Disclaimer: Los personajes de Harry Potter no me pertenecen, el es propiedad de J.K. Rowling y la Warner Bros.
Summary: Harry ha sufrido una seria perdida y en el momento más vulnerable de su corta vida es ayudado por la persona que menos cabía esperar.
Advertencia: Este fiction es Slash, Harry x Original, si no te gusta no lo leas, temas que pueden perturbar la sensibilidad de algunas personas, a mediados de la historia, posible Mpreg
HEREDEROS
Capitulo 1 : El rescate y ¿quién eres?
Al abrir la puerta se encontraron solamente con ...
¿Una chica, de larga cabellera trenzada hasta donde la espalda pierde su nombre, vestida toda de negro, pantalón de pinza y una fina camisa de seda a medio abotonar, cargando una mochila y con unas gafas de cristales rojizos e impresionantes ojos esmeraldas.
- Buenas noches, siento interrumpir a estas horas de la noche pero estoy buscando a unas personas que viven en el vecindario pero no se exactamente en que casa los puedo localizar – dijo con voz tranquila y regalándoles una sonrisa de disculpa.
- Por favor pasa, no te quedes aquí en la puerta – dijo Petunia dejándola entrar en la casa y acomodándola en el salón – y dime ¿cómo se llaman las personas que estas buscando?
- Pues ...- comenzó a decir mientras sacaba un objeto del interior de la mochila – Petunia y Vernon Dursley , solo me falta ...– dijo levantando la mirada la cual había cambiado junto a su color esmeralda a uno claramente rubí - ... que me digan donde encontrar a Harry James Potter Evans – dijo finalizando la frase varita en mano y apuntándolos.
- E...eres una de "ellos" – dijo atemorizado Vernon.
- Perdonen pero ¿acaso he dicho en algún momento que fuera una chica?
- ...
- Es un fastidio que todos piensen lo mismo – dijo en un susurro para sí mismo – bueno... ¿piensan o no decirme donde encuentro al chico?
- En ... en su dormitorio – respondió muerta de miedo Petunia
- Y ... ¿eso es?
- Arriba, segunda habitación a la derecha.
- Perfecto ...¿me acompañan por favor?
Ante esta pregunta ambos temblaron.
- Como comprenderán no es de buena educación que un desconocido se paree por casa ajena ... así que ... por favor delante de mí – dijo con un suave movimiento de varita.
Estos se levantaron presurosos y lentamente fueron subiendo las escaleras seguidos de cerca por el muchacho trenzado.
Cuando llegaron al dormitorio y la puerta fue abierta la expresión de los Dursley perdió el poco color que aún tenían, mientras la cara del chico cambiaba a una de furia mal contenida.
En aquella pequeña habitación sobre un camastro que se aguantaba a duras penas había en cuerpo destrozado del supuesto salvador del mundo mágico, cuya respiración era apenas perceptible.
- ¡Que le habéis echo! – les recrimino el chico
- No ... nosotros no hemos sido – dijo retrocediendo Vernon.
- Eso lo veremos – dijo apuntándole con su varita - legilimens
Vernon comenzó a ver pasar su vida de forma precipitada justo hasta el momento en el que entro en esa misma habitación , recordó la brutal paliza que le propino a su sobrino y como este intentaba sin conseguirlo taparse algunas partes vitales.
- ¡Maldito desgraciado!... como pudiste hacerle eso, él no te hizo nada – dijo con voz fría como el hielo – tienes suerte que no tenga tiempo para "jugar" contigo.
El muchacho entro y se acerco a Harry. Se sentó en la cama al tiempo que sacaba una pequeña redoma de la mochila.
- Venga... despierta... enérvate.
Harry parpadeo rápidamente pero su mirada continuaba desenfocada.
- Mírame ... así muy bien, tranquilo no te haré nada, solo darte esto -. Dijo enseñándole el vial – te quitara algo de dolor.
El chico abrió lentamente la boca y bebió sin pensar lo que le estaban dando.
El joven trenzado recostó a Harry nuevamente en la cama para dejar que la poción surgiera efecto.
- No se preocupen Dursley no tendrán que soportar nuestra presencia por mucho mas tiempo, solo el necesario para recoger sus cosas y que ustedes me firmen "esto" – dijo extrayendo una carpeta donde se encontraban varios documentos.
- ¿Qué... que se supone que son esos papeles? –pregunto Petunia.
- Son documentos legales donde ambos afirman renunciar a la custodia legal de Harry James Potter Evans desde este momento y para siempre y para que se queden tranquilos les diré que es tan legal en el mundo muggle como en el mágico, así ... que si son tan amables de poner sus nombres completos y firmas correspondientes en los lugares indicados , me llevaré al chico y así no lo tendrán que ver jamás – les respondió dejando los documentos sobre la mesa junto con un bolígrafo para que ambos firmaran.
Los Dursley no dudaron ni un segundo en firmar en las diversas paginas que formaban el documento, tantas ganas tenían de deshacerse del chiquillo que no se tomaron la molestia de leer lo que estaban firmando.
Mientras los muggles firmaban contentos los papeles el trenzado recogía con un pase de varita todas las pertenencias de Potter, las cuales parecían saber de innombrables escondites.
Una vez todo recogida ( escoba incluida) lo redujo y lo coloco en su mochila.
- Bien comprobemos que todo sea correcto – dijo apuntando con su varita los documentos los cuales resplandecieron de color bermellón durante unos breves instantes – todo correcto, así que si no les importa me llevare a Potter ahora mismo.
El matrimonio ni tan siguiera lo miraron solo salieron del dormitorio con sonrisas de gran felicidad ... ( que ilusos que eran, ya que no sabrían lo que les esperaba dentro de dos días al recibir la visita de la orden del fénix encabezada por Dumblerdore ).
El trenzado cargo con suma facilidad y delicadeza al joven Gryffindor y con un suave PLOP desaparecieron de Privet Driver y de Inglaterra.
Cuando re-aparecieron lo hizo en el recibidor de un precioso apartamento con vistas al mar, con rapidez se dirigió hacía uno de los dormitorios donde deposito a Harry sobre la gran cama y con una palabras susurradas con rapidez este quedaba en ropa interior dejando ver el cuerpo amoratado del joven Potter.
Con movimientos precisos de varita comprobó el estado real del muchacho, confirmanda que tenia tres costillas rotas, una de ellas le estaba perforando un pulmón, un brazo dislocado y roto, al igual que una muñeca y una fisura en el fémur derecho sin contar la multitud de golpes y cortes que adornaban su pequeño cuerpo.
Unos pasos lo pusieron alerta y al girarse se encontró en el marco de la puerta a uno de sus compañeros de piso.
- Alex ¿de donde...¿Por dios que le ha pasado a este chico? – dijo aterrado al ver el estado lamentable de Harry
- Max ayúdame a curarle las heridas ... pero antes despierta al holgazán de tu novio y que haga algo con los papeles que tengo guardados en mi mochila.
- En seguida traigo el botiquín...
- Y también todas las pociones de curación que tengamos, hay que estabilizarlo o muy posiblemente no salga de esta.
Minutos más tarde el dormitorio parecía sacado de una de esas salas de curas intensivas que se podía sacar de cualquier hospital del mundo. Mientras Max y Alex se afanaban por estabilizar al pobre Gryffindor, en la sala de estar se encontraba Stan ( el novio de Max) comprobando los papeles traídos por Alex, confirmando que estos estaban en orden y eran completamente legales tanto para los muggles como para los magos.
Era bien entrada la mañana cuando dos muchachos entraban agotados a la cocina en busca de un poco de café y algo de comida.
- ¿Cómo se encuentra? – pregunto Stan al verlos entrar.
- Podría estar mejor ... pero se pondrá bien – respondió Max con una sonrisa.
- Hemos hecho todo lo posible, ahora tendremos que esperar a que despierte.
- Alex ... ¿estas seguro en continuar con todo esto? – pregunto Stan señalando la carpeta que tenía entre sus manos.
- Completamente ... no entiendo como es que Dumblerdore lo dejaba en esa "casa" con ... con esos ...
- Alex son su única familia.
- ¡Familia que no lo consideraba ni tan siquiera un ser humano por ser mago! – exclamo furioso el trenzado.
- ¡Alex basta! ... ahora todo estará bien, no tendrá que volver con ellos y podrá hacer lo que mejor le venga en gana.
- Tienes razón Stan, ahora soy su tutor ... bueno si el me acepta clara esta.
- Claro que te aceptará, dudo mucho que desee volver con esos bestias,
- Max tiene razón Alex no debes preocuparte por eso ... solo por su recuperación.
- Ambos tenéis razón ... solo deseo que no me tema cuando descubra mi pasado y quien es mi padre.
- Tú no eres tu padre Alexander y nos lo has demostrado una infinidad de veces.
Se quedaron en silencio durante unos minutos disfrutando de la tranquilidad de esa mañana soleada. Poco después cada uno se dispuso a hacer sus tareas, solo interrumpidas para comprobar el estado de su "invitado".
A la mañana siguiente la tranquilidad de la casa fue interrumpida por un lastimero gemido.
El primero en llegar a la habitación fue Max.
- Hola ... buenos días ¿cómo te encuentras?
- Eh .. bi ... bien – contestó con dificultad
- Mentirosillo . , pero tranquilo en poco tiempo estarás fresco como una rosa – le dijo Alex entrando con tranquilidad en la habitación.
- ¿ Nos co... conocemos?
- Si , fui yo quien te saco de "esa" casa
- ¿Por ...que? – preguntó entre-cortadamente.
- Porque sino llego a sacarte, en estos momentos la comunidad mágica estaría llorando tu muerte y Voldemort organizando una fiesta-orgía por todo lo alto.
- Gracias
- No hay de que
Harry hizo un intento de levantarse de la cama pero Max se lo impidió posando su mano sobre el pecho del joven.
- Será mejor que no te muevas, tus huesos ya están bien pero no voy a arriesgarme a que se te abra la herida de tu pulmón, así que ni se te ocurra levantarte ¿queda claro? – dijo Max de la misma forma en que hablaba la señora Pomfrey.
- Max no seas burro que no ves que necesita ir al baño ...¿o es que tú puedes aguantarte las ganas durante tres días?
- No... no tienes toda la razón .. lo siento - dijo dirigiéndose al joven Potter
Harry simplemente se sonrojó y negó con la cabeza como quitándole importancia.
- Deja que te ayude a levantarte – dijo Alex destapándolo y levantándolo sin dificultad de la cama.
- Yo ... yo puedo andar.
- Lo se pero apuesto lo que quieras que al poner los pies en el suelo te caes de bruces.
Harry no contesto ni replicó al hecho de ser levantado y llevado hasta el cuarto de baño.
- Cuando termines llámame no quiero que te esfuerces ... mañana estarás en perfecto estado, adolorido, pero bien -le dijo Alex.
- De acuerdo ... ahora te llamo – le respondió sonrojado el moreno.
"A ver pensemos... primero mi tío me da una paliza ... segundo envió a Hedwing a los Weasley para que me saquen de allí ... tercero el trenzado me da algo para el dolor ... cuarto despierto en una casa que no conozco con gente que por lo visto se preocupa por mi y el trenzado esta aquí también..."
- Ya estoy – dijo en voz alta después de lavarse las manos y tirar de la cadena.
El trenzado entró y lo volvió a levantar para llevarlo de vuelta a la cama.
- Por cierto ¿cómo te llamas?
- Oh perdona, menuda educación la mía ... mi nombre es Kyba Alexander Riddle , pero pocos me llaman por mi primer nombre, así que mejor me llamas Alexander o Alex... es mas corto ..
"Riddle ... Riddle ... oh dios ... no ... no puede ser..."
- Por tu expresión diría que conoces el apellido de Tom o en su caso de Voldemort.
- Tu ... tu eres...
- Por desgracia sí lo soy ... soy el hijo de Voldermort