Capítulo 18.- Cualquier extremo.
- ¿Hola? Busco al señor Ian Takahashi.- dijo Lily, con voz suave, cuando aparentemente la comunicaron con él.
- Deja de llamarme "señor".- respondió Ian, divertido.- Me hace sentirme muy viejo.
- Como usted guste.- Lily rió.- Llamé para ver...
- Lo de tu audición.- completó Ian.- Muy bien. Yo platiqué ya con los directivos de la empresa y están de acuerdo en darte una oportunidad. Déjame y te digo que las cosas resultaron de lo más fáciles debido a que tienes mi recomendación.
- Gracias.- Lily estaba de lo más agradecida.- No sé cómo podré agradecerle...
- Yo sí sé cómo.- Ian sonrió para sus adentros.- Pero luego hablamos de eso...
"Espero que no quiera acostarse conmigo", pensó Lily. "De lo contrario lo mandaré a freír espárragos".
- No creas que pretendo seducirte.- dijo Ian, adivinando su pensamiento.- Es otro tipo de pago el que quiero que me des... No con cuerpomático, por supuesto.
- Eso espero.- Lily rió con nerviosismo.- En fin... ¿Para cuándo tendré la audición?
- Dos días.- anunció Ian.- Y espero que estés lista porque si dices que no o fallas perderás toda oportunidad posible. No se te dará una segunda oportunidad.
- De acuerdo.- dijo Lily. "Estoy más que preparada. Gracias a las clases de canto de Saki Aiza".
- ¿Te doy un consejo?.- sugirió Ian.- ¿También eres compositora o solo cantas?
- Solo he escrito un par de canciones.- respondió Lily.- Aunque tengo muchas canciones nuevas de... Una gran compositora no reconocida...
- Ya veo. Es que impresionarás más a los directivos si cantas una canción que hayas compuesto tú.- explicó Ian.- Si tuvieras alguna que quisieras cantar en especial, puedes mandarme por fax la letra y la música de la canción para que nuestros músicos la tengan preparada para ese día.
Lily lo pensó por unos instantes. Sí, sí tenía una canción que ella había compuesto recientemente...
- ¿Envío la canción al número de fax que aparece en la tarjeta que me dio?.- preguntó Lily, decidida.
- Exactamente. La espero dentro de 15 minutos. Y no me falles.- añadió Ian.- Y tengo plena fe y confianza en ti. Yo sé que llegarás muy lejos...
- Gracias.- Lily suspiró.- ¿Y cuál es la forma de pago de la que me habla?
- Verás... .- Ian bajó el tono de voz hasta convertirlo en un susurro.
Diez minutos después, Lily cortó la comunicación, con muchas ganas de reírse debido a la felicidad de haber conseguido una audición y también gracias a la petición tan peculiar que Ian Takahashi le hizo. La mariposa monarca que había entrado revoloteando minutos antes ahora estaba parada en el quicio de la ventana. Lily sonrió.
- Chiara, estoy lista.- le dijo Lily a la mariposa.
- ¿Sensei Del Valle?.- Mine tocó a la puerta.
- Adelante.- ordenó Lily.
- Sensei, perdone que la moleste pero la señorita Lara desea verla.- anunció Mine, algo compungida.
- Uhm. Y de seguro que no viene de buenas... .- murmuró Lily, al ver la expresión de Mine.- Muy bien, dígale por favor que espere, que en seguida bajo.
Lily rebuscó entre las carpetas en donde guardaba las canciones que había compuesto Chiara y sacó una hoja de papel común que contenía la canción que Lily había acabado de escribir apenas el día anterior. "Ésta será perfecta", pensó ella. Bajó al estudio en donde los Wakabayashi tenían el más moderno equipo de cómputo con Internet y fax y envió la canción al número de Estrella Fugaz. Minutos después recibió un mensaje de confirmación. Lily se dirigió después a la sala, en donde Lara se paseaba como león enjaulado por todo el lugar.
- ¡Hasta que apareces!.- gritó ella.- ¿En dónde te habías metido? ¡Ya hasta había pensado que ese Genzo Wakabayashi te había secuestrado para hacerte suya con un irrefrenable deseo animal!
- Este, no... .- Lily trató de aguantarse la carcajada.- Nada de eso. ¿Y a ti que te pasa?
- ¿Qué me pasa? ¿Quieres saber qué me pasa?.- Lara gritaba como histérica.- ¡Acabo de enterarme que el tipo que me acosa todos los días es amigo de Genzo Wakabayashi! ¡Estás viviendo en una casa de pervertidos depravados!
- Claro que no. ¿Y para empezar, de qué tipo hablas?.- Lily ya estaba a punto de reírse.
- El día de la boda del hermano del Genzo ése, me topé con un tipo odioso y depravado que me ha estado siguiendo todos estos días y pues ahora resulta que es amigo íntimo de Genzo.- explicó Lara.- Es un tipo descuidado, con cabello negro alborotadísimo aunque debo reconocer que tiene unos ojos lindos.
Lily comprendió que Lara hablaba de Ian. Prefirió no decirle que el mismo "depravado" que a ella la seguía era el mismo que quería contratarla para grabar un disco. Es más, ni siquiera iba a decirle a Lara que tenía una audición. Era capaz de decirle que era solo un truco y engaño y que no lograría nada bueno de eso. Además, también estaba el interés que Ian mostraba por Lara... Sin embargo, Lily, perceptiva como es, notó que los ojos Lara brillaron cuando mencionó los "lindos ojos" de Takahashi. Quizás en el fondo Lara también se sentía atraída por Ian y no quería reconocerlo...
- Oye... ¿Y no te parece atractivo el depravado?.- pregunto Lily, como quien no quiere la cosa.
- ¿Cómo crees?.- Lara gritó.- Tú sabes que el amor de mi vida es Taro Misaki. A nadie amaré tanto como a él. Y esa pesada de Rika sabrá quién es Lara Del Valle.
- O quizás tú sepas quién es Rika Ozwa.- Lily soltó la carcajada.- Recuerda que ella es nuestra prima.
- Naaa. Me viene quedando corta la chica.- Lara sonrió con autosuficiencia.
Ni Lara ni Rika habían querido contarle a Lily sobre la pelea que tuvieron en la clínica del doctor Shibazaki. Y Taro tampoco quiso hacerlo. Fue como una especie de acuerdo no pactado entre los tres, ninguno quería inmiscuir a Lily en triángulo amoroso, aun cuando fue el propio Taro el que le confesó a Lily a quién de las dos quería en realidad. Lily recordó esa confesión y se sintió un poco mal, ya que una de las dos chicas a quien tanto quería saldría lastimada.
- ¿Tú crees?.- Lily sonrió con tristeza.- Quizás no tanto...
- Sé que ella también quiere mucho a Taro, eso lo reconozco.- dijo Lara.- Pero sé también que él me quiere a mí.
Lily ya no dijo nada. En ese momento, se escucharon varias voces en la puerta. Eran Genzo y Kenji. Ambos entraron en la sala y Kenji saludó a las mexicanas, muy sonriente como siempre, pero la expresión de Genzo se tornó gélida.
- ¡Hola!.- los saludó Lily.- ¿Cómo van?
- Me voy a llevar a mi hermana de esta casa, les advierto.- anunció Lara, gruñona como siempre.- No consentiré que siga viviendo en este nido de pervertidos depravados...
- Fuera de mi casa.- Genzo se paró frente a Lara y la miró con tanto enojo que tanto Lily como Kenji se asustaron.
- ¿Qué cosa?.- Lara no se esperaba eso.
- Fuera de mi casa. No quiero que estés cerca de Lily, no mientras ella viva aquí.- Genzo continuaba con esa gélida expresión que cada vez se tornaba más peligrosa.
- ¿Quién eres tú para darme órdenes?.- gritó Lara, también muy enojada.- ¡Tú no tienes derecho a prohibirme ver a mi hermana!
- Tengo el derecho que tendría una persona que sí quiera a Lily y desee verla feliz.- la contradijo Genzo.- Categoría en la cual tú no entras.
- Genzo... .- susurró Lily, casi sin voz. Presentía que una desgracia se acercaba.
- ¿Cómo te atreves a decir eso?.- Lara estaba enojadísima.- ¡Lily es mi hermana y es mi deber protegerla de tipos como tú! ¡Soy yo la que te debería de ordenar que no te acerques a ella!
- ¡Ja! ¿En verdad te preocupas por ella?.- Genzo habló sarcásticamente.- ¿Y en realidad te preocupas por su felicidad?
- ¡Por supuesto!.- rugió Lara.
- ¿Y te parece de buena hermana el decirle a Lily que ella fue la culpable de la muerte de Chiara?.- preguntó Genzo, con mucha frialdad.
Se hizo el silencio absoluto. Kenji miraba interrogante a su hermano y a Lara. Lily comenzó a llorar suavemente.
- No, Genzo... .- murmuró ella, con los ojos llenos de lágrimas.
- Yo no dije... Yo no quise... .- Lara no sabía qué decir. Genzo le había dado un golpe bajo.- ¿Por qué le contaste eso?.- Lara volteó a ver a su hermana, enojada y confundida.
- ¿Y todavía le reclamas? ¡Eres la mujer más detestable que he conocido, y mira que he conocido a muchas!.- Genzo rugió, apretando los puños.
Fue suficiente para Lily. Salió corriendo de la sala y huyó de la mansión. Lara quiso ir tras ella pero Genzo se interpuso.
- Más te vale que yo no vuelva a enterarme de que lastimaste de esa manera a Lily porque te juro que te arrepentirás.- dijo Genzo, con furor en los ojos.- No me importa que seas su hermana. Arpías como tú no deberían estar cerca de un ángel como ella.
- Idiota.- Lara también estaba al borde de las lágrimas. Salió corriendo también, pero ya no fue detrás de Lily.
- Ahora sí que te pasaste, hermano.- señaló Kenji.- Es decir... No sé qué le habrá hecho esa Lara a Lily pero... No sé, creo que no deberías de meterte entre peleas de hermanas...
- No sabes de lo que hablas.- suspiró Genzo.- Lara es la causante de muchos de los temores de Lily...
- Oye, hermano.- Kenji habló con suavidad.- Ya reconócelo... ¿Tú quieres a Lily, cierto?
Genzo no contestó. No sabía qué se ganaba con negarlo pero tampoco podía aceptarlo.
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Lily corrió por las calles, sin rumbo fijo. De pronto, al dar la vuelta en una esquina chocó contra una persona. Lily avergonzada y sin dejar de llorar, se disculpó pero la sorpresa la invadió cuando se dio cuenta de que frente a ella se encontraba Elliot Tapia.
- ¿Qué te pasa?.- la expresión de Elliot se tornó dulce.- ¿Te hizo llorar ese tipejo que se dice jugador de fútbol?
- No es nada.- Lily trató de restarle importancia al asunto.- Son cosas mías...
- Un ángel como tú no debería estar llorando.- señaló Elliot, al tiempo que secaba las lágrimas del rostro de Lily.- Cuéntame, pequeña, tus problemas.
- Gracias, no quiero importunar.- contestó Lily.
- No es molestia. Todo lo contrario. Mi deber es mantener feliz a la Voz de la Esperanza.- Elliot miró fijamente a los ojos de la chica.
- Ah... .- Lily se sintió hipnotizada por esos bellos ojos azul gris.
A grandes rasgos, Lily le contó lo ocurrido a Elliot. Éste torció la boca en un gesto al escuchar que el causante del problema fue Genzo.
- No debiste confiar en ese tipo.- señaló Elliot.—Solo te traerá problemas
- ¿Por qué dices eso? Genzo siempre ha sido muy amable conmigo... .- musitó Lily, sorprendida.
- ¿Sí? Y mira en qué lío te metió. Hizo que te disgustaras con tu hermana.- señaló Elliot.
- Pero estoy segura de que no fue con mala intención... .- Lily no quería darle la razón a Elliot, aunque la tuviera.
- Eso crees tú. Pero, ¿te digo algo? Yo creo que mientras más pronto te alejes de Genzo Wakabayashi, mejor será para ti.- dijo Elliot, muy serio.
- ¿Por qué?.- Lily se sorprendió.
- Porque él solo será un estorbo para tu carrera.- contestó Elliot, fríamente.- Tipos como él solo se interponen y no ayudan en nada. Debes alejarte de él si quieres convertirte en una gran cantante. Ya me enteré de que tienes una audición en Estrella Fugaz. Te aconsejo que no le digas nada a Genzo y que no dejes pasar una oportunidad como ésta.
- ¿Cómo sabes que yo... Que Estrella Fugaz me... ?.- Lily no salía de su asombro.
- Yo sé todo sobre tu vida, Lily Del Valle.- Elliot miró enigmáticamente a la chica.- Sé de tus dolores, de tus sueños, de tus miedos... También se que serás grande. Tu voz será recordada por generaciones.
Lily no respondió, fascinada por los ojos de Elliot. ¿Cómo era que él sabía tanto de su vida? Era para espantarse, pero su corazón le decía que podía confiar en Elliot...
- Yo estaré a tu lado, para protegerte y ayudarte a alcanzar tus sueños... Es tu destino convertirte en la Voz de la Esperanza... .- Elliot habló muy bajo. Se acercó a Lily y la besó suavemente en los labios...
Lily solo cerró los ojos, llevada por el remolino de ideas y sensaciones que le pasaron por la mente...
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Los dos días se pasaron como agua. Durante ese tiempo, Lily evitó lo más que pudo a Genzo, influenciada por las palabras (y por el beso) de Elliot, aunque sí le contó sobre la audición ya que, después de todo, Genzo la había presentado con Ian. Genzo creía que Lily estaba enojada porque él había osado reclamarle a Lara en su lugar y Genzo no la culpó. Sin embargo, él no sabía que se estaba enfrentando a una fuerza muy poderosa. El amor que había entre Genzo y Lily corría peligro debido a Elliot...
Lily le contó a Samael lo de la audición, aprovechando que ella había vuelto dejarse ver entre los vivos. Durante la larga convalecencia de Yoshiko, Samael estuvo casi desaparecida. Lily se había enterado que ella seguía manteniendo contacto con Hikaru Matsuyama para darle su apoyo. De ahí en más, Samael prácticamente se había convertido en humo. Lily estaba algo dolida con su amiga al principio, pero después comprendió que no debió de ser nada fácil para Samael ver a su adorado Hikaru atendiendo a Yoshiko en el hospital... Lily pensó que ella se sentiría igual si Genzo se pusiera a cuidar a Daniela... ¡Qué espanto! Como fuera, Lily le contó a Samael sobre la audición. La chica le había recomendado que tuviese cuidado ya que después de todo Estrella Fugaz era la compañía que había contratado a Daniela Dietrich y que ella bien podría boicotearle los planes. Lily ya se lo sospechaba, pero le prometió a Samael que sería cuidadosa. Lily no le dijo absolutamente nada de la audición a Saki, aunque sí se lo dijo a Tess, una vez que por casualidad se lo encontró en la tienda de música en donde trabaja Samael, y le pidió que guardara silencio.
Y el momento llegó. Hana y Mine se ofrecieron a preparar a Lily para la ocasión. Entre las dos la maquillaron, la peinaron y la vistieron a la última moda y, cuando bajó las escaleras, tanto Kenji como Genzo quedaron sumamente impresionados.
- Caballeros, es para mí un honor el presentarles a la próxima diva de la música.- anunció Hana.- ¡Lily Del Valle!
Lily bajó las escaleras con el porte de una modelo. Llevaba un suéter finísimo de cachemira color verde seco combinado con una minifalda color crema y de remate unas botas de cuero altas color camel. Kenji silbó y aplaudió, mientras que Genzo se limitó a contemplarla con la boca abierta.
- Te ves preciosa.- dijo Kenji.- Los dejarás impactados.
- Gracias, eso espero.- Lily se ruborizó.
- Yo te llevo.- anunció Genzo, en voz baja, sin dejar de mirarla.
- No, gracias. Prefiero irme sola.- anunció Lily, aun bajo la influencia de Elliot.
- Te llevo.- era una orden, no una pregunta.
- Como quieras... .- Lily ya no quiso discutir.
En el camino ni Lily ni Genzo dijeron nada. Entraron a las instalaciones de Estrella Fugaz, Lily se hizo anunciar y al poco tiempo Ian Takahashi los recibió. Condujo a Lily hasta un estudio de grabación y le dijo a Genzo que, si lo deseaba, podía quedarse a ver la audición, cosa que él aceptó. Los productores opinaron que Lily era una chica preciosa y con buen cuerpo, pero que se necesitaba algo más que una cara bonita para triunfar.
- No se decepcionarán de ella.- les dijo Ian, sonriente. Después se acercó a Lily y le entregó una copia de la canción que cantaría.- Aquí tienes, Lily. Buena suerte.
Lily tomó la hoja y al ver el título de la canción pareció despertar de un largo sueño. Cualquier extremo, decía la hoja. La canción que ella misma había enviado y que había terminado de componer apenas unos cuantos días atrás... Lily miró disimuladamente a Genzo...
- ¿Estás lista?.- preguntó Ian.- Cuando quieras.
- Lista.- dijo Lily.
Comenzaron a tocar los primeros acordes. Lily estaba lista.
- Quiero llegar a ser el cielo de tu mundo...
Lily trataba de no ver al joven que tenía su mirada clavada en ella y que la ponía más nerviosa aunque Ian y los directivos de Estrella Fugaz.
Porque por ti doy todo y más que eso
Lily recordó el por qué compuso esa canción. La había creado pensando en el hombre más increíble que ella había conocido en toda su vida...
- Sueño despierta sin remedio con tu cuerpo...
Con tu increíble forma de pensar...
Los directivos se sintieron impresionados con la potencia de la voz de Lily, con su belleza, con su calidez. La chica estaba cantando con un sentimiento tal que hasta Genzo se sintió conmovido.
Voy a conquistar tu corazón...
La canción rompió el hechizo del beso de Elliot. Lily se puso a cantarle con toda su alma al hombre al que amaba con todo su corazón.
Tú eres mi verdad...
Tú y nadie más...
Al finalizar la música, todos aplaudieron estruendosamente. Ian estaba satisfecho y los directivos muy conformes. Lily ya casi tenía asegurado el contrato, pero a ella solo le importó la sonrisa del hombre al que le había dedicado la canción: Genzo.
Notas:
- Desde que escuché esta canción, siempre me he imaginado que Lily se la canta a Genzo. Y es la canción que yo le dedicaría a él, ya que expresa muy bien los sentimientos que tengo hacia mi adorado Genzo.
- Luego les explico el por qué Lily no le quiso contar a Saki sobre su audición y por qué solo se lo contó a Tess.
- Jajaja, pagar con cuerpomático... En Bananamex... Jajaja, perdón, es un chiste local, se refiere a pagar con sexo.