Yaoi, Lemon, HieixKurama
Los personajes no me pertenecen.
Este fic es la continuación del precio de la arrogancia Dicen que segundas partes nunca fueron buenas, pero como lo prometido es deuda pues ahí va.
La distribución es igual que el anterior : (H) punto de vista de Hiei , (K) punto de vista de Kurama
EL PRECIO DE LOS CELOS.
Capítulo 3 : Una trampa para el zorro.
(K)
Comenzó a desabrochar lentamente los botones de mi camisa, por una vez no era yo quien tenía que llevar la iniciativa y eso me gustaba.
Pero era tan sumamente lento, cada movimiento, cada beso, parecía ser meditado con antelación y yo no podía mas, necesitaba todo, y lo necesitaba deprisa. Hiei sin embargo parecía ser capaz de mantenerlo todo en ese punto, de mantenerme a mi en ese punto.
Y mi excitación iba en aumento.
Y no podía evitar gemir.
Y a Hiei parecía gustarle verme en ese estado.
Ay.
Perdí el control de mi cuerpo por completo.
Entonces la expresión de Hiei cambió radicalmente.
¿ Que haces ? – Me dijo casi gritando. - ¿ Por que siempre tienes que hacer eso ?
¿ Que he hecho ? – Pregunté confuso.
¿ Es que nunca puedes ser Suuichi conmigo ?
¿ Como ?
Yo aun estaba en mi forma humana, quizás había comenzado a cambiar, no lo se, no fui consciente hasta que Hiei se detuvo.
Ahora seguía encima mío, en el sofá, mirándome directamente a los ojos, sus manos apoyadas en mis hombros y una mirada de ira contenida que me asustó.
¿ Que vas a hacer ? – Le pregunté.
Ahora su mirada volvió a cambiar, y de la ira pasó al dolor, me resultaba extraño ver a Hiei así.
¿ Que crees que voy a hacerte Kurama ? – Me dijo y se apartó de mi.
(H)
No pude evitar enfadarme de aquel modo. Si Kurama no confiaba en mi era mejor que me lo dijese a la cara.
Sus ojos plateados. Por un momento tuve ganas de pegarle. Por que Suuichi era mío, solo mío, en cambio Youko había sido de muchos otros antes, y yo no quería ser uno mas.
Y su pregunta. "¿ Que vas a hacer ? "pero ¿ que creía que iba yo ha hacer ? Supongo que lo que había pasado entre nosotros con anterioridad había marcado nuestra relación.
Kurama se acercó a mi.
Hiei ¿ que te pasa ?
Colocó su brazo alrededor de mis hombros y se acercó aun mas.
No sabía que te molestara que me transformase en Youko. – Dijo. – Pensé que así te gustaba mas.
Vaya – pensé – ¿ y por que iba a gustarme mas ? Pero no contesté nada. Y ambos nos quedamos así un rato, sin hablar, yo sentado en el sofá y él abrazandome.
A mi en cambio me molesta ser siempre yo quien lleve la iniciativa. – Me dijo.
¿ Como ? Pues si que... no le contesté tampoco esta vez. Si yo le dejaba llevar la iniciativa siempre era para que se sintiese mas a gusto, para que confiase mas en mi y ahora resulta que a él no le gustaba. ¿ Que demonios era lo que le gustaba ?
( K )
Hiei no contestaba a nada de lo que yo le decía. El siempre había sido así, pero yo tenía la esperanza de hacerle cambiar.
Intenté comprender su punto de vista. ¿ Por que no le gustaba que yo fuese Youko ?
Cualquier respuesta que me pudiese dar a mi mismo, resultaba bastante desagradable.
O bien no le gustaba que mi poder fuese superior al suyo, o quizás le recordaba a otra persona, o quizás simplemente yo lo le gustaba con esa forma. ¡ Caramba ! ¡ pues él sería el primero !
Yo ya no entendía nada. Y comenzaba a cabrearme. ¿ Por que no me lo había dicho antes ? Y también podía haberlo dicho de otro modo, y no dejarme así, a medias.
Me aparté, si quería jugar duro, pues muy bien, ya estaba harto de ser yo quien cediese siempre, si quiere que sea Suuichi, pues que lo diga y en paz, y si no, pues a otra cosa.
Pero en el fondo me dolía esa actitud de él hacia mi.
De todos modos, iba a seguir con mi plan y no iba a dejar que Hiei viese que me afectaba. Me levanté y fui tranquilamente hacia la cocina.
(H)
Kurama estaba enfadado, ahora se largaba no se a que y aparentando que no pasaba nada. Ese era su juego, cuando algo le molestaba hacía como si no pasase nada y ya está. Pero así tampoco se solucionan los problemas.
Me quedé solo en el salón, no pude evitar reparar de nuevo en la mochila que Kurama había dejado y con la que iría al Makai.
Me levanté sigilosamente, coloqué el aparato dentro bien escondido y me dije a mi mismo :
Hiei, así tampoco se solucionan los problemas.
(K)
Cuando volví a salir de la cocina, con un vaso de agua en la mano y aparentando una gran tranquilidad, resultó que Hiei se había largado.
Eso si me enfureció del todo. Y ahora que ya no tenía nadie delante ante quien disimular arrojé el vaso con el agua estrellándolo contra la pared lateral del salón.
Lo único que conseguí fue mojar el papel pintado, y yo seguí sintiéndome igual de mal.
¿ Por qué me torturo de esta forma ? Si seguro encontraría a cualquiera dispuesto a estar conmigo ¿ por qué tengo que empeñarme en que ese alguien sea Hiei ?
Recogí los cristales y el agua, al día siguiente estaría en el Makai y quien sabe, a lo mejor conseguía olvidarme de él.
...............
Me desperté algo aturdido, había dormido en el sofá del salón y con la ropa puesta. Eso no era propio de mi.
Me levanté, me duché y me vestí, no tuve ánimos de llamar por teléfono a Yusuke ni a nadie para decir que ese fin de semana me iba, tan solo le dejé una nota a mi madre.
Tomé la mochila y salí. Pero algo fallaba. En mis sentidos algo me decía que había alguna cosa que no acababa de estar bien.
Crucé la ciudad y parte del bosque intentando no pensar en el día anterior, pero no podía evitarlo, de hecho si yo iba al Makai era por Hiei, si tan enfadado estaba con él, lo lógico sería no ir, pero si me quedaba en casa sería peor, no pararía de pensar.
Tuve buen acierto en cruzar justo por aquel sitio, no quedé excesivamente lejos del castillo de Yomi, instintivamente agucé mis sentidos nada mas entrar en el Makai.
Entonces fui consciente. Había algo en mi mochila que yo no había puesto, algo que aún desprendía, aunque débilmente, el ki de Hiei. No la abrí, no hice nada, seguí caminando pensando sencillamente en que podía ser, no quería mirar.
Me senté y me recosté en un árbol, justo antes de llegar al castillo, no quería arriesgarme a entrar en él sin saber lo que la mochila contenía.
La abrí con naturalidad, como si no hubiese notado nada. No pude menos que sonreír, el aparato aun estaba desactivado, ¿ de donde lo habría sacado Hiei ? ... Mukuro... de ahí lo había sacado.
Yo ya conocía ese tipo de artefactos y como funcionaban, muy bien, así que quería saber que hacía yo, pues le demostraría lo que iba a hacer.
Como mínimo el maldito aparatito no enviaba sonido, así si se me escapaba alguna cosa no habría problema, solo imagen.
Mmm. ¿ que imagen quería yo transmitir exactamente al koorime ? Sonreí de nuevo pensando en las posibilidades que seguramente Yomi y muchos otros me ofrecerían.
(H)
¿ No lo piensas activar ? – Preguntó Mukuro.
No le contesté, ¿ por qué me costaba tanto ? ¿ quizás por qué en el fondo temía ver según que cosas ?
Lo activó ella. Mejor. Yo igual me hubiese arrepentido y no lo hubiese hecho.
Una imagen tridimensional apareció flotando ante mi, en ella podía distinguir perfectamente a Kurama en lo que sin duda era la habitación que ocupaba en el castillo.
Ya no llevaba la típica ropa ningen, en su lugar había una túnica parecida a la que usaba cuando era Youko, aun así él seguía en su forma humana.
La puerta se abrió y entró Yomi, no pude reprimir un gesto de rabia. No miré a Mukuro, pero me pareció que se reía, no se si de mi o de la situación.
Yomi se acercó lentamente a Kurama, lástima no haber aprendido nunca a leer en los labios, ahora no podía saber lo que decían.
Se acercó aun más y colocó sus brazos alrededor del zorro, de mi zorro, y acercó su cara hasta casi rozar a Kurama, Me contuve de gritar por Mukuro, que seguía a mi lado con expresión cínica.
(K)
¿ Debía aprovechar el momento ? Hiei nos estaría viendo, el aparato había desaparecido de mi vista, señal que había sido activado. ¿ Por qué no besar a Yomi ahora ? Se me había insinuado, ¿ por qué no aprovecharlo ?
¿ Y después ?
Al contrario de lo que solía hacer siempre, no pensé demasiado en las consecuencias y le besé. Yomi naturalmente me correspondió. Yo sin embargo solamente pensaba en Hiei, en la expresión de su cara al vernos, en lo que estaría sintiendo.
Noté que Yomi me empujaba suavemente hacia la cama y sin darme cuenta estaba completamente estirado sobre las sabanas con Yomi encima de mi.
Entonces él me volvió a besar y en ese momento es cuando fui consciente de que si continuaba por aquel camino Yomi iba a querer algo mas y yo no estaba dispuesto a darselo.
Estoy con alguien. – Le dije.
Y ¿ desde cuando eso a sido un impedimento para ti ? – Preguntó él.
Ese alguien es distinto.
Yomi pareció sorprendido a la vez que molesto. Se inclinó de nuevo hacia mi y me susurró :
- Es ese alguien tan importante como para utilizarme a mi ¿ verdad
Youko ?
Ahora fui yo el sorprendido.
El aun estirado encima de mi me dijo :
¿ Crees que no soy capaz de notar que nos están espiando ? – y añadió de nuevo susurrando – y ¿ crees que no voy a ser capaz de deducir lo que está pasando ?
Intenté apartarle y levantarme de la cama pero me sujetó por los hombros impidiéndomelo.
¿ Crees que puedes aparecer aquí solo para utilizarme y no darme luego nada a cambio ?
Noté un leve pinchazo en el cuello.
¿ Que demonios... ? – Pregunté.
Yomi sonrió.
Esa táctica la inventaste tú – me dijo - ¿ recuerdas ? tú me la enseñastes.
Claro que recordé. Maldición. Comencé a marearme.
Yomi me besó de nuevo y noté como hábilmente comenzaba a quitarme la túnica.
(H)
Mukuro se acercó a mi y colocó su mano en mi hombro.
Quizás deberías dejar de mirar. – Me dijo.
No se cual sería en esos momentos la expresión de mi cara para que ella dijera eso.
La culpa es tuya. – Espeté.
¿ Mía ?
Tú me distes ese aparato.
Ella retiro su mano y me dijo :
Que no lo vieses no cambiaría que estuviese sucediendo.
Pues claro que no. Maldita sea. Ella tenía razón. Pero yo seguía con la mirada fija en la escena, viendo como Yomi quitaba lentamente la túnica a Kurama y no solo eso, lo que mas me molestó es que él no se había transformado aun. ¿ Por qué ?
¿ Quieres que me vaya ? – Preguntó Mukuro.
No contesté. Ella insistió.
¿ Sí o no ?
Quedate.
( La autora )
Uf, he tardado mucho en actualizar, todo culpa de la viciada de juego aquel ( algunas ya sabéis a que me refiero ) pero intentaré volver a mi norma de uno por semana.
Rakime : Por líos no será, y aun faltan bastantes, mmm tal como lo dejo creo que es una suerte que no sepas budú ;)
Yukii : Yomi no te da buenas vibraciones, jiji ¿ por que será que a mi tampoco? Y no me hables del fic de posesión que fue por culpa de ese fic que me enganché a ffnet.
Naoki : Creo que la duda no se habrá desvanecido aun, ah, es lo que tiene ser mala, que dejas los capítulos así.
Eli-chan : ¿ Juntos ? Pues sinceramente es algo que aun no he decidido tengo en mente tres posibles finales y aun no se cual elegir.
Inari-chan : Reconozco que tardé bastante, y siiii estoy contenta de que hagas el epílogo, no creí que fuese capaz de convencerte.
Vanne : Ei contigo quería hablar, me enviastes un mail que intenté responder 4 veces y no pude, al enviártelo me lo devolvían. Bueno que si, ponlo en tu web que a mi me hará mucha ilusión, pero di que es mío ¡eh! No te lo robes (
Misao-chan : Me alegro que te guste, y lo de los celos, bueno, aun le toca el turno de dar celos a Hiei, así que hay para rato.
Sanasa : ¿ Humillar a Kurama ? Ay no sé, a lo mejor un poquito, es que eso de que sea tan perfecto no puede ser, pero tú tranquila que en este Hiei también va a pasarlo bastante mal, así que las cosas irán compensadas.
Tomoe-ka : Me alegro de no haber bajado el ratio, y si, si de ahora en adelante actualizaré muy pronto, lo prometo.
Un beso a todas y gracias por los rewiews.
Los personajes no me pertenecen.
Este fic es la continuación del precio de la arrogancia Dicen que segundas partes nunca fueron buenas, pero como lo prometido es deuda pues ahí va.
La distribución es igual que el anterior : (H) punto de vista de Hiei , (K) punto de vista de Kurama
EL PRECIO DE LOS CELOS.
Capítulo 3 : Una trampa para el zorro.
(K)
Comenzó a desabrochar lentamente los botones de mi camisa, por una vez no era yo quien tenía que llevar la iniciativa y eso me gustaba.
Pero era tan sumamente lento, cada movimiento, cada beso, parecía ser meditado con antelación y yo no podía mas, necesitaba todo, y lo necesitaba deprisa. Hiei sin embargo parecía ser capaz de mantenerlo todo en ese punto, de mantenerme a mi en ese punto.
Y mi excitación iba en aumento.
Y no podía evitar gemir.
Y a Hiei parecía gustarle verme en ese estado.
Ay.
Perdí el control de mi cuerpo por completo.
Entonces la expresión de Hiei cambió radicalmente.
¿ Que haces ? – Me dijo casi gritando. - ¿ Por que siempre tienes que hacer eso ?
¿ Que he hecho ? – Pregunté confuso.
¿ Es que nunca puedes ser Suuichi conmigo ?
¿ Como ?
Yo aun estaba en mi forma humana, quizás había comenzado a cambiar, no lo se, no fui consciente hasta que Hiei se detuvo.
Ahora seguía encima mío, en el sofá, mirándome directamente a los ojos, sus manos apoyadas en mis hombros y una mirada de ira contenida que me asustó.
¿ Que vas a hacer ? – Le pregunté.
Ahora su mirada volvió a cambiar, y de la ira pasó al dolor, me resultaba extraño ver a Hiei así.
¿ Que crees que voy a hacerte Kurama ? – Me dijo y se apartó de mi.
(H)
No pude evitar enfadarme de aquel modo. Si Kurama no confiaba en mi era mejor que me lo dijese a la cara.
Sus ojos plateados. Por un momento tuve ganas de pegarle. Por que Suuichi era mío, solo mío, en cambio Youko había sido de muchos otros antes, y yo no quería ser uno mas.
Y su pregunta. "¿ Que vas a hacer ? "pero ¿ que creía que iba yo ha hacer ? Supongo que lo que había pasado entre nosotros con anterioridad había marcado nuestra relación.
Kurama se acercó a mi.
Hiei ¿ que te pasa ?
Colocó su brazo alrededor de mis hombros y se acercó aun mas.
No sabía que te molestara que me transformase en Youko. – Dijo. – Pensé que así te gustaba mas.
Vaya – pensé – ¿ y por que iba a gustarme mas ? Pero no contesté nada. Y ambos nos quedamos así un rato, sin hablar, yo sentado en el sofá y él abrazandome.
A mi en cambio me molesta ser siempre yo quien lleve la iniciativa. – Me dijo.
¿ Como ? Pues si que... no le contesté tampoco esta vez. Si yo le dejaba llevar la iniciativa siempre era para que se sintiese mas a gusto, para que confiase mas en mi y ahora resulta que a él no le gustaba. ¿ Que demonios era lo que le gustaba ?
( K )
Hiei no contestaba a nada de lo que yo le decía. El siempre había sido así, pero yo tenía la esperanza de hacerle cambiar.
Intenté comprender su punto de vista. ¿ Por que no le gustaba que yo fuese Youko ?
Cualquier respuesta que me pudiese dar a mi mismo, resultaba bastante desagradable.
O bien no le gustaba que mi poder fuese superior al suyo, o quizás le recordaba a otra persona, o quizás simplemente yo lo le gustaba con esa forma. ¡ Caramba ! ¡ pues él sería el primero !
Yo ya no entendía nada. Y comenzaba a cabrearme. ¿ Por que no me lo había dicho antes ? Y también podía haberlo dicho de otro modo, y no dejarme así, a medias.
Me aparté, si quería jugar duro, pues muy bien, ya estaba harto de ser yo quien cediese siempre, si quiere que sea Suuichi, pues que lo diga y en paz, y si no, pues a otra cosa.
Pero en el fondo me dolía esa actitud de él hacia mi.
De todos modos, iba a seguir con mi plan y no iba a dejar que Hiei viese que me afectaba. Me levanté y fui tranquilamente hacia la cocina.
(H)
Kurama estaba enfadado, ahora se largaba no se a que y aparentando que no pasaba nada. Ese era su juego, cuando algo le molestaba hacía como si no pasase nada y ya está. Pero así tampoco se solucionan los problemas.
Me quedé solo en el salón, no pude evitar reparar de nuevo en la mochila que Kurama había dejado y con la que iría al Makai.
Me levanté sigilosamente, coloqué el aparato dentro bien escondido y me dije a mi mismo :
Hiei, así tampoco se solucionan los problemas.
(K)
Cuando volví a salir de la cocina, con un vaso de agua en la mano y aparentando una gran tranquilidad, resultó que Hiei se había largado.
Eso si me enfureció del todo. Y ahora que ya no tenía nadie delante ante quien disimular arrojé el vaso con el agua estrellándolo contra la pared lateral del salón.
Lo único que conseguí fue mojar el papel pintado, y yo seguí sintiéndome igual de mal.
¿ Por qué me torturo de esta forma ? Si seguro encontraría a cualquiera dispuesto a estar conmigo ¿ por qué tengo que empeñarme en que ese alguien sea Hiei ?
Recogí los cristales y el agua, al día siguiente estaría en el Makai y quien sabe, a lo mejor conseguía olvidarme de él.
...............
Me desperté algo aturdido, había dormido en el sofá del salón y con la ropa puesta. Eso no era propio de mi.
Me levanté, me duché y me vestí, no tuve ánimos de llamar por teléfono a Yusuke ni a nadie para decir que ese fin de semana me iba, tan solo le dejé una nota a mi madre.
Tomé la mochila y salí. Pero algo fallaba. En mis sentidos algo me decía que había alguna cosa que no acababa de estar bien.
Crucé la ciudad y parte del bosque intentando no pensar en el día anterior, pero no podía evitarlo, de hecho si yo iba al Makai era por Hiei, si tan enfadado estaba con él, lo lógico sería no ir, pero si me quedaba en casa sería peor, no pararía de pensar.
Tuve buen acierto en cruzar justo por aquel sitio, no quedé excesivamente lejos del castillo de Yomi, instintivamente agucé mis sentidos nada mas entrar en el Makai.
Entonces fui consciente. Había algo en mi mochila que yo no había puesto, algo que aún desprendía, aunque débilmente, el ki de Hiei. No la abrí, no hice nada, seguí caminando pensando sencillamente en que podía ser, no quería mirar.
Me senté y me recosté en un árbol, justo antes de llegar al castillo, no quería arriesgarme a entrar en él sin saber lo que la mochila contenía.
La abrí con naturalidad, como si no hubiese notado nada. No pude menos que sonreír, el aparato aun estaba desactivado, ¿ de donde lo habría sacado Hiei ? ... Mukuro... de ahí lo había sacado.
Yo ya conocía ese tipo de artefactos y como funcionaban, muy bien, así que quería saber que hacía yo, pues le demostraría lo que iba a hacer.
Como mínimo el maldito aparatito no enviaba sonido, así si se me escapaba alguna cosa no habría problema, solo imagen.
Mmm. ¿ que imagen quería yo transmitir exactamente al koorime ? Sonreí de nuevo pensando en las posibilidades que seguramente Yomi y muchos otros me ofrecerían.
(H)
¿ No lo piensas activar ? – Preguntó Mukuro.
No le contesté, ¿ por qué me costaba tanto ? ¿ quizás por qué en el fondo temía ver según que cosas ?
Lo activó ella. Mejor. Yo igual me hubiese arrepentido y no lo hubiese hecho.
Una imagen tridimensional apareció flotando ante mi, en ella podía distinguir perfectamente a Kurama en lo que sin duda era la habitación que ocupaba en el castillo.
Ya no llevaba la típica ropa ningen, en su lugar había una túnica parecida a la que usaba cuando era Youko, aun así él seguía en su forma humana.
La puerta se abrió y entró Yomi, no pude reprimir un gesto de rabia. No miré a Mukuro, pero me pareció que se reía, no se si de mi o de la situación.
Yomi se acercó lentamente a Kurama, lástima no haber aprendido nunca a leer en los labios, ahora no podía saber lo que decían.
Se acercó aun más y colocó sus brazos alrededor del zorro, de mi zorro, y acercó su cara hasta casi rozar a Kurama, Me contuve de gritar por Mukuro, que seguía a mi lado con expresión cínica.
(K)
¿ Debía aprovechar el momento ? Hiei nos estaría viendo, el aparato había desaparecido de mi vista, señal que había sido activado. ¿ Por qué no besar a Yomi ahora ? Se me había insinuado, ¿ por qué no aprovecharlo ?
¿ Y después ?
Al contrario de lo que solía hacer siempre, no pensé demasiado en las consecuencias y le besé. Yomi naturalmente me correspondió. Yo sin embargo solamente pensaba en Hiei, en la expresión de su cara al vernos, en lo que estaría sintiendo.
Noté que Yomi me empujaba suavemente hacia la cama y sin darme cuenta estaba completamente estirado sobre las sabanas con Yomi encima de mi.
Entonces él me volvió a besar y en ese momento es cuando fui consciente de que si continuaba por aquel camino Yomi iba a querer algo mas y yo no estaba dispuesto a darselo.
Estoy con alguien. – Le dije.
Y ¿ desde cuando eso a sido un impedimento para ti ? – Preguntó él.
Ese alguien es distinto.
Yomi pareció sorprendido a la vez que molesto. Se inclinó de nuevo hacia mi y me susurró :
- Es ese alguien tan importante como para utilizarme a mi ¿ verdad
Youko ?
Ahora fui yo el sorprendido.
El aun estirado encima de mi me dijo :
¿ Crees que no soy capaz de notar que nos están espiando ? – y añadió de nuevo susurrando – y ¿ crees que no voy a ser capaz de deducir lo que está pasando ?
Intenté apartarle y levantarme de la cama pero me sujetó por los hombros impidiéndomelo.
¿ Crees que puedes aparecer aquí solo para utilizarme y no darme luego nada a cambio ?
Noté un leve pinchazo en el cuello.
¿ Que demonios... ? – Pregunté.
Yomi sonrió.
Esa táctica la inventaste tú – me dijo - ¿ recuerdas ? tú me la enseñastes.
Claro que recordé. Maldición. Comencé a marearme.
Yomi me besó de nuevo y noté como hábilmente comenzaba a quitarme la túnica.
(H)
Mukuro se acercó a mi y colocó su mano en mi hombro.
Quizás deberías dejar de mirar. – Me dijo.
No se cual sería en esos momentos la expresión de mi cara para que ella dijera eso.
La culpa es tuya. – Espeté.
¿ Mía ?
Tú me distes ese aparato.
Ella retiro su mano y me dijo :
Que no lo vieses no cambiaría que estuviese sucediendo.
Pues claro que no. Maldita sea. Ella tenía razón. Pero yo seguía con la mirada fija en la escena, viendo como Yomi quitaba lentamente la túnica a Kurama y no solo eso, lo que mas me molestó es que él no se había transformado aun. ¿ Por qué ?
¿ Quieres que me vaya ? – Preguntó Mukuro.
No contesté. Ella insistió.
¿ Sí o no ?
Quedate.
( La autora )
Uf, he tardado mucho en actualizar, todo culpa de la viciada de juego aquel ( algunas ya sabéis a que me refiero ) pero intentaré volver a mi norma de uno por semana.
Rakime : Por líos no será, y aun faltan bastantes, mmm tal como lo dejo creo que es una suerte que no sepas budú ;)
Yukii : Yomi no te da buenas vibraciones, jiji ¿ por que será que a mi tampoco? Y no me hables del fic de posesión que fue por culpa de ese fic que me enganché a ffnet.
Naoki : Creo que la duda no se habrá desvanecido aun, ah, es lo que tiene ser mala, que dejas los capítulos así.
Eli-chan : ¿ Juntos ? Pues sinceramente es algo que aun no he decidido tengo en mente tres posibles finales y aun no se cual elegir.
Inari-chan : Reconozco que tardé bastante, y siiii estoy contenta de que hagas el epílogo, no creí que fuese capaz de convencerte.
Vanne : Ei contigo quería hablar, me enviastes un mail que intenté responder 4 veces y no pude, al enviártelo me lo devolvían. Bueno que si, ponlo en tu web que a mi me hará mucha ilusión, pero di que es mío ¡eh! No te lo robes (
Misao-chan : Me alegro que te guste, y lo de los celos, bueno, aun le toca el turno de dar celos a Hiei, así que hay para rato.
Sanasa : ¿ Humillar a Kurama ? Ay no sé, a lo mejor un poquito, es que eso de que sea tan perfecto no puede ser, pero tú tranquila que en este Hiei también va a pasarlo bastante mal, así que las cosas irán compensadas.
Tomoe-ka : Me alegro de no haber bajado el ratio, y si, si de ahora en adelante actualizaré muy pronto, lo prometo.
Un beso a todas y gracias por los rewiews.
