Veamos, para las mentes ingenuas e inocentes este capítulo no es recomendable.

Para las mentes depravadas y cochinas esto es ligero.

Estas últimas, si quieren algo un poco más fuerte pronto podrán disfrutar de este fic en su versión original con este capítulo (y otros) un poco más picante.

Capítulo 33:

La Marquesa de Sade

Ron pedía tiempo… y mucho, porque Sara no lo dejaba ni respirar, el pobre intentaba escabullirse entre las sabanas, pero ella lo jalaba de nuevo.

- ¡Sarita, dame chance ya no puedo!

- ¡Ay Ron, tienes casi 18, deberías estar más activo, más pasional, más atrevido y audáz!

- ¡Deveritas que necesito un descanso… dame cinco minutos!

- ¡Cinco minutos, son cinco minutos pequitas!

- ¿Pequitas?

- ¡Ay Weasley es que tienes pecas hasta en las…!

- ¡Sara!

- ¡Anda Weasley, demuestra el poderío de la familia, que no se te caigan los ánimos! además, todavía te falta que conozcas mis otros tatuajes

- ¡Con el de la espalda ya tengo suficiente! - gimió Ron

Y Weasley se sentía aterrado cuando la chica, lo atacaba nuevamente y ya no sabía que pensar, si hubiera sido mejor, quedarse abajo con las por lo menos quince chicas o estar con Sara, quien no lo dejaría bajarse de la cama en por lo menos quince…
y espero que horas y no días, porque si no su amenaza iba en serio… ¡lo mataría de placer y como que ya se había pasado de crédito con el CVI!… o sea el Cuerpo mático Visa Internacional.

Así que el pobrecito se agarraba de los barrotes de la cama pidiendo paz, para poder respirar porque Sara si que iba en serio, quería comérselo vivo, claro que en una de esas ya no pudo más y se quedo bien dormido (¿no se abrá desmayado?) pues no sé porque Sara, salió de su celda dejándolo ENCERRADO Y SIN VARITA para que no se fuera a escapar y ella pudiera… utilizarlo (ay que fea palabra) cuando se recuperara…

¡adiós a la virtud y la virginidad de Ron… Good Bye virtud Good Bye, adiós… te vamos a extrañar!

Mientras tanto, Alkyon había acudido con Diana y con Sax Para que la ayudara en algunos aspectos mas íntimos para con Malfoy ¡Sax se había salido con la suya!

- ¿Qué es lo que quieres Denevi?

- ¡Estoy decidida a poner en su lugar a Malfoy!

- ¡Súper, que bueno, ya era hora de que ese hombre pagara lo que te hizo! - sonrió Diana

- Pero no se como….

- ¡Ay, eso déjamelo prefecta, que yo soy experta en venganzas y la tuya será única! ¡Tanto que ni a las de la Logia se les haya ocurrido!- dijo Sax mirando a Diana con complicidad

- ¿Qué tienes pensado?

- Tu has leido literatura muggle ¿verdad? ¿Has leído las obras del Marques de Sade?

- Esos libros son sucios...

- ¡Pues bien, nosotras lo hemos leído también y de ahí sacaron muchas ideas… pecaminosas, claro que tu no harías con él lo que dicen esos libros… pero le llamaremos al operativo "La Marquesa de sade" ¡porque si es necesario que utilices el látigo con Malfoy! ¡Lo harás reina bruja, lo harás!

- ¿Verdad que lo harás Denevi?

- ¡Sí… lo haré!

- Primero te conseguiré un vestuario digno de una cortesana del siglo pasado…

- ¿Qué?

- ¡Claro! Te pondremos corsé para que tus niñas salten con orgullo…

- ¿Mis niñas? ¿Cuáles?

- ¡Tus bubis! – exclamo Diana – así un vestido sexy, atrevido, audaz, que le den ganas de arrancártelo a mordidas… y luego ¿Qué mas? ¡El látigo por supuesto! ¡No podía faltar! ¿Y que me dices de elementos de tortura? -¡Ay si, ya tengo el lugar perfecto en donde Draco Malfoy saldrá diciendo que Alkyon Denevi es lo mejor que le ha pasado en la vida!

- ¡Yo no voy a hacerlo con él! - protestó un poco – solo quiero excitarlo lo suficiente…

- ¡Mira Denevi, yo sé que no lo quieres para contemplarlo… y después de que lo tortures lo suficiente… te lo querrás echar!

- ¡Sax! ¡claro que no! ¡Solo quiero desquitarme de ese granuja!

- Por la boca muere el pez, querida - dijo Diana con cinismo

- ¿A poco no? – pregunto picaronamente y Alkyon lo pensó unos momentos.

- ¡Jamás pensé que yo haría esto algún día!

- ¡Denevi, ese glorioso día ha llegado y Malfoy esta a punto de conocer muy en el fondo a una mujer de verdad!

- ¿Y si a pesar de eso se la pasa diciéndome que yo no soy buena para... eso?

- ¡No te preocupes no tiene ni idea de…! – y se calló, estaba a punto de echar a perder el plan y de decir que ella y él, nada que ver.

- ¿No tiene ni idea de que?

- ¡De lo que es la pasión! – terminó de decir, muy sonrojada.

Pero si alguien le ganaba, era Sara, con el demonio del medio día despierto en ella, Ron, despierto, medio vestido, parecía león enjaulado... porque no podía salir de la celda, pues la puerta estaba sellada, así que veía a todas las chicas a través de los barrotes.

- ¡Ay Weasley! – Decía Camille - ¡No cabe duda que Sara te tiene atrapado!

- ¿Si te sacamos de la jaula, cooperaras?

- ¡Que lindo minino! – le querían jalar la túnica y el solo se hacia para atrás.

- ¡Que dices prefecto!

- Maldición – gruñó Ron, tampoco podía pedirles que lo sacaran porque ese pasillo era de muerte y seguro no llegaba ni a los escalones.

- ¡Hey lagartonas! – regresó Sara - ¡Apártense de inmediato!

- Maldita – le dijeron algunas.

- ¿Qué hay Weasley?

- ¿Por qué me dejaste encerrado?

- Porque aun no terminamos de jugar chiquito... así que... porque no subes te quitas todo lo que te estorbe y me esperas...

- ¿Quieres más? (sucia, golosa)

- Weasley... no te lo estoy pidiendo... ¡ES UNA ORDEN! (ay wey, que mandona)

- ¡Sara!

- Anda pequitas – y lo jalo a través de los barrotes y le beso los labios y de paso le murmuró un par de cosas pecaminosas al oído, que hicieron que el rostro de Ron enrojeciera como su cabello.

- Tú me das miedo – murmuró Ron espantado.

- ¡Anda, te va a gustar!

- Pues... bueno – y lentamente regresó a la recamara, Sara iba tras él y de repente le salto encima, tirándolo a la cama y siguió con el besuqueo.

- ¡Ay pequitas, que rico estás!

- ¿De verdad?

- ¡Voy a gozarte como nunca!

Sax preparaba el cuarto en donde Alkyon llevaría a cabo su venganza, hasta Ana y Diana la ayudaban y los ojitos se iluminaban de Ana - ¿Crees que después de que lo use, pueda traer a Potter? ¡Creo que ya lo estoy convenciendo!

- ¡Sucia! – decía Diana al entrar con unos tarros de miel, chocolate, crema batida y otras cosas.

- ¡Todo esta listo!

- Oye Sax, pero cuando Alkyon se de cuenta que ella todavía es...

- ¡Vamos chicas, ella se muere de ganas por hacerlo con el!

- Sí, pero nos va a matar...

- ¡Moriré satisfecha por haber acabado con la virgen más pura del IAM!...

- Y ni decir del príncipe Malfoy... acosado...

Para el anochecer, Alk estaba nerviosa, Diana y Ana llevarían a Malfoy al cuarto y ella lo esperaba con un ceñido vestido en donde media bubi saltaba orgullosa, ya que el corsé apretaba el abdomen (esa chica que se queda sin aire) y la cintura, la falda era larga con muchos volantes, en color rojo y negro... colores pasionales, según Sax, andaba unos zapatos con tacón de aguja.

Con algunos engaños, Ana llevo a Malfoy hacia la habitación, aunque el chico andaba poco convencido, pero aceptó solo porque ella le había adulado demasiado. Cuando Malfoy entró al cuarto, se llevó una sorpresa.

-¿Qué diablos? – gruño el chico al ver frente a él, unos grilletes en la pared, una mesa rustica con varios cordones, al fondo una cama amplia con sábanas rojas, y en las paredes había dibujos de corazones sangrantes, que por un hechizo, goteaban mágicamente.

De pronto, Alkyon le jaló la varita y el chico salto, cuando se volteo a verla, una cortesana estaba frente a él, la chica lucia preciosa, con el cabello recogido y entrelazado con perlas, un amplísimo escote enseñando media bubi, con una gargantilla de tela en el cuello.

El vestido ajustado le hacia ver una espectacular figura y muy sensual, aparte que el maquillaje le ayudaba más, la chica traía un látigo, el cual chasqueaba con orgullo.

- ¡Señor Malfoy! – dijo Alkyon Denevi Nixon – bienvenido...

- ¿Qué juego es este?

- Ninguno señor Malfoy... ahora si, me voy a desquitar... ¡DESVÍSTETE!

- ¿QUÉ?

- ¡QUE TE DESVISTAS!

- ¡NO!

- ¡Diffindo! – apunto Alk y el rayo rasgo una manga de la túnica de Malfoy.

- ¡Oyeme no! ¿Qué haces? – gimió.

- ¡Diffindo! – volvió a atacar y en esta ocasión fue la otra manga.

- ¡No me la pienso quitar!

- ¿En serio? – sonrió la chica rodeándolo - ¡inflamarus total! – gritó y de pronto la túnica del chico comenzó a incendiarse.

- ¡NO! – chilló y como no podía apagar el fuego, tuvo que quitarse la túnica, abajo todavía traía una camiseta y sus pantalones.

- ¡Que poca Denevi!

- ¡Atrás Malfoy! – Azuzó la chica con el látigo - ¡a la pared!

Chicsssss, chicsssss, chicssssssssss (sonido de latigo, segun yo) mj...mj...

- ¿Qué?

- ¡Atrás! – lanzo un latigazo al aire y Malfoy se pegó a la pared, cuando lo hizo, ella dijo otro hechizo y los grilletes buscaron las muñecas de Malfoy apresándolas y levantándolas.

- ¡Que pretendes!

- ¡Casi nada gatito! – y lanzó otro latigazo, directo a la camiseta, y esta se rompió en dos pedazos, dejando sus pectorales descubiertos.

- ¡Denevi, basta!

- ¡Bien! - pensaba la chica - ¡A lo que sigue y sin asco, Denevi, sin asco... que es para vengar tu honor, tu honra y tu dignidad de mujer afectada!

- ¡Suéltame chica que este juego tuyo no me gusta para nada!

Pero Alkyon dejo a un lado el látigo y las varitas, busco un taza con miel y la dejo caer en el pecho del chico. La cual se le escurrió hasta dentro de los pantalones.

- ¿Qué haces?

Pero Alkyon no contesto y comenzó a quitar la miel... con la lengua

- ¡Denevi me haces cosquillas!

Pero Alkyon la muy descarada le hacia más que quitarle la miel del tórax, porque en menos de lo que canta un gallo, el chico ya tenia mordidas y moretones y la muy atrevida viéndolo a los ojos con mirada retadora le abrió el pantalón y de un jalón los bajo... quedándose en calzoncillos... (¡uf! Mucha ropa, mucha ropa)

- ¡Creo que tienes mas miel abajo! – dijo mordiéndose los labios de manera tan sensual, pero al chico ya temblaba de solo pensar que ella le quitara sus chones.

- ¡No te atrevas! – apretó Malfoy los dientes.

Pero Alkyon estaba dispuesta, por lo que... bajo los calzoncillos y trago saliva ¿Y ahora que hacia con eso? (Ay si... ay si, pues es de adorno ¿o no?) para su suerte, la miel escurría a los lados, mejor dicho, por todos lados, por los muslos del chico, por "ayayito" y este pareció darse cuenta que el valor se le terminaba a la chica.

- ¿Lo ves? ¡Creo que el juego termino, suéltame!

Pero una Denevi Nixon no se dejaba vencer por pequeñeces... o sea, la miel, haciendo la aclaración porque por lo otro pues no parecía pequeño y eso que aun no despertaba totalmente.

Y haciendo un esfuerzo (Arriba las mujeres) siguió lamiendo el caminito de miel y entonces Malfoy si sintió que la virgen... perdón, que Merlín le hablaba, sobre todo cuando se percato mejor del "pequeño" escote que tenia la chica y que le mostraba hasta las anginas.

-¡Oh, no... tranquilo Draco, respira, solo respira, no pasa nada, no pasa nada! – se repetía una y otra vez - ¡oh, no, pero si pasa! - cerrando los ojos, procurando... no, intentando no sentir los labios de Alkyon siguiendo el caminito de miel y muy cerquita de su... orgullo, de la princesa caramelo, la cual quería y no quería despertar (pues hay que cantarles las mañanitas, despierta mi princesa despierta, que ya amaneció) y la chica también tenía cerrado los ojos, pues no quería ver lo que tenia muy cerca de ella (que bueno que no habla, porque si no ya le hubiera dicho ¡Hola Alkyon soy todo tuyo, ¿Quieres jugar conmigo! ¡¡y eso si seria un sustísimo y no quiero traumarte por el resto de tus dias!...)

- ¡Que sucia eres! – dijo entre dientes.

- ¡Pero bien que te gusta! – se levantó y tomo un bote de crema batida el cual le comenzó a rociar al chico en todo su cuerpo.

- ¡Que rico pastelito! – dijo Alkyon coquetona y de nueva cuenta comenzó a quitarle la crema con tremendos chupetones y el chico procuraba siquiera ver como las bubis y el resto del vestido de Alkyon también se embarraban de crema, con lo cual le provocaba cierto despertar de cierto amigo.

- ¿Y que vas a hacer con él? – le dijo Malfoy cuando el gigante andaba despertando (JAJAJA)

- ¿Tú que crees? – y la chica... ¡y le aventó agua helada!...¡Si como lo leen! le avento agua helada, con todo el dolor de su corazón y más que nada, ella jamás había visto "eso" y con crema batida mucho menos... y no le apetecía verlo despierto...¡¡ay que cosa tan espantosa!

- ¡Te pasas Denevi, eso no se hace!

- ¡Tu tienes la culpa por no aguantarte!

- ¡Se trata con cuidado so bruta, que no es cualquier cosa! - ¡Pero si Alkyon no sabe ni como se trata, que sabe ella de esas cosas tan asquerosas... ajá! JAJAJA.

- ¿Así? – se acercó a el y le vació el chocolate encima, pasandoselo por los hombros, el cuello y las orejas

- ¡Alkyon quita tus manos! – chilló.

- ¡AAAAH, esto te gusta! (¿¿Que, que? ¿que le gusta?)

- ¡No... no me gusta! – gimió desesperado, pero el roce de sus dedos ya estaban haciendo que de nuevo...

Pero cuando Alkyon vio la cara de satisfacción del chico, lo soltó de inmediato, limpiándose la crema batida y el chocolate

- ¡Oh no! – maldijo el chico al ver que había terminado.

-¡Ya me harte! – dijo Alky y comenzó a quitarse la crema embarrada en su vestido, mientras el otro, respiraba lento y profundo una y otra vez, pero con la visión de la chica, quitándose la crema de las bubis, sentía que el coloso se alzaba de nuevo.

Ella se percato de la mirada media lujuriosilla - ¡Ya se que te gustaría quitármelo con la lengua Malfoy... no puedes negar que estoy, excitante!

- Oye Alkyon... ¿por qué no terminas con... con aquel? – y ella vio al coloso mas despierto que nunca.

- ¡Niño malo, vuélvete a dormir! – le dio Alkyon otro baño con agua fría en sus partes nobles, bajándole un poco las ganas al chico.

- ¡Denevi! ¡No, maldita sea!

Y la chica tomo un balde mas grande de agua helada y se lo tiró encima - ¡Para que se te bajen las ganas! Además necesito quitarte la crema porque ya me empalagué.

- ¡Me las vas a pagar!

- ¡No veo como! – y haciendo un pase mágico, los grilletes se movieron y comenzaron a flotar jalando a Malfoy hasta la mesa en la cual prácticamente se acostó a la fuerza y la chica le puso otras cadenas en los tobillos.

- ¿Y ahora que me harás maldita loca?

- Casi nada

- ¿No te parece que ya tuve suficiente?

- No dragoncito, primorcito... solo es el comienzo.

- ¿Cómo dices?

Alkyon saco otro bote con jarabe de chocolate y la vació encima del pecho y este protesto - ¿Acaso no estabas empalagada?

- De la miel y la crema si, pero no del chocolate – dijo seductoramente y de nuevo comenzó a quitárselo con la lengua, ya la piel pálida del chico había adquirido un color rojizo e inclusive tenia algo de dolor.

- ¡Maldita sea Alkyon, suéltame de inmediato!

- ¡No quiero!

- ¡Suéltame y cuando lo hagas, te voy a hacer mía hasta que grites!

(amenázameeeeeeeeeeeeeee y cumple, pues'n)

Alkyon se chupo el chocolate de la boca y lo miro detenidamente ¿acaso la estaba amenazando? Pero Malfoy estaba demasiado prendido y sentía que explotaría si no lograba tenerla en ese momento ¡era demasiado para el verla tan excitante y no poder ponerle un dedo encima!

- No te pienso soltar – le advirtió.

- Anda Alkyoncita – dijo el chico muy agitado - ¿no ves como me tienes? ¡Te necesito!

Ella se incorporó un poco y notó que sí la necesitaba, bueno, en realidad necesitaba desahogarse con una chica y ella estaba ahí, enseñando media pechonalidad... a punto de picarle los ojos a Malfoy quien se ponía bizco.

Y no se como (Ay nana ni yo lo se, eso si es gravísimo, aunque a veces pienso que ella las aflojo con esa magia interna y sin necesidad de varita) pero de pronto, las cadenas de Malfoy parecieron aflojarse y el pudo desprenderse de ella, abrazando en el acto a Alkyon, a quien la arrojó en la cama y él se le fue encima y acomodándose mientras él era quien ahora le quitaba la combinación de crema y chocolate del amplio escote, haciendo que ella pidiera paz... pero pas, pas, pas... aunque no fue necesario pedirlo.

Porque así como Malfoy andaba, no perdió tiempo y... y pues paso lo que tenía que suceder...ya saben es bien peligroso prender el boiler y no meterse a bañar... eh aquí las consecuencias... ¡Una virtud más, perdida!

Y mientras este le decía cosas sucias como "que buena, que rica y que sabrosa", nuestra ya ahora ex – virgen de las vírgenes, como no recordaba nada de su dizque primera vez, pues se preguntaba una y otra vez si así había sido...

Y le daba pánico patearlo, empujarlo porque entonces, Malfoy tendría mucha razón en decir que no era buena en la cama y cerraba los ojos muy fuerte, aunque por otra parte no podía negar que el besuqueo que el chico le daba en su cuello y en sus bubis no le eran nada desagradables, lo otro... ay, de lo otro mejor ni hablamos.

Cuando Malfoy terminó, tenia una cara de satisfacción que no podía con ella y terminaba de quitarle el estorboso vestido, Denevi parecía una muñeca, toda desmadejada... bueno ya, no tenia ganas ni de moverse, porque su cuerpecito le dolía y más en salva sea la parte.

Draco la recorría de arriba abajo, feliz y satisfecho de poder recorrer el cuerpecito de la chica a sus anchas, ella no tenia ganas de defenderse.

- ¡Oh, Alk eres maravillosa! – le decía el chico extasiado.

- Sí – alcanzo a decir, sintiendo que las piernas le temblaban.

- ¡Aunque no te mueves mucho! – dijo pensativo – ¡Pero eres única!

¿Ya podemos cantar?

Good bye virtud de Alk, good bye...Good bye virtud de Alk, good bye...te vamos a extrañar todas y ella más... ha perdido... a una amiga!

Alkyon pensó que si no moviéndose le dolía ¿qué seria moviéndose? Y debo decir que como las malditas sábanas eran rojas, pues ni pa que viera la prueba de su virtud...

Malfoy la abrazó muy fuerte y le beso los labios, ella se apanicó de solo pensar que él la poseyera de nuevo, pues no creería que pudiera hacerlo otra vez... Pero también, no quería darle pie al chico para que la pusiera en evidencia.

Para su suerte, cuando Malfoy se canso de besuquearla, se quedo dormido entre sus brazos, mientras ella, apenas y podía creer lo que había pasado, hasta donde había llegado con ese juego peligroso.

Para su mala suerte, unas horas mas tarde, Malfoy volvió a ronronearle, a hacerle cariñitos aquí, acullá y mas allá, que por lo menos hicieron que no se tensara tanto cuando la hizo suya nuevamente y esta vez ella se mostró mas cooperadora, sintiéndose por un lado, feliz, cuando Malfoy le decía que ella era la mejor.

Pero si alguien en esos momentos también había perdido la virtud era Ron, quien adormilado y tambaleante, llegaba a su habitación, los chicos ya estaban desesperados porque no llegaba, pero el apenas y los saludo, pasando directamente a su cama, en donde se tiro.

- ¿Qué te pasa Ron, te atacó la logia?

- No – alcanzó a decir.

- ¿Por qué estas tan agotado?

Ron casi se dormía cuando alcanzo a murmurar

- ¡No hagan el amor con estas mujeres, son unas sucias!

- ¿qué?

- Insaciables... pecaminosas... brujas arteras... – murmuraba Ron quedándose dormido – solo les interesa tu cuerpo (JAJAJA)... no hagan nada con ellas... porque quieren co... comerte... no... hagan... nada... (ay si, pobechito)

- ¿Ron?

- ZZZZZZZZ

- ¡Se quedo dormido! ¿Ron?

- ¡¡ZZZZZZZZZZZ! ¿qué le habrá pasado?

- ¡Por lo que escuche, creo que Ron ya es un hombre! – dijo George sonriente, mientras que Ernie, Fred, Paris, Justin, Hayden, Daniel, Anthony y Harry se miraban con desespero.

- ¿Lo habrá echo todo el día? – pregunto Ernie.

- ¡Que aguante! ¿con quien abra sido?

También Alkyon regreso a su celda, pero sus compañeras se habían quedado dormidas esperándola para saber como le había ido.

Al día siguiente, muy temprano, Harry ya estaba listo, pero Ron seguía en la cama, sin querer moverse.

- ¡Arriba Ron!

- ¡No! – gimoteó - ¡Dile a Elektra que se haga cargo de los chicos, yo no puedo ni moverme... estoy cansado!

- ¿Qué hiciste ayer que te desapareciste?

- Una chica me secuestro en su celda y me hizo hacerle el amor hasta el cansancio...

- ¿QUÉ? – casi gritó Harry y lleno de curiosidad se acerco - ¿en serio?

- Harry... aquí entre nos... creo que no volveré a hacerlo por los próximos dos años...

- ¡Guau!

- Estas chicas están locas Harry, si alguna te atrapa en su celda, no te dejara salir sin antes que te haga cochinadas en la cama.

- ¿En serio?

- ¡Amigo... cuídate de Ana, apuesto que te quiere tronar tus huesitos!

Harry se sonrojo, pero la idea de que ella le tronara lo que quisiera ya no le parecía tan mala.

- Pero... pero... ¿todo bien?

- Muy bien – sonrió acordándose de algunas cochinadas.

De pronto, Hayden se asomó en la puerta, mas arreglado que de costumbre y más radiante que nunca.

- ¡Hey Ron, te estan buscando Elektra y Diana para que te encargues de los chicos y ellas lo hacen solas mañana!

- ¿Qué? ¿Porque?

- Están cuidado a una de sus compañeras

- ¿Qué tiene?

- Creo que tiene fiebre, dolor de huesos... supongo que esta resfriada.

- Te ayudo a cuidar al grupo – dijo Harry dejando a Ron, que volvía a dormirse.

En tanto Alkyon estaba envuelta en sus cobijas y al ver a Mariana que había llegado de una diligencia, sonrió tímidamente.

- ¿Te sientes mal Alkyon?

- Creo que tengo fiebre – dijo ella.

- Escucha Alk, nosotros no tenemos entrenamiento de quiddicht, asi que le diré a Sax y Regina que se encarguen de tus actividades...

- ¿No se molestarán?...

- ¡Eso no importa, el caso es que ellas no estén así nada mas! ¿Okey?

- Bueno...

Para cuando Elektra, Sara y Diana se enteraron, no estuvieron sorprendidos - ¿Ron se siente mal?

- Así es chicos...

- También Alkyon... que raro...

Harry y yo estaremos con ustedes - dijo Jhon - así que ustedes fungirán su papel de protectores a ver como lo hacen...

- ¡Bien! – dijeron los chicos, pero en cuanto ellos se distrajeron, Elektra le dijo a Sara un par de cosas.

- ¡Oye Sarita! ¿Acaso la naturaleza del cansancio de Weasley sea porque estuvo encerrado contigo todo el día en tu celda?

- ¡Cállate Elektra! ¿Cómo lo supiste?

- Algunas chicas lo dijeron... pobre chico, no se que cosas le habrás echo..

- ¡Ay si pobrecito le puse la varita en la cabeza y lo amenacé!

- ¿Estas siendo irónica o solo me narras lo que paso?

- ¡Que loca eres Elektra!

- A mi no me engañas...

- ¡Cállate!

Te echaste al prefecto, tu te echaste al prefecto, le tronaste sus huesitos, lo hiciste tuyo, nananana!

Sara ya no dijo nada, pero solo pensaba en su pequitas - ¿estará bien mi pequitas? ¿No estará lastimado? ¡Si no lo mordía muy fuerte! ¡Solo hacia lo que dicen las revistas que Masafumi nos regala! (Hey, hey... ¿morder? ¿Cómo, donde? ¿De que no me entere? ¿Acaso Lee no les regala puro material muggle porno?)

En tanto, en la celda de Alkyon, Malfoy entraba a verla, había dejado sola a Helen y Kath con el pobrecito de Blaise, al que Kath ya estaba viendo bonito, ella se tenso al verlo, sabia para que había entrado ahí.

- Alkyon – se introdujo entre sus sabanas – te necesito...

Comenzó a besarla apasionadamente y se escondió entre las sabanas, y lo único que se pudo ver, fue la ropa que era arrojada de entre las sabanas... de una u otra manera, había que bajarle la fiebre a Alkyon ¿no?

Ah... y las sabanas que se movían y se movían con alegría... he dicho.