disclaimer: Harry Potter no me pertenence
perdonen la tardanza. Espero les guste este nuevo capítulo. el final ya esta listo.
Capítulo 5
"¿Te pasa algo, Draco?" Le preguntó Pansy, preocupada
"Estoy preocupado. Han pasado tres meses, y con cada día Valentine y Nina se unen más. ¿Qué pasaría si se separan, Valentine podría morir y ahora si no podría soportar perderla. Ahora que sé como es el sonido de su risa, la luz que emana de sus ojos…No Pansy, no sobreviviría"
"Me parece que has pasado mucho tiempo pensando en esto" dijo Pansy, muy triste por verlo en ese estado
"Sí. Yo quiero ver crecer a mi hija. Quiero verla dar sus primeros pasos, escuchar su la primera palabra que diga. Quiero estar junto a ella cuando reciba su carta de Hogwarts. ¡Quiero verla vivir, Pansy!" dijo Draco, llorando.
"Lo sé, Drake. Pero debes ser fuerte, ya verás que todo se resolverá para bien. Estoy segura que Nina es una mujer muy buena y no va hacer nada que dañe a Hermione" lo consoló la jovencita.
"¿Por qué siempre la llamas Hermione?" preguntó Malfoy
"Porqué me parece un nombre muy bello" respondió Pansy. "Pero estábamos hablando de Nina"
"Claro, Pansy lo que tu digas" dijo sin creerle "¿te ha hablado Carlo de ella?"
"únicamente que tiene nuestra edad, casi diecinueve años, que es muy inteligente y noble. También parece ser que es muy poderosa aunque ni ella misma lo sepa. Nadie sabe de dónde viene, ni quién es en verdad. Carlo y Lucy dicen que apareció un día en la puerta del hospital, sólo traía unas cuantas pertenencias con ella, pero nada que indicara su verdadera identidad" explicó Pansy.
"Necesito hablar con ella. Carlo dijo que hoy podría conocerla, pero tengo miedo y no sé a qué hora Carlo nos presentará"
"¿Miedo de qué, Draco? No puede ser que le tengas miedo a una persona que lo único que ha hecho es darle amor a tu hija. Ve al hospital y habla con ella. No esperes a que Carlo te diga la hora." dijo Pansy, saliendo del cuarto.
Draco quedó pensativo en medio de su habitación. Su amiga tenía razón, sería más fácil si solo se presentara ante ella y le dijera quién era él. Sí, eso iba hacer, y con este último pensamiento salió de la habitación con sus capas ondeando detrás de él, y sus pensamientos fijos en la mujer que quería a su hija como si fuera su verdadera madre.
Por su parte, Nina estaba preocupada, Lucy no había ido por la niña a su habitación, lo que quería decir que su padre no había llegado. Se puso un poco nerviosa al pensar que el señor Malfoy hubiese podido abandonar a su hija como lo había hecho su madre.
"No lo creo" susurró, admirando las orquídeas salvajes.
al llegar al hospital, Draco, había preguntado a una de las enfermeras quién era y dónde estaba Nina Cordetto. Ésta le había dicho que ella y Valentine estaban en el jardín, en un pequeño kiosco que había en medio de dos robles antiguos justo a la entrada del bosque.
"Sólo tiene que seguir el sendero, lo llevará directamente al kiosco" explicabala enfermera.
Draco hizo lo que le había indicadola joven. Cuando estaba cerca del kiosco se detuvo para tomar un poco de aire y observar la imagen que tenía enfrente.
"Mira, Valentine que hermosas están las flores esta mañana" decía Nina, señalando los hermosos jazmines y las orquídeas que rodeaban el kiosco. "Y huelen delicioso"
Draco estaba impactado con la dulzura que tenía la voz de aquella misteriosa mujer. Adelantándose unos pasos hacia ellas dijo:
"Yo conozco a otra persona que ama los jazmines. Apuesto a que también amaría estas orquídeas tanto como usted" dijo sin mirar a la sorprendida mujer. Podía sentir que sus ojos fijos en él.
"Usted debe ser Draco" dijo Nina, mirándolo fijamente.
El joven volteó a verla, pero al encontrarse con los brillantes ojos avellanos que lo miraban con dulzura, no pudo pronunciar palabra
"Lo digo porqué tiene el mismo color de cabellos que Valentine, y por lo que puedo ver también comparten el mismo color de ojos. Además, en más de una ocasión he escuchado su voz a través de los cristales" dijo con una gran sonrisa.
"sí, yo soy el padre de Hermione" balbuceó Draco Malfoy, sin poder evitar que el corazón se le acelerara ante aquella gran mujer.
"Yo soy Nina, Nina Cordetto" dijo, extendiendo su mano. Draco la tomó con miedo.
"Es un placer poder al fin conocerla, Nina" dijo, todavía muy nervioso.
"Para mi también es un placer" respondió Nina sin saber como actuar ante aquel joven de mirada penetrante "Le estaba enseñando a Valentine lo hermosas que están hoy las flores. Parece que le gustan mucho" dijo, besando las mejillas sonrosadas de la pequeña. A Draco se le aguaron los ojos al ver el gesto de amor de Nina para con su hija. "me parece maravillosa la forma en que las orquídeas crecen salvajemente mezclándose con los jazmines y otras flores que también parecen crecer de la nada. Imagino que ha de ser algún tipo de hechizo, o tal vez el bosque guarde cierta magia entre sus rincones y, algo de ella se pase al hospital" dijo admirando las hermosas orquídeas. Tratando en vano de parecer calmada
"Creo que usted tiene mucha razón. Y También creo que a mi pequeña le hace mucho bien estar a su lado, Nina" dijo Draco. Nina sonrió de nuevo.
"A mí también" respondió ella. "¿Quiere cargarla?"
"No, me gusta verla con usted" dijo sin pensarlo. Nina se ruborizó al escuchar sus palabras. Sentía como la mirada gris del joven se fijaba sobre su figura.
"¿Draco?; ¿Creí que vendrías más tarde?" dijo Carlo, interrumpiendo el embarazoso momento.
"Me cansé de esperar tu nota" respondió Draco
"Bueno, eso ya no importa ¿Han hablado de Valentine?"
"No, Carlo. El señor Malfoy acaba de llegar."
"Por favor, dígame Draco. Soy muy joven para tantas formalidades" dijo Draco. Y no era para menos, apenas tenía diecinueve años, y estaba más que seguro que Nina tenía la misma edad.
"Esta bien, Draco" dijo, con timidez. A Draco se le alegró el corazón al escucharla pronunciar su nombre 'al fin' pensó en silencio.
"Nina, Draco esta preocupado por el futuro de Valentine" dijo Carlo, sentándose en una de las sillas del kiosco.
"Ya lo sé, Carlo. Yo también he estado muy inquieta pensando en la mejor forma de seguir con nuestras vidas sin causar molestias" dijo Nina, jugando con los cabellos platinados de Valentine.
"Yo tampoco quiero incomodar su vida o interrumpir en su privacidad" dijo Draco
"No se preocupe, Draco, como sabrá mi vida no es muy clara por los momentos. El único hogar que tengo es este hospital y su personal es mi familia. Y me imagino que usted esta ansioso por llevarse a Valentine con usted a su casa" dijo llena de pesar. "Yo soy la que causa inconvenientes"
"Nunca vuelva a decir eso, Nina ¿O es que acaso no entiende que Valentine y yo no podríamos vivir sin usted? En especial mi pequeña. Usted es la fuente de su vida" dijo Draco, enojado con la vida por olvidarse de aquella maravillosa mujer.
Carlo lo miraba sorprendido. No podía creer que el gran Draco Malfoy, heredero de la vasta fortuna de los Malfoy, pudiera estarle entregando el alma a una mujer que miraba por primera vez. Sin duda los años no indicaban la madurez que una persona pudiera tener, en cambio, las vicisitudes de la vida sí hacían la diferencia. También se preguntaba si Draco estaba al tanto de la forma vehemente en la que hablaba.
"Agradezco sus palabras, Draco" dijo Nina, llorando. "Pero no entiendo cómo podríamos resolver nuestro dilema" Draco se quedó callado.
"Yo tengo la solución perfecta" interrumpió Pansy Parkinson que había escuchado toda la conversación. La joven Slytherin se había quedado muy preocupada por Draco, temía que éste se arrepintiera de ir en busca de Nina y ella lo había seguido con el fin de asegurarse que su viejo amigo no se echara para atrás.
"¡Pansy!" exclamó Draco.
"Perdóname, Drake; pero quería aseverarme que cumplieras tus palabras" respondió la joven "Hola, yo soy Pansy Parkinson. Una vieja amiga de Draco" dijo, estrechando la mano que Nina le ofrecía amistosamente.
"Ahora que la gran dama de Slytherin se ha presentado. Nos quieres decir tu solución" dijo Carlo, divertido por la actitud de la chica.
"Es fácil, Carlo. Nina debe irse a vivir con Draco y Valentine a la mansión Malfoy" dijo, sin andar con rodeos. Draco la miró horrorizado.
"No es mala idea. Tú, Nina, no puedes quedarte en este hospital toda la vida, y mucho menos Valentine. Estoy seguro que con el tiempo irás recobrando tus memorias ¿Qué dices tú, Draco?"
"Creo que la que tiene que decidir es Nina" respondió, mirando con dureza a Pansy quien no se atrevía a mirarlo, adivinando su enfado. Pero ella deseaba lo mejor para él. Y desde que había visto el brillo extraño en los ojos grises de su amigo al ver a la mujer que era Nina, se había propuesto ayudarlo. Ahora todo era diferente, ya no había rivalidades que se interpusieran en su camino.
"Jamás podría imponerle mi presencia en su casa" dijo, sonrojándose
"No diga eso. Usted jamás estaría de más. Por favor, acepte venir a vivir conmigo. De esa forma Valentine no se separaría nunca de usted" suplicó Draco.
"Si no es molestia, encantada, señor Malfoy. Nada me haría más dichosa que estar siempre con Valentine" Draco sonrió grandemente al saber que ella estaría con ellos de ahora en adelante.
"¡Fabuloso!" gritó Pansy, emocionada. Nina la miraba divertida por actitud infantil.
"Pero primero le pediré a Blaise que nos reciba en su casa. Necesito hacer unas cuantas modificaciones en la mansión, después de la guerra quedó muy deteriorada" Pansy lo miró con recelo. Se preguntaba de qué diablos estaba hablando.
"Tú sabes que no tienes ni que pedírmelo" dijo Blaise, acercándose a su amigo desde atrás. "No pude resistirme cuando Pansy me dijo que te seguiría hasta aquí" explicó con gran sonrisa.
"Ya se me hacía raro que tú no estuvieras cerca" opinó Carlo. "¿Pero por qué no te acercaste cuando Pansy lo hizo?"
"Necesitaba reponerme" dijo Blaise, mirando con ojos llenos de complicidad a Draco.
"Las casualidades de la vida son muy grandes ¿no, Blaise?"
"Las casualidades no existen, sólo lo inevitable, Draco" respondió Blaise.
"¿Qué les pasa a ustedes dos?" dijo Carlo, intrigado
"La curiosidad mató al gato, hermanito" respondió Blaise. Carlo hizo un gesto desganado.
Nina lo miró extrañada
"Perdone mi descortesía. Mi nombre es Blaise Zabini" dijo besando la mano de Nina. "Es un honor besar la mano de la Heroína más grande de…" Draco y Pansy dejaron de respirar al ver la acción de Blaise "…de nuestras vidas. Gracias por salvarnos…a nuestra pequeña princesa" terminó diciendo. Nina sintió que las palabras del joven que tenía enfrente guardaban un mensaje secreto, pero no podía descifrarlas.
"Gracias" dijo, sin dejar de ver sus hermosos rasgos morenos.
"Blaise¿podría hablarte un segundo?" dijo Draco, con seriedad. Blaise le hizo un gesto afirmativo y lo siguió.
"¿Qué creías que estabas haciendo?" le reclamó, alterado cuando estuvieron lo suficientemente alejados del kiosco.
"Cálmate, Draco. Siempre quise agradecerle de una u otra forma. No creo que Carlo o ella hayan pensado otra cosa. Como dicen por ahí: 'los ojos ven lo que la mente sabe' y creo que con tu actitud eres el que más esta dando de que hablar" dijo, sonriendo. "Mejor tranquilízate y dime qué es eso de los cambios a la Mansión. Si está en perfectas condiciones"
"Blaise ¿En serio crees que yo podría llevarla a esa casa?; ¿A ella especialmente?; ¡Jamás! La mansión es un monumento a las artes oscuras. Un recordatorio del reino de Voldemort y sus seguidores. Ella no pertenece a ese mundo. Ella es toda luz y pureza. Sería un sacrilegio llevarla a esa casa. Si quiero tenerla conmigo, es necesario que la remodele. Y si para eso necesito derribarla y construirla de nuevo, lo voy hacer" dijo, muy resuelto.
"No seas dramático, Malfoy. Sabes muy bien que con nuestra magia combinada en un mes la tendremos lista para la llegada de su nueva dueña" dijo, sabiendo muy bien que Draco se sentiría avergonzado.
"No eres nada divertido, Zabini" contestó Draco, rojo de la vergüenza. Blaise conocía muy bien aquel brillo en los ojos de su amigo. Lo tenía desde hacía un año, cuando empezó a trabajar para la orden.
Desde el kiosco Nina miraba al joven señor Malfoy sin perder ninguno de sus movimientos. No sabía por qué, pero cada uno de sus gestos le parecía muy familiar. Algo en él le recordaba a alguien, de eso estaba segura. 'Tal vez no sería mala idea formar una familia con él'
"¿Familia?; ¿En qué estoy pensando?" dijo Nina, sin percatarse que lo había dicho en voz alta.
"¿Has dicho algo, Nina?" preguntó Carlo.
"No, no es nada. Sólo pensaba en voz alta" dijo, nerviosa.
Pero la sonrisa maliciosa en la cara de Pansy le decía que sus palabras no habían pasado del todo desapercibidas.
"me va encantar tenerte cercar, Nina" dijo Pansy, muy amable. Como Nina lo había supuesto la joven había escuchado sus palabras y descubierto su significado. Pero no quería asustarla ni mucho menos alejarla de sus vidas. Sólo ellos sabían muy bien lo reconfortante que sería para el grupo de Slytherin tenerla cerca.
"Gracias, Pansy" dijo, apretando la mano elegante de Pansy.
'No cabía duda que la vida tiene sus artimañas' pensó Pansy.
XXX XXX XXX
Dos semanas después Nina y Valentine se mudaron a la mansión Zabini. Pansy había preparado el ala derecha de la villa para ellas y Draco.
"¿No crees que ella se molestará por qué yo viva aquí con ellas?" dijo Draco, lleno de dudas.
"No seas tonto, Drake. A Nina no le importará" contestó Pansy, dándole los últimos toques a la habitación de Nina "además, no es como si ustedes fueran a dormir juntos. Ella tendrá su propia habitación y tú la tuya. Claro estarán conectadas por la recámara de Valentine, pero no creo que eso sea mayor problema"
"Eso espero" dijo Draco, admirando el grandioso trabajo de decoración que había hecho su amiga. "Has hecho un buen trabajo. Espero que me ayudes en la mansión"
"Claro, eso no tienes ni que preguntarlo. Creo que la pasaré muy bien ayudándote, además será una gran oportunidad para acercarme a Nina"
"¿A qué te refieres?"
"Obvio, Drake. Nina tiene que decorar la casa que será suya de ahora en adelante" dijo, sonriendo maliciosamente
"No empieces" le advirtió Draco
"¿No te gustaría formar una verdadera familia con ella?" le preguntó la joven
"Sabes que sí, pero ella pertenece a otro mundo" dijo muy triste.
Pansy lo miró salir cabizbajo de la habitación y dirigirse al jardín donde los demás chicos lo esperaban.
"No deberías presionarlo tanto, cielo" dijo Marcus, abrazándola desde atrás.
"Sólo quiero que sea feliz, Marcus ¿es eso malo?" dijo, volteándose en los brazos de su prometido.
"No, mi dulce niña, pero tienes que entender que para él ella siempre estuvo en otro nivel. Y hasta hace unos meses ella era inalcanzable, es obvio que ahora que siente que al fin la puede tener, tenga un poco de miedo y se sienta renuente a aceptar el hecho de que esté perdidamente enamorado de ella"
"No sabía que fueras tan perspicaz. Marcus Flint"
"Mi niña, pude haber repetido un año pero eso no me hace tonto, Tan sólo un adicto al Quidditch" dijo, besándola.
"No me recuerdes que casi te mato cuando supe que la única razón por la que no pasaste ese año fue porqué pensaste que no había nadie capaz de ocupar tu puesto de capitán" dijo Pansy, cruzando sus brazos.
"Esa fue una de las razones. La otra la sabes muy bien: mis padres y Voldemort. Yo no quería pertenecer al lado oscuro y mucho menos con tan solo diecisiete años. El haberme aplazado me ayudó mucho porqué por tal motivo fui rechazado por Voldemort. No era apto para entrar en sus filas. Y no tuve más remedio que irme a estudiar a Alemania. Los mejores años de mi vida. Sin nadie que me dijera lo que tenía que hacer o no hacer. Lo único malo es que tenía que estar lejos de ti. Pero al final valió la pena esperarte, mi niña" dijo, con amor.
"Te amo" respondió Pansy, empinándose para poder besarlo.
"Espero que no estemos interrumpiendo nada" dijo Blaise, haciendo un sonido con su garganta. Pansy se escondió en el pecho de Marcus para esconder el rubor de sus mejillas.
"No te preocupes, Zabini, que todavía no habíamos alcanzado esos niveles" respondió Marcus. Pansy no podía creer lo que había dicho su novio.
"Y ni los vamos alcanzar, caballero" dijo Pansy, alejándose de Marcus. "Me alegra que hayas llegado Nina. ¿Te gustan tus habitaciones?" dijo girando en sus pies.
"Son muy bonitas y cómodas. Te agradezco que hayas pasado por tantas molestias, Pansy" respondió Nina.
"Ni lo menciones. Para mi decorar no es una carga, es una pasión" respondió la joven.
"De todas formas gracias" dijo Nina, entre sonrisas.
"Deja que los elfos arreglen tus cosas, Nina" dijo Blaise.
"No es necesario. Yo puedo hacerlo. No tengo muchas cosas solo unos cuantos vestidos nada más" dijo Nina.
"Pues entonces tendremos que irnos de compras, Nina. Draco espero que seas generoso" dijo Pansy, extendiendo la palma de su mano.
"¡Oh no, por favor! Eso si que no es necesario. Me las he arreglado muy bien con los pocos vestidos que tengo. No tiene porque gastar su dinero, Draco" dijo Nina, haciendo un gesto con su mano.
"No es ninguna molestia. Pansy tienes poder absoluto sobre mi bóveda. Cómprale todo lo que Nina necesite, y que sea de la mejor calidad. De ahora en adelante yo me haré cargo de tí" dijo Draco, extendiéndole una llave muy antigua a su amiga.
"¡Fabuloso!" dijo Pansy, aplaudiendo. Nina le agradeció en silencio a Draco quien la miró embelesado mientras Pansy hacía planes con el tiempo de Nina para el día siguiente.
XXX XXX XXX
Un mes después la remodelación total de la mansión Malfoy había sido completada. Y El cambio era impresionante, atrás habían quedado sus pasillos lúgubres y fríos, junto con sus calabozos que le ponían la piel de gallina a cualquiera. Y los colores oscuros y opacos, diferenciaban mucho de los claros que ahora adornaban cada una de sus habitaciones. Dándole a cada una un toque de calor y tranquilidad muy necesaria en una casa familiar.
Draco no había estimado en nada para lograr que la casa luciera lo más bella posible para Nina. Claro él no se atrevía ni a insinuar su deseo de convertirla en su esposa, tenía pánico al solo pensar que ella se pudiera ir al saber sus verdaderas intenciones, así que se conformaba a callar y a cumplir cada uno de los gustos de Nina, que tan bondadosamente Pansy le contaba.
"Creo que este es una de mis habitaciones favoritas. Se ve que no escatimaste a la hora de construir y decorarlo, Draco" dijo Marcus, impresionado.
"Lo que indica que Pansy es muy buena en el arte de decorar" dijo Blaise
"Temo decirte que esta vez mi mente no fue la creadora de esta obra maestra" dijo Pansy, entrando por una de las hermosas puertas francesas que conectaban la habitación con el jardín.
"¿A qué te refieres, cielo?" preguntó Marcus, sorprendido por sus palabras.
"Yo lo único que hice fue decirle a Draco todo lo que Nina me decía en secreto, y mi eficiente amigo lo hacía realidad" explicó Pansy. "Y debo decirte que hiciste un espléndido trabajo. Nina va a adorar esta habitación"
"halla sido como halla sido, Nina ama la música y esta sala es toda música" expresó Blaise
Draco rogó por que sus amigos tuvieran razón y Nina de verdad se enamora del salón de música que con tanto amor había preparado para ella. Y como Pansy había dicho, él solo lo había levantado siguiendo los deseos de Nina, desde la pintura Celeste que había usado en sus paredes que hacían juego con las delicadas cortinas blancas que decoraban las cuatro puertas francesas de la habitación, hasta cada uno de los mueblas de ésta, junto con el protagonista de la habitación: el piano blanco que Draco había hecho construir para su amada.
"Merlín quiera y a Nina le guste" suspiró Draco
"No te preocupes, le va encantar. A mi me gusta" dijo Adrian "Y si no, aún te queda la biblioteca que le hiciste, o el jardín, o el salón de baile, o toda la casa" dijo bromeando. Todos excepto Draco se rieron de la ocurrencia de Adrian.
"¡Vamos, Draco! Solo fue una broma" dijo Theodore, posando su mano en el hombro de Draco.
"Por que mejor no vas en busca de Nina a la villa y la traes acá para mostrarle el producto final." dijo Pansy.
"Puedes empezar por los jardines" dijo Blaise
"Esa es una buena idea. Los jardines son increíbles, te aseguro que Pansy y yo pasaremos muchas horas en ellos" dijo Marcus, con sonrisa pícara logrando que las mejillas de su novia se tornaran magenta.
"Y yo que creí que mi primita amaba la biblioteca" Dijo Adrian
"¡Cállense!; Draco ve por Nina, y en cuanto a ustedes más les vale no estar aquí cuando regrese de dejar estas orquídeas en la recámara de Nina o les aseguro que ninguna de los antídotos conocidos los van a salvar de una muerte lenta y dolorosa" dijo Pansy, saliendo, con el enorme flotando detrás de ella, de la habitación
"¿Creen que hablaba en serio?" preguntó Theodore, mirando la puerta por donde había desaparecido su amiga.
"No sé ustedes pero yo no quiero quedarme para descubrirlo. Ya saben lo que dicen: una vez Slytherin, siempre una Slytherin" respondió Blaise, desapareciendo en un abrir y cerrar de ojos de la habitación.
"Creo que todos nos dirigimos a la Villa, entonces" dijo Draco, imitando la acción de Blaise. Marcus y Adrian no tardaron ni un segundo en hacer lo mismo, y mas les valió porqué Pansy regresó sólo unos segundos después que ellos desaparecieron.
"Cobardes" dijo con una mueca maliciosa "Aunque tengo que admitir que Marcus tenía razón"
