Capítulo 52:
Operación... El Síndrome Shakira (ciega, bruta, sorda... pero jamás muda ¿Cómo va ser?)
No pues sí… si
nos anduvieramo embriagando como ellas, en el cole, ya nos hubieran
puesto de patitas en la calle… pero en menos de una hora, ya las
dos andaban hablando aguado y puras tonterías, en la celda de
Diana.
Pero Ana solo hablaba de lo maravilloso que era Harry y que
si era tierno, lindo, increíble, medio guapo, medio ciego (por
las gafas) y medio irremediablemente sexy…
Y Diana decía
que Ian era un bobo, tarado, menso que de nada le valía estar
tan bien si se espantaba por unos besotes, que no era posible que
después de verla tan sexy, ni siquiera se haya animado y ya
andaba pensando en que si era del otro bando, porque no se podía
ser tan tonto en esta vida…
Las apoyo mucho comadres…
Así
que al poco rato, Ana que andaba aquí y allá, y a cada
rato el piso se le acababa, termino en el cuarto de los prefectos, en
donde Harry se había duchado y estaba sexy con el cabello
mojado y sin gafas, y solo traía encima sus jeans y una
camiseta.
-¡Gatito! – sonrió Ana al ver que el
abría la puerta - ¡Uy, tu tan guapo y yo echa un vil
desmadre!
-¿Bebiste? ¡No es posible! (eso ya no es
novedad ¿de que se espanta?)
-¡Solo fue una copita
gatito... no te enojes conmigo... yo te quiero mucho! ¡Epa! –
chilló cuando estuvo a punto de caerse y el la sostuvo.
-Ana,
por Dios – la cargo y la metió a su habitación, la
recostó en la cama y el se acomodo junto a ella, quien se
acomodo en su pecho y ya se andaba durmiendo, Harry se dedico a
acariciarle el cabello mientras sentía el tibio aliento de
ella.
-Harry – murmuro adormilada.
-Dime...
-Nunca me
dejes – dijo suave y pausado, mientras se acomodaba mejor. Harry se
ruborizo demasiado, ese ¡nunca me dejes! Era para ponerse a
pensar, porque a ellos le quedaba poco tiempo ahí, y era
seguro que jamás pondría un pie en ese colegio
nuevamente - ¿Me lo prometes? Tienes que ser mío para
siempre...
Harry no respondió, nunca jamás, ninguna
chica le había dicho que no lo dejara, y ninguna (mejor dicho,
solo Cho) lo había besado como ella, lo había
acariciado como ella, le había tronado sus huesitos con tanto
ímpetu como ella... porque había sido la única
claro...
¡¡Cuanto romanticismo...ché
borracha...!
Y no estaba seguro de sus
sentimientos ¿la quería en verdad o solo era la pasión
y el deseo por lo que ella le daba en esa etapa de las hormonas locas
por la cual pasaba? Si era lo segundo, lo más probable era que
en Hogwarts la olvidara... aunque con ninguna otra chica podría
tener ese tipo de relación...
y hasta pensó que sus
padres jamás habrían esos desfiguros cuando por fin
fueron novios, probablemente James había respetado a Lili
hasta el matrimonio... Pero a Ana no le gustaba respetarlo, al
contrario, todo el tiempo quería andar tirándoselo...¡Cuanta
indecencia!
Y hablando de tirarse a alguien... Diana andaba con el
espejo espía en sus manos, Ian se andaba bañando, y
ella recorría ese cuerpecito de arriba abajo, ya le conocía
hasta las anginas, y como ahora andaba en la onda Choriana, con la
lágrima encendida, maldecía su suerte, cuando Mariana
la encontró.
-¡Ay no, todas menos tu Diana!
¿Espiando?
-Tengo roto el corazón...
-¿Por
qué Diana?
-Porque mi amor no me quiere...
--¿Y
por eso andas fajándote con Franz?
-¿Qué? –
hasta el cuete se le bajo.
-Salió en el periódico
escolar Diana, yo no lo creo, pero por ahi dicen que si andan y se
andaban fajando...
-¡No Mariana! – Se levanto torpemente -
¡yo no ando con Franz! ¡Solo era una trampita por si Ian
reaccionaba pero no sucedió!
-¡Pero...!
-¡Y
no nos fajamos! Solo nos dimos un beso de piquito... el tiene
novia...
-Pues a mi me preocupa que esto le llegue... ¿te
imaginas el lío?
-Todo por culpa de ese niño...
estaba dispuesta a entregarme en cuerpo completo, mi alma, mis
sentimientos, todos eran de el y ahora... ¡Soy una
bruta!
-Diana, tu eres una chica fuerte... ¡Buscate
otro!...
-¡Oh Mariana, duele el amor!
-Pues dicen que
si, al menos el amor físico... – sonrió la
chica.
-¿Eres virgen Mariana?
-¿Tú lo eres
Diana?
Ambas se vieron, asintieron y soltaron las risas.
-¡Somos
las dos últimas castas y puras que han de quedar en nuestros
grupos!
-¿Te imaginas? ¡Que nos pongan en un altar y
nos adoren!
-Así como tengo a Paris – aclaro
Mariana.
-¿En serio?
-¡Claro! ¡lo puse en un
altar para verlo de lejos y no tocarlo nunca!
-¿Cómo?
-¡Duerme
conmigo y no hacemos nada!
-Eso se llama ser lenta y ciega al
100
-Siento que duerme en mi cama por molestar... no soy ninguna
ciega Di... pero creo que pese a todos mis esfuerzos, cuando Paris se
vaya... se olvidara que existo – y comenzó a echar una
lagrimita
-¿Quieres un trago?
-No Di, ahora no porque...
mi mente esta clara... ¿sabes? Paris me gusta, pero no se si
lo suficiente para "eso"… (¡Orale! hasta que Marian pone
el ejemplo, di no al alcohol!)
-Creo que debemos unirnos a la
Logia... ellas no buscan amor, solo satisfacer sus necesidades y
punto...
-Por eso Ana se salió a tiempo – continuo
Mariana – a veces hace falta amor... (Naaaaaaa, ahora si te la
jalaste con esa fracesita)
-¿Y ella lo encontró con
Potter, para mi que no?
¿Sabes que? – Se puso de pie –
Nosotras hemos andado peor de busconas como niños en
confitería... pero creo que los únicos que se han
enamorado son Nenyeina y Hayden
-¿eso crees?
-¡Seamos honestas!
Harry y Ana, Ron y Sara, Alkyon y Malfoy... creo que jamás han
tenido una bonita conversación...
-¿cómo tu?
Tu dices que solo besitos y platicas con Paris... y tu ya te lo
quieres llevar al Box ¿no es envidia?
-¡Claro que
tengo envidia! Pero lo otro es cierto... habrá que preguntarle
a Ana o a Sara si sus noviecitos ya les dijeron que las
quieren...
-Mariana... por lo menos tienes novio... aunque sea por
poco tiempo...
-¡Paris no es mi novio! Y ya se olvidara de
mi cuando se vaya, estoy segura...
-¿ahora si quieres un
trago?
-¡Nada que! ¡Levanta tu maldito trasero, ponte
bella que en este momento haremos una pijamada solo para niñas
en la celda secreta a las nueve! ¡Así que consigue más
licor y chocolates! Yo me encargo de invitar...
-¡No invites
a chicas de la Logia!
-Solo a una, para que suelte la sopa cuando
este jalada...
-Bueno... ¿las prefectas?
-Las quiero a
todas... ¿Y por cierto Ana?
-Andaba buscando a
Harry...
-Entonces deben estar planchando... MMM... bueno,
pongámonos guapas, y salgamos a organizar todo...
Pero las noticias
malas no corren, vuelan, y en la estancia, había llegado una
visita inesperada, y cuando Hayden la vio, su rostro se
ilumino.
-¿Qué haces aquí Susan? – era
Susan Bones.
-Me habían comentado que estaban aquí
unos chicos de Hogwarts – sonrió forzadamente y entre sus
manos tenia apretado el periódico escolar.
-¿Buscas
a alguien?
-Si... a mi novio... bueno... ex - novio... – dijo
entre dientes.
Cuando Nenyeina alcanzaba a su novio con un dulce
de la cafetería, y vio a Susan, también se extrañó,
ella la conocía por foto, ya que Franz tenía una en su
casillero, en su cuaderno, en su espejo y hasta en los cal... No, ahí
no.
-Hayden, por fin te alcanzo… esta chica es…
-¿Eres
de séptimo? – Pregunto Susan, la cual controlaba su ira y
nerviosismo – busco a Franz Agman...
-si claro, tu novio... soy
de sexto, pero lo conozco.
-¿dónde esta? Necesito
hablar con el... pero ya no es mi novio – mostró el
periódico – porque creo que ya tiene otra aquí...
-este...
lo iré a buscar... – dijo Nenyeina y corrió de
inmediato para avisarle. Hayden leyó el periódico.
-¿qué?
– Gimió - ¡Pensé que a esta chica le gustaba
Ian!
-¡Pues le gustaba, ahora anda con mi novio! – Gritó
Susan no pudiendo contener mas su ira - ¿Cómo se atreve
a traicionarme el desgraciado p e r r o m a ldito? (Yo no le conocía
esa boquita a Susan)
Y Poco a poco algunos chismosos se
arremolinaban, sobre todo, los que conocían a Franz. Nenyeina
en su loca carrera se topo con Hugo.
-¡Hugo!
-¿qué
sucede Neny? ¿Por qué la agitación?
-Tu...
tu… tu…tu… tutu… tu cuñada – dijo con dificultad –
en la estancia... busca... hermano... tuyo...
-¿QUÉ?
-Susan
busca a tu hermano, y esta furiosa...
-¡NO, maldición!
Nenyeina, busca a Franz y avísale de inmediato, esta en
Laboratorio de Plantas. Por favor, apúrate, yo tratare de
explicarle...
-¡Bien!
Pero Susan, nada
tierna y rabiosa cual tejón, desproticaba en contra del
desgraciado y pobrecito Franz, que estaba a punto de que lo mandaran
al carajo. Con lo que no contaba, era con que una media alegre Diana,
caminaba directo hacia ellos... y el periódico escolar tenía
una foto de ambos.
-¡Oye prefecto, creo que te anda buscando
uno de tus compañeros! – dijo Diana en tono alegre a
Hayden.
-¡Oh!
Susan le vio un momento, abrió el
periódico y los rostros eran idénticos, por lo que se
le subieron los colores, su rabia se dejo escapar al ver a la maldita
vieja que le avía bajado a su pior es nada, mascota,
etc...
-¡TU! – chilló señalándola,
pero Diana no la conocía.
-¿Yo que? – respondió
media cuete, pues aun estaba media ebria.
-¡TU ERES LA
MALDITA QUITA NOVIOS!
-¿Perdón?
-¡TU ERES
DIANA, LA DESGRACIADA QUE ANDA CON MI NOVIO FRANZ AGMAN!
-Ups... –
tragó saliva, lo que menos esperaba, era que la novia de su
mejor amigo, llegara a hacer reclamaciones...
-Las cosas no son
asi...
-NO ME DIGAS... ¿DÓNDE ESTA ESE
MALDITO?
-Tranquila chica, yo te lo puede explicar – trato de
calmarla Diana, pero una novia celosa es peor que una endemoniada, es
peor que el mismo diablo... bueno, solo un poquitín
menos.
-QUE POCA VERGÜENZA TIENEN, PERO MAS EL POR ANDAR
TRAICIONÁNDOME – se le afrentó Susan.
-¡No
Susan, escúchame, es que las cosas no son como piensas,
cálmate!
-¿QUÉ ME CALME, ME VALE UN CARAJO
LA CALMA!
-Es que hay una explicación, dame cinco minutos y
yo...
-¡TE VOY A DAR TUS
CINCO MINUTOS PERO CON MI PUÑO EN TU CARA M A L DITA QUITA
NOVIOS! – y sin mas, Susan, enfurecida, se le lanzó encima,
tirandole un par de bofetadas y aunque Diana tenia el cabello corto,
ella se lo jaloneo y no tuvo mas que defenderse también.
-¡DALE,
DALE DURO SUSAN, QUE TE QUITARON AL NOVIO! – gritaban unas
chicas
-¡TUPELE, TUPELE DIANA, SACALE LOS DIENTES Y DALE A
ENTENDER QUE ERES MEJOR QUE ELLA!
-¡M A T E N S
EEEEE!
-¡PELEA DE CHICAS, PELEA DE CHICAS, CORRAN LA
VOZ!
-DURO, DURO, DURO, DURO….
-¡R Ó M PANSE LA
CARA PAR DE VIEJAS! – gritaban otros chicos.
-¡APUESTO
CINCO GALEONES A QUE DIANA LA NOQUEA!
-¡YO APUESTO SEIS
GALEONES A QUE GANA LA CHAPARRITA!
-¡VENGAN APUESTAS,
APUESTEN A SU FAVORITA!
-SEIS A UNO A QUE GANA DIANA, LA QUITA
NOVIOS
-¡DIEZ A UNO QUE GANA LA NOVIA ENFURECIDA! –
gritaban los chicos y en pocos minutos, mientras Diana y Susan se
revolcaban en el piso
-¡VOY A SACARTE LOS OJOS D E S G R
ACIADA!
-¿TU Y CUANTAS MAS INSÍPIDA? – Diana ya se
andaba enojando y hacia todo por retener los embates de Susan, quien
había sacado mucha fuerza de no se donde, porque la diferencia
de pesos era demasiado.
Algunos chicos hubieran estado encantados
que fuera una lucha en lodo y ambas en bikini, pero se conformaban
con verlas en el piso, aruñándose, mordiéndose,
jalándose el cabello y magullándose el cuerpo a patadas
y jalones.
-¡ERES UNA M A L D ITA!
-¡SI POR LO
MENOS ME DEJARAS EXPLICARTE! – Y algunos chicos ya les andaban
viendo hasta los calzones...
-¿QUÉ ME VAS A
EXPLICAR? ¿COMO TE FAJAS CON MI NOVIO?
-¡HAY UNA
EXPLICACIÓN PARA ESTO SUSAN! ¡FRANZ ES SOLO MI
AMIGO!
-¿CREES QUE SOY T O N TA? – a esas alturas ya
había sangre, pero no se sabia quien había salpicado a
quien... pero ninguno las separaba. Y los demás seguían
apostando, Susan ganaba en los porcentajes.
Hasta que George
apareció con Ernie - ¿qué pasa aquí? ¿Por
qué no las separan?
-¿Estas loco? – Dijo un chico
- ¡quien quiere recibir un derechazo de esas fieras!
-¡Pero
se están lastimando! ¡Por Dios! ¿No es Susan
Bones? – gruñó Ernie.
-¡Hay que separarlas!
– exigió George y jalo a Ernie para que lo ayudara.
También,
llegaban, el resto de chicos (por Harry ni pregunten) y ALkyon junto
con Ron Y Elektra... y atrás de ellos, Malfoy.
-¿Qué
pa...? ¿No es esa Susan Bones peleandose con Diana? –
pregunto Ron y recibió un zape de Elektra.
-¡Sepárenlas!
– Chilló Elektra - ¡por favor! ¿Qué
espectáculo es ese?
George jaló a Diana, ya que la
sostendría mejor, Ernie se encargo de Susan y ambas aun se
pateaban en el aire.
-¡MALDITA, TE ODIO, TE ODIO!
-¡PUES
EL SENTIMIENTO ES MUTUO!
-¡TE VOY A MATAR!
-¡SI ME
DEJO!
-¡BASTA! – Gritó George - ¡Cálmense!
¿Qué creen que hacen?
-¡Esta desgraciada me
bajo a mi novio y le estoy rompiendo la cara! – gruñó
Susan, cuya larga trenza, ya estaba desecha y tenia morado una
mejilla, un ojo y algunos arañazos. Pero Diana sangraba de un
labio, estaba arañada, despeinada y hasta la borrachera se le
había quitado.
-¡pero las cosas no se arreglan
asi!
-¡CLARO QUE NO! – gritó Susan –¡VOY A
MATAR A ESTOS DESGRACIADOS!
Y hablando de desgraciados, Hugo
llegaba corriendo casi seguido de Franz, y cuando las vieron como
perros rabiosos, supieron que el pleito había sido
inevitable.
-TUUUU – chilló Susan – TRAIDOR
Franz no
respondió, mirando a Susan y a Diana, su peor pesadilla se
había vuelto realidad.
-¡FRANZ NO ES UN TRAIDOR! –
Grito Diana -¡EL NO TIENE LA CULPA DE LO QUE YO LE
PEDI!
-¿ACASO LE PEDISTE UN FAJE, "POR FAVOR" A ESTE
MAL NOVIO?
-NOOOOO – volvió a gritar – ¡FRANZ Y
YO NO SOMOS NOVIOS, NUNCA LO HEMOS SIDO, TODO FUE MENTIRA!
-¿Y
PIENSAS QUE TE VOY A CREER?
-¡FRANZ ES SOLO MI AMIGO! ¡ERA
UN FAVOR ESPECIAL QUE FINGIERA SER MI NOVIO!
-¿Y PORQUE
HARIA ESO? – Exigió Susan.
-¡POR EL TONTO DE IAN! –
Rompió a llorar - ¡QUERIA DARLE CELOS CON FRANZ, PERO DE
HABER SABIDO QUE TENDRÍA PROBLEMAS, SE LO HUBIERA PEDIDO A
HUGO!
-¿CELOS A IAN? – gruñó Susan y lo
miro, el chico estaba pálido.
-¡pero besaste a Franz!
– se adelanto Dana, quien había escrito el artículo.
-¡SOLO
FUE UN BESO DE PIQUITO, NINGUNO ABRIO LA MALDITA BOCA! ¿ACASO
NO TE DISTE CUENTA?
-¡Ya decía yo que eso era
mentira! – exclamó Dana, muy molesta. El que permanecía
callado era Franz.
-¡SOLO QUERIA DARLE
CELOS A IAN... PORQUE SOY UNA TONTA! – chillaba Diana y Hugo se
adelanto para abrazarla. El resto de los chicos quedaron
mudos.
-Diana es como nuestra hermana Susan – dijo Hugo – es
nuestra niña grandota... el único error fue no
ofrecerme yo mismo para esta locura...
-¡Solo bese de
piquito a Franz! – Gemía la otra - ¡y por poco nos
vomitamos porque somos como hermanos!
-Es verdad Susan... todo fue
un teatro que ella invento para darle celos a un...- y Hugo tuvo que
tragarse sus palabras para no ofenderlos.
-Franz... ¡di
algo! – urgió Dana.
-No – respondió medio
decepcionado – bueno... solo que... nunca pensé que haría
algo así en medio de la estancia... algo tan ridículo...
soy culpable de prestarme al juego pero... esto fue demasiado...
¡debiste hablar conmigo Susan, antes de cometer esta e s t u p
i d e z!
Franz dolido, se dio la vuelta y se alejo de ahí,
sin decir más nada... Hugo se llevo abrazada a Diana, dejando
a Susan, confundida...
