Hola, pues por si alguno tenía dudas de ello aquí traigo el último capitulo... cosa que demuestra que decía la verdad, ya lo tenía escrito jejeje (igual que el epilogo, pero si quereis lo tendreis que pedir, y esta vez no me voy a conformar con 9 reviews, o igual si jejej).
Bueno, pues que puedo decir, que muchas gracias a todos los que me habeis dejado un review a lo largo de las dos historias, y en especial a los que lo han echo en el capitulo anterior: Mariet Malfoy Sanpe, Emma feltom, Garumo, locaremate, algida, xX asley xX, Nachita, clawy y stiby, espero que tambien os guste este capitulo (ya veremos cuando llegueis al final).
Quiero hacer una mencion especial a Netzach y PruePotter por el apoyo que me han dado a lo largo de toda la historia, los consejos, las ideas... y quiero dedicarles este capitulo, porque despues de todo es el único del que no sabían nada hasta ayer por la noche (con lo callado que me lo tenía y lo que puede hacer el Ron...). Pues va por vosotras, y ahora si que quiero review. besos.
Bueno lo voy a decir por última vez: Los personajes (a excepcion de uno) no me pertenecen son propiedad de alguien a quien prefiero no nombrar y de Warner.
Espero que os guste mucho, y perdon por tardar tanto en actualizar, por cierto le he subido el rating a la historia, no es que la batalla sea precisamente sangrienta, pero bueno, igual lo que pasa despues de la batalla es un poco explicito (y no es lemmon) así que si alguno no lo quiere leer se lo puede saltar... Besos
y ahora...
CAPITULO 17: EL RETORNO DE LA LUZ
Era una noche oscura, sin luna, cubierta por unas nubes grises y amenazantes. Un viento frío propio del invierno mas duro azotaba los centenarios árboles del valle de Godric y en la mansión de los Potter una visión que no se daba en años.
Mas de 500 magos uniformados según el clan al que pertenecían estaban reunidos en el patio trasero de la casa esperando para desplazarse a una gran batalla, la batalla definitiva, la que devolvería la esperanza al mundo, la última batalla.
Todos estaban ansiosos, deseando que les dieran la orden para partir, pero alguien no participaba de ese momento, Cat estaba sentada en la cama de su cuarto viendo como Harry se ponía la túnica roja con los emblemas de la orden del fénix y los furianos. Un silencio incómodo se había formado entre los dos, un silencio que últimamente era demasiado habitual.
Harry terminó de acomodarse la túnica y la miró un tanto apenado:
Antes de irnos Dumbledore pondrá los hechizos a la casa- comentó algo incómodo- quédate en el cuarto, lo hemos preparado para que nadie pueda entrar o salir
Lo se- respondió ella sin mirarlo con algo de fastidio- esperaré vuestro regreso y prometo portarme bien
Siento que no puedas venir con nosotros, pero en tu estado es demasiado arriesgado
Ya lo se. Solo espero que vuelvas para conocer a...- la cara de Cat y toda ella se arrugó en una muestra de dolor
¿estas bien?- preguntó Harry preocupado
Si, solo ha sido una contracción- respondió ella- no te preocupes, es normal, sabes que estoy a punto de salir de cuentas
¿por qué no vas a casa con la señora Weasley y los niños, me quedaría mucho mas tranquilo
Porque no es necesario- respondió ella- esto es totalmente normal
Pero si te pones de parto...
Si me pongo de parto, me las podré apañar sola
Solo estoy preocupado por ti
¿por mi o por el niño?
Por los dos- a esta afirmación siguió un chasqueo de la lengua de Cat- ¡estoy preocupado por los dos¿por qué no puedes creerme?
¿tu que crees?
Creía que ya lo habíamos hablado
No hemos hablado nada, tu has sido el que ha decidido separarte de mi cuando esto acabe
Pero los niños y tu seguiréis viviendo aquí conmigo
Si, claro. Como si eso fuera a cambiar algo. Lo que pasa es que temes que si me vuelvo a marchar me lleve a los niños conmigo
No quiero discutir contigo Cat, esta noche no- Cat bajó la mirada con los ojos medio bañados en lágrimas.
Con un suspiro y unas terribles ganas de besarla Harry se dirigió a la puerta, pero algo le hizo detenerse, una mano aferrándose fuertemente a la de él. Cat lo había detenido, y sin darle otra opción lo había arrinconado contra la puerta...le había besado.
Muy sorprendido al principio, Harry no se movió, pero a la ternura que Cat le estaba transmitiendo en ese momento no se pudo resistir "el último beso" atronó en su mente mientras la rodeaba a través de su abultado vientre y respondía con la misma intensidad que la chica. Un baile de lenguas perfectamente acompasado se dio inicio, un baile tierno, de amor, uno de esos pegados en el que puedes sentir el corazón del otro y el tuyo mismo siguiendo el compás de la música, a momentos intenso y apasionado, otros con ternura y suavidad... un baile perfecto como pocos... Cat muy sonrojada apoyó la frente en la barbilla de Harry, el aún no la había soltado: "Cat" susurró. Ella levantó la cabeza y le puso un dedo sobre los labios:
Shh, el último beso- las lágrimas rodaban por sus mejillas- un beso de buena suerte, un hasta luego
Por supuesto- respondió él separándola por los hombros.
La miró un instante y cruzó la puerta rumbo al patio trasero, debían ponerse en marcha, la ceremonia estaba a punto de empezar, debían apresurarse. Y con el último recuerdo de su esposa Harry se dirigió hacia su destino.
Doce pinos adornaban la entrada al recinto del cementerio, doce pinos enormes y centenarios como doce guardianes, justo delante de ellos los tétricos ojos de unos ángeles blancos les devolvían la mirada, Harry y los miembros de la orden avanzaban a través de ellos, simplemente acompañados por el suave murmullo de las hojas mecidas por el viento, de vez en cuando el faro de algún coche iluminaba momentáneamente la escena dándoles a aquellas figuras de piedra, vida. Harry sintió como el pelo de la nuca se le ponía de punta cuando un viento frío le recorrió el cuerpo, un viento que le cortaba la cara como cuchillos ensangrentados.
Debemos darnos prisa- susurró la voz de Dumbledore- el resto de miembros ya estarán situados en sus puestos. Tenemos 10 minutos para llegar hasta nuestro lugar.
El paso empezó ha hacerse más rápido, los miembros de la orden con Harry y Albus a la cabeza avanzaban con paso seguro, con la determinación de que de una vez por todas aquella guerra iba a terminar y mañana sería otro día, un día iluminado por la esperanza, un día en que toda la comunidad tanto mágica con muggle iniciaría una nueva andanza cual fénix renacido de sus cenizas.
Llegaron detrás de un panteón, un enorme panteón de piedra grisácea, pero tan oscuro como los corazones de los demonios y mortífagos allí presentes, los centenarios robles mecidos por el viento ocultaban la poco luz que la luna les mandaba a través de la nubes, y el ambiente viciado por años de muerte les rodeaba a todos, sumiéndolos en un irreal sueño.
En el centro de donde ellos se encontraban había una pequeña explanada, una fuente seca a un lado y en el centro... una pira, la pira que Harry dedujo era donde le habían dado a Cat el alma de Argonath, sus puños se cerraron fuertemente al pensar en ella, sus manos casi sangraron por la fuerza que le producía la impotencia. Era el momento de hacerles pagar...
Los demonios ya se encontraban reunidos formando un círculo alrededor de la pira, iluminados por una gran hoguera de danzantes llamas anaranjadas, pero de un humo tan negro como el infierno, acompañado por los vapores del azufre y la muerte.
Los mortífagos, se encontraban alrededor de los demonios formando un círculo mucho más grande que el anterior, algunos de ellos se movían inquietos esperando el momento en que comenzase la ceremonia en que el alma de su señor pasaría a ocupar el cuerpo del rey de los demonios, y solo en ese momento sus almas, si es que los demonios las tenían, se fusionarían en una sola para dar lugar al ser mas temible de todos los tiempos.
Una mujer de oscuros cabellos recogidos en un tirante moño hizo su aparición en el centro del círculo, o fluctuación, ya que como Harry observó tenía dos pequeños cuernos en su frente arrugada por los años. Lentamente y al mismo tiempo que un tenebroso cántico se iniciaba ella avanzó hacia la pira, Harry no lo había notado, pero dos cuerpos se encontraban allí, tan solo cubiertos por una diminuta faldita.
Sus peores enemigos estaban listos. Harry los estudio detenidamente, Damon con su cuerpo perfectamente torneado, sus grandes piernas y brazos, con el aspecto de un gran rey, un rey para ser venerado y admirado, un rey que trato de poseer por la fuerza a la mujer que amaba... la imagen de Cat antes de partir siguió a una sensación antes desconocida para Harry. Fue creciendo en él un calor que recorría su cuerpo como nunca antes había sentido, o quizá si, pero no se trataba de odio, ni rencor, ni ansias de venganza, era un calor agradable y hermoso, un calor que le llenaba de esperanza... Harry no lo supo en ese momento, de echo no lo supo hasta que fue demasiado tarde... el calor del amor había empezado a recorrerlo.
Lentamente, aquella mujer, la hechicera, avanzó hacia los cuerpos y les hizo un signo en la frente a cada uno con mucho cuidado, Voldemort parecía mas que nunca un cadáver, blanco y demacrado tan delgado y escurridizo como una serpiente. La mujer pasó a dibujarles otros símbolos en el pecho mientras su voz pronunciaba unas palabras inteligibles para los magos allí presentes, pero no por ello menos aterradoras.
Se acercaba el momento, el momento definitivo, con mucha calma Harry cerró sus ojos para empezar a acumular su magia, muy despacio, de forma que nadie pudiera sentirla para lanzarla contra sus enemigos en el momento apropiado, pillándoles por sorpresa...
La mujer se retiró lentamente y empezó a cantar, una extraña luz envolvió ambos cuerpos, un aura verdosa, verdosa y oscura al mismo tiempo.
Se acerca el momento- susurró Dumbledore
Harry pudo sentir como Ron a su lado sacaba la varita, al igual que Hermione, Gabriel y el resto de miembros de la orden, la magia poco a poco iba apoderándose de Harry mientras el calor que sentía en su interior le hacía quemarse por dentro.
Un rayo verdoso salió de los cuerpos de Voldemort y Damon, recto hacia el cielo, atravesando las nubes... ESE ERA EL MOMENTO..., Harry abrió los ojos que se habían vuelto ámbar y conjuro el terremoto más grandioso nunca visto pero justo en el territorio del cementerio, perfectamente delimitado donde se estaba produciendo la ceremonia.
Los magos y demonios allí presentes se tambalearon y acabaron en el suelo... en ese mismo momento, un rayo surcó el cielo, una lluvia torrencial cayó sobre ellos empapándolos hasta los huesos...
Un rayo surcó el cielo, la mujer dormida arrugó las cejas, se revolvió en la cama, con el sudor empapando su frente y sus manos fuertemente aferradas a las sábanas cerrándose dolorosamente sobre sus palmas pero no se despertó, estaba atrapada en un sueño, un terrible sueño de muerte, sangre y fracaso mientras una voz de mujer atronaba en su cabeza completando una terrible frase: "¿Lo harías por él, por ellos, por los que han sido, los que son y los que serán¿sacrificarías una vida a cambio de la de todos los demás¿o te quedarás acostada viendo como son arrastrados a un mundo de tinieblas?". En ese momento, Cat se vio a si misma en el conocido cementerio, un reflejo la hizo volverse para ver una terrible espada directa al corazón de Harry. Sus amigos inferiores en número y con las fuerzas mermadas iban cayendo lentamente, uno detrás de otro, empapando el suelo de rojo, Cat intentó avanzar hacia Harry, pero no podía moverse, sus piernas estaban enterradas en el suelo hasta las rodillas, haciendo una fuerza sobrehumana intentó liberarse, pero fue en vano, una risa estridente le hizo abandonar la lucha para mirar a su esposo, en el suelo con los ojos abiertos, vacíos, un hilillo de sangre saliendo de su boca y de su corazón a borbotones siguiendo el grotesco ritmo de sus último s latidos... estaba muerto.
¡NOOOO¡¡¡HARRY!- Cat quedó sobre la cama con los ojos en lágrimas mirando a la vacía y oscura habitación.- tengo que ir a ayudarles, aunque me cueste la vida.-Pero Cat en ese momento no era consciente de que otra vida estaba en peligro, estaba tan cegada que no notó el agua que mojaba sus piernas, ni tan solo la corona que se dibujaba en su frente delatando aquellos poderes que no le gustaba para nada mostrar.
Se levantó de la cama rumbo al armario y sacó sus puñales, vestida con su túnica blanca abrió la puerta del cuarto, los hechizos de protección no estaban presentes, ni tan solo necesito salir de la casa para fluctuar, porque ahora era mitad demonio mitad bruja, pero era una reina en todos los aspectos... una reina que había roto aguas dirigiéndose a la batalla.
Los superaban en número, pero el factor sorpresa les había dado una poderosa ventaja, al mismo tiempo que intentaban levantarse del suelo, miles de hechizos antidemonio, y aturdidores salieron en todas direcciones hacia todos los allí presentes dejando al mayor número de ellos tendidos en el suelo.
Inmediatamente, los demonios cerraron filas haciendo el círculo mucho más pequeño de forma que su sacerdotisa pudiese terminar la ceremonia. Harry sacó su espada y corrió delante de los miembros de la orden hacia su destino, un alud de túnicas de diferentes colores y símbolos entró en escena, ejecutando un plan perfectamente trazado, el plan que les llevaría hacia la victoria.
Harry avanzó entre hechizos y maldiciones, esquivando algunos, creando muros protectores para otros, pero siempre sin detenerse en la lucha, porque el debía llegar a la pira para matar a los dos hombres allí presentes, mientras sus almas permanecían fuera de sus cuerpos, los demás mantenían entretenidos a los mortífagos y demonios con el único propósito de abrirle camino.
Pero había algo con lo que no contaban, algo que ninguno de los presentes, o la que no estaba presente había tenido en cuenta... el oscuro cielo se llenó de extrañas criaturas, con sombras que les daban el aspecto de monstruos, los vampiros, los olvidados en esa guerra hicieron su aparición desde los cielos, desde luego, sus enemigos sabían que ellos iban, por supuesto, y los vampiros estaban en los árboles cercanos esperando para ser sus verdugos.
En medio del fuego cruzado, Harry pudo observar como varios de sus compañeros eran levantados por los aires, hasta una altura infinita y dejados caer a su suerte. Debatiéndose entre continuar adelante y ayudarlos, no vio, ni percibió como un crucio iba directo hacia él, impactándose en su espalda para caer al suelo retorciéndose de dolor, un dolor conocido, un dolor que le traspasaba hasta lo más profundo de su alma, no fue consciente del momento en que lanzó un hechizo a su atacante, solo percibió que el dolor fue menguado poco a poco, por lo que empezó a ponerse en pie para observar el rostro de Bellatrix cegado por la ira y su brazo ensangrentado a causa del hechizo.
Harry no se lo pensó un momento y volviendo sus ojos del ámbar se dirigió hacia ella espada en mano para clavársela en el fondo de su corazón, Bellatrix ni se movió sorprendida por la rapidez para recuperase de su atacante y la velocidad a la que iba hacia ella, solo cuando Harry sacó su espada y vio la sangre manchando su cuerpo fue consciente de que la muerte se la llevaba de la mano.
La batalla pareció endurecerse, casi al mismo tiempo que la tormenta, con la llegada de los vampiros, por suerte el clan al que pertenecía Gabriel era un experto en el tema y se estaban haciendo cargo de ellos lanzando brillantes hechizos que los pulverizaban hacia los cielos oscuros.
Varios de los demonios que cerraban filas, tuvieron que abandonarlas para impedir que los magos siguieran avanzando en su misión, interrumpir la ceremonia e impedir la llegada del nuevo señor oscuro, pero por suerte, en las últimas semanas los magos del bien habían sido adiestrados lo suficiente como para mantenerlos a raya, aunque las amazonas, estaban haciendo el trabajo prácticamente solas con su reina a la cabeza.
Harry tuvo que agacharse para esquivar un hechizo aturdidor, rodó por el suelo para esquivar el siguiente y entonces se puso de pie. Una lengua de tierra atrapó a los mortífagos encapuchados impidiéndoles moverse, Harry se detuvo unos momentos para verlos forcejear sin posibilidad alguna de escapar, tenía que llegar hasta la pira para impedir la ceremonia, y entonces lo vio... una pequeña abertura en las filas de los demonios y en el centro la sacerdotisa con una gran vara llevando a cabo la ceremonia. Tenía que llegar, y tenia que hacerlo ya...
Cat apareció en la entrada del cementerio, se estremeció nada mas verlo recordándole parte de una historia que creía ya olvidada, su cuerpo empapado por la lluvia se encogió de frío...¿o quizá era dolor, no tenía tiempo de pensar en ello o llegaría tarde, se veían miles de luces y hechizos disparados al cielo justo en el centro del cementerio, debía llegar cuanto antes, armándose de valor avanzó por las puertas del cementerio, rumbo a la muerte, su muerte, estaba determinada a morir si con ello conseguía salvar a Harry.
Harry avanzó derribando a varios demonios en su camino, tenía que llegar hasta la abertura y como fuera al centro de la pira, el aura verde que envolvía a sus enemigos se había fusionado en una sola, debía darse prisa o de lo contrarío seria demasiado tarde.
Un rayo a sus espaldas derribó a dos de los demonios que habían cerrado filas de nuevo cayendo al suelo, pensando en dales mas tarde las gracias a Hermione y Gabriel avanzó hacia el hueco, los demonios se estaban dispersando impidiéndole avanzar se iban contra él tratando de detenerlo, estaba unos escasos metros, pero no podía llegar a la pira.
Harry blandió su espada y cortó la cabeza de un demonio de rango superior, siguiendo el movimiento ejecutado con el brazo dio una vuelta sobre si mismo partiendo por la mitad el cuerpo de otro demonio, la sangre oscuro y de sabor amargo le empapó el rostro. Levantó su mano y lanzando un rayo dorado derribo a varios de los mortífagos que estaban acorralando a Ron y Luna.
Siguió avanzando, veía a la sacerdotisa hacer unos movimientos más enérgicos, mató a otro demonio con un hechizo de energía, el último demonio antes de su fin había caído ante él. Y en ese momento ocurrió...un grito procedente de la garganta de Voldemort cortó el cielo, y una esfera azulada salió de su boca mientras el exhalaba el último suspiro de vida. Casi al mismo tiempo, Harry empujó a la sacerdotisa, subió a la pira y clavó la pesada espada en el corazón de Voldemort.
NOOOOO!- el grito de la sacerdotisa hizo que la batalla se detuviera unos momentos, todos, absolutamente todos se volvieron para ver lo sucedido.
Miles de rayos surcaban el oscuro cielo cubierto de nubes, mientras el viento azotaba cada uno de los árboles del cementerio en un tenebrosa danza... una danza de muerte.
Con los pies descalzos una joven de oscuros y revueltos cabellos caminaba entre las ramas de los árboles cortándose los pies y las piernas, su camisón blanco empapado le dificultaba la marcha, pero debía llegar hasta el sitio indicado, debía ayudarles, no podía quedarse en casa esperando a que volvieran, era primordial acabar con todo aquello en ese instante, y sin ella, él no lo podría conseguir.
Avanzaba lentamente, demasiado lento para su gusto, pero por desgracia su cuerpo parecía pesar mas de lo acostumbrado y se estaba demorando demasiado, solo esperaba no llegar tarde...
Harry extrajo la espada del cuerpo de Voldemort, estaba muerto. Pasó por encima de su cuerpo uno de sus pies, dispuesto a repetir la misma maniobra en Damon que permanecía con los ojos cerrados, levantó su espada... la risa malvada de la sacerdotisa le hizo volverse y entonces una luz lo cegó, los cegó a todos, Harry cayó de la pira de espaldas impulsado por una extraña energía mientras una risa atronadora llegaba hasta sus oídos.
Cuando la potente luz se extinguió Harry abrió los ojos lentamente, frente a él una poderosísima figura hizo su aparición junto con el sentimiento de impotencia anidado en el pecho de Harry... habían fracasado. Tanto esfuerzo, tantos planes para al final tener al señor frente a él.
Damon lo miró desafiante, sus ojos se habían vuelto rojos con una rejilla negra... exactamente igual que los de una serpiente, su nariz, se había achatado, y su piel se había vuelto un poco más verdosa... su porte, musculatura y fuerza continuaban allí, lo mejor de dos mundos fusionados en una sola persona. Los vítores de los demonios y mortífagos se alzaron en la interrumpida batalla.
Hola Potter- susurró el demonio- nos volvemos a encontrar.
Muy lentamente Harry se puso en pie, sin perder de vista a su enemigo:
Eso parece- respondió- espero que sea por última vez. " Esto es un contratiempo, desde luego, pero no puedo dejarme vencer, tengo que acabar con toda esta situación de una vez, quiero vivir en paz, con mis hijos y con Cat... Cat, no puedo perderla, hablaré con ella en cuanto vuelva". El calor sentido antes por Harry se hizo más intenso.
Que Potter¿meditando acerca de tu muerte?- se burló Damon, desde la altura que le proporcionaba la pira
Yo no voy a morir hoy- respondió levantando la barbilla desafiante... se le había pegado de Cat.
Lo veremos
Damon hizo aparecer una espada y saltó contra Harry, la batalla se reinició mas fieramente que antes, los demonios y mortífagos, alentados por su victoria pasaron a ser mucho más crueles, los guerreros del bien tuvieron que usar sus mejores recursos, pero eran buenos, condenadamente buenos.
Harry detuvo el golpe de Damon, sus espadas entrechocaron en el aire produciendo un sonido metálico. Se mantuvieron unos instantes mirándose a los ojos, midiendo su fuerza... Damon sonrió"será un placer matarte, adoro un buen combate, cuando mueras Cat será solo mía". Harry sintió como el calor se concentraba en su mano, la que tenía libre y entonces le lanzó a Damon un rayo de fuego que el demonio esquivo, aunque le dio ligeramente en el brazo. Acto seguido, de la mano de Damon salieron unos rayos violeta, Harry colocó su mano abierta y el rayo se impacto en ella, fue como si lo hubiera absorbido (NA: pequeño homenaje a Star Wars y a Yoda la rana saltarina). Ambos se movían en círculos, esperando el momento justo, Damon volvió a repetir con el rayo, y de nuevo fue absorbido por la mano de Harry, pero no le dio tiempo de ver como Damon desaparecía y volvía a aparecer justo detrás de él. El ojiverde tuvo el tiempo justo de apartarse, pero la espada de su enemigo impacto en su hombro produciéndole un corte profundo. Harry se agachó, giró sobre si mismo dando una patada baja, Damon saltó hacia atrás para esquivarla. Harry se puso en pie, y aprovechando el impulso de su vuelta, saltó sobre su enemigo lanzándole antes de llegar hasta el un hechizo inmovilizador. Damon esquivó el hechizo con agilidad y saltó sobre Harry para responder a su ataque.
Justo en el centro, los dos enemigos se encontraron para empezar la lucha de las espadas, resultando prácticamente imposible ver sus brazos a raíz de la velocidad y la fuerza que habían impreso al ataque, siendo únicamente perceptibles pequeñas ráfagas de luz del acero.
Harry estaba luchando con mucho valor, empleándose a fondo, pero era consciente de su agotamiento, de que cada vez sus brazos eran más lentos y más pesados, debía acabar con la lucha cuerpo a cuerpo si quería vencer, estaba seguro que con los hechizos tendría mas posibilidades... además un sentimiento de desasosiego vino a él, era una sensación extraña, esa sensación que tienes de que algo va a pasar pero no sabes muy bien el que...
Haciendo el último acopio de fuerzas, y un pequeño hueco que Damon le había dejado al atacarle, hizo girar su espada con rapidez, tanta rapidez que al impactar sobre la de Damon ambas espadas salieron despedidas por los aires para quedar clavadas sobre un árbol.
Los dos cruzaron las miradas y dando un salto hacia atrás se dispusieron para el ataque.
Inmediatamente, Damón le lanzó a Harry un hechizo aturdidor, que el moreno desvió con otro hechizo, para inmediatamente contraatacar con un lengua de fuego, directa al corazón de Damon. El demonio tuvo que hacer surgir una ráfaga de agua para apagar la llama que inmediatamente se apagó en medio de un humo blanco, pero el demonio apenas pudo esquivar el magma procedente del suelo que Harry había convocado dando un gran salto. Harry saltó a su vez para empezar la lucha cuerpo a cuerpo. Una patada directa al pecho de Harry que el ojiverde no vio llegar lo lanzó contra el suelo con dureza dejando un gran boquete.
Lentamente y con el cuerpo dolorido, Harry fue poniéndose en pie. Casi al mismo instante, un crucio procedente de su enemigo impactó en la espalda volviendo a caer al suelo.
El dolor era intenso, muy intenso, y cuanto más intentaba resistirse Harry más dolor le producía, la risa de Damon llegaba hasta sus oídos en medio de sus gemidos de dolor.
No se como ella pudo preferirte a ti antes que a mi- susurró el demonio malignamente- pero cuando estés muerto ella volverá a ser mía
Ella no te quiere!- exclamó Harry notando como en su pecho se abría una herida... era la maldición cruciatus mas poderosa que le habían lanzado nunca
Acabará queriéndome, cuando hayas muerto ella vendrá a mi
Nunca!- gritó Harry desesperado- ella nunca será tuya
Ella será mía por las buenas o por las malas. Me da igual si tengo que forzarla para que me quiera, casi lo logré una vez... ahora que soy mas poderoso de lo que nunca fui... ella no se resistirá... ahora... debes morir- exclamó Damon- Avada Kedabra!
NOOOO!- El calor que se había adueñado del cuerpo de Harry se hizo muy intenso en ese momento... y al mismo tiempo que gritaba un rayo dorado salió de su pecho impactando contra el mortífero maleficio de Damon.
Harry sintió como el dolor se detenía poco a poco y se puso en pie. Su rayo dorado impactaba contra la maldición asesina tratando de detenerla, aunque esta le ganaba camino lentamente. Harry intentó mantenerla, pensó en Cat, en los niños, en Sirius... el rayo se hizo más dorado y logró frenar la maldición que casi había llegado hasta él.
¿cómo puedes estar tan seguro de que ella te ama?- le preguntó el demonio tratando de desconcentrarlo
Porque lo se
Ohh, eso lo dices porque no la oíste gemir entre mis brazos- el rayo de Harry se hizo más débil- porque sabes que ella fue mía durante un tiempo ¿verdad?- la maldición asesina avanzó unos metros mas- era tan delicioso cuando ella se entregaba a mi sin condiciones, amándome, dándome su cuerpo, toda ella- definitivamente el rayo de Harry casi se deshizo en el aire, el cálido sentimiento que había en su cuerpo se había convertido en una ácido que le quemaba por dentro... el demonio de los celos hicieron su aparición y Harry en el último momento tuvo que esquivar el mortífero rayo verde.
Damon inmediatamente volvió al ataque, y Harry furioso empezó a responder, pero parecía haber perdido fuerza, sus movimientos eran menos precisos que antes, sus golpes menos letales, menos certeros, por lo que Damon consiguió golpearlo en múltiples ocasiones, cada vez más y más rápido, mas y más fuerte, hasta que Harry cayó de rodillas... herido, impotente, débil...perdido.
Miró a su alrededor, la batalla continuaba, sus amigos estaban luchando fieramente, logrando ganar terreno poco a poco venciendo a muchos demonios, quedando muchos de ellos por el camino, pero tenían un ideal, una ilusión, algo por lo que luchar... pero él, se sentía perdido, las palabras de Damon habían conseguido calar mas hondo de lo que nadie pudiera imaginarse, el fantasma de los celos se cernía sobre él, a pesar de saber que Cat le amaba... ¿o era quizá que se sentía unida a él por culpa de los dos niños y de su destino, quizá nunca le había amado, sino desde que se casaron las cosas hubieran ido bien, mejor que nunca y al revés de lo previsto, no habían echo otra cosa que empeorar. Harry sacudió la cabeza impotente, no conseguía librarse de la desesperación en su pecho, todo de pronto se había vuelto más oscuro, no había esperanza, estaban perdidos sin remedio y él... solo deseaba morir.
Como si sus deseos se hubieran hecho realidad, Damon se puso en pie delante de él. Y le tomó del pelo obligándolo a mirarlo a los ojos. Damon levantó su espada en el aire dispuesto a dar el golpe definitivo...y lo hizo...
En el centro del cementerio rodeado por unas extrañas y ancestrales piedras cientos de magos luchaban encarnizadamente, unos encapuchados, otros con su rostro descubierto, junto con demonios y vampiros, los guerreros del bien estaban librando su última batalla y ella debía ayudarles.
Sin pensárselo dos veces, y rezando por que su magia funcionase esta vez, los ojos de Cat se volvieron violeta eléctrico, miles de rayos volvieron a surcar el cielo, pero esta vez uno de ellos descendió veloz. Damon sintiendo el peligro inminente tuvo el tiempo justo de saltar hacia atrás, quedando el impacto del rayo a unos escasos centímetros de las rodillas de Harry.
Damon miró a todos lados, era imposible, por no decir improbable que un rayo hubiese caído sobre el y con tanta puntería, Cat tenía que encontrarse allí.
Harry miró hacia el suelo negro, y lentamente fue levantando la cabeza, sabía que ella estaba allí "¿cómo se había atrevido en su estado?"
Harry- oyó a sus espaldas
Cat- susurró Damon mirándolos sin dar crédito a sus ojos
¿qué haces aquí?- saltó Harry de pronto tremendamente asustado, lo cierto es que la visión de Cat mojada, con las piernas llenas de cortes y su avanzado estado no presagiaban nada bueno en aquella batalla
He venido a cumplir con mi destino- respondió ella mirando a Damon
Harry sintió como a sus espaldas algo se acercaba peligrosamente hacia ellos, una luz roja lo deslumbro por el rabillo del ojo. Cat lo apartó y creó un potente muro protector para ambos que recibió todo el impacto de la maldición y se desintegró al instante
Me lo has puesto muy fácil cariño- exclamó Damon- cuando haya matado a tu querido marido serás toda mía.
¿sabes cual es tu problema Damon?- El demonio levantó una ceja- que eres incapaz de ver que amo a Harry más de lo que he amado a ningún hombre en toda mi vida... tanto si tengo que morir para que él viva- Cat sacó sus puñales haciendo caso omiso del dolor que tenía en la parte baja de la espalda- que sea así- Cat adoptó al pose defensiva
Harry sintió que su ira y su desesperanza volaban lejos para recuperar el sentimiento que tanto lo había ayudado antes, el calor volvió a extenderse por su cuerpo. Cat lo amaba, lo había amado siempre y estaba dispuesta a morir por el al igual que el moriría por ella y los suyos... ahora tenía el verdadero motivo para vivir, y estaba dispuesto a proteger a Cat y a su hijo a toda costa... aunque le costara la vida.
Damon había palidecido ante las palabras de Cat, sus ojos estaban ardiendo en llamas, todo el lo estaba haciendo, la ira, la furia, el mal en estado puro corrían por sus venas envenenando hasta la última célula de su cuerpo, que llegó a su punto máximo cuando Harry tomó a Cat de la mano para ocultarla detrás de su espalda, protegiéndola con su cuerpo.
Totalmente ciego por los hechos, Damon fue concentrando una poderosa bola de energía, un viento salvaje azotó a todos los presentes, magos, demonios, vampiros lanzándolos por los aires lejos, bien lejos, Cat tomó al mano de Harry para evitar volarse, cada vez el dolor que sentía en su cuerpo era mas intenso y seguido, pero ninguno de los dos podía moverse.
Estamos perdidos, no tendrías que haber venido- gritó Harry a Cat
No es cierto- respondió ella- el ha olvidado algo importante- Harry la miró interrogante- ahora, él es mortal, tiene el alma de un mortal en su interior.
Cat- gritó Harry- desaparece, yo me encargaré de él.
No puedo, el viento me lo impide
Damon lanzó contra ellos su poderoso hechizo, Harry de espaldas no lo vio, pero en la cabeza de Cat resonaron unas palabras "Lo harías por él, por ellos, por los que han sido, los que son y los que serán¿sacrificarías una vida a cambio de la de todos los demás¿o te quedarás acostada viendo como son arrastrados a un mundo de tinieblas" y entonces lo vio claro, era su momento, había llegado, debía morir si quería salvarlo... a todos, su cuerpo debía recibir todo el impacto, de lo contrarío si se estrellaba en otro sitio todos morirían, cientos de personas en varios kilómetros a la redonda, luego, el demonio quedaría tan debilitado que Harry podría vencerlo con facilidad.
Empujó fuertemente a su marido apartándolo del camino del rayo y abrió los brazos para absorber la mayor cantidad posible, la risa de Damon le traspasaba los oídos, pero ella no se aparto, miró a Harry levantarse del suelo aturdido y le gritó:
Te quiero Harry- el calor inundaba el cuerpo de Cat
Harry se levantó del suelo rápidamente, corrió hacia ella, el calor recorría su cuerpo y no podía pensar en otra cosa mas que en protegerla, casi al mismo tiempo en que el rayo impactaba contra Cat Harry la abrazó con fuerza...una cegadora luz dorada creció de los cuerpos de ambos, absorbió el rayo demoníaco y corrió veloz hacia él. Damon sorprendido y aturdido se volvió para salir corriendo, pero el rayo lo absorbió y continuó avanzando a lo largo de todo el cementerio, muchos demonios y vampiros, todos los que no pudieron huir quedaron en su interior sintiendo un fuego abrasador, notando como se iban quemando lenta, dolorosamente... los magos de bien, al contrarío notaban un agradable calor que se extendía desde su pecho hasta el último lugar de sus cuerpos, una energía positiva, una alegría desmesurada... el amor en estado puro.
Y tan pronto como había venido el rayo desapareció, incluso la tormenta escampó dando lugar a un hermoso amanecer con el sol despuntando al alba, calentando sus cuerpos, llenándolos de esperanza, miles de risas, de gritos de júbilo, de fuegos artificiales lanzados al cielo los rodearon... la luz había vuelto.
Harry abrió lentamente los ojos, notaba el sol sobre sus mejillas y un peso muy agradable sobre él, miró a Cat sobre su pecho todavía inconsciente, con el cabello totalmente pegado a su cara y su cuerpo... y de pronto sintió autentico terror, algo no marchaba bien.
CAT- gritó Harry levantándola por los hombros acunándola para despertarla.
Ella abrió los ojos lentamente para mirarlo y susurro "estoy viva!", Harry le sonrió unos instantes, pero el desasosiego de su cuerpo no desaparecía. La cara de Cat se congestionó en medio del dolor y empezó a respirar rápidamente. Harry la recorrió con la mirada, sus piernas estaban empapadas de sangre...
QUE ALGUIEN NOS AYUDE- gritó desesperado abrazándola con fuerza
Harry... lo siento, era mi destino
¿qué dices?- preguntó quitándole las lágrimas de los ojos
La voz me decía que debería sacrificar una vida para salvar las de todos los demás
¿qué voz?
La de Ayla, en mis sueños, la que no me dejaba dormir
¿Ayla dijo que debías morir?
No así, dijo que tendría que estar dispuesta a sacrificar una vida para salvar la de todos- Harry miró su cara blanquecina, para ir bajado hasta sus piernas ensangrentadas
Así que Ayla te dice que debes sacrificar una vida¿y tu piensas que es la tuya?
¿la de quien sino?- el silencio aplastante cayó sobre Cat como una fría losa, fue bajando hasta sus piernas y ahogó un grito de autentico miedo- Noooo!- sollozó
Solo espero que tu imprudencia no le cueste la vida a nuestro hijo, nunca te lo perdonaré
No, por favor, llévame a mi te lo ruego, Merlín, llévame a mi- las lágrimas bañaban los ojos de Cat- yo moriré pero que no le pase nada a mi hijo por favor.
¿Qué pasa? Hary, Cat- Albus Dumbledore llegó hasta ellos alertado por el grito y los sollozos de la chica- ¡Dios mío! Cat
Albus- Lecter llegó inmediatamente después junto con Hermione, Gabriel, Remus, Sirius, y Ron, sus ojos se abrieron horrorizados- No puede ser...
Cat!- gritó Sirius- hemos de llevarla a un hospital
No hay tiempo- susurró la voz de Ginny llegando con Malfoy- ha perdido demasiada sangre... el niño estará..
Nooooo, el esta vivo. Matadme a mi, pero salvadlo a él por favor- Harry continuaba sosteniendo a Cat, pero una mala sensación se había anidado en su pecho.
Dejadme pasar, soy médico también- Sean Malcovich hizo su aparición
Dime Cat, desde cuando no tienes dolores
No lo recuerdo, se que me dolía cuando he salido de casa, pero... no recuerdo mas... ¡He roto aguas al salir de casa!- exclamó de pronto- hace ya tres horas...¡noooo!- hágame una cesárea, me da igual desangrarme pero sáquelo, haga algo.
Por favor dejadnos sitio... Karl
Aquí estoy señor
¡ Sáquemelo!
Quieres calmarte Cat!- exclamó el hombre- no puedo hacerte una cesárea aquí.
Coja uno de mis puñales, le diré como ha de hacerlo
¿No te das cuenta de que si no mueres desangrada morías de dolor?
ME DA IGUAL, SALVE A MI HIJO, YO NO IMPORT... ¡AGGG!
¡CAT!- exclamó Harry asustado- ¿qué es eso?- preguntó a Sean
Una contracción!- exclamó Cat
Dejadme ver- Malchovich se puso delante de ella separándole las piernas, para extenderle encima una túnica.
Con mucho cuidado se arrodilló tras frotarse las manos, retiró la ropa interior de Cat apartándola lejos. Con mucho cuidado introdujo dos de sus dedos para explorar el territorio, la dilatación, arrugó un poco la frente mientras Cat contenía otro grito, apretó fuertemente la mano que Harry le daba, el chico apretó los labios, pero no dijo nada. El hombre notó como todos los músculos de la vagina se contraían fuertemente sobre sus dedos, y entonces lo notó.
La cabeza esta aquí- clamó con fuerza
Se retiró hacia atrás, cabe decir que de los pocos que quedaban presenciando el momento, solo Ron había perdido el conocimiento.
Esta coronando- exclamó- la dilatación es suficiente, Cat prepárate para empujar. Dadme un cuchillo, algo.- Sirius le pasó una pequeña daga que el tomó entre sus manos para hacer un pequeño corte y evitar que Cat se desgarrara. Sean tenía las manos cubiertas de sangre hasta casi los codos, con cada contracción un poco de sangre era escupida del interior de Cat empapando la túnica de Sean
Bien- dijo cuando notó como llegaba otra contracción con una mano sobre el vientre y la otra preparada para recibir una nueva vida, - ¡EMPUJA!
Ahhh!- gritó Cat con su cara congestionada de dolor, mientras miles de gotas perlaban su frente, Harry a su lado inconscientemente empuja fuerte como ella "vamos pequeña" le susurraba al oido.
Malcovich vio como Cat evacuaba en ese momento al hacer fuerza, pero no le dio la mas mínima importancia, "siempre pasa" pensó con una sonrisa. "Ha salido la cabeza" exclamó, nadie podía ver que estaba pasando, su capa sobre las piernas de Cat se lo impedia
Empuja!- volvió a gritar- esta saliendo el primer hombro
La cara de Cat se volvió a contraer de dolor mientras empujaba con fuerza,
No puedo mas
Venga Cat, no te rindas- susurró Harry en su oído
Venga, el último...¡EMPUJA!
Con un último esfuerzo, antes de caer rendida sobre el pecho de Harry, Cat dio a luz a su hijo. En el suelo, en medio de la hierba, entre suciedad y sangre se llevó a cabo el milagro de la vida, en un lugar en que las almas de los muertos paseaban libremente entre los hombres.
Todos estaban llorando, viendo como Malcovich volvía a manejar su cuchillo para cortar el cordón umbilical, su rostro se había tornado serio en medio de los sollozos de Cat...
Quiero verlo- exclamó de pronto alargando los brazos entre sus piernas abiertas hacia el hombre.
Este miró a Dumbledore y Lecter con gesto sombrío. Tomó la capa que Karl le tendía y envolvió algo que ninguno de ellos alcanzo a ver¿o era una pelusilla morena lo que se veía en la capa?. Karl se levantó y corrió lejos de allí
- ¿qué hace?- preguntó- Dumbledore, la mirada en el rostro de Sean le hizo suponer lo peor, a todos
Deme a mi hijo- gimió Cat extendiendo los brazos
Cat- susurró el hombre dulcemente- eso no va a ser posible...
Nooo!- ella empezó a llorar de nuevo- el esta vivo, lo se... quiere quitármelo.. démelo
Cat, vuestro hijo a muerto, estaba..., habías perdido mucha sangre, el ya se había desprendido de la placenta, ha tragado demasiada porquería, no tenía oxígeno... compréndelo Cat
NOOOO, quiere quitármelo- Se agarró fuertemente a la túnica de Harry- Harry el esta vivo, lo se, lo siento, dile que me lo de...
Harry la miró unos momentos, miró a Sean que asintió y muy lentamente se fue levantando para dejar sin apoyo a Cat, todos lloraban, y en un último esfuerzo, Cat intentó levantarse para ser sostenida fuertemente por Gabriel:
AHH!- volvió a gritar Cat, el dolor no había terminado
¿qué pasa ahora?- preguntó Lecter
la placenta!- jadeó Cat
Todos pudieron ver como algo de color gris mate ensangrentado y con múltiples venas caía entre las piernas de Cat acompañado de sangre y fluidos. Con mucha maestría, Hermione la recogió guardándola en una bolsa. Cat volvió ha hacer fuerza para intentar librarse del amarre de Gabriel, notó como este apoyaba una mano en su cabeza... y luego todo fue oscuridad.
Sean se levantó del suelo limpiándose las manos y brazos con la túnica sucia:
Deberíais llevarla aun hospital para que la suturen y revisen si la plancenta estaba completa- Gabriel la tomo en brazos para llevarla a San Mungo. Miró a Harry- lo siento Harry, el niño ya había muerto y no quería que ella lo viera... estaba en demasiado mal estado como para ello
Gracias por lo que ha hecho
Ojala hubiera podido hacer más
No ha sido su culpa- Harry bajó la mirada y el hombre disculpándose por tener cosas que hacer desapareció- ha sido culpa de ella, nunca tendría que haber venido a la batalla
¡Harry!- exclamó Hermione- no te atrevas a decir eso nunca, ella... ella... ha hecho lo que debía para salvarnos a todos, ha sido muy valiente
Ella debería haberse quedado en casa, como habíamos planeado
En la guerra siempre hay muertos Harry-añadió Hermione llorosa
Si, pero en la guerra no mueren seres que aun no han nacido. Y mi hijo no va a poder vivir por culpa de la irresponsabilidad de su madre- Harry sintió como la mejilla le ardía. Hermione le había abofeteado
¿Cómo puedes decir eso¿sabes como se sentirá ahora ella con todo esto, en lugar de admirarla por arriesgar tanto para salvarnos a todos, para que podamos vivir en paz, tu en lugar de apoyarla y ayudarla, le das la espalda... la vas a volver a matar¿qué habrías echo tu en su lugar, quedarte en casa a pesar de saber que tus amigos iban a morir o acudir en su ayuda?
Muy aturdido, Harry miró a Hermione con una mirada fría como el hielo, sin responderle se dio media vuelta y desapareció.
Harry!- gritó Hermione, pero Dumbledore la detuvo
Déjalo Hermione, Harry esta tan dolido como vaya a estarlo Cat y necesita meditar sobre lo ocurrido. Es decisión suya el ir a su lado o no
¡usted también culpa a Cat de lo sucedido!
NO, en realidad ella actúo pensando que era lo mejor para todos, solo que no tuvo en cuenta todos los factores. Pero su ayuda nos salvo, aunque no fuera consciente de que quizá podría haber esperado para la próxima batalla.
Hermione se soltó de el y lo miró horrorizada
No quiero que ninguno de vosotros, si eso es lo que pensáis de ella vayáis al hospital a verla. No quiero que la hundáis mas en su desesperación...- y dándose la vuelta despareció
Yo también voy al hospital- susurró Sirius
Te acompaño amigo- Remus le puso una mano sobre su hombro- necesitará todo el apoyo del mundo ahora que ha perdido a su hijo y a Harry
Lo se, no voy a dejar que desaparezca otra vez- miró a Dumbledore- no creo que ninguno de nosotros sea quien para juzgarla por sus actos, yo por mi parte prefiero una hija viva y feliz que una hija y un nieto muertos- ambos desparecieron en el acto.
Dumbledore miró a Lecter "No era eso lo que quería decir" susurró el viejo "siento lo que le ha pasado a Cat y Harry, y voy a ir a hablar con ella en cuanto pueda, para darle mi cariño más sincero y apoyarla"
Lo se amigo- respondió Lecter- los dos iremos a verla, aunque quizá debamos hablar con Harry también, no puede dejarla sola con todo esto
¡Harry, no entiendo lo que ha pasado, ellos estaban tan felices juntos, y se aman tanto a pesar de todo, pero de un tiempo a esta parte es como si todo les saliera mal, como si no pudieran ser felices juntos
Lo se, y eso es lo que mas me preocupa. Ellos a pesar de quererse tanto ya se habían distanciado, quizá esta vez si sea definitivo
Creo que deberemos dejar pasar el tiempo para que las heridas sanen.. y entonces veremos que pasa
Harry apareció en la mansión de Godric, cruzó el patio hasta la puerta y se dirigió a su cuarto, se detuvo unos momentos, los hechizos no estaban puestos, había entrado como si nada, el desasosiego volvió a su pecho al ver marcas de pisadas en el suelo... era como si alguien hubiese entrado, o quizá no, la tierra estaba blanda y cualquiera de los magos que estaban en el patio las podía haber dejado al entrar esa noche.
Subió a su cuarto y abrió la puerta, un olor penetrante le llegó, observó el lugar para ver la cama desecha, en el suelo había una mancha de algo que se había secado, avanzó hacia la cama y pudo ver lo mismo en las sábanas y el colchón. Las lágrimas asomaron a sus ojos y en un arranque de furia se quitó al túnica quedando con el pecho descubierto, hizo aparecer un cubo con agua y un cepillo. Se arrodillo y empezó a limpiar con furia los rastros que Cat había dejado en el suelo mientras las lágrimas bañaban sus ojos.
Cuando acabó cogió todas las sábanas, la colcha e hizo levitar el colchón para llevarlo todo hasta el patio, ni tan solo notó el frío golpear sobre su desnudo pecho, lo amontonó todo y lanzó una brutal llamarada... todo ardió en llamas... Jonh, Cat, sus sueños juntos, su vida... porque ya no le quedaba nada, ni tan solo el calor de la hoguera lo hizo volver a la realidad, seguía notándose frío por dentro.
Cat fue abriendo los ojos lentamente, notaba su cuerpo dolorido, las lágrimas llegaron rápidamente a sus ojos cuando notó su vientre de tamaño normal, la cruda realidad cayó sobre ella como una losa. Su deseado hijo había muerto, un lamento escapó de sus labios. Sintió como una mano se posaba sobre las suyas y abrió los ojos esperando ver a la única persona que en ese momento podía reconfortarla... Hermione le devolvió una triste mirada. Cat empezó a llorar más fuerte y se vio rodeada por unos fuertes brazos, unos que ella no deseaba... los de Gabriel. Cuando el llanto ceso, se retiró hacia atrás para enfrentarlos
Hubiera preferido morir yo- susurró
No digas eso Cat- exclamó Hermione tomándole las manos- tomaste una decisión y nosotros te apoyaremos siempre.
Gracias... ¿dónde... esta Harry?
Se marcho del cementerio después de que te trajimos a San Mungo hace dos días... nadie lo ha vuelto a ver
¿aun no ha venido ...
No Cat- añadió Gabriel tristemente, mientras las manos de ella se cerraban fuertemente entre las sábanas- estaba desecho cuando se marcho... has de comprenderlo
Le comprendo, me culpa de lo sucedido y con razón. Entiendo que no quiera verme...
¿qué vas a hacer ahora?- preguntó tímidamente Hermione
Para empezar... voy a buscar a Jonh
¡QUE!- exclamaron los dos a la vez- Cat... Jonh ha muerto
No ha muerto, no te atrevas a decir eso nunca Hermione, Jonh esta vivo en alguna parte, me lo dice el corazón, mi corazón de madre sabe que el esta vivo- Hermione fue a replicar, pero una mano sobre su hombro la hizo retractarse.
En ese momento, la puerta se abrió, y una melena pelirroja saltó encima de la cama de Cat dándole un fuerte abrazo, Gabriel y Hermione se marcharon para dejarlas solas, las dos estaban llorando.
Harry estaba sentado en el tejado de la casa, vestido exactamente igual que cuando había vuelto de la batalla, no había visto a nadie, y no se había movido de allí en dos días. No le quedaban fuerzas, ahora que por fin podían ser felices, que habían acabado con el señor oscuro, el había perdido todo... a su esposa, a la que en ese mismo momento no podía perdonar por la muerte de su hijo... y sabía que estaba siendo injusto, pero es que no podía verla, no ahora, en ese momento cuando todo el dolor estaba a flor de piel, no, debía dejar que las heridas sanasen y entonces iría a verla.
Pensó en Lily en esos momentos, la niña había sido la única que había subido a verlo...¡que lista, todos buscándolo y ella había dado con él. Un amago de sonrisa apareció en sus labios al recordar como lo había abrazado y juntos habían llorado la muerte de su hermano, cuanta paz había sentido en ese momento, aunque no había conseguido calmarse del todo, no era ella con quien debía llorar la perdida de su hijo, pero por ahora no tenía fuerzas.
Lily
Dime Papa
¿has visto a tu madre?
Si, pero ella aún esta inconsciente, cada vez que se despierta solo habla incoherencias y la vuelven a dormir- Harry se cubrió la cabeza con las manos- ¿por qué no vas a verla?
Porque en este momento no puedo, necesito ser fuerte... necesito tiempo
¿vas a marcharte?
Voy a irme al colegio, en unos meses empiezan las clases y quiero prepararlo todo bien. Necesito alejarme de la casa por un tiempo- Lily solo asintió
Entonces nos veremos cuando empiece el colegio¿te parece?
Me parece estupendo- respondió Harry sonriendo poniéndose en pie- ¿cuidaras de tu madre por mi?
Sabes que si, pero...
Lo se, pero dame tiempo, te prometo que hablare con ella
Dándole un último abrazo, Lily bajó del tejado dejando allí a Harry meditando sobre todo lo sucedido en los últimos días.
Cat y Lily estaban abrazadas en la cama, llorando las dos, una aliviando a la otra, no supieron cuanto tiempo pasaron así, aunque poco a poco las lágrimas fueron cesando. Lily se separo de su madre, pero ella bajó la cabeza
Mama- susurró Lily
Lo siento pequeña, siento todo lo que ha pasado ¿me perdonas?- preguntó con ojos llorosos.
Mama!- exclamó Lily en un susurró ahogado- no tengo nada que perdonarte, no has hecho nada malo
Por favor- Lily lo pensó unos momentos
Te perdono- Cat volvió a abrazarla, aliviando en parte su carga- Bueno, ya esta bien de llorar- exclamó la pequeña
Tienes razón, ahora tengo que ponerme bien pronto
Desde luego, has de volver a casa- la cara de Cat se ensombreció- no me mires así el abuelo, Remus y los demás están deseando verte...
¿y tu padre?- Lily hizo una mueca- ¿qué pasa?
Se ha marchado al colegio esta mañana- Cat se mordió el labio inferior
No quiere verme- susurró
Quiere verte, pero necesita tiempo para asimilar todo lo que ha pasado
Lily, hay algo que tengo que contarte- la niña la miró curiosa- verás, es que no estoy segura de que tu hermano este muerto
¿Lo dices en serio?
Totalmente, algo dentro de mi me dice que tu hermano sigue con vida en algún lugar... quiero investigar, buscarlo... ¿crees que me he vuelto loca?
No, creo que si tu corazón te dice que Jonh esta vivo es por algo...- pareció meditar unos instantes- Me iré contigo
No, debes permanecer junto a tu padre, cuidar de él, yo estaré bien
Vamos ha hacer un trato, el colegio empieza dentro de unos meses, me marcharé contigo y cuando llegue el momento de ir al cole acudiré, pero durante las vacaciones iré donde tu estés... quiero ayudar.
Esta bien, te vendrás conmigo.
El tiempo pasó poco a poco, Harry no volvió del colegio durante el tiempo que Cat estuvo esperándolo en casa, así que un día decidió partir para investigar la muerte de su hijo. Fueron muchos los que trataron de hacerla reaccionar, de hacerle ver que era una búsqueda inútil, pero ella tenía tal convicción en sus creencias que ninguno pudo hacerla recapacitar, la decisión estaba tomada, así que un día de febrero, justo cuando Lily cumplía 11 años... ambas se marcharon de casa.
Por su parte, Harry pasó la mayor parte de este tiempo en el colegio, preparando las clases (iban a ser geniales), curando poco a poco sus heridas, iniciando una nueva vida... volvió a Godric en marzo para descubrir que Cat y Lily ya se habían marchado, sintió una gran frustración dentro de sí, había llegado tarde y Cat se había cansado de esperarle... aunque quizá lo que mas le choco fue saber el motivo de la partida de Cat, y es que dentro de su ser, el se había dado cuenta de que compartía una sensación con ella, una sensación fuerte, una sensación de esperanza...
F I N
Lo se, lo se, no es el final que esperabais... pero podeis consolaros pensando que hay un epilogo...¡EPILOGO, EPILOGO, EPILOGO! jejejejeje.
Podeis lanzarme todos los tomatazos que querais... pero con un review, me gustaria tener opiniones sinceras... besos.
