Capítulo 3:
Un grupo... InusualEfectivamente, Dumbledore anunció que en breve, llegaría un grupo de personas por un par de meses al colegio, como premio por sus altas calificaciones y que por lo tanto estarían en la casa de Ravenclaw... ya saben, con eso de que los de ahí eran los más estudiosos... mj... mj.
No especifico si eran hombres o mujeres. Y la cena prosiguió, pero al pobre Neville se le atoraba cada vez que un Slytherin hacia un comentario en voz alta. Y a la salida no fue mejor.
- ¡Ea, Longbotton! – Decía Malfoy – si te quedas, puede que Mady decida mirarte un segundo.
- ¡Abrase visto que desfachatez de un estúpido Gryffindor, fijarse en una Slytherin!
- ¡Y el más idiota de todos! – decían otros.
- Ignóralos Neville – dijo Hermy mientras lo jalaba – no busques problemas, Snape nos mira.
- ¡Adiós Longbotton! – decían el odioso grupito de chicas Slytherin lanzando besos burdos al pobre chico, que tenia las mejillas teñidas de la vergüenza.
Una hora mas tarde, el grupo llego directo del Instituto de Salem, con muchos alumnos y una profesora que les cuidaba... aunque no eran alumnos, mas bien alumnas y definitivamente, todo un caso...
Las chicas y la profesora fueron presentadas en el comedor, y todos las veían con cara de ¿qué es eso?
Dumbledore presento a la profesora Nikky Holstein, una joven maestra que daba pociones en Salem, de frágil figura, con una bonita túnica en color malva, su rostro era tierno y apacible, de cabello color rojizo, algo rizado y enormes ojos pardos.
En seguida presento a las alumnas, que portaban unas túnicas negras, con la insignia de Salem y botines negros, aunque había dos que cargaban unos faldones bajo las túnicas un poco holgadas... bueno y no todas con túnicas holgadas, algunas bastantes descubiertas y pegadas como la de Sara...
Nenyeina, fue la primera a presentar, de 16 años, la cual tenia los ojos pardos y con mechones en su cabello color violeta, su cabello era largo y por lo poco que se veía sin pintar era castaño oscuro, sus ojos bien marcados con sombra azul y labios rojos y un bonito arete en la lengua, que nadie había visto hasta el momento.
Ana Makarios, la segunda, de 17 años, tenía el cabello acaramelado, de igual manera, largo, muy lacio, con los ojos verde-azul marcados en negro... tanto que cualquier semejanza con un mapache era coincidencia. Y un arete en la ceja izquierda.
Aliance van Dermarker, la tercera, era otra chica morena, no muy alta, de cabellos largos, con mechones en color negro y rosa, con flequillo, ojos verdes, con largas, largas pestañas y también muchas trencitas enredadas en su pelo. Y con un arete en el labio inferior.
Sara Darling Malfoy, alta, delgada, con el cabello muy negro y con tatuajes en el cuerpo poco visibles con el uniforme, de mirada sexy y un poco estrambótica, aparte de los piercing que andaba en todo el cuerpo
Xina, con su sonrisa traviesa, sus ojos expresivos... y un lindo tatuaje de una dragoncito que ocultaba en... una bubi izquierda y ni decir de su cabello, con algunas mechas que la hacían ver enigmática y agresiva...
Alkyon, cuyo cabello parecía tener vida propia y provocar a los chicos, un andar de pasarela y una mirada fría y penetrante, y una breve enigmática sonrisa... y algunos piercing ocultos... excepto el de la ceja, del cual pendían tres hilitos de plata muy delgados.
Diana... la tiernísima Dianita, que lo primero que hizo al entrar es ajustarse más el uniforme, mostrando la pechonalidad y el aretito que tenía en la nariz, un pequeño diamante... y es para que no digan que es excentrica y por supuesto, que de inmediato, los chicos fueron su objetivo.
Mariana se enrulaba mas su cabello, y procuraba que no se enredara con los cinco aretes que traía en la oreja izquierda, el último era largo y parecía una pluma de plata, traía muchas pulseras en las manos y ocultaba un piercing en el ombligo... asi como el tatuaje de una ruina del machu pichu en... no les digo donde
Elektra, que de inmediato se fijo en todos, mostrando su espléndida sonrisa y su magnetismo para atraer chicos... o al menos es lo que hacía en los bailes escolares que hacían cuando se invitaban a los chicos del colegio de hechiceros... aunque ocultaba sus tatuajes y el piercing de la lengua, era un tornillo pequeño y se veía genial.
Esas eran las chicas, que si bien, su maquillaje, sus tatuajes que aún no se mostraban del todo y sus piercing era extraño, ellas no eran nada feas, todo lo contrario, pero ¡si daban un poco de no sé que!
Una vez presentadas, se sentaron en la mesa de Ravenclaw, en un apartado, las chicas comenzaron a cuchichear silenciosamente... mejor dicho, a fijarse descaradamente en todo elemento masculino, comenzando con la mesa de Ravenclaw y su distinguida concurrencia, empezando con Mr. Justin Finch-Fletchley... por así decirlo...
- ¡Aquí si hay muchos chicos! – decía Ana suspirando - no como en el colegio, mendingando a los nenes que pasaban para su cole...
- ¡Si hasta parece bufete! ¡Con tanto para escoger! – Exclamo Neneyeina con una sonrisa - yo quiero dos para llevar...
- Y pensar que Salem es solo para brujas – dijo Aliance – ¡y aquí hay tantos niños!¡Preciosos, divinos, con ese encanto de "macho men"!
- Bueno, yo aquí no vine precisamente a ver las clases – aclaro Sara – nos esforzamos en ganar el viaje por los chicuelos...
- jajajaja - sonrió Alkyon - ¡si que nos esforzamos poniendo fuera de combate a la dulce sissy y secuaces!
- Primero veamos el banquete – respondió Xena mirando brevemente alrededor y después escojamos a las víctimas.
- ¡Yo vine por lo primero que caiga! – Suspiro Diana – lo importante es darse un pequeño faje con un chico... ¡ya estoy harta de ver puras chicas en Salem!
- ¡Con esas normas dichosas que aparte los chicos y aparte las chicas! - chilló Mariana
- Y luego son medios idiotas, ni siquiera nos buscan...
- Pero aquí hay muchos... muchos... ¡me siento en una confitería! - dijo Elektra con ojos brillantes
- Yo ya tengo al mío – sonrió Sara, volteando a ver a la mesa de Gryffindor - yo lo vi primero...
- ¿Qué piensan? – pregunto Seamus a Harry y Ron.
- ¿Qué pensamos de que? – Pregunto Ron - ¡míralas... como se pintarrajean la cara! Jamás pensé que las americanas fueran así... de extravagantes.
- Pero están guapas – dijo Harry.
- ¡Ná! – Exclamo Ron – aquí las hay mejores.
- Tan es así que no le has pedido a ninguna nada...
- Solo me doy mi tiempo – respondió con arrogancia – pero tu también te das mucho a desear amigo.
- ¿Tu que piensas Neville?
- Yo no sé nada... no volveré a fijarme en ninguna chica hasta que termine la escuela.
- ¡Bueno niñas! – Se acerco la profesora Nikky – quiero que se porten bien, no busquen problemas... aun no me explico porque precisamente ustedes salieron premiadas - y oculto una sonrisa de complicidad - ¡bonito lío en el que se han metido!
Las chicas le enviaron miradas asesinas divertidas.
- ¡Por mi esta bien, me agradan mucho… pero ustedes en Salem son las conspiradoras, el grupo revoltoso, mala influencia, las apocalípticas, las hijas de la…!
- Ya no nos eche tantas flores profesora…
- Si Nikky, que le echamos muchas ganas… ¡mire que nos costó trabajo llegar hasta aquí, con este grupo de... bombones, chicos lindos, cositas ricas... mmmm!
- ¡Aplaquen sus hormonas!
- Los felices son el resto de sus compañeras de colegio, que sin ustedes, todo es paz y tranquilidad pero… ¡no quiero travesuras aquí! ¿Entendido?
- ¿Paz y tranquilidad? te diremos Nikky, que cuando Sissy micifuci perruci y cantuci le quiten el hechizo que le pusimos, se pondrá como fiera - respondió Alkyon
- Esa perruchina no sabe ni tomar la varita... solo la del novio - agregó Elektra
- ¿Que? jajajaja - rieron todas - ¡que mala eres!
- ¡Sucia!
- ¡Ustedes que son mal pensadas! - dijo Elektra - yo me refiero a la varita mágica... inches mentes cochambrosas que se cargan...
- ¡Bueno chicas compórtense! ¿lo harán? - insistió Nikky
- Claro, nada de travesuras, ni maldades, ni nada…
- ¡¡¡Un momento! ¿Por qué habría que creerles?
- Yo que usted no debería creer nada de lo que digamos.
- ¡Niñas por favor… por lo menos debieron quitarse los piercing!... por favor, pórtense bien que esta en juego nuestro prestigio…
- Claro – dijeron las chicas y una vez que la profesora se fue.
- ¡Esta loca si piensa que no voy a darme una atascada con el bufete! – chilló Ana.
- ¡Y mas loca esta si piensa que vine a recibir clases aburridas! – espeto Aliance.
- ¡Pero esta re loca si piensa que estoy a dieta, vine por el primer bombón que pase! – agrego Sara.
- ¡Y por supuesto que estos niños sabrán lo que es un faje americano! – termino Nenyeina.
- Ahora sí, estos niños sabrán lo que es ser... ¡¡¡Una chica urgida! - sonrió Xena
- ¡Y que lo digas, lo primero que se mueva lo pesco! - dijo Elektra mirando a los Slytherin, que eran los mas altos y corpulentos.
- Yo lo primero que diga malas palabras y tenga malos modales y no se rasure - dijo Mariana y luego sonrió - ¡¡No es ciertooooooooo!
- ¡Ay chica, ya nos habías espantado! eso déjaselo a Sara
- ¿A mi? ¡Yo no tengo malos gustos, solo que me encantan los chicos rústicos!
- Y a mi me gustan guapos, ricos y medios lentos - dijo Alkyon
- ¿Lentos?
- Si, lentos... ¡asi me aprovecho de su cuerpecito y ni cuenta se dan! y de su billetera también...
- Tu no necesitas dinero Alkyon... tienes...
- ¡No! El objetivo de un enamorado es que lo estafes, si no, no es noviazgo...
- UUUUUUUUUUUUUHHHH
- ¿Qué dicen? – Y todas cruzaron sus muñecas en señal de acuerdo y gritaron -¡Un dos, tres, por Salem!
El ataque… apenas comienza ¡sálvense quien pueda chicos!
(Sí, bueno... bonita estafa ¡hay que dejar sus bolsillos vacíos!)
