Evangenlion no es mío.

Este fanfic es la secuela de 'De depresiones… a lo que más temo'

OCASO DE ESPERANZA

Por: EGBC

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Capítulo 4:

'Ojos abiertos'

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–"... En conclusión los tres de ellos están en aceptables condiciones. No hay ningún peligro de contaminación. Solo esperamos a que despierten para darles de alta... Tal parece que la línea Ikari seguirá otra generación más."– Ritsuko terminó su reporte con una pequeña sonrisa. Aún no podía olvidar la reacción del inmutable Comandante Gendo Ikari cuando recibió la noticia que iba a ser abuelo con ojos anchos, boca ligeramente abierta, sus hombros habían caído al instante y sus manos pasaron de cubrir su boca a caer lentamente sobre el escritorio, hasta podría asegurar que vio sus lentes resbalarse del puente a la punta de su nariz. Todo eso duró escasos 5 segundos antes que recobrara su compostura, pero eran los 5 segundos que recordaría toda su vida.

–"Gracias Dra. Akagi"– Sub Comandante Fuyutsuki hablo a la falta de palabras de su superior.

Sin perder su sonrisa, Ritsuko dio media vuelta y se retiró a seguir con sus labores.

Con la salida de la mujer, los dos hombres permanecían en silencio. Fuyutsuki espero pacientemente que su antiguo estudiante dijera algo que revelara sus pensamientos. Conforme el tiempo paso se dio cuenta que era fútil esperar algún comentario, así que se arriesgó a decir algo que creía que tenía que ver con sus pensamientos.

–"... Recuerdas, Berlin, hace 10 años. El día que tu hijo conoció a la hija de Kyoko... ¿Quién diría que la broma de Yui se hiciera realidad...?"–

Cuando la respuesta fue absoluto silencio, el Sub-Comandante supo que no era deseado e hizo su retirada.

Una vez que era seguro de su soledad, el supremo Comandante de NERV dejó caer su fachada. Suspirando, dejo sus lentes sobre el escritorio y dio masaje a sus cansado ojos.

Cuando Yui desapareció, había borrado cualquier evidencia de su existencia. Eliminando todos los recuerdos de su dolor lo enfocaron en su meta. Pero había dos cosas que nunca pudo eliminar, porque era lo que Yui amaba: su trabajo y su hijo.

Shinji dejó de ser su hijo y pasó a ser una herramienta para su meta. Yui lo había amado y eso lo hizo intocable en el proceso de eliminación de recuerdos. Ahora, Shinji iba a darle algo que Yui habría querido... que habría amado.

Otro recordatorio.

---Flashback---

Gendo simplemente había entrado a su casa en Berlín y vio a su hijo jugando con una niña de su misma edad de cabellos rojizos. Por lo visto la niña ya tenía buen equilibrio en sus dos piernas a sus escasos 3 años y por la forma en que se mostraba la situación parecía como si lo estuviera presumiendo a otro 3 años de edad.

Claro, eso era imposible, ¿no?

Cerrando la puerta su hijo lo descubrió y corrió hacia él con brezos abiertos.

–"¡Papa!"–

–"Hola..."– dijo Gendo cargándolo en sus brazos luego de recibir el caluroso saludo.

Acercándose a la niña esta lo saludo agitando una mano y colocando la otra detrás de ella en la clásica pose de niña buena.

Gendo depositó a su hijo a lado de la pelirroja e ignorándola igual que su saludo se dirigió a la cocina donde escuchaba los acostumbrados ruidos de su esposa cocinando.

El porque su esposa, tal vez una de las tres mentes más inteligentes del planeta se molestaba ocupando su tiempo en la cocina siempre había sido una de sus preguntas frecuentes. Y ella siempre le contestaba con simples y llanos porque me gusta acompañados de un encogimientos de hombros.

*Hun... mujeres*

Tirando su saco sobre el sofá desde la puerta de la cocina, dio media vuelta y de improvisto se encontró con un rápido beso en los labios.

–"Llegas temprano"– dijo Yui Ikari entrando a la sala.

El mayor Ikari siguió a su esposa a la sala-comedor y se sentó en el mismo sofá donde lanzó su saco. A lado suyo, Yui, inconscientemente , recogió el saco y lo acomodó en su regazo cuidadosa en eliminar las arrugas.

–"¿De quién es la niña?"–

–"¿Por qué?"– La sonrisa era inequívoca en sus labios. –"¿De quién crees que pudiera ser? O estas teniendo dudas acerca de algo..."– Le gustaba jugar con su esposo, tal vez la única que no le temía.

–"La hija de la encargada del Proyecto E en Alemania. Dra. Kyouko Zeppelin Souryu"– Gendo le dijo con una sonrisa que solo Yui pudiera notar.

Yui lo miro curiosamente. -"Si ya lo sabías..."– Ella no dijo más esperando que siguiera pero Gendo solo se enfoco en papeles que había traído con sigo. Ella se pregunto brevemente si no era él el que jugaba con ella.

La encargada del Proyecto E solo le quedó sacudir su cabeza en desconcierto.

Un momento de silencio transcurrió mientras Yui observaba a los niños y Gendo revisaba sus papeles.

Inesperadamente, Yui hablo –"Ellos se llevan tan bien... Tal vez, cuando crezcan podrían ser más que solo amigos..."–

–"¿El niño no puede caminar bien y ya estas pensando en que nos de nietos...?"– De la forma en que su esposo lo había dicho, Yui, no sabía si era un esfuerzo de bromear o algo más serio. Sin embargo, eso la hizo pensar...

–"Ahora que lo mencionas..."–

---Fin del Flashback---

Después, al anochecer, cuando Kyouko recogió a su hija junto con Kozou Fuyutsuki y Naoko Akagi, en medio de la conversación Yui bromeo con Kyouko sobre los nietos que podrían darles sus niños, en especial al ser pilotos designados de los Evas que sus respectivas madres construían. Todos, inclusive él mismo se había permitido una sonrisa a la ocurrencia.

Lentamente, su posición volvió a la misma de siempre. Ahora, menos que nunca tenía que morar en cosas pasadas. Yui amaba, o hubiera amado, a lo que la segunda elegida tenía en su vientre. Por lo tanto la Segundo Niño era intocable. Solo restaba pensar la manera de hacer creer a los viejos que ella era suficiente importante para no ser desechada dada la oportunidad si revelar la verdadera causa del porque.

Gendo cerró los ojos y pensó.

**********

Párpados temblaron abiertos. Los ojos detrás de ellos reclamaron a lo que según ellos era una intensa luz. Pronto la dicha intensa luz se convirtió en una simple lámpara sobre el techo.

Ella no era la única en la habitación. Olor a desinfectante y ambiente estéril encerrados dentro de las cuatro paredes blancas del hospital.

Ella odiaba los hospitales.

Su cuerpo se sentía pesado y débil, pero eso no la detuvo de levantarse e ir a la otra cama. Pasos lentos e imprecisos demostrando la combinación entre cansancio y mareo.

Observando al chico recostado en iguales condiciones a las que ella estuvo momentos antes procedió a arrancar de su propio brazo la aguja de la que aparentemente se alimentaba, tirándola a un lado hablo.

–"Se que estas despierto..."–

Estos parpados no demoraron en abrirse parecía que ya estaban acostumbrados a la luz. Una tímida sonrisa acompañaban a sus visibles ojos azules.

–"... Hola, Asuka... "– su voz no mostró ninguna sorpresa del hecho de que ella sabía que estaba despierto.

Un pequeño gruñido fue su respuesta y se negó a mirarlo a los ojos. Mirando al rededor expresó con palabra sus pensamientos y sentimientos.

–"Odio los hospitales... Vamonos de aquí"–

Shinji nunca fue un amante de los hospitales tampoco.

**********

–"Es hermoso ¿no?"–

Rei no se molesto en voltear. Era la hora del recreo pero ella no había guardado su cuaderno y su lápiz aún seguía en su mano. Desde hace más de una semana había sido acosada por esa voz y su emisor.

–"Cualquiera sería un necio si nunca se detendría a ver lo hermosa que es nuestro mundo."– Kaworu sonrió serenamente detrás del pupitre de la primera elegida.

Ella había aprendido que si no le contestaba no se marcharía. –"Si"– Fue todo lo que dijo.

La sonrisa de Kaworu se alargo un poco.

–"¡Hey Nagisha!"– grito Kensuke desde la puerta. A su lado un recién reintegrado Cuarto Niño.

Con un gesto de afirmación los dos muchachos se adelantaron al patio. De nuevo, Kaworu, enfrentó la espalda de la chica de cabellos azules claros.

–"Hay muchas cosas en este mundo que pueden acabar con esta belleza. Pero nosotros tenemos el poder de prevenirlo... Somos iguales"– Kaworu se marchó después de decir estas palabras dejando a Ayanami mirando afuera de la ventana.

El único sonido que se escuchó dentro del aula durante el recreo fue el de un lápiz partiéndose en dos.

**********

Ellos habían salido del hospital a duras. Ambos solo querían ir a casa pronto. Sus mentes llenas de imágenes fuera de lugar que nunca prestaron atención a lo que ellos se referían a casa y lo que esa palabra significaba.

Más sin dinero el camino a pie fue largo y silencioso.

Cuando al fin llegaron a su destino sus ideas habían sido, en cierta forma, ordenadas. El momento de hablar había llegado.

Las puertas del ascensor se abrieron.

**********

Misato tenía que darle crédito a Kaji. El ¿cómo podría descubrir tantos secretos y verse tan relajado todo el tiempo? era una pregunta que no se podía encontrar la respuesta.

Estos últimos días habían sido un infierno. Intentar descifrar la verdadera esencia de la 'energía' hizo mella en su vitalidad. Ella casi se alegraba de que la conversación con Ritsuko no se efectuó, todavía. Entre hackear, decodificar, visitar el hospital donde Shinji y Asuka se recuperaban... y, claro, trabajar; pudo hacer un pequeño descanso en todas estas actividades diarias. El descanso se lo podría llamar así sino fuera por el continuo sonar del teléfono.

Sus manos apretaron la almohada sobre su cabeza que, aunque no evito dejar de escuchar los sonidos, ayudo bastante en aminorar el ruido.

El teléfono dejo de sonar para dar paso al mensaje previamente grabado, por ser ella quien lo grabo no presto ni las mínima atención. Sin embargo, al escuchar la voz de Maya y en especial nombrar al hospital y sus niños le hizo saltar, literalmente, hacia el teléfono.

–"... ¿si?... "–

... y escucho.

–"¡¿Qué?!"–

**********

Las puertas del ascensor se cerraron.

Había muchas cosas en su cabeza que no lograba entender en su totalidad. Sin embargo, Asuka, ya tenía una ligera idea de lo que había sucedido. Fue un hermoso sueño en el cual había toda una vida tras suyo, pero aún así parecía ayer cuando ella y Shinji estuvieron juntos.

–"Alguna vez..."– ella no lo miro, en su lugar su vista estaba sobre los números de los pisos que se prendían y apagaban conforme ascendían. –"... has tenido un sueño que parecía tan real que..."–

–"... que te preguntabas si fue en realidad un sueño."– Shinji termino.

Asuka lo miro detenidamente, no tan sorprendida como debiera. Más si alguien estuviera cerca, tanto como Shinji lo estaba ahora podría ver en sus ojos una pequeña chispa de alegría.

–"Y tal vez todo esto también es solo un simple sueño."– Asuka siguió pensando en alto. –"Así que, o es una pesadilla en la que despertaré justo antes de morir o un sueño que acababa cuando un príncipe en caballo blanco me bese en los labios"–la pelirroja terminó con una sarcástica sonrisa.

Shinji pensó difícilmente, aún le era muy difícil capturar la indirecta.

–"No... soy un príncipe ni tengo un caballo blanco, pero..."–

–"¡Cállate y bésame!"–

Con un par de segundos de duda, Shinji cumple obedientemente... y felizmente.

Las puertas del ascensor se abrieron.

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–"¡¿Cuándo?!"–

–"¿¡Cómo?!"–

–"¿¡Quién?!"–

El auricular hizo un sonoro ruido en su esfuerzo de colgar.

Par su suerte se había se había dormido en su vestido negro. Lo cual, le facilito su rápida salida agarrando en el camino su cruz, arma y chaqueta roja. Con una última pausa para ponerse los zapatos salió del departamento.

Con algo de incomodidad presionó el botón para llamar al ascensor porque, al mismo tiempo, se ponía una manga de la chaqueta.

Sacudir la cabeza no resultó como lo planeo y, en lugar de mejorar, empeoró el dolor de cabeza. Aparte de eso, tenía un pareo que lo intentó debilitar tomando profundas respiraciones. No que su actual mal humor le este ayudando mucho. Por último, mantuvo sus ojos cerrados esfuerzo por calmarse...

Fue en ese preciso momento cuando las puertas del ascensor se abrieron.

Preparada para entrar al sonido de las puertas, Misato, abrió los ojos cuidadosamente y, como si te despertaras para encontrarte en medio de las vías de tren con uno a punto de arroyarte, vio ante ella, dentro del ascensor, a sus niños, Shinji y Asuka... besándose.

Innecesario decir que en el susto ella cerró inmediatamente sus ojos.

Las puertas del ascensor se cerraron.

Continuara...

Notas: Así que vuelvo a dejar con suspenso :p... El cap se supuso a seguir pero creo que hubiera sido peor la demora. Ya había advertido que me demoraría pero aparte de los problemas que tenía surgió algo que tiro mis ánimos por el suelo y fue un largo y tedioso trabajo el de recoger los trozos.

En fin, este cap solo sirvió como un punto de partida a lo que esta por venir.

D14852001: Asuka _está_ embarazada, pero solo ha pasado una semana desde que… tu sabes. El tiempo dentro del Eva no cuenta, hasta cierta manera, pues si no fuera por estar ahí que Ritsuko no hubiera descubierto su embarazo. Sin embargo, esto será explicado en la conversación de Ritsuko y Misato, en próximos capítulos. Y sobre mitad ángeles (¿quién era el que decía que no lo hiciera? ^^) ya tenía planeado algo pero aún no lo sé específicamente como ponerlo… así que tendremos que esperar y ver que sucede.

Saito Ryuzaki: Hey para que más están los amigos ^_~

AngelinaB: Ahhh si creo que tengo una pequeña debilidad por chibi-Rei, no importa que personalidad le ponga sencillamente es divertida de escribir. Y créeme cuando te digo que ¿_puede_? dar más miedo en los próximos cap's el joven Nagisha.

Daina-chan: Gracias por tus palabras y bienvenida a este mundo de los fic de Eva.

En el próximo cap veremos el encuentro de Kaworu con Shinji y Asuka.

No olviden dejar sus comentarios.