La Guerra de los Mundos

Chrno Crusade es propiedad de Daisuke Moriyama.

Este fic es una adaptación Libre de la novela War of The Worlds de H. G. Wells.

Capitulo 8: El fin de la guerra.

Las horas pasaron, y estas se volvieron dos días, Chrno y Rosette permanecieron ocultos en el túnel pese a que ya no se escuchaban ruidos en el exterior, al fin, Chrno decidió que era momento de salir del lugar.

Bueno, parece que ya se han ido- dijo Chrno en voz baja quitando la madera que cubría el túnel.

Si, eso parece, pero hay que tener cuidado- dijo Rosette mientras que salía tras él.

Chrno frunció el ceño al notar que el sótano estaba bastante desordenado, al revisar con la mirada vio unas rayas largas en el suelo, aparentemente algo fue arrastrado, no se necesitaba ser un genio para saber que Aion fue arrastrado por ese lugar... además del destino que tuvo.

¿Crees que haya muerto?- dijo Rosette algo apenada.

Chrno no respondió, aunque noto que, pese a lo que había tratado de hacerle a Rosette, ella se notaba algo apenada por él.

Parece despejado afuera, tal ves podamos salir- dijo Chrno acercándose a un enorme hueco que había en la pared.

Espera, revisemos si aun queda algo útil, recuerda que no hemos comido en dos días- dijo Rosette mientras que empezaba a revisar el sótano.

Bien, es buena idea- dijo Chrno ayudándole.

La búsqueda dio resultados, encontraron una caja con conservas en buen estado, por lo que pudieron comer algo para reponer energías, además de que Chrno encontró una caja con munición para la escopeta semioculta entre el desorden.

Mas tarde, Chrno y Rosette salieron de la casa, la villa era un desorden entero, casas quemadas se veían en la zona, huesos de personas y animales, así como cuerpos achicharrados se miraban en el suelo, los cuervos y zopilotes se daban un festín con los cadáveres.

Chrno solo miro la escena con asco mientras que Rosette empezó a sollozar, aunque algunas cosas se habían salvado, un jardín de rosas en una esquina, una bicicleta que estaba apoyada en una pared y algunos letreros en las calles se daban a notar entre las destruidas casas, el auto de Satella se hallaba derribado en el mismo lugar donde se había estrellado después del impacto del rayo.

Ya no queda nada, ¿A dónde iremos?- dijo Rosette con tristeza.

Ese camino nos llevara a Tijuana, si es que aun existe, es el lugar más cercano a donde nos podemos dirigir- dijo Chrno señalando la carretera.

¿Pero que haremos si están allá?- dijo Rosette asustada.

Debemos arriesgarnos, en este lugar ya no hay nada, además, no sé, podrían volver, es mejor marcharnos- dijo Chrno mientras que Rosette asentía.

Ambos empezaron a caminar para salir del pueblo, no hallaron nada durante varias horas, lo que extraño a Chrno, al anochecer, Chrno encontró una pequeña cabaña, después de forzar la cerradura, Chrno y Rosette por fin pudieron pasar una noche en cama, claro, el sueño fue intranquilo, pero nada paso durante la noche.

A la mañana siguiente, ambos continuaron su viaje, claro tomando de la casa todo lo que les era necesario, el viaje fue bastante deprimente, Chrno se percato de que una misteriosa hierba roja cubría los campos, dándole al lugar una apariencia que no era de este mundo, durante el trayecto encontraron muchas casas y vehículos destruidos, así como los huesos de hombres y animales, algunos aun con carne putrefacta encima, pero para su suerte, encontraron en una cabaña un viejo auto que aun funcionaba, Chrno se decidió por ir a lo seguro, y después de comprobar que había combustible, él y Rosette salieron a mayor velocidad.

Chrno, dime, ¿Qué crees que pase ahora?- dijo Rosette con tristeza.

No lo sé, parece que tendremos que hallar una nueva forma de vivir- dijo Chrno serio.

Rosette solo sollozo un poco, Chrno le miro con tristeza.

No dejare que te separen de mí, eso te lo juro- dijo Chrno con decisión, Rosette le miro sorprendida para después sonreír.

Gracias Chrno- dijo Rosette mientras que apoyaba su cabeza en el hombro de él.

Ya anochecía cuando Chrno escucho el sonido de una sirena de vapor, y recordó los sonidos que hacían las maquinas marcianas, por lo que detuvo el auto y junto con Rosette se refugió en una iglesia abandonada que había en el camino.

Espera Chrno- dijo Rosette de pronto y señalo al horizonte.

Chrno miro con duda y entonces vio al enorme trípoide marciano parado en una colina, Chrno solo sudo frío, pero Rosette le hizo notar algo.

Las aves, parecen estar atacando a algo en la maquina- dijo Rosette con sorpresa, Chrno también se sorprendió.

¿Pero qué rayos, Rosette, será mejor entrar en la iglesia, tratare de ver que pasa desde arriba- dijo Chrno, Rosette asintió.

Ambos entraron y volvieron a escuchar el sonido, Chrno subió al campanario y lo que vio lo dejo sorprendido.

Aparte del trípoide que se hallaba en el camino, había un segundo trípoide tirado en el suelo, el ocupante se hallaba tirado en el suelo mientras que los zopilotes y los cuervos le devoraban, una tercera maquina reposaba sobre una casa silenciosa, Chrno se percato de que la primera maquina había callado de pronto.

¿Qué esta pasando?- dijo Chrno con duda, Rosette subió al campanario y se quedo igual de asombrada que él.

Parecen muertos- dijo Rosette con duda.

¿Pero, como?- dijo Chrno extrañado.

Tal vez, podamos ir a investigar- propuso Rosette.

Chrno asintió, ambos se dirigieron a donde estaban las maquinas inmóviles. Al llegar a ellas, Chrno se percato de que había algunos marcianos muertos en el suelo, después de alejar a los cuervos, Chrno reviso los restos destrozados del marciano.

Definitivamente... esta muerto, y parece que sus compañeros también- dijo Chrno seriamente.

Gracias a Dios- dijo Rosette con alivio.

Será mejor seguir a Tijuana, si hay gente viva debemos de informarles- dijo Chrno, Rosette asintió y ambos se pusieron en camino.

El viaje a Tijuana fue bastante silencioso, ambos se encontraban analizando lo que había pasado, durante el trayecto, Chrno vio tres trípoides tirados en el suelo, al igual que en los anteriores, perros, gatos, cuervos y zopilotes, destrozaban a dentelladas los cadáveres de los marcianos.

Tijuana estaba semidestruida cuando llegaron, pero en el lugar encontraron a bastantes personas, muchas tan asombradas como ellos, Chrno se percato de que había mucha gente proveniente de San Diego, San Francisco y Los Angeles refugiada en la ciudad, por lo que se acerco a pedir información.

Es increíble- dijo un hombre que miraba un trípoide que había caído en medio de una casa.

¿Qué paso?- dijo Chrno.

No lo sé, esa cosa estaba atacándonos cuando de pronto empezó a tambalearse y cayo... al igual que las demás- dijo el hombre, Chrno solo miro la maquina con sorpresa.

Bueno, pedimos un milagro... y parece que eso es lo que obtuvimos- dijo Rosette mientras que se acercaba a Chrno, de pronto, el sonido de gritos les llamo la atención, Chrno y Rosette vieron como la gente huía aterrorizada de un trípoide que avanzaba tambaleándose por las calles sin disparar el rayo, asustado, Chrno sujeto a Rosette y se oculto tras una barda mientras que de momentos miraba a la enorme maquina menearse en zigzag.

Soldados estadounidenses y mexicanos que se hallaban en la zona aparecieron y empezaron a alejar a la gente mientras que llevaban el poco equipo militar que les quedaba, pese a saber la inutilidad de ello.

La maquina emitió un sonido mientras que sobre ella, las aves se posaban en la parte superior y parecían entretenerse picoteando al ocupante, que podía ser notado desde la parte superior.

¡Todo mundo salga de aquí, ¡Trataremos de entretenerlo!- dijo un capitán, mientras que los soldados se colocaban entre las casas, Chrno miro al trípoide y entonces pego un grito de sorpresa.

¡No tienen escudos, ¡Dios, la maquina esta desprotegida!- dijo Chrno.

El Capitán le miro con sorpresa y posteriormente a la maquina.

¡Que traigan el tanque, es nuestra oportunidad!- dijo el Capitán mientras que uno de los soldados asentía.

¡Fuego a discreción!- dijo un Teniente mientras que los soldados hacían estallar el fuego de fusileria contra la maquina marciana.

Rosette se tapo los oídos asustada mientras que Chrno le abrasaba pero sin dejar de mirar la escena.

Las balas empezaban a dañar al trípoide sin que este disparase sus rayos en ningún momento, un tanque sucio y bastante dañado apareció por las calles y empezó a disparar su carga, el trípoide se balanceo y callo desplomado de lado, los soldados dejaron de disparar y se acercaron a la maquina, Chrno se percato de que los tentáculos del marciano salían por un abertura en la maquina mientras que se retorcían.

Con cuidado, no se confíen- dijo el Teniente, Chrno no resistió la tentación y se acerco a la maquina junto con Rosette, de pronto los tentáculos se detuvieron, uno de los soldados se acerco y con el fusil levanto el tentáculo.

Esta muerto señor- dijo el soldado.

Se escucharon gritos de jubilo entre las personas que estaban allí, Chrno solo atino a abrazar a Rosette mientras que los soldados se disponían a revisar los demás trípoides.

Parece, que al fin termino- dijo Rosette sonriendo.

Si, es hora de reconstruir y hacer el recuento de los daños- dijo Chrno mientras que ambos procedían a ir al auto.

Tal ves, podamos volver, debemos saber si Satella esta aun viva- Dijo Rosette, Chrno asintió.

Bien, pero lo primero es descansar, además, debemos de ver la manera de ayudar a la gente que esta aquí- dijo Chrno mientras que Rosette asentía.

La escena que se podía ver en la ciudad semidestruida mostraba a 6 trípodes caídos en el suelo, la gente empezaba a reunirse y reconstruir el lugar.

La situación en el mundo era similar, en Inglaterra, Londres estaba casi en su totalidad devastada, la familia real había muerto, por lo que algunos miembros de la cámara de los Lores decidieron establecer un gobierno de corte republicano mientras que se procedía a la reconstrucción.

En Alemania, la invasión había destrozado al gobierno nazi en su totalidad. Por lo que la población civil tomo el poder, Japón estaba prácticamente arrasado, se estableció un gobierno militar mientras que en otros lugares de Asia paso lo mismo.

En América, la reconstrucción empezó lentamente, pero segura.

Joshua, Fiore y Azmaria, junto con Mark, se enteraron de la derrota de los marcianos en Cuna y rápidamente procedieron a regresar a los Estados Unidos, pero Joshua decidió que primero debían de ir a los Angeles a buscar a Rosette y a Satella, así que, pese a los pocos medios de comunicación que quedaban, se trasladaron a México y de allí viajaron en uno de los pocos trenes que quedaban.

Ewan Remington fue rescatado por un barco de refugiados japonés y llevado a las islas de Honolulu en Hawai, desde donde pudo abordar un barco para dirigirse a San Francisco, el cual estaba prácticamente destrozado.

Rosette y Chrno, después de dos semanas, volvieron al lugar donde estaba la casa de Satella, y se sorprendieron al ver que esta aun estaba de pie, pero no intacta, la puerta estaba forzada y se notaban claramente los indicios del saqueo del que fue producto.

Es desolador verdad- dijo una voz que les llamo la atención desde la sala.

Rosette solo se cubrió la boca mientras que unas lagrimas se esforzaban por salir.

¡Satella!- dijo Rosette mientras que corría y abrazaba a la pelirroja, Satella correspondió el abrazo mientras que Chrno les miraba con ternura.

Por un momento creímos que te habíamos perdido- dijo Chrno, Satella solo sonrío con tristeza mientras que acariciaba la cabeza de Rosette.

Yo también llegue a pensarlo- dijo Satella mientras que se separaba de Rosette y les miraba con calma.

Después de que nos separamos, Steiner me jalo hacia uno de los caminos, pero por desgracia, una de esas endemoniadas maquinas le pego con uno de esos rayos- dijo Satella llorando, Chrno y Rosette le miraron con tristeza – Steiner era como un padre para mí, pero no pude hacer otra cosa mas que correr, por un momento pensé que moriría, pero al parecer no les importe mucho a esas cosas, por lo que pude escapar, después encontré una misión católica presidida por una hermana, creo que se llamaba Kate Valentine, ella y las monjas a su cargo me cuidaron y atendieron mis heridas, después de que alguien nos dijera de la muerte de esas cosas, no pude evitar solo pensar en volver a casa... saben, yo por un momento pensé que me había quedado sola en este mundo.

Satella, no estas sola, nos tienes a nosotros, y te juro, que seguiremos todos adelante- dijo Rosette con decisión mientras que Satella y Chrno sonreían.

Saben, aun ahora me pregunto, ¿Qué es lo que abra matado a esos seres?- dijo Chrno con duda, Rosette solo sonrío.

Tal vez, fue justicia divina- dijo Rosette mientras que Chrno solo sonrío.

Sí, tal vez... – dijo Chrno sonriendo.

Los marcianos, que no habían podido ser derrotados por ninguna arma humana, cayeron presas de los seres más diminutos, que el creador en su inmensa sabiduría había colocado en este mundo, las bacterias, y es que los marcianos, apenas al tomar alimento estaban condenados a su destrucción, ya que el hombre, a costo de muchas miles de muertes no cae ante las enfermedades sino hasta después de una intensa lucha, en la que muchos desarrollaran anticuerpos que heredaran a su progenie...

... y es que el hombre no vive ni muere en vano.

Fin de La Guerra de los Mundos.

Notas finales: sé que pensaba hacer esto en dos capítulos, pero es que no sabia la manera de hacerlo mas largo, por lo que para poder agilizar mas mis otros fics, decidí darle fin a este fic, espero que les halla gustado. Si desean un epilogo solo díganme, ¿Sí?.

Hokury: Que bien que te gustase, Aion tuvo su castigo y aquí esta el capitulo fnal, espero que sea de tu agrado.

Ale: Bien, aquí esta mi última actualización, espero te agrade.

También les agradezco a todos aquellos que leyeron mi fic con anterioridad, gracias a Hitzuji y a Satella Harvenheit.

Hasta luego.