Disclaimer: Los personajes de Naruto no me pertenecen (si me pertenecieran, Orochimaru sería el esclavo sexual de Zelha xDD e Itachi el mio jajaja), este escrito son solo ideas de una fan plasmadas en palabras escritas.

Capitulo VI: Sacrifice

Faltaban dos días para la fiesta, pero las cosas en Konoha seguían su ritmo habitual. Los futuros genins iban a las clases de la Academia donde un siempre sonriente y dulce Iruka les esperaba para comenzar sus clases. Pero uno de ellos aún estaba frente a la piedra de los caídos observándola con melancolía, hacía unos años de la perdida del tercero pero su nieto Konohamaru iba a visitar aquel lugar diariamente. Aunque aquel día alguien se le adelantó.

Había una mujer con ropas de jounin apostada a los pies de la piedra, tenía el cabello largo y oscuro y parecía temblar levemente. Konohamaru pensó que lo mejor en aquellos momentos podría ser no acercarse pero ella se volvió al muchacho. Los ojos dorados se clavaron en él y sus labios tapados con aquella mascara esbozaron una sonrisa;

- Yo ya me iba… -se volvió a la piedra y Konohamaru acertó a ver que ella acarició levemente el nombre de Sarutobi

- Usted... ¿no es de aquí verdad? Es de la Arena –dijo señalándole el protector que la muchacha llevaba colocado en un brazo- ¿De que conocía a mi abuelo?

Midori se sorprendió levemente y miró a aquel muchacho que podría tener unos 14 años, aquellos ojos y el color de su cabello no daba opción a pensar que no fuera alguien de su familia. Se parecía demasiado al Sarutobi que ella conoció mientras entrenaba con Tsunade-hime, además de aquella foto que su maestra siempre cargaba con ella. Revolvió los cabellos del muchacho ante la extrañeza de este;

- Yo soy de aquí, entrené aquí y aquí me hice ninja –dijo mirando al muchacho- tu abuelo fue el sensei de mi propia sensei, Tsunade…

- ¿De la quinta?

- Así es – ella volvió a mirarle, aquel muchacho también le recordaba a Naruto- ¿Cuál es tu nombre?

- Konohamaru…

- Le llamaré como la tierra a la que amo, para que sepa que es su destino como el mío protegerla –susurró ella- fueron palabras de tu abuelo a unas preguntas nuestras cuando éramos niños… -volteó a mirar la piedra- ¿le echas mucho de menos verdad?

- Ese viejo –Konohamaru se limpió una lagrima que estuvo a punto de salir de sus ojos. Midori se mordió los labios, entre Asuma, Kurenai, Nakuru y Kakashi le habían contado lo que pasó cuando el sonido atacó Konoha, tenía también la visión de Kankuro, Temari y Gaara pero de igual manera necesitaba saber quien había terminado con Sarutobi.

- Orochimaru –suspiró la jounin levemente- es la fuente de muchos de nuestros problemas.

- El poder de Konoha le destruirá –susurró el muchacho, en eso el ruido de un reloj dando la hora en punto le despertó- Oh oh… Iruka sensei me matará… Encantado de conocerla señorita…

- Naname, Midori Naname… -Konohamaru parpadeó levemente y la miró fugazmente.

- Me alegra conocerla… y ahora –una sonrisa traviesa se dibujó en sus labios mientras corría calle abajo.

Midori sonrió tras la mascara, siempre en todos los años había algún gennin que tardaba, y otro que sonreía así… los que deseaban servir a Konoha… Uno de los nombres de la piedra brilló tomando la atención de la enmascarada por unos segundos, como si con eso quisiera decir que él era parte de todo eso que veía en Konoha. Pasó dos dedos sobre el nombre y sonrió con tristeza, habían sufrido mucho de niños al saber todo aquello que había pasado… Levantó la mirada leyendo en ellos tantos nombres, que tres vinieron rápidamente a su vista;

- Obito… Yondaime… Sarutobi…

- Hoy hace quince años que nos dejó –escuchó una voz tras de ella, Nakuru

- Estamos hechas unas viejas –se volvió con una sonrisa a su amiga descubriendo a más personas, Kakashi y Sasuke- Tu tampoco te libras de la edad Kakashi.

El ninja copia pareció sonreír bajo la mascara y miró la lapida, justo al nombre de su amigo a quien venía diariamente igual que Nakuru, a contarle todo lo que pasaba. Sasuke se acercó a la piedra y dejó bajo ella una pequeña moneda con el símbolo de los Uchiha, él no había conocido a Obito pero entre todos le habían contado de él y se sentía bien al saber que entre todo su perdido clan, había alguien a quien admirar, y mucho. Midori suspiró audiblemente al ver el sello de Orochimaru y se acercó al muchacho colocándole una mano en el hombro, miró la piedra como si mirara a Obito pidiéndole una señal sobre que hacer.

- ¿Seguro Sasuke?

- Si… quiero servir a Konoha, no tener que estar siempre subordinado a los caprichos de Orochimaru.

- ¿Después de las pruebas de ANBU? –el muchacho asintió serio, la Naname le miró y después a aquella piedra- sientete orgulloso Obito, tenemos un gran Uchiha en Konoha.

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Kankuro caminaba pensativo por las calles de Konoha, Gaara le había dicho claramente que necesitaba una pareja para aquel baile recalcándole perfectamente que todos ya tenían una y él no podría ser menos. ¡Hasta la pequeña Reiko tenia pareja! Además estaban en Konoha y allí no conocía demasiado bien a todo el mundo, menos a las chicas. Solo a aquella amiga de Naruto, Sakura y a su amiga Ino; y seguramente ninguna de aquellas dos iría con él… aunque él tampoco iría con ellas, no le gustaban las niñas tan escandalosas. Sonrió maliciosamente ante sus pensamientos y siguió caminando, pensando en que podría hacer.

Sin darse cuenta llegó a un descampado donde escuchó unos ruidos de golpes de armas, "tal vez una pelea" pensó el hermano de Temari y Gaara adentrándose silenciosamente. Su sorpresa fue a mayores al ver a una muchacha entrenando, ella de cabellos castaños recogidos en dos monos en su cabeza se movía con destreza lanzando kunais, con otro movimiento desenrolló un par de pergaminos de los que después de hacer unos sellos salieron varias armas disparándose a algunas dianas colgadas en árboles. Kankuro la miró fijamente, aquella muchacha era la que había peleado en el examen de chuunin contra Temari. La muchacha se sintió observada y volviéndose lanzó un kunai que dio justo al lado de la cabeza de Kankuro; Tenten se colocó en postura de ataque y el hermano de Temari salió lentamente.

- No soy ningún contrario jeje…

- Ah, perdóname Kankuro-san –dijo la muchacha de los dos cocos rápidamente- es que pensé que estaba sola…

- Escuché ruido de kunais y pensé que podrían estar atacando a Konoha –el marionetista se quedó mirando fijamente a la muchacha, sin duda alguna no parecía tan gritona como Sakura o Ino, además de que se le veía fuerte y dulce a la vez.

- Es que entrenaba –sonrió ella

- ¿Entrenabas? –Tenten asintió con una sonrisa.

- Agilizo mis reflejos y mejoro mi puntería, por no hablar de la rapidez –dijo ella- No quiero ser una carga cuando me destinen a alguna misión. Además los exámenes para chuunin son pronto y me gustaría pasarlos…

- Si quieres puedo ayudarte –susurró levemente el marionetista poniendo la Karasu entre ambos – así podré ayudarte con algún punto en contra que tengas.

- Pero…

- No tengo nada importante que hacer¿aceptas? – Tenten sonrió aceptando, no le vendría mal la ayuda de alguien más.

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Las horas de clases para los más pequeños parecían pasar más rápido de lo normal, los días antes de algo grande como eran los exámenes para chuunin, jounin y ANBU solía haber mucho bullicio en las siempre tranquilas calles de Konoha y los estudiantes estaban más ansiosos de lo normal. Iruka apoyado en una de las paredes de la Academia vigilaba a los futuros genins quienes corrían de un lado a otro, más allá había algunos grupos de recientes genins y futuros chuunins, entre ellos Hanabi Hyuuga y Konohamaru quienes platicaban entre ellos. El maestro chuunin suspiró levemente, todos absolutamente todos ansiaban el escalar posiciones, llegar a ser jounin, ANBU… cualquier cosa menos quedarse atrás… Todos menos él.

A Iruka le gustaba enseñarles a aquellos niños, se sentía orgulloso de que sus alumnos fueran años después a darle agradecimiento por la ayuda, le gustaba ayudarles y compartir con ellos cualquier momento, eliminar cualquier duda de sus mentes aún inocentes. Algunos llegaban a ser tan buenos como aquellos nueve novatos, Ino, Chouji, Sasuke, Kiba,Hinata… Naruto… Iruka miró al cielo, Naruto aquel si que había crecido no solo físicamente sino mentalmente; el entrenamiento que había tenido con Jiraiya le había hecho más firme en sus convicciones, los entrenamientos con Kakashi más fuerte y el apoyo de Sasuke, después de casi perder la vida por traerle, habían llenado las expectativas del rubio. Él le había dicho a Iruka que había visto al moreno como al hermano que jamás tuvo, y Sasuke parecía haberse apoyado en el rubio y en la idea de luchar junto a él.

Aún así había alguien que le preocupaba y era Sakura, ella llevaba mucho tiempo entrenando con la Godaime, se había separado de aquellos dos que aunque entrenasen con dos maestros distintos, como Jiraiya y Kakashi, tras de aquellos entrenamientos se veían para complementarse entre ellos. Todo ese tiempo que no había compartido con ambos se había distanciado de los otros dos y ahora parecía perdida. Tanto que llevaba dos horas parada en aquel patio, pensativa; ni siquiera se había metido con Ino quien la había chinchado diciéndole que iría con Chouji a la fiesta de la Godaime… ¿sería eso? Iruka suspiró derrotado, los 18 años era una edad muy complicada; aún así se acercó a ella y se colocó a su lado revolviendo con su mano los ya largos cabellos de la muchacha pelirrosa.

- ¿No te aburres aquí parada Sakura?

- Oh… Iruka-sensei… -ella sonrió apenada e Iruka dejó sus brazos tras su nuca, mirando el cielo.

- ¿Problemas? –volvió a preguntar este - ¿es Sasuke? –Ella suspiró dándole un "si" a su antiguo sensei.

- No es solo eso, todos tienen pareja para la fiesta. Hasta la cerda… eh, Ino… todas las chicas, hasta las nuevas. Una de ellas irá con Sasuke a la fiesta, por petición de él –susurró la pelirrosa- y yo por tonta y esperar me quedé sola…

El chuunin suspiró, lo suyo no eran este tipo de conversaciones; sus conversaciones con Naruto eran algo que se les daba naturalmente y que terminaba con una comilona en el Ichiraku. Hasta ahí llegaba pero ¿como ayudar a Sakura si él en su vida, jamás había salido con nadie? Ni siquiera un roce, un beso… Miró a la muchacha, pensativo, para luego negar en un suave movimiento; esa era una mala idea. Sakura le miraba de reojo interesada en los devaneos de su antiguo sensei; él volvió su mirada a los ojos verdes de Sakura y sonrió.

- ¿Por qué no vienes conmigo? –Sakura parpadeó un par de veces, confundida mirando a Iruka, este sonreía levemente – Es una cita de amigos¿te parece?

- Bueno… -parpadeó un par de veces confundida para después sonreírle a Iruka, Ino se moriría de envidia al saberlo – es una cita – terminó sonriéndole abiertamente al chuunin.

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- ¿Estás segura de esto? –susurraba a las afueras de la oficina de Tsunade un bultito de cabellos castaños a otro de cabellos oscuros – si nos pilla va a matarnos.

- Pero ella se lo buscó – respondió el otro bultito- no puede mandar algo cuando ella es la primera que no lo hace… tu tráele aquí y yo me ocupo de lo demás.

Después de varios cuchicheos, haciéndose gala de su velocidad Nakuru sale disparada al exterior en busca de alguien. Midori se levanta caminando un par de pasos y abriendo la puerta del despacho de Tsunade quien se encontraba leyendo un libro enorme. La mujer levanta su mirada a los ambarinos ojos de la chica, quien sonríe mostrándole una botella de sake.

- Aún no hemos celebrado mi vuelta.

- Pero yo no debería…

- Sensei,eres la Hokage, quien va a decirte nada; además solo es un traguito… anda…

La Godaime acepta, ambas sonríen mientras levantan sus tragos tomándolo de una vez. Midori ha dejado por unos segundos la cara a la vista de la Hokage quien sonríe, Tsunade parpadea levemente viendo algo borroso, se talla los ojos y no se da cuenta de que Midori ha escupido el sake en una bonita maceta que Shizune había dejado.

- ¿Sensei? –la mujer le mira extrañada y sonríe tontamente- jejeje perfecto, suero de la verdad listo.. Tsunade-sama, tengo una preguntita que hacerle, pensará ir a la fiesta con alguien ¿no?

- Hmr… pensar se…piensa –dice con voz cortada- pero con quien…

- Jiraiya-sama por ejemplo – sonríe la jounin con maldad

- Pero es un pervertido… pervertidoooo- remarca la Sannin en su borrachera, en ese momento Nakuru trae a Jiraiya, ella le sonríe y empuja hacia la Sannin y su compañera.

- Pero –prosigue Midori – si se lo pidiera, seguro que iría con él ¿verdad? –la Sannin no habla más, simplemente asiente con la cabeza. Midori mira a Nakuru sonriendo y antes de salir empuja a Jiraiya para que lo intente, cerrando la puerta tras de ellas.

- ¡Jajaja¿Crees que valdrá?

- Mas nos vale- dice la morena- solo espero que tu querido Izumo lo grabe todo perfectamente. Nakuru se sonroja levemente – ¿Que le diste a cambio pilla?

En ese momento cierto muchacho de pelo puntiagudo pasa delante de ellas, saluda a la morena con un leve movimiento de cabeza mientras mira a Nakuru de reojo, esta suspira audiblemente;

- Kotetsu… -el chico no se para, pero al levantar la mirada se encuentra a Kakashi frente a él a quien mira con el ceño fruncido. Nakuru y Midori se quedan por unos segundos expectantes, ellos solo se miran hasta que alguien rompe aquellas miradas.

Un pelirrojo de 18 años llega ante las dos mujeres, saludándolas; besa la mano de la Sakurai y la mejilla de Midori.

- Éramos pocos y parió la abuela –sonríe la Naname entre dientes, a su compañera

- Hombres –suspira la otra.

Por suerte dos muchachitas entran corriendo rompiendo aquel incomodo silencio, una es Reiko y la otra Ino quien llega ante sus maestras.

- Estoo… -susurra Ino dándose cuenta de todo, en ese entonces Kotetsu parece darse cuenta de todo y vuelve a su camino y Kakashi, prosigue solo él sabe donde. El Kazekage se queda con ellas – Midori-san, Nakuru –san pensando que mañana es la fiesta hemos pensado si…

- …si podemos suspender la practica de hoy –sigue la menor de las Naname- para ir de compras.

Las dos se miran con un pequeño brillo cómplice;

- Es la mejor práctica¿no crees Nakuru?

- Llamad a todas –dice la muchacha castaña en voz alta con el puño hacia el techo- ¡nos vamos de compras!

Una enorme gota aplastó a Gaara… mujeres y compras…


Notas: De nuevo gracias a Zel por el apoyo, a Naku por sus arts preciosos y a Reikito por aparecerse a ultima hora XD

Este capitulillo está algo flojo pero lo fuerte viene pronto y quería hacer algo despreocupado jeje… Aviso que el siguiente va a tardar tal vez algo más puesto que tengo q adelantar un capitulo de otro fic XP, triste vida de escritora ajaja.

Aviso, el siguiente capitulo subirá esto a rango M puesto que va a contener lemon, para que no se asusten jeje.

Zelha: jajaja bruja que eres una bruja¡saca también la escoba para los que no lean!

Mey: ¿superMidori? No le digas esas cosas que termina creyendoselo ( Midori: ¬¬…) Espero que te haya llegado el art y que te guste, es obra de mi imoto consentida, Nakuru.

RiMi: Espero que hayas terminado de escribir mujer, menos mal que me añadiste a MSN … ¿Te cae bien Mizanaki? Jejeje esta es más dura que un turron caducao jajaja pero es una buena tia. Midori y Kakashi juntos, jejeje… me parece que algo de eso habrá, no se yooo no se ;).Claro que tu review me ilusiona mujer, ademas de que me ilusiono mucho el hablar contigo, a ver cuando volvemos a coincidir.

Kagome1013: Jejeje no tengo de otra, NaruHina me encanta igual que el ShikaTema digamos que son parejas preestablecidas para mi espero que este capi loco te guste.

Gracias chicas ;)