Capítulo 5. Desesperadamente buscando a Lily.

Si no fuera porque la mitad de los pasajeros se comportaban como locos, el día hubiese sido precioso. El sol estaba en todo lo alto y el mar estaba de lo más tranquilo, aunque si algún bote intentaba acercarse al barco, las olas se elevaban y el mar se encrespaba, por lo que por un tiempo los capitanes de los barcos que se encontraban cerca de "La Doncella de los Mares" (nombre del crucero en donde viajan nuestros protagonistas) y el propio capitán Ozhora optaron por dejar lo de los botes por la paz.

Intentemos mejor averiguar en dónde está la avería.- les dijo el capitán al resto de la tripulación.- A ver si conseguimos hacer que este barco funcione otra vez.

Mientras tanto, la Selección Japonesa y demás agregados culturales decidieron disfrutar del crucero, suponiendo que alguien estuviese de humor para hacerlo. La mitad de los pasajeros, como ya había dicho, se comportaban como locos y la otra mitad estaba de lo más deprimida por la pérdida de sus amores.

¿Piña colada?.- Sakura se acercó a algunos integrantes de la Selección, usando un vestido floreado de tela transparente.

Gracias.- aceptaron varios, pero Genzo ni caso le hizo.

¿Tú no gustas una bebida?.- le preguntó Sakura.

No, gracias.- negó Genzo, estirando el cuello para ver en dónde rayos se habían metido Lily y Ken.

Estás muy serio.- comentó Sakura.

Así soy yo.- replicó Genzo, secamente.

Creo que extrañas a tu novia, ¿cierto?.- habló Sakura en voz baja.

No tienes ni una idea de cuánto... .- musitó Genzo.

Muy a su pesar, Sakura sintió algo de lástima por Genzo. Era cierto que a ella le convenía que Lily estuviese alejada de él, pero en los ojos del portero se vislumbraba algo de desesperación y tristeza. Sakura nunca le había visto esa mirada en los partidos que pasaban por televisión.

Disculpa.- le habló Ken a Sakura.- ¿Nos podrías traer una piña colada?

Con todo gusto.- respondió Sakura, sonriente, aunque en verdad le hubiese gustado llevarles un poco de cianuro.- En un segundo regreso.

Gracias.- Lily sonrió dulcemente.

Genzo los miraba a los dos sin disimulo.

¿Pasa algo, Gen?.- le preguntó Lily, un poco divertida.- No nos quitas la mirada de encima.

Es que tienen monitos en la cara.- respondió Genzo, aludiendo a una broma que Lily solía hacer mucho.

¡Ah!.- Lily soltó una carcajada.- ¿Tengo monitos en la cara o qué?

Sí.- Genzo sonrió al ver reír a Lily con tanta alegría.

Durante un breve momento entre Genzo y Lily se estableció esa conexión que siempre hubo entre ellos, desde el primer momento en que se vieron. Lily lo miró con cierta sorpresa, como si estuviese reconociendo el sentimiento que momentáneamente experimentó por Genzo segundos antes.

Recuérdame.- murmuró Genzo.- Recuerda lo que sientes por mí...

-FLASH BACK-

El día en que Genzo vio a Lily por primera vez, él había pescado un resfriado bastante fuerte. Muy a su pesar, fue al médico del equipo por indicación de su entrenador, quien no lo dejaría seguir entrenando si seguía sin tratarse la gripe.

Lo atenderán en un segundo.- le informó la pasante de enfermería.- Espere aquí, por favor.

Muy bien.- aceptó Genzo.

Minutos después entró en la habitación la estudiante de medicina más hermosa que Genzo hubiese visto jamás. De hecho, era la mujer más hermosa que él hubiese visto jamás...

Buenas tardes.- saludó la chica.

Buenas tardes.- saludó Genzo.

¿Qué edad tiene?.- preguntó ella.

Diecinueve.- contestó Genzo.

¿Qué molestias tiene?

Tengo mucho dolor de garganta y una tos que no se me quita con nada.- dijo Genzo.

¿Desde cuándo tiene esos problemas?.- inquirió la chica.

Como tres días...

¿Tres días? ¿Y por qué no vino antes con el doctor?.- la muchacha le lanzó a Genzo una mirada de reproche.

Pues... Porque pensé que se me quitaría solo... .- se disculpó Genzo.

¿En serio? ¿Qué ha tomado para las molestias?.- insistió la joven.

Nada... .- Genzo comenzaba a sentirse algo culpable.

¿Y cómo espera que las molestias se le quiten, si tarda días en venir al médico y aparte de todo no se toma medicamento?.- lo regañó la chica.- Lo importante es acudir al doctor en cuanto empiece a sentirse mal, para cortar la enfermedad desde el comienzo, no venir cuando ya no aguanta las molestias.

Lo siento, es que los entrenamientos... .- Genzo se sentía cohibido por los expresivos y penetrantes ojos negros de la muchacha.

Sí, ya sé.- suspiró la chica.- Ustedes, los jugadores de fútbol, se creen invulnerables. No se preocupe, le daremos medicamento y con eso se sentirá mejor.

La chica sonrió, de la manera más maravillosa e increíble que Genzo hubiese visto jamás.

Perdone usted el regaño.- se disculpó la joven.- Pero ustedes, mejor que nadie, deberían ser cuidadosos con su salud.

Lo sé. Y me lo merezco.- sonrió Genzo.- A veces dejo de lado todo por el sóccer, incluso mi salud... Doctora, eh...

Del Valle.- sonrió la joven.

La muchacha le colocó un termómetro bajo la axila a Wakabayashi, para después tomarle la presión. Después, le revisó la garganta, le escuchó el corazón y le auscultó los pulmones.

Creo que tengo fiebre.- murmuró Genzo, cuando la cara de la muchacha quedó a tan solo pocos centímetros de la de ella.- Pero no sé si es por la enfermedad porque tú estás muy cerca...

¡Ah!.- la muchacha se ruborizó, mirando fijamente los ojos oscuros de Genzo.

Quizás te lo hayan dicho miles de veces, pero tienes la sonrisa más impactante que haya visto jamás... Y los ojos más bellos con los que me he topado en toda mi vida... .- murmuró Genzo.

Él no sabía por qué se estaba comportando de esa manera. Solo sabía que la cercanía de la doctora Del Valle lo estaba perturbando de una manera muy diferente...

-FIN DEL FLASH BACK-

Y eso había sido todo. Tiempo después, Genzo invitó a salir a Lily y así descubrió que la doctora Del Valle se había sentido tan atraída hacia él como él se había sentido atraído por ella...

Gen.- murmuró Lily, recordando también aquellos tiempos.- Yo...

Aquí están las piñas coladas.- anunció Sakura a Ken, en ese momento.- Para usted y para su novia.

Gracias.- Ken pareció reaccionar con estas palabras.- ¿Nos vamos, Lily?

Claro.- Lily le lanzó a Genzo una mirada de extrañeza y después se marchó con Ken.

Perdón. ¿Llegué a interrumpir algo?.- preguntó Sakura, con fingida inocencia.

Ella me recordó, por un momento.- comentó Genzo.- Recordó lo que hay entre nosotros...

Sakura no dijo nada. Aunque le gustó interrumpir la escena, se sintió un poco mal por Genzo.

Cerca de la alberca, Lily y Ken dejaron sus toallas en dos sillas de playa y sus bebidas en una mesita cercana. Ken se quitó la playera, arrancando suspiros y exclamaciones de admiración entre las chicas, incluyendo a la propia Paola, quien no pudo evitar soltar un poquito de baba (bola de ciegas, qué le ven a ese mono).

Te vas a deshidratar de tanta baba que estás tirando.- se burló Alisse.

Cállate, Farfán.- Paola se puso coloradísima.

Después, Lily se quitó el pareo, dejando al descubierto su bien formado cuerpo, apenas cubierto por su bikini. Muchos chicos comenzaron a chiflarle, pero Genzo los calló a todos.

Vayan a echarle los perros a otra.- les dijo Wakabayashi, enojadísimo.- Dejen de mirar de esa manera a mi novia.

Creo que ella ya no es tu novia, Wakabayashi.- dijo Ian.- Y no es nuestra culpa que la chica esté tan buena.

¿Y ya te olvidaste de que Lara también te botó?.- replicó Genzo.

Golpe bajo. Ian se calló abruptamente e inconscientemente volteó a mirar al sector de la alberca en donde Lara coqueteaba con Aoi.

Mi chaparrito.- le decía la chica al japonés.- Eres chiquito pero picoso...

Aoi se reía a grandes carcajadas. Ian tuvo deseos de lanzarlo a él por la borda.

Vamos a nadar.- le dijo Ken a Lily.- No te preocupes, yo te cuidaré muy bien.

Y le puso una mano en la cintura a ella. Para Genzo, esto fue demasiado. Y para Hyuga también.

Deja de manosearla.- reclamó Kojiro, molesto.

Yo hago lo que quiero.- replicó Ken, retadoramente.

Muchachos, ¿qué les parece si jugamos un partido de waterpolo?.- sugirió Genzo, dando grandes palmadas.- Será divertido. Yo podría estar en una portería y Ken en la otra.

Me parece bien.- aceptó Ken.- ¿Juegas en mi equipo, Lily?

Por supuesto.- Lily le sonrió.

Yo también jugaré en tu equipo.- anunció Kojiro.

Como quieras.- aceptó Ken.

Genzo refunfuñó para sus adentros, pero al menos Ken ya no estaba tocando a Lily y ni él ni Hyuga se agarrarían a golpes por ella, al menos por el momento. Pronto se formaron los equipos, e incluso varias chicas quisieron jugar, entre ellas Paola, Sanae y Lara. Alisse prefirió quedarse tumbada en una silla de playa.

¿Quieres jugar?.- le preguntó dulcemente Taro a Maki.

No sé jugar waterpolo, además de que no nado muy bien.- respondió Maki.

No te preocupes. Yo te cuidaré.- contestó Taro, abrazando protectoramente a Maki.

¿Por qué no se ahogan los dos?.- murmuró Alisse, en español.

¿Qué cosa?.- inquirió Taro, sorprendido.

Nada.- Alisse le sacó la lengua.

El juego comenzó. A pesar de todo, los participantes se la estaban pasando bien. Muchos jugadores salpicaban de agua a los contrarios para evitar que se pasaran la pelota, bajo las protestas de las chicas.

¡Jueguen limpio!.- rió Sanae, reclamándole más que nada a Santana.

No te preocupes.- le dijo Tsubasa.- Yo te protegeré.

Sanae se puso coloradísima.

Gracias... Tsubasa... .- murmuró.

Tsubasa le sonrió a Sanae, y ella no supo el por qué su corazón latió tan rápido y tan de repente. Paola era la más aguerrida de los dos equipos. Sorteaba con precisión y habilidad a sus oponentes y lanzaba la pelota con tanta fuerza a la portería de Ken que muchas veces Lily se vio obligada a alejarse por temor a recibir un pelotazo.

¡Tranquila, Paolita!.- se quejó Lily.- Se nota que eres una Wakabayashi.

Cállate, babosa.- replicó Paola.- No me lo recuerdes.

Babosa tu cola... .- comenzó a decir Lily.

¡Lily!

...ción... .- completó Lily.

Paola, en venganza, comenzó a salpicar con agua a Lily. Ésta le siguió el juego. Hicieron tanto salpicadero que incluso hasta Alisse terminó empapada.

¡Ya estense quietas!.- gritó Alisse, molesta.- ¡No me hagan meterme a la alberca para darles su merecido!

¡Uy, qué miedo!.- se burló Lily.- ¡Mira como estoy temblando!

Ni te metes, Alisse querida.- se burló Paola.- Bien que sabemos que le tienes miedo al agua.

Si le tiene miedo al agua es porque no sabe nadar.- replicó Taro, muy serio.- No la provoquen. Déjenla en paz.

Y lo había dicho de manera sincera, pero Alisse estaba tan dolida que no le importó.

Yo puedo defenderme sola, gracias.- le dijo a Taro, quien la miró un tanto dolido.

Genzo sabía que no pasaría mucho tiempo antes de que Lily se lanzara al ataque y así pasó. Ella tomó la pelota y se dirigió con precisión a la portería de Genzo. Lanzó un pase a Schneider y se colocó muy cerca de la portería para poder anotar. Sin embargo, entre salpicadas y empujones, Ishizaki y Urabe consiguieron arrebatarle la pelota al alemán.

¡La tengo, la tengo!.- gritaba Ishizaki.

La tenías.- lo contradijo Ian, empujando al muchacho.

Ishizaki soltó la pelota y fue a caer sin previo aviso sobre el rostro de Lily, quien evidentemente no estaba preparada para el golpe y se hundió en la alberca. Genzo no dudó ni un segundo en sumergirse a rescatarla. Sin embargo, los minutos pasaban y ellos no salían.

¿Qué tanto hacen esos dos ahí abajo?.- inquirió Kojiro.

Uh, tantas cosas que se pueden hacer... .- sonrió Lara, pícaramente.- ¿Verdad, Ian?

Claro.- éste se sorprendió por el comentario, pero le sonrió a su ex.

Al poco rato, Genzo y Lily salieron a la superficie (ni que la alberca estuviera tan honda ¬¬). Genzo la traía tomada de la cintura y Lily estaba colgada de su cuello. Los dos se quedaron así, abrazados mucho rato y mirándose fijamente a los ojos.

Recuérdame, Lily.- susurró él.- Recuerda cuánto te quiero...

Yo... .- en los ojos de Lily surgió por un momento un destello de reconocimiento.

Genzo notó esto y quiso besar a la muchacha, pero Ken lo detuvo.

Deja de coquetear con mi novia.- dijo Wakashimazu, molesto.- ¿Qué no entiendes que ella ya no te quiere?

Lily no es tu novia.- replicó Kojiro, enojado también.- Sino mía...

Todo parecía indicar que se iba a armar una trifulca acuática pero entonces Alisse les aventó una toalla mojada a cada uno (o sea, Ken y Kojiro pues).

Ya cálmense, par de burros en primavera.- les dijo la chilena.- No arruinen más las vacaciones de lo que ya lo están.

Lily soltó a Genzo, algo apenada.

Gracias.- le dijo, sin mirarlo a los ojos.

Genzo suspiró, pero la dejó ir. Ya tendría más oportunidades para tratar de conseguir que ella lo recordara.

Lo que él no sabía, era que se le estaba acabando el tiempo.

Notas:

El waterpolo es un deporte de pelota que se juega en el agua, no sé cuantos jugadores son pero cuando se trata de juegos de vacaciones, pueden participar los que quieran.

Iba a hacer otras aclaraciones pero no recuerdo cuáles... ¡Ah, sí! El subtítulo del fic es "Los Cuentos del Espejo" porque los personajes están en... Mejor no les digo, eso lo aclararé después.

Por cierto que la época en la que este fic se desarrolla es después de World Youth, después de que Tsubasa le pidió matrimonio a Sanae pero antes de que se casen.