Aquí está el capítulo que muchos de vosotros estabais esperando. (Ana María, no me mates cuando acabes de leer el capítulo jejejeje)-
Como ya os he dicho, podría haber complicado mucho el fic con este tema, pero no quise hacerlo, la historia ya se complica demasiado por sí sola…
¡Espero que os guste! Y os prometo que pronto subo el próximo capítulo para que no me matéis.
Capítulo 23: La nueva buscadora
Por la noche, Hermione volvió a su cuarto después de la ronda nocturna. Había estado un rato con Malfoy, que no dejaba de bromear sobre el partido de Gryffindor del día siguiente. Al llegar a su cuarto se encontró con Parvati, hecha un mar de lágrimas y Lavender intentado consolarla. Le dio mucha lástima, y aunque no fueran íntimas amigas, también ella fue a consolarla. Le costó mucho dormirse, estaba muy nerviosa pensando en cómo se lo tomaría Malfoy cuando viera que ella era la buscadora, y también tenía la duda sobre si todo saldría bien. Como descubrieran lo que habían planeado se les iba a caer el pelo. La poción multijugos estaba prohibida.
A la mañana siguiente, durante el desayuno, nadie de Gryffindor decía nada a Hermione, pero todos la miraban.
-¡Por fin se desvelará el misterio- dijo Malfoy en la mesa de Slytherin mirando a Harry- Hemos hecho una porra ¿quieres apostar por quién será el nuevo buscador de Gryffindor, Potter? Aunque seguro que ya lo sabes, así que no vale, no puedes apostar.
-Es una lástima que hoy termine la intriga ¿no? Parece que estabais muy entretenidos con vuestras teorías.- dijo Harry mirando el trozo de pergamino que le había pasado Malfoy, donde estaban apuntadas las apuestas.- A ver... a quién has puesto tu... ¿Longbotom? No, Malfoy, todavía estás a tiempo de cambiar.
-¿No es Longbottom- dijo Malfoy poniendo cara de decepción.
-Te lo dije.- le dijo Crabbe dándole un codazo.
-¿Quieres que te de una pista- dijo Harry con un tono intrigante.
-No necesito tus pistas, Potter.- dijo Malfoy, que aunque estaba deseando una pista, le pudo el orgullo.
-No lo acertarás nunca.- dijo Harry.
Malfoy se quedó mirando la mesa de Gryffindor. ¿Cómo que no lo acertaría nunca? ¿Había alguien de quien jamás sospechara que llegara a ser buscador? Se fijó en todos los que había en la mesa de Gryffindor, sopesando las posibilidades de cada uno, hasta que en una segunda vuelta, se quedó mirando a Hermione. Estaba tan guapa...
Mientras la miraba, se unieron todos los cabos de repente. ¡Ella era la buscadora! Cómo no lo había pensado antes. Por eso le había pedido que la enseñara a volar. No sabía qué sentía en ese momento, estaba furioso pero a la vez se sentía orgulloso de que se lo hubiera pedido a él. Se sentía utilizado pero sabía que ella le quería. Era todo tan confuso... Llegó a pensar que todo había sido una estrategia de Hermione y que al final había acabado enamorándose de él sin quererlo.
Otro codazo de Crabbe hizo que dejara sus paranoias a un lado. Era increíble lo rápido que iba la mente, en un segundo le había dado tiempo a pensar varias teorías. Pero todo era absurdo, Hermione y él se querían, todo lo demás no importaba. Pensó: "me estoy volviendo un sentimental ¿cómo puede ser que una chica me haya hecho esto? En condiciones normales se habría enterado de quién es Draco Malfoy pero... cuando la veo sólo siento ganas de estar con ella y besarla. Hay que ver como es el amor...quién me lo iba a decir."
-Draco, ¡Draco!.- dijo Crabbe empujándolo para que bajara de las nubes.
-Ah, si.- dijo Draco y luego miró a Harry, y escribió "Granger" en el lugar de su apuesta- ya lo sé y voy a ganar.
-¡¿Granger!.- dijeron a la vez Crabbe y Goyle al leerlo, y los dos empezaron a reirse.- ¿te has vuelto loco, Draco?
Hermione oyó que decían su nombre y volvió la cabeza para mirar a la mesa de Slytherin. Draco la miró y luego miró a Harry, esperando que éste le dijera si había acertado o no, pero no se lo dijo.
-Ya lo verás dentro de un rato, no te lo voy a decir.- dijo Harry.
Hermione se puso más nerviosa ¿por qué hablaban de ella en la mesa de Slytherin?¿se lo habría contado Harry? Al menos le tranquilizó no haber encontrado ningún síntoma de enfado en la mirada de Malfoy.
Poco después del desayuno, los equipos se dirigían hacia el campo de quidditch para prepararse para el partido. Hermione y Ginny se metieron en el vestuario de las chicas. Mientras Ginny se cambiaba, Hermione estaba sentada mirando al suelo.
-¿No te cambias- preguntó Ginny.
-Ah, si, ahora me cambio.- dijo Hermione, que tenía que esperar a que Harry llegara.
-Estás nerviosa ¿verdad?.- dijo Ginny y se sentó a su lado- no te preocupes, lo vas a hacer muy bien, ya verás, si Ron te eligió sería por algo. Yo también estaba muy nerviosa en el primer partido ¿te acuerdas? No di ni una, además me tocó contra Slytherin y Bennington y Townsend no paraban de agobiarme, estuve soportando sus bromas durante semanas.
En ese momento tocaron a la puerta del vestuario, era Ron.
-¿No estás lista aún, Hermione- preguntó Ron, disimulando.- Bueno, Ginny, vente al despacho del capitán que tengo que dar las tácticas de última hora.
Ginny miró a Hermione con un gesto de aburrimiento.
-Tómate tu tiempo.- dijo Ron guiñándole un ojo a Hermione cuando Ginny estaba de espaldas para que no lo viera.
Los dos salieron del vestuario y poco después entró Harry.
-¿Tienes la poción- preguntó Harry.
-Si, he echado un poco en estos tubos de ensayo, si vieras que empiezas a transformarte tómate uno, yo llevaré unos cuantos también.- dijo Hermione dándole unos cuantos tubos como los que se usan para las muestras de sangre.
-Bueno, habrá que cambiarse.- dijo Harry, que de repente se sintió incómodo al pensar en que se transformaría en una chica.
-Ejem, mejor nos vestimos antes de tomar la poción.- dijo Hermione poniéndose muy roja.
Le dio su ropa de quidditch a Harry, y Harry se metió dentro de una de las duchas y le dio su ropa de Slytherin a Hermione. Cuando Hermione ya se había cambiado, salió, pero Harry seguía dentro de la ducha.
-¿Te pasa algo- preguntó Hermione.
-¿Aparte de que no me quepan los pantalones- dijo Harry a través de la puerta de la ducha- ¿Es necesario que me ponga esto- dijo sacando por encima de la puerta un sujetador.
-Yo te lo aconsejaría, sobre todo si no estás acostumbrado a ser chica.- dijo Hermione riéndose.
-Creo que no pensamos bien en las consecuencias de esto.- dijo Harry, y luego Hermione le oyó mascullar "esto es humillante."
Al cabo de unos minutos Harry salió de la ducha con la ropa puesta. Era un poco ridículo porque la ropa le estaba pequeñísima, y Hermione se tuvo que reír al verlo, además Harry no paraba de darse tirones por todos lados, intentando agrandar la ropa.
-Cuando te transformes te quedará bien, mírame a mi.- dijo Hermione señalando su túnica y sus pantalones, que le arrastraban por el suelo.
Se cortaron unos cuantos pelos y los echaron en la poción y en los tubos de ensayo que cada uno llevaba, y unos cuantos segundos después empezaron a transformarse. Hermione empezó a crecer y Harry a encoger.
-¿Ves como ahora te queda bien- dijo Hermione a Harry, que tenía su apariencia.
-¡La voz- dijo Harry.
Hermione comprendió al instante, la voz no había cambiado, ahora ella era Harry con voz de chica y Harry era Hermione con voz de chico.
-Está claro que no podemos hablar.- dijo Hermione- vamos a parecer tontos como nos pregunten algo...
-Bueno, tendremos que salir.- dijo Harry, cogiendo su Saeta de fuego.
-Espera.- dijo Hermione dándole su Nimbus 2001- lleva ésta, es mi escoba.
Hermione había estado meditándolo durante mucho tiempo. Había decidido que Harry debía llevar su Nimbus 2001, ya que Draco se la había regalado. Ya era demasiado para Draco que ella fuera buscadora para que encima llevara la Saeta de fuego de Harry. Había hecho desaparecer transitoriamente las letras plateadas que ponían "Draco Malfoy"para que Harry no las viera.
-¿Tu tienes escoba?¿desde cuando- preguntó Harry.
-Me la regalaron mis padres por navidad.- mintió Hermione.
-Habría estado bien que me la dejaras, al menos para probarla unos días.- dijo Harry.
-Se me olvidó, lo siento.- dijo Hermione mientras salía del vestuario sin que nadie la viera.- Mucha suerte, no me hagas quedar mal.
-Descuida.- dijo Harry.
Cuando Hermione se había ido, Harry salió para reunirse con el equipo de Gryffindor. Vio a lo lejos a Hermione, que iba hacia las gradas de Slytherin, y pensó que quizás deberían haber ensayado un poco antes de tomar la poción, porque resultaba raro verse a él mismo andando como una chica. Sólo esperaba que nadie se diera cuenta.
Cuando entró en la sala donde esperaban los de Gryffindor, vieron entrar a Hermione con unos andares un poco extraños, pero no dijeron nada. Ron se fijó en la escoba que llevaba Harry e hizo como para preguntarle, pero él le hizo un gesto de que se callara.
Hermione llegó a las gradas de Slytherin, y se sentó no muy lejos de Malfoy pero lo suficiente para verle bien, pero tampoco demasiado cerca como para que la incordiara.
Pero fue inevitable, en cuanto Malfoy la vio llegar y sentarse, fue inmediato.
-¿Vienes preparado para ver perder a Gryffindor? Ahora verás cómo se viven los partidos de Gryffindor en las gradas de Slytherin.- dijo Malfoy.
Hermione se limitó a mirarlo con mala cara. Esperaba que Malfoy no volviera a preguntarle algo. En ese momento salieron los jugadores al campo a la vez que Seamus decía sus nombres. Primero los de Hufflepuff y luego los de Gryffindor.
-¡Ginny Weasley! ¡Cazadora- dijo Seamus y Ginny salió al campo reuniéndose con los demás en una fila delante de los de Hufflepuff.
En las gradas de Slytherin, los chicos del equipo de quidditch estaban sentados con Malfoy, y Hermione pudo escuchar abuchear a esos chicos que Ginny tanto odiaba.
-Se va a enterar cuando juguemos contra ellos, no voy a dejar ni que huela la quaffle.- dijo Bennington.
-A ver si no hacéis como el año pasado, que os pasasteis tanto con ella que nos pitaron un montón de penalties y perdimos.- les regañó Malfoy al oirlos.
- ¡Ron Weasley!¡Capitán y guardián de Gryffindor!.- dijo Seamus mientras ellos seguían enfrascados en su conversación.
-Descuida, estamos mejorando nuestros métodos, la tortura mental es mejor que la física.- dijo Townsend mirando a Bennington, y los dos se rieron.
-Lo que os pasa a los dos es que estáis rabiosos porque ninguno ha conseguido ganar aquella ridícula apuesta que hicisteis de ver cual era el primero que se liaba con ella. ¿No tenéis bastante con haberos liado con medio colegio? Es más emocionante lo que no se puede tener fácilmente ¿no? Ginny Weasley es la espinita que tenéis clavada.- dijo Malfoy.
En ese momento, Townsend fue a contestarle a Malfoy pero éste le mandó a callar, iban a nombrar al buscador de Gryffindor, y se inclinó hacia delante como si así fuera a oír mejor.
-¡Y la novedad del equipo de Gryffindor!¡Hermione Granger!¡buscadora-dijo Seamus.
En las gradas de Slytherin se hizo un murmullo constante, todos tenían algo que comentar al respecto. A Hermione le daba igual lo que dijeran de ella, ella sólo tenía la vista fija en la reacción de Malfoy, que no dijo absolutamente nada, se quedó mirando fijamente, luego cogió sus prismáticos, y Hermione pudo ver una disimulada sonrisa en sus labios. Lo que ella no sabía era que en cuanto él la había visto allí, había desaparecido por completo cualquier resentimiento, deseaba que lo hiciera bien, porque él le había enseñado. Él sentía algo parecido a lo que ella sintió cuando lo vio jugar contra Hufflepuff, por primera vez deseaba que Gryffindor ganara. Además, ella llevaba la Nimbus 2001 que él le había regalado y eso hizo que se sintiera más orgulloso.
Los demás amigos de Malfoy se extrañaron de que no dijera nada y que estuviera absorto mirando por los prismáticos.
-Ah, Malfoy, la sangre sucia es tu espinita clavada ¿verdad- dijo Bennington, bromeando con Townsend como venganza sobre lo que Malfoy les había dicho de Ginny.
-Cállate Bennington, o tendré que ponerte de suplente en el próximo partido.- amenazó Malfoy sin dejar de mirar por los prismáticos.
-Sabes que no te conviene ponerme de suplente, soy demasiado bueno.- dijo Bennington.
Entonces Malfoy se dio la vuelta y se dirigió a Hermione.
-Vaya, Potter, al final voy a ganar un montón de dinero con la apuesta, creo que he sido el único que he acertado.- dijo Malfoy, y se dio la vuelta para restregárselo a Crabbe y Goyle por reírse de él al apostar por Granger.
Empezó el partido, Harry daba vueltas al campo buscando la snitch. Mientras la quaffle pasaba de cazador en cazador y las bludger volaban por el campo. Al cabo de un rato, Ron había parado unos cuantos goles y los cazadores habían marcado otros tantos, sobre todo Ginny, que estaba especialmente pletórica, lo que parecía molestar bastante a Townsend y Bennington porque cada vez que Ginny marcaba se quejaban.
-Ginny Weasley lleva la quaffle, regatea, pero Zacharias Smith se acerca a ella, parece que está a punto de quitarle la quaffle.-decía Seamus.
-¡Venga Smith! Tu puedes, pégale si es necesario pero quítasela de una vez.- gritó Townsend.
-¡Vaya entrada de Smith! La quaffle en posesión de Hufflepuff, pasa, Smith se acerca al área de Gryffindor, le vuelven a pasar la quaffle, pero tendrá que superar a Ron Weasley, y eso es difícil.- dijo Seamus.
-¿Eso difícil- bromeó Malfoy- ¡Weasley es un manta- y se volvió a Hermione con tono irónico- Oh, perdón, Potter, a lo mejor estamos hiriendo tus sentimientos.
-Gol de Hufflepuff.- dijo Seamus pero Hermione casi ni lo oyó porque los de Slytherin gritaban ¡Bien!.- Hufflepuff empata con Gryffindor a 50 puntos.
Hermione empezaba a impacientarse, quedaba poco para que se cumpliera una hora desde que habían tomado la poción multijugos. Esperaba que a Harry no se le olvidara tomarla de nuevo. De repente se acordó de algo muy importante, no sabía cuánto tiempo duraría el hechizo desvanecedor que había puesto en la Nimbus 2001, sólo deseaba que el partido terminara lo antes posible.
Harry se sentía muy incómodo teniendo cuerpo de chica, a lo que tenía que añadir que montaba una escoba desconocida, no era lo mismo que su Saeta de fuego. De todas formas le tranquilizó que el buscador de Hufflepuff llevara una Barredora bastante peor que la Nimbus 2001. Sopesaba las ventajas y los inconvenientes, estaba incómodo con su cuerpo y no estaba acostumbrado a esa escoba, pero su escoba era mejor que la del otro buscador y además, con el cuerpo de Hermione era mucho más ligero y más rápido. Sólo deseaba que aquello fuera suficiente para atrapar la snitch cuanto antes. Pero algo había hecho que se sintiera aún más incómodo, cuando había llegado al campo, Cho, que era árbitro le miró con odio. Le preocupó que Cho pudiera odiar a Hermione después de lo que pasó, eso sólo haría ponerle las cosas más difíciles a la hora de intentar volver con ella. Pero mientras todos estos pensamientos abrumaban a Harry, pudo ver un destello dorado no muy lejos de donde estaba. Era la snitch. Salió disparado hacia ella. En cuanto el otro buscador lo vio hizo lo mismo, pero él tenía la ventaja de una escoba más rápida y de ser muy ligero.
-¡Parece que Granger ha visto la snitch- dijo Seamus- esta chica promete, ¡venga Hermione, el buscador de Hufflepuff la sigue, pero Granger le lleva mucha ventaja ¿Dónde habrá aprendido a volar así esta chica? Y nosotros sin saberlo...
Malfoy se puso muy estirado en su asiento, Hermione pudo comprobar que no quitaba ojo de encima a su otro yo que perseguía la snitch.
Mientras tanto, los del equipo de Gryffindor no pudieron evitar echar un vistazo a la actuación de Hermione, y por más que Ron les gritaba, Hufflepuff aventajó a Gryffindor en el marcador. Iban 70-110.
Harry aceleró todo lo que pudo, la snitch casi estaba a la altura del suelo, y bajó casi tocando el suelo, luego la snitch giró y subió, Harry tuvo que remontar bruscamente para no darse contra una de las gradas. Aquel movimiento arrancó un ¡Oh! de sorpresa a muchos, que se sorprendieron de que una novata fuera tan buena. Con ese movimiento había vuelto a sacar ventaja al buscador de Hufflepuff y consiguió atrapar la snitch.
-¡Gryffindor gana por 220 a 110!¡Granger ha atrapado la snitch!¡Vaya actuación de nuestra nueva buscadora, digna de un profesional-dijo Seamus.
En las gradas de Slytherin, los alumnos se levantaban fastidiados y haciendo comentarios. Malfoy, en el fondo se sentía orgulloso de la actuación de Hermione, aunque no podía demostrarlo.
-Potter, deberías sentirte triste, al final resulta que Granger es mejor buscadora que tu.- dijo Malfoy a Hermione como para hacerle sentir mal.- ya veremos que pasa en el partido contra Slytherin.
Hermione pensó en ese momento en qué pasaría si Harry cogía la snitch antes que Malfoy, podría sentirse muy dolido. Malfoy pasó por su lado dándole un empujón. De repente se paró y se acercó a ella. Malfoy había notado algo familiar al pasar junto a Harry y se acercó para comprobarlo mejor.
-¿Usas perfume de chica- dijo Malfoy en tono burlón- No, si ya decía yo que eras un poco raro.
Otra cosa a tener en cuenta para la próxima vez, pensó Hermione, que se apresuró a acercarse al vestuario de Gryffindor. Tenía que esperar a que Ginny se cambiara para entrar a hacer el cambio con Harry.
Harry, que tenía el tiempo controlado, esperaba que Ginny se diera prisa, para no tener que tomar otra vez la poción, porque sino estaría una hora más con la apariencia de Hermione, y no le hacía mucha gracia.
Mientras Hermione esperaba fuera, Cho pasó por delante suya. Le miró con mala cara, y cuando había pasado de largo volvió sobre sus pasos.
-Estarás contento ¿no? Tu amiguita es la nueva buscadora ¿estás esperando a que salga del vestuario para celebrarlo por todo lo alto- dijo Cho mirándola con desprecio.
Ella no podía contestar, pero notó un claro rintintín en las palabras "celebrarlo por todo lo alto", ¿a que se referiría?
-¿Te ha comido la lengua el gato- dijo Cho- ¿sabes que? Que el nombre de Harry Potter te viene grande, eres un cobarde. Ah, y además, el que calla otorga.
Y dicho eso se fue. Hermione se sintió muy mal, podría haber empeorado la situación entre Cho y Harry. Al poco tiempo, Ginny salió del vestuario.
-¿Qué te ha parecido el partido? Hermione ha estado genial ¿verdad- dijo Ginny.
Hermione asintió con la cabeza y sonrió.
-Vaya, desde luego que hoy estáis poco habladores, no he conseguido sacarle ni una palabra a Hermione.- dijo Ginny mientras se iba.
Hermione miró que no venía nadie y entró en el vestuario. Sólo quedaba esperar unos minutos a que la poción dejara de ser efectiva. Mientras esperaban, los dos se sentaron.
-Lo has hecho muy bien.- dijo Hermione.
-Gracias, ¿has tenido que soportar mucho a los de Slytherin- preguntó Harry.
-Lo normal, ya me lo esperaba. Malfoy dijo algo de que había ganado mucho dinero en una apuesta.- dijo Hermione.
-Ah, si, apostó a que tú serías la buscadora.- dijo Harry.
-¿Si? Que raro ¿no- se extrañó Hermione.
-Bueno, en realidad había apostado por Neville pero le dije que se había equivocado, y cambió la apuesta.- dijo Harry.
-Oye, me he encontrado a Cho. Lo siento pero no podía hablar.- dijo Hermione ante la cara de espanto de Harry.- parece realmente dolida.
Hermione le repitió las palabras textuales de Cho.
-Dios mío, la he fastidiado del todo.- dijo Harry tapándose la cara con las manos, totalmente abatido.
Empezaban a transformarse de nuevo. Hermione cogió la Nimbus 2001 y vio las letras plateadas en ella ¿cuánto tiempo llevarían allí? Suponía que Harry no se había dado cuenta porque no le había comentado nada.
Volvieron a cambiarse. Harry se fue de cabeza a ducharse y también para ver si de paso se ahogaba. No le veía ninguna solución a lo suyo con Cho. Cuando un rato después Hermione entró en el comedor para el almuerzo, todos los de Gryffindor la vitoreaban y le decían que un estreno como el suyo merecía una fiesta esa noche en la sala común. Pero todo eso le daba igual, lo único que quería era ver a Malfoy y ver qué le decía. Estaba impaciente, y para asegurarse, en cuanto terminó el almuerzo fue a la lechucería y le mandó una lechuza.
Poco después, una lechuza del colegio se posó en la ventana de la habitación de Malfoy con una nota atada a la pata. Harry estaba tumbado en la cama, como si intentara asfixiarse con la almohada. Estaba hecho polvo. El ruido de la lechuza hizo que se espabilara y se levantó a ver para quién era el mensaje.
