Si teneis el Adagio de Albinoni, por favor, escuchadlo mientras que leeis el capítulo. Si no, también vale la banda sonora de Gladiator. Si Shadir, también vale el 'Lacrimosa' del Requiem de Mozart... (me has tocado la fibra niña, adoro esa obra).
Las Garras del Destino.
Capítulo 10: Condenado a Morir.
Pom pom ... Pom pom ...
El latido rítmico de un pequeño corazón que se va parando lentamente...
Pom pom
resonando en los oidos de un ser que vive en tormenta permanente...
Pom pom
estallando en un dolor tan impotente que duele el alma más allá de lo que pueda conocerse...
Pom... Pom...
- FREEEEEEEEEEEEEZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEERRRRRRRR - Vegeta atravesó la ventana de la sala del malvado tirano. Los cristales salieron despedidos en todas direcciones. Sus ojos azabaches llenos de odio y sufrimiento se clavaron en el maldito.
Pom... Pom...
- Jajajaaja, Jajajajaja, JAJAJAJAA. - Rió el ser inmundo observando la escena.
Pom... Pom...
- Dame... el antídoto... - Sus ojos desencajados, sus manos aferrando con fuerza el infantil cuerpo inocente, hirviendo en fiebre.
Pom... Pom...
Vegeta se arrodilló frente a su enemigo con su hija en brazos. - Dame el antídoto y podrás hacer conmigo lo que quieras. - Ofreció en un acto desesperado.
Pom... Pom...
- JAJAJAJAJAJAJAAAAAAAA. - rió el tirano.
Pom... Pom...
- Vegeta... Vegeta... Vegeta... implóralo... de rodillas. -
Pom... Pom...
Vegeta se arrodilló y de su cara surgieron lágrimas de un dolor indescriptible. - Te lo imploro... dame el antídoto... -
Pom... Pom...
Freezer sonrió y luego fingió pesar. - ¿Por qué has esperado tanto para pedírmelo?.Han pasado demasiadas horas... debió ser terrible para un niño sufrir tanto... ¿Qué estabas haciendo mientras Vegeta?. -
Pom... Pom...
- El antídoto... - Susurró apretando los dientes y los puños consciente de que a la pequeña le restaban pocos segundos de vida.
Pom... Pom...
El lagarto fingía una falsa preocupación - Se lo daré... después de todo... yo nunca quise que sufriera... es un ser inocente que no tiene la culpa de nada... Da nada más que tenerte por padre... - Freezer hizo una seña a su subordinado y este trajo una pistola de inyetables.
Pom... Pom...
- Pobre niña... está casi muerta... espero que estemos a tiempo de salvarla... -
Pom... Pom...
- Bra... - Susurró Vegeta muy bajito una vez que le habían inyectado el antídoto llevándola a un extremo de la habitación. - Bra... -
Pom... Pom Pom... Pom... Pom Pom ...
La pequeña abrió los ojos levemente.
- Papi... - Susurró con un hilo de voz. - no... me... dejes... te... quiero... - Pom... P... - ahhh. - Su corazón se paró tras una dulce expiración...
- Bra... ¿Bra?... -
Sangre que hierve a borbotones... revolucionando un herial de sensaciones...
- BRAAAAAA... -
Voz que arrasa el alma... como un cuchillo que corta la carne viva.
- BRAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA -
La transformación era completa. El super saiyajin en estado 4, surgió arrasando con un grito desgarrador toda la base.
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Goten y Vegeta habían llegado a su destino.
Volaron rápidamente hasta donde la Bra del futuro se encontraba encerrada. En esa base semi destruida, en la terrible sala de torturas, asediada por ratas que devoraban sus heridas, no gritaba, no se movía, sus ojos estaban perdidos en el interior de una mente desquiciada.
Padre y esposo arremetieron contra las ratas que salieron desparovidas y aún fueron aniquiladas por Vegeta. Goten liberó sus manos y le dió una alubia senzu que curó de inmediato sus muchas heridas. Pero las heridas de la mente no fueron curadas y su mirada continuaba perdida en un resquicio insondable.
Vegeta fue el primero en partir hasta Freezer, también transformado en Super Saiyajin 4. Goten la puso en un lugar alto, a salvo de alimañas. - Mi amor... volveré a por tí... te amo... - Y rozando sus labios apenas, voló hacia el campo de batalla.
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- Jajajaja, zirsan... - Un niño de unos 7 años y cabellos verdes llamaba a su hermana, un par de años menor que él. - ¿A qué jugamos?. -
- Vamos a jugar al escondite en el bosque. Píllame si puedes... la la la laaaaa laaaa, no me atrapas... - La pequeña de cabellos también verdes, hacía burlar divertidamente.
- Jajaja, claro que te voy a atrapar, jajajaja, ¿eh? ¿Donde has ido?... ya verás pequeña zirsán... te voy a encontrar... - Respondía el niño. - Ah ya te ví... te has escondido detrás del gran roble... - El niño puso una cara pícara y caminó sigilosamente para sorprenderla, cuando un atroz rayo atravesó partiendo en dos el árbol. - ZIRSAAAAAAAAAAAAAAAAAAAN - Zarbón despertó sorprendiéndose de no estar muerto. De hecho le faltaba poco para estarlo.
- Zirsan... otra vez no... no déjare... que mueras de nuevo... te encontraré... - En su locura se levantó tambaleándose y caminó dando tumbos en dirección hacia la base.
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3 saiyajins en estado 4, se enfrentaron en una acción conjunta contra el tirano, que confiado en sus nuevos poderes, no se molestó en apartarse del triple impacto. Su cuerpo se deformó como la goma quemada. Sus ojos se salieron de las órbitas antes de estallar definitivamente, y su boca sólo acertó a gritar un - NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO. - Que sonó como si todas las almas perdidas del infierno se hubieran congregado en su garganta a gritar por sus miserables existencias.
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Zarbón avanzó hasta el cuerpo aún caliente de la niña. - Zirsán... - Susurró. - No morirás... - Con sus uñas cortó las venas en la mucheca de la pequeña, y luego cortó las suyas propias. Dejó ir una descarga eléctrica sobre el pecho de la niña y el corazón comenzó a latir nuevamente. La sangre de él comenzó a fluir hacia la chibi, y pronto comenzó a sentir como la sangre envenenada invadía su cuerpo apoderándose de cada célula.
POM... POM... POM... POM...
Bra apareció detrás. - Suelta a Buraaa. -
Zarbón sin fuerzas apenas para defenderse sólo pudo sonreir lévemente antes de que finalizase el intercambio de sangres, a sabiendas del componente regenerador que tenía la suya y esperando que la naturaleza saiyajin hiciera el resto del trabajo. - ¿Zarbiii?. - La pequeña, aunque debilitada, se interpuso delante para que no atacase a su 'hermano mayor adoptivo'.
- Nooo. El es bueno, no le hagas daño. - Zarbón se desplomó en el suelo envuelto en dolor.
- Zirsan... mi pequeña... zir...s... -
- Zarbiiiii. - Lloró la chibi abrazándolo y Bra comprendió que le había salvado la vida.
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3 hombres se miraban fíjamente, enjuiciándose interiormente por lo sucedido.
Raditz, Bra y Chibi Bra, en brazos de su homónima del futuro interrumpieron sus reflexiones inmóviles.
- Papiiiiiiiiiiiiiiiiiiii. - Gritó la más pequeña.
Pronto, la escena hermosa de dos padres abrazando a sus hijas, ante la mirada encontrada e indescriptible de dos hombres que eran ahora rivales de un amor.
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Liberaron a los Namekianos y congregaron las bolas de dragón. Dado que podían pedir ilimitados deseos, pidieron tantos, que el pobre Dragón mágico hasta pensó en cambiar de oficio:
- Restaurar el planeta Tierra.
- Restaurar a todos sus habitantes asesinados por Freezer y borrar de sus memorias el terrible suceso, a escepción de las familias y guerreros Z.
- Eliminar completamente el veneno de la sangre de chibi Bra, si es que quedaba algún resquicio después de lo que Zarbón hizo.
- Eliminar los efectos de la droga en el cuerpo de Bra, a petición de la interesada, que trataba de estar lo más entera posible, fingiendo hasta el momento excelentemente bien a pesar de estar destrozada internamente.
- A petición de Chibi, restauraron el planeta de Zarbón y los habitantes que habían muerto en la 'guerra' por conquistarlo.
- A petición también de la Chibi, restauraron a Zarbón.
En este momento, cuando vió como el guerrero volvía ala vida, Bra se derrumbó a llorar en el suelo incapaz de olvidar lo terrible que vivió a sus manos. Goten y Raditz la sostuvieron intercambiando una mirada extraña, competitiva.
- No puedo soportarlo, no puedo... -
- Dragón mágico, llévate al insecto de Zarbón a su planeta restaurado. - Pronunció Raditz.
Pero Bra seguía llorando y hundiéndose en sus peores pesadilllas. - Pedidle al dragón que me mate, no quiero seguir viviendo... - Dijo desesperada.
- Dragón mágico, haz que olvide todo lo que vivió en su vuelta al pasado. - Vegeta la golpeó en la sién ante la mirada rabiosa de Raditz y el deseo fue concedido.
- Transportar a Vegeta y chibi Bra a la Tierra, no sin un leve intercambio de palabras del Vegeta del pasado con Mirai Vegeta.
Restaurar Namek y enviar a los namekianos a su hogar fue el último de los deseos antes de que el cuarteto partiera al futuro nuevamente...
FIN (o mejor dicho... hasta luego...)
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Esperen la continuación próxima... ENTRE CORRIENTES. ¿Qué pasará ahora que Bra ha unido con Raditz?. Ella no recordará nada de lo que ha hecho, sin embargo... sentirá la llamada de la sangre saiyajin de su compañero...