Disclaimer: he dicho ya que nada es mio? weno el argumento de esta historia si xD

Este es un capi...bastante largo, lleno de secretos, descubrimientos...Espero que os guste!

13

A la mañana siguiente el grupo se dirigía hacia Hogsmeade, iban los últimos, algo alejados de los demás, puesto que no querían que les molestasen.

¿Qué narices hacía allí ese?-seguía preguntándose Ron.

No lo se pero hay que averiguarlo, es muy extraño-decía Nakuru.

Y si?... y si, estuviese echando un vistazo para contárselo a su padre?-especuló Hermione.

No se…su padre sigue en Azkaban, por lo que he oído, no creo-seguía pensando Harry.

Su padre no ha salido aunque es cuestión de tiempo.

Ron, gracias por tu apoyo.

Hermione¿eso es sarcasmo? No me ha hecho ninguna gracia, yo solo digo lo que todo el mundo piensa pero ninguno está dispuesto a decir.

Es verdad, cuando salga vendrá a por mí, y a por los que fueron conmigo a ayudarme, todos vosotros estáis en peligro, Neville, Hermione y tu Ron, Nakuru tu estás a tiempo de alejarte de nosotros, no quiero que tú también te veas metida en todo esto-dijo tristemente Harry.

¿Qué¿Y dejaros a vosotros? No, ni hablar, además todos estamos en esto, Voldemort es enemigo de todo aquel que se oponga a sus ideas, pues la mayoría se opone a él y yo soy una de ellas, además no me perdería una batalla con vosotros por nada del mundo.

Harry sabes que puedes contar con todos nosotros, te ayudaremos en todo lo posible, además las clases de Defensa contra las artes oscuras son muy buenas este año, me recuerda a las sesiones que tuvimos con el ED.-rió Hermione.

Bueno, ahora nos olvidamos de todo eso, estamos en Hogsmeade y hay muchas cosas que comprar, ver, comer y beber.

Estoy con Nakuru, a comer!

Como no, Ron pensando en comer…-dijo Hermione poniendo los ojos en blanco.

A las tres escobas¿todos de acuerdo?-preguntó Harry, después de que todos asintieran a favor, se dirigieron a las taberna de las tres escobas.

Se sentaron en una mesa al fondo, alejada de las demás, al lado de una ventana donde solo veían la entrada a un oscuro callejón, siniestro para el gusto de los jóvenes Gryffindors.

Vale, cuatro cervezas de mantequilla-Harry y Ron pusieron las cervezas en la mesa y se sentaron para degustarlas a gusto.

Aquí se está muy bien, que calentito-Se alegraba Nakuru mientras se frotaba las manos.

Pues aún no has visto nada, tienes que ver Zonko y Honeudukes –decía Ron mientras se lamía los labios.

Honeudukes es la tienda de golosinas¿verdad?-todos asintieron-tengo ganas de probar algunas cosillas de allí.

Está todo muy rico, Harry se fugó una vez para... ¿Harry?-Hermione había dejado la frase a la mitad, Harry estaba mirando por la ventana con los ojos muy abiertos, parecía que había visto algo bastante interesante.

Harry¿qué has visto?

¿Qué tramarán?- Los chicos seguían mirándolo sin comprender nada. Estaban impacientes, parecía que había visto algo importante pero no decía nada, ni apartaba la mirada de la ventana.

Decidieron mirar hacia donde Harry, les costó bastante ver algo, el callejón estaba muy oscuro, tuvieron que entrecerrar los ojos para ver un poco mejor.

OH, por las barbas de Merlín¿crees que traman algo?-preguntó sorprendida Hermione.

No lo se, pero es lo más seguro.

No me fío¿y si son mortífagos?

Nakuru explícate porque yo todavía no veo nada¿quiénes son mortífagos?

Ron no te enteras de nada¿no los ves?-Hermione cogió la cabeza de Ron, la acercó más a la ventana, y no la soltó hasta que Ron abrió desmesuradamente los ojos.

Serpiente… ¿con quién está hablando ese Slytherin?

No tengo ni idea, no lo había visto nunca-negó con la cabeza Harry. Giraron la cabeza al oír abrirse la puerta de la taberna y tuvieron que correr para alcanzar a Nakuru, que ya estaba en la calle.

¿Qué piensas hacer?

Vamos a escuchar más de cerca-dijo Nakuru encogiéndose de hombros, como si fuese lo más normal del mundo.

Se acercaron con mucho sigilo y sin que nadie los viese al callejón, tenían que estar alerta, podía haber mortífagos camuflados y no podían arriesgarse a que los pillaran escuchando.

Al acercarse más asomaron muy poco las cabecillas por el callejón. Hablaban bajo, pero se les podía entender…

Tu padre te ha mandado llamar, y nosotros hemos venido a por ti-dijo un hombre vestido con una túnica negra y capa negra con capucha que no dejaba ver le la cara.

Ya te he dicho que yo no tengo nada que ver con mi padre-al oír esa voz, los chicos se miraron sorprendidos, sabían quién era, de sobra, esa voz, esa voz que arrastraba las palabras al hablar con desprecio.

No es lo que usted quiera, señorito Malfoy, su padre le reclama y usted vendrá con nosotros-en ese momento apareció otra figura detrás de Malfoy, pero este no se había dado cuenta.

HE dicho que no, no soy como mi padre y no voy a serlo por más que él quiera, no obedeceré a Voldemort¡nunca¿Me has oído¡Nunca!-Malfoy parecía enfadado, pero los chicos seguían muy sorprendidos.

Pero¿de que va? Siempre ha sido un mini Lucius,-susurró Ron.

No lo se, no me da buena espina-susurró Harry.

SSSsss

Pero mientras estos especulaban, solo Nakuru se dio cuenta de que la segunda figura que había surgido detrás de Draco estaba sacando su varita y apuntaba de lleno a la espalda de este.

Le va a soltar un conjuro- dijo Hermione.

No si yo puedo evitarlo.

Nakuru, no sabemos las intenciones de Malfoy, puede que sea una trampa-Harry cogió de la túnica a Nakuru para impedir que saliesen de su escondrijo.

¿Pero y si no lo es?

Es Malfoy.

Ron hasta él necesita ayuda si se opone a Voldemort.

Hermione…..

No pudo terminar la frase cuando Nakuru salió al callejón corriendo apuntando su varita a la figura que había detrás de Draco, lo hizo tan rápido que nadie se dio cuenta.

Expelliermus!-Lanzó un grito y la segunda figura perdió su varita en el momento justo, cayendo esta al suelo.

La primera figura que había estado hablando con Draco sacó su varita dispuesto a contraatacar pero en ese momento los chicos ya estaban con Nakuru.

Ni se te ocurra-le amenazó Harry. Harry, Ron y Hermione estaban de pie al lado de Nakuru, con las varitas listas para soltar cualquier hechizo.

¿Y quién me lo va a impedir¿Tú Potter?-Fanfarroneó el tipo de negro. Pero Draco tampoco era tonto, y ya había sacado su varita ya apuntaba de lleno al hombre de negro.

Quizás él no, pero yo sí-al tipo de negro no le dio tiempo a reaccionar-¡Expelliermus!

Antes de que ninguno se levantase, ya estaban rodeados por los cinco chicos.

Sólo se oyó un sonoro PLOP cuando las dos figuras desaparecieron.

Pues no son tan duros después de todo.-dijo Nakuru.

Estos son unos ineptos los he visto más…. ¿me estabais espiando?

Se dice gracias, por lo menos demuestra un poco de gratitud-se quejó Hermione.

Si, da gracias porque se nos ocurrió ver quiénes erais…desde luego-Nakuru se quejó, se cruzó de brazos y le dio la espalda, molesta maldiciendo por lo bajo.

Es normal en él-Harry se guardó la varita dentro de la capa y se disponía a marcharse con los demás.

Nadie os pidió ayuda, además si hubieran sido mortífagos…

Ya nos hemos enfrentado a ellos y no estabas tú para defendernos-con esta contestación de Hermione, los chicos dieron media vuelta y se fueron por donde habían venido, dejando a un solitario Draco allí plantado.

¡Nakuru¡Espera!-Hermione corría detrás de Nakuru que se dirigía muy enfadada hacia la sala común.

Después de lo sucedido en el callejón no había vuelto a hablar, siempre con monosílabos y parecía algo enfadada, ni siquiera la visita a Zonko le había alegrado. Nada más llegar a Hogwarts, ya casi de noche, se dirigió casi corriendo a la sala común sin escuchar los gritos de Hermione.

Pero cuando logró dejar atrás a Hermione cambió de rumbo y se dirigió hacia la torre de Astronomía.

Quería estar sola, y la torre de Astronomía siempre estaba desierta, y desde allí se veían las estrellas y la luna tan bien que pareciese que las pudieses tocar. Por eso le gustaba ese sitio.

La luna-susurró, siempre que la observaba pensaba que era hermosa. Pero no solo porque era hermosa le gustaba, sino porque el vinculo que las unía era muy fuerte, muy pocos tenían ese don, y ella se alegraba cada día de ser una de ellas.

Alzó las manos y en sus manos brillaron unos anillos, seis en total, tres en cada mano. Seis anillos de plata unidos por unas pequeñas y finas cadenas de plata, los anillos que la caracterizaban como alguien con mucho poder.

Viajó a través de la luz de la luna, brillante, blanca, fría pero a la vez cálida, su mente viajó mientras su cuerpo seguía en la torre. Voló hasta que encontró a su fiel amiga, aquella que le había conocido desde que entró en la escuela de magia.

Rei-la llamó, su amiga tardó solo unos segundos en unirse a ella.

Me has asustado, aquí casi no a oscurecido del todo, aunque menos mal que ya se ve la luna.

Lo siento Rei, pero extrañaba hablar contigo.

Venga Nakuru, tú y yo sabemos que nunca utilizarías la luna para simplemente hablar conmigo, hay algo que te preocupa, te conozco demasiado bien.

Él está aquí.

¿Allí¿En Hogwarts¿En serio¿Te ha reconocido?

No, no se acuerda de mí.

Y eso te entristece¿verdad?

Si, pero viendo en lo que se ha convertido… recuerdas que nunca me dijo su nombre completo¿verdad?

Sí, lo recuerdo¿por qué? Pero descubriste que era un Malfoy

Es un Malfoy pero…

Estuvieron un rato hablando, solas, sin nadie que les molestase ni escuchase a escondidas. Cuando terminaron, cada una volvió.

Es lo malo que tiene, se te cansan mucho los brazos…- cuando volvió en sí, Nakuru tenía los brazos adormecidos por haber estado medio alzados. Se frotó los brazos y se colocó bien la capa, de manera que no se le viesen mucho los anillos, no le gustaba ir pregonando que era una Mensajera de la Luna.

Volvió a la habitación algo tarde, pues se quedó en la sala común sola. Las chicas ya estaban dormidas, lo prefería así.

A la mañana siguiente bajó tarde, esperó a que las chicas se hubiesen ido para levantarse de la cama. Se vistió perezosamente y al bajar, solo saludó lo necesario.

Hola chicos-dijo no muy alegremente, tras sentarse a la mesa.

Buenos días, esto, no te fuiste a la sala común…

No, lo siento Hermione, pero quería estar un rato sola.

Un incesante murmullo indicaba que llegaba el correo. Una lechuza gris con motas negras se posó delante de Nakuru.

Nakuru… tienes carta.-le avisó Ron que veía que ni los picotazos de la lechuza sacaban a la chica de su ensimismamiento.

Ah, si no me había dado cuenta...-cogió la carta, le dio una galleta a la lechuza que salió volando.

La carta era breve pero concisa:

Se lo que eres mensajera de la luna.

Si no quieres que esto te traiga malas consecuencias y alguien salga herido

Aléjate de Draco, no te interesa lo más mínimo, o sufrirás las consecuencias.

La habían visto. No lograba pensar en otra cosa "fue anoche, tenía que haber tenido más cuidado… irresponsable, tonta, tonta, mira que exponerte así por contarle una cosa tan insignificante a Rei…"

Tenía que decírselo a Hermione, Ron y a Harry, ellos le habían contado muchas cosas, y ella se lo debía, aunque no sabía como reaccionarían.

Entonces, a la hora de almorzar, se dio cuenta. La chica que estaba sentada junto a Draco no le quitaba el ojo de encima y parecía que la quisiese despellejar viva. Sabía que era ella, sin duda.

Vio su oportunidad cuando encontró a Draco solo en un pasillo, bueno del todo no porque estaba con sus gorilas, aunque parecía que quería perderlos de vista.

Dile a tu novia que me deje en paz.-le dijo Nakuru a Draco en un tono tajante.

¿Que?-preguntó el rubio desconcertado.

No lo repetiré más, dile a tu novia que me deje tranquila o lo lamentará, y mucho, se arrepentirá haberme molestado con sus tonterías.

Su mirada no cabía duda, era poderosa y de seguro lo lamentaría. Draco ya sabía a quién se refería aunque no sabía que le había hecho, de seguro alguna de las suyas, una muestra de celos tontos.

No es mi novia.-se defendió Draco, aunque Nakuru se encogió de hombros.

No me importa, pero haz que reciba mi mensaje.

Draco entró muy enfadado a la sala común, tiró su cartera al sofá tan fuerte que hizo que todos se volvieran.

Qué¿Nadie ha visto a alguien enfadado?

¿Draco, que te pasa?-le preguntó una chica mientras se le acercaba para abrazarle.

¡Tú¡Eso es lo que me pasa¡Tu!-le gritó mientras la empujaba para que le soltara

¿Pero que¡Ayyyyyy!-Draco le cogió del brazo y la llevó a un rincón aparte donde nadie les oyera.

¿Qué le has hecho?

¿A quién? Conozco a mucha gente, por si no lo sabes.

A mi no me hables como si fueses una chica inocente y tonta. ¿Qué le has hecho¿O qué le has dicho¡Dime lo ya!

No se a quién te refieres…

Akizuky

Ah, esa asquerosa Gryffindor, me enteré de un pequeño secreto y tenía que obtener algo a cambio aunque veo que no me a hecho caso, se arrepentirá-Draco se dio cuenta de que Pansy tenía la mirada llena de odio, lo que decía lo decía de verdad y lo intentaría cumplir.

¿A qué te refieres?

Es algo más de lo que dice ser…cinco anillos, seguro que no son de autentica plata, bah, se pensará que me da miedo…

Ella se alejó y por más que pensara, Draco no sabía que quería decir con lo de los anillos, y entonces después de un rato pensando en la sala común, se levantó del sofá y bajó por los pasillos, pensando que jamás había tenido que ir a la biblioteca si no era época de exámenes.

Se puso a buscar en las estanterías, sintiéndose algo ridículo al buscar algo relacionado con anillos. Sin tener éxito cogió un diccionario de la magia.

Anillos…anillos…aquí está…Anillos: los anillos se han considerado desde la antigüedad como símbolo de los Mensajeros… Mensajeros?-se preguntó levantando la cabeza, continuó leyendo-los anillos de oro simbolizan a los Mensajeros del Sol, los de plata a los Mensajeros de la Luna. Se otorga un anillo al finalizar una etapa de su entrenamiento. Los anillos van unidos entre sí, por unas finísimas cadenas, que simbolizan la unión entre todos los Mensajeros.

Pues no me aclara mucho, la verdad-ante lo poco que se había aclarado decidió buscar algo acerca de los mensajeros, y lo que más le sorprendió fue que había muchos libros acerca de ellos. Recordaba algo sobre unos mensajeros, pero no podía situar y recordar la conversación, y con quien. Cogió uno que parecía más reciente:

Los Mensajeros de la Luna son personas con capacidades mágicas

Que les permiten comunicarse a través de la luz de la luna o

De las estrellas. Mediante esta luz pueden comunicarse entre ellos, así pues, pueden comunicar

Mensajes a personas no mensajeras sin que estos últimos les contesten.

Los Mensajeros de la Luna son muy poderosos, aunque en estos tiempos la localización de estos

Está más señalada en España, en el colegio de magia y hechicería Morphs, donde se imparten

Unas clases especiales para dichos magos hasta quinto curso, durante los demás cursos

Los anillos se le atribuirán por los meritos de sus acciones y como de avanzados estén en su campo.

Los Mensajeros de la Luna son más activos que los Mensajeros del Sol, y a la vez, si se lo proponen

Más peligrosos. Normalmente, suelen trabajar en el ministerio de magia, pero algunos

No se conforman con tal cargo, se ha sabido de algunos que pasaron al lado oscuro, pero otros se han convertido en aurores, la minoría escogen alguna de estas opciones.

Pero por este potencial, pueden resultar verdaderamente peligrosos, pueden perder a una persona en las sombras de la oscuridad, lo que dejaría a esta persona con su mente atrapada y sin posibilidad de regresar a su cuerpo sin consentimiento del Mensajero que lo impuso, si se llegase a estar demasiado tiempo cuerpo y mente separados, la persona no volvería a ser la misma

Puesto que quedaría en un estado de shock profundo, sin reaccionar ante cualquier estimulo, para siempre.

Los Mensajeros de la Luna obtienen un total de 8 anillos, ocho anillos indicaría una posición importante en la sociedad de los magos puesto que aquella persona sería la/el Mensajera/o Supremo.

El sexto y séptimo anillo se suelen otorgar al terminar los estudios finales de magia. Los anillos indican:

Dedicación, Concentración, Entereza, Templanza, Valentía, Fuerza, Coraje y Poder.

Joder!...lo siento-se disculpó tras que la encargada de la biblioteca le echara una severa mirada.

Mientras se dirigía al Gran Comedor, iba pensando como alguien tan poderoso podía estar en el colegio y que nadie lo supiese: "Bueno, Dumbledore seguro que lo sabe, a él no se le escapa nada. Pero…Pansy!-pensó dándose una palmada en la cabeza Dios, esa tonta, no sabe a quién se enfrenta… desde luego, mira que sacarla yo de este embrollo que se ha buscado ella" Echó a correr, pues sabía que lo que le había dicho Akizuky sería verdad, si Pansy volvía a molestarla lo lamentaría, se lo había visto en esa mirada, en esos ojos verdes…Draco movió bruscamente la cabeza haciendo un gesto de negación " deja de pensar en tonterías de una vez-se dijo así mismo- ahora ponte a buscar a la tonta de Pansy antes de que… bueno y si no la busco?...desde luego, siempre solucionándole los problemas."

Pero a quién se encontró en el Gran Comedor, fue a otras personas…

Jajajajajaja!

Ron, baja la voz!-le apremió Nakuru.

Enserio que se cree que te va a poder hacer algo?-le preguntó Hermione con burla.

Y, uf, ya no puedo reír más, ay… una cosa, a qué vino eso de? jum-se aclaró la voz Harry- eso de… aléjate de Draco o sufrirás las consecuencias? Ppuujajajajjajaaajjaa no se pensaría? Jaajjaaaj

Yo tampoco me lo explico, pero tiene su gracia-admitió la chica.- ¿Pero enserio que no os importa que sea una mensajera?-preguntó en un susurro.

No! Me parece fascinante-le dijo Hermione, mientras que Harry y Ron asentían intentado parecer algo más serios, pero sin conseguirlo.

Draco escuchó toda la conversación, y cada vez le parecía que aquellos chicos si se podían llamar entre ellos verdaderos amigos, cosa que él solo había tenido una vez, y había desaprovechado la oportunidad.

No encontró a Pansy, y en la cena tampoco la vio. Al entrar en la sala común le preguntó a un chico de Slytherin.

Hace diez minutos la he visto irse, creo que iba al lago.

Tonta…-Draco salió corriendo, aunque no le gustase Pansy, ni le cayese bien, y no la soportara, no podía dejar que Akizuky le hiciese mucho daño, o sus padres…

Se dirigió lo más rápido que pudo hacia el lago. Cuando se fue acercando pudo distinguir dos figuras cerca de la orilla, y para colmo había luna llena.

Has sido muy tonta, Akizuky, mira que acercarte a Malfoy después de que te llegara mi carta…mal hecho.- Pansy parecía muy segura, pero al ver a Nakuru, Draco supo que no tenía ninguna posibilidad, ella no decía nada, solo estaba de pie, con las manos cogidas, y sonriente. Cuando de pronto, mientras que Pansy sacaba su varita, Nakuru habló.

Le dije a tu Malfoy que me dejaras en paz, veo que no valoras tu mente…

No soy de nadie, y menos de Pansy-dijo Draco cuando estuvo lo bastante cerca. Las chicas lo miraron.

JO, Malfoy, no nos fastidies, no tiene ninguna posibilidad-dijo molesta Pansy.

Pansy, pero serás tonta, tiene seis anillos, y el sexto solo se lo dan a los que están muy cualificados, y reitero en lo de muy.

Veo que no eres tan tonto como pareces-dijo Nakuru. Tres sombras salieron detrás de un árbol.

Desde luego Malfoy, me has sorprendido, pero no te sientas piropeado-dijo Ron.

Bueno, aquí tu novia no está conforme, así que si nos permites.-Y con un simple movimiento de cabeza, Malfoy, Harry, Hermione, y Ron quedaron fuera de un círculo que solo rodeaba a Pansy y a ella.

Pansy levantó su varita, pero Nakuru levantó sus manos hacia la luna.

¡Expelliermus!-gritó Pansy, pero el hechizo rebotó en Nakuru sin hacerle el más mínimo daño. Los ojos de Nakuru se volvieron tan grises como la niebla, grises por completo. Pansy no dejaba de lanzarle hechizos que no le hacían ni un rasguño. Parecía como si hubiese creado un campo de fuerza a su alrededor.

Dejémonos de tonterías-dijo Nakuru muy seria, bajando la cabeza lentamente hasta encontrarse con la mirada atemorizada de Pansy, y de repente aparecieron dos sombras a la izquierda y a la derecha de ella. Eran los perfiles de dos personas, pero parecían de niebla, no corpóreas, tenían un aspecto fantasmal.

¿No vais a hacer nada¿Vais a dejar que encierre la mente de Pansy en oscuridad?-preguntó Draco.

No-dijo Ron cruzándose de brazos, mientras Harry mostraba una sonrisa irónica y se encogía de hombros. Hermione se acercó a Draco, lo suficiente para que Pansy no escuchase nada.

Razona un poco Malfoy, no somos mortífagos.-Draco lo comprendió todo.

Pansy miró aterrada a las dos figuras que se le acercaban y miró a Draco que también estaba cruzado de brazos.

¿Qué vas a hacer?-preguntaba aterrada- no… no puedes hacer eso… ¡ah!

Gritó y salió corriendo. Nakuru hizo desaparecer las dos figuras, y volvió a su estado normal.

Me lo imaginaba-por fin dijo Nakuru mientras se colocaba bien la capa.

Me ha encantado-reía Ron.

Si, lo mejor fue, jum, eso de… " que vas a hacer?... ah ah ah!" jajajajajajja

Harry, Ron, por favor,… ha estado más que bien!

Y que lo digas Hermione…Rei y Marina me han ayudado mucho, mañana tengo que hablar con ellas, su interpretación ha sido buenísima.

Pero todos callaron de golpe y se volvieron a mirar a Draco que se volvía dirección al castillo, cabizbajo y con las manos en los bolsillos.

Dirá algo?

No creo, el también estaba aquí, y podría haberlo evitado…

No, no podría haberlo evitado, pero en fin.

Chicos mejor nos vamos que tengo un sueño…-bostezaba Harry.

Draco solo iba unos metros por delante, cuando llegó al castillo se aseguró de que no había ningún profesor por los alrededores y entró. No había dado ni dos pasos cuando los Gryffindors entraron al castillo, se quedaron mirando unos momentos, hasta que el ruido de unos pasos los sacó de su estado, se apresuraron a entrar en un cuarto que había allí.

Ron, mira a ver quien es

Y por qué yo? Hazlo tú Hermione, o Harry hazlo tú.

Sí, claro lo único que me faltaba.

Ya lo hago yo…-dijo Draco, y entre abrió un poco la puerta, lo suficiente como para ver un poco quien bajaba las escaleras. Pronto todos estaban pegados a la puerta.

Snape bajaba del tercer piso con numerosos frascos de pociones, iba a las mazmorras, seguramente a su despacho. Caminaba con paso rápido y asegurándose de que nadie le miraba, o eso creía él.

Hasta que no estuvieron seguros que no se escuchaba ningún paso permanecieron en el cuarto, algo estrecho, ya que resultó ser el cuarto donde guardaban las fregonas y demás útiles de limpieza.

Lo que me faltaba para hacer la noche redonda, yo, escondido vosotros en el cuarto de limpieza.

A mi tampoco me hace mucha ilusión,-se quejó Ron quien tenía una fregona en la cabeza.

¿A qué has salido esta noche¿A salvar a tu novia Pansy?-preguntó Nakuru.

No es mi novia-repitió Draco cansinamente.

Ya…-observaron los cuatro a la vez.

Y tú¿ qué pensabas hacerle?

Na, un simple susto, para que me deje en paz. No me gusta que la gente me diga lo que tengo que hacer, y menos una serpiente como ella, una…futura mortífaga-Nakuru escupió las últimas palabras, con asco y odio en la voz.

Todos quedaron en silencio, notando la tensión que surgía de todos al mismo tiempo.

Esa noche llegaron tarde, bastante tarde a sus salas comunes.

Draco le echó una reprimenda a Pansy, y tras que esta llorara un poco, el chico se fue a la cama.

Los chicos llegaron y se fueron a dormir directamente, estaban algo cansados. El día había traído bastantes sorpresas, para todos…

Kaolla: gracias por tu rr, espero que sigas leyendo y que te guste tanto como me dijiste.

Dejad rr please que me hacn mucha ilusion xD

"Para ver el cielo en un grano de arena, el cielo en la pequeña flora. Sostener el infinito con la mano abierta, y detener la eternidad en una hora."

Meiling, otaku, y por siempre anifan.