Dspues de muxisimos dias sin actualizar (pa mi normal) aki yego el septimo. xra kien lo kiera saber tngo el sigient en proceso pro no se qando lo podre ponr. a disfrutar, bs

Capítulo 7: Revélamelo

Al día siguiente el moreno salió de la enfermería ya desayunado y tomó su horario para ver las clases que le tocaban ese dia.

- Humm, lunes, primera hora Transformaciones, segunda y tercera pociones, agh!

- ¿No te han dicho alguna vez que hablar sólo es de locos Potter?- gritó una voz conocida por los pasillos.

- Vete a la mierda Malfoy, no hay nadie entre tu grupito al que merezca que le hablen, por supuesto que tú incluído.

- Si serás...te has recuperado¿no? Gryffindor podrá volver a enfrentarse con nosotros ahora que han recuperado a su..héroe particular- más risas de los subnormales de sus amigos.

- Púdrete Malfoy.- el aludido pasó a su lado sin ningun comentario más seguido de sus gorilas, el último de los cuales le dió un brusco empujón, pero Harry consiguió agarrarse a la pared para no caer.

- Veo que el show se ha vuelto a poner en marcha- susurró una voz a su lado haciendo que se sobresaltase.

- Hermione¿desde cuando estás aquí?

- Desde que empezó todo¿vamos?- Harry asintió con la cabeza y se dirigieron a la clase de McGonagall.

- Buenos días alumnos, hoy daremos transformaciones de muebles en animales, lo cual como comprobarán, es de un alto nivel. Como podrán observar cada uno tiene delante una banqueta. Bien quiero que intentes convertirla en un cachorro de perro. El procedimiento es el mismo de siempre.

Tras una clase tortuosa el único que había conseguido convertirlo era Harry, y Hermione a medias. Al salir, se llevó el dulce cachorrito de color negro azabache y chispeantes ojos marrones que McGonagall le dio como premio por conseguirlo.

- ¿No estás molesta con Harry por haberlo conseguido y tú no?- inquirió Ron.

- No, yo sé perfectamente que en condiciones normales no lo hubiese conseguido- respondió ella muy ufana. -Ron vete yendo a Pociones ahora te alcanzamos.- el pelirrojo los miró dudoso pero luego decidió que si se iba ya estaría algo de tiempo con Blaise antes de la clase.

- Ahora Hermione¿me podrías explicar a lo que te referías?

- ¿No lo entiendes Harry? Al tener ése...- miró alrededor- bebé en tu vientre tus poderes crecen, y cuanto más tiempo de gestación tenga más crecerán.- Harry le miró con cara de ¿y eso?- Vamos a ver Harry, tu condición no es normal y lo sabes. Pero no por ello te va a ir distinto al resto de las brujas, a ellas también les ocurre. Cuando llevan a un futuro mago en su interior, éste les pasa su magia "prestándosela" hasta su nacimiento. Lo he leído ayer en la biblioteca cuando me enteré de tu situación.

Mientras la inteligente castaña le iba explicando, ya habían llevado al cachorro a la habitación, encontrado el pasadizo secreto a las mazmorras y se encontraban ante la puerta del aula de Pociones...cerrada.

- Mejor será que nos vayamos, me finjo enfermo y ya- dijo Harry algo nervioso dispuesto para irse.

- Tú te quedas aquí- le instó la castaña agarrándole firmemente de la túnica. Harry hizo un puchero- Harry yo soy tu amiga no tu novio, deberías aprender cómo convencer depende de quien sea. Aunque a mí no me podrás convencer- y acto seguido golpeó la puerta.

- Adelante.- la puerta se abrió mostrando dos de los alumnos más odiados por el profesor,- Potter, Granger llegan tarde¿alguna explicación?

- Lo siento profesor es que...me encontraba mal y Hermione me acompañó...-respondió Harry antes de que su amiga metiese la pata por ser demasiado fiel a la realidad.

- Ya, estoy al tanto de su...ligero malestar. Granger 5 puntos menos por llegar tarde, Potter...que no se vuelva a repetir...- la clase estaba sorprendida de que no hubiese bajado más puntos al chico dorado, o impuesto un castigo. Por su parte Harry estaba anonado¿cómo podía Snape saber de su asunto?- Potter, debería aprender mejor a ocultar sus pensamientos, y para que lo sepa, las pociones que debe tomar, se las administro yo a Poppy, y por culpa de la falta de tus estúpidas precauciones ahora tendré que hacer más todos los meses¿contento?- harry se tiñó de color rojo escarlata, tanto que haría juego con la badera de su casa, y no se atrevió a responder, pues no sabía fijo si el profesor de Pociones podía soltar algo que diese sospechas al resto de la clase.- Granger con la señorita Parkinson, y Potter con Malfoy.

Harry se sentó junto a su ex-némesis con cara de apatía pero por dentro retozando de alegría ( y rima). Se puso a pensar, y se acordó de que Snape había estado en su fiesta de cumpleaños¿cómo lo había podido olvidar?. No le dió importancia y puso atención a la clase, ése día darían una clase nueva de poción que hacía recuperar todos los recuerdos borrados por Obliviate, mientras no fueran muy poderosos. Era tan poderoso que simplemente oliendo el fino vapor, podía funcionar. Harry se puso de pronto en tensión.alarmando a su compañero.

- ¿Qué pasa?- le preguntó en susurros.

- Nott- fue la escasa respuesta del otro, pero el rubio comprendió, y se puso nervioso.- No te preocupes- Harry volvía a estar tranquilo mientras apretaba algo dentro de su bolsillo.

Ya había pasado cerca de media hora y algunos calderos empezaban a hervir. Harry aprovechó la distracción de los de alrededor, y girándose despacio lanzó un objeto al caldero que compartían Nott y Seamus- "Lo siento compañero".- Pocos minutos después el caldero estalló rociando a mucha gente de sustancia grisácea, casualidad que Draco y Harry fueron los únicos de alrededor que se agacharon a tiempo...¿o no?

El resto de la clase transcurrió con relativa normalidad, excepto cuando se llevaron al jóven a enfermería, o casi al final de la clase cuando Snape propuso hacerle probar a alguien la poción.

- Señor Weasley, hoy lo probará usted- los Slytherin estaban sorprendidos del comportamiento de su mentor hacia Potter, pero se regocijaron al ver la cara de sufrimiento del "rey Weasley".

Ron miró hacia su amigo, si Harry nunca había resultado envenenado¿por qué él sí? Se tragó la cucharada de golpe...y se desmayó. Despertó a los pocos segundos un poco desorientado.

- Ésa es la reacción si alguien te echa alguna vez el hechizo.- explicaba Snape en la lejanía. Ron se vió a sí mismo el año anterior hablando con Harry, Harry le contó su relación con Malfoy, Más tarde una sed de venganza le llevó a atacar al rubio engreído...obliviate¿lo había dicho Harry?... - Señor Weasley hemos terminado la clase.

- Lo siento profesor...- se giró y vio a sus amigos esperándole en la puerta. El resto ya se había marchado.- ¿Qué tenemos ahora?

- Defensa con Lupin- respondió las castaña ojeando el horario.- Hoy creo que será práctica.

- ¿Te podrías adelantar un momento?- le preguntó amablemente Ron. Harry estaba un poco mosqueado, primero se queda a solas con Hermione, y ahora con Ron...- Cuando tomé ésa poción, recordé algo ocurrido el curso pasado (fic pasado :P), algo sobre el hurón...y tu...¿me obliviateaste?

- Podría ser- Harry le miraba un poco desafiante.

- Yo...lo siento.

- No es a mí a quien tienes que decirlo- respondió el moreno cortante.- ¿No te preguntaste nunca por qué te enteraste por Blaise de lo mío con...ya-sabes-quién?

- Muchas veces. Pensaba que me habías dado de lado por culpa del hur...de Malfoy.- Harry le sonrió cálidamente.

- No pienses eso nunca. Ya hemos llegado.

Entraron en la luminosa aula donde todavía no había entrado el profesor, lo cual era un alivio. Entonces el grupito de chulitos de Slytherin, liderados por su novio, se acercó a ellos.

- ¿Otra clase con los leoncitos?- sonó el rubio despectivo.

- Hechízale Draco- dijo venenosamente Goyle por detrás.

- Aquí nadie va a hechizar a un compañero- Remus Lupin acababa de aparecer, lo cual Draco agradeció, pues no podría haber hecho algo en contra de Harry, ni tampoco hacer sospechar a sus compañeros.

- Poneos por las parejas de Pociones- dijo el profesor sabiendo exactamente las posiciones, y así tener felices a Draco y Harry. - Hoy realizaremos una clase únicamente de ataque y defensa, es una especie de repaso para los E.X.T.A.S.I.S. de éste año, aunque no todos los de esta aula conseguiran el nivel apropiado- miró disimuladamente a los gorilas de Slytherin.- Comiencen.

- ¡No!- Hermione se acercó precipitadamente hacia donde estaba sus amigo. Lupin se acercó esquivando habilidosamente los hechizos que ya comenzaban a volar de un lado a otro de la clase.- Malfoy, no debes atacar a Harry.

- ¿Y eso por qué?- formaron un corrito disimulado.

- Harry debes decírselo- Hermione parecía en verdad preocupada.

- Lo haré pero cuando sea le momento oportuno- dijo éste entre dientes.

- ¿Decir qué?- interrumpió Remus que ya había llegado a su altura.

- Por lo que Harry está enfermo- le aclaró Hermione- que no es una enfermedad.

- Ah, Severus ya me contó, Poppy se lo dijo. ¡Felicidades!

- ¿Felicidades?- Draco ahora estaba más que mosqueado.- Harry¿qué significa...?

En ése momento un rayo rojo salido no se sabe de dónde alcanzó a Harry en pleno abdomen. Éste se llevó las manos a esa zona, notando cómo se le llenaban de sangre. Un dolor punzante se le concentraba en ésa zona, y no soportando más esa sensación se desvaneció ante la exclamación muda de Hermione.

- Harry- Remus gritó, pero ya no le oía.

Hermione estaba pálida y miraba alrededor intentando localizar al culpable. Draco ya lo había localizado.

- ¡Tú!- se acercó a la figura del tembloroso muchacho.- ¡Se puede saber en qué estabas pensando, pequeño parásito?- el Slytherin temblaba de ira, mientras aterrorizaba a su compañero de casa.

- Yo-yo...ha sido sin que-querer. Inten-tentaba...hechizar a Finnigan y...

- ¡Malfoy! Se lo llevan a enfermería- le avisó Hermione.

Éste dejó la clase apresuradamente, detrás del profesor, Hermione, Ron, y el cuerpo inmóvil de su novio.

- Pero¿qué pasa hoy con Potter?- se preguntaban los Slytherins- primero Snape, ahora Malfoy...- pero claro que Blaise y Pansy sabían la respuesta, por lo menos a lo de Draco...

Dolor en la parte baja del vientre, MUCHO dolor. Éste hecho despertó a Harry quien intentó llevarse a ésa zona las manos, descubriendo que estaba interrumpida por una mano ajena, y más dolor.

- Ya está- la voz de Pomfrey le llegó como distante.- Tienes suerte pequeño, no cualquiera en tu estado salva ambas vidas, sobre todo con un Difindo.- así que eso había sido...un difindo lanzado por un compañero, que le había acertado en pleno vientre. Un escalofrío le recorrió de arriba a abajo. ¿Y si hubiese perdido a su bebé¿ Y si...? Deshechando los funestos pensamientos a un lado y alegrándose de que hubiese pasado lo contrario, Harry se incorporó un poco y observó a Pomfrey administrarle algo con una aguja, así que eso había sido lo que le despertó dolorosamente. Un poco mareado se volvió a acostar y se durmió nuevamente.

Cuando volvió a despertar había alguien a su lado cogiendo una de sus manos.

- ¿Draco?- preguntó apretando la mano que sostenía la suya.

- Menudo susto nos has dado Harry...

- Lo siento.

- No te disculpes, no has tenido la culpa¿comprendes? La culpa ha sido de ese torpe de Polkins...

- Draco tengo que decirte algo, yo...- Harry vaciló, seguro que Draco le odiaría por haber puesto la vida de su hijo/a en peligro, pero si no se lo contaba...

- ¿Harry?

- Yo...estoy embarazado

- ¿Cómo¿Qué has dicho?- el rubio había oído perfectamente pero no podía creerlo.

- Estoy esperando un hijo tuyo.- un silencio desapacible siguió a su confirmación...

Fin del capitulo

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