Fuego
Capítulo 3: Apaga la luz
Un par de curiosos pies descalzos caminaban hacia la cocina. El olor a desayuno lo había llevado hasta ahí, pues se encontraba hambriento ya que casi no había cenado la noche anterior por haber estado peleando con Aoshi.
Llegó a su destino y descubrió a Kenshin preparando el desayuno, que por cierto olía bastante bien…
-…no como el espantoso desayuno que Kaoru prepara cuando tú no estás, Kenshin-
El pelirrojo tan solo sonrió, mientras seguía cocinando. Su semblante se tornó un poco más serio y dejó de picar fruta. Aún de espaldas, comenzó a interrogar a Sanosuke.
-Sano…¿Qué fue todo lo de ayer?-
Sano no comprendía… hasta que recordó el 'pequeño incidente' que había tenido con Aoshi.
-Ahhh… ¡pero si no fue nada! No sé porque todos se alarmaron, solo fue un rasguño.-
-Pero no debiste hacerlo- dijo ahora encarándolo- vivimos bajo el mismo techo, por lo tanto tienes que respetar a Aoshi…-
-¡Pero él no vive aquí! Solo vino de parásito a estorbar…- dijo haciendo pucheros.
-Claro que no… además, si hablamos de parásitos…- reclamó lanzándole una mirada a Sanosuke.
-Ehhh… ¡Pero yo soy amigo!-
-Aoshi también-
-Aggg… bueno ya, ¿no? suficientes preguntas-
-Solo quiero que me digas por que lo hiciste- dijo volteándose de nuevo para empezar a picar de nuevo la fruta- motivos debiste haber tenido-
-Los motivos me sobraban, créeme.- dijo seguro.
-¿Y cuales son esos motivos, Sano?- cuestionó Kenshin.
-Aggg… es que…¡todo! Desde que llegó se siente el más codiciado, cuando salimos al pueblo, todas lo ven a él! Yo estaba acostumbrado a ser el galán!-
-Ahhh ya entiendo… ¿estás celoso?-
-¡JA! ¿Celoso? ¿Yo? ¡Por favor! No me hagas reír…- dijo con aires de superioridad.
-A mi no me engañas Sano, te da envidia, pero eso no es todo-
-Ahhh ¡También la forma en que trata a Misao!-
Había dado en el clavo, era justo lo que Kenshin quería escuchar.
-…es decir, la ignora por completo y ella sigue ahí! Es increíble, ¡eso no tiene nombre!.-
-Claro que lo tiene- afirmó Kenshin sonriendo –eso se llama amor-
-Ay si si… que amor ni que nada… tu lo dices por que estás más clavado que un clavo con la fea.-
-¡Sano!- reprochó Kenshin.
-A mi tampoco me engañas Kenshin, se les nota en la mirada, es cuestión de tiempo para que pase algo entre ustedes dos, ¿sabes?-
Kenshin intentó disimular el rojo de sus mejillas.
-No sé de que hablas Sanosuke…-
-¡No te hagas el tonto Kenshin! ¿Crees que Misao no me contó lo que vio ayer al entrar a la cocina? Estoy perfectamente enterado-
-No pasó nada… simplemente estábamos jugando-
-Uyyyy… ¡estaban jugando! Uyyyy… el juego del amooooooooooooooooor- dijo riéndose, cosa que a Kenshin no le hacía gracia alguna.
En eso…
-¿Juego de que?- dijo Kaoru entrando a la cocina.
Sanosuke de repente comenzaba a ahogarse con su propia saliva y a toser como loco, en lo que Kenshin trataba de dar una explicación.
-No… lo que Sano decía era que hoy es noche de apuestas en el Akabeko y que, por lo tanto, no se quedará hoy en el dojo- dijo mirándolo insistentemente.
-Ahhh…- Kaoru no estaba del todo convencida con esa respuesta –bueno, como sea, mejor así. ¿Qué vamos a desayunar hoy Kenshin?-
-¿Por qué no mejor esperamos a que vengan Misao y Aoshi?- cuestionó Kenshin.
-¿Qué… no han bajado?- preguntó Kaoru extrañada.
-Hmm no.-
-Pero ya es muy tarde, creí que ya estarían aquí-
-No se preocupen- dijo Sanosuke –yo voy a buscarlos!- dijo saliendo rapadísimo de la cocina.
Al primer cuarto al que se dirigió fue al de Misao pero, curiosamente, ella no estaba. Supuso que estaba en el baño, así que fue al cuarto de Aoshi, con cierto desprecio. Abrió la puerta de un solo golpe, esperando despertar a aquel ser que tanto odiaba, pero en su lugar encontró el cuerpo de una mujer dormida.
-…Misao? – preguntó confundido, ella se encontraba en el futón de Aoshi, durmiendo placidamente, pero el dueño del cuarto no estaba ahí.
De un momento a otro, la puerta del pequeño baño de la habitación se abrió, dejando ver a Aoshi ya vestido, acomodándose la gabardina. Aún no se percataba de la presencia de Sanosuke, por lo que empezó a hablarle a Misao.
-Misao… ya despierta, tenemos que bajar a desayunar, podrían sospechar que…- en ese momento levantó su vista y se dio cuenta de que Misao no era la única que escuchaba.
-Sanosuke… ¿Qué haces aquí?- cuestionó nervioso.
-…que…que hace ella… aquí- preguntó anonado.
-No es lo que tu piensas, ella y yo…- trató de explicar la incómoda situación, pero Sanosuke no le permitió hablar.
-¡Ja! ¿Qué quieres que piense? ¿Que pasaron una tranquila noche solo durmiendo?-
-Aunque no lo creas, así es- dijo seguro
-A mi no me engañas Shinomori, ¡y de esta no sales vivo!- dijo y se lanzó a golpearlo.
Ahora si, en sus 5 sentidos, Aoshi lo esquivó y contraatacó golpeándolo en la nuca.
-¡Aoshi!- exclamó una despierta Misao, al ver a sus 2 amigos, uno tirado en el suelo babeando y con los ojos en espiral, y el otro sacudiéndose las manos.
-Vamos a desayunar-
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La mañana pasó tranquila sin ningún contratiempo, dándole paso al atardecer. Nadie se encontraba en el dojo, Kaoru y Kenshin habían salido a comprar comida para la cena. Aoshi y Misao… bueno, ellos no habían dicho a donde habían ido, y Sanosuke no tuvo más remedio que quedarse en casa de Megumi, pues se encontraba en reposo después de la pequeña lucha que tuvo, de nuevo, con Aoshi.
En el mercado…
-Ya tenemos todo lo que necesitamos para la cena, Kenshin-
-Si, tienes razón- dijo sonriendo.
-Bien, ya podemos regresar- dijo Kaoru, pero se dio cuenta de que el espadachín se había quedado intacto, como extrañado.- ¿Qué sucede Kenshin?-
-Hmm… es que… compramos demasiadas cosas y… nadie irá a cenar al dojo. Misao y Aoshi se fueron desde la mañana y dijeron que volverían tarde, y Sanosuke ha de estar aún adolorido, así que supongo que se irá directo a su casa.-
-¿Ehh?- dijo y suspiró cansada- ni hablar… -
En el bosque…
-¡Cielos! Nunca había visto este lugar…- decía una Misao extasiada, mirando con asombro la gigantesca cascada que descendía y desembocaba en una laguna enorme. El agua era cristalina y limpia.
Y no pudo reprimir sus ganas de entrar en ella…
Corriendo se aventó a la laguna, sorprendiendo a Aoshi aunque, después de todo, se imaginaba algo así. Discretamente sonrió.
-¿Por qué no vienes, Aoshi?- cuestionó divertida.
-No quiero-
-¡Vamos! ¡No seas así!- dijo haciendo un puchero.
-No tengo ganas de mojarme- dijo cerrando los ojos.
Aprovechando esto, Misao utilizó su velocidad de ninja para llegar hasta él y jalarlo hacia el agua, cayendo ambos y sumergiéndose.
Ya habiendo sacado la cabeza ambos, Misao sonrió.
-¿Ves? ¡Es divertido!- dijo sonriendo aún con más ganas.
Aoshi no mostraba expresión alguna pero, para sorpresa de Misao, fue él quién tomó la iniciativa y la tomó del rostro, mirándola fijamente a sus ojos.
-¿Por qué siempre haces esto?... siempre terminas convenciéndome… u obligándome- a esto último, Misao rió un poco.
-No sé… -
Aoshi simplemente se dedicó a besarla dulcemente en los labios, mientras que ella lo atrapaba en un tierno abrazo, a pesar de lo fría que estaba el agua. Pronto esos besos dejaron de ser dulces, para convertirse en 'apasionados y dulces'. Ya les había gustado ese juego. Ambas manos de Aoshi descendieron por el cuerpo de Misao, hasta ejercer leve presión sobre su cuerpo para que se pegara al de él, cosa que hizo al instante la chica. Ella no se quedó atrás, dándose el lujo de quitarle las ropas que tanto estorbaban y pesaban en el agua. Después de cierto tiempo, ambos terminaron en tan solo ropa interior, comenzando a moverse apasionadamente debajo del agua. Los besos eran cada vez más ardientes, más intensos.
Siguieron por ese camino…
Más tarde en el dojo…
El anochecer había llegado, al igual que Kenshin y Kaoru al dojo. Se habían dedicado a hacer una sencilla cena, pues solo estarían ellos dos. Kaoru no dejaba de pensar en eso, ¿sería su oportunidad?
Kenshin se encontraba mezclando algunas cosas, en lo que Kaoru preparaba verdura picada. Tan sumida en sus pensamientos estaba, que no se dio cuenta de que el cuchilllo había dejado de picar verdura, para acercarse más a su dedo…
-AAAuuuu!- exclamó Kaoru aventando el cuchillo y presionando su dedo. Al oír el grito, inmediatamente Kenshin se dirigió con Kaoru, para ver que le pasaba.
-¿Qué sucede, Kaoru?- preguntó sumamente preocupado.
-No, nada… solo me corté- dijo mostrándole su dedo, del cual resbalaba un hilillo de sangre.
-Hmm… no es tan profunda, pero de cualquier forma se podría infectar, déjame ver- dijo y tomó el dedo con cuidado.
Kaoru lo miró profundamente, Kenshin se dio cuenta de esto.
-¿Ehh… que sucede.?- preguntó nervioso por las miradas que Kaoru le dirigía.
-… nada- dijo sonriendo… ¿sensualmente?
-Ah bueno… porque ya me empezaba a preocu…- no pudo terminar su frase porque Kaoru se abrazó a él tiernamente.
-…Kaoru…- exclamó impresionado, jamás se hubiera esperado eso, que ella lo abrazara. Mucho menos se esperó que ella se separara para verlo a los ojos y plantarle tremendo beso en la boca. Eso no era correcto… ¿o si?
Él estaba conciente de sus sentimientos hacia ella, y también de que ella sentía cierto afecto por él. Pero no se sentía digno de una mujer como ella… era mucho para él, considerando que era muy inexpresivo con ella. Pero ahí estaba, besándola como nunca imaginó, demostrándole sus sentimientos.
No pasó mucho tiempo para que pensaran que las ropas estorbaban…
Apaga la luz…
Con calma…
Recita palabras de miel…
Para mi…
A tropezones llegaron a la habitación del samurai, instalándose y calentando la fría habitación. Kenshin trataba de decir algo, pero Kaoru lo callaba insistentemente. Cualquier cosa que fuese, no podía ser más importante que probar sus labios. Se encontraban pegados a la pared, Kenshin sobre Kaoru, besándola insistentemente…
Apaga la luz…
Y calla…
Describe mis sueños entre…
Sábanas…
Continuará…
Notas de la linda autora: Hola! Ehh! Al fin terminé este capítulo! Espero que me haya quedado bien, andaba un poko inspirada y traté de ponerlo romántico pero sin llegar a lo empalagoso, je! Espero que si me haya quedado así. Mil gracias por sus reviews, sé que son pocos, pero espero que sigan dejando más, ¿va? Andenle no sean malitos! Que les cuesta dejar un review aunque sea diciendo 'está padre' o algo así, no les cuesta nada, ¿verdad? jeje, no se crean, pero si les agradecería mucho que dejen sus comentarios!
Bueno, eso es todo, espero actualizar prontito, cuídense mucho y, si pueden, escuchen a F0BIA, jeje, es una recomendación!
ByeBye
Lau
