: Disclaimer : Los personajes que aparecen en este fanfiction tienen como único padre al genio shamánico Hiroyuki Takei, esto quiere decir que yo no los creé, ni que las cosas que hagan o dejen de hacer sean mi responsabilidad. Además de todo lo dicho, que yo crea que son homosexuales, no tiene que ver con su origen de nacimiento ni el color de sus cabellos. Sin más preámbulos, mi fanfiction:

Opiosidad y Cronopios varios

Capítulo 2: Piñas, duraznos, naranjas… ¿fuego?

Horo y Ren yacían echados en el pasto, frente al dojo. Aburridos luego de la abrupta pelea tiránica que habían tenido hace sólo un momento, antes de que Yoh y Hao se fugaran sin decir esta boca es mía.

-Y ¿qué habrá pasado al final?- interrumpe el cambiado Ren

-¿Yo qué sé? -

-No te respondí, miserable… -

-No vamos a comenzar de nuevo, contrólate… -

-Cállate… -

-Nop, no voy a obedecerte esta vez, estoy cansado de hacerlo…-murmuró Horo, contrariado. Ren harto de oír estupideces por parte de este ainu, se adelanta, en búsqueda de Yoh.

-¿Ves algo? -

-Claro que sí, imbécil… -

-Me refiero a… Yoh -se acerca amenazador

-Claro que no, si lo hiciera no me hubiese quedado aquí… ¡pelota! -

-Me tienes harto… -

-Y tú a mí -

-¿Quieres pelear! – Horo salta sobre Ren, quien pierde el equilibrio, cayendo de bruces con el heladito encima, abriendo de pronto los ojos se dio cuenta de que además de tener el cuerpo del otro sobre el suyo, unos ojos negros no dejaban de verle, y una respiración tibia y agitada no terminaba de chocar con su nariz. Se espantó al darse cuenta de que era Horo el de ahí arriba, y sus pálidas mejillas se colorearon al sentir que la otra nariz rozaba con sutileza la suya… cerró los ojos al sentir que la respiración de Horo se acompasaba, y sin protestas se estaba dejando llevar…

-Bien, tenemos que ir por Yoh… la pelea nos hizo alejarnos demasiado del dojo -murmuró Horo, como si no hubiese sucedido situación vergonzosa alguna.

-… -Ren bufó enfadado, casi como protesta y sacudió un poco la cabeza, como para disimular el sofoco de su rostro

-Bueno, ya estamos llegando…-

-Pero… ¿no que Yoh estaba con Hao…? -

-Sip¿y…? -

-…y está con Hao. –insinuó el enojón

-¿Y…? –Horo abre aún más los ojos, sin entender el impedimento

-Yoh está con Hao, estúpido –se sobresalta Ren, abriendo más los ojos para ver si así entendía la insinuación

-No entiendo… tú nunca te explicas como corresponde, eres tan distante e inexpresivo… eres más frío que el hielo, y cuando tengo frío me da más frío verte… y…--

-Tú eres el estúpido que…--

-Hola – saluda Yoh, con una radiante y hermosa sonrisa

Ambos ven a Yoh con una mezcla de sorpresa, desconfianza, sobresalto y frustración. Pues si Yoh no hubiese llegado tal vez las cosas se hubiesen puesto violentas e incluso impulsivas y buenas…

-¿Han visto a Annita…? -

-Nop, por suerte, no… -responde Horo, como de costumbre

-¡Qué suerte! Qué bien… -suspira y su sonrisa se acentúa a lo que ahora ambos peleadores shamanes le ven con curiosidad

-¿Qué les pasa? –pregunta impasible Yoh, y ambos siguen viéndolo de la misma forma -¿Qué! -se encoge de hombros y comienza a reírse tropicalmente

-¿Qué te hizo ese animal…? –se atrevió Horo, sonriendo misteriosamente

-… Que indiscreto… -murmura Ren, y saca su arma para golpearlo

-¡Cuéntanos! -

-Jijiji…- Yoh saca una naranja de su bolsillo y se sienta, jugando con ella, mientras los otros insistían en verlo de esa forma

-¿…Y esa naranja…? -pregunta Horo, curiosísimo

-No es una naranja, Hotito… es "tuinlast" -se explica sin ser muy claro

-Ahhh… -Horo bostezó, pues no entendía muy bien. Vio a Yoh un momento y se inclinó hasta quedar sentado junto a él, y apoyó su cabeza en las piernas del otro, somnoliento- Oyep… - le dice en tono confidencial- cuéntanos lo que hablaron con Hao…

-Eh… - el interrogado sonríe con sigilo y algo de confusión y vuelve a señalar la anaranjada fruta

-Yoh… ¿por qué dices que esa naranja es "twincest"? –se atreve a preguntar Ren, pronunciando el término inglés con sobremanera, ya que estaba algo distante viéndolos con algo de recelo desde arriba

-Porque eso ha dicho Hao… -se encoge de hombros y comienza a pelarla

-"Twincest" es otra cosa, Yoh. Hao te engañó. – le dijo serio, y se puso de cuclillas frente al par de amigos

-Y… ¿entonces…? –le pregunta, viéndolo lastimero y con los ojos brillantes

-Entonces… ¿quieres saberlo¿Estás seguro? -Ren lo ve ceñudo, y se acomoda mejor, como interesado en explicar el significado de aquella palabra de dudoso origen que tan intrigadas nos tiene

-Claro… jijijiji… ¿qué puede ser tan diferente de lo que me mostró él? -le vio con una sonrisa

-¿Sólo te mostró esa naranjita? -Horo soltó una carcajada, entendía tan poco del tema como su inocente amigo. A la pregunta, Yoh negó con la cabeza y se quedó viendo a Ren, para explicarle.

-Primero se sacó la capa y yo la remera… - comenzó, recordando mientras se rascaba la cabeza, ante lo que Ren seguía viéndolo ceñudo y Horo un poco asustado- y luego me senté en mi cama… -frunció el entrecejo, como esforzándose por recordar-

-¿Y…! – inquirió Horo imprudente

-… Y me empujó así… - vio a Ren con simpleza y lo empujó hacia atrás con cuidado de que su cabeza no se golpeara con el pasto. Como es lógico, la cara del tocado se tornó completamente roja – y luego se apoyó así… - se sube sobre Ren y se queda viéndolo, intentando imitar a su querido hermanito- y bueno… fue muy dulce porque…

-¿QUÉ…! –HoroHoro, estupefacto se queda viéndolos, Yoh continúa con el acto y Ren se siente algo cohibido ante la inquisidora mirada del ainu y la dulce mirada del tropical.

-Y, bueno… se quedó mirándome por mucho rato, y luego se acercó de a poco… así… - lo demostró, y lo más curioso es que Ren no opuso resistencia. Horo tuvo la genial ocurrencia de que sentía ganas de hacer lo mismo que su amigo.

-¡Así le puedo golpear más fácil! –grita y desplaza a Yoh, subiéndose él sobre Ren.

-Espera… -Yoh corre a Horo, y Ren no sabe qué diablos hacer.- Aún no termino…- vuelva a su posición anterior, y Ren cierra los ojos, perturbadísimo -Es que no puedo ser como Hao, pero hizo así -se acercó mucho hasta quedar a escasos centímetros de la nariz de Tao- y bueno, jugamos un momento

-No… - Ren lo ve impactado, abriendo los ojos, sintiendo el aroma de Yoh sobre sí

-Y… me dio esto… -le da la naranja, se levanta y se sienta junto a Horo- Y nada más…

Segundo capítulo : FiN :