"TORMENTA DE VERANO"
Capítulo número dos: Asquerosamente sabroso...
Holaaa!! Buah, nunca me imaginé que fuese a tener tantos reviews en el primer cap... muuuxas gracias!!
Akira AkizukiReLoad: holis amor!!jajajaja, mi new fic!! k way k lo hayas leido... pues si que habrá escenitas xulas subitas d tono (komo a ti me usta jajja) pero.. weno, ya lo verás, k no puedo contar nada!!jajaja espero k te guste!!
Monik: wenis shiki!! ya sé k no leerás el cap, xk odias a mi Malfoy.. pero te agradezco MUXO q hayas seguido mi otro fic durante tanto tiempo!! me kaes xuuuper bien y nada.. k tengas muxa luck con tus fics! besis!
Därkängel: hello!! muchas gracias por leer mi primer cap! ) aki esta es 2º, y espero que te guste mucho y me dejes tu opinion! besis!
Patri la wapi: hoooola mi lof!! k tal?? no te escribo muxo, k no tengo time kon geo y chemie... ais, ais... komo te love!! jajajaja xau murxitoo!
Nita: weniss!! jajajaja, aki esta el new cap!! monillo?? jejeje, lo digo muxo!! gracias por leer mi primer cap.. esk es super dificil al principio! al final escribo (intentaré) mi msn y ya hablamos ok,wapi?Ojala te uste y me des tu opinion!Xaoo!
tifanny: hola! te agradezco muuxo k entrases en mi fic.. de verdad!!pues klaro k habramuxas escenitas xulis!! a mi esk me welve loki este malfoy.. ais... (suspirosofoco) jajaja espero que te guste y me dejes un rev si puedes! ) bexotes!
Suca89: wenas!!no pasa nada pork no me pudieses dejar un review mas largo, kon saber k lo leiste me alegro! -)))) me alegro d k te guste, en serio!! espero k este kap tb te agrade y si puedes me escribas alguna cosilla! graciaaas!!
Ana: hellouuus!! gracias x leer mi fic y dejarme un rev tan xuli!! jujuju ya se vera si son novios o no... pero espero k te guste la historia!! besis!
DamaDelInfierno: hoola! xika, k nik mas imponente!! jajaja gracias por pasearte x mi fic!! me alegro dk lo leyeras!! espero k este cap te guste un pokito!!besis!
Roherms: holaa! gracias x leer mi primer kap!! y yo, shiki, yo tb kiero un drako! es tan malo... tan cruel... k me enkanta!!jajajajaja!! pues lo siento, ahora no te puedo enviar el 2º kap, pero en kuantito pueda lo envio, vale? besis!!
Kairi Akadi: wenas!! me alegro d k tegustase! a ver is este tb lo lees.. gggggespero saber kositas tuyas d new!! jajaja besis wapi!
lesly: wolees!! gracias x entrar!! os digo a to2 lo mismo pero... jajaja es verdad!! espero k sigas leyendolo y k te guste.. y si, sera todo en el mismo rollito: pasión&odio... jajaja bexotes!
paula malfoy: mi neni wapi!! jajajaa un new fic.. kien me lo iba a decir!! si tu hilfe no hubiese sido possible.. k l sepas!!no me enrollo muxo... k aun me tengo k enrollar kon geo y chemie.. jajajaja--- mejor kon... muaaakis! te lof 1 wevoteta!
lavance: hooola! gracias x entrar, me alegro d k te gustase! y espeor k kontinues con la lectura y me dejes tuopinion! besos!
PAZ:wenis! k wayk te parezac original... la vrdad esk ksi to2 son ! :-( espero k te uste y muxas gracias x entrar! kisses!
mariapotter2002: hooola! gracias x leer mi nuevo fic ) pasion no le va a faltar!! jajaja esk... ais, me welve lokita! a ti no?? (L) esta sera d odio.. pero seguro k te gustara! espero tu opinion sobre este cap! besis!
consue: wee gracias x aprobarme! jajaja k tal?? pues aki ta el 2º cap.. espero k te uste, vale? (k) (k)
sweet-ally: hooola! xika, xk odias tanto a hermione? la vrdad esk siempre se lleva al xiko mas wapo.. kon lo sosa k es la niña! jajaja pero para askerosilla la chocha esa.. aaaga no puedo!! esa si k va d top model... kon lo fea k tiene k ser! no soy racista ni muxo menos, pero todavia no vi una asiatika que fuera bella... alguien la vio?? pues aki esta la continuacion... me alegra saber k hay alguien sobre la tierra d loka k yo! jajaja espero saber kosis tuyas11 xaoo y gracias x entrar!
- ¡Mira, Malfoy! – Le dije calada hasta los huesos - ¡allí está la costa!
- ¿Y a qué esperas? ¡Venga, nademos!
Habíamos estado a punto de morir ahogados y a "El Cebolla" seguía caracterizándole si simpatía y educación.
Llegamos a la arena de la costa. Era una arena blanca, suave. Pisamos la tierra con la misma dificultad que lo hacen los astronautas al aterrizar en la Tierra después de un largo viaje por el espacio. Miré a mí alrededor y sólo vi palmeras y arena. Ni una casa, ni un turista, ni un simple rastro de civilización. Era una isla desierta.
- ¿Qué es esto? ¡Tú, sabelotodo! ¿Qué mierda de isla es esta? – me preguntó, con toda su ropa empapada y pegada a su asqueroso y repugnante cuerpo.
- ¿Y a mí qué me preguntas? – le contesté yo, mientas veía como se tiraba hacia atrás su pelo rubio platino mojado.
- Pero… ¿vendrán en seguida a por nosotros, no?
- ¡Y yo qué sé! A lo mejor aquí vive gente… ¡seguro qué hay alguna persona! – empecé a llamar a no sé quién, con la esperanza de que un socorrista buenorro acudiera de entre los árboles con su bañador rojo y su corcho colgado del hombro y me rescatase. Pero, al parecer, mi DVD se ralló y la imagen del guardacostas macizo desapareció de mi mente, topándose con la risa ladeada de Malfoy.
- ¿A quién llamas, Granger? ¿A los monos? – empezó a reír a carcajada limpia.
- Pues prefiero pasar la noche con los monos antes que pasarla contigo.
- ¿Cómo que pasar la noche? ¡Eso sí que no! Yo no paso la noche en medio de una isla… - me miró con cara de asco - … y menos contigo.
- ¿Ves?, - respondí yo escurriendo mi toalla – algo tenemos en común.
- Perdona, pero todas las chicas de Hogwarts se morirían por pasar una noche conmigo. – dijo él, arreglándose el cabello.
- ¡Cómo me alegro de tener padres médicos! Yo siempre he dicho que la oftalmología en Hogwarts no es buena…
- Cierra la boca y vamos a buscar una solución… - dijo él, sin saber por donde empezar.
- Bien, pues… como tenemos que pasar aquí la noche hasta que mañana vengan a recogernos, con dormir debajo de una palmera tapados con las toallas será suficiente.
- ¿Debajo de una palmera? ¡Genial! – exclamó en tono sarcástico – Y todo esto por vuestra culpa, por decir que nos fuésemos yendo… estúpidos Gryffindors…
- ¿Sabes? ¡Vete un poquito a la mierda! – respondí yo, mordiéndome el labio inferior.
- Buah, pues lo tengo fácil, porque aquí hay más mierda… Yo no voy a dormir aquí, vamos, me niego a dormir.
- Muy bien, como quieras, pero yo me piro a buscar alguna palmera. – y me giré y comencé a buscar alguna buena. Había donde elegir, pero me decanté por una baja y de palmas amplias para que me cubriesen lo más posible. Me tumbé sobre la arena que, a pesar de que estaba anocheciendo, estaba cálida y no demasiado húmeda por la lluvia. Seguramente allí no había llovido. Me coloqué la mochila debajo de la cabeza y me tapé con la toalla escurrida. ¿Por qué me tenía que pasar eso a mí? No era mi espíritu de aventurera el que más me caracterizaba pero, supuestamente, no tendría que emplearlo demasiado, ya que al medio día siguiente alguien de Hogwarts vendría a buscarme… digo, buscarnos.
No sé dónde dormiría Malfoy la primera noche, pero cuando a la mañana siguiente me desperté, él estaba sentado en la orilla y con unas ojeras de caballo. Ni siquiera le saludé, ¿para qué? Yo soy una chica educada, pero no me rebajo ante nadie. Sacudí mi toalla, que estaba repleta de arena nívea y fina y me quité la ropa para tumbarme bajo el sol. ¿Qué iba a hacer yo durante toda la mañana con el Cebolla hasta que viniesen a recogernos? Ya que tenía la oportunidad, broncearía mi suave piel bajo el sol para aprovechar al menos un poco el habernos perdido en el mar. Él estuvo jugando con la arena un rato, no es que lo mirase, sino que, por casualidades de la vida, estaba viniéndome a mi toda ella. ¡Sería cabrón! Estábamos ahí los dos y aún tenía ganas de molestarme…
- ¿Vas a parar un rato? – le pregunté con mala leche, después de sacudirme dos veces el cabello para que callase un poco de arena.
- ¿Por qué voy a parar? ¿Por qué tú me lo mandes? - dijo lanzándome un puñado de arena directa a los ojos, esta vez sin disimular.
- ¡Mira que eres insoportable! – le dije, dando una patada al suelo para que le cayera en su idolatrado pelo.
- ¡Es que te tengo como referencia en la vida! – me respondió él, tirándome de nuevo arena en los ojos.
- ¡¿Quieres parar?! – le grité con las lágrimas en los ojos. No es que llorase de pena, sino que me picaban muchísimo los ojos por culpa del cabronazo de Malfoy.
- ¿Quieres parar, quieres parar? – me imitó él con voz de cría, para ofenderme. Y, de nuevo, me lanzó arena blanca.
- ¡Te odio! ¡Te odio! ¡Eres el ser más repugnante que hay sobre la faz de la tierra! Y si hay vida en el Universo, ¡también! – le grité corriendo hacia "mi palmera" con dificultad por la arena.
- ¡Ay! ¡Qué lástima! ¡La pequeña Granger se ha enfadado! ¡Ya no podré dormir durante un mes! – me gritó alzando mucho la voz para que se oyese desde cualquier punto de la isla.
Pero no me importó… me adentré en el bosque para ver qué había allí. Supuse que no sería arriesgado, no debía de haber ningún animal peligroso por allí. Quizá una serpiente o un alacrán, pero ningún tigre ni pantera ni ningún mamífero de ese calibre. Iría con sumo cuidado.
Era como una selva de juguete, como las del Amazonas, con altísimos árboles que buscan la luz del sol y a duras penas dejan entrar sus débiles rayos, de tierra húmeda y con musgo. Algunas rocas eran muy resbaladizas y entendí por qué: había una especie de lago con piedras gigantes y una cascada. ¡Era el paraíso! Si hubiese habido algún medio relacionado con la civilización, me hubiese encantado quedarme. Soñaba con que apareciese un nativo morenazo y con taparrabos y se bañase conmigo en la laguna, pero no, de nuevo desapareció la pantalla del cine de mi mente y me encontré con la de la verdulería de la esquina.
- ¡Cuidado Granger, no vaya a aparecer un bicho y te asustes!
- ¡Tranquilo, Malfoy, ya has aparecido tú y dudo mucho que me encuentre con un bicho peor en toda la isla! – le grité introduciéndome en las aguas transparentes del lago. El agua era muy fría, pero en seguida me adapté.
- Ja, ja, ja… ¡salió la leona de Castilla! Bicho, a mí… mírate primero la cara y luego te metes conmigo…
- No, si por eso me meto, porque ya me he mirado a mí misma… - me puso cara de asco, pero su rostro empeoró cuando le tiré una buena salpicadura de agua helada en su pantalón-bañador de Dolce&Gabbana. Él cogió un puñado de barro y me lo lanzó directo al pelo. Volví a salpicarle con el agua, pero esta vez en mayor cantidad.
- Te la estás jugando, Granger… ¿quién eres tú para salpicarme con el agua? – me preguntó, con cara desafiante.
- Y, ¿quién eres tú para tirarme arena? Comenzaste tú la guerra al tirarme la arena en la playa…
- Rencorosa… ¡qué asco tengo a los muggles como tú! Sois tan repugnantes… - añadió cruzándose de brazos esperando mi respuesta. No le contesté. ¿Para qué, para perder el tiempo con sus simplezas? Salí del lago, con la intención de volver a la orilla a secarme con los rayos del sol. Pero no llegué muy lejos. Malfoy me empujó, haciéndome caer sobre el barro. Noté como mi espalda se llenaba de asqueroso lodo con perdigones. Mi alma empezó a gritar escandalosamente dentro de mi cuerpo; pero yo no. Me levanté y le empujé a él. Entonces Malfoy cayó y se impregnó del cieno. Su polo azul celeste de navegar estaba tan marrón como si espalda. No hablamos, pero se levantó y volvió a tirarme al suelo. ¡Siempre empezaba él las peleas y ahora estaba yo llena de la mierda esa del fango!
- Aaag – exclamé, frotándome el cuerpo y viendo como se me esparcía más el barro por el cuerpo. Dejé de empujarle y anduve hacia la playa. Él venía detrás de mí, no habló, pero lo pude notar.
Ya en la orilla me metí en el agua para limpiarme completamente y salí para enrollarme en mi toalla.
- Como me vuelvas a hacer algo, te juro que te capo. – le amenacé, haciendo un gesto con las manos, como si tuviese unas tijeras en ellas.
- No jures, Granger… es muy feo jurar… además, luego nunca lo cumples.
- Tú no te vayas arriesgando, no sea cosa que mañana no tengas alguna extremidad de tu cuerpo.
- ¿Cómo que mañana? Yo mañana estaré en Hogwarts… tú, tú estate donde quieras.
- ¡Pobre iluso! ¿No ves que nadie viene a buscarnos? Te voy a tener que aguantar aquí algunos días… Ya verás si no te lo crees.
- No me hables… ¡mira cómo me pusiste mi polo de Ralph! ¡Aag, ojalá venga mi padre ya a por mí y te pierda de vista!
No le hice ningún caso… escuchaba a una mosquito de esos trompeteros volar a mi alrededor, como en las noches calurosas de verano cuando uno no te deja dormir.
Tenía hambre. Desde el día anterior no había probado bocado y, aunque mi estómago era silencioso y poco amplio, también yo necesitaba alimento. En la mochila no me quedaba nada y utilicé mi lectura para sobrevivir un día más. ¡Sólo un día más! Como había leído en decenas de novelas de aventura, en una isla de ese tipo debía haber algún árbol frutal, porque la pesca quedaba completamente descartada.
Me adentré de nuevo en la pequeña selva a inspeccionar todos y cada uno de los árboles presentes. Parecía una indígena, con los cabellos húmedos y enredados a la cara, en pantalón y bikini, con las piernas llenas de barro y en chancletas.
Había centenares de clases: unos más altos, otros de troncos más gruesos, de distintas clases de hojas… pero no hallé ninguno con frutos.
Desganada, regresé a la playa. Me iba a morir en esa isla, joven, virgen y con el asqueroso de Malfoy… ¿Malfoy? Estaba sentado bajo un gran cocotero repletito de cocos. No tenía ningún espejo para mirarme, pero seguro que me cambió la cara por completo. Me acerqué hacia el tronco para estudiarlo y hallar una forma de treparlo.
- ¿Por qué me miras tan descarada, Granger? – me preguntó altanero, como siempre.
- ¡Cierra la boca, anda! – le ordené y lo aparté del medio. Cogí impulso y me ayudé de pequeñas concavidades en el tronco para ir trepándolo. Malfoy estaba debajo, mirándome con cara de lástima.
- Y, ¿qué esto ahora, Granger? ¿Una danza de apareamiento muggle? Tan sólo nos falta cambiar la palmera por una barra metálica y poner unas luces de colores. – sí, el bromeaba mucho, pero bien que me estaba mirando el culo el cabrón.
- ¡Qué simple eres! – le dije haciendo un esfuerzo. En la televisión y en las películas trepar una palmera parecía más fácil, pero no lo era para nada y ahora lo estaba comprobando por mí misma. Llegué arriba del todo y vi los insípidos cocos. Nunca me gustaron los cocos, no les encontraba sabor a nada, pero estaba segura de que mi paladar no se pondría crítico ahora y aceptaría cualquier cosa.
- ¡Eh, tú, bájame un par de esos! – me gritó Malfoy al percatarse de mis intenciones.
- ¡Qué te los baje tu madre! – le respondí yo, con dos cocos en las manos. No iba a lanzarlos al suelo, ¡el Cebolla me los quitaría corriendo! Prefería caerme de la palmera y tener dolor de espalda una semana antes de que Malfoy se comiese mis bien preciados cocos.
Al estar ya en el suelo, Malfoy me pegó un empujón e intentó treparla. Él lo tuvo más fácil, sus brazos eran diez veces más musculosos que los míos y sus piernas más fibrosas. Se le notaban las venas cuando tensaba los antebrazos. No me quedé más de treinta segundos contemplándolo y fui en busca de una piedra afilada para golpear el fruto. Y la encontré, ¡vamos si la encontré! La pisé y me ocasionó una herida tan sangrante en el pie que me mostró que esa piedra podría abrir mis cocos con un simple coco.
- ¡Se me va a infectar! – pensé, al notar como fluía la sangre por mi talón. Y regresé a la orilla o comer y a limpiar el corte con el agua salada del mar.
- ¿Qué te pasó, chica? – me preguntó el rubio, riéndose de mi desde su ubicación.
- Nada que te interese… bueno, sí, ya encontré el utensilio para acabar con mi dolor de cabeza. – le respondí yo.
- ¿No, de verdad? ¿Hay sex-shop en esta isla? Porque lo tuyo se arregla con… - le lancé un palo directo a la cabeza, deseando que diera en su interruptor y se apagara de una vez. – Estás muy estresada, Granger. Cada vez pareces más nativa de la isla Malfoy.
- ¿La isla Malfoy? ¡No me cuentes chistes, Cebolla…!
- Ay, pequeña nativa… ¡no insultes al señor en su feudo! – me dijo haciendo ademán de colocarse la corona de señor feudal.
- Perdone, mi señor, pero es que pensaba que aquí se recogía la mierda que los nativos no utilizábamos… Estúpido…
- Sangre sucia…
- Engreído…
- Amargada…
- Gilipollas…
- Guarra…
- Mamón…
- Puta…
- Sopla poyas…
Y así estuvimos hasta que nos cortó una ingente tormenta de verano. Comenzó a llover a cántaros y corrimos en busca de un refugio. Calados hasta los huesos, nos topamos con una pequeña concavidad en la baja montaña de la isla. Era húmeda y oscura, así que nos quedamos en la entrada escurriendo nuestra ropa. Vi como mi mochilla se mojaba entera y con ella, mi sequita y suave toalla.
- ¡Cómo te detesto, Malfoy! – le dije al que estaba sentado a mi lado, mojado hasta las pestañas.
- Mira, salió doña perfecta, a la que nadie detesta, a la que nadie odia… la persona que le cae bien a todos. – me contestó él para dañarme, algo que no consiguió.
- Lo siento, Mr. Buena Persona… no quería dañar su expediente de educación y amigabilidad…
- Las buenas personas son estúpidas, como tú. Podrás saberte todos los hechizos que existen, todas las pociones habidas y por haber, pero eres eso, una amargada traga libros, empollona y detestable.
- Yo seré estúpida, pero tú eres un cabronazo. Te sientes tan patético que tienes que ir menospreciando a los demás para no notarte inferior.
- Ja, ja, ¡no me hagas reír! ¿Patético, yo? Si tú eres la más patética, marginada, asquerosa y repugnante de todo Hogwarts…
- ¡Uy, sí! Perdona, pero yo tengo muchos más amigos que tú… - le respondí, acordándome de Harry y Ron.
- ¿Tus dos amigos esos? Y, ¿quién más, las gemelas esas come poyas?
- ¡No te metas con mis amigos! – le grité como una loca delante de los ojos.
- Pues bien, me meteré contigo. – Estábamos a escasos centímetros de cada uno, gritando cada vez más fuerte y con las venas marcadas en el cuello de la rabia que teníamos cada uno – Pobretona, sangre sucia, marginada, empollona, putón… - exclamó de carrerilla.
- Imbécil, creído, repugnante, engreído, macarra, gilipollas, cabrón… - le grité yo delante de los ojos. No podía hablar más, mis cuerdas bocales estaban completamente agotadas, al igual que las suyas, y respirábamos entrecortadamente, como cuando acabas de jugar un partido y no tienes fuerzas ni para arrastrar tu propia alma.
Nos quedamos así por unos instantes. Sus ojos grises plata estaban llenos de cólera y sus labios fuertemente apretados. Yo apretaba la mandíbula, conteniendo para no pegarle un puñetazo y callarle esa boca asquerosa de golpe. Suspiré hondo, muy profundo, y le di un beso. Más bien, nos lo dimos mutuamente. No fue muy largo, un beso corto con lengua y al darme cuenta de los que estaba haciendo, lo despegué de mi boca.
- ¿Qué haces? – Me preguntó enfadado - ¡Qué asco!
- ¡Aag, quítate! – Le grité empujándolo para salir de la pequeña hendidura del montículo - ¡Qué asco, joder!
Empecé a andar, bajo la lluvia dificultosamente por la arena mientras me volvía a recalar de agua hasta los dientes. No sabía hacia dónde dirigirme, ni cómo actuar… ¡Había besado a Malfoy! ¡Al asqueroso y repugnante Malfoy! Y, sin embargo, me había gustado.
Hola!! que tal estuvo? bien, muy mal, askeroso? ... dejen opinion, me alegran el rato!
jajajaja, ya me gustaria a mi besra a algo tan askeroso komo malfoy... y a vosotras xikas?? jajajaja
muxisimas gracias a todos por leerme, de verdad!
aki esta mi msn (esta vez espero k bien) : rina(barrabaja)loka16(arroba)hotmail ...
agregadme, porfa!
Muxos besos y felices vacaciones a todos!!
Sed felices, plis!
Bezukiss de xoko-xoko de Mrs. Malfoy!
