La decisión más importante de su vida

221 B de Baker Street

Londres, Inglaterra

Año 2007

Shinichi Kudo entraba triunfal en su casa, con Ran junto a él. Habían sido dos días muy ajetreados; tuvo que contarle a Ran lo de la organización que había montado, lo de las sospechas que tenía y que nadie podía enterarse fuera del círculo legal y policial, o lo que es lo mismo, nada de exclusivas a Salsa Rosa. Por fin Shinichi estaba de vuelta en casa, por fin con sus hijos y por fin con su mujer. Fue a su habitación y allí se quedaron, hablando, como si fuera un día normal y corriente.

A la mañana siguiente

El entrenador de su club, le había permitido a Shinichi una semana para descansar del estrés que debió suponer para un joven como él, que secuestraran a su mujer. Sólo lo sabía él en todo el club, porque era una muy buena persona y Shinichi tenía total confianza en él, así que le pidió que dijera que se había torcido el tobillo y no podría jugar.

Así, Shinichi salió tranquilo de su casa y se dirigió, junto a toda la familia, hacia la casa de sus padres, para hablar con ellos y así volver a la normalidad más absoluta. Pasaron allí dos horas hablando sin parar, hasta que, sorprendentemente, Yukiko cortó la conversación y les dijo que salieran a divertirse, que ellos se quedarían con los niños, aquella noche.

Se fueron hacia el centro de la ciudad, esperando encontrar algún lugar tranquilo en el que almorzar, pero lo que vieron fue la noria que se encuentra cerca del Big Ben y a Ran se le ocurrió una idea:

-Shin¿porqué no vamos al parque de atracciones?

-Bueno, a mí me da igual, mientras no acabemos comiendo en un McDonalds de esos o en un Burger King, por mí no hay problema.

-Entonces, decidido, FIESTA.

Inmediatamente, se dirigieron hacia la entrada y sacaron unos cuantos cupones, para las atracciones, aunque lo primero que hicieron fue comer algo.

Se dirigieron a un local llamado RISTORANTE DI PIERLUIGI. Shinichi, sin saber porqué, sentía que en ese lugar se respetarían todas las reglas de higiene y calidad hasta en su más mínima expresión. Ran, a pesar de la perplejidad de Shinichi, se pidió un buen solomillo de ternera, mientras que el ex-detective se contentó con un plato de spaghetti bolognesa. Para acabar, cada uno se pidió una tarrina de gelatto di tutti-frutti.

Salieron, tan felices como siempre y se dirigieron a la noria, donde pasaron unos preciosos instantes en pareja y nada más salir, Ran se fue directa hacia la montaña rusa y se pasó todo el trayecto gritando a pleno pulmón, muy feliz. Inmediatamente después, la Mistery Coaster se convirtió en su víctima. Duarnte todo el recorrido, Ran estuvo gritando y sonriendo como una niña, pero ni un sólo grito de susto dio la chica, cosa que extrañó mucho a Shinichi.

-Ran¿Ya no te asusta el Tren del Terror? El mes pasada te tuve que chatajear para que entraras.

-Verás, Shin, la experiencia de ese secuestro me ha enseñado que tengo que vivir la vida feliz y contenta y no asustada de unos monstruos generados por ordenador.

Siguieron caminando, mientras Shinichi pensaba que aquello se empezaba a tornar realmente extraño. Ran siempre había vivido según esa filosofía, pero ello no le impedía tener un miedo mortal a todo tipo de seres extrasensoriales. Shinichi achacó todo al estrés postraumático, pero eso no evitó que se temiera lo peor.

Llegaron a su casa tranquilamente y, extrañamente, Ran se abalanzó sobre él y le tiró contra la cama.

-"Siempre era yo el que hacía éstas cosas- pensaba- A Ran nunca le habían gustado los jueguecitos en temas como éste y siempre dejaba que empezara yo. ¿Qué diablos está pasando?"

Su cadena de pensamientos se vio interrumpida por un peso que se situó sobre él y comenzó a darle besos alrededor de todo el cuello. Pero Shinichi la apartó bruscamente, diciendo:

-Lo siento, pero estoy fatal después de la tarde en la montaña rusa... mañana¿Vale, cariño?- dándole un beso en los labios.

-Está bien...- asintió ella, desilusionada.

Durante la noche, Kudo se estuvo estrujando el cerebro, para intentar encontrar una explicación lógica al extraño comportamiento de su esposa.

-"Podría ser estrés postraumático, que quiera aprovechar el tiempo, porque cree que le puede volver a pasar; también podría ser que ahora le haya entrado un ansia increíble por el carpe diem; incluso creo que podría ser un simple subidón de azúcar... no sé. Ya me comeré el coco mañana, ahora tengo que dormir, que tengo una rueda de prensa a las 10"

A la mañana siguiente

Shinichi se levantó lentamente, se desperezó y se dirigió a la cocina. Desayunó rápidamente, conectó un sistema de vigilancia por cámaras y otro por micrónos y sensores y salió de la casa, tras cambiarse, para dirigirse hacia el estudio de televisión, con la nueva equipación del equipo puesta y agradeciendo al presidente que le diera, por lo menos, también el chándal de entrenamiento, porque de no ser así, Shinichi no habría podido, siquiera salir de su domicilio. Cuando se estaba montando en el coche, volvió a entrar en casa y sacó un pequeño vendaje, se lo colocó en el tobillo y, ahora sí, se dirigió a los estudios de televisión.

Por el camino, llamó a Hakuba:

-Saguru, dozô, busca en Internet toda la información que puedas localizar sobre el estrés postraumático.

-Eh... ¿Para?

-Fantasmas personales, amigo.

-Ah, de acuerdo, te llamaré durante la publicidad.

-Arigatô gozaimasu.

Así llegó al estudio de la BBC, donde le recibieron muchas fans. Se paró un momento, para firmar autógrafos, cuando alguien dijo:

-Kudo-sensei, ¿dónde está su mujer? Había oído que siempre le acompañaba

-Sí, así es, siempre me acompaña, a menos que vaya a ir a visitar a sus padres a Japón, a donde yo me dirigiré en el momento en el que acabe con la entrevista. Me está esperando en casa, con mis hijos, para irnos en el momento en el que llegue.

-Entiendo.

Shinichi se dirigía hacia la salida cuando oyó al chico salir corriendo y gritarle "¡Cornudo!". El ex-detective no se lo pensó dos veces e ignoró el comentario, entrando tranquilamente.

Ya dentro, le dieron un poco de maquillaje y le hicieron pasar al plató, donde fue recibido con aplausos por parte del público, tanto de sus hinchas, como de los que no animaban a su equipo, porque, al igual que le pasa a Zidane, es tan bueno, que nadie puede negar su calidad.

Estrechó la mano del comentarista deportivo que le haría la entrevista y se sentó en el sillón.

-Buenos días, Kudo. ¿Cómo está?

-Buenos días, Larry- respondió, en un inglés bastante bueno- Pues bien... me falta sueño, pero bien.

-Jaja, tranquilo. Verá¿Cuáles son sus objetivos para ésta campaña?

-Pues tenemos pensado repetir el triplete de Liga, Copa y Champions e intentaremos ir a por la Copa de la Liga también... aunque, por supuesto, también queremos la Supercopa, la Intercontinental y el Mundial de Clubes.

-¿7 títulos? Sabrá que si lo consiguen, se convertirán en el equipo con mejor palmarés... tan sólo les pelean el puesto el Madrid y el Bayern...

-Jeje, pero es que yo voy a intentar sacar algo también muy histórico, Balón de Oro, Bota de Oro y FIFA World Player. Además, el FA Player y el Jugador asiático del Año, serán para alguno de mis amigos, no tengo porqué preocuparme.

-Tiene toda la razón, Kudo. ¿Qué hay de cierto en los rumores que señalan la posible ruptura de su matrimonio con Ran Mouri?

Shinichi abrió los ojos como platos.

-¿Nanî?

-Verá, nos han llegado informes, confidenciales, por supuestos, que afirman que se producen continuas disputas, amenazas y escapadas en su domicilio...

-"Será cabrón el Matsui, seguro que fue él, demo... ¿Por qué?" Larry, lo siento, pero tengo que afirmar que tus informadores se han equivocado, no se han producido peleas recientes de ningún tipo en mi domicilio.

-Vaya, que extraño... Da igual, volviendo al tema futbolístico¿Qué esquema de juego piensa emplear vuestro entrenador en la visita del mes que viene a Estocolmo? Hay que tener en cuenta que os jugáis el pase directo a la siguiente ronda de la Champions y podéis dejar sentenciada una eliminatoria en el 4 partido...

Shinichi no le escuchaba desde que mencionó Estocolmo. Se había quedado paralizado, hasta que, 2 segundos después de que acabara de hablar, saltó.

-Perdona Larry, he de llamar un segundo...

Sin dar tiempo a una réplica, fue hacia la parte trasera del plató y sacó el móvil. Marcó el número de un compañero y le dijo:

-Hiroshito, ve a mi domicilio y mira a ver si Ran está en la casa.

-Enseguida.

Se oyó el abrir de una puerta, unos pasos, muy acelerados, el abrirse de otra puerta y el grito de: "Ran-san¿está en casa?"

-Me temo que no, Señor.

-Joder... mira en mi mesa, el portátil, hay un circuito de cámaras que controla toda la casa, asegúrate.

-Ahora mismo, Señor.

Shinichi, completamente ido en sus pensamientos, escuchaba el abrirse del ordenador y el tecleo del portátil.

-Señor, lamento informarle de que no se encuentra en casa en éstos momentos, pero tiene un mail.

Shinichi se sorprendió y le pidió que lo leyera.

Querido Shinichi:

Esto no puede seguir así, llevo ya 6 años viviendo contigo y no puedo soportar ni un segundo más el infierno en el que me haces vivir día y noche con misterios y fútbol. He llevado a los niños con Hattori y allí se quedarán hasta que vayas a por ellos.

Con cariño

Se despide

Tu ex-mujer, Ran Mouri

Shinichi estaba de piedra. Era su mayor miedo y se había hecho realidad. Ran le había dejado sólo...

-¡Mierda!- gritó, mientras golpeaba la pared y la atravesaba, haciendo que su puño saliera en escena, justo tras la cabeza del presentador del concurso.

Salió corriendo, ignorando a los cámaras y montó en el coche. 5 segundos después, ni siquiera el humo del Audi quedaba presente.

Uno de los cámaras, que estaba de descanso y había escuchado toda la conversación, se acercó al presentador del concurso y éste, como buen ex–presentador de Salsa Rosa que era, anunció al mundo la noticia de la separación de Shinichi Kudo con Ran Mouri. Era extraño, pues en Inglaterra no eran muy dados a los escándalos y habían tardado realmente poco en dar a conocer éste...

Shinichi llegó a la oficina justo cuando Hakuba entraba, ojeroso, en la sala de descanso.

-Me cago en la leche - decía Kudo, molesto- ¿Cómo es que nadie se ha enterado?

-Pidió que se retirara la vigilancia, Señor.

-¿Cuándo?

-5 minutos antes de entrar en emisión, Señor. Justamente cuando los sub-comandantes salían para sus domicilios y el general llegaba.

-"Claro, aprovechó que no había nadie que me conociera de verdad para usar un simulador y colarse... es listo el cabrón. Además. Ha de tener un topo que le avise... No es un principiante, precisamente"

-A ver...- murmuró Kudo- Ya sé. Ponedme el vídeo de las 10:05, por favor.

El subordinado se dio auténtica prisa en situar el vídeo en esa hora y se percató de cómo la mirada de su jefe cambió drásticamente cuando su mujer apareció andando por la habitación, vestida y con una maleta bajo el brazo.

-¿Shinichi?- preguntó Hakuba.

-Saguru¿te suena el Síndrome de Estocolmo?

-¿Eh?

-Responde, dozô.

-Pues... si no me equivoco, se da cuando una persona secuestrada se siente atraída por el secuestrador. Aunque también hay mutaciones del mismo, como cuando las mujeres maltratadas siguen amando al marido, puede que incluso más, se señala como Síndrome de Estocolmo¿por qué...?

Cuando vio en la pantalla, una Ran saliendo de la misma y la cara de Kudo, lo entendió todo.

-¿No me digas que crees que...?

-No, Saguru, creo algo mucho peor. Llama a los demás, por favor.

Instantes después, Kaito, Heij, Makoto, Hakuba y Hideo estaban en el salón principal con Kudo.

-Veréis, tengo una ligera sospecha, que me inclina a pensar que a Ran no le pasará nada. Si unimos el registro con... bsbsbsbsbs- cuchicheaban entre ellos.

-Hmm... podría ser, además, tiene sentido.

-Hai, por eso mismo necesito devolverle el golpe, pero de una manera espectacular, para que nadie vuelva siquiera a pensar en hacer eso.

Se quedaron un rato meditando, hasta que Kaito, el más imaginativo de todos, saltó:

-Ya lo sé, haremos que se entere todo el mundo con un... bsbsbsbsbs.

-Perfecto, es simplemente perfecto. ¿Creéis que lo tendremos para dentro de un mes?

-Sí, seguro. Hablaré con los de la compañía para organizarlo.

-Bien, yo prepararé el repertorio¿ok?

-De acuerdo, iremos practicando.

Se fueron cada uno a su domicilio y siguieron con la rutina, salvo Shinichi, quien se encerró en su habitación y no salió en un mes de su domicilio, mientras que sus hijos se fueron con su padre y su madre a Nueva York. Ello, dio lugar a multitud de rumores sobre el divorcio y muchas cosas más. Pero todos cesaron cuando, tres semanas más tarde se anunció el evento de cobertura mundial que estaban preparando y que aclararía todo a su conclusión.

El gran día

Emirates Stadium, Londres

Shinichi estaba hecho un manojo de nervios al llegar, intentando que todo saliera a la perfección. Planearon todo lo que ocurriría y se dirigieron al túnel de vestuarios, cada uno con una ropa diferente.

Extendió su mano y dijo:

-A por todas, chicos.

Los demás apoyaron sus manos sobre la suya y al grito de "Hasta la muerte", disolvieron la piña.

Sus compañeros salieron y él se quedó en la salida del túnel, hasta donde llegaba el sonido de los gritos de:

-¡Shinichi, Shinichi, Shinichi!

El público le pedía que saliera y lo hizo, dando comienzo la operación policial más extraña de la historia.

Notas del autor: Ya estoy aquí, de nuevo (Esquivo un tomate que iba directo a mi cara) Ya sé que he tardado una eternidad, lo sé, pero es que el instituto es un cozo y no me deja momentos libres y encima he tenido un peaso bloqueo, más grande que le muro de Berlín, en los fics y he tardado mucho en subir. Lo siento, espero que no vuelva a pasar.

Bueno, en principio iban a ser6 capítulos, pero al final serán sólo 3, porque no veo forma de alargar ésto lo suficiente.

Vermi-chan, mil gracias por seguir ahí, que siempre se agradece. Por cierto, ésta operación policial es aquello que te comenté... si tienes algunasugerencia para el listado, dímelo, queaún estoy en la pre-producción.

Hablando de mi otro fic inacabado de Conan, estoy de lleno en él y en el momento en el que asegure unos temas, os llevréis una sorpresa...

Se despide,

michel 8 8 8