Hula!
Bueno... ni que decir: estoy decepcionada... al parecer el capítulo anterior no les gustó mucho, porque no mandaron más de dos reviews... ah! muchas gracias a las dos beias que me enviaron algún comentario y saludo!
Por ahora no tengo mucho tiempo para contestar...
Este es un capítulo de transición hacia el ÚLTIMO capítulo de esta historia... que será el próximo... Un adelanto: se llamará "Amarte Duele"
Bueno... aquí les dejo este cap... para fanáticos de la pareja Harry/Ginny...
Capítulo 19
Libertad
«En la sombra de la noche…
Sumido en oscuridad,
Por qué lloras, espíritu caminante?
Por qué sufres, en la soledad?
Acepta la realidad, alma errante…
Sólo así tendrás tu libertad»
"espíritus errantes"- La Dama Blanca
Vampiros, Dementores, Mortífagos y todos los que habían participado en el bando de la oscuridad esa noche, desaparecieron en un segundo.
Hogwarts quedó en silencio en ese instante.
Y en medio de los terrenos asolados del colegio de magia y hechicería, Harry Potter cerró los ojos.
Respiró profundamente y se dio cuenta de que el aire era puro… tomó un puñado de Tierra y se dio cuenta de que estaba llena de vida… sintió como el agua que comenzaba a caer del cielo le acariciaba el rostro y se percató de que era virgen, a salvo de toda inmundicia y maldad…
Por primera vez en su vida cerró los ojos y sólo sintió…
Por primera vez en su vida tuvo un segundo de paz… de tranquilidad… de armonía… de…
Libertad…
Y sonrió.
Sonrió por sentirse a salvo y libre de cualquier cosa… sonrió por sentir… y estar vivo. Sonrió por estar vivo… y poder disfrutar de ello.
Entonces abrió los ojos y se levantó con suavidad del suelo.
—Harry Potter…—murmuró una voz ronca.
Harry se volteó y vio a un gran número de centauros liderados por Firenze.
—Nuestros respetos, señor…—dijo el centauro, inclinando la cabeza—. Ha sido un honor luchar a su lado…
Harry asintió y los guardianes del bosque fueron hacia él.
Después, una a una, todas las criaturas que habían ayudado a ganar la batalla fueron presentándole su gratitud y conformidad.
Entonces, luego de que la última de las criaturas se fuera, alguien le tocó el hombro.
—Hola…—dijo Ginny, sonriendo débilmente.
Harry sonrió con más fuerza que antes, fue hacia ella y la abrazó… La abrazó sintiendo su aroma, su piel… La abrazó con la certeza de que ya nadie los podría separar… con la certeza de que ahora podían estar juntos por fin y disfrutar de ello sin miedo, sin temor a nada…
—Tu crees que ya he esperado suficiente?—preguntó ella, al separarse.
—Yo creo que los dos hemos esperado demasiado—repuso Harry, a unos centímetros de ella—. No quieres esperar aún más, cierto?
Ginny soltó una pequeña y alegre carcajada al ver los ojos de corderito degollado que le ponía Harry.
—No…—susurró de repente, poniéndose súbitamente seria.
—No qué?—preguntó Harry, alarmado.
—No quiero…—susurró ella—… esperar más…
Se acercó con lentitud a él y cerró los ojos.
Toda su vida había esperado ese momento.
Y ahora toda su vida lo iba a disfrutar.
• • •
Abrió los ojos lentamente, sitiendo un fuerte dolor. Dolor físico... Pero también dolor interior.
Mucho dolor.
Ron vio de lejos como su mejor amigo cerraba los ojos, sintiendo esta vez completamente, la libertad. Libertad como nunca, en todos sus sentidos, en todas sus formas.
Libertad como nunca habían tenido.
Ahora… ahora si podrían ser felices. Claro, habría que reparar muchas cosas… enmendar muchos errores… Pero con la seguridad completa y absoluta de que nada malo podía aparecer al final.
Ahora, por primera vez en toda su vida, sintió que podía tenerlo todo…
Porque aún no lo tenía.
Cerró los ojos, aspirando el aroma del aire… aroma a libertad… el aroma de su libertad… un olor suave y sutil a canela.
Haciendo caso omiso al dolor, se levantó y caminó lentamente y con dificultad hacia lo único que necesitaba y le faltaba en su vida… lo único que requería para ser feliz.
—Hermione…—susurró apenas.
Hacía tanto que no pronunciaba ese nombre…
Tanto...
Ella lo miró profunda y directamente a los ojos.
Años… había pasado años odiándola y despreciándola… Meses no queriendo escucharla, no queriendo aceptar la verdad… Y meses y años no queriendo ver lo que sus ojos siempre le habían gritado. Sin querer, sin poder nunca aceptarlo…
Cómo se puede pasar por alto tanto tiempo a nuestro corazón? Cómo podemos dejar que el amor se te escape tan estúpidamente? Cómo podemos cometer errores que nos pueden costar la vida misma?
Podría él reparar el error más grande que había cometido?
—Ahora me llamas por mi nombre?—preguntó ella, serenamente—. Ya no soy "Granger", ya no soy "mentirosa" ni "embustera"? Ya no soy, como hace tiempo dijiste… una «Asquerosa Sangre Sucia»?
Hermione sintió como el corazón se le encogía de dolor. Quería perdonarlo! Pero era tan difícil…
Tan… difícil…
Ron la observó tristemente, al mismo tiempo que comenzaba a caer unasuave lluvia. Habría preferido que le gritara, que lo golpeara, que lo hechizara como quisiera… Antes que esa mirada de triste melancolía…
Y peor.
Qué el mismo había causado.
Entonces… como si algo se gatillara en él, no pudo soportar más…
Y es que llevaba 7 años soportando.
—Por favor…—susurró, rogando.
—Por favor, qué? Ronald Weasley…—murmuró ella, fríamente—. Por favor qué?
—PERDÓNAME!
Ron calló al suelo, derrotado, sollozando.
—Perdóname! Nunca pensé… Nunca quise ver la verdad! Me equivoqué, me equivoqué tanto! Perdóname, por favor, Hermione! Perdona el que no haya visto la verdad en tus ojos… perdóname por no haber… por haber arruinado… por… Perdóname… por favor, perdóname…
—Ron…—susurró ella, acercándose a él—. Ron… mírame!
Levantó la cabeza.
—Ron… te juro… yo quiero tanto perdonarte…—susurró ella, con dolor—lo quiero tanto! Pero… aún no puedo, necesito tiempo. Por ahora sólo podemos hacer… por ahora sólo podemos darnos una tregua… Porque… aún duele, Ron… Duele Mucho… Duele tanto…
Ron bajó la cabeza, derrotado. Aún sollozando débilmente, en silencio.
—Perdóname, Herms… sólo te pido eso… perdóname…
Hermione estiró una mano con inseguridad, casi rozando su rostro, pero la retiró inmediatamente.
Entonces, tomándola por sorpresa, Ron se acercó a ella y la abrazó… aferrándose a ella.
—Te necesito, Hermione…—susurró.
La chica se separó lentamente de él, quedando separados por apenas centímetros.
—Aún no, Ron… porque duele… aún duele…—dijo la chica, simplemente, antes de que el pelirrojo terminara la frase.
Y, con una última mirada, se fue.
• • •
—Voy a ayudar con los enfermos—le dijo Ginny a Harry, muy cerca de él, creando un escudo sobre ellos para que no se mojaran.
—Yo tengo que arreglar un asunto antes—le dijo Harry elocuentemente, mirando hacia donde estaba Ron.
Ginny lo miró.
—No seas muy duro con él—le pidió la pelirroja—. Puede que sea un cabezotas… pero sufrió mucho, al igual que ustedes…
Harry le sonrió tranquilizadoramente.
—No te preocupes…
Se separaron después de unos cinco minutos de despedida y luego, el ahora hombre-que-derrotó-a-Voldemort, caminó hacia un hombre pelirrojo, que estaba arrodillado en la tierra.
Su postura lo decía todo, sus hombros estaban inclinados hacia delante, y su cabeza baja miraba hacia un punto en el suelo. Parecía no importar que estuviera lloviendo, el agua recorría su cuerpo y se posaba de nuevo en el suelo. Pero no se movía, seguía inmóvil y ensimismado.
—Ron—dijo Harry, asustado.
Harry se arrodilló junto a él, sintiendo como gotas que no eran de lluvia caían de su rostro, parecía ausente, parecía…
—Perdóname, Harry—dijo Ron, mirándolo.
Harry sonrió.
—No tengo nada que perdonarte, Ron—dijo Harry—. Todos nos equivocamos… y aunque a ti te costó un poco más entenderlo… lo has hecho al fin y al cabo… Más vale tarde que nunca, no?
Ron pareció esbozar una sonrisa, pero al segundo siguiente sus ojos se llenaron de lágrimas.
—Yo…
Antes de que pudiera decir nada, Harry se acercó a él y le dio un fuerte abrazo, sintiendo como su amigo sollozaba en su hombro.
—Lo siento tanto, Harry…—dijo—. Nunca quise que todo terminara así… fui tan imbécil! Lo siento… tanto… Hermione nunca me va a perdonar…
Harry se separó de él.
—Hablaste ya con ella?—preguntó Harry.
—Si…
—Bueno, Ron… debes entender que ella fue la que más sufrió… Además de que no le creyeras y la insultaras y te convirtieras en un…—paró un segundo al ver que su amigo bajaba la cabeza—… bueno… debes entender que le cueste…
Ron asintió, algo cabizbajo, pero cuando alzó la cabeza se secó las lágrimas y sonrió con sinceridad.
—Yo nunca debería haber…
—Olvídalo!
Se sonrieron mutuamente una vez más y se abrazaron con fuerza. Harry se levanto y ayudó a su mejor amigo a levantarse, extendiéndole una mano. Cuando iban hacia los profesores y miembros del ED que curaban a los enfermos y los trasladaban a la enfermería, alguien llegó por detrás de ellos y se echó sobre sus espaldas.
—POR FIN!—gritó Ginny, sonriendo.
La pelirroja quedó en frente de los dos, mirándolos con una sonrisa.
—Me alegro de verte, Ron—le dijo su hermana, abrazándolo.
—A mi también, Ginny—murmuró Ron—. Estás bien? Estás muy delgada…
—Nada que una temporada en la Madriguera no pueda curar…—repuso la chica, quedándose a un costado de Harry, mientras éste le pasaba una mano por la cintura.
Harry respiró profundamente, feliz. Aún no podía creer que todo hubiera terminado… aún no se acostumbraba a la sensación de que ya no tenía ninguna obligación ni peso que lo agobiara…
Todo había terminado…
Ahora, por fin, comenzaba su verdadera vida.
Bueno... les recuerdo que AÚN QUEDA UN CAPÍTULO... HAY UN PAR QUE AÚN NO SE RECONCILIA! (LO HARÁN?)
Ya que en el anterior cap me llegaron TAN sólo 2 reviews... si quereis saber que pasa en el último capítulo de la historia, deverán enviarme como mínimo... unos siete!
Es poco lo que pido.
Besos muxos, y demasiadas esperanzas para todos.
Quid Morgan... triste por no tener reviews... :(
