--------------------------------------------------------
Elvish Tales
The sing of thistle & Sweets to the sweet---------------------------------------------------------
Sweet to the Sweets
¿Cuantas veces se sentaría en el balcón, tapándose los oídos¿Cuantos días mas tendría que hundirse en aquella obscuridad, cuanto mas estaría así?
Oyendo su voz, su suplica, viendo sus ojos en sus sueños, viéndolo pasearse entre los muros del castillo con una sonrisa que le destrozaba a cada instante, sin siquiera mostrar la mas ligera señal de su pasado mutuo.
Loki sintió el viento acariciar sus mejillas, como aquel día en que salieron a cazar.
1
Él y su mentor Dolbare habían salido a cazar, montando magníficos corceles, cabalgando despreocupadamente en el bosque Eldarion, persiguiendo un pobre venado, los amigos de Dolbare todos ellos nobles de acaudaladas familias disfrutaban del extraño deporte, Loki a pesar de sus duras clases con su mentor, tenia problemas con su montura, quizá asustada o quizá nerviosa. Una indefensa criatura apareció de improviso asustando al pobre caballo de Loki internándose en la espesura del bosque, en su miedo, el caballo zarandeó un par de veces logrando tirar a su jinete abandonándolo a su suerte.
Oh, pobre Loki, ese día su vida cambiaría para siempre, al instante de su caída, le pareció ver todo su pasado pasar frente en sus ojos arrojándolo a un torbellino de imágenes y sentimientos, sumergiéndolo en la inocencia.
Quizá pasaron días o quizá instantes cuando abrió sus ojos verdes, la blancura del paisaje apuñalaron sus adoloridos ojos, el frío le recordó que estaba vivo y al mismo tiempo lastimado,
Muy lastimado.
Reunió fuerzas de lo mas profundo de su ser, con la esperanza de conseguir ayuda, y aunque lo intento varias veces, de su boca no salía mas un lastimero gemido. La muerte le alcanzaría en breve si tenia suerte, sus miembros poco a poco se entumían con el frío, invadiendo cada nervio de dolor y frío, Loki aun se esforzaba por moverse y pedir ayuda, su voz ahogada le dejo en un momento, dejo de sentir sus dedos. Sus pensamientos se armonizaron en una idea sencilla, moriría en ese lugar.
Se arrepintió de tantas cosas no hechas, cerraba sus ojos luchando por alejar sus pensamientos, por encontrar calma, seria mejor si dejaba de poner resistencia, si moría pronto.
Después de todo¿quién lloraría su muerte?
Horas después, su estomago reclamaba, despertó Loki con la sorpresa que su cuerpo sentía alivio, sentía sus heridas curadas, calidez. Recostado mirando las estrellas en una cama de hojas, el murmullo de una fogata le hizo girar levemente, fue entonces que le vio. Loki vio por primera vez aquel joven de cabellos rubio como platinado, corto, unos ojos verde azul como el océano de playas blancas, todo arreglado en la mas de las bellas caras que jamas había visto en un chico, sencillamente exquisito.
Tenia que ser un elfo, demasiada belleza en un mortal solo era concedida a los elfos, pronto se dio cuenta que esos ojos maravillosos le miraban con ternura, aquel hermoso chico se puso de pie y camino con gracia, Loki penso definitivamente que había muerto y ese bello elfo había venido para llevárselo al paraíso.
Sintió los dedos del joven en su piel, no podía estar muerto, sentía su calor y oía su voz hablándole dulcemente en una lengua delicada y hermosa, le sintió cuando le recargo y le dio a beber algo parecido a sopa tibia, le sonrió cuando le volvió a recostar y le cubría con una manta. No podía quitarle los ojos de encima, era muy bello, el sueño le envolvió , una vez más.
A medio día despertó, un pajarillo latoso picoteaba cerca de su cuello, quiso espantarlo, pero noto que no tenia fuerzas en sus miembros, estaba sumamente agotado y débil, busco con la mirada al hermoso muchacho de anoche, más no lo vio, pensó tal vez que había sido un maravilloso sueño, pero los restos de la fogata le decían lo contrario.
Horas después, pasada la tarde, Loki despertó al canturreo de una fogata, y allí estaba de nuevo el elfo de ojos alegres, el elfo que le había curado, estaba juntó a él, cocinando algo. Una vez más le recargo y le dio de comer, le decía muchas cosas en su hermosa lengua. Adoraba verlo, escucharlo aunque solo fuese un crío, los dos unos niños.
Hubieron pasado muchos días con este extraño ritual, Loki descansaba esperando ansioso la hora en que llegará el elfo, disfrutaba extasiado cada instante que era cuidado y mimado.
Pero un buen día en la mañana, oyó perros. Seguramente de Dolbare, en breve aparecieron tras el follaje, Rungu y Url, preocupados y emocionados de verle, sumamente de encontrar a Loki aun con vida tras mucho tiempo perdido en el bosque de los elfos...
2
Una cabaña abandonada hacia algún tiempo solo tenia en el interior una mesa, una cama y una silla, a pesar de estar vieja, aun era habitable.
Le pareció raro ver a su príncipe sentarse en la cama y esperar. Una prueba de paciencia para Midgardo, llegó a creer por un momento, que era una forma extrañar de pasar el tiempo.
Se marchaba ya hastiado de la espera, cuando oyó la dulce voz Frey llamar a alguien, cual seria su sorpresa al ver llegar a Loki, el renegado, el expulsado, una ira inflamo su corazón, sintió tantas ganas de salir de su escondite y saltar sobre el pellejo de aquel hombre, se quedo petrificado al ver como aquel besaba tiernamente a Frey.
Midgardo no podía dar crédito a sus ojos, su príncipe besando a otro hombre. La razón de sus huidas, la razón de esa sonrisa soñadora que le intrigada.
Tuvo que taparse la boca ahogando sus propios sonidos de sorpresa al ver como ese renegado manchaba el cuerpo bendito de su príncipe, con caricias en todo el cuerpo, despojándole de la ropa con habilidad, como si ya lo hubiese hecho antes cientos de veces.
Le escandalizó ver a su príncipe responder a las caricias y los besos, incitándole a ir por mas, Midgardo prefirió dejar de mirar, dentro de la cabaña se desataba el fuego de la pasión, dos hombres consumaban un acto prohibido.
Supuso por los gemidos que salían, que su príncipe era penetrado violentamente, mientras los gemidos como gruñidos del renegado le indicaba lo mucho que lo disfrutaba.
Midgardo era de la idea su príncipe Frey jamas seria dominado de tal manera, estuvo a punto de correr a casa del rey Njörd y contarle todo, mas el grito de amor del uno por el otro le detuvo, claramente habían llegados juntos al clímax, le detuvo.
Su morbo le obligo a volver a mirar por el pequeño agujero, la cama le quedaba esquinada desde su punto de vista, ligeramente por encima de nivel del suelo, pudo ver los dos cuerpos sudados aun enroscados, vio el trasero de Loki aun moviéndose rítmicamente al mismo tiempo que los brazos de Frey agarraban posesivamente el cuerpo de su amado.
Midgardo estuvo apunto de arrepentirse de observar, cuando vio que los dos cambiaban de posición y Frey quedaba arriba. Por prima vez en su vida, vio a su príncipe en todo su esplendor, sentado en el regazo del renegado, dedicándole la mas bella sonrisa, Midgardo sintió mas celos que nunca, deseo por un instante tener así a su príncipe sobre si, desde ese instante, nació un extraño deseo de poseer a Frey, de sentirlo.
Uso su imaginación, cuando Frey tomo entre sus labios el miembro de Loki y devorarlo con hambre, los gemidos de placer del renegado eran indicadores indiscutibles de cuan deliciosos debían ser los labios de su príncipe en una zona erógena.
Toda la fantasía, se rompió, oyó la voz seca del expulsado.
"Frey" comenzó Loki, "quiero decirle algo importante... espera" jadeaba suplicando, Frey se detuvo un momento, tomo el miembro de Loki para después sentarse y permitir que le penetrara de nuevo, Loki gimió una vez mas, en esta ocasión, él llevaba en cierto modo, el mando. Moviéndose rítmicamente, escucho atentamente lo que Loki tenia que decir indicándoselo con un beso.
"Frey..." ahora le costaba trabajo hablar, pero sabia bien Loki que este era el mejor momento para hablar mas bien para pedirle "quiero que vivas conmigo" al momento Frey se detuvo, como incrédulo. "quiero que seamos pareja, quiero que seas mío"
3
Frey regresaba al asentamiento guiando de la mano a Loki, quien traía vendado los ojos, La gente miraba al par con ojos curiosos cuchicheando, el joven príncipe traía una sonrisa encantadora, a lo que muchos no podían evitar responder con otra igual.
Pronto entraron a lo que parecía la tienda de su majestad Njörd, aun no regresaba el padre de Frey por lo que se veía, y sin perder mas tiempo, quito la venda de los ojos de Loki, en cuanto lo hizo recibió un abraso y le hicieron cosquillas.
"ja jajaja" reía inocentemente "para, por favor..."
Desde fuera las risas se perdían, y las suplicas de Frey daban a entender otra cosa, como si fuera atacado, Njörd fue lo que entendió y entro con el corazón en la mano asustado por su vástago, mas al ver la escena, Loki dejando que Frey se recupera y este le besaba como recompensa.
"¿Frey?" hablo secamente, entre aturdido, espantado y asombrado, el aludido se gira aun en brazos de su amado Loki, cruzando mirada con su padre, la cara que tiene le preocupa sobrecogedoramente, no esperaba que las cosas se dieran así, tan de sorpresa.
"Frey" la voz del rey parecía una mezcla de todos los temores, dio un paso, no sabiendo que hacer, esperaba que su hijo mayor permaneciera inocente a todos esos deseos carnales, esperaba que se enamorara de alguna de las doncellas, esperaba, tener un nieto al cual consentir cuando mas viejo.
Pero no esto.
"padre" se separó lentamente Frey de los brazos de Loki, quien respetuosamente se mantuvo en silencio. "yo quería..." trató de explicarle acercándose con confianza, el rey dio un paso hacia atrás, alzando su mano como en señal de asco, Frey se detuvo, sin comprender.
"tu eres el hijo del expulsado" declaró fríamente hacia Loki "no quiero que te vuelvas a acercar a mi hijo" ordeno estrictamente, Loki no entendía bien las razones, mas algo como esto ya se esperaba, sin decir nada solo asintió y camino a la salida "Rungu te regresara al castillo, y hay de ti si le vuelves a buscar" Volvió a asentir, dejando ver una mirada de confianza a Frey, que mal interpreto el joven príncipe.
"No padre" se acerco Frey al rey "no puedes prohibirle algo así... yo le qui..." no terminó la frase, sintió por primera vez en su vida la mano de su padre en su cara, el golpe fue tal que le hizo perder el equilibrio, Loki alcanzo a sostenerlo, una mirada confundida salió de los hermosos ojos de Frey
"No entiendes hijo mío,... él es..." su confusión le había hecho olvidar aquella profecía dicha en la hora de nacimiento de su hijo
"nunca me habías pegado, padre" dijo extrañado Frey cubriéndose la zona herida, su padre, el rey se giró, y vio con horror lo había hecho.
Lo que tenia que ser, había comenzado por su propia mano.
Frey se levando, y sin decir nada, y sacó a Loki de la tienda, su padre detrás de él trataba de pedirle perdón, mas al parecer Frey, había tomado una decisión en ese momento.
"dile adiós a mamá y a Freya de mi parte" fue lo último que dijo Frey en los asentamiento de su padre, la ultima vez que el clan le vería con vida, la ultima vez que el Rey veía en esos ojos claros, decididos.
Loki conoció el camino de regreso al castillo, un sabia muy bien que había pasado allí, no supo porque el había peleado, pero tenia la sensación que había sido por él, no le importo, pues lo que mas quería estaba con el, guiándole de regreso al castillo, al parecer Frey no era de los chicos que suplicaban por algo, quizá por eso le gustaba tanto.
Las sacerdotisas recibieron al Rey y su familia, tal como habían previsto, alguien había golpeado a Frey iniciando que la rueda de su destino comenzara a girar, guiando a todos a un terrible final.
Con eso el servicio de las sacerdotisas terminaba y las tres daban lugar a sus sucesoras, la joven Freya, la bella Hilda y su hermana Fler...
4
El manto de la lluvia caía, haciendo del cielo un lienzo de grises, Loki era conducido a ciegas por Frey, en el bosque, alejándose de todo lo que había conocido una vez.
"Frey" murmuro Loki, tocando una vez mas la tela que cubria sus ojos con la mano libre, "basta"
Frey se detuvo y sintiendo un jalón de su brazo, siendo atraído a los brazos de Loki, refugiándose en ellos, llorando amargamente.
Podía escuchar su corazón latir, la pesadez de una sueño obligado. Sintió la extraña necesidad de abrir los ojos.
Estaba en su cuarto, todo arreglado, en su lugar.
Había orden.
¿qué no esta bien? Se preguntó en ese instante al ver su ropa ordenada y doblaba.
Los latidos de su corazón volvieron a resonar con fuerza, como un llamado olvidado que de pronto se retomara, el pecho le dolía, le dolía al respirar, a cada latir del corazón. No un dolor ordinario, un dolor profundo que su mente le decía ya había sentido antes, mucho antes.
Al incorporarse, sintió punzadas de extremo dolor en sus brazos, piernas y el resto del cuerpo, como si hubiese recibido una gran paliza.
Cerró sus ojos y los vio, a todos ellos, golpeándolo, con ira, con... con derecho, él les había arrebatado algo muy querido por ellos.
¿qué era ese algo?
Supuso que era lo mismo por lo cual su pecho y su corazón lloraba¿por qué no podía recordarlo?
Loki se puso de pie resistiendo todo el dolor que cuerpo aun sufría, se vistió con las ropas limpias que habían sido dejadas para él. Salió de la habitación extremadamente confundido.
"sáre!"
Le retumbo en la cabeza, ese llamado que por primera vez oía, y sería su cruz hasta el final de los tiempos a partir de ese momento.
"sáre!"
Giró su cabeza, era tan claro, tan fuerte. La sensación de acudir al llamado apareció. Siguió la dirección, sin darse cuenta que su latir de corazón aumentaba a cada paso, así como su marcha. Recorrió los innumerables pasillos y habitaciones, los inmensos salones y pequeñas salas, recorrió el castillo varias veces en cuestión de horas, el llamado persistía, la angustia crecía pero no daba con la víctima.
"todo esta bien" una voz profunda acompañada de una fuerte mano le detuvo la carrera, instintivamente se volteo quito la mano y puso una forma defensiva "todo esta bien, si todo esta perdido" repitió. Aquel hombre, su maestro, mentor amigo y casi un padre sonrió y se alejó.
"¿Si todo esta perdido?" repitió confuso el joven Loki, sus mechones rubios se acomodaron al retomar una posición mas relajada.
En breve aquel lamento resonó nuevamente en su cabeza, estaba seguro que conocía esa voz¿pero porque no podía recordar¿por qué?
Decidió volver a su habitación o cualquier otro lugar donde estuviesen los demás. Abrió la puerta...
Sintió una asfixia total...
Trato de jalar aire como desesperado, las imágenes eran asfixiantes por si solas, la multitud, el dolor, los gritos la sangre..
"sáre!"
Sensaciones, emociones, un torrente de ellos, sonidos, voces, palabras, frases caían cual furiosa tormenta, todas atacando cada célula, todas al mismo tiempo, arremetiendo en un remolino de locura y desesperación...
5
Del castillo al pueblo solo había unas cuantas millas, unas cuantas...
Una mañana Loki había corrido al pueblo y regresado tan rápido como el viento, ese día algunos habían asegurado que el muchacho tenia alas en los pies, ganándose el respeto del pueblo.
Cada centímetro que avanzaba dejaba el alma, cada metro que ganaba le costaba mas trabajo que el anterior, el cuerpo no le respondía como debía, mas le respondía por fuerza de voluntad...
La lluvia caía armoniosamente, enfriando la atmósfera, mas no los ánimos. Gotas que se colaban dentro de una casa, en la mitad de camino entre el pueblo y el bosque construida de los elementos mas básicos apenas y protegía de los elementos, tenia tallada en sus paredes una serie de runas y símbolos a manera de encantamiento arcaico, custodiada además por fieles guardias voluntarios, armados con una de las peores armas que el hombre jamas haya conocido: El miedo.
Esa casa, una rústica prisión para una criatura como ellos llamaban, que había triado el mal a este pueblo y pronto seria enviada de nuevo con su señor de los males...
La gente del pueblo poco a poco se reunían, por mas furiosos que estuvieran la lluvia tenia una sensación melancólica. Como si el mismo cielo suplicaba con llanto que detuvieran sus acciones, que pararan lo que intentaban hacer, una suplicaba vana antes hombre sordos, irrumpiendo en la cabaña...
"mi señor..." oró una ultima vez Frey "protégeme de lo que..." no terminó aquella frase. Una vez mas volvió a sentir el dolor agudo en su piel, aunque quisiera llevarse las manos al lugar herido estaban atadas tras su espalda,. Sus ojos familiarizados con la tierra mancillada de su propia sangre distinguieron las sombras de aquellos verdugos.
Arrastrado en pasos lentos fuera de la cabaña, sintió con gran regocijo el frescor de la fría lluvia, obligo a sus ojos a mirar al cielo, las manchas azules y grises fue todo lo que vio.
"protégeme.." susurró débilmente mientras sus manos eran desatadas rápidamente y sustituidas las cuerdas por cadenas, "...de lo que..." una, dos, varias veces oleadas de dolor inundaron sus sentidos. Su mente se desprendía de su cuerpo, recordando los momentos en que había sido feliz, tratando de descubrir como es que había terminado en este momento. "...quiero" Y la respuesta se mostraba ante él, con una cara y un nombre.
Si bien ya no tenia conciencia para contemplar a sus verdugos, tampoco para sus tormentos, cuando eso pasaba el verdugo le obligaba a volver con una sustancia pestilente, una droga que le invocaba nuevos terreros a los que también ya se había acostumbrado... para su desgracia.
Un silencio inundo sus oídos, la lluvia había parado definitivamente, el calor de verano asfixiaría a todos paulatinamente, fue entonces que se dio cuenta Frey que las cadenas ya no estaban, que los verdugos ya no estaban.
Alzo la vista, sus ojos enfocaron difícilmente una multitud rodeándole, no podía ver caras ni expresiones.
Comprendió por él porque de su sufrimiento.
Escucho las risas claras, y los gritos terribles en una sola voz...
Sus ultimas lagrimas rodaron por sus mejillas, como acompañadas por los restos de lluvia en su cabello. Un cabello manchado de lodo y sangre que en otrora fuese aludido al color del amanecer.
"protegeme" susurró cerrando los ojos, imaginándose estar de vuelta en casa, con su hermana y familia, de vuelta cuando era feliz... y no conocía el martirio del amor.
6
Todo el esfuerzo de Loki fue en balde se mantenía repitiendo una y otra vez, "todo esta bien, él esta bien", se abrió paso entre la multitud silenciosa, luchando para llegar por donde su instinto le guiaba y le decía estaría Frey.
Todo el esfuerzo de Loki fue en balde, su corazón se detuvo en ese instante, el mundo se detuvo un instante, una eternidad.
Dolbare sostenía en sus manos una espada manchada que retiraba lentamente de la espalda de un Frey inmóvil en el centro de un gran charco de sangre, en su mayoría agua de lluvia teñida con la sangre del inocente...
"no" movió sus labios obligando a su cuerpo a avanzar y derribar a Dolbare, a quitar esa maldita espada, ladrona de tesoros. Cargo el cuerpo con delicadeza, aunque la mirada de la multitud estaba insatisfecha
"no te atrevas a morirte Frey" ordenaba Loki sollozando, aunque intentaba parar sus lagrimas estas salían.
Frey movía sus labios, repitiendo una y otra ves una frase, esforzándose para hacerla sonar con su voz, mas la profunda voz de Loki, la silenciaba, la hacia perderse en el viento.
"NO te atrevas, me oyes no te puedes morir" repetía asustado al ver los ojos de Frey perder el brillo de la vida, asustado al ver como la sombra blanca de la muerte cubría el rostro de su amado, asustado porque le estaba perdiendo. "¡FREY! Me oyes" gritó
"!NO¡" elevó su voz aun más, apretó el cuerpo sin vida contra su pecho, luchando por no sollozar. Encogiéndose en aquel claro en medio de toda esa gente, que perdía su ira poco apoco.
El hermoso muchacho, no había sido un monstruo después de todo, fue tan solo un chico de sonrisa amable. Una madre apretó contra su cuerpo el cuerpo de su único hijo, quien miraba con miedo la escena, algo que jamas se le borraría de su mente como a los demás y que muchos años mas marcarían su destino...
Loki le miró con los ojos enrojecidos, tan ciego y estúpido había sido, al fin se daba cuenta de todo el daño que causaba.
7
El frío invadió sus nervios, saturaba sus células, estaba mojado, con frío, herido, tenia entre sus brazos a la persona que mas había amado, alzó la vista, confuso. Loki buscaba respuestas en la mirada de la gente, algunos parecían alegres, otros satisfechos.
Se encontraron con los ojos tristes de una mujer, una rubia, que parecía lamentar la muerte de Frey, o mas bien parecía lamentar algo mas, a su lado un niño igualmente rubio, parecía triste. ¿Dos personas tristes por Frey?
Loki estuvo apunto de levantarse y llevarse a Frey a otro lado, mas en ese momento la gente comenzó a alejarse, a moverse a uno de los costados del espectáculo, a concentrarse en un grupo mas compacto, la causa, el rey Njörd y su gente.
Loki apretó aun mas el cuerpo de Frey contra su pecho, dispuesto a pelear por él, mas el rey se arrodillo junto al cuerpo y puso una mano en la frente de su hijo, sus guerreros rodearon al trío.
"Te protegí de todos, pero no te protegí de mi" sollozó, los ojos del rey se humedecieron y dejaron caer sólidas lagrimas. "perdóname mi pequeño" dijo y comenzó a sollozar en el pecho frío de Frey, Loki no supo que decir, ni que hacer, y aunque pudiese sus heridas y cansancio le ataban firmemente.
El rey tomo entre sus brazos el cuerpo de su hijo y con relativa facilidad se lo arrebato a Loki, que lucho con lo que aun le quedaba de fuerza. Dolbare se limitaba a ver desde lo lejos como los demás, aquel extraño espectáculo, uno de los guardias le detuvo con un golpe seco, ninguno de ellos le tenia en buena estima a Loki.
Desde el lodo, cansado y adolorido vio al rey alejarse con Frey en sus brazos, obligo a sus músculos hacer un ultimo esfuerzo, pero ya no quedaba nada, no podía ni estirar un brazo, entre gritos ahogados y esfuerzos, vio como se llevaban al amor de su vida a un lugar desconocido.
Con el color gris del cielo, el negro del lodo en sus ojos, el frío calando sus huesos, el dolor anidado en sus músculos Loki perdió el conocimiento.
Quizá para su buena fortuna, alguien declaró que debía morir, otros que debía ser quemado. Dolbare intervino diciendo que aun era su protegido y el mismo le mataría en el castillo.
Mentira que se cubrió matando a alguien mas, mostrando sus huesos a la gente del pueblo, mientras Loki se recuperaba en una habitación cálida del castillo.
Al día siguiente de la muerte de Frey una terrible plaga se desato en el pueblo aniquilando a mas de la mitad del pueblo, la madre de Frey moriría de pena algunos meses después y el rey Njörd junto con algunos seguidores abandonaron esas tierras para embarcarse al mar, en un viaje del cual jamas regresarían. Freya se quedo a cargo de la gente que quedo
8
"como pudiste dejarme, solo en un mundo tan...frío" volvió a musitar Loki encerrado en su habitación, tras varios días de encierro por lo que había pasado era lo único que podía decir, Dolbare por encima de todo le había castigado en uno de las celdas mas profundas del castillo, una que en realidad funcionaba de bodega.
En su furia inicial al ser encerrado y no poder ir al bosque, hizo lo mas creativo en ese momento, busco entre todas esas cosas algo que pudiera ser de provecho para suicidarse. En una caja de madera que no tenia mayor protección que su tapa encontró cuadros, pinturas. Su curiosidad, le movió a verlas, en una de ellas encontró aquella pintura en donde estaba retratado Frey y su hermana,
¿Qué hacia una pintura tan exquisita de Frey allí en esa bodega, La sacó, por un momento los demás personajes de la pintura le parecieron, algo tristes a comparación de la bella cara de felicidad que tenia Frey.
"¿como pudiste dejarme, solo en un mundo tan frío?" Exigió, sin que lo notase, una lagrima escapó cayendo tímidamente en el rostro pintado de Frey. Una vez mas su furia se desato y lanzo la pintura contra lo que pudo, esta se quebró por la mitad, destrozando su bello marco sin dañar el delicado lienzo.
Sin querer, esas palabras se convertirían en un extraño sortilegio.
Cuando trato de dormir, escucho por primera vez en su vida lo que seria, su maldición...
"sáre"
Era la voz de Frey, estaba en algún lado, sabia que era él, podía reconocer esa voz, melodioso suave
"sáre"
Su cara se ilumino de felicidad, por un momento su imaginación le hizo creer que Frey estaba alli, en esa misma habitación, apenas iluminada por los rayos estelares, recorrió el lugar como otras veces en busca del instrumento de su muerte, un extraño movimiento en una pared, le hicieron girar, en la distancia era una persona, una imagen real
"¡Frey!" Exclamó emocionado y sorteo los diferentes objetos hasta llegar donde esta esa figura, cual seria su decepción al ver un espejo de cuerpo entero, lo toco lo sintió, su sonrisa se borro y una mueca de ira se dibujo en rostro
8
Despertó en su cama, no supo como había llegado a ella, sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. Se sentía aun mas miserable que antes, pero...
"¿Estas seguro que podrá con el muchacho?" oyó una voz nueva y desconocida, no le dio importancia, se levantó pesadamente, aun tenia en su mente los recientes hechos, las lagrimas de Frey, su voz gritando y sus labios moverse tratando de decirle algo
"Claro que podrá" esa era la voz de Dolbare, era como si caminaran enfrente de su puerta lentamente
"Frey ha estado con nosotros desde hacia mucho tiempo"
¿Frey? Había oído bien, no, de seguro Dolbare dijo otra palabra.
Salió de habitación, y camino en dirección contraria a la que había oído a Dolbare, tenia ganas de ir al bosque y despejar sus dudas, un guardia le detuvo
"Señor Loki, usted no puede pasar de esta entrada" aquel dijo, Loki trato de evitarle "si sigue insistiendo me veré obligado a golpearle", Loki siguió su deseo de ver el cielo y el bosque se había vuelto poderoso, no había razón para no salir, su corazón sufría por ver el bosque, el soldado no lo dudo y lo golpeo de tal manera que le dejo inconsciente de inmediato.
Al abrir de nuevo sus ojos por segunda vez en ese día, vio sentado a su lado a Dolbare.
"Loki" dijo en voz profunda el mayor " lo siento, pero ahora estas confinado de por vida a este castillo" Loki abrió grande los ojos con tales palabras "Ellos dijeron que te matarían si te veían, pues has profanado algo muy sagrado para ellos y la gente del pueblo clama por tu cabeza"
Se encogió, Frey estaba muerto, merecía cualquier castigo que le pudieran dar 'ellos', fue como si el llanto quisiera escapar de una jaula muy pequeña, Dolbare puso la mano en la cabeza de Loki.
"vamos que hay que ir a despedir a Frey" añadió levantándose. ¿Despedir a Frey¿Acaso Dolbare...
Sintió que el mayor le jalaba y le obligaba a caminar en los pasillos obscuros del castillo, llegaron al gran salón, allí vio a un chico de cabellos azules, y a su lado a un niño rubio, algunos sirvientes.
Se fue acercando.
Y allí estaba, la figura inequívoca de Frey, atendiendo al muchacho rubio. Sus mismos cabellos, una ropa hermosa como la de él, su cara se veía gentil, irradiando un hermoso brillo, se quedo petrificado, era mas que imposible, Frey había muerto en sus brazos hacia unos días y su fantasma le ahuyentaba el sueño. Camino hacia él, con la cara llena de toda clase de sentimientos.
Frey, o quien quiera que fuese Frey se dio cuenta del acercamiento del otro y se levanto, quedando al lado de chicos rubios.
"buenas noches" saludo cortésmente "este es Hyoga a quien serviré de ahora en adelante"
Había querido tocarle la mejilla, besar esos labios, robárselo y llevárselo muy lejos, per esos ojos de Frey, estaban vacíos de algo que Loki había aprendido de él. Un lagrima rodó lentamente en su mejilla, supo que era el momento de retirarse dejando a todos confundidos...
Tenia ganas de romper, de destrozar cosas, de hacer desaparecer ese extraño sentimiento que le perforaba el alma, caminaba a su habitación mas sus pies lo llevaron a otra. A la vieja habitación de Frey.
Entró con respeto, busco una esquina y se sentó ocultó en las sombras, la puerta se abrió y cerró de nuevo. Sintió como unos brazos le rodeaban, Loki no quiso abrir sus ojos y torturase mas con esa imagen, sintió el peso de una cabeza y la cadencia de un suave respirar.
Aquellas manos le peinaron el cabello, acariciaron sus mejillas, delinearon sus labios. Sin duda era Frey, era su tibieza, su aroma, su gentileza.
Dejó de sentirlas, espero a que la puerta se abriera y se cerrará, para lamentarse. No hubo tal sonido, tuvo miedo de abrir los ojos y verle delante, pero el calor de su cuerpo se había desvanecido, su aroma ya no estaba.
Abrió los ojos, ya no estaba Frey, se puso de pie sorprendido ¿cómo había salido? Esa puerta hacia mucho ruido y la ventana daba ningún lado, dio unos pasos para averiguara donde estaba Frey, en el suelo pareció patear algo, un cuadernillo. Lo recogió y lo ojeo...
Durante los siguientes 7 años leería ese cuadernillo todos los días, cientos de veces en la soledad de es habitación, llorando al llegar a la ultima pagina.
"...mañana nos iremos juntos" se leía y no había mas anotaciones
