d nuevo aki estoy, y espero q les gust esta nueva entrega de algo pasa cn harry:p

Capítulo 6: Llave secreto

Ya había pasado un mes, y Harry no daba muestras de mejoría. Estaba bastante pálido, dormía poco, comía poco...sus amigos estaban realmente preocupados por él, pero no se había dejado convencer de ir a la enfermería.

Ése día tenían partido de Quidditch y no quería perdérselo por nada del mundo.

- Bien muchachos, hoy es el gran día, hoy es nuestro primer partido Gryffindor-Slytherin y por ello quiero pediros que os esforceis al máximo- Harry como nuevo capitán estaba dando el discurso inicial en los vestuarios.- Ron, olvídate de todo, sólo existe la quaffle, por los demás suerte.

El sonido del silbato los alertó y se encaminaron al campo con energías renovadas.

- Capitanes salúdense.

- Potter.

- Malfoy- un breve movimiento de cabeza y un guiño por parte contraria.

- A sus escobas- gritaba Hooch- listos, ya.

Se elevaron con rapidez desafiando a la gravedad y el partido comenzó.

- ¡La quaffle entra en juego! La agarra Ginny Weasley, se la pasa a su compañera, se adelantan y...Gol- el comentarista, Colin Creevely, no era tan apasionado como Lee pero había sido lo mejor que pudieron encontrar.- LA quaffle en posesión de Slytherin, lanza y...excelente parada por parte de Ron Weasley. Parece que nuestro buscador preferido ha divisado la snitch, y baja a toda velocidad, Montagne le lanza una bludger para tratar de desviarle y...¿han visto eso?

Claro que todo el mundo lo había visto, muchos cogieron sus omniculares para pasar la escena a cámara lenta: Montagne había lanzado una bludger con todas sus fuerzas hacia Harry quien estaba demasiado absorto como para darse cuenta. Entonces Malfoy, con cara de espanto, lo había apartado de la trayectoria de la pesada bola, ahorrándole una caída segura, y conmocionando a todo el público.

- Ay, ay,ay- se decía Hermione- como no tenga más cuidado todos se van a enterarde lo suyo.

Draco por su parte se recriminaba su pequeño desliz y cuando sus compañeros más próximos le preguntaron el por qué de sus actos se inventó rápidamente: - Es que iba a coger la snitch, si no fuese por mí ya habríamos perdido.- Y sus compañeros le creyeron como creían todo lo que decía.

El partido pasó sin más contratiempos hasta que el Gryffindor divisó la snitch nuevamente y comenzó una dura batalla por su poder, ganada por el Chico Dorado. Luego comenzó a descender con la pequeña bola dorada en su mano, pero perdió un poco de equilibrio y se precipitó hacia abajo fuertemente agarrado a su escoba. El público se levantó de las tribunas dispuestos a intervenir si algo pasaba pero poco antes del final, Harry consiguió dominar a su escoba y descendió limpiamente.

- Harry- Ron se acercaba por un lado del campo, y Hermione se levantó apresuradamente para juntarse a ellos.

- ¿Qué ha pasado?- por el rabillo del ojo distinguió a Draco indeciso sin saber si acudir o no, al final no lo consideró grave y se alejó.

- No lo sé, me siento un poco mareado.

- Vamos a enfermería Harry, esto no puede seguir así. Tendrías que haber ido al principio de curso pero claro como no te importa para nada tu salud...

- Hermione por favor me duele la cabeza ¿podrías...?

- Sólo me preocupo por tí Harry, tal vez ésto es peor que una gripe, podría ser una gripe mágica, un escorbuteosis, o...

- Ya llegamos- la interrumpió Ron, también cansado de la charla interminable de la castaña quien lo miró de mala manera antes de entrar a buscar a la enfermera.

- Gracias Ron- le susurró Harry antes de entrar por la puerta blanca.

- Señor Potter, ya decía yo que no había venido a verme en un mes completo¿pensaba pasar el curso sin saludarme?- Harry sonrió débilmente.

- Madame Pomfrey, quiero que examine a Harry a conciencia. Ha estado muy cansado últimamente, no come bien, todas las mañanas se despierta para ir a vomitar...

- ¿No estará otra vez depresivo no? Porque el año pasado le ocurría algo semejante por la tontería ésa de dejar de comer...

- No ésta vez. No hice nada que pudiese haberme provocado...

- Humm...le haré un examen exahustivo como me recomendó la señorita Granger nada más entrar. Ustedes dos salgan.

- Pero..pero- intentó quejarse Hermione convencida de tener los suficientes conocimientos para ayudar a la enfermera.

- Pero nada... ai quieren pueden esperar fuera y les avisaré cuando esté.

- Eso haremos- afirmó Hermione.

- Pero ¿y los deberes¿No tienes nada que estudiar?- le preguntó Ron extrañado una vez fuera.

- Puede esperar...- aquí el pelirrojo supuso que algo realmente grave podría pasarle al moreno y se preocupó bastante.

- Ahora vuelvo.- Y salió corriendo a la parte baja del castillo.

Ron corrió hacia Slytherin reduciendo un poco el paso pues sabía que aunque era novio de Blaise, muchos no aceptaban a un Gryffindor en su territorio. Justo al doblar una esquina...

- ¡Ah¡Qué susto! A vosotros precisamente os estaba buscando.

- ¿Y se puede saber para qué Weasley?- preguntó el rubio arrastrando las palabras mientras indicaba con la cabeza que no estaban solos.

- Blaise es mi novio, y a tí, maldito hurón, quería hablarte sobre ciertos "asuntos" de... prefectos.

- Pansy, Crabble, Goyle, dejadnos solos.- y una vez que los otros Slytherins se hubieron ido, comenzaron a hablar normal.- Podrías haber suprimido lo de hurón¿no?

- Esto es importante Malfoy.

- ¿Le pasó algo a Harry?

- Ahora está en enfermería por lo de este verano, y debe de ser grave, creo que muy grave.

- ¡Tengo que ir allí!

- Draco, no hagas tonterías, si te ven con Potter os descubrirán y si os descubren...puede ser peligroso para ambos compañero- le razonó Blaise.

- Tienes razón. Intentaré que no me vean...

Mientras tanto unas cuantas plantas más arriba...

- Ya pueden pasar.

- Harry¿qué te pasaba¿Qué tienes¿Qué...?

- Her-mio-ne.- el chico estaba demasiado pálido.- ¿Dónde está Ron?

- No lo sé, pero ahora volverá, si quieres espero a que...

- ¡No!- la chica se quedó paralizada.- Quiero decir, por favor cierra la puerta y escucha...pero no se lo digas a nadie¿lo juras?

- Sí Harry no se lo diré a Ron.

- Ni a Ron, ni a Dumbledore, ni a...Draco¡nadie!- la chica estaba confusa pero aún así asintió.- Será nuestro secreto...y el de Pomfrey, que quiere que se lo diga a él...

Harry comenzó a contar las sospechas de la enfermera, la clase de pruebas realizadas y finalmente el diagnóstico. Hermione escuchaba atentamente mientras observaba las reacciones de su amigo y así, antes de que el otro le dijera la conclusión, ya había captado la idea.

- ¿Qué te parece?

- Es fantástico Harry...piénsalo, no se había dado uno de éstos desde hace 100 años¡es fabuloso¿Y sabes el sexo?

- Prefiero esperar a contárselo a Draco y si quiere saberlo antes de que nazca...o si nos quiere a ambos...- la mirada de Harry se puso triste.

- ¿Harry? Dime por qué no os iba a querer.

- Sé que me quiere pero...somos demasiado jóvenes para algo así, y además puede que reconsidere eso de quererme con lo que se le viene encima...somos demasiado jóvenes- volvió a repetir después de una ligera vacilación.

- Bueno, aquí está la dieta que debe seguir- por la puerta apareció Pomfrey con una lista sobre alimentos que debía y no comer.- Además aquí está la poción contra las náuseas matutinas.- Harry alargó la mano para cogerla.- Pero debe decírselo al padre.

- De acuerdo madame Pomfrey- sólo así consiguió el frasco.

- Yo lo cogeré Harry, y además te ayudaré con la dieta que debes seguir.

- ¿Qué dieta?- interrumpió Ron que acababa de llegar.

- Contra la gastrointeritis...

- Contra la indigestión... - dijeron a la vez, por lo que Ron alzó una ceja.

- ¿No me lo quereis decir?

- No es eso Ron, nadie lo sabrá hasta que esté preparado para contároslo a tí, a Draco...

- Está bien, supongo. ¿Nos vamos?

- ¡Sí!- exclamó Harry saliendo de la cama.

- Alto ahí- la imponente figura de la enfermera acababa de aparecer por el dintel de la puerta.- Usted señor Potter no se moverá de aquí hasta mañana. Hoy ha hecho una de las cosas prohibidas para usted a partir de ahora y si hubiese venido al principio de curso hoy no habría jugado el partido.

- ¿Pero por qué?- sus amigos todavía seguían ahí y el pelirrojo quería información.

- Hasta mañana Ron- Harry dio por aludido a Ron y cogió la segunda hoja que sostenía Pomfrey.- Ésta me la quedaré yo Hermione.

- Claro que sí, tendrá que aprendersela de memoria- interumpió la enfermera antes de que Hermione pudiese abrir la boca.

- Nosotros ya nos vamos, adiós- y se marchó arrastrando tras de sí a su amigo.

Harry se concentró en el pergamino.

PROHIBICIONES ESTRICTAS Y RECOMENDACIONES

1. No saltarse las horas de comida.

2. No saltarse la dieta.

3. Dormir mínimo de 8 horas al día.

4. Tomar la poción cada día al levantarse, antes de salir de la cama.

5. Ir a ver a la enfermera una vez al mes para que haga las pruebas de seguimiento.

6. Tomar suplemento de hierro y calcio.

7. Prohibido terminantemente subirse a una escoba

8. No practicar esfuerzos.

9. No soportar sobresaltos muy graves.

Harry siguió leyendo el pergamino interminable a su parecer, y sin darse cuenta se quedó dormido. Cuando despertó, estaba firmmente arropado y una sombra se deslizaba dentro de la habitación.

- ¿Quién anda ahí?- pensó que había sido su imaginación y se volvió a recostar, pero al poco oyó el ligero roce de un pergamino al moverse...- ¡Lumos¡Draco! Menudo susto me has dado.

- Lo siento- el otro estaba un poco avergonzado.- Es que no sabía si habría alguien más en la enfermería y no quería que me pillasen.

- Estoy sólo...

- ¿Qué es ésto?- el rubio sujetaba en una mano el pergamino que había estado leyendo esa misma tarde.- ¿Y por qué no puedes volver a subir en una escoba?

- Sabes que he estado enfermo y lo sigo estando, y ésta enfermedad es difícil de explicar porque no es una enfermedad.

- Harry cálmate, estás liando todo. Explícate león.

- Yo...será mejor que te lo explique cuando esté preparardo, y tú también...mientras tanto no te preocupes no es nada grave...creo. Te lo diré en su momento no me apresures.

- Claro amor, cuando tú digas- el rubio comprendía que fuese lo que fuese necesitaba un periodo de asimilación por parte del moreno antes de decírlo.- Te veré mañana.

Harry sonrió mientras veía a su novio salir, y pensaba en cómo se lo tomaría. Esperaba que bien, mientras tanto, volver a dormir no le haría ningún daño, al contrario...

Fin del capitulo