Capítulo II.
"No vas a ser ni de Weasley ni mio"
Ginny venía viendo la pelea desde antes.
Vio como, con rencor, "El Elegido", el niño-que-vivió, o simplemente Harry, mandaba la Maldición Imperdonable.
Aquella que había acabado con tantas vidas.
Esa maldición que marcó el inicio del ojiverde.
Y su fin.
Aquella que ella, Ginny Weasley, iba a revivir todos los días con tristeza en su cabeza.
Vio como Voldemort reía… no se imaginaba que un chico de diecisiete años podría matarlo a él, el mago mas temido en las últimas décadas.
Pero se equivocó.
-Potter… esta es tu muerte… ¡Avada kedavra!-gritó Voldemort, ignorando que Harry la había lanzado antes, pensando que no podía ser tan potente como para acabar con él.
Según los cálculos de Ginny, debería de haberse activado el iPriori incantatem/i en el cual, las dos varitas que contienen el mismo núcleo (según lo que ella sabía, de la misma cola del antiguo fénix de Dumbledore, Fawkes), no funcionarían. Aunque sus dueños las obligaran a pelear, tendría un efecto muy extraño, el cual ella no sabía con exactitud.
Pero parecía que esta vez, no había pasado.
Voldemort cayó y Harry también, cuando cada maldición chocó contra el que iba dirigido.
Tom, como ella lo llamaba cuando escribía en el diario de él, murió.
Harry, sin embargo…
-Ginny… l-lo… sie-ento…Te amo… adiós-alcanzó a decir. Ella sintió que la sangre se le helaba nuevamente.
Se levantó con furia sostenida. Vio como su hermano y Draco peleaban contra Lucius.
Hermione seguramente estaba desprotegida.
Todavía los mortífagos estaban, aunque eran pocos.
Bellatrix Lastrange peleaba con Hermione.
La fuerza de las dos era pareja.
Finalmente, después de ir a ayudar a su amiga, lograron que Bellatrix esté lo más debilitada posible.
-¡Avada kedavra!-resonó nuevamente en el salón y reconoció inmediatamente esa voz como la de Draco Malfoy.
Sus ojos se lo confirmaron.
Ahí estaba él.
Asesinando a su padre.
Ginny sabía que su amado lo hacía por ella y por el. Ahora nadie iba a intervenir entre los dos.
Aunque sea costoso para Draco superarlo, ella le iba a ayudar en todo.
Mientras su hermano ayudaba a Hermione quien estaba llorando por la muerte de Harry, ella fue a abrazar a su adorado novio.
Draco la vio.
Estaba con la túnica rota, llena de raspones y sangre.
Sangre de ella… no había salido ilesa.
Él tampoco estaba muy limpio.
Estaba casi igual que ella, pero con una superficial cicatriz en el cachete de la que salía mucha sangre.
Ginny le limpió con la manga de la camisa.
-Que lindos…-exclamó la voz burlona de Pansy Parkinson.
Draco, instintivamente, se puso delante de Ginny para protegerla.
-¿Qué quieres, Pansy?-Ginny, atrás de Draco, miraba con odio a la chica de ojos azules.
-A ti-respondió ella simplemente.
-Jamás me tendrás, entiéndelo.
Y empezaron un duelo.
Ginny, sin que los dos se dieran cuenta, se escabulló detrás de Pansy.
Se tiró sobre ella y cayeron al piso.
Momentos antes, cerca de allí…
Hermione lloraba sobre el cuerpo ya sin vida de su mejor amigo, Harry.
Su novio, Ron, estaba a su lado abrazándola.
Sin que ella lo notara, de sus ojos también caían lágrimas.
Harry… su mejor amigo… muerto.
Se puso a recordar la primera vez que lo había visto… hace seis años y medio... en la estación King Cross.
¿Quién iba a pensar que ese chico bajito y con gafas iba a ser el famoso Harry Potter y su mejor amigo?
Se acordó su primer viaje en el expreso.
Ahí mismo habían pasado tantas cosas…
Como, por ejemplo, conocer a Hermione, de la que no tuvieron una buena impresión en el principio.
Todos los años…
La piedra Filosofal, La cámara de los Secretos, Sirius, Lupin, El Torneo de los Tres Magos, la ED, la muerte de Sirius, la de Dumbledore… y ahora esto.
Cuando Harry murió, una parte de él mismo, Ronald Bilius Weasley, se fue con él.
Hermione sabía que Ron lo lamentaba un poco más que ella... él lo había conocido primero, habían compartido más cosas… y sentía que tendrían que apoyarse entre los dos para poder seguir adelante.
-Ron, escucha… tenemos que seguir adelante… Harry murió por nosotros y por todos… no creo que le gustara que todos estemos tristes-y lo besó apasionadamente.
En ese momento…
Ginny, sin que los dos se dieran cuenta, se escabulló detrás de Pansy.
Se tiró sobre ella y cayeron al piso.
Empezó a tirarle de los pelos.
La rubia, es decir, Pansy, empezó a gritar tratando de sacarse a Ginny de encima, sin tener éxito.
-Peleando como muggle¿No, Weasley?-decía ella continuando tratando de quitársela.
-No le vas a hacer nada a Draco… ¿me oíste?
-La culpa está en tu mente¿no?
-Explícate-dijo cayendo al piso parada y con varita en mano.
-Ahora que Potter murió, tienes sólo un pretendiente.¿Te hacía sentirte superior que dos chicos te persigan, no?
Todo un logro…-dijo con una sonrisa malévola en su rostro.
-Harry es mi mejor amigo, que te quede claro. Y si estaba enamorado de mi… bueno, yo lo quería igual.
-Era, Weasley era…
Y con un potente hechizo que Ginny no reconoció, le tiró al suelo y perdió la conciencia por unos segundos. Cuando despertó vio a Pansy Parkinson amenazando a Draco Malfoy, que había salido a defenderla cuando vio que le hacía perder el conocimiento, ya que él, cuando las dos se peleaban, estaba ayudando a Snape a reincorporarse.
El profesor de Pociones había resultado gravemente herido a cuestas de un mortífago con el que había peleado.
Ginny veía todo borroso.
-Draco...no vas a ser ni de Weasley ni mio-y con la luz verde saliendo de la varita de Parkinson, Ginny se desmayó.
Ja!
Todos se quedaron 0.0
sisi, ya lo sé.
¿porqué maté a Harry?
Porque es el mejor final que debería tener hp... despues de tanto sufir, el pobre chico tendria que descansar en paz, no?
Muy a pesar que todos querramos matar a Rowling si lo hace
Faltan Dos capítulos!
Les agradezco por dejar reviews!
Un besoo!
pd: y les recomiendo una cosa... vayan a mi song-fic "Vuelve" .. porque esto tiene que ver :)
