonriendo bajó el libro.

- Que pasa negrito te aburres?

- ARF!

El perro cogió la pelota y la puso en las rodillas de Moony, y jadeando no dejó de mirarla como hipnotizado.

- Vale, ve a por ella! – gritó mientas la lanzaba lo más lejos que podia y Padfoot fué tras ella una y otra vez incansable. Y jugaron ambos hasta el atardecer, acabando exaustos tirados en la hierba del jardín, un Sirius ya humano besuqueó el cuello de Moony, y este se dejó hacer sin decir nada...solo disfrutando de los pequeños labios de su chico mientras entrecerraba los ojos con placer.

- Remus lo siento... - murmuró

- El que?

- Haber echo esa estupidez y acabar así

- No importa...mañana ya verás como lo solucionamos... – dijo, y en un tono de reprimenda añadió- espero que te sirva de escarmiento.

- Pufff...creo que no aprenderé nunca...

- Padfoot..., que gran verdad acabas de decir xD

- Eh!...

Remus se volteó poniendose con cuidado sobre su joven chico, mientras unos mechones de su cabello miel cayeron sobre la cara del perro, mezclandose con los mechones azulados.

Empezaron a besarse apasionadamente, el licantropo introducia su lengua en la boca de su amante y la pequeña lengua de Sirius le contestaba explorando cada centímetro de la cavidad vucal del otro.

Sirius metió sus manos bajo la camiseta de Remus acariciando tu pecho, y finalmente con algo de dificultad le quito esa prenda que le cubria de cintura para arriba. Después Moony hizó lo mismo, desaciendose de la camiseta negra que Harry le había dado a su padrino.

La respiración de ambos empezó a agitarse cuando Padfoot empezó a lamer y mordisquear con desesperación los pezones del lobito, endureciendolos...

- Sirius...- jadeó – jeje, sabes lo que estoy pensando?

- Qu...qu...e?

- Crees que ahora – siguió mientras su mano derecha descendía hasta la entrepierna de Sirius – tu, amiga...se...

- Ah... – gimió notando el roce – no se si se...pero desde luego...que yo sigo poniendome...ah...

- Jajaja – apretó más su mano masajeando por encima del pantalon ese pequeño vultito – te imaginas que ella no vuelve a su tamañao real... xD

- Eso no lo digas ni en broma! Que de pequeña es mas insensible! Esque aun tiene que aprender mucho, se ve que ya no se acuerda...de lo bien que lo ha pasado...

- Pues vamos a tener que recordarselo no? – dijo picaramente desabrochando el pantalon del cachorrito.

- Si pero...vamos dentro...está anocheciendo...

- Ok

Remus cogió en brazos a Sirius, recogiendo también las camisetas de ambos, y se dirigión hacia la casa.

Un vez dentro tiró las camisetas sobre la alfombra del salón y posó a su Paddy en el sofá adaptando exactamente la misma postura que antes...solo iluminados por la luz de luna que entraba por la ventana, y prosiguió en la labor de quitar los tejanos a su niño, para después quitarselos también él y hacer lo mismo con la ropa interior...el miembro de Moony se posó sobre el de Padfoot ahora notablemente más pequeño.

El perro se relamió, y giró su cabeza apoyada en el cojín color blanco del sofá y gimió una y otra vez cuando su novio empezó de nuevo a juguetear con sus testiculos y su miembro que ahora sin ropa podía notar cada uno de los dedos del lobito.

Cuando Padfoot soltó un gemido ensordecedor cargado de pura excitación, Remus paró y escondió su cara en el cuello delicado del niño, y cuando la respiración de Sirius empezó a normalizarse,el cachorro lamió y mordisqueó los pómulos y las mejillas de Lupin.

Pero este notó cierto cansancio en su chico, que hacía un esfuerzo para seguir saboreando sus labios. Así que decidió apartarse.

- Vamos a dejarlo aqui perrito...

- No...! Porqué? No hicimos más que empezar...

- Pero tu cuerpo no es el que era Padfoot, así no podemos hacer nada más que acariciarnos y hasta con eso tu cuerpo se cansa enseguida.

- Pero no es justo! Es cierto que estoy cansado pero...

- Pero nada a dormir. – sentenció recogiendo la ropa que ahora estaba por los suelos y llevandola a la cocina donde estaba la labadora, bajo la apenada mirada de Sirius.

Este bajó del sofá y esperó que Remus saliera de la cocina, y cuando se dirigió a las escaleras le siguió; al llegar a ellas agarró a Moony de la camiseta y este lo miró con curiosidad, en ese preciso instante Padfoot extendió sus brazos hacía arriba, pidiendo que le cargara.

El licántropo le dedico una sonrisa y lo cargó sobre un costado, subiendo las escaleras:

- Paddy te me estás volviendo un mimado eh?

- Solo aprovecho la oportunidad que se me ha dado para dejar que me cuiden – se defendió escondiendo su cara en el cuello de su lobito.

- Pues no te acostumbres porque con el Sirius de 36 tacos si que no puedo xD

Cuando ya estuvieron en el cuarto Sirius abrió el armario y se puso una camiseta ancha que antes usaba para dormir y ahora le venia casi por los tovillos.

Se subió a la cama ayudandose de sus bracitos y desde allí observó como Remus se cambiaba de ropa y se ponía el pijama, sin quitarle ojo.

- Buah! – bostezó – Mañana vamos a Hogwarts?

- Ahá – contestó y se metió en la cama. Colocandose de lado y Sirius aprovechando su pequeño tamaño se acurrucó en su pecho, sintiendo la acompasada respiración del lobito sobre su columna y con ese baibén ambos se quedaron dormidos.

A la mañana siguiente, Remus se vistió sin decir nada y vistió con cuidado a Sirius.

Poniendole unos pantalones negros y una camiseta del mismo color, llena de salpicaduras de pintura (fingidas) de color blanco. Y tomó en sus brazos una pequeña sudadera roja que le compró el día anteriror.

Se puso su cazadora y colocando a un Sirius aún dormido junto a su pecho se la abrochó de modo que padfoot quedó apoyado en sus pectorales mientras respiraba ritmicamente, y tan solo se podia observar su cabeza.

Moony cogió las llaves de la Harley de Padfoot, y salió de allí direccion a casa de James y Lily.

A medio trayecto Sirius, emitió un bostezó y entreabrió los ojos, notando que una brisa le golpeaba en la cara.

Tras mirar a ambos lados y subir la cabeza hacia arriba se vió metido en la chaqueta de Remus, este le miro y volviendo a fijar su vista en la carretera dijo:

- Buenos Dias!

- Remus! Se puede saber que hago aqui!

- Teniamos prisa y no querias despertar!

Sirius se ruborizó por completo, pero aunque estaban en verano ese era un dia muy frio, especialmente frio, no se sabía por que, y Padfoot se acurrucó contra su lobito, disfrutando del trayecto.

Al llegar a su destino, Remus se desabrochó la chaqueta y Bajó a Sirius.

- Ves a picarle a Lily.

Harry abrió la puerta encontrandose con su padrino.

- Que pasa Sirius?

- Pues nada aqui...ha hacerle una visita a tu profesor favorito úù

- Ja,ja que vaya bien ostras que frio hace no?

- Pues si...yo me estoy destemplando...esque venia metido en...

- donde?

- pues...esto...

- Venia metido en mi chaqueta xD – contestó Remus, que venia con la sudadera – Sir, te vas destemplar, ven que te pongo el jersei

- Remus me lo puedo poner solo ¬¬

- Jo...! Bueno ten – dijo tendiendole la prenda, en realidad a Remus le encantaba vestir al perrito, pero este no queria y menos delante de Harry.

Mientras Sirius se ponia la sudadera Lily salió por la puerta, con su abrigo marrón de nabú.

- Dios que frío hace hoy!

- Estamos todos igual – inquirió Moony – nos vamos?

- Si

Remus se subió a la moto y abriendose la chaqueta se dispuso a meter otra vez a Sirius, mientras Lily se colocaba en la parte trasera agarrandose a la cintura del licantropo.

- Remus no me pienso poner ahy!

- Oh! Vamos Padfoot y donde te vas a poner?

- Pues aqui – dijo colocandose justo delante del lobito.

- Si pues ahy mi señor Black se va usted a congelar.

Sirius, lo pensó, no era el de siempre, no tenía esa fortaleza, ni la resistencia de su cuerpo de 36 años, y por otra parte podia estar arruyado contra el pecho de su lobito, y total toda la familia Potter ya se había enterado asi que...decidió acurrucarse contra Remus y este subió la cremallera, para después darle un beso a su perrito.

Continuará...