Capítulo 24. Noche triste.

La noche caía sobre el campamento de Japón... Un joven solitario no puede dormir debido a los males del corazón...

Genzo se encontraba acostado sobre su cama, pensando. Miraba hacia el techo con actitud melancólica... Recordaba vívidamente el primer día en que se topó con los ojos negros de Lily...

-FLASH BACK-

Hace muchos años, en un puerto lleno de gente hospitalaria que se paseaba por un malecón a orillas del mar...

- Gracias.- murmuró ella, en una lengua extranjera.

Él tenía que marcharse, pero le dejó a ella algo que tenía mucho valor para él... Algo con lo que él la reconocería en cualquier parte del mundo...

-FIN DEL FLASH BACK-

De eso había sido tanto tiempo atrás que él pensó que ya nunca más la encontraría de nuevo…

Genzo cerró los ojos. Le dolía el seguir recordando pero no podía evitarlo. Su mente le barajaba las escenas recientemente vividas cual naipes crueles del destino...

-OTRO FLASH BACK-

- Lily, te amo.- confesó Kamui, cuando dejó de besar los dulces labios de Lily.

- Kamui... .- murmuró Lily.- Yo... Tengo que reconocer que me gustas...

Y eso fue lo que acabó con las esperanzas de Genzo...

-FIN DEL SEGUNDO FLASH BACK-

Genzo no hizo el intento de parar sus recuerdos. Se quedaría toda la noche recordando hasta que consiguiera sacarse todo el veneno que guardaba en su interior...

Después de tanto, tanto tiempo, al fin Genzo reconocía cuánto amaba a Lily. Ella se había clavado tan profundo en su corazón que le dolía... Y más porque mientras más pensaba en Lily, más crecía su amor por ella...

Sería una noche muy larga, Genzo lo sabía. Pero no le importó...

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- Mamá, tengo sed.- murmuró ella.- Me siento mal...

Los minutos pasaban y su madre no regresaba. La niña temía que en cualquier momento se desmayaría...

Pero entonces llegó él...

- Gracias.- murmuró ella, aun cuando ella sospechaba que él no podía entenderle.

Él no dijo nada. Solo sonrió y le dejó un recuerdo que le permitiría a ella el volver a encontrárselo algún día...

Lily despertó, algo sobresaltada. Hacía mucho tiempo que no soñaba con el niño de la gorra.

"¿Se deberá a Kamui?", se preguntó la chica. "Ahora que sé que él es el niño de la gorra he de estar soñando sin querer con ese recuerdo... ".

Lily se levantó de su cama. Ese día, Japón jugaría la final contra Brasil. Lily, después de mucho pensarlo, se decidió a ir. Kamui se ofreció a ir con ella y no era para menos, ya que ahora él era su nuevo novio (sí, cómo la ven). Lily tomó una ducha rápida, al tiempo que procuraba no pensar en Genzo Wakabayashi. Él muy probablemente estaría recibiendo todo el apoyo de Daniela Dietrich, así que de plano no extrañaría a Lily. Ésta última sabía que había sido una idiota por haber aceptado ser la novia de Kamui pero fue algo que no pudo evitar...

-FLASH BACK-

- Lily, te amo.- murmuró Kamui, cuando él se separó de ella.

- Kamui... .- murmuró Lily.- Debo reconocer que me gustas... Pero yo... Aun amo a Genzo...

- Lo sé.- suspiró Kamui.- Pero si me das una oportunidad te aseguro que haré que lo olvides muy pronto... Yo te haré feliz... Si tan solo aceptaras ser mi novia...

-FIN DEL FLASH BACK-

Lily no pudo decirle que no a Kamui. Nuevamente fue presa de sus hermosos ojos azul grisáceo... Ella sabía que Kamui la haría feliz, pero también sabía que nunca conseguiría amarlo como amaba a Genzo...

"Si tan solo Kamui hubiese llegado a mi vida primero... ", pensó Lily, al tiempo que enjabonaba su bien formado cuerpo. "Si tan solo hubiese conocido a Kamui antes... Pero no, desde que vi a Genzo por primera vez supe que lo amaría por siempre... ".

Al salir del baño, Lily secó su larguísimo cabello y lo recogió en una cola de caballo. Se puso unos pantalones de mezclilla (jeans, pues) y una camiseta sin mangas color azul cielo. Fue a la cocina a desayunar y se encontró con una nota de Lara que decía que la esperaba en el estadio en compañía de su "cuñadito". Lily sabía que su hermana estaba muy contenta debido a que Lily se había hecho novia de Kamui. A Lara evidentemente le simpatizaba el muchacho... Y pues el que Lily anduviese con él significaba que ella ya no estaría más cerca de Genzo...

Kamui llegó a la hora acordada a recoger a su novia y la saludó con un suave beso en la boca. Lily se sentía mal, pero cada vez que Kamui la besaba ella recordaba el único beso que Genzo le había dado... Ambos se marcharon al estadio. Lily iba de lo más seria en el camino pero Kamui no hizo el intento de preguntarle qué era lo que pasaba, cosa que Lily agradeció. Lo maravilloso de estar con Kamui era que él sabía exactamente cuál era el estado de ánimo de Lily. Ya en el estadio, Lily y Kamui se sentaron a una distancia prudente de la porra japonesa, muy cerca de en donde se encontraban Ian y Lara. Takahashi hablaba las maravillas sobre la maravillosa e increíble manera de jugar de Genzo, pero Lara pronto lo calló con una mirada severa. Sanae y compañía miraron con curiosidad a Lily, pero aparte de corresponder al saludo efusivo de Manabu, la mexicana no dio ninguna muestra de querer acercarse a sus amigos japoneses.

El partido dio inicio. Brasil ataca con todo la portería nipona, la cual es defendida por un increíblemente fuerte y guapo Wakabayashi (jejeje). Sin embargo, Jun Misugi y Ryo Ishizaki también están haciendo un excelente trabajo. Kojiro Hyuga intenta anotar en la portería carioca con su Raijyu Shoot, pero el arquero Salinas se mantiene imbatible. Comienza a hacerse evidente que a Japón le está costando trabajo el mantener el empate a cero goles, por no decir que les está costando mucho el anotar un gol. Durante el medio tiempo, sin embargo, Taro Misaki se aparece en el camerino de Japón y les hace a todos una sorprendente noticia:

- Amigos.- dice un sonriente Misaki.- He decidido que voy a jugar el segundo tiempo.

Hay exclamaciones de alegría y un sentimiento de esperanza renovada. Con Misaki en la cancha, las posibilidades de Japón de coronarse campeón del mundo se incrementan...

Rika Ozawa mira a Misaki con cierta tristeza, al tiempo que se pone a recordar...

-FLASH BACK-

- No me importa, doctor.- dijo Taro.- Jugaré la segunda mitad del partido...

- ¡Pero es peligroso!.- exclamó el doctor Shibazaki.- ¡Podrías quedar lesionado de por vida!

- No me importa.- replicó Taro, entercado.- Si estuve tanto tiempo en rehabilitación fue para jugar esta final...

-FIN DEL FLASH BACK-

El segundo tiempo estaba por comenzar. Rika se acercó a Taro, cabizbaja.

- Misaki.- dijo ella. Era la primera vez en mucho tiempo que ella lo llamaba por su apellido.- Sinceramente, no te deseo suerte en esta ocasión.

- ¿Por qué?.- preguntó un sorprendido y muy dolido Misaki.

Rika no respondió. Se dedicó a mover la cabeza de un lado a otro, con pesar...

Durante ese breve momento, Misaki perdió el ánimo. Sabía que había sido algo desgraciado con Rika pero no se esperaba ese comportamiento de su parte...

Por su parte, Sanae estaba algo dolida con Tsubasa. Justo antes del comienzo del juego ella quiso ir a darle ánimos a él, pero se topó con la sorpresa de que Tsubasa estaba hablando con Lara... Ella le sonreía de una manera muy dulce y él la miraba con cierto embeleso... Incluso hubo un momento en donde él tomó la mano suave de ella... Sanae no lo pudo evitar y dejó escapar un sollozo, cosa que hizo respingar a Tsubasa y a Lara.

- Sanae.- musitó Tsubasa.- No es lo que tú crees...

- Sinceramente, no me importa.- contestó Sanae, antes de darse la vuelta y marcharse.

Pero sí le importaba. Claro que le importaba. A Sanae le dolía en el alma que entre Tsubasa y Lara hubiese algo... Pero no lo dejó demostrar, se guardó sus sentimientos y se dedicó a apoyar a Japón como siempre.

Como resultado, había en ese momento tres hombres con el corazón a punto de romperse (si no es que se habían roto ya, pero éste no es el Club de los Corazones Rotos XD): Tsubasa, Genzo y Taro... Ishizaki se dio cuenta de que a sus amigos les pasba algo y comenzó a tararear: ¿Qué te ha dado esa mujer?

- Querido amigo... Más vale mejor morir... .- murmuró Ishizaki.

Por supuesto, más de uno notó que los tres ases japoneses estaban algo decaídos, pero ninguno se atrevió a preguntarles nada a ninguno de los tres... Genzo miraba disimuladamente hacia el sitio en donde había descubierto a Lily en las tribunas, al comienzo del partido. Ella ni siquiera había volteado a verlo...

- ¿Qué te ha dado esa mujer?.- murmuró Urabe.

Tsubasa se dio cuenta de que Sanae evitaba el contacto visual con él. No importaba cuántas veces él había intentado que ella lo viera, Sanae siempre lo ignoró...

Taro ya ni se animaba a hablarle a Rika. Después de todo lo que le había hecho no se sentía con ningún derecho de dirigirle la palabra...

Genzo, Tsubasa y Taro suspiraron. El segundo tiempo estaba por comenzar y era el momento de concentrarse en el partido y pensar en la victoria.