Muchas gracias a todo por lo reviews me ponen muy contenta, no se preocupen aun falta mucho mas que decir sobre este hombre, ahora sabran mas ;). Se que los caps son cortos pero lo quiero hacer durar!

El costoso auto, un descapotable rojo furioso, iba a tal velocidad que no se distinguían las calles ni los altos edificios, los otros autos iban perdiéndose a medida que la conductora los iba dejando atrás. Sus cabellos rubios danzaban sin control por el fuerte viento y el pañuelo de su acompañante salió volando sin que este pudiera preverlo.

¿No es peligrosa esta velocidad? – Preguntó Paul, el acompañante, preso del miedo.

No pude terminar de contarles la historia de Hiroshi Katsumoto- Gritó, debido al viento, como respuesta Hevn.- Este hombre no es un hombre común, a la mujer que desee la condena a vivir para siempre con él, si esta se distancia tan solo 10 pasos perderá el aire, lo que la conducirá a la muerte. Seguro piensas que deben haber muerto cientos de mujeres a su costa, lo cierto es que este hombre no desea como alguien normal, luego de la primera mujer que él quiso, buscara a una a su semejanza, solo a las que se parezcan las deseara realmente. Nahuri murió por supuesto, ella no lo amaba y no era conciente del peligro al que se exponía al acercarse a él. En cambio, la mujer que desposó era por un arreglo matrimonial entre mafias, así que el aún está buscando a aquella que le recuerde a Nahuri, la única que le causo a él deseo… Y al parecer encontró en Natsumi a aquella mujer.

Oh no, debemos alarmar a Ban y Ginji, ellos no son concientes y lo más seguro es que se la lleven y …- Paul cortó sus palabras repentinamente preso de una idea nueva que lo asaltó.- Natsumi deberá estar con él toda su vida?

Puede ser pero yo creo que hay otra manera de solucionar esto, una manera que obviamente el no querrá decírnosla, pero debemos sacársela a la fuerza.

Ambos callaron, ya no había nada que decir, simplemente debían concentrarse en llegar a la casa del hombre. El viento debido a la velocidad les dificultaba la charla. Repentinamente una duda asaltó nuevamente la mente de Paul, quien no dudo en ponerla en evidencia en una voz muy fuerte.

¿Y por qué crees que hay una forma?-

Por que no te mencione a otra mujer que se salvó de la maldición del deseo, ella era de características similares a Nahuri y a Natsumi, Hiroshi me hablo de ella. Esta no se quedo con él pero tampoco murió de asfixia, Hiroshi mencionó algo sobre los sueños pero simplemente lanzó esa palabra al aire. El dijo: "Ella era sin duda bella, Naomi Kusanagi…Sueña conmigo".- Hevn hizo una pausa, la garganta le dolía de tanto gritar- Creo que esto último era una especie de clave…Y creo que Ban puede ayudarnos con esto, el sabe sobre sueños, pero debemos llegar a tiempo…

Mientras tanto, en una oscura habitación oscilaban tres personajes: Ban Midou, Natsumi Mizuki y Hiroshi Katsumoto. Ban estaba delante de Natsumi, esta le sujetaba la camisa, atemorizada. Hiroshi ya había recuperado el conocimiento a una velocidad asombrosa y ahora les negaba la salida.

No te conviene alejarte de mi niña.- Dijo acercándose peligrosamente. – Nadie te contó sobre un detallito al parecer…Ahora que te deseo si te alejas a mas de 10 pasos de mi morirás de asfixia, soñarás que te acercó y te agarró con tanta fuerza que te quitó el aire…morirás en sueños, aquí mismo.

Eso no puede ser cierto.- Musitó Ban. Natsumi no podía decir nada, asimilaba lentamente los datos recién obtenidos. Hasta hace una hora era solamente una adolescente sin madre con un trabajo de medio turno, una vida difícil y mucha tarea acumulada. Ahora todo eso era parte de un pasado, parecían simples nimiedades ahora que la muerte se le aproximaba.

¿Qué dices…? O vives conmigo, o mueres soñando conmigo.- Ninguna de las ofertas eran tentadoras, aún menos saliendo de la boca de aquel anciano pedofilo, perverso y mafioso. Natsumi meditaba, no sabía que pensar, en realidad no estaba decidiendo por una opción, se negaba a aceptar ninguna, solamente estaba esperando que algo milagroso ocurra que la salve de esta situación.

Ninguna de las dos…- Ban respondió por Natsumi.- Yo…yo lo siento no deseo responder por ti pero ambas son inaceptables, debe haber algo, algo que te salve.

Estar conmigo para siempre, nos casaremos y no te separas de mi nunca, incluso cuando yo muera te quedarás cerca de mis sepulcro.- El anciano no cesaba de lastimarla con sus palabras, cada explicación del futuro que le esperaba junto a él era como una punzada en medio de su alma, lastimaba cada esperaza que jamás hubiera tenido de formar una hermosa familia. Una imagen de ella junto a Ban y miles de pequeños asaltó su mente. Pero recordó que Ban no la amaba y que ella o moriría o pasaría toda su existencia junto a un viejo o mejor dicho junto a sus futuros restos.

NO- Gritó al imaginarse cumpliendo cualquiera de las dos opciones- No pienso morir de esta forma y me niego a pasar mi vida con alguien que no amo.- Lagrimas comenzaron a manar de sus ojos grises, su sensibilidad llegó a tal extremo que imágenes de su madre comenzaron a formar parte ante sus ojos. Sintió como alguien la abrazaba de un modo como nunca antes la habían abrazado antes, al principio pensó que era Katsumoto, pero luego sintió como el calor provenía del cuerpo de Ban.

Yo lo siento…Pero es que desearía tanto que me quisieras, no puedo ir contra eso, y tampoco puedo explicarte por que es que la razón que te puede salvar esta junto a ti.- Tras pronunciar esas palabras con una fuerza anormal para un hombre de edad anciana tomó a Ban por el cuello y lo oprimió contra la pared.

Por hombres como tu es por los que siempre he perdido a quien desee. Hombres que se sienten héroes, apuestos y decididos. Te odio y odio a todos los que son como tu. Siempre las mujeres se enamoran de esa clase de jóvenes. Siempre. Natsumi enrojeció, Ban a pesar de la pérdida de aire ganó un intenso rojo en las mejillas. Un estruendo se oyó que interrumpió la escena. La pared de la habitación se deshizo en mil pedazos debido a un auto rojo descapotable. La rubia conductora se bajo de este y también su peculiar acompañante. Debido a la confusión Hiroshi soltó a su presa y Ban cayó al suelo con un ataque de tos pero recuperando el aire paulatinamente.

Ban debemos alejar a Natsumi de este hombre, ya se como salvarla.- Gritó Hevn mientras todos corrían hacia fuera, Natsumi ayudando al ahogado Ban.

Diez pasos habían sido caminados, Antes de que Natsumi cayera en un sueño casi inconciente pudo escuchar como Ban musitaba que el también sabia como salvar a la joven camarera.