Titulo: Orión
Autor: Tenshi-Hikaru
Disclaimer: Los personajes pertenecen a sus respectivos autores, Clamp y J. R. R. Tolkien.
Fic hecho sin fines de Lucro.
Muchas gracias a Tsuki No Youkai y Midhiel por ser mis Betas
Errores que queden en el capitulo, son culpa mia.
Capítulo 22.
-"En verdad es una hermosa criatura, valió la pena venir hasta aquí."
-"¿Puedes ayudarnos?" -dijo Marcus.
-"Tal vez" -respondió Avalon.
-"¿A qué te refieres con tal vez?" -preguntó Clow.
-"Podría tratar de ayudarlo, pero no puedo asegurar que sobreviva."
-"¿Pero cómo?" -dijo Clow.
-"Deberías conformarte con saber que me es posible hacerlo, pero si te reconforta, te diré que mi clan está protegido por la luna."
-"Pero... entonces ¿por qué dijiste que no sabes si vivirá?" lo interrogó Marcus.
Avalon iba a decir algo, pero en ese momento Yue se estremeció y su respiración disminuyó.
-"Has lo que puedas por favor." -le suplicó Clow. -" No tenemos mucho tiempo."
Avalon asintió y se sentó junto al guardián. En un extraño idioma le ordenó a Elrond y el elfo le entregó la pequeña daga.
-"¿Qué vas a hacer!" - Marcus sujetó la mano que sostenía el cuchillo.
-"Tranquilízate Marcus." -pidió Elrond.
-"¡No lo haré¿Qué pretende hacer?."¿Por qué rayos no puede asegurarnos que Yue va a estar bien?"
-"Porque ningún humano ha resistido el poder que reside en la sangre de un dragón." Respondió Elrond, mientras Avalon solamente miraba sereno a Marcus.
El chico liberó la mano asustado ante las palabras del elfo.
-"Tranquilícense, puedo sentir cuánto aman a este ser, y haré todo lo posible por salvarlo." Avalon hizo un gesto a Elrond y éste se aproximó a ayudarle.
El recién llegado entonces tomó el brazo izquierdo de Yue e hizo un corte en la muñeca. Después también hizo un corte en la suya, la sangre plateada comenzó a correr inmediatamente y Avalon unió su muñeca a la del ángel. Elrond entonces los sujetó firmemente enrollando vendas para mantener el contacto. La sangre del dragón comenzó a entrar en el cuerpo de Yue por la herida, mientras Clow y Marcus observaban sin entender.
-"Debemos salir." - dijo Elrond. "Avalon necesita concentrarse."
-"Pero... pero..." Marcus se negaba a dejar a Yue.
-"Todo estará bien, debemos tener fe¿verdad Clow?"
-"Si, así es."
En la habitación contigua esperaban Xander y Kero, visiblemente preocupados.
-"¿Yue se encuentra bien Clow?" -preguntó el león dorado.
-"Sentimos una energía muy extraña provenir de aquí, y luego apareció ese sujeto raro, que sin pedir permiso entró en donde ustedes estaban." Dijo Xander.
-"Sí, esa persona está con Yue en este momento." Respondió el mago.
-"¿Quién rayos es?" Marcus no dejaba de pasear de un lado a otro de la habitación.
-"Ya se los dije, aunque no debí hacerlo sin su permiso." Elrond se sentó junto a Clow, mientras acariciaba la cabeza de Kerberos.
-"Dijiste que era un dragón¿cómo es eso posible?"
-"Los dragones de plata tienen la habilidad de cambiar de forma a su antojo. Para vivir entre nosotros eligió esa figura."
-"Y... ¿de dónde salió?" Dijo Marcus.
-"Él vive en Valinor, muy lejos de aquí. Hace tiempo le envié un mensaje, pidiéndole nos visitara." -respondió el elfo.
-"Eso no me explica por qué nos ayuda..."
-"No nos ayuda a nosotros Marcus, ayuda a Yue."
Marcus se puso a la defensiva.
-" ¿Qué quiere de él!"
-"Siente curiosidad, no sabía que pudieran existir criaturas como él y Kerberos."
-"No me agrada... no confío en él..."
-"Pues deberías." Interrumpió Xander. "Está salvando a Yue."
-"Cállate mocoso."
-"Quieres pelear ¿eh?" Xander lo retó.
-"Basta Xander." Le pidió Clow, masajeando sus sienes.
Avalon contemplaba a la frágil criatura a su lado, la vida casi se escapaba de ese cuerpo, por suerte, llegó a tiempo. Cerró los ojos y dejó descansar su cabeza sobre el pecho del ángel, mientras sentía como su energía pasaba de su sangre a la del guardián junto a él. En minutos cayó en un mágico sueño.
Yue recuperó la conciencia lentamente pero no abrió los ojos. Una voz suave le llamaba, mas no lograba reconocerla.
-"¿Quién eres¿Dónde estoy?" Dijo Yue.
-"Me llamo Avalon, y estás dentro de mi alma."
-"¿Cómo es que estoy aquí?"
-"Es posible porque mi sangre en este momento corre por tus venas, eso creó un vínculo temporal entre nosotros."
-"Este fuego que siento que quema mi cuerpo ¿es tu sangre?"
-"Así es, lamento que sea doloroso."
-"¿Qué hago aquí?"
"Te traje para aliviar un poco tu dolor, y para mostrarte algo."
El ángel se estremeció repentinamente al sentir una fría corriente rodear su cuerpo y disminuir el ardiente fuego que recorría sus venas.
-"¿Te sientes mejor?" Preguntó la suave voz.
-"...S...sí..." -respondió el ángel.
-"Bien, entonces abre los ojos."
Yue obedeció y se encontró en un hermoso valle, de un inmenso cielo azul y brillantes colores por doquier. El aire fresco inundó sus pulmones.
-"Es hermoso." -dijo Yue.
-"Lo es en verdad, este lugar se llama Valinor. Es donde vivo, y donde vive la mayoría de los elfos."
-"Es como un paraíso..."
-"Es el reino creado por los Valar, para los elfos."
El ángel observaba maravillado a su alrededor. Una ligera sonrisa de satisfacción se dibujó en su rostro y volteó a sus espaldas.
-"¿Puedes mostrarte?" Preguntó el guardián.
-"¿Deseas verme?"
-"Sí, por favor."
-"De acuerdo, pequeño." Una silueta apareció frente a él, y se acercó lentamente. Yue se quedó sin habla.
-"¿Te desagrada mi apariencia?"
-"No, en absoluto... sólo que..."
El dragón sonrió.
"Creo que nos parecemos un poco, debe ser porque tomé la apariencia de un elfo, y tú te pareces a ellos."
-"¿No eres un elfo? Entonces..."
-"No Yue, mi raza no es tan antigua como la de ellos, aunque sí somos viejos. Mi verdadera apariencia es mucho más grande y es diferente."
-"No sé qué eres." Le dijo el ángel, con una mirada inocente.
Avalon se sentó bajo un árbol e invitó a Yue a hacer lo mismo. Al estar así, tranquilamente, Yue volvió a sentir el fuego en su cuerpo.
-"¿Qué sucede Yue?"
-"Me siento extraño, y cansado..."
-"Sólo relájate, pronto terminará."
Avalon le permitió descansar la cabeza en su regazo. El ángel dócilmente se acomodó y cerró los ojos.
-"Pequeño¿por qué hay tanto dolor en tu corazón¿Por qué permites que esos hombres destrocen tu alma?"
-"Los amo... a los dos... pero ellos no lo entienden, y me lastiman."
-"Entonces, déjalos."
-"No puedo, son mi vida..."
Avalon acarició suavemente a Yue, deslizando su mano en el cabello plateado.
-"Por ti fueron capaces de pedir ayuda a la oscuridad, pero, también serán los causantes de tu perdición."
-"Mi vida les pertenece... a ambos..." – Yue hablaba casi en un susurro, lentamente iba cayendo en un sueño tranquilo.
-"Yue, en este lugar no hay dolor, ni tristeza... ¿te gustaría vivir así, sin ese peso en tu alma?"
-"Sí..."
Avalon lo miró con algo de tristeza, Yue estaba completamente dormido. El dragón cerró los ojos y todo el paisaje desapareció.
-"¡Estoy desesperado, no resisto más!." – Marcus estaba al borde del colapso.
-"Tu actitud no ayuda a hacer más llevadera la espera." –dijo Clow.
-"Estoy preocupado, no puedo calmarme."
-"Todos estamos preocupados." Clow jugueteaba con la cadena de su llave mágica.
-"Yo vuelvo en un momento, y les diré cómo está Yue." Elrond se levantó.
-"¿Adónde vas?" – dijo Marcus.
-"Ya te lo dije."
Clow y Marcus se miraron un segundo y dijeron:
-"Vamos contigo."
-"No lo creo, no es conveniente perturbar a Avalon."
-"Me preocupa mucho cómo se encuentra Yue, quiero verlo." Marcus suplicó.
-"Estoy seguro de que sobrevivirá, dije que ningún humano había resistido, pero olvidas que Yue no es humano." Elrond sonrió dándoles ánimos.
El elfo entró sin hacer ruido, se acercó a ellos y suavemente llamó a Avalon que lentamente volvió en sí y sonrió débilmente a Elrond.
-"¿Cómo te sientes?" El elfo le ayudó a incorporarse sobre la cama.
-"Estaré bien, sólo necesito descansar."
-"¿Y cómo está Yue?"
-"Todo depende de qué tan fuerte es su deseo de vivir. Resistió la primera parte, aún falta ver cómo reacciona."
Elrond retiró las vendas que los ataban y curó por separado ambas heridas.
-"¿Cuál de los dos es Clow Reed?"
-"Es el de cabello largo y negro."
-"Se ve muy joven para tener la capacidad de darle vida a un ser como Yue." –dijo el dragón.
-"Sí, eso pensé yo."
-"Y supongo que el otro es Marcus... él... tiene en su alma algo de maldad, pero fue dominado por sus sentimientos hacia el guardián."
-"Logró volver al camino correcto, gracias a él." Dijo Elrond, mientras acomodaba el cabello de Yue. –"¿Cómo sabes todo eso?"
-"Pude sentirlo en el corazón de Yue. Sufre a causa de los dos."
-"Eso me temo."
Elrond llevó a otra habitación a Avalon para que durmiera.
-"Elrond, cuida a Yue..."
-"Descuida, lo haré." El elfo se retiraba pero Avalon lo detuvo.
-"Espera... debo prevenirte de algo..."
Clow observaba detenidamente el comportamiento de Marcus, se veía tan preocupado como él. Xander y Kero trataban de animar al mago, pero sólo pudo devolverles una ligera sonrisa y fingió calmarse.
Después de unos minutos que parecieron eternos, Elrond salió de la habitación.
-"¿Qué sucede Elrond?" Clow se adelantó.
-"Parece que todo está bien, sólo hace falta ver cómo reacciona, pero pueden estar tranquilos, Yue es fuerte."
Clow se sintió más aliviado, al igual que los demás. Marcus por fin se permitió relajarse un poco y resintió en todo su cuerpo la estresante jornada que había llevado a cabo.
-"Es mejor que vayan a descansar un poco." – les dijo Elrond. –"Yo cuidaré de Yue."
-"Me quedaré aquí." – respondió Marcus al instante.
-"Necesitas descansar, al igual que Clow, la batalla con el dragón debió ser agotadora sin contar el trayecto."
-"Yo estoy bien, descuida Elrond." –mencionó Clow. –"Pero Xander y Kero se pueden ir a dormir."
-"No Clow, quiero estar contigo." – pidió Kerberos.
-"Yo también quiero quedarme." – dijo Xander.
-"No. Todos se van a dormir, que yo también necesito relajarme y si ustedes permanecen despiertos y preocupándose, no podré cuidar de nuestro amigo." Elrond los encaminó a la puerta. –"Ustedes tendrán que cuidar de él mañana."
Un día entero pasó y nada cambiaba. Yue permanecía dormido, pero se lo veía tranquilo. Elrond les dijo que se estaba recuperando, pero era necesario darle tiempo.
Avalon tampoco había salido de su habitación.
Clow y Marcus se turnaron para cuidar del ángel durante el día, y Elrond se hizo cargo al anochecer.
Clow descansaba sobre su cama. Durante la noche, salió un momento al balcón, para observar las estrellas y disfrutar del aire fresco. Decidió intentar dormir de nuevo, pero cuando iba a entrar vio a lo lejos una silueta deslizarse entre los edificios y volar hacia lo profundo del bosque.
El mago se sintió intrigado por saber que era, y usando a "Fly" salió a perseguirla.
A lo lejos descubrió a la figura, quien al sentir su presencia volteó hacia él.
-"No puede ser... ¿qué haces aquí Yue?" – le llamó Clow muy confundido.
El mago no recibió respuesta, en cambio, Yue salió volando, alejándose cada vez más de la ciudad.
-"¡Yue, espera!" –Clow salió tras él.
Al adentrarse más en el bosque le fue imposible seguir volando, sus alas chocaban contra las ramas de los árboles. Descendió y volvió a llamar al ángel. Estaba preocupado¿por qué habría huido así de él?
Al revisar a su alrededor se dio cuenta de que estaba bastante lejos de la ciudad, pero decidió encontrar primero a Yue. Caminó hasta hallar un enorme árbol, que entre sus ramas ocultaba una tarima del tamaño de una habitación.
No encontró forma de subir, así que utilizó un hechizo para poder alcanzar el lugar.
Invocó una esfera de luz que iluminó tenuemente a su alrededor. Al final de la construcción descubrió a la plateada criatura, sentada en el piso, abrazándose a sí misma.
-"Yue... ¿te encuentras bien?" –el mago se acercó pero se detuvo a distinguir la mirada de Yue. Estaba llena de temor. Clow no comprendía la actitud del ángel.
-"¿Qué es lo que haces aquí?" Le preguntó intentando acercarse más. El guardián se percató del movimiento y retrocedió al instante, dio la vuelta y extendió sus alas para escapar.
-"¡Yue!"
El ángel salió volando. Clow decidió detenerlo y averiguar qué le sucedía.
-"¡Windy, atrapa a Yue!"
La gentil elemental se lanzó en persecución, pero el Guardián al sentirse acosado, la atacó con sus cristales, haciéndola retroceder.
Algo andaba mal, Clow no tuvo otra opción y lanzó un ataque para aturdir a Yue y poder atraparlo, logrando así, sujetarlo entre sus brazos.
-"Yue¿Qué te sucede¿Por qué actúas así?
El guardián forcejeaba para liberarse, al tiempo que le dirigía una mirada llena de temor a Clow.
-"Tranquilo Yue, no voy a hacerte daño." El mago comprendió que usando la fuerza sólo lograba asustarlo más, así que le dedicó una sonrisa y suavizó su voz. El plan surtió efecto. Pronto sintió cómo Yue se relajaba en su abrazo. Clow retrocedió un poco, para alejarlo de la orilla y ahí liberó al ángel.
-"¿Qué tienes?. ¿Por qué no respondes?."
Yue permanecía inmóvil, sin decir una palabra. Sólo observaba.
-"Yue... ¿me reconoces?." Clow empezó a dudar que el guardián estuviera en sus cinco sentidos.
El ángel se estremeció, desvió la vista tratando de recordar.
-"Soy Clow..." el mago se acercó lentamente extendiéndole una mano.
El rostro de Yue cambió completamente al volver a mirar en los ojos grises del mago y se lanzó a sus brazos, como si acabara de despertar de una pesadilla.
-"... Clow..." fue lo único que alcanzó a decir antes de que sus piernas le fallaran.
Los dos se sentaron y Clow tranquilizó al atemorizado ángel en sus brazos, con caricias, y sosteniéndolo de manera protectora.
-"Mi hermoso ángel, me alegra verte despierto, pero¿qué fue lo que te sucedió?."
-"... No lo sé... tenía miedo... quise huir... no sé dónde estoy..."
-"Shhh... calma... ahora estás conmigo. Vas a estar bien."
-"Clow..."
-"Debemos volver a la Ciudad, Elrond debe estar preocupado por ti."
-"No… quiero estar aquí, contigo." El ángel se abrazó con fuerza al mago.
-"Pero Yue..."
-"No quiero volver. No quiero ir, por favor."
-"De acuerdo, nos quedaremos aquí hasta que amanezca. Entonces veremos qué hacer."
Yue asintió en silencio y se acurrucó en los brazos de Clow.
TBC...