Improfanfic presenta...


MAGICAL GIRL HUNTERS


Un Improfanfic creado e iniciado por Aaron Shattuck.


Episodio 4: la Vida es una Perra, y yo también...


Escrito por Colin Gales


Gracias a Ethan Forsythe por el "Necronomicute"


Revisado por los perros rabiosos


Traducido por ROMeo y corregido por Montalve



 Me gustaría poder decirles que llegué en mi oficina y me sente
a pensar de forma maquiavelica en un plan para vengarme, pero la verdad es que
estube distraído, pues otra trampa me esperaba en la puerta.

 Si les dijera que era Itami el que me estaba esperando pacientemente
podrían llegar a creer que estaba realmente siendo engañado por esa cosa,
pero francamente, aun sin saber que él estaba en una cama del hospital,
haciendo su mejor imitación de un objeto inanimado, cualquiera con la mitad
del cerebro de un erizo de mar con retraso mental habría sido capaz de catalogar
a esta cosa en el criterio de "no-exactamente-humano". Estaba de pie algo
desequilibrado, vistiendo una gabardina... tenía una peluca negra
sobre su cabeza, y bajo eso podía ver una pésima máscara de plástico
cuya área de la mandíbula estaba cortada para que la "boca" pudiera
aparentar movimiento.

 La -mejor- parte, sin embargo, era el patéticamente escrito
pedazo de cartón que colgaba de sus hombros con ayuda de un mecate, el cual
decía "yo Itami".

 Dejé salir un suspiro al mirarlo desde el vestíbulo, y después
me dirigí hacia la puerta.

 "Hey Itami", le dije alegremente, "Ya todo esta en su lugar?"

 El Itami-oide se tambaló un poco y una voz profunda borboteó,
"yo sanado, si".

 Abrí la puerta y entré, él me siguió. Bueno al menos se movía
como Itami.

 Tomando un respiro, caminé hacía la apartada ventana, la abrí, y
grité dramáticamente, "Dios mio! Un camión de desechos lleno de carne
-cruda- se ha volcado en la calle de abajo!!".

 Haciéndome al lado, la criatura asomó su torso por la ventana.
"¿Dónde?? --¿Dónde?? ¡Mi querer ver!"

 Sí, yo le dí un puntapié, y sí, cayó por ventana. Lo miré 
desplomarse al pavimento dónde estalló en una docena de pequeños lagartos
que se escabulleron por una cloaca, al tiempo que algunos de ellos
hacian señas obscenas en mi dirección.

 Ahora, pensé, es buen momento para planear mi venganza...
pero ahora empezaron a tocar la puerta.

 Las cosas solo se estaban poniendo aun mejor. Era Pretty Marshal Rose,
o más bien, la nueve añera a la que le había sido concedida la habilidad
de convertirse en Pretty Marshal Rose. Estaba en ropas de civil, y no
la habría reconocido de no ser por que vislumbré la cabeza del
cachorro rosa asomándose en una esquina abajo del vestíbulo...

 Por un segundo, pensé en agarrarla y echarla por la ventana
junto con el Itami-oide --resolviendo así taaaaantos problemas potenciales--
pero ella no estaba en modo de -niña Mágica- , además, nadie nos había
contratado para deshacerse de ella todavía -- no tiene caso trabajarle
gratis al hampa sobrenatural.

 "¿Te puedo ayudar en algo?" Le pregunté. Sus ojos se paseaban de
un lado a otro, y susurró, "yo oí -- yo oí a alguien decir..." 
hizo una pausa, y bajó su voz a un rechinido diminuto, "Que ustedes
*matan* gente".

 "Eso es correcto, matamos cierto tipo de personas", le dije en
tono de conversacion, mismo que la hizo retroceder un poco. Levantando
mi voz sólo un poco continué --"¿Por qué? ¿Hay alguien que quieras
*muerto*?".

 Ella se encogió como si se hubiera conectado a un enchufe de
la pared. "¡SSSSSHHHH!!!!" Ella miró en la dirección del cachorro.
"¿Podemos... hablar adentro?"

 Encogiéndome de hombros, me hice a un lado y le permití entrar, y
entonces cerré la puerta.

 "¿Entonces?" pregunté cuando ella se hubo sentado. No podía esperar
para oír --esto--.

 Ella me miró en forma conspiratoria. "Tengo que, um, acabar con
un par de personas... pero no sé si esté en condición todavía... así
que pensé que quizás podría contratar a alguien para hacerlo por mí, sólo
por si acaso".

 Bueno ¡Pero que cosa más perversa! ¡Contratando matones para
hacer su trabajo! De no ser yo no un mat.. --quize decir--, cazador de
niñas mágicas, estaría sorprendido pero, en las condiciones actuales,
tan solo lo enontré ilarante.

 "Bien, quizá podamos ayudarte, quizás no... nosotros somos por
decirlo asiiiiiii... --especialistas--" yo le dije, suprimiendo una
leve risa, "pero quizá si me dices de quién se trata, yo podría decirte
si podemos ayudar".

 "De acuerdo-- lo tengo aquí apuntado..." ella buscó en una
cajita, sacó un trozo de papel y me lo dió. Desplegándolo, leí en
letras azules de bolígrafo:

 "destruye a los cazadores de niñas magikas"

 Miré la puerta de la oficina y en ella el letrero en la ventana
el cual estaba invertido de este lado, pero en el otro habría sido claro
a cualquiera estando de pie delante de él que decía CAZADORES de NIÑAS MÁGICAS.

 Ooookay.

 Varios escenarios revolotearon por mi cabeza --estafarle a la
niña un fajo de billetes, hacerla caminar solita hacia su destrucción,
usándola para llegar a Mashi, cualquier número de cosas... oh diablos!
Estaba demasiado cansado.

 "Mira niña", le dije, mientras abría la puerta y apuntaba a las
letras, "nosotros *somos* los Cazadores de niñas mágicas con quienes
tienes que acabar".

 "Pero--" ella dijo, en una voz desconcertada," Eso tiene un "C"
en el letrero, no una "K"."

 "¡Es lo mismo!" Le ladré, perdiendo mi paciencia. "¡TU cometiste
un error! TU has sido asignada para *DESTRUIRNOS*! Sabía que debía haber
escrito ese rotulo en Japonés, pero -nooooo-, el inglés esta -in---!".

 "oh..." su voz continuó, y se sentó allí por un segundo.
Entonces se puso erguida de nuevo --"Digamoooos-- si les pago un
*montón*, se matarían solos?"

 "¡NO! ¡Ahora *LARGO*!"

 Su labio inferior comenzó a temblar, y empezó a jimotear al
brincar de la silla y salir al vestíbulo. Un par de lágrimas corrieron
por sus mejillas al pasarme de largo, y se volvió mirándome em forma
suplicante...

 "¿Por favooooooooor?" Ella engatusó, su voz rompiéndose en
emoción... 

 "¡NO!"

 Todos rastro de dolor dejó su rostro.

 "¡BIEN!" Ella estampó su pie. "Tan solo les estaba dando una
oportunidad de irse sin dolor!" Sus ojos reluciendo con malicia pura.
"Pero de acuerdo, quieren hacerlo del modo difícil, bien! La próxima vez que los
vea los chamuscaré en el -incinerador-del-mal-y-destructor-todo-doloroso
fuego del *Amor Puro* de mi corazón!"

 Ella caminó fuera del vestíbulo, haciendo una pausa para dirigir
una patada al cachorro rosa, él cual logro esquivarla precipitadamente.
"¡Te dije que no funcionaría!"

 Suspiré. Por lo menos ella no se transformó aquí mismo. No 
estaba seguro de haber podido manejarlo en ese momento, estaba tan
cansado.

 Y además aun tenía una venganza que planear. Me senté en la silla, me
apoyé en el escritorio, y empezé a intrigar...

* * * * * * * * * * * * 

 De acuerdo, tan solo me dormí.

 Pero eso significaba que estaría descansado y agudo al llegar la
mañana, listo para todo. Desde que Mashihaisha Ultra llegó y nos 
contrató para eliminar a Capitán Kawaii, todo había estado saliendo
mal (quitando todo el dinero que robe), y eso iba a tener que
cambiar. Ahora. Tenía algunas ideas, pero primero tendría que ver
cómo seguía Itami.

 Saqué algo de ropa limpia del armario, cepillé mi cabello,
chequé el espejo --suficiente. Metie de nuevo la mano en el armario y
saqué una robusta robusta.

 Respire profundo.

 Tiempo de patear traseros.

* * * * * * * * * * * * * * * *

 Itami se veía mejor. Bien, realmente no podría decir siquiera si
se había movido desde que lo dejé. La única cosa que mostraba señales de
vida en el cuarto era un quinteto de doctores que recorrían lo recorrian,
picándolo de vez en cuando.

 "Un espécimen perfecto..." "Podríamos hacerlo un gran cyborg..."
"¡No, no, una bio-arma!" "¡Aumentaremos su potencial psiquico!"

 Al verme, los doctores se esparcieron y salieron. Observé a
Itami. Él yacía ahí, mirando fijamente al techo de forma inexpresiva. Lo
ponderé un segundo, entonces, jugué una corazonada.

 "¿Los doctores trabajaron en ti?" Pregunté.

 "S".

 "¿Dormiste bien?"

 "S".

 "Bien, hora de matar cosas. Sacudete y vamonos".

 Él se sentó, giró sus pies hacia el suelo, y se estiró. El 
cuarto se llenó con crujidos huecos y tronidos. Itami resopló, y
se paró, dirigiéndose a su ropa.

 Ése es mi muchacho. Itami no era alguien que permitiera que algo
como dolor y lesiones lo detuviera.

* * * * * * * * * * * * * * * * *

 Salimos por el frente del hospital, y nos fuimos a otra parte.
Había estado esperando que Pretty Marshal Rose hiciera su aparición en
cualquier momento desde nuestra discusión de anoche. Por qué ella no
intentó acabarme al salir de la oficina, yo estaba más allá de mí --después
de todo, ella sabía donde estaba-- pero estaba seguro que eventualmente
las tres canícas que fungen como su cerebro harían click y vendría
buscándonos. Tocando con el codo a Itami, lo llevé hasta una banca y
abrí la maleta.

 Sin una palabra, echamos mano y empezamos a distribuir las armas.
Pistolas de todo tipo, cuchillos, un par de granadas, cartuchos extra
... y para mí, una Uzi totalmente automática. Después de ordenarlas,
empezamos a esconderlas dentro de nuestras respectivas personas.
Si eres -realmente- diestro, puedes esconder un -buen- de armas.

 "Yo me siento mejor ahora. -Mucho- más seguro. ¿Tu que tal 
Itami?"

 "Estoy bien".

 ¡Wow!. Realmente se debe de haber animado!

 "Bien entonces. Listos --veo que la diversión esta por empezar."

 Itami giró sus ojos y vio lo que yo --el cachorro flourescente
por el calle esforzándose por -no- ser notado. Claro, su color rosa
lo hacía destacar como 30 luces de Kleig estuvieran enfocadas sobre él.
Nosotros, sin embargo, decidimos ignorarlo, nos pusimos de pie y nos fuimos,
dejando la balija en la banca.

 El cachorro nos siguió a distancia mientras caminabamos
casualmente. Eventualmente, nos dirigimos a una sección menos 
concurrida de la ciudad, llena de fábricas y callejones en deshuso,
y nos detuvimos en una sección de la calle que simplemente se diseñó para
organicar emboscadas --callejones oscuros en todas direcciones...

 "¿Entonces que, compañero?" dije en un tono evidentemente
fuerte y exagerado. "Pienso que nos están siguiendo-- nos escondemos
en un callejón?"

 "Lo que sea". Itami murmuró.

 "¿Qué?" dije, aun más ruidosamente. "Deberíamos escondernos en
el callejón con el resplandor rosa radiando de él? ¡Perfecto!
¡Hagamoslo!"

 Caminamos rápidamente hacia el callejón de dónde la luz
brillaba, desenfundando nuestras armas mientras lo hacíamos. Al dar la
vuelta a la esquina, comenzamos a disparar.

 Escuchamos un gruñido atrás al tiempo que el cachorro comprendió
lo que estaba pasando, y otro grito más adelante mientras Pretty
Marshal Rose arrebatadamente erguía una barrera de fuerza. Desde luego,
nosotros abrimos fuego antes de hallarla en medio de ese brillante 
nimbo rosa, pero nos estábamos aproximando lo suficiente para sabotear
cualquier emboscada que hubiera estado planeando.

 Nuestra puntería mejoró una vez que la vimos, pero ese escudo
le impidió convertirse en colador instantaneo. Seguimos disparando a
modo de manternerla demasiado ocupada para bajar el escudo y montar un
ataque.

 Entonces el cachorro comenzó a gatear dando la vuelta a la
esquina.

 "No esta vez" murmuré, y actuando como uno solo, Itami y yo nos
giramos y abrimos fuego en la otra dirección.

 Pretty Marshal Rose gritó a voz en cuello al tiempo que su
compañero explotó en una nube de rocío rosa y rojo.

 Nos dimos vuelta de nuevo, pero ella ya había dejado caer su
escudo, y estaba apuntando su vara en nuestra dirección. Empezamos a
dispar de nuevo, pero nos tuvimos que mover de la trayectoria de la
descarga de color pastel que nos pasó rozando antes de estrellarse en
un edificio distante. Unas balas razgaron su fuku, pero estaba ilesa, y
seguía vertiendo energía hacia nosotros.

 "¡Maldición!" gruñí al tiempo de retroceder, "Tiempo de correr
nuevamente--"

 Itami, sin embargo, había sacado una granada de su bolsillo, y
la estaba mirando fijamente. Cuando capté que la granada carecía de
espoleta, el ya la estaba lanzando hacía callejón con un movimiento
rápido. Corrimos y nos lanzarmos al suelo a la vuelta de la esquina.

 Porciones grandes de pavimento, edificio y otras ruinas salieron
del callejón, pero ninguno parecía pedazos de nueve añera, de modo que
asumí que ella todavía estaba viva. Lo cual fue confirmado segundos 
después por más energía rosa energía disolviendo grandes porciones de
nuestros alrededores.

 Comenzamos a movernos calle abajo, pero una saeta atravezó
limpiamente el edificio junto al que estabamos, cortándonos la retirada.
Varios más atravezaron el edificio, y fué cuando nos dimos cuenta de 
que estaba disparando a ciegas, esperando un golpe de suerte. El
edificio no había sido diseñado para resistir la tensión de tener la mitad de
su apoyo estructural vaporizado, por lo que complacientemente se
derrumbó, y rociando todas las direcciones con objetos pesados
nos derribo a ambos. Esperaba que le estubiera causando a Pretty
Marshal Rose alguna forma equivalente de estorbo...

 ... Pero, mientras luchabamos por ponernos de pie, la vimos de
pie, con la vara apuntando hacía nosotros y chispeando con poder.

 "¡El amor puro de mi alma los enviará al tormento eterno!" Ella
rechinó de rabia. Obviamente habían desperdiciado el tiempo en enseñarle
frases y canciones lindas. El poder de la vara se intensificó, llegando a
tope--.

 --Y repentinamente se disipó cuando un fuerte crack hizo eco
por toda la calle. Algo había golpeado la mano de la niña, mandando a
volar su vara. Una voz femenina sonó --"oh agente del cute-- escuchame
fuerte --escucha mi voz-- ¡Y largate o *MUERE*!"

 Oh, no. Conozco esa voz-- y su canción ESTÚPIDA.

 Yep, allí estaba. En el mismo atuendo que la mayoría de las niñas
mágicas-- Las botas, los guantes, la exesivamente-corta falda, etc,
etc-- sólo con unas cuantas (y grandes) diferencias. 1: en lugar de los
acostumbrados colores de ch*ngame-las-pupilas cítricos o pastel, su
equipo era completamente negro. 2: No había tela aquí, sólo vinil y
cuero. 3: No tenía ninguna vara u otra arma linda-- simplemente un gran
látigo de cuero que estaba preparando nuevamente para otro ataque a
Pretty Marshal Rose.

 Era definitivamente, a mi mortificación, Sailor H. Well, bueno al
por lo menos desde abajo donde estaba, tenía una vista bastante buena de sus
bragas de vinil negro.

 H era una de las adolescentes (afortunadamente, por el bien de
la cordura de la audiencia). Alta y rubia, se impuso sobre la nueve 
añera --y cuando quería, ella podía proyectar un aura bastante ominiosa.
Pretty Marshal Rose se agachó y retrocedido... Sailor H avanzó, la
conocía lo suficiente como para saber que una vez que alcanzara a la pequeña
mequetrefe habría sangre. Esto normalmente estaría bien, pero se me
había ocurrido una idea. Me puse de pie.

 "Hey, silbidos --que bueno verte de nuevo en la ciudad".

 Al sonido de mi voz, ella se puso rígida y se dió la vuelta.
"¡TU!! De haber sabido que te estaba salvando a -TI- lo habría 
reconsiderado! Pero estando aquí...--" Ella giró la mirada ligeramente
--y de pronto, se ablandó. "Holaaaaaa, Itami", ella dijo con una voz
llena de morbo implícito.

 Sailor H era la única persona que conozco que puede hacer
sonrojar a Itami (o mostrar cualquier reacción, para ese caso). Y éste
era más o menos el caso, --él meramente gruñó "hola" al ponerse de pie.

 Esto fué suficiente distracción para permitirle a Pretty Marshal
Rose escurrirse hacía donde estaba su varita. Sin embargo, al agacharse
a recogerla, el movimiento cayó en el rabillo del ojo de Sailor H, y
esta se giró junto con su látigo. H estaba demasiado lejos para hacer
mucho daño, pero al agacharse Rose la punta del látigo la golpeó
justo atrás con un fuerte SNAP! --Marshal Rose gritó y corrió
vara en mano llorando por la calle...

 Sailor H comenzó a seguirla pero la detuve-- "alto", dije--
"dejala que nos rebase un poco. Si lo hacemos bien, pienso que nos
llevará a la 'fuente' de estas niñas mágicas..." *y podre cobrarme
una deuda o dos en el proceso* pensé para mi mismo...

 "¿En serio?" Su tono se heló nuevamente. "¿Y que te hace pensar
que tu estúpido plan tiene alguna oportunidad de funcionar? Y cómo
rayos es que sabes sobre esta supuesta 'fuente', tú enfermo, bueno
para..."

 "De hecho", le interrumpí, "la mayoría del plan lo fraguó
Itami...".

 "Oh..." ella suspiró, como derritiéndose. "Continúa..."

 Itami me dedicó una mirada sombría, pero en todo caso, TODAS sus
miradas son algo sombrías, de modo que simplemente me limité a poner a
H al corriente del asunto, sustituyendome por Itami en las partes de
acción. Mientras hablabamos, también rastreabamos a Pretty Marshal Rose
a distancia. Me parecía que teníamos por el momento un aliado, aunque
uno bastante inestable. 

* * * * * * * * * * * * * * *

 Supongo me debo tomar un momento para explicarles sobre Sailor
H, aunque realmente nada podría explicarla completamente... en todo
caso, ella es parte de ese .1% que detiene nuestra taza de éxito de ser
100%.

 Cuando nos conocimos por primera vez, ella era tan solo otra
niña mágica, parte de un equipo, de hecho. Si yo recuerdo correctamente,
el motiff del equipo era la fruta... si eso es, --Las Guerreras del
del Cítrico Místico.

 Itami y yo habíamos sido contratados para eliminarlas, y para
no hacérselas larga, nos presentamos en su puerta un día para hacer
simplemente eso. Ése fué un día duro. Allí habían nueve o diez niñas,
cada una con su propia pequeña mascota. Nadie sabía en ese momento
que el púrpura y completamente adorable mapache sostenida por Guerrera
Frambuesa (ya sé, ya sé, las frambuesas no son exactamente -cítricos-)
estaba infectado hasta las patas con el virus de la rabia.

 Tener un familiar enfermo y próximo a enloquecer tuvo un efecto
peculiar en esta Guerrera del cítrico --ella realmente no era del
tipo gung-ho destructor del mal como sus cofrades, tampoco le
estremecía mucho la idea de arriesgar su vida en batalla contra los
demonios.

 De modo que cuando irrumpimos en su Pow-wow Confidencial Contra
el Mal que estaban teniendo, Guerrera Frambuesa se heló en el centro
del cuarto, los ojos abiertos y horrorizada ante la matanza desplegada
alrededor de ella. Las descargas de rayos de agradable aroma crujían
sobre cada pulgada del Templo Sagrado (lease: el parque público) que
eran su cuartel general. Entretanto, Itami y yo servíamos rápidamente
raciones de metal y explosivos.

 Yo estaba descargando mi cargador en una gorjeante Guerrera
Tangerine, mientras Itami cortaba la garganta de Guerrera Fresa,
cuando el mapache purpura se movió del regazo de la ahora helada
Frambuesa y trepó a su blusa. Agarrando su cuello en sus pequeñas y
adorables garras, empezó a regañarla con su almibarado rechinido de 
voz...

 "¡Reacciona pequeña *perra*! ¡Tus compañeras Guerreras están
siendo asesinadas y tu solo te quedas allí! ¿Tengo acaso que 
abofetearte? ¡Vaca inmunda!" El animal ahora estaba espumando por la
boca, mirandola fija y ferozmente con sus preciosos ojos vidriosos 
--"¿Tengo que hacer todo yo, desertora de primera!?? Yo les mostraré
-- Les mostraré a TODOS! --sobre todo a TI, MUJERZUELA OXIGENADA!!--"

 Habiendo agotado los blancos moviles por el momento, me giré
y abrí fuego contra la fuente de la irritación de mis orejas, la mitad
de aquella frenética criatura se movió repentinamente varios pies a la
izquierda, mientras el resto de él dio volteretas fuera del frente de
Frambuesa, golpeando el suelo con un húmedo splat. Ah, las
maravillosas expansivas...

 Yo estaba listo para una batalla, pero ella simplemente estaba
de pie y osciló un poco, cuando yo miré su rostro, era obvio que toda
la experiencia había hecho algo MUY Malo al espacio detrás de sus ojos.

 Había visto la misma expresión en perros que habían sido
atropellados en la calle, y levanté mi arma, menos por deseo de
completar el contrato que el de sacar a la pobre criatura fuera de su
miseria-- pero en ese momento ella regresó a la vida, y en un flash de
luz púrpura, voló a través de los árboles, y fuera de nuestra vista.

 Suspirando, recorrí el parque hacia dónde Itami estaba luchando
con con la última de ellas. Guerrera kiwi parecía haber perdido su vara
o cetro o lo que fuera que ella usara, pero Itami también estaba sin
arma o cuchillo.

 "Itami", Regañé. " Realmente, estoy decepcionado. ¿Necesitas
ayuda?"

 Levanté mi arma en forma de ayuda, sacandole de paso un grito
aterrorizado a kiwi, pero Itami solo cambió la forma de sujetarla y
dijo, "Nah. Solo me mantenia ocupado mientras esperaba que terminaras
all". Dicho eso, hizo un movimiento rápido y rompió el cuello de
guerrera kiwi. Ella se retorció y después calló lánguida, en lo que el
se puso se pie y se sacudió el polvo.

 Dejamos el área, y eso fué lo último que vi de Guerrera
frambuesa... pero la muchacha en la que se convirtió apareció algunos
meses más tarde.

 Otro contrato nos había puesto en la búsqueda de Mimi Neko, otro
personaje peligroso con el factor de lindura agregado de tener un par
de orejas de gato y una cola apareciéndole cuando ella se transformaba.
Ella era su propia linda mascota, y merecía morir horriblemente.

 La teníamos a la carrera, persiguiéndola por una calle mientras
nos disparaba ráfagas borrosas de radiación con su bastón gatuno
(o lo que fuese). De alguna manera se nos escurrió, y estábamos checando
basureros y otros posibles escodites, cuando oímos un ruidoso aullido en la distancia.

 Lanzandonos calle abajo, nos escondimos en un callejón y vimos
el objeto de nuestra búsqueda que flotaba aparentemente a unos diez pies
sobre el suelo. Un segundo vistazo reveló que en realidad estaba
-colgando- de un tramo de lo que parecía ser una cuerda que había sido
enrollada alrededor de su cuello. Un tercer vistazo reveló la fuente
probable del aullido --alguien había tomado el bastón gatuno de Mimi
y le había hecho algo a ella que debió haber sido extremadamente
incómodo. Un cuarto vistazo permitió que nuestras miradas viajaran por
la longitud de cuerda del que ella colgaba para ver a la persona que
lo sostenía...

 "Soy Sailor H!" la figura declaró. "y declaro la guerra a lo
*lindo*!" No la reconocí mientras estaba parada allí en la salida de
incendios-- francamente, todo lo que noté eran las bragas negras de
vinil-- y después me sacudí y levanté mi arma. Quienquiera que fuera,
ella era otra niña mágica con intenciones obviamente asesinas, y en ese
entonces, no me sentía como para correr riezgos... de modo que disparé
unas cuatro o cinco balas.

 La muchacha vestida de negro gritó y saltó de la salida de 
incendios-- un giro de muñeca y el látigo dejó el cuello de Mimi,
dejando caer su cuerpo al suelo. Juro que H puso un toque Inglés a ese
giro, ya que el cadaver de Mimi vino a caerme justo a mi, arruinando mi
tiró. Empujé el cuerpo y recuperé mi postura al tiempo que Sailor H
volaba lejos de nuestra vista.

 "¿Por que no le disparaste, Itami?" Le refunfuñé mientras me
enderezaba el cuello de la camisa.

 "No era parte del contrato" murmuró.

 Y bueno, no estuvo tan mal. Tomamos el crédito de la muerte y
nos pagaron, pero tenía una corazonada de que volveríamos a ver más de
está "Sailor H".

 Y lo hicimos, varias veces. Eventualmente armé las piezas del
rompecabezas de que había pasado con la antiguamente Guerrera Frambuesa
--aparentemente después de nuestro primer encuentro, ella se llenó de
intensos sentimientos de duda y auto-aberración. Pero para su crédito,
en vez de dejarse arrastrar hasta la autodestrucción, eventualmente lo
fué canalizando en un ligeramente más saludable odio contra aquellas
como ella --otras niñas mágicas. De modo que, después de un tiempo
vagando por varios lugares de dudoso prestigio, ella decidió hacer una
revisión de su imagen y comenzar una matanza de niñas mágicas. Les
mueve el corazón ¿Verdád?.

 En todo caso, nuestros encuentros subsecuentes fueron ligeramente
más cordiales --aunque ella nunca me perdonará el haber intentado
dispararle el primer par de veces. Sin embargo, ella se encariñó con
Itami --siempre dije que ese look melancólico y actitud taciturna eran
justo lo ideal para atraer mujeres (perturbadas), y por consecuencia,
me tolera por el bien de Itami. Menos mal, por cierto, que ya no arroja
rayos de frambuesa, pero de igual forma ahora levanta sin esfuerzo 120
kilos y la he visto agujerar acero blindado con ese látigo. Es un verdadero
dolor de cabeza, sin embargo, desde que esto lo hace como una cruzada
personal, ella no nos pide ni dinero ni crédito por las muertes --cosas
que tanto Itami como yo estamos perfectamente dispuestos a aceptar
al trabajar con ella.

****************

 De cualquier modo, seguimos a Pretty Mashral Rose hasta un
jardín rocoso algo aislado. Y mientras observabamos desde nuestros
escondites, la muchacha se arrodilló delante de un pequeño arreglo de
piedras, y comenzó a cantar suavemente. No pude interpretarlo del todo,
pero parecía ser una súplica a fuerzas misticas del bien.

 Los minutos pasaron... repentinamente, hubo un crujido junto a
mí. Sailor H se acercó, haciendose tan delgada como podía para caber
detrás del arbusto junto al que estaba...

 "Solo recordándote", ella susurró, "Ella es MÍA".

 "Está bien por mí -- un freebie menos", susurré detrás, 
"Solo espera hasta que ella termine de comunicarse con lo que sea
con lo que se esté intentando comunicarse, ok?"

 "Bien". Con éso, ella se trasladó silenciosamente a un arbusto
delante del mío y se arrodilló. Mientras se inclinaba, su falda
se subió...

 Panties. Rayos, iba a tener que tener una -charla- con Itami.
Tener citas es algo dificil cuando estás en una línea de trabajo tan
misógina como la nuestra (imagínense --¿Qué sucede cuando te preguntan
"pues, ¿A que te dedicas?")... y me supusé que necesitaría
descubrir a ciencia cierta de Itami si A) Siquiera le gustan realmente
las mujeres y B)Si alguna vez ha intentado un movimiento con H...
porque a estas alturas, estaba casi dispuesto a arriesgar daño
corporal serio para hacer el intento yo mismo.

 Mi atención fue desviada (afortunadamente) por un resplandor
repentino de las piedras, y un ruido de chisporroteo -- una voz onduló
a través del aire...

 "SÍ, SÍ, ¿QUE SUCEDE, MARSHAL ROSE? ¿NO SABES QUE ÉSTA ES LA
HORA DE SIESTA VESPERTINA DE LAS FUERZAS DEL BIEN?"

 "Lo siento", gimoteó la muchacha, "Pero esos individuos mataron
a mi ayudante y entonces esta señora salió y creo que rompió mi varita
y y y no sé qué hacer..."

 Con el rabillo del mi ojo, vi a H levantarse y caminar, en
cunclillas alrededor de algunos arbustos, acercándose a la muchacha.

 "OH, ESTÁ BIEN, ESTÁ BIEN", se quejó la voz, "ABRIREMOS EL PORTAL
Y TE TRANSPORTAREMOS A, uh, LAS TIERRAS DEL PARAÍSO OTRA VEZ Y TE
ENCONTRAREMOS UN AYUDANTE NUEVO Y ARREGLAREMOS TU VARITA Y TODO ESO
--PERO ESTAMOS ALGO OCUPADOS POR EL MOMENTO, ASÍ QUE CUANDO LLEGUES,
QUÉDATE EN EL PASILLO HASTA QUE TE LLAMEMOS, SI?"

 "Sí, sí!" La muchacha respiraba con impaciencia. "MUUUUUCHAS
gracias!" El resplandor de las piedras descoloró, pero ella siguió
hablando-- "-Sabía- que serían gentiles y buenos y verían por mí y
me protegerían..."

 Repentinamente, un aro de cuero cayó sobre la cabeza de
Marshal Rose y se apretó alrededor de su garganta. Sailor H se
enderezó jalando a la muchacha hacia arriba, manteniendo el nudo
del látigo firme detrás de su nuca."

 Okay-- entonces ¿Me puedes decir cuál ese grandioso plan que
tienes?" preguntó, mientras Pretty Marshal Rose comenzó a
patear frenéticamente. Itami y yo nos paramos y nos movimos
hasta donde estaban.

 "Es bastante simple --esperamos a que el portal se abra--
nos escabullimos, nos ocultamos, y después vermos si podemos
encontrar a Mashi y Haikite y cualquier otro que se ponga en
nuestro camino y patear traseros".

 "Gurk", sugirió Marshal Rose.

 "Oh vaya, -brillante- Yoi. Pero pienso que debemos
mejor descubrir cómo y porqué una organización malefica está
creando hordas de -bienechoras- mágicas. No parece tener
sentido" H reflexionó.

 "Ulllk", remarcó Marshal Rose, al tiempo que comenzó a
disminuir su pataleo.

 H frunció el ceño. "Me importa -y mucho-- el descubrir
porqué me arrojarón como carne de cañón-- especialmente
si estas "fuerzas del bien" son un simplemente un frente para las
fuerzas del mal".

 Marshal Rose no dijo mucho, tan solo se crispó un par
de veces y sacó la lengua. Sailor H se volteó hacia Itami.
"Después de que todo ésto termine, qué tal si vamos a tu
escondite?...Lameré tus heridas... " 

 Dos ruborizaciones en un día! Estaba impresionado.
"Guárdatelo en la cosa que irrisoriamente llamas falda, H.
Y a propósito, creo que ya terminaste con ella".

 "Hmm?" H sacudió a la muchacha experimentalmente un
par de veces, pero estando muerta, ella no hizo otra cosa fuera
de desplomarse un par de veces, de modo que H solo la dejó caer
al suelo.

 Las piedras eligieron este momento para comenzar a brillar
nuevamente-- solamente que esta vez el resplandor se hizo más
brillante y comenzó a aremolinarse-- pronto, una imagen se formó
dentro del resplandor --una qué parecía una sala de espera... "

 Ese es nuestro boleto chicos -- um, traigan eso junto con
nosotros--"señalé el cuerpo-- "Podríamos necesitarlo más adelante".

 Sailor H sujetó la parte posterior del fuku del cadáver y
la alzó hacia arriba. "¿Para qué?"

 "No se-- bocadillos, quizás-- déjame en paz, solo estoy
improvisando!" Con eso, indiqué a mis compañeros seguir, y
caminamos a través del portal.

 Había una sensación rara al atravezar el portal, y
entonces ya estábamos allí en el cuarto. La luz se disipó, y nos
dejó en un pequeño y acogedor cuarto con sofás y una mesa de café
apilada de revistas y una caja de buñuelos".

 "Ooooh, crullers!" H dijo, y aventó el cuerpo sobre un
sofá. Nos juntamos alrededor de la mesa y nos dispusimos a comer.
Quienquiera que sea el panadero de Mashi, hace un buñuelo
CHING"N.

 Itami se limpió la azucar glass de la barbilla y puso un
oído en la única puerta en el cuarto. "A*gui*n vien*" él dijo en
medio de un bocado de Bismarck.

 Ahora pude oír pasos, y sonaban como bastantes.

 "Escondanse!", dije, y H e Itami se lanzaron sobre uno de
los sofás. Yo me dirigí hacia otro, pero entonces me detuve,
dándome cuenta que había un cadáver de niña mágica en él.

 Okay.

 Quienquiera que viniera no esperaba encontrar a una Pretty
Marshal Rose muerta. Sin embargo, también esperaban encontrar a
-alguien- adentro. No encontrar nada los haría sospechar tanto
como encontrando un cuerpo. Tuve que pensar deprisa. Apoyé el
cuerpo en una posición en que esuviera sentara. Sus ojos estaban abiertos,
pero su lengua era toda púrpura y se asomaba. Nada bueno. La empujé
adentro con un dedo, pero ahora su quijada colgaba ligeramente
abierto. Gah. El rigor-mortis ya no es lo suficientemente rápido
estos días. Tomé así un buñuelo, lo partí por la mitad, y
abarroté una sección en su boca. Entonces me arrastré bajo el
sofá y me asomé un poco adelante para salir por detrás.

 Mientras acuñaba una mano entre los cojines, la puerta se
abrió y en Haikite entró. Reconocí su voz al hablar, "Ah, Marhsal
Rose! Veo que encontraste los buñuelos. Bien, un bocado puede
hacer aliviar la sensación después de una pérdida tan terrible,
hmm?"

 Alcancé a través de los cojines y apreté el pelo en la nuca
de Marshal Rose, y tirado en ella. Su cabeza cabeceó.

 "Muy bien. Regresaré después, seleccionaremos un reemplazo
conveniente para tu compañero y reconstruiremos tu varita. Mientras,
permanece aquí, pues es que las fuerzas del bien vamos a...uh, estar
haciendo algo".

 Bajo del sofá podía ver muchos, muchos pies detrás de la
puerta de la que salió Haikite. Sujeté su nuca de nuevo, meneando
su cabeza en tan enérgica serie de cabeceos como un cadáver podría
producir".

 "Te veré más adelante entonces. Intenta relajarte".

 Pensé para mi mismo que ella no podría estar más relajada
de lo que estaba ahora. Haikite giró sobre sus talones y
atravezó la puerta, pero antes de que se cerrara pude oírlo
murmurar, "¡Vaya con la Pequeña CERDA! ¿Viste nada más con cuántos
de esos buñuelos se atrabancó?" 
 
 Me arrastré hacia fuera bajo del sofá y me estiré. Itami y
Sailor H se arrastraron fuera de su sofá, y la mueca gatuna en
su cara sugirió que ella había tomado cierta ventaja de su
proximidad a un Itami de aspecto ahora-aún-más-desaliñado-que-
de-costumbre.

 "¿Ahora qué? " Itami preguntó. Lo tomé como muestra de su
nerviosismo extremo que él mostrara interés en la línea de
acción...

 "Bien, número uno, pienso que ella--" moví mi pulgar hacia
la difunta Marshal Rose-- "Aún puede sernos útil. Y número dos
pienso que deseamos ver que es lo que se proponen estas 'fuerzas
del bien', ¿Partimos?"

 Me dirigí hacia el cuerpo, saqué el buñuelo de su boca,
y entonces sujeté la parte posterior de su blusa, poniéndola de
pies. Después de un cierto manoseo involuntario, me las ingenié
para ponerla en una posición más-o-menos de pié sujetandola con
una mano del cuello de la blusa y la otra en la nuca. 
Empujándola hacia adelante, podría conseguir que pareciera
caminar... bien... realmente, ella "caminaba" como un avestruz
paralizado, pero calculé que serviría con el nivel de ayuda
que tenían en este lugar.

 Saltando ella delante de mí, salí del cuarto, y los otros
me seguían.

 Estaba impresionado. O esta NO era la misma fábrica en
donde había estado antes, o había mucho más en el interior de
lo que aparentaba. Estábamos en el borde de un gran patio al aire
grande con grandes pilares de piedra y los arreglos atractivos
de plantas-- rodeados por paredes de piedra enormes. Todo estaba
adornado de forma muy ornamentada y coloreado brillantemente. Un
aspecto No-tan-malo. Exploré el lugar y elegí la arcada más grande
y conduje a nuestro grupo a través de ella.

 Encontramos otro patio, más grande incluso y más adornado.
En nuestra dirección venía una pequeña patrulla de guardias...
no tan grandes para poder con nosotros, pero bastante grandes para
activar la alarma. Bien, aquí estaba la prueba de fuego.

 Vinieron delante de mí, mirando a Pretty Marshal Rose.

 Trabajando mi voz en mi mejor falsetto e intentando no
mover los labios, moví de un tirón su cabeza y chirrié, 
"transferencia de presos del bloque 1138..."

 "Continúe", el lider gruñó, y siguieron su camino.

 Este podría haber sido más fácil de lo que pensé.

 Hicimos nuestro camino a través de un número de otros
patios, progresivamente más y más hermoso. El día disminuía, y
el cielo dió a cortinas asombrosas del color-- y entonces
encontramos nuestro camino al paraíso.

 A través de un arco masivo estaba el jardín más
exhuberante, ajardinado en una colina enorme con una cierta
clase de estructura a semejanza de altar en la cima. Haikite
estaba allí, flanqueado por un número de losas de músculo
realmente amenazadoras, pero estaban todos equipados en 
brillantes armaduras de plata y blanca. Debajo, rodeando la
colina, estaba una masa de figuras encapuchadas y en túnicas,
algunos cientos más o menos.

 Los evadimos y nos ocultamos entre el verdor. Dejé a
Pretty Marshal Rose en un arbusto y volví mi atención a la
reunión.

 Repentinamente, una voz creció aparentemente de ninguna
parte --Mashihaisha Ultra.

 "LES DOY LA BIENVENIDA, ACOLITOS DE LA LUZ. SEPAN QUE
LO QUE HAGAN HOY ASEGURARÁ EL FUTURO PARA LOS DE CORAZ"N PURO.
SEPAN QUE HAY UNA FUERZA ACTIVA DEL BIEN EN EL UNIVERSO QUE LES
HA ELEGIDO PARA SER SUS AGENTES".
 
 Varias figuras encapuchadas avanzaron hacia el altar, y
tiraron de sus capuchas. Un grupo principal de adolescentes miró
fijamente el altar, caras inundadas con éxtasis...

 Siempre sospeché que había una buena razón por la que
estas fuerzas reclutaban a muchachas jóvenes --eran más fáciles
de convencer que realmente *había* una fuerza activa del bien en
el universo...

 Ahora algo materializaba detrás del altar -- una figura
humanoide... había una luz blanca brillante que emanaba de la
figura-- incluso desde donde estaba yo podría sentir el suave
calor en mi cara... Ahora las niñas dejaban caer sus túnicas
revelando una variedad de uniformes de colegiala...

 La figura separó los brazos e indicó a las muchachas pasar
adelante. Mientras lo hacían, un par enorme de alas emplumadas se
revelaron en su espalda. Un coro de "ooh's" y "aahh's" empapó a la
muchedumbre mientras que la figura miró benevolentemente a la
asamblea.

 De ser alguien más, hubiera dicho que estaba mirando un
aunténtico ángel.

 Debajo del altar, el "ángel" sacó un tomo enorme, cubierto 
con la piel peluda de algún animal que debe haber sido radiactivo
mientras estaba vivo-- pintas de peluche de un tono innatural
destellaban en todos los colores del arco iris. Él colocó el libro
en el altar y lo abrió, hojándolo ociosamente.

 "MUY BIEN, VEAMOS AQUÍ... POR EL PODER DEL NECRONOMICUTE,
IMPLORO AL UNIVERSO CONCEDER TODOS SUS PODERES DEL BIEN SOBRE ESTOS
DIGNOS ASPIRANTES!"

 Después dijo muchas otras cosas no precisamente de mucho
interés (para no mencionar el estar en un lenguaje enteramente
ajeno), y una luz se derramó sobre las muchachas que rodeaban el
altar. Tenía la furtiva sospecha de que un "equipo" estaba por ser
creado-- y solo un vistazo me dijo que iban a ser un *BUEN* de
chiquillas en ese grupo.

 "OKAY, OKAY-- LUZ TÍBIA blah blah blah FELIZ FELIZ etc etc
--NECESITAMOS COMPAÑEROS! HAIKITE--" La figura con la voz de Mashi
llamó con la mano a su subordinado-- "DONDE están LOS COMPAÑEROS?" 
 
 "Justo aquí, mi señor". Con éso, él indicó a un par de razos
acercarse. Ellos traían una caja grande. Bajándola, uno de ellos
abrió uno de los lados, y un enjambre de polluelos salieron de la
caja, cada polluelo le hacía fiestas a una colegiala...

 Luz mística llenó el aire junto con el sonido de píos
constantes. A un lado podía oír a Sailor H gimiendo suavemente, "Creo
que me voy a enfermar..."

 "GENIAL. AHORA NECESITAMOS UN MOTIFF. TENDREMOS ALGUNO DE
CASUALIDAD? NO COMO ESA COSA DE LAS FRUTAS DE HACE RATO, ESPERO--"

 "Bueno, mi señor --usted sabe como es esto... la mayoría de los
buenos ya se ocuparono... "

 "SÍ, SÍ. OH, BIEN, TRAIGANLO".

 Haikite caminó hacia adelante y le dio una caja amarilla y
negra de aspecto familiar.

 "HMM. BIEN, CUMPLE EL PROP"SITO... SUPONGO". Él Despejó su
garganta. "LAS BENDIGO AHORA CON TODO EL PODER DE ESTE *er* SÍMBOLO
MÍSTICO, SERÁN BAUTIZADAS COMO, esteee --LOS CABALLEROS BRILLANTES
DEL CRAY"N!"

 Un resplandor blanco estalló y se esparció en 64 rayos de arco
iris que buscaban y envolvían a cada colegiala... era dificfil mirar
directamente al resplandor... pero cuando se calmó, un nuevo ejército
de niñas mágicas estaba ahí, haciendo aspavientos de alegría.

 Sesenta y chingadas cuatro. Me arrastré cerca de Itami y H.

 "Hey", cuchichée, "Levanten la mano los que piensen que puede
que sea una buena idea tomar venganza -después-".

 Ambos levantaron ambas manos.

 "Muy bien --hagámoslo quietos y calladitos, y veamos si podemos
encontrar una salida no-mágica de aqu".

 Nos escurrimos entre las orillas hacia la salida. Pensé
brevemente en tomar el cadáver de Pretty Marshal Rose otra vez, pero
calculé que solo nos alentaría nuestra huída.

 Y entonces... entonces tuve uno de **esos** monentos.

 Oí algo que raspaba, y seguí el sonido hasta donde dos figuras
operaban en las sombras.

 "Kyo" y "Mai". 
 
 Entonces me cayó el veinte. ELLOS bombardearon los cuarteles de
Mashi anteriormente. Había una bomba en la puerta de nuestra oficina,
pero otra trampa casi inmediatamente después. Las bombas no eran estilo
de Mashi --él utilizaba criaturas como el Itami-oide o los youmas --y
las niñas mágicas, al parecer. *ELLOS* fueron los de la bomba en mi
oficina, no Mashi-- la dirección en la bomba fué probablemente para
confundir al FBI. Eso explicaría esa broma que oí por casualidad sobre
que los cazadores de niñas mágicas "eran historia".

 Sonreí siniestramente. Miré a donde estaban Sailor H e Itami--
habían alcanzado el arco, y me hacían señas de que los siguiera-- pero
cuando vieron la mirada en mi cara se detuvieron.

 Sacudí una pierna, y la Uzi resbaló de mis pantalones (no
pregunten --secreto de oficio). La recogi y me acerqué lentamente a
donde estaban los dos transformers.
 
 "¿Que hay?", dije.

 "Click", dijo el seguro de mi Uzi.

 Los dos voltearon como los típicos niños sorprendidos en el
tarro de galletas. "Hey!" dijo 'Kyo'. "Uh --parece que ustedes están
tras de Mashi también... er... quizás podríamos unir uuuh, fuerzas... " "....

 "Mmmmmmm no, no lo creo" contesté alegremente.

 Sobre el arco, podía oír a mis compañeros haciendo exagerados
"Shhh!".

 "Espera-- salvamos su vida! Tu sabes, el youma?" 'Mai' chirrió.

 "Ooooh si, seguro que lo hicieron!!" Dije, aún más alegre.

 Y entonces, exprimí el gatillo...

FIN PARTE 4

[Nota De los Editores: Reeeeaaarrrghhhreeerrrgh Grrrrrr Rrrrrrrowll.]

Colin Wales: Escritor | Músico Experimental | Artista
VEAN el World Domination Center y la fabrica de leche para bebé:

************
PURE GRANULATED SOUND, CD experimental en progreso