Aquí el último capítulo por hoy:

Capítulo 46: Despedida y confesiones

La noche en el dormitorio de los Slytherins fue muy tensa para Harry. Afortunadamente para él, Malfoy era prefecto y volvía más tarde que le resto. Harry puso todas sus fuerzas en intentar quedarse dormido antes de que Malfoy volviera, había momentos en los que no se creía responsable de sus actos. Mil y una formas de venganza pasaron por su mente, mientras daba vueltas en la cama encerrado dentro de las cortinas, dando gracias a que en Hogwarts utilizaran camas adoseladas para poder refugiarse dentro y aislarse. Lo último que quería ver era a Malfoy inocentemente dormido en su cama... Finalmente decidió no actuar de forma violenta contra Malfoy, una reacción así, además de ser muy muggle, parecería una provocación hacia el consejo escolar que le había permitido seguir sus estudios. Una cosa tenía clara, se vengaría de Malfoy, pero de una forma sutil y cruel fríamente calculada, tenía que demostrarle que él también era capaz de hacer algo así. Y saboreando anticipadamente su venganza se quedó dormido, tranquilo y relajado...Sin sospechar siquiera que aquellos pensamientos retorcidos que habían estado acudiendo a su mente con pasmosa facilidad y que le hacían sentir que él también podía ser verdaderamente malvado si se lo proponía eran producto de su lado oscuro, que se desarrollaba al margen de su consciencia alimentándose de sus malos sentimientos.

A la mañana siguiente, se levantó muy temprano para pedir a Sirius que le acompañara a la estación de Hogsmeade. Todo había sucedido muy rápido y apenas le había dado tiempo a reflexionar y ahondar en lo ocurrido, hasta que fue a ver a Sirius y le puso un poco los pies en la tierra. A priori, se había quedado con los sentimientos más primarios; culpabilidad por la expulsión de Cho, e ira por la participación de Draco en todo aquello. Al menos tenía el consuelo de haberle contado lo suyo con Cho a Sirius, de lo contrario, sabía que ahora tendría remordimientos si se hubiese enterado a través del consejo escolar. No es que Sirius se alegrara de la expulsión de Cho, como padrino suyo que era, quería que Harry fuera feliz pero también quería lo mejor para él, y en eso no entraba el ser atacado por alguien bajo la maldición Imperius.

- Tenemos prohibida la visita a Hogsmeade, pero Dumbledore me dio permiso para despedir a Cho si un profesor me acompañaba y bueno…quería pedírtelo a ti.- dijo Harry al entrar cabizbajo al despacho de Sirius.

- Claro, yo te acompaño.- dijo Sirius, quedándose en silencio, como si quisiera decir algo que no debiera.

Mientras que Sirius se preparaba para salir, Harry esperaba sentado en un sillón, y ninguno de los dos dijo nada. Harry pensaba que tal vez Sirius no quería hablar sobre el tema porque lo consideraba doloroso para él, pero Harry quería saber qué era lo que había pasado en la reunión del consejo escolar.

- Sirius…¿qué pasó en la reunión?

- Lo que pasó en la reunión es lo de menos, como era de esperar hubo detractores y partidarios de tu expulsión y de la de Cho, pero lo realmente importante de todo esto es que han actuado contra ti desde dentro de Hogwarts, lo que implica que los mortifagos tienen un colaborador aquí y que además sabe bastante…- explicó Sirius.

- Hermione…- murmuró Harry cerrando los puños hasta hacerse daño con las uñas.

- No digas tonterías, Hermione nunca…- Sirius se quedó callado dándose cuenta de que quizás Harry tuviera razón.

- No hay que dar más vueltas para saberlo, todo apunta hacia Hermione. Ella está con Draco, ella sabía lo mío con Cho y se lo pudo contar perfectamente a Malfoy y… ella y Cho no se llevaban muy bien. ¿Quieres más pistas?-dijo Harry casi perdiendo la paciencia. La buena imagen de Hermione en Hogwarts no le beneficiaba en sus teorías.

A pesar de las indicaciones de Harry, a Sirius le costaba creer que Hermione fuera una aliada de los mortifagos. Podía ver claramente la ira de Harry en sus ojos, y entendía que se sintiera profundamente enfadado con Hermione y con Malfoy. Pero también sabía que aquella situación no beneficiaba a Harry en absoluto, quería advertirle, quería contarle todo lo que él sabía antes de que fuera demasiado tarde. Estaba decidido a hablar con Dumbledore y explicarle que Harry debía saberlo todo, y que esta vez, mantenerlo alejado de la verdad no contribuía a mantenerlo seguro, sino todo lo contrario.

El camino a la estación de Hogsmeade fue silencioso. Sirius miraba de soslayo a Harry y podía sentir que estaba a punto de explotar de un momento a otro. Durante todo el curso habían estado ocurriéndole cosas, pero aquel intento de ataque por parte de su novia indicaba que el momento se acercaba, los mortifagos estaban dando muestras de actividad.

Una vez llegaron a la estación, Sirius se mantuvo a distancia para dejarles algo de intimidad. Cho estaba sentada en un banco y el tren estaba aún parado en el andén. Cuando vio llegar a Harry, una tímida sonrisa se dibujó en su cara.

-Creía que al final no ibas a poder venir.- dijo Cho.

-Sirius me ha acompañado, debe estar por ahí.- dijo Harry.

-Harry…yo siento lo que pasó.- murmuró Cho mirando al suelo.

-Shhh, ya hemos hablado eso. Lo que quiero que me prometas es que tendrás mucho cuidado y que me avisarás si te pasa algo raro.- dijo Harry tomándola de la barbilla y mirándola a los ojos.

- Te lo prometo. Tu también tendrás mucho cuidado ¿verdad?- dijo Cho, y Harry asintió.

El tren empezaba a ponerse en marcha. Harry ayudó a Cho a subir las maletas y llegó el momento de la despedida inevitable. Los dos sabían que sólo tenían que estar separados un mes, en cualquier otra circunstancia no supondría ningún problema sino fuera por el incidente que había provocado todo aquello. Harry y Cho se dieron un apasionado beso de despedida, con el amargo sabor de la incertidumbre. Ambos sabían que acechaba un gran peligro y se besaban pensando aunque sin querer admitirlo, que tal vez aquel beso podría ser el último…

Desde la ventana del vagón, Cho asomaba la cabeza y Harry desde el anden veia como el tren estaba a punto de partir.

-Te estaré esperando. Me gustaría que conocieras a mi familia.- dijo Cho desde la ventanilla dejando a Harry medio en shock.

-Sí, claro.- dijo Harry con una sonrisa nerviosa que no pudo cambiar hasta que el tren se había marchado.

Cuando ya no se veía rastro del expreso, Harry aún seguía plantado en medio de los andenes.

- Será mejor que nos vayamos o llegaremos tarde a la primera clase.- dijo Sirius posando la mano en su hombro. Harry se volvió con la misma sonrisa nerviosa.- ¿qué te pasa? Parece que hubieras visto un fantasma.

- Cho quiere que formalicemos nuestra relación.- dijo Harry como si el nudo de la corbata del uniforme estuviera apretándole demasiado.

- Bueno… sois novios, de eso se trata ¿no?- dijo Sirius haciendo un gesto como si aquello fuera obvio.

Pero viendo la cara seguía poniendo su ahijado comprendió lo que le pasaba y sonrió.

- El miedo al compromiso ¿verdad?

Harry le devolvió una mirada de socorro. Todo aquel curso había estado muy cómodo viendo a Cho en Hogwarts. Él no tenía algo a lo que pudiera considerar familia, pero ahora se sorprendía de no haber pensado nunca que Cho tuviera una familia y que algún día deberían conocerle. Se daba cuenta de que ya no era un niño, si se consideraba lo suficientemente adulto para unas cosas también debía serlo para formalizar una relación.

-Déjame que te de un consejo; si de verdad crees que merece la pena, no dejes que tu deseo masculino de ser libre te ciegue.- dijo Sirius cuando volvían a Hogwarts, quedándose un momento mirando al horizonte con ojos soñadores.

-¿Por qué lo dices? No es que yo quiera ser libre ni nada de eso, yo quiero a Cho…

-Yo estuve a punto de comprometerme, para casarme, pero en mi juventud era muy alocado, ya lo sabes. Tus padres estaban a punto de casarse y yo me sentía presionado, me creía demasiado joven. Mi novia, Carla McKinnon, amiga de tu madre, tuvo la paciencia de esperar un año más, pero entonces ocurrió lo de tus padres y yo… fui a Azakaban.- podía notarse un halo de tristeza en el rostro y la voz de Sirius- Allí me enteré que los mortifagos habían matado a toda su familia y a ella…

-Lo siento… no tenía ni idea.- dijo Harry sintiéndose ridículo por abrumarse por algo tan insignificante. Sin duda, lo que acababa de contarle Sirius era verdaderamente dramático.

Siguieron el camino hasta Hogwarts en silencio. Al llegar al vestíbulo, Harry y Sirius tomaron caminos diferentes para dirigirse a sus clases.

-Ten cuidado con acusar a alguien antes de estar seguro. Culpar a un inocente puede ser muy grave.- dijo Sirius antes de tomar su camino.

Harry comprendió a qué se refería. A pesar de sus sospechas sobre Hermione no tenía la certeza de que ella fuera quien había desatado aquello y Sirius, más que nadie sabía qué consecuencias traía el culpar a alguien inocente.

Al entrar en el aula, muchas miradas curiosas se posaron en él, siguiéndole descaradamente hasta que tomó asiento. Todo el mundo sabía que Cho había abandonado Hogwarts, y aquellas personas que aún guardaban buenos sentimientos miraban a Harry con algo de lástima.

- Me da pena.- dijo Parvati a Lavender en un murmullo.- El pobre ha pasado por tantas cosas… y ahora esto… espero que todo les vaya bien cuando acabe el curso.

Lavender asintió con gesto compungido dando a entender que ella pensaba lo mismo. Parvati era una de las que seguían con la mirada a Harry, y Lavender se dio cuenta de que su amiga se comportaba de forma más madura a como lo hacía antes. Comprendía que ahora, con las nuevas responsabilidades que se le avecinaban, Parvati hubiera cambiado su actitud. Podía ver en ella una nueva Parvati responsable, pero también llena de temores y preocupaciones, alguien que en poco tiempo debe asumir su papel de mujer adulta cuando siempre había sido una loca adolescente.

- ¿Te das cuenta de que estamos perdiendo facultades?- intervino Lavender intentando que Parvati olvidara por un momento lo que seguro le estaba preocupando.- ¡¡Ni siquiera sospechábamos que Harry salía con Cho!

- Ya, y nosotras que pensábamos que estaba con Hermione.- Parvati sonrió.- y ahora ni se hablan…

La profesora McGonagall entró en clase con cara algo preocupada.

-Perdonad el retraso, pero nos hemos quedado sin profesor de vuelo para los alumnos de primero y estamos buscando alguien que de las clases lo que queda de curso.- McGonagall se quedó mirando un momento a Harry y continuó.- Bien, hoy continuaremos con la clase del otro día.

Los alumnos sacaron sus varitas y se disponían a practicar las transformaciones parciales, pero Parvati, con la varita en la mano parecía estar ida.

-Eh, Parvati…- le dio un codazo Lavender.

-Ah, si… Oye, estaba pensando en que podía proponer algo a la profesora McGonagall. Charlie es muy bueno en quidditch… tal vez podrían traerlo para lo que queda de curso.- dijo Parvati.

-Uf, no se… despidieron a Cho por estar con un alumno.- dijo Lavender.

-Ya pero mi situación es diferente.- dijo Parvati poniendo una mano en su tripa y sonriendo.- No pierdo nada con intentarlo ¿no?

-No, claro que no…Por cierto ¿piensas contárselo algún día de estos a Charlie? A este paso cuando te vea creerá que has comido demasiados dulces de Honeydukes.- guiñó Lavender.

-Debería contárselo ya, la boda de Bill es este fin de semana y creo que debería saberlo para entonces.-dijo Parvati mordiéndose el labio inferior.

Las clases se sucedieron una tras otra con normalidad, se acercaba el fin de curso y todos estaban nerviosos por los inminentes exámenes del Éxtasis, por lo que pocos se daban cuenta de la ausencia de Hermione en clase de pociones.

Pero inevitablemente algunos no podían obviar tan extraño suceso. Sirius, después de la conversación con Harry aquella mañana, no pudo evitar fijarse una vez más en el asiento vacío que había al lado de Draco Malfoy. Estaba en disposición de poner al corriente de aquello a Dumbledore, pero no lo había hecho. En teoría no tenía nada que objetarle, los deberes de Hermione eran puntualmente entregados y con buena nota, aunque después de lo que ya sabía sobre ella y Draco y las sospechas que Harry le había confesado, estaba seguro de que a Hermione le pasaba algo.

La casualidad quiso que cuando se dirigía a su despacho a la hora del almuerzo se encontrara con Hermione por el pasillo. Conocía muy bien a Hermione, y la imagen que se encontró le dejó aún más preocupado. La chica iba sola, cabizbaja, caminando a paso rápido con un montón de libros apretados contra el pecho. Sirius la llamó, pero Hermione apresuró el paso haciéndose la desentendida, rehuyéndole claramente. Sirius se volvió y salió detrás de ella. Hermione sabía que era inútil salir corriendo, así sólo llamaría más la atención. La mano de Sirius en su hombro hizo que se detuviera ,suspirando al saberse atrapada, se dio la vuelta con resignación. Sirius dio un pequeño paso atrás, sorprendido por el aspecto de Hermione, la chica estaba mucho más delgada, pálida y con unas profundas ojeras enmarcando unos ojos de mirada triste.

-¿Pasa algo?¿Está mal mi redacción o el trabajo?- dijo Hermione apresuradamente, nerviosa, queriendo deshacerse lo más rápido posible de aquella situación.

- Creo que debería ser yo quien preguntara eso ¿no?- dijo Sirius en tono amigable.

Hermione intentó disimular mirando el reloj.

- Voy a llegar tarde.- dijo Hermione con una sonrisa forzada.

Se dispuso a seguir su camino, pero nuevamente la mano de Sirius la retuvo, y esta vez la miraba con seriedad.

- Acompáñame a mi despacho.- dijo Sirius con tono autoritario.

- Pero...

- Nada de peros. Ya me encargaré de que no te quedes sin almuerzo.- dijo Sirius.

Hermione no tuvo más remedio que seguir a Sirius al despacho. Caminaba detrás de él, pensando con urgencia en como responder al interrogatorio que le esperaba sin poner en peligro la vida de Draco. Sirius se sentó en su escritorio y ordenó señalando la silla que tenía delante, que Hermione tomara asiento.

- Curiosamente, soy observador y me he dado cuenta de que llevas algún tiempo faltando a mis clases.- dijo Sirius con cierta ironía.

Hermione bajó la mirada, preparándose para una nueva mentira, demasiadas para su gusto en lo que llevaba de curso.

- Estoy preparando el examen de ingreso en la escuela de aurores, además de los Éxtasis y los trabajos del castigo, y el fin de curso está siendo terrible.- dijo Hermione.

Sirius se quedó mirándola sopesando la gravedad de la mentira que acababa de oír. Sabía que aquello no era el motivo, pero se estaba preguntando si sería cierto que Hermione preparaba el examen de la escuela de aurores. Si no hubiera sido por la relación entre Draco y Hermione, no le habría sorprendido, Hermione tenía cualidades de sobra para ello.

- Supongo que alguien te pasará los apuntes, los ejercicios son correctos, pero ahora que lo dices... el trabajo del castigo viene estando algo más flojo, lo sabes por las notas ¿verdad?- dijo Sirius muy rápido como quien quiere pasar a otro tema.- ¿Qué es lo que te pasa? ¿Qué es lo que pasa entre Harry y tu? Recuerda que te dije que me avisaras si Draco intentaba sacarte información sobre Harry, y estoy casi convencido de que fuera quien fuera el que actuó con tra Harry a través de Cho tuvo a Draco de informador.

- Yo no tengo nada que ver en lo que le haya pasado a Harry.- dijo Hermione con brusquedad.- Me estás insinuando que yo pasé información a Draco, y eso es mentira.

Sirius realmente no pensaba que Hermione fuera el nexo entre los mortífagos y Hogwarts, como Harry había sospechado, sólo lo dijo para ver hasta que punto Hermione podía estar implicada, aunque le quedaba la duda de que si eso fuera verdad, Hermione no iba a admitirlo.

- Hermione, no te estoy acusando de nada, sólo quiero saber qué es lo que te pasa e inevitablemente tengo que pensar en que te hayas visto en medio de algo.

Hermione sentía que se le aceleraba el pulso y un sudor frío comenzaba a llenar su frente. Si hablaba de Draco, éste moriría.

- Es verdad que Harry y yo no tenemos buena relación ahora, pero te juro que es algo al margen de todo lo que le ha pasado. Es por algo que ocurrió entre Cho y yo. Y bueno... Draco y yo ya no estamos juntos, ni siquiera nos hablamos, acabamos muy mal.- dijo Hermione con los ojos empañados.

Ahora Sirius entendía un poco más a Hermione. Harry se había enterado no sabía como de la relación entre Draco y Hermione,y aquello había empeorado la poca amistada que les quedaba. Y si Hermione no mentía, y él la creía, si lo habían dejado, entendía que no quisiera ir con él a las clases de pociones.

- ¿Por qué ya no estáis juntos Malfoy y tu?- preguntó Sirius.

- Las parejas se rompen, no es algo tan raro ¿no?- contestó Hermione secamente.

- Me parece extraño, él parecía dispuesto a cualquier cosa por ti.

- Lo se.- dijo Hermione sintiendo una opresión en el pecho, recordar todo lo que Draco había luchado por su relación le causaba gran dolor, y ella había quedado como una desagradecida.- Draco es un buen chico, tu conoces a su familia y sabes que ha estado siempre bajo una gran presión. Pero también, nadie mejor que tu sabe que lo nuestro no tenía ningún futuro, yo voy a ser auror y su familia nunca me habría aceptado.

- Está bien... Entiendo que estés pasando por un mal momento. Mírame a los ojos, si me dices que no tienes nada que ver, te creeré.

En esos momentos, Sirius deseaba saber legeremancia o tener a mano veritaserum, pero tendría que contentarse con la palabra de Hermione.

- Te juro que no tengo nada que ver en lo que le pasó a Harry.- dijo Hermione.

Al decir eso, se limpió una lágrima que había conseguido escapar. Podría mirar a los ojos a cualquiera y jurar que ella no había tenido nada que ver en el ataque de Harry. No estaba mintiendo y precisamente por no tener implicación alguna en el ataque había perdido a Draco, aunque había tenido la oportunidad de elegir...

- ¿Puedo irme ya?- dijo Hermione volviéndose a limpiar los ojos.

Sirius asintió y Hermione abría la puerta para salir cuando Sirius volvió a hablar.

- Si te sientes mejor, te cambiaré de sitio en clase de pociones.- dijo Sirius guiñándole un ojo en un gesto de complicidad.

- Gracias.- dijo Hermione con una tímida sonrisa.

Ay, me encanta Sirius tan comprensivo y metido en todo jejejeje. Lo de Carla McKinnon pues fue un regalito para mi amiga Carly, en la época en que le gustaba Sirius, porque ahora lo odia XD, se pasó al lado de Sev ;-D (creo que en parte gracias a mi, y ya veis ahora ando entre el sirusianismo y el severusiansimo XD)

¡Ya queda menos! A ver que cuente…ups, antes me equivoqué, quedan exactamente 11 capítulos, que a razón de 2 o 3 caps cada vez que actualice significa que ¡en nada el ff estará terminado! Ups, que penica, ya me dio tristeza acabar de escribirlo en su día, pero terminar de subirlo también me dará lástima. En fin, qué le voy a hacer.

Respondo reviews:

Ana María:Ya ves que la cosa se complica. Aunque Draco lo hiciese con mala voluntad (jejejeje) no le salió tan bien como creía, ya ves como la expulsión de Harry no quedaba dentro de los planes ;-D Lo Charlie y Parvati, jejeje, ya verás como Charlie no nos decepciona, como tu dices, es todo un Weasley. El tema del trío y Draco pues está más complicado, pero ya verás como se resuelve todo, aunque aún les queda sufrir un poquito. ¡Besitos!

Meilin Snape: ¿en este ff les va mal a todos, ¿seré verdaderamente Trelawney disfrazada? XD ¡qué bueno! Pues la verdad es que les estoy haciendo sufrir mucho, ya no me quedan historias tan enrevesadas como esta, (después de esta acabé con mis reservas de maldad jijijiji) aunque bueno, cuando Bellatrix me posee puedo ser muy mala muajajajaja. ¡Besitos! Y espero que te gusten los capitulos que vienen ;-D

Gina Herms 88: Me alegro que te hayan gustado. A mi también me dio pena de Hermione, pero habrá que hacerle sufrir un poquito más ¡Muajajajajaja! Besitos!

Xana: ¡Me alegro que a estas alturas aún sigan uniéndose nuevos lectores! Habrá que esperar un poco para el reencuentro con besos que pides (jejejeje ¡pillina!). Aunque todo esté super liado en el ff, te adelanto que tiene un final relativamente feliz. Ah, si fue Lucius quien puso la maldición a Cho (eso le pasa a Harry por echarse novias tontas jejeje) ¡Besitos!

Becky: Ay, pobre, que no puede leer hasta dentro de un tiempo. Pero bueno, cuando vuelvas tienes dos capítulos más por leer. A ver, lo de Draco y Hermione… pues la historia gira entorno a Harry pero también sobre ellos dos, por eso mismo están como están. Era necesario que acabaran así, pero tranquila, que el amor hace milagros ;-D ¡Besitos y vuelve pronto!

Danybel: Aquí traigo más! Ay, a mi me encanta Draquito también, ya sabes, me tira el lado Sly jejejeje. En casa de mi prima, bien, aunque ya he vuelto a mi casa por los exámenes, es que allí con tanta gente no estudio, estoy todo el día haciendo el tonto por ahí jejejeje. ¡besitos!

Adriana: ¡Bienvenida! Tranquila, ahora mismo están peleados Draco y Hermione, pero todo se solucionará, así que no tienes por qué estar triste. Al ff le quedan 11 capítulos, pero muy interesantes jejeje. ¡Besitos!

Nulka 90: ¡Gracias por unirte a mi ff! Supongo que lo has leido entero aunque me hayas dejado el review en el primer capítulo jejejeje. Bueno, me alegro que te guste y por supuesto que lo terminaré de subir, no os voy a dejar con la intriga. ¡Besitos!