VOLVI! Les pido un millón de disculpas, y prometo que la próxima les traigo el Cáp. 3 y 4 juntos, (como recompensa por hacerlos esperar tanto). Les aviso desde ya que este capítulo me quedó completamente malo, que no me gusto para nada… pero que lo tenía que dejar así.. Si algún día se me da por corregirlo.. quizás los rehaga (pero lo dudo)
Bueno, que lo disfruten… y como ya saben:

NINGUNO DE LOS PERSONAJES DE YU YU HAKUSHO (es decir, los que aparecen en este fanfic, exceptuando a Yumiko Setsuna y a Takeuchi) ME PERTENECEN A MI, SINO A EL SEÑOR TOGASHI. (Aunque Kurama si es mío… muahahha pero no lo creé sino que es mío porque es mío… ustedes entienden… ¬¬

SeGuNdO CaPíTuLo: Las primeras impresiones.

-Minamino. Tú que eres un joven tan amable, y como todos saben eres uno de los mejores estudiantes de esta secundaria... ¿No podrías hacerme el favor de poner a la señorita Setsuna al tanto de todo lo dado en clases?

Kurama intentaba con una fuerte mirada de suplica y balbuceos decirle a la profesora que no...

-Profesora, disculpe mi comportamiento, pero creo que esta siendo injusta con nosotros - Uno de los compañeros de Shuichi saltó a defenderse- Creo que todos nos merecemos una posibilidad

-Si, si... es cierto... siempre le toca a Minamino -acotaban el resto de los compañeros de clase.

-Bueno, bueno... silencio... ya fue suficiente. Tengo que aceptar que tienen razón. Takeuchi (N.A.: si, como Naoko XP) podrías ayudarla tu?

-Por supuesto profesora. -Shuichi se sentía completamente aliviado, y esperaba que la mañana se pasara rápido. No quería admitirlo, pero se sentía incomodo ante la presencia de esta joven… no estaba seguro del porque... pero así era

-Bueno, Setsuna. Toma asiento así comenzamos la clase.

-Si, gracias por todo profesora. -Yumiko sonrió y, luego de que la profesora asintió a su agradecimiento, caminó hacia su banco. Al pasar al lado de Shuichi, clavó su mirada en él, quien se estremeció y le devolvió la mirada.

-Que mirada extraña... Es casi como si buscara respuestas dentro de mi -pensó Kurama mientras desviaba la vista hacia otro punto- quizás este ofendida porque no acepte ayudarla... bueno, luego veré eso... ahora, mejor pongo atención en la clase.

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El día se hacia cada vez más largo para Kurama. Se sentía observado, quizás un poco amenazado por todo lo sucedido, tanto en la realidad, como en sus sueños, pero no podía dejar que esto lo inquietara.

Al fin... sonó la tan esperada campana. El día escolar se había terminado. Eso sí, aun tenia el entrenamiento con Kuwabara.

Shuichi, al no tener apuro por llegar a ningún lado, salía del colegio con toda la tranquilidad del mundo, como generalmente lo hacía, cuando escucho que alguien lo llamaba:

-Minamino-kun...? -Kurama se dio vuelta a ver quien emitía su nombre- Ese es tu apellido. ¿Cierto?

-Si, soy Shuichi Minamino -respondió con una sonrisa a la recién llegada joven- y tú eres Setsuna... ¿Correcto?

-Si, así es..-la joven sonrió también- Yumiko Setsuna -repitió mientras con una de sus manos tomaba todo su negro cabello y lo colocaba sobre su hombro izquierdo.

Por unos segundos Kurama se perdió entre esos finos cabellos... los recorrió desde la raíz hasta esos pequeños rulos que nacían en las puntas

-Minamino... Necesitaba pedirte disculpas.

-Disculpas? Por que?

-Por ponerte en una posición tan incómoda al dejar que la profesora te "insistiera" tanto para que me ayudaras.

-Oye, no tienes por que preocuparte Setsuna. La profesora siempre me hace eso. Es más, yo venia a pedirte disculpas, porque quizás te sentías ofendida por mi reacción, lamento no haber aceptado ayudarte.

-No te preocupes por eso. No hay problema. Comprendo que no quieras juntarte con la tonta chica nueva -dijo mientras bajaba su mirada al piso con tristeza.

-NO! Por favor, no me malinterpretes. Si pudiera te ayudaría con gusto, pero lamentablemente no dispongo de tanto tiempo libre. Además, en ningún momento pensé que fueras tonta, pareces ser muy atenta e inteligente. Participaste mucho en las clases, a pesar de ser tu primer día. -Dijo Kurama con toda sinceridad y luego miró su reloj.

-Gracias. Me alegra no haberte causado una mala primera impresión. -respondió, volviendo a relucir su bella sonrisa.-

-Ahora, si, voy a tener que irme. Como dije antes, mi día es bastante ocupado. Hasta mañana!

-Hasta mañana Minamino, y gracias de nuevo. - Ambos comenzaron a caminar hacia el mismo lugar. Dieron varios pasos, frenaron y se miraron.

-Vives para aquel lado? -preguntaron en coro y luego rieron.

- Si, tengo que caminar, hacia allá, varias cuadras. -dijo Kurama

-Yo también... bastantes cuadras hacia allá. Parece que compartiremos camino! -dijo alegremente mientras posaba sus ojos en Kurama.

-Así es -y siguieron caminando- Te mudaste hace poco? -Kurama quería romper el hielo para comenzar a conocerla mejor.

-Si, así es. Apenas llegué ayer a la ciudad, estoy quedándome en la casa de mis tíos, hasta que encuentre un lugar para vivir.

-Vas a vivir sola?

-Si... Es por decisión propia. -dijo con su sonrisa característica.- Tengo una muy buena relación con mis padres, y me pareció que lo mejor sería darles más tiempo para ellos dos, darles la posibilidad de preocuparse por otras cosas que no sea yo, así que decidí hacerme cargo de mi misma.

-Nunca había escuchado algo como eso... pero igualmente me alegro de que te lleves bien con tus padres. Yo también soy muy unido a mi madre. La ayudo en lo que me es posible, y ella hace lo mismo por mí.

-Si?... eso si que es raro. La mayoría de los chicos de tu edad haría hasta lo imposible por irse de casa.

-Lo se... -rió- ...pero yo siento que le debo la vida.

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Así el tiempo pasaba mientras ambos caminaban hacia sus destinos, conociéndose cada vez más. Luego de pasar un buen rato charlando, Kurama llegó a su "parada".

-Bueno, Setsuna... Fue un placer conversar contigo! -Dijo Kurama mientras se frenaba frente a una puerta.

-Oh... Así que… Esta es tu casa?

-Nop. Esta es la casa de uno de mis amigos. El es una de las personas que tengo que ayudar, razón por la cual no pude ayudarte a ti.

-Ah!. Bueno. Entonces nos vemos pronto!

-Hasta mañana. Espero que algún día repitamos esta caminata! - Kurama sonrió (otra vez)

-Yo también! -dijo devolviendo la sonrisa y alejándose - Yo también...

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Kurama llamó a la puerta de la casa de Kuwabara. Luego de unos minutos, su amigo había bajado, lo había saludado, y habían emprendido su camino hacia el bosque, como siempre hacían.

-Y Kurama..? Que sucedió con la chica de ayer? La encontraste?

-mmm... digamos que no...

-Como que "digamos que no"? Que quieres decir con eso?... La encontraste o no?

-No, no la encontré anoche en el bosque, pero... soñé con ella...

- Kurama! Recién la conoces y ya estas soñando cosas raras con ella? -dijo Kazuma en tono burlón

-KUWABARA! Estoy hablando enserio!... Tuve una pesadilla muy extraña... y muy real. Lo más raro es que hoy entró una nueva alumna a la clase, y es muy similar en apariencia a la chica que nos cruzamos en el bosque.

-Wow... eso si que es raro... cuéntame del sueño mientras llegamos si? -Kurama aceptó y dedicó su tiempo a explicarle todos los eventos ocurridos a Kazuma, quien parecía seguir buscando razones para no entrenar.

El entrenamiento pasó tan naturalmente como siempre. Después de largas horas de trabajo, volvieron a sus casas.

Shuichi cenó, y subió a su habitación. Tomo un baño, terminó sus tareas, se puso su pijama y se recostó. Por alguna extraña razón hoy estaba mucho más tranquilo que la noche anterior... ya no le preocupaba la joven del bosque, ni su pesadilla... no sabía como, pero su "intriga" había desaparecido.

En solo unos minutos, el sueño le había ganado.

Sonó el despertador, Shuichi se levantó y se dirigió al baño. El día parecía estar un poco oscuro, estaba nublado.

Se cepilló los dientes, tomó una ducha rápida (NA: que hombre higiénico), y luego volvió a su cuarto, sintiendo una presencia muy familiar para él.

-Buenos Días Hiei...- dijo el pelirrojo, envolviéndose en un toallón.- y ahora que te obligó a venir por aquí? Acaso por fin vas a confesarle a Yukina que eres su hermano?

-...hn... -expresó lanzando una de sus miradas cortantes a Kurama- cada día más gracioso, kitsune. Vine porque en el makai no hay nada para hacer...

-Me parece bien. Todavía no te has arrepentido...¿No? Vas a venir con nosotros al Bujutsukai?

-...Si... te repito, todo esta muy aburrido por allí abajo, por lo que me viene bien esta "excusa" para pelear.

-Bueno.. No se que piensas hacer, pero yo tengo que irme al colegio. Nunca llego tarde, y hoy no va a ser la primera vez -Dijo Kurama, quien, durante la charla había terminado de cambiarse, peinar su largo cabello rojo y tomar sus cosas.

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Ya en el colegio, Minamino y Setsuna se comportaban casi como amigos. Se saludaron al verse, trabajaban juntos en clase, y en los recreos conversaban juntos. El día pasó rápido, y al terminar, los dos jóvenes salieron juntos y caminaron a la par varias cuadras, hasta que tuvieron que separarse.

-Adiós! -Dijo Shuichi mientras se alejaba.

-El zorro tiene novia? -Una vez que se había separado lo suficiente de ella, Hiei aprovechó para "saludar" a Kurama.

-Muy gracioso Hiei, pero Setsuna es solo una compañera de clases.

-Lo que digas, Kurama... pero no creo que ella te vea solo como un compañero... -una sonrisa de diablito se planto en su cara mientras esperaba por la respuesta de su amigo

-Hiei, por favor! No han pasado ni dos días desde que nos conocimos... además... desde cuando tú haces chistes de ese tipo? -Kurama lo miró confundido

-Desde que tenemos a esta joven como autora de fanfic ¬¬

-Ah! casi lo olvido...

-Y bien... que pasa con esta ningen? Acaso tu también la vez como... algo más?

-Como dije antes... recién nos conocemos... no voy a negar que es una joven bella, que es muy inteligente y siempre sonríe... es muy considerada con los demás, y le encanta ayudar.

-Bueno, parece que caíste en la trampa... No te descuides Kurama... ya sabes lo estúpido que te pones cuando hay un humano de por medio... Ni se te ocurra distraerte en los combates... ¬¬

-Tu siempre tan comprensivo Hiei... ¬¬

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Pasaron semanas y semanas...

Kurama parecía haber olvidado todo el asunto de la chica del bosque y su pesadilla... Claro... ahora tenía otras cosas en las que mantener su mente ocupada. Por más extraño que pareciera, el no podía recordar los rasgos de esa misteriosa joven, ya había olvidado hasta el símbolo que ella llevaba impreso en su frente. Era algo inusual en Kurama el olvidar datos tan importantes como esos, pero a él no parecía preocuparle.

Muy diferente era la situación que tenia con Yumiko ahora... todos los días de clases ella y Kurama se saludaban...

Setsuna había conseguido, al fin, un departamento para ella sola, uno que, convenientemente, quedaba muy cerca de la casa de Kurama. De a poco se iban convirtiendo en buenos amigos. La mayoría de los trabajos grupales del colegio los hacían juntos, muchas compañeras de ellos estaban celosas de Yumiko, ya que ella era la única que mantenía una relación tan estrecha con el "codiciado" joven.

A estas alturas ya hasta salían a pasear juntos de vez en cuando... Shuichi no podía negarlo, tenía toda su atención centrada en ella... pero sabía que no podía decírselo, ya había tenido una mala experiencia unos años atrás, y no quería que, por segunda vez, pusieran en peligro a una joven por estar cerca de él.

Kurama tenía la casa entera para él. A causa de un fin de semana largo, tenían cuatro días libres que pensaba gastar con su madre en el campo, pero a Shiori la habían invitado a un viaje, y su hijo realmente quería que ella fuera y lo disfrutara, así que se quedó en casa.

Se sentía muy solo, a pesar de tener a sus amigos... a pesar de tener a Yumiko... Esa joven que en pocos meses se había ganado su confianza, aquella a la que el llamaba su amiga. La quería, no podía negarlo, pero tampoco podía decírselo...

-A veces, pero solo muy pocas veces, siento que todo sería más sencillo si me hubiera comportado mejor en el pasado... -pensaba Kurama... se encontraba solo, sentado junto a la ventana de su habitación, observando la fuerte lluvia que caía afuera.

- Si solo tuviera la seguridad de que nadie va a atacarla... se lo confesaría... le diría lo mucho que me agrada, como disfruto esas caminatas que tomamos juntos... No espero que me responda, solo necesito... decírselo...

Es duro sentirse solo aún estando rodeado de amigos, es tan difícil sobrellevar la soledad, que hasta puede hacer al más temible ladrón... llorar... los ojos de Kurama se humedecían al tiempo que en su mente se repetía:

-Estaré solo para siempre... Por qué?

Se secó esa pequeña lágrima que intentaba escaparse y bajo su mirada. Entonces pudo divisar una figura entre la fuerte tormenta... alguien se acercaba corriendo bajo la lluvia. Sonó el timbre y Kurama bajo.

Al abrir la puerta, una joven con una expresión de angustia en el rostro se lanzó a sus brazos

-Setsuna-kun! Que sucede? -pregunto Kurama sorprendido mientras cerraba la puerta con una suave patada.

-Minamino -dijo la joven entre sollozos- mis padres... mis padres... -comenzó a llorar desconsoladamente

-Todo estará bien... Estoy aquí para ti -Kurama la envolvió entre sus fuertes brazos y apoyo su cabeza en la de ella.

Luego de unos momentos, Yumiko cesó de llorar y levantó su cara para mirar a los ojos a Kurama

-Minamino... mis padres han sido asesinados. -Kurama no lograba salir de su asombro.

-Ven... pasa y siéntate en el sillón... Te prepararé un té.

Se retiró del lado de la joven y en unos minutos estaba de vuelta con el té, un toallón y unas ropas.

-Bebe esto, te hará bien.-dijo mientras le entregaba la taza de té y dejaba la ropa y el toallón sobre una mesita.- Si quieres hablarlo o desahogarte, sabes que estoy aquí para contenerte.

-Gracias... y si... Necesito que me ayudes a entender esto... Mis padres... ellos... murieron ahogados... pero estaban dentro de la casa. Nadie comprende que fue lo que sucedió. Es imposible.

-Ahogados dentro de su casa? -pensó- al igual que me sucedía en aquella pesadilla...

-Me siento muy culpable -las lagrimas de Yumiko se deslizaban por sus mejillas- quizás... si no me hubiera ido...

-No Yumiko... -la detuvo y secó sus lágrimas, dejando su mano en la mejilla de la joven- Si hubieras estado ahí, no hubieras podido hacer nada por tus padres... es más, quizás tu estarías en la misma situación que ellos ahora...

- Y que hay de malo en eso?... a nadie le importaría si yo no existiera...-Yumiko estaba entrando en una crisis de nervios.

-Como puedes decir eso? Sabes perfectamente que si tu hubieras muerto yo estaría destrozado ahora!... No podría soportar perderte! -Kurama emitió esas palabras sin tomar conciencia de lo que estaba diciendo. Abrió los ojos de par en par cuando notó lo que había echo y rápidamente sacó su mano de la mejilla de la chica.

-M-m... Minamino?... Que acabas de decir? -Yumiko no salía de su asombro.

-Eh... eh... -Kurama buscaba algo que lo ayudara a escapar de la situación...- Ahí te dejé un toallón para que te seques, y una remera y un pantalón míos... ponte cómoda... yo... tengo algo que hacer...

Yumiko no pudo ni siquiera negarse, ya que el pelirrojo se escapó de la habitación sin previo aviso y con toda la rapidez posible, así que comenzó a secarse.

Kurama, mientras tanto se dirigía a su habitación.

-Maldición! Yo y mis estúpidos instintos... Ella viene con problemas graves y yo, en ves de ayudarla, le complico más las cosas. Como pude ser tan inconsciente como para decirle eso? ... -se decía a si mismo- No puedo dejarla sola en un momento como este, pero... Como voy a hacer para mirarla a la cara?

Al llegar a su habitación, tomó algo de ropa para usar como pijama y su cepillo de dientes.

-Ejem -aclaró su garganta, mientras golpeaba la puerta del living- Setsuna, Puedo pasar?

-Si... adelante...

-Permiso, viene a decirte que...-Kurama quedo atontado frente a la imagen d la joven, que ya se había adueñado de las ropas de Shuichi. Le quedaban un poco grandes, pero a ella todo le lucía bien. La remera celeste, le quedaba caída de uno de sus hombros, y el color hacía relucir sus ojos. El joggin, anclado a su cadera, dejaba ver su ombligo, y le daba una apariencia casi angelical.

-A decirme... que...? -miraba a Kurama con cara de confusión, casi hasta le causaba gracia ver como él se perdía en ella. De a poco se fue acercando al joven y luego le pregunto:

-Minamino...? Te encuentras bien?

-Eh..? Eh.. SI! Perdón... venia a decirte que te quedes en casa. Puedes usar mi habitación, y yo dormiré en la de mi madre.

-Gracias... Realmente no quería tener que volver a mi departamento. Me hubiera sentido muy sola. - se acercó más a él y lo abrazó. Kurama no sabía como reaccionar. Se quedó congelado- Sabes...? Hoy por primera vez me llamaste Yumiko.

-Oh! Discúlpame! -dijo casi con vergüenza.

-No! Me gustó que me llamaras por mi nombre...

-Entonces... tú vas a tener que llamarme Shuichi! -respondió el joven con una sonrisa, mientras, al fin, la abrazaba.

-SI! Por supuesto que lo haré! -y lo abrazó con más fuerza y ternura.- ...Shuichi...? Lo que dijiste antes... tu realmente... me quieres como algo más que una amiga?

-...N--n-no se que decirte...

-Vamos Shuichi... no des vueltas, quiero que me digas la verdad, sea la que sea.. Por Favor!

Kurama se sentía entre la espada y la pared. No podía mentirle y menos en este momento, pero esa verdad podría ponerla en peligro... o no. No necesariamente tenían que atacarla. Quizás tenía una oportunidad de ser feliz...

Se tomo su tiempo, pensó con cuidado, sin quitar sus ojos de su amiga, y luego... tomo una decisión.

CONTINUARÁ!

No me maten por cortarlo ahí! Jejejejje espero que lo hayan disfrutado!

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Les agradezco infinitamente a: Luciko y a Mã®ïãm¤Hïwãtã®ï¤Ð뤥£øµëµ por dejarme reviews! MUCHAS GRACIAS!