Capítulo 6:
¿¿¿Están seguros que eso es un castigo?
Cuando las puertas se abrieron, los chicos rumiaban sobre sus castigos y sus padres y parientes los atosigaban a mas no poder, empezando con la madre de Mariana, quien ya tenia toda una lista acerca del pésimo comportamiento psicológico de su hija.
- Hija, me temo que en las vacaciones tendremos que comenzar una terapia, para investigar acerca de tu comportamiento salvaje y poco ortodoxo en este colegio y de los demás en donde te han corrido y…
- Sí má – respondía Marian de mala gana, pensando que ella no estaba para pend… tonterías psicológicas…mj…
En otra esquina, Linda la madre de Darren, asesinaba a Severus con la mirada y le hacía fuertes reclamos.
- ¡No puedo creer que no puedas controlar a nuestro querubín!
- ¿A que te refieres? – gruñó Snape - ¡Tú que no lo educas bien, para eso eres su madre!
- ¡Pero está aquí, contigo, vigílalo aunque sea un poco!
- Yo soy solo victima de las circunstancias – decía Darren, poniendo cara de santo y fingiendo pesar - ¡Tengo una familia disfuncional!
- Pero tu madre no está loca – alcanzó a decirle Terry y después recibir un zape por parte de su padre, Horace.
- ¡Más respeto a tu madre, Terry!
- Sí apá…
- ¡Y pórteseme bien!
- Sí apá
- ¡Nada de andar persiguiendo chicas y llevándoselas a los oscurito!
- Sí apá… digo… no apá…
- ¡Y nada de hacer hechizos prohibidos que luego no puedas remediarlos!
- ¿Y como quieres que me divierta?
- ¡Ese es tu problema fíjate mijito, pero una queja mas y la loca de tu ma… digo, tu santa madre se enterará y si le provocas una conmoción cerebral, será enteramente tu culpa!
- Ahora resulta…
Sirius hacía lo suyo, retando a las mellizas y a su prima, pero ninguna de las tres parecía hacerle mucho caso, por otro lado, Brandon estaba en medio del bien… y el mal, el padre le decía que siguiera así y su madre le decía que no y ambos se miraban con disgusto.
Itkar también recibía una noticia poco agradable, y miraba a Ikis, que le sonreía abiertamente.
- ¿Estás loca Ileana? ¿Ikis se queda?
- Has de cuenta que es tu hermano…
- ¡Pero ya tengo suficiente con la ama! ¡Está en se deshace y no se deshace de mí!
- No seas tan dramático Itkar, Ikis se portará bien., yo tengo una convención de espíritus sólidos e Ikis no se puede quedar solo…
- ¿Porqué no?
- Porque es capaz de meter de todo a la mansión de la cual nos adueñamos… vamos Itkar, mira que te hice un gran favor…
- Está bien, pero a mi ama no le gustará nada…
- ¡Bueno Mariana! (regresando con ella) es mejor que comiences tu castigo, en lo que hablo con el director.
- ¿A dónde me envían?
- A limpiar las mazmorras niña, anda apúrate, que no lo harás sola, creo que te llegará ayuda.
- ¡Que maravilla! – gruñó la chica y de mala gana se fue a las mazmorras, si no lo hacía, era seguro que el regaño sería peor.
La chica bajó al lugar, el cual estaba oscuro y las antorchas no encendían bien, chisporroteaban por el agua que caía, así que de muy malas pulgas se puso a recoger todo el botadero, se había recogido el cabello y se había quitado la túnica, para no ensuciarla, quedando en ropa muggle.
- Me pregunto a quién mandarán – rumiaba mientras recogía las cosas y aventaba otras – espero que no tarde porque yo no pienso quedarme aquí… ¡no tenia que hacer estas cosas en mi antiguo colegio! ¡Me lleva la…!
Y quejándose estaba, cuando de pronto un chico entró también, castigado, pero como Mariana tiraba cosas en ves de limpiar (porque aquello de la limpieza nomás no se le daba) pues terminó aventando un pliego de pergamino viejo en la cara del chico que se tropezó al no ver nada con una silla y…
- ¡AAAAYYY! – el pobre chico fue trastabillando directamente hacia Mariana y ambos quedaron tirados en el piso, Mariana le quitó el pergamino de la cara para insultarlo y patearlo en cuanto se lo quitara de encima pero…
- ¿Harry?
- Eh… oh… lo siento… yo… me tropecé… está oscuro…
- ¡No hay problema, todos cometemos errores!
- Sí bueno… me enviaron aquí para limpiar… - trató de levantarse, pero Mariana le puso las manos al cuello
- ¿Y cual es la prisa?
- Este… pues… digo…tenemos que limpiar – respondió el chico y ya sentía pesada las manos de la chica sobre su cuello
- Sí… tenemos que limpiar – le dijo con una mirada deseosa y ganosa en la mirada
- Mariana ¿Qué te pasa?
- Harry creo que te mereces…
- ¿Me merezco qué?
- Un besote mío…
- ¡Pero yo...!
Pero Harry ya no pudo decir más nada, porque Mariana le soltó un beso marca me quiero morir, o sea, bien tronado, y él no tuvo la más mínima oportunidad de poner a salvo su decencia y su dignidad, porque esa malvada y experta bruja, ya lo andaba conduciendo al camino del pecado mortal...
Este… bueno, si sonó exagerado, digo que Marianita tan linda, pues solo le dio un beso porque… ¡pues porque se le pegaba su maldita gana! ¿y, y, y? ¡Nicolle es su amiga! ¿y, y , y? ¡La que se fue a la villa perdió su silla y la que no se aparezca por el fic, perdió a su pior es nada!
El caso es que la chica se estaba dando un buen agasajo con el pelinegro y ya le andaba quitando los… lentes porque estorbaba y ya le andaba quitando los… complejos porque el beso ya lo estaba dejando sin respiración.
- ¡Ajá! ¿Con que así trabajas, mariana? – de pronto gritó alguien a la entrada, era su má.
- ¡Ay no! – gimió la chica y soltó a Harry como un calcetín
- ¿Qué significa esto mariana?
- Este… pues… ¡Él! – lo señaló y Harry que aún no reaccionaba
- ¿EL QUE?
- ¡Él me abrazó y me besó a la fuerza!
- ¿En el piso?
- ¡Es que es un chico muy fuerte y yo una pobre niña indefensa y a su merced!
- ¡Harry! – gimió Hermione que iba con la señora Splendor
- ¿Qué, yo que? ¿Qué hice? – respondió atontado
- ¿Quisiste abusar de mi! – gimió Mariana
- ¿Qué yo que?
-¡Y luego se hacen los locos! – Siguió protestando - ¡así son todos los hombres! ¿Verdad má?
- Pues yo tengo mis dudas – gruñó su madre
- ¡Madre! ¿Vas a desconfiar de tu hija?
- ¿Te respondo o lo dejamos para una terapia en San Mungo?
- ¡Ay amá!
- ¡Mira hija, ponte a trabajar en tu castigo y por favor, mantén alejadas tus manos de ese chico!
- Sí mamita…
Y en cuanto se dio la vuelta, Mariana miró que Harry aún no reaccioanaba, por lo que volvió a atacar ¡Ingue su! Como dijera el Adal, se le fue al cuello y volvió a besarlo con más fuerza.
- ¡Oye! – gimió Hermione
- ¡Marianaaaaaaaaa! – Gritó la madre desde afuera - ¡Deja en paz a ese muchacho ahora!
- ¡Ay pero que aguafiestas! – Gruñó la chica – pero en cuanto se haya ido mi madre y la chismosa melenuda… ¡no te la acabas Potter!
- ¿Qué? – reaccionó Harry
- ¡Vamos pues, pon en movimiento esas manos!
- ¿Cómo dices?
- ¡Que comiences a limpiar pues! ¡A no ser que quieras hacer otra cosa con esas manos! – le dijo coquetamente y el chico enrojeció
- ¡Oye! ¿Por qué me besas?
- ¡Ay mi Dios! – Gimió Mariana – después de una hora te das cuenta… ¡mis besos ya no hacen efecto como antes!
- ¡En serio, no tienes derecho a…!
- ¡Tranquilo, fue un beso, no un faje!
- ¡Pero no puede ser esto!
Y mientras ellos discutían y Hermy se iba un poco exaltada, no se daba cuenta de que por ahí andaban algunos integrantes del periódico escolar y…
- ¡Escucha Mariana, no lo volveremos a hacer! – gritaba Harry y la chica reportera se quedo cerca
- ¡Ay Harry! ¿Qué tiene de malo? ¿Acaso no te gustó? ¡Dime la verdad!
- ¡Bueno, es que yo…!
- ¡Solo dime si te gustó o no!
- Bueno, si, lo haces bien…
- Ajá ¿crees que sé moverme bien? – preguntaba mariana sonriente, refiriéndose al beso, pero la chica afuera yo no se que creyó que de inmediato salió corriendo…
Así que después de la discusión, se pusieron a limpiar, y al poco rato, subieron sudorosos, sucios, despeinados y ella se colocaba la túnica y él se acomodaba la suya, cuando llegaron a la estancia, todos le veían con curiosidad.
- ¿Qué pasa? – preguntó Harry
- No lo sé… - Mariana se acercó a sus amigos - ¿Pasa algo chicos?
- Bueno… es que… ¡Ay Mariana! Por lo menos podrían ser mas discretos
- ¿Discretos?
- ¡Claro! Para eso hay hoteles en Hogsmeade…
- ¿Qué?
- Escucha mariana, Nikky está muy molesta, ni la busques
- ¿Y yo que hice?
- ¡Pues lo que hiciste con Potter!
- ¡Ah! Eso… ¡No fue nada!
- ¿Nada?
- ¡Pues sí! ¡Nada! Al menos no como a mí me gusta, Harry como que es medio soso, no tiene mi experiencia, creo que necesita una sesión de unas tres horas
- ¡Golosa!
- ¡Sucia!
- ¡Pervertida!
- ¡Ya niños! ¡Ni que fuera algo malo! ¡Ustedes también lo hacen! ¡Es mas, estuve a punto de hacerlo contigo Darren! ¿Ya se te olvidó?
- ¿CONMIGO? ¿EN SERIO?
- ¿NOSOTROS HACER ESO? ¿TAS LOCA?
- ¡Claro!
- ¡Bueno, pero somos mas discretos y aquí nos estamos portando bien! – protestó Darren
- ¡Porque nosotros si tenemos principios y decencia! – aseguró Terry
- ¡Ay ya! ¡tanto relajo por un besito miserable!
- ¿Besos?
- ¡Si! ¡solo fue una beso! ¿pues que creían?
- Este…
Y Mariana ya no preguntó más, comprendiendo al instante, se volvió y todos le seguían mirando con ojos redondos, y Harry tampoco comprendía el porqué de esas miradas tan sorpresivas, pero Mariana captó al momento y solo negó la cabeza.
- ¿Vas a desmentir el chisme? – preguntó Darren intrigado
- Este… NAAAAAAAAAA…. Hasta que Harry capte – soltó una risotada, pensando en cual sería su siguiente paso.