Se estaban acercando las MHB, la calidez del mes de Junio se notaba y ello unido al nerviosismo de todos hacia que el ambiente de la sala común de Gryffindor fuera bastante tenso, unido con el intermitente recital de formulas, párrafos de gruesos libros, y de rabietas contenidas por no poder hacer un hechizo decente, los alumnos de 5 año se estaban dedicando de cuerpo y alma a estudiar para cumplir sus deberes académicos, por lo menos, de forma decente.
Además de los exámenes, nuestros protagonistas, Harry, Ron y Hermione, atravesaban otro tipo de problemas, durante todo el 5 año habían tenido que enfrentar la incredulidad del mundo mágico, sobre el regreso de Lord Voldemort, y la campaña de desprestigio del Ministerio de la Magia en contra de Harry y con el ingrediente de la inescrupulosa Dolores Umbridge, hacia que el final de curso se comparara a la Maratón: largo y sacrificado.
Como siempre Ron tenía problemas en la más compleja de las materias mágicas: Transformaciones y la más aplicada del trío, Hermione, se comprometió a ayudarle en limar las dificultades que tenía en este ramo y lo cito en la orilla del lago, en un soleado día de domingo.
Como siempre, Ron no fue muy puntual, comenzando la clase con este agravante, Hermione comenzó a instruirle en complicados movimientos de varita, y con la torpeza de Ron hacia que solo se cayera la varita al verde suelo primaveral, Hermione viendo que no había ningún progreso, propuso un "recreo" y se tendieron en el pasto, disfrutando de la frescura de los árboles de por alrededor y de la calidez que irradiaba ese sol de verano.
Ron a causa del calor, se había soltado un poco la corbata, pero Hermione seguía con todas las prendas correctamente puestas recostada sobre el pasto. Ron comenzó a estudiar detenidamente la figura de Hermione, ese pelo castaño, esos grandes y soñadores ojos almendrados, la esbelta y femenina figura que se formaba bajo la negra túnica de Hogwarts, la flor en pleno crecimiento y desarrollo, hacía que Ron la mirara embobado, mientras Hermione aparentaba indiferencia, hasta que ella le dijo.
- Ya, Ron hay que volver a lo nuestro… - mientras ella se incorporaba a la vez.
- No seas mala Hermione, un ratito más….
- Vamos Ron, o vas a reprobar el examen
- No puedo concentrarme – terció el
Hermione perdiendo la paciencia le dice:
- Veamos Ron ¿Por qué no puedes concentrarte?
- Por la sencilla razón que me tienes loco…- dijo sin titubear
Ella se quedo alelada, ¿Ron enamorado de mí, esto es una broma de mal gusto… pensó ella
- Mira Ron, tu enamorado de mí… perdón… no se… que pensar…- dijo ella con aparente rubor en las pálidas mejillas.
- Si Hermione, lo que escuchaste ESTOY-ENAMORADO-DE-TI- le dijo con voz alta, lenta y clara.
Como avanzaba la conversación, Ron se había acercado más hacia el agitado rostro de Hermione, y en especial a los escarlata labios de ella, mientras la miraba con sus ojos claros con profunda determinación.
A la vez ella, se agitaba aún más, mientras dirigía a Ron directas miradas, mientras el la miraba con la boca semiabierta y acercándose lentamente, hasta que ambos rostro se encontraron, mientras se besaban lenta y apasionadamente, al principio con torpeza de la primera vez. Al principio solo hubo contacto de labios, pero después las lenguas de ambos se juntaban y se comían golosamente, mientras tenían como escenario, el majestuoso paisaje en el ocaso del sol de Hogwarts, luego se fueron acostumbrando a los movimientos de cara y labios y se fundieron en uno solo en un momento de amor y cariño.
Hermione entre jadeos le dice a Ron:
- Nunca imagine que besaras tan… bien – mientras ella se acomodaba la túnica.
- Y tu que tuvieras unos labios deseables - dijo el.
Después de estas palabras, Ron se abalanzo otra vez sobre Hermione, besándola en los labios y bajando hasta el cuello que olía a un agradable olor a frutilla, mientras que con las manos moldeaba la figura de Hermione, desde la espina dorsal, hasta el desarrollado trasero de ella, mientras ella, ni corta ni perezosa, pasea sus finas manos por el esbelto trasero de Ron, entre sonoros y largos suspiros de ambos.
Ya en calor, Hermione empezó a acariciar la ya abultada entrepierna de Ron con suavidad, luego la empezó apretar entre suspiros y gemidos de Ron. El la detiene, la recuesta sobre el pasto, otra tanda de caricias y besos, Ron comenzó a acariciar las piernas de ella, la suave piel de Hermione se eriza, los dedos de el comienzan a subir hasta las bragas color sangre de ella, comienza a palpar el pubis de Hermione, que después de tantas caricias, estaba totalmente húmeda y empezando a gemir suave y excitantemente, Ron le saca las bragas y deja al descubierto un frondoso pubis de vellos castaños y un húmedo y erecto clítoris, comienza a acariciar con la lengua la región del pubis y llega hasta la vagina de Hermione e introduce la lengua, comienza a juguetear en la vulva, mientras ella se desternilla del placer entre jadeos y gemidos, la traviesa y virgen lengua de Ron no deja de dar placer a la caliente Hermione, mientras se viene una y otra vez, acariciando la ya desordenada cabellera pelirroja de Ron, mientras el le dice.
- Nunca imagine que estuviéramos haciendo esto, Hermione…
Ella lo calla y le dice
- No hables y hazme gozar como tú sabes…- mientras ella se acomoda en el verde colchón
Así termino la maestra demostración de sexo oral de Ron, el totalmente caliente y una Hermione a mil, ella se incorpora y después de un suave beso, le saca el cinturón a Ron y le baja los pantalones mientras le dice:
- Ahora me toca probar a mí, Ron…- mientras baja los boxers blancos de el, dejando al descubierto una polla de 15 cm, unas bolas bien hechas, y un áspero vello pelirrojo, pero no menos excitante, le despoja de la camisa, dejando ver un pálido pecho, unos rosados pezones, ella comienza a mover su lengua en todo el pecho de Ron, le lame los pezones erectos, provocando enormes suspiros de Ron, luego con una enorme curiosidad, Hermione toma la erecta polla y comienza a palparla y acariciarla moviendo su mano por el glande mientras Ron disfruta del orgasmo de la paja que le esta haciéndole Hermione, ella aprende a propinar unos feroces masajes por las bolas, y por ultimo se introduce la dura verga de Ron, acariciando con la lengua todo el glande mientras el gime de manera envidiable, ella succiona con unas vitales ganas en pos de encontrar el manjar de los dioses.
Luego de 15 minutos de succión y masturbación, Ron se corre de espectacular manera en la boca de Hermione, en medio de un estremecedor pero excitante gemido, Hermione se despoja de toda ropa dejando ver sus desarrollados pechos, el se los lame de una forma insaciable, en medio de los calientes gemidos de ambos.
Luego de otra tanda de manoseos, Hermione acuesta a Ron en el pasto, unos besos apasionados, y con unas nerviosas risas, Hermione se acomoda en la punta de la verga de el, entre suspiros y gemidos, antes de descender, le dice a su amante
- Sabes Ron… yo soy virgen
- No te preocupes, lo haré con delicadeza
- ¿Lo prometes?... – le dice ella con cara acongojada.
- Lo juro, si tú quieres querida
Dicho solo bastaba lo hecho, Hermione apoya sus manos en el tórax de Ron y este en las caderas de ella mientras desciende lentamente, gozando de cada centímetro de la polla de Ron, mientras el goza del ardiente interior de Hermione, hasta que desciende completamente, emitiendo un pequeño quejido de dolor, para luego volver a ascender y caer de manera suave sobre el pubis de Ron.
Ahora Hermione cabalgaba de frenética manera sobre Ron mientras este se montaba a su amiga intima de manera envidiable, gimiendo pero ella le ganaba en este ámbito, emitiendo gemidos que hacían que Ron estuviera mas caliente y le hiciera el amor con un vigor indescriptible, mientras ambos bramaban:
- OH RON… NO ME IMAGIANABA QUE FOLLARAS TAN BIEN….
- Y A TI QUE TE GUSTARA LA VERGA, QUERIDA…
- OHHHH…. DAME RON DAME…. HAZME TUYA….
- TE HAGO MIAAA…. AQUÍ Y SIEMPREEEE…
- MIERDA, MAS FUERTE… MAS FUERTE QUE ME VOOOYY….
- YO TAMBIEN QUERIDA ME VOY… TE FOLLO…
- OOOHHHHH…. ME VOYYY… ME COORROO….
- TAMBIEEENNN….. AHGGG….
Así termino el crepúsculo en Hogwarts, Ron vertió su semen hasta la última gota en la vagina de Hermione, mientras esta gozaba de placeres de dioses encima de su compañero, después de esta "sesión" ambos se derrumbaron en el pasto, sudorosos, cansados, pero satisfechos.
Vieron que la hora de la cena se acercaba, así que se vistieron rápidamente y antes de enfilar al Gran Comedor se dieron el último beso del día sin antes crear una coartada decente:
- Recuerda Ron ESTUVIMOS ESTUDIANDO, me comprendes – le decía ella mientras acomodaba su corbata.
- Ya Hermione, no te preocupes "querida" – le dijo con un deje sarcástico
- No te burles, ambos la gozamos lo bastante, la verdad
- Tienes razón, Hermione ¿Vamos?
- Vamos – dijo ella
Se fueron tomados de la mano hacia el Gran Comedor, a recuperar las fuerza gastadas después de la "sesión de estudios" en las orillas del lago"
