Capítulo 4. Llorando bajo la lluvia.

- Tanto de no verte, pequeña plaga.- comentó Rika, con una sonrisita.- Y por lo visto, no me quieres dejar en paz... Ya me tienes harta, en todas partes te encuentro...

- Mira tú.- replicó Lily.- La pequeña plaga es otra... Mejor dicho, la enorme plaga porque realmente eres un fastidio.

Las dos chicas se miraron retadoramente por varios minutos. Hana miró primero a una y después a otra, con mirada interrogante.

- ¿Y qué haces aquí, si se puede saber? Tú no tienes ninguna relación con la Selección Japonesa.- inquirió Rika.

- Vengo con ella.- Lily señaló a Hana.- Es la hermana del portero titular.

- ¡Ah! Mucho gusto, soy Rika Ozawa.- Rika inmediatamente cambió su actitud hosca para sonreírle a Hana.- ¿Eres hermana de Wakabayashi?

- Sí... .- Hana no sabía sin sonreír o qué.- Soy su hermana menor...

- Ya veo.- Rika siguió sonriendo.- No sabía que Gen-san tenía una hermana...

- ¡Señorita Ozawa!.- gritó Ishizaki, en esos momentos.- ¡Qué gusto verla por aquí!

- ¡Creo que me he lastimado, señorita!.- gritó Urabe.- ¡Deme respiración de boca a boca, por favor!

- No manches, no cambias, sigues igual de resbalosa.- Lily puso cara de: hello con tu hello...

- No te vayas a morder la lengua.- bufó Rika.

- Este... Perdonen que me meta así en su ferviente pelea... .- murmuró Hana, al tiempo que la mayoría de los jóvenes de la selección japonesa se acercaban a ellas para conocer el motivo del escándalo.- Pero... ¿Por qué ustedes se tratan con... ? ¿Tanta familiaridad?

- Ha de ser porque esa mocosa es mi prima.- Rika Ozawa sacó la lengua en un gesto juguetón.

- No sabía que tuvieras una prima extranjera, Ozawa-san.- intervino Wakabayashi, quien miraba a las chicas con evidente diversión.

- Es que es la oveja negra de la familia.- Rika puso cara de picardía.- Por eso nunca hablo de ella.

- ¡Mira quién habla!.- replicó Lily.- Tú no eres ninguna blanca palomita...

- Bueno, ¿ustedes se odian en serio o nomás están jugando?.- preguntó Hana, harta ya de la pelea de las chicas.

- ¿Tú que crees?.- Lily le guiñó un ojo a la chica Wakabayashi, al tiempo que Rika soltaba la carcajada.- Todo es una broma, así me gusta llevarme con ella.

- Es que es más divertido así.- Rika abrazó a su prima.- ¿Verdad, Anya?

- Sí. Y bueno, dime qué te has hecho de tu vida.- preguntó Lily, al tiempo que la mayoría de los jugadores regresaba a sus puestos. Hana, muy sutilmente, se fue a perseguir a Ken.

- Bueno, pues estoy estudiando enfermería y por azares del destino vine a caer aquí ahora que estoy de vacaciones.- explicó Rika.- En mis tiempos libres le ayudo a un viejo amigo a recuperarse de su lesión...

- Querrás decir que le ayudas a tu novio a recuperarse de su lesión... .- interrumpió Genzo, sonriendo levemente.

- ¿Novio?.- inquirió Lily, sorprendida.- No sabía que tuvieras...

- ¡No tengo novio!.- gritó Rika, coloradísima.- ¡Bien sabes, Genzo Wakabayashi, que ese muchacho no es mi novio!

- ¡Ahhh, pero cómo te gustaría que lo fuera!.- Genzo soltó la carcajada. – Si bien que te mueres por él.

- Jajaja. ¿De quién hablan?.- Lily también se reía a grandes carcajadas.

- Hay un muchacho, llamado Taro Misaki, que... .- comenzó a decir Genzo, pero Lily lo interrumpió.

- ¡Taro Misaki!.- gritó la mexicana.- ¡No me digas que al fin te hiciste novia de Tarito!

- ¿Lo conoces?.- preguntó Genzo, sorprendido, al tiempo que Rika le daba un codazo a su prima en las costillas.- No me digas que...

- Uuuuuyyyyy, desde hace añales que mi prima está enamorada de Tarito.- Lily sonrió con picardía.- Pero la mensa nunca lo quiere reconocer...

- ¿De dónde conoces a Misaki, Lily?.- Genzo estaba tan sorprendido que ni cuenta se dio de que estaba tuteándola.

- Hace años, cuando fui a visitar a Rika a Francia.- aclaró Lily.- Ya desde entonces ella y Taro eran muy unidos pero ambos son tan mensos que siempre se comportan como si se odiaran.

- Es que en realidad no nos aguantamos.- refunfuñó Rika.- Siempre se la pasa haciéndome bromas y...

- Sí, a Misaki le gusta esconder lo que siente fingiendo que Rika solo le gusta para molestarla.- continuó Genzo, ignorando a Rika de plano.

- ¡Sí! Par de mensos, en vez de que reconozcan lo que sienten.- concordó Lily.

Genzo y Lily soltaron una alegre carcajada. Rika los miró a ambos con odio.

- Bueno, pues ustedes pueden seguir diciendo babosada y media, yo ya me voy.- murmuró Rika, al tiempo que se dirigía hacia la banca del equipo.

Genzo y Lily estaban tan enfrascados en burlarse de Rika y de Taro que ni cuenta se dieron de que Ozawa se había marchado.

- Por cierto... ¿Por qué Taro no está aquí?.- preguntó Lily, después de un rato.- ¿No fue convocado a la Selección?

- Sí fue convocado, pero... .- el rostro de Genzo se ensombreció de repente.- Misaki sufrió un grave accidente...

- ¡Oh! ¿Se encuentra bien?.- Lily se preocupó muchísimo.

- Sí, pero su pierna ha quedado muy dañada y quién sabe si pueda jugar el Mundial... .- respondió Genzo, cabizbajo.

Rika, por su parte, iba recordando escenas del pasado...

-FLASHBACK-

Sí, Rika Ozawa y Taro Misaki habían sido muy cercanos. Estudiaban en el mismo colegio en París y, como a ambos les encantaba el sóccer, estaban en el mismo club de fútbol, ella en la rama femenina y él en la masculina. Tenían muchas cosas en común, pero a Misaki siempre, siempre, le había encantado llevarle la contraria a Rika. Si ella decía blanco él decía negro. Si ella decía que sí entonces él decía que no... Rika pensaba que eso ya se le había vuelto una manía a Taro...

- Pareciera que le gustas a Misaki, Rika.- comentó Azumi Hayakawa, vieja amiga y ex compañera de ambos.- Siempre te está molestando...

- Eso no tiene nada que ver.- respondió Rika, incómoda.- Más bien, nos llevamos muy bien pero nada más...

La verdad era que a Rika sí le gustaba mucho Misaki, pero éste era tan distante con ella que pensó que él no sentía lo mismo...

Nunca entenderemos nuestra forma de ser...

Cuando quiero un beso tu prefieres tomarte un café...

Además, como ya se había dicho, parecía que a Misaki le encantaba llevarle la contraria a Rika. Siempre iba en contra de sus deseos, sin importar lo pequeños que éstos fueran.

- ¿Sabes que me dijo Azumi-chan?.- le comentó Rika a Taro, una tarde.- Algo muy gracioso...

- ¿Qué cosa?.- Misaki miró a la pelirroja con curiosidad.

- Que yo te gusto.- Rika soltó la carcajada.- ¿Qué cosas, no?

- Uhm... .- Misaki inmediatamente se puso muy serio.

- ¿Qué ocurre? No me digas que te molestó el comentario...

Pero Taro no respondió. O al menos no lo hizo con palabras... Tomó a Rika por la cintura y le plantó un beso en plena boca. Rika se petrificó al principio pero hubiera sido una mentirosa si no hubiera reconocido que el beso le encantó.

Y cuando me olvido ya lo ves...

Sin más, ni más, me das un beso y después te vas...

Cuando el beso terminó, Taro soltó a Rika y se marchó sin decir palabra... Y ella se quedó sin saber qué decir o hacer...

Sin embargo, Rika pronto le dio vuelo a sus sentimientos. Si Taro la había besado había sido porque evidentemente ella le gustaba a él. Y la verdad era que sí, que a ella también le gustaba Taro. Rika pensó que quizás pronto él le pediría que fuera su novia o algo similar pero... De buenas a primeras, Misaki comenzó a retirarle la palabra y a evadirla constantemente.

Por fin, cuando las cosas ya estaban en un punto insoportable para ambos, Rika se le enfrentó a Misaki.

- ¿Por qué me rehuyes?.- le reclamó.- Después de todo, tu fuiste quien me besó.

- No te gustará saberlo... .- musitó Misaki, sin mirarla a los ojos.

- Quiero que me lo digas.- exigió Rika.

- Como quieras... .- aceptó Taro.- Te rehuyo porque... Porque me respondiste al beso...

- ¿Qué cosa?.- Rika gritó de la sorpresa.

- Sí. La verdad era que esperaba que no lo hicieras... .- Taro habló en susurros.

Y fue cuando Rika entendió que ella y Misaki nunca podrían ser pareja... Porque, al parecer, a Misaki le gustaba nadar contra la corriente en la que ella nadaba a favor... Pero Rika nunca terminaría por entenderlo...

¿Qué más nos da, si al final juntos no estamos tan mal?

Sin decir ni media palabra más, Taro se marchó, dejando a Rika sola en medio de un gran vacío. La lluvia comenzó a caer y Rika se sintió más miserable que nunca...Rika siempre había tenido malas experiencias con sus novios. Su primer novio, Pierre Le Blanc, la había dejado por una linda chica (quien por cierto aun es su novia) llamada Yami, por no mencionar que Karl Heinz Schneider había intentado ponerle el cuerno con Lily, su propia prima...

La lluvia arreciaba cada vez más. Pero Rika estaba tan deprimida que ni intentó ponerse bajo resguardo...

-FIN DEL FLASHBACK-

Pero eso había sido hacía muchos años. Después de un buen de tiempo, Taro y Rika comenzaron a hablarse de nuevo y a comportarse como si nada hubiese sucedido. Volvieron a ser grandes amigos y, por supuesto, él continuó llevándole la contraria a ella en todo...

Rika suspiró. El problema era que ella aún seguía enamorada de Misaki...

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Lily, al final del entrenamiento, no vio ni a su prima ni a Hana. Quién sabe en dónde se habían metido ambas... Lily supuso que Rika se había ido a ayudarle a Taro (Genzo ya le había explicado a Lily que por las tardes Rika y Taro hacían los ejercicios de rehabilitación que el doctor le había indicado a éste último) y que Hana esperaría a Genzo. Lily quería esperarlos a los dos, pero tenía deseos de ir a la tienda de artículos musicales de la cual le había hablado Hana la noche de su llegada a Japón. A Lily le hacían falta muchas cosas para poder practicar su canto y, como ya le habían pagado su primer cheque, había decidido el ir a comprar lo que necesitaba, como nuevas cuerdas para su guitarra, algunos cancioneros y, por qué no, hasta quizás una laptop en donde pudiera grabar sus primeras canciones (jeje, después de todo, el cheque de los Wakabayashi había sido generoso).

Quizás en un acto arriesgado, Lily salió sola a las calles de Tokio. Pronto se dio cuenta de que las direcciones eran un despapaye, pero como preguntando se llega a Roma, por accidente y casualidad llegó hasta la tienda a donde quería llegar. Lily entró, fascinada con miles de instrumentos que ahí tenían y le dieron ganas de comprarlos todos, desde el violín eléctrico hasta el trombón. Pero se controló, ya que debía ser ahorrativa.

Lily estaba tan emocionada que no se fijó en la chica que se acercaba a ella y tropezó con ella sin querer. Ambas se precipitaron al suelo.

- Lo siento muchísimo.- se disculpó la mexicana, incorporándose rápidamente, al igual que la otra chica.- No me fijé por dónde iba...

- Sigues siento igual de distraída.- comentó la chica, tranquilamente.- Me da gusto que no hayas cambiado.

- ¿Eh?.- Lily miró a la muchacha y se sorprendió. De todas las personas imaginables, ella era la última a quien esperaba encontrarse en Japón.- ¿Samael? ¿Eres tú?

- La misma que viste y calza.- respondió la joven, sonriendo.- Mira que qué pequeño es el mundo...

Frente a Lily estaba parada la chica a quien ella conocía con el nombre de Samael, su mejor amiga de la secundaria.

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Al salir de los vestidores, Genzo se topó con Hana. Y por supuesto, se sorprendió de no ver con ella a Lily...

- ¿En dónde está la señorita Lily, Hana?.- inquirió Genzo, inmediatamente.

- Uhm, no sé, no la pude encontrar... .- respondió Hana.- Quizás esté con su prima...

- No, Rika se fue sola hace algunos minutos.- el rostro de Genzo mostró algo de preocupación.- Espero que no se haya perdido...

- ¿Te preocupa tanto, mi querido Nii-san?.- Hana sonrió con malicia.

- Me preocupa por el hecho de que ella es una extranjera que no conoce la ciudad.- contestó Genzo, cortante.- Nada más.

- ¿Seguro? Mira que Lily-sensei es una chica muy linda... .- Hana habló con más malicia todavía.

- Yo no he dicho que no lo sea, pero eso no tiene nada que ver con el hecho de que me preocupe por su bienestar. Después de todo, yo la contraté.- Genzo procuró no ver la mirada acusadora de su hermana.

- Sí cómo no... ¿Sabes algo? Creo que ella está enamorada de ti.- comentó Hana, como quien no quiere la cosa.- Eso no me agrada mucho pero si a ti no te molesta, pues...

- No empieces con tus inventos.- gruñó Genzo, secamente.- Lily Del Valle muy seguramente solo me ve como su jefe.

Sin embargo, Genzo no pudo adivinar el por qué el comentario de Hana lo había incomodado de una manera tan extraña...

Notas:

- Samael es un personaje creado por Samael Bene Elohim.