CAPITULO 14
"Esto no esta pasando..."
Willy presionaba insistentemente el boton del ascensor, pero este no aparecía, el de inmediato se imagino que Gabrielle lo había trabado o atorado con algo.
-Maldita sea! – maldijo, no era normal que dijera ese tipo de cosas pero estaba desesperado.
Se alejo del lugar donde se abordaba el ascensor y empezó a caminar por el cuarto de inventos, Willy vio un oompa loompa y se acerco a preguntarle si había visto a Gabrielle, pero el oompa loompa se le quedo viendo extraño, el aun llevaba abierta la camisa.
-solo esto me faltaba – Willy dijo cuando vio la reacción del oompa loompa al verlo en esas condiciones, trato de abrocharse la camisa pero todos los botones habían sido arrancados – bueno ya que importa... dime viste por donde se fue Gabby? – el oompa loompa respondió moviendo negativamente la cabeza – gracias... – le contesto Willy.
Y empezó a pensar en que parte podría estar, la fabrica era enorme y podría estar en cualquier lado.
-Gabby... donde estas... – Willy se recargo sobre una mesa donde había instrumentos de su laboratorio, tubos de ensayo de colores, matraces, etc – piensa Wonka, piensa, donde podrá haber ido! – se exigía a si mismo Willy, pero en su cabeza no podía visualizar otra cosa que no fuera la imagen de ella, parada en la puerta totalmente sorprendida por la situación en la que lo había visto con aquella desagradable mujer llamada Emma o Carolina daba lo mismo – Porque! Porque! Soy un tonto! No tengo ni idea donde este! – Willy pego con sus puños cerrados sobre la mesa, haciendo que todas las cosas vibraran y algunas otras cayeran al suelo.
-"Idea... eso es debe estar en el cuarto ideal a ella le encanta ese cuarto..." – pensó Willy – "deberé tomar el bote de otra forma no podré llegar" – Willy salió corriendo del cuarto de inventos hacia donde pasaba el rió de chocolate, en el camino llamo a un oompa loompa que se acerco a el corriendo para seguirle el paso – traigan el bote al puerto del cuarto de inventos, pero rápido! – el oompa loompa de pronto aumento la velocidad incluso corría mas rápido que Willy.
Cuando Willy llego a la puerta que daba al puerto del rió de chocolate, saco sus llaves para abrirla, tardo un poco pues con la presión que tenia no encontraba la llave correcta.
-vamos, vamos donde esta la llave... Oh aquí esta! – el abrió la puerta después de varios intentos y se dio cuenta que su bote rosado, estilo vikingo ya estaba esperándolo, de un brinco subió a bordo.
-Rápido! Al Cuarto ideal! – ordeno Willy, todos los oompas loompas empezaron a remar rápidamente, el bote alcanzo una gran velocidad, pequeñas gotas de chocolate derretido salpicaba dentro del bote en cada vuelta que este daba, a Willy el viaje se le estaba haciendo eterno, por fin los oompa loompa dejaron de remar para permitir entrar a la parte donde acababa el rió y comenzaba el descenso al lago de agua cambiante, con un gran Splash el bote entro al Cuarto ideal, los oompas loompas remaron hasta la orilla, aun cuando el bote no se había detenido, Willy brinco cayendo sobre el verde pasto, corrió colina arriba para tratar de ver en donde estaría Gabrielle, el miro hacia todos lados, pero no la veía, hasta que por fin a lo lejos pudo ver que estaba sentada en la banca que estaba debajo del gran árbol junto a la estación de llegada del ascensor de cristal.
El cuarto ideal estaba casi oscuro solo era iluminado por la luna artificial que siempre brillaba en el cielo, corrió hacia donde estaba Gabrielle, sentada en la banca con su cara entre sus manos, ella solo era alumbrada por la luz que alcanzaba a salir de la pequeña cabaña donde estaba el ascensor.
Cuando Willy llego mas cerca de ella, pudo oír como ella estaba llorando, eso le partió el corazón a el, por su culpa ella estaba sufriendo, sin hacer mucho ruido camino hasta la banca y se sentó junto a ella.
-Gabby, necesitamos hablar – le dijo el suavemente.
-no tenemos nada de que hablar, déjame sola – contesto ella sin quitar su manos de su rostro.
-claro que tenemos de que hablar... Gabby yo no hice nada debes creerme ella, me puso algo en el chocolate y me inmovilizo, de verdad – el hizo el intento de tocarla pero ella se alejo de el.
-no me toques, porque no vas mejor con Carolina y terminas lo que empezaste! – ella levanto la cara y lo vio a lo ojos.
-por favor no me digas eso – el al ver el enojo, la tristeza, la decepción quiso llorar junto con ella – lo que viste fue contra de mi voluntad, sabes que odio a esa mujer... lo hice desde el primer momento que la vi... recuerdas? Esa vez en el ascensor de tu edificio?
-que? Como lo supiste yo te lo iba a decir cuando entre y te vi con ella – ella se limpio un poco las lagrimas.
-me confeso todo Gabby esa mujer esta loca, se obsesiono conmigo desde esa vez... pero tu sabes que yo solo te amo a ti – Willy se acerco a ella tratando de abrazarla.
-pero eso no justifica que te estuvieras besando con ella! – Gabrielle se paro de la banca y camino hacia donde estaba el ascensor, Willy se paro y la siguió.
-yo no la estaba besando! Ella me estaba besando a mi... ya te dije que me puso algo en mi chocolate que me inmovilizo por un momento! – Ella caminaba al ascensor echa una furia.
-si claro, invéntate algo nuevo! – ella quito la silla de la puerta del ascensor para desbloquearla
-pero es verdad! – le grito Willy
-pruébalo – Gabrielle se dio media vuelta y se lo quedo viendo retadoramente.
Willy no sabia como probar que le había dado ese chocolate, la taza se había quedado en el escritorio y seguro cuando el aventó a Carolina se debió de haber caído, el cerebro de Willy trabajaba a mil por hora, tratando de encontrar la solución.
-lo sabia no puedes probarlo... – dijo ella mientras se metía al ascensor. Willy abrió la boca para decir algo, pero las palabras no salían y cuando la volvió a cerrar el pudo saborear el sabor del chocolate aun en su boca.
-claro que puedo – Willy la tomo del brazo y la jalo fuera del ascensor de nuevo.
-que te pasa suéltame! – le dijo ella.
-puedo probarlo – le repitió Willy ahora tomando fuertemente ambos brazos de ella.
-me lastimas, suéltame! – le grito ella.
Willy la acerco a sus labios y comenzó a besarla, Gabrielle trato de apartarse, pero no pudo una mano de Willy la tomo por la nuca y la obligo a quedarse en esa posición, aunque ella trataba de apartarlo, el era bastante fuerte, Willy la besaba insistentemente tratando de abrir los labios de ella con los suyos, hasta que por fin en un error de ella, logro besarla completamente, el trataba de que ella pudiera sentir ese sabor a chocolate amargo que el sentía en la boca, sin darse cuenta de cómo paso, Willy sintió el sabor de algo mas, se separo rápidamente de ella y pudo ver que en el intento de tratar de probarle que había tomado chocolate, el le había lastimado su labio inferior a Gabrielle. Willy la soltó por completo y dio un paso atrás.
-lo lamento... lo lamento... no quise... de verdad... – ella subió una mano y limpio la poca sangre que salía de su labio inferior.
-eres un idiota Willy... – le dijo ella y unas lagrimas salieron por sus ojos.
-no, no, por favor... era la única forma de probar que me había tomado un chocolate... – Willy se acerco de nuevo a ella, pero Gabby dio un paso atrás.
-no te me acerques no quiero volver a saber nada de ti...
-Que? Por favor no me digas eso! Pero te probé que me tome ese chocolate, acaso no lo pudiste percibir cuando te bese?
-en primer lugar, jamás me vuelvas a besar así y en segundo lugar... Willy tus besos siempre saben a chocolate, con eso no probaste nada... bueno si... probaste que eres un patán – le dijo ella mas serenamente pero aun se limpiaba la sangre que aunque era poca seguía saliendo de su labio.
-lo lamento, lo lamento... soy un tonto, te prometo que jamás volverá a pasar.
-tienes razón, jamás volverá a pasar... me voy de la fabrica, quiero el divorcio, esta misma noche me llevare a Wally junto conmigo...
-Que! No puedes hacer eso, es mi hijo!
Gabrielle que se iba a meter al ascensor volvió a sentir como el la agarraba del brazo impidiendo que se metiera, de pronto las puertas del ascensor se cerraron y salió disparado hacia arriba dejándolos solos en la cabaña.
-no puedes apartarlo de mi lado... el es mi mundo... los dos son mi mundo si me dejan no se que voy a hacer... – le dijo Willy soltándola al ver que no había a donde ir pues el ascensor se había ido.
-estoy segura que Carolina estará feliz que estés disponible y solo en la fabrica otra vez porque ni Wally ni yo volveremos jamás – Gabrielle se quito el anillo de matrimonio de su dedo y lo dejo caer a los pies de Willy.
-no, por favor... no me hagas esto... tu sabes cuanto te amo, yo no podría vivir sin ti... no resistiría estar lejos de ti nunca mas – Willy había comenzado a llorar.
Gabrielle trataba de ser fuerte y no llorar mas frente a el pero, tampoco podía resistir verlo llorar, jamás había podido, ni siquiera cuando lo conoció por primera vez, unas lagrimas salieron también de su rostro.
-no me dejes por favor, tu eres mi ángel y Wally mi estrella sin ustedes el mundo no existe para mi... – Willy la abrazo muy tiernamente, nada comparado con lo que había pasado minutos antes – no fue mi culpa, Carolina planeo todo, yo jamás podría estar con alguien mas que no fueras tu.
Gabby que hasta ese momento había permanecido inmóvil ante su abrazo, no pudo resistir mas y alzo sus brazos también para abrazarlo.
-perdóname... perdóname... - le decía el en voz baja al oído de ella
-quiero que ella se vaya esta misma noche...
-lo que tu digas... – el se separo y se agacho a recoger el anillo que ella había tirado – deja coloco esto en su lugar – Willy tomo la mano de ella y volvió a poner el anillo en su dedo.
El cerro su mano junto con la de ella, ambos lucían de nuevo los anillos dorados que marcaban su amor. Willy observo la herida que el le había ocasionado en su labio y con su mano libre la toco suavemente.
-duele mucho? – pregunto el
-un poco...
-perdón soy un tonto – el se acerco a donde estaba la herida y volvió a besarla solo que esta vez lenta y suavemente sin hacerle ningún daño.
Mientras tanto Carolina con un terrible enojo salió de la oficina de Willy camino al ascensor y presiono el boton para llamarlo, este no tardo mucho en aparecer, en ese momento el celular de ella sonó.
-si señor voy en camino el plan esta casi completo – fue todo lo que dijo, corto la comunicación y guardo de nuevo el celular, y por fin a bordo al ascensor que estaba delante de ella – "seguramente Willy y Gabrielle estarán muy ocupados" – pensó ella y presiono el boton que marcaba el cuarto de Willy, el ascensor subió con gran rapidez hasta que se detuvo, ella salió y camino por el pasillo donde estaban las habitaciones, debido a la hora solo había luces que iluminaban tenuemente.
Camino en silencio hasta que llego a la puerta de la habitación de Wally, lentamente la abrió, dentro todo se encontraba en silencio y estaba casi todo a oscuras tan solo era alumbrada por las estrellas artificiales que brillaban en el cielo simulado.
Carolina observo la cama donde dormía placidamente Wally camino hasta el closet de el y saco una manta de color gris claro. Se acerco a la cama del pequeño Wonka y le quito las cobijas que lo mantenían caliente. Wally se removió un poco en su cama al sentir la corriente fría del aire sobre su cuerpo, Carolina lo cubrió con la manta que previamente había sacado del closet y espero a que Wally se volviera a quedar quieto, cuando el niño sintió de nuevo el calor de la manta se volvió a quedar profundamente dormido. Del interior de una de las bolsas del pantalón de Carolina, saco una nota que dejo sobre el mueble que había al lado de la cama de Wally.
-jamás debiste interponerte entre Willy y yo Gabrielle, ahora se acordaran de mi para siempre... – dijo fríamente ella.
Con cuidado y delicadeza para evitar despertar a Wally lo levanto de su cómoda cama, el pequeño se removió inquieto cuando sintió los extraños brazos que lo cargaban, pero no despertó, Carolina salió del cuarto de Wally en silencio se metió al ascensor de cristal y presiono el boton del cuarto de chocolate.
En tanto Willy y Gabby se preguntaban porque el ascensor tardaba tanto tiempo en bajar, pues lo había llamado hacia ya varios minutos.
-porque tarda tanto – pregunto ella
-no lo se... es muy extraño es como si lo estuviera usando alguien mas – Willy volvió a apretar el boton para que el ascensor bajara.
-a estas horas?
-al parecer si
-y porque no llega otro ascensor, creí que tenias varios – le dijo ella
-Ha-ha! Así era hasta que inexplicablemente se destruyeron.
Ellos seguían ahí abajo pues no había otra forma de subir, a no ser que se fueran nadando en el rió de chocolate. De pronto un escalofrió recorrió el cuerpo de Gabrielle.
-algo anda mal Willy... – dijo ella seriamente.
-a que te refieres? – le pregunto el
-no lo se... algo esta mal Willy – En ese momento el ascensor llego frente a ellos.
-seguro no es nada, vayamos a descansar, si? – le dijo el cuando entraron al ascensor.
-no, primero sacaremos a esa mujer de la fabrica no la quiero ni una noche mas aquí – ella presiono el boton del cuarto de chocolate y el ascensor subió rapidísimo.
Cuando ambos salieron del ascensor, sintieron una fría corriente de aire, eso no era normal pues el cuarto siempre tenia controlada la temperatura, incluso cuando se descompuso todo el sistema de temperatura de la fabrica, el del cuarto de chocolate estaba intacto.
-porque hace frió? – pregunto ella mientras caminaban a la casa de los Bucket.
-esto es extraño, es como si estuviera entrando aire de algún lado – contesto el observando alrededor del cuarto buscando al raro.
En ese momento escucharon como la puerta del cuarto de chocolate que daba la pasillo se cerraba haciendo un gran ruido, los dos se quedaron sorprendidos, corrieron a ver que sucedía pero cuando llegaron la puerta ya estaba cerrada.
-quien salió? – pregunto Willy.
-Carolina – dijo una voz desde un árbol de dulces, era Charlie – y llevaba cargando algo... no pude ver bien pues esta oscuro.
-cargando algo? – Gabrielle tuvo un terrible presentimiento, que esperaba estuviera equivocada – Dios por favor que este equivocada... – dijo ella.
-que sucede? – Willy observo que algo preocupaba a Gabrielle.
-Willy abre la puerta y alcánzala, rápido! – grito ella mientras se echaba a correr al ascensor.
-que? Porque? – Willy no entendía porque ella le había dicho eso.
-has lo que te digo rápido! – le grito ella ya desde el ascensor, y presiono el boton del donde estaban los cuartos – "Dios por favor que este equivocada, que este equivocada por favor..." – ella imploraba, puso sus manos sobre su rostro, jamás había sentido tal desesperación en su vida.
Willy en el cuarto, saco sus llaves y empezó buscar la llave correcta, las ultimas palabras de Gabrielle lo habían puesto nervioso, a que se refería ella, no entendía hasta que cuando por fin estaba dando vuelta a la llave correcta oyó un pequeño grito del otro lado.
Carolina había empezado a correr pues sabia que Willy y Gabrielle le estaban pisando los talones, mientras corría por el largo pasillo que daba a la salida, Wally se despertó, y grito cuando vio a aquella mujer que lo cargaba.
-aaaahh! Mama! papa! – grito Wally completamente asustado.
-cállate pequeño – ella abrió la puerta que daba a la salida y empezó a correr hacia las rejas de la entrada principal.
Mientras tanto Gabrielle había llegado al pasillo, corrió por el cuando vio que la puerta del cuarto de Wally estaba abierta, entro en un pánico terrible.
-No , no puede ser... – dijo ella desesperada, corrió al cuarto y entro, buscando a Wally, pero su cama estaba vacía, su hijo no estaba, se acerco a la cama y sintió que un estaba tibia, el miedo corría por sus venas en una dosis inimaginable, su corazón se paralizo cuando escucho un grito desde afuera de la fabrica
-MAMA! – gritaba Wally desde los brazos de Carolina
Willy alcanzo a ver como Carolina iba corriendo hacia fuera de la fabrica llevando en sus brazos a Wally.
-NOOOO! – grito el y empezó a correr lo mas rápido que pudo detrás de ella, pero Carolina le llevaba ya mucha distancia.
-PAPA! Ayúdame! – Wally ya lloraba totalmente asustado, Willy al escuchar el llanto de su hijo sintió su corazón partirse, y corría lo mas rápido que pudo
-No te lo lleves, maldita mujer! – gritaba Willy mientras corría desesperado detrás de ella.
Gabrielle que había corrido a la ventana al oír a Wally gritar vio como Carolina corría hacia la salida donde una limosina la esperaba, detrás de ella vio a Willy correr desesperado por alcanzarla, y ella a pesar de estar tan lejos podía sentir la angustia de su hijo, sabia que el estaba llorando y muy asustado.
Carolina llego a la limosina, cuando se abrió la puerta Willy pudo ver el huesudo rostro de Slugworth dentro, ella subió, Willy observo Wally que estaba en llanto desesperado llamando a sus papas.
La limosina arranco con un rechinido de llantas aunque Willy corrió lo mas que pudo no pudo alcanzar a Carolina, su hijo se había ido en ese auto, junto con sus peores enemigos.
-nooo, nooo , nooo – se decía Willy cuando dejo de correr - esta me la pagaras muy caro Slugworth, me la pagaras! – grito Willy en medio de la calle, sofocado no solo por lo que corrió si no por la furia que sentía, así como la impotencia de no haber salvado a su hijo – que vamos a hacer, que vamos a hacer... Wally... no, no puedo perderte – fue lo ultimo que dijo antes de taparse la cara con ambas manos.
Desde la ventana Gabrielle había observado toda la escena, Willy corriendo detrás de Carolina y después detrás de la limosina pero había sido en vano, no los pudo alcanzar. Ella quería que todo fuera una horrible pesadilla para que así despertara y todo acabara, pero no era así.
-no, puede ser... no puede ser... – ella se dejo caer sobre sus rodillas, las lagrimas corrían por sus mejillas – esto no puede estar pasando, esto no puede estar pasando... NO! Carolina has cometido el peor error de tu vida!
Gabrielle empezó a llorar desesperadamente, tenia que salvar a Wally, pero en ese momento su mente estaba completamente bloqueada. ella escucho a Willy entrar corriendo al cuarto y se arrodillo junto a ella.
-Gabby, Gabby, se llevo a Wally! – fue lo primero que dijo – nuestro hijo se llevo a nuestro hijo – Willy empezó a llorar cuando se abrazo a ella – trate de alcanzarla, pero no puede! No pude! Lo siento... no pude – el estaba destrozado, apenas podía articular palabra.
-lo se... lo se... – dijo ella también llorando – no se que voy a hacer si no lo vuelvo a ver Willy, no se que voy a hacer, mi pequeño, mi bebe...
-lo encontraremos, no te preocupes, lo encontraremos... lo encontraremos – fue lo único que le dijo el para tratar de dar una esperanza tanto a ella como a el mismo.
En tanto a bordo de la limosina, Wally lloraba completamente asustado.
-mama, papa, quiero a mis papas – Wally estaba sentado en un rincón de la limosina sus precioso ojos violetas estaban llenos de lagrimas.
-excelente trabajo Carolina, esto es mejor que quitarle la fabrica a Wonka, en este momento se debe estar muriendo de dolor al no tener a su hijo con el.
-y también Gabrielle, estoy segura que esta inconsolable al no tener a su "estrellita" junto con ella jajaja – se rió burlonamente.
-hicimos un buen trabajo, ahora solo nos encargaremos que jamás lo vuelvan a ver – Slugworth dijo fríamente.
-en donde vamos a desaparecerlo? Yo podría encargarme de eso... – dijo Carolina en un tono totalmente sicótico – al verlo me recuerda a Gabrielle... – menciono entre dientes.
-no, no calma – le dijo Slugworth – pienso que es peor que ellos sepan que Wallace vivirá con nosotros... jajajaja – reía malvadamente.
-quiero a mis papas – el pobre de Wally no sabia lo que ocurría, no conocía a ese horrible hombre que estaba frente a el.
-Wally... no llores... – le dijo Carolina
-no me toques! – grito el – llévame con mis papas... – Wally se limpio las lagrimas con la manga de su pijama que estaba estampada con pequeñas imágenes de dulces.
-Wallace, ahora yo seré tu padre – le dijo Slugworth con una siniestra sonrisa.
-no! Yo quiero a mi papi! Tu eres feo y hueles raro! – era imposible Wally no dejaba de llorar.
Slugworth se quedo viendo a Carolina, sabia que no iba a ser fácil que Wally se tranquilizara, pero el tiempo se encargaría de ello.
-señor? – dijo el conductor – hacia donde me dirijo?
-vamos al departamento que esta a las afueras de la ciudad, no podemos estar mas tiempo aquí... ahí veremos que hacer.
-Slugworth, sabes que debemos dejar el país verdad? – pregunto Carolina
-Claro que lo se! Pero en este momento no podemos... imagínate a este chamaco llorando en el aeropuerto, llamaría demasiado la atención... conseguiré un avión privado y así podremos irnos.
Wally escuchaba todo lo que decía aquel horrible hombre que estaba frente a el, tomo sus rodillas con sus manos, creyendo que de esa forma se iba a proteger de las personas que lo habían sacado de la fabrica, poco a poco el sueño lo venció, después de todo era de madrugada, en sus sueños podía ver como corría a los brazos de su madre que lo observaba a la distancia, pero por mas que corría no podía llegar hasta ella, su desesperación crecía al no poder llegar a su mama, de pronto una persona se interponía en su carrera hacia ella, era Carolina que le abría los brazos de igual forma, Wally despertó en ese instante... Miro a su alrededor y se dio cuenta que ya no estaba en la limosina sino en una cama dentro una oscura y fría habitación que definitivamente no era la suya.
-Mama? Papa? Donde están... – decía Wally, pero nadie le contestaba, estaba completamente solo en aquella habitación. Se bajo de la cama y camino hasta la puerta, giro la perilla pero estaba cerrada con llave.
Sin otra cosa que hacer regreso a la cama y se volvió a acostar, Wally tenia mucho frió, levanto las cobijas y se metió debajo, estas eran ásperas y pesadas, nada comparado con sus suaves y ligeras sabanas de su cama.
-mama... ven por mi... no quiero estar aqui – fueron la ultimas palabras del pequeño antes de cerrar sus ojos para volver a dormir. Unas lagrimas se derramaron sobre sus mejillas cayendo sobre la incomoda almohada.
Mientras tanto afuera del cuarto Slugworth junto con Carolina ideaban la forma de salir cuanto antes del país, llevándose a Wally junto ellos. Willy y Gabrielle tendrían que darse prisa para encontrar su hijo, de lo contrario podría ser muy tarde.
Nota: Bien sere sincera, cada vez me cuesta mas trabajo seguir escribiendo, Porque? La universidad ocupa mucho de mi tiempo, y cuando llego a tener tiempo, la inspiración no nace... pero o e preocupen si me tenga que exprimir el cerebro terminare esta historia.
Espero sus reviews para seguir escribiendo, ustedes saben que jamás les pido que me escriban nada pero en este momento si necesito apoyo para continuar escribiendo
Saludos a todos nos veremos en el siguiente Capitulo!
