Ahora Harry era el confundido, y de alguna manera tambien, concordaba íntimamente con Hermione, aunque este ni siquiera le había mencionado de manera directa lo que paso entre ellos hace algunas noches atrás, además de tener una cuota de remordimiento, aunque el sospechaba que ella estaba mas confundida que incomoda con esta situación, pero el tenía razones para preocuparse, su relación con Cho había quedado en nada después de Hogsmeade, y sorprendemente, el tambien tenia una rara sensación cuando estaba con Hermione, "¿No me estaré enamorando de verdad?" pensaba algo escandalizado en su interior, mientras repasaba los instantes de cada encuentro con ella, cuando curiosamente se sentía mas amado y comprendido que en cualquier situación común de su agradable y agitada vida en Hogwarts.

Con esta conclusión de sus sentimientos, empezó a maquinar la forma de tener una cita en privado con Hermione, para poder conversar con ella los sentimientos que el había captado en todos sus encuentros, y comenzó en buscar un lugar apropiado para tal encuentro. No demoro tanto: la misma orilla del lago que uso Ron con el, le servía a la perfección para conversar en paz con ella, ahora solo faltaba avisarle de forma discreta, que no se diera cuenta Ron ni el entorno más cercano a ellos, así que se las ingenio para pasarle a Hermione una nota de la siguiente forma: se le atravesó en pleno hall, como ella acostumbra llevar siempre una gran cantidad de libros, fue fácil, y entre la confusión de entre gruesos textos y abultados pergaminos de apuntes, Harry le pasa una nota con lo siguiente:

Medianoche, en la sala común, no falles… Harry

Hermione solo atino a mirar a los penetrantes ojos verdes de Harry, que le dijeron "No hagas preguntas… y por favor cumple", así que algo cohibida con la mirada, guardo la nota, recogió sus cosas y continuo con su camino, Harry se fue contento a la torre de Gryffindor a esperar la medianoche.

Ella se fue pensando en la nota, "Capaz quiera lo que falto la otra vez", se encogió de hombros y se dirigió a su clase de Runas Antiguas. Harry no tenía clases así que subió a la torre de Gryffindor.

Harry bajo 15 minutos antes de medianoche y se sentó en la butaca más lejana a la chimenea, quedando en la penumbra, a esperar que Hermione bajara al punto de encuentro, aunque no tuvo que esperar mucho, ella bajo muy puntualmente a la hora y Harry salio a su encuentro diciendo:

- Hermione… muy puntual – diciendo esto con una gran sonrisa

Ella se ruborizo un poco y contestó:

- Vamos Harry… tu me conoces, además por algo es el motivo de esta cita ¿o no?

- Si claro, no acostumbro perder tiempo… ¿vamos? – le dijo el

- ¿Adonde?

- Eso lo sabrás después, ahora ayúdame con la capa invisible… vamos a dar un pequeño paseo nocturno… ¡Y no quiero que me refriegues el reglamento por la cara! – viendo que ella abría la boca para decir algo – ¿Me acompañas?

- Esteee… bien… - acto seguido se acomodo la capa junto a Harry, salieron a través del cuadro de la Dama Gorda y dieron al pasillo. Harry enfilo hacia la salida del castillo mientras Hermione procuraba quedar bien apegada a ese cuerpo maravilloso que la había echo descubrir nuevas experiencias, mientras el intentaba controlar la erección que le estaba causando la cercanía a ese cuerpo vital, mientras buscaba y monitoreaba en el Mapa del Merodeador si había moros en la costa.

Después de caminar a hurtadillas y de evitar a Filch y a la Señora Norris varias veces, lograron dar con una salida que no fuera la central y dieron al exterior de Hogwarts, al césped húmedo y caminaron hacia la orilla mas escondida del lago, para encontrar el camino tuvieron que ocupar el hechizo Lumos y después de errar varias veces, dieron con el bendito rincón, con una bella vista del lago, coronado por los rayos que desplegaba la luna llena sobre las tranquilas aguas. Se sacaron la capa y se desplomaron en húmedo césped de medianoche con la vista al manto de gemas y a la imponente Luna llena que se cernía sobre sus cabezas, después de un rato de silencio, Hermione rompió el hielo:

- Oye Harry ¿No me trajiste para ver las estrellas…¿O si? – le dijo con un deje de ironía

- Para nada – contesto el – hubiese sido el rey de los idiotas venir a esta hora a ver las estrellas, consciente del peligro que hay, no, no te cite para ver el firmamento sino porque quiero hablar contigo – diciendo esto con la vista muy fija sobre ella.

- ¿Hablar, yo pensaba que era para otra "cosa" – le dijo con sarcasmo – Pero ya que estamos aquí… ¿Cual sería el asunto a tratar, señor Potter¿Por qué para algo me trajiste a esta hora y aquí¿O no? – le dijo mordaz.

- Obvio Hermione – contestó el chico – quiero conversar acerca de nuestra situación, tú sabes perfectamente que todos estos días he estado reflexionando por lo que paso en la torre de astronomía…

Hermione lo interrumpió diciendo:

- ¿Y a que conclusión llegaste? – le dijo algo expectante

Harry atorándose con su propia saliva le contesta:

- Creo que me estoy enamorando de ti – le dijo con la mirada fija a los ojos almendrados de ella

Al cruzar estas palabras, ambos se habían incorporado y estaban sentados, ella se estremeció al mirar a esos misteriosos ojos verdes esmeraldas, y ahora entendió que el panorama para el futuro se iba a tornar algo espeso, ahora tenía que enfrentarse a problemas amorosos, y mas encima Voldemort estaba de vuelta en gloria y majestad… sexto y séptimo van a ser muy duros, pensó ella. Aunque rápidamente recupero el aplomo y dijo:

- Bueno Harry… no pensaba que tus sentimientos hacia mi… fueran tan… fuertes

- En honor a la verdad, todavía no lo tengo claro, pero lo único que se, es que contigo me he sentido pleno cuando hemos tenido la oportunidad de hacer el amor me he sentido vibrar de emoción, amor y de pasión y por favor, no niegues nada, porque lo que me dijiste en la torre no fue mentira ¿o si? no, no lo creo, esa noche fuiste plena… y conmigo.

- Bien Harry, no niego nada, tú me causas sensaciones que ni siquiera con Ron he sentido¿sabes? No se si te lo han dicho, pero eres muy guapo y atractivo – Harry al oír esto se puso algo rojo y contesto:

- Bueno… así de directo… no, y te tengo que decir que tu, aparte de inteligente eres guapa, atractiva y por que no, sexy…

- Gracias Harry… aunque tu tienes mas de sexy que yo… tienes un gran capital, pero parece que no te has dado cuenta – le dijo muy seria y acercándose a su oído le dijo – Además tienes un buen trasero…

Ante esto ambos rieron, y sus miradas se encontraron otra vez, para que acto seguido los sensuales labios de Harry se acercaran a los fríos de ella, Hermione al sentir los labios de el, se sobresalto un poco, y comenzó a besar esos labios ardientes, que desprendían pasión y amor, sus finos dedos se enredaron en la cabellera negra de Harry, le retira los lentes y lo comienza a besar con todas las ganas, ambas lenguas juguetean en sus bocas, las manos de ambos recorren los afiebrados cuerpos, la ropa esta demás en esa situación, así que ella le saca la desordenada corbata, camisa. Las manos de Harry no se quedan tranquilas, le saca rápidamente la camisa, para dejarla en ropa interior, que con la misma rapidez cae al suelo, el se incorpora y se saca rápidamente los pantalones, quedando en boxers y le comienza a sacar la falda a Hermione, que solo se deja hacer por esas benditas manos, la termina de desnudar y se comienzan otra vez a besar, entre caricias y manoseos, roces de los sexos excitaban aún mas la situación y se así se fueron acomodando hasta formar el bien ponderado 69, ahora se comenzaron a dar placer de una manera reciproca.

Harry comenzó primero, a jugar con sus dedos en la ya muy lubricada vagina de ella, mientras que Hermione acariciaba el miembro erecto de el, lo masajeaba y por fin se lo mete a la boca, provocándole un delicioso rictus a Harry mientras que este entró de pleno a masturbar y a hacer sexo oral con su lengua y dedos haciendo que Hermione se retorciera de placer, que manifestaba mamando como los dioses su verga ardiente y era mas excitante aún, ya que no podía gemir a gusto y solo se oían ruidos y espasmos de placer, ambos se estaban entregando mutuamente, la lengua de el hacia maravillas, mientras que los dedos masajeaban el ano de Hermione, y esta rodeaba su lengua por el glande y arriba abajo, acariciando todo el capullo, haciendo que Harry simplemente se retorciera de placer, el apuraba mas su lengua, sabiendo que el orgasmo se avecinaba, cuando siente que el erecto clítoris de ella se contrae en orgasmos y su boca se inunda de flujos vaginales, cuando siente que el esta a punto de acabar y siente que inunda de esperma la boca de Hermione, después de esto ambos se desploman en el césped, jadeando y cansados.

Poco dura la tregua, rápidamente se encuentran unidos en un beso, sintiendo ambos el sabor de sus flujos, Hermione cruza sus piernas sobre Harry, y este comienza la penetración, ella ve un brillo especial en esos ojos verdes, mientras que su verga la penetra suavemente y cuando termina, ambos sueltan un gemido de satisfacción y comienza el mete-saca frenético, que es acompañado al cabo de unos minutos de fuertes gemidos y gritos:

- UHHHH… OH… HARRYYY…. VAMOS AMOR… COGEME…

- LO HAGO… UFFFFFF…. OH SI… ERES GENIAL…

- IGUALLL…. VAMOS TALADRAMEEE… DAME…

- OHHH… UFFFF… SIIIIIIIII….

- COGEME DURO…. ESTOYYY QUE ME….

- COORROOO…. AHHHH…. SI… TAMBIEN…. OHHH

- COGEME DURO… VAMOS SIIIIII

Y este concierto de gritos termino con un sonoro "si" antes que ambos se corrieran y Harry depositara hasta la última gota de semen en la ardiente cavidad de Hermione.

Se desplomaron sobre el césped, cansadísimos y felices, pero Harry le dice:

- ¿Sabes? Tenemos algo pendiente… ¿Te acuerdas?

Hermione todavía estaba algo agitada contesto:

- Claro que me acuerdo, al principio pensaba que para eso era la cita

Harry sonrió y le dice:

- Pues que te parece si saldamos ahora el asunto

Recibió por toda respuesta un beso pero se contuvo diciendo:

- Oye, no tienes tu alguna crema… para que la cosa no sea tan difícil…

Hermione inteligentemente toma los dedos de Harry y los comienza a chupar y llenar de saliva diciéndole:

- Ahora hace lo que mejor sabes hacer…

-¿Quidditch? - le contesta bromeando

- No tonto, coger…

Harry empieza a colocar sus dedos en el ano de ella, mete uno, acompañado de un sonoro gemido, para luego meter un segundo y tercer dedo, ayudado con la saliva de Hermione y con las experiencias anteriores, la tarea se hizo bastante simple, así que la acomodo en la consabida posición a 4 patas, se coloco detrás de ella, y acomodo la parte ósea del pene en la ya preparada entrada y comienza a empujar suavemente, completando la penetración con un pequeño gemido de ambas partes y comienza el viaje de la gloriosa verga, mete y saca, primero con algo de fricción y tensión, luego con mas comodidad, que a los minutos después se traducen en gemidos y gritos:

- DIOSSS MIOOO… UHHH… QUE COJES BIEN…

- GRACIASSS… OHHH… UFFF…….

- SIIII… DAME… DAME… COGEME DURO... VAMOS OH SI

- CLARO... ESTA... UFFF… QUE CULO TE GASTAS…. OHHH….

- VAMOS…. UFFFFFFF…

- SIII…. VAMOS…. QUE ME VENGOOO… JODER

- VAMOS MAS RAPIDO QUE YA ME VENGOOOO….

- ¿TE VIENES? YO TAMBIENNNN…. TOMA…

Después de esto, Hermione solo sintió un chorro de semen que inundaba todo su ser, mientras se desplomaba deshecha después de otro frenético orgasmos en el suelo, abrazada con la persona que la hecho ver las estrellas varias veces, se pone a disfrutar de la vista y de la brisa fresca que corre y los acaricia a esa hora.

Habían pasado varios minutos que estaban en el césped y Hermione dijo:

- Harry, es hora de irnos…

Este que estaba distraído le dice:

- ¿Qué?... si, si claro, disculpa, espera… - diciendo esto se para, empieza a buscar su ropa esparcida por todo el lugar y se comienza a vestir, ella hace lo mismo y antes de que Harry se vistiera le acaricia el trasero diciendo:

- ¿Ves? Tengo razón cuando digo que tienes un buen trasero…

- No empecemos otra vez – le dice Harry divertido – Mejor nos vamos

Dicho esto ambos se acomodaron la Capa Invisible y tomaron rumbo hacia el castillo, teniendo ahora que sortear varias dificultades hasta llegar a la Sala Común de Gryffindor, donde se sacaron la capa y se dieron las buenas noches con un apasionado beso y un par de manoseos picarones por parte de Hermione, después se separaron diciendo:

- Bien Harry, Buenas Noches, y gracias por el momento

- No, gracias a ti de venir a la cita… pensaba que ibas a mandar la nota a la porra

- Ja… no, como se te ocurre, y perderme que un tipo guapo me hiciera el amor… loca no estoy…

Ambos sonrieron, se volvieron a besar y ambos se retiraron a sus respectivos cuartos.