Capitulo 8:

SU AUSENCIA

El ocultar del Sol ya estaba terminando, ahora reinaban las penumbras de la noche, un día tranquilo, sin novedad…

Anna: ¡maldición!

Se escucho la voz molesta de la sacerdotisa mientras que por primera vez en su vida golpeaba el árbol donde estaba sentada debajo de el, se paro de inmediato y entro en la casa.

Yoh: Anna la cena ya esta lis…

Anna: hoy no cenare

Yoh: pero anita, desde hace dos días que no cenas

Anna: eso no importa, come tú, mañana tendrás un entrenamiento especial, ¡y será mejor que no cuestiones mis ordenes, ¿quedo claro!

Yoh: pero Anna

Anna: ¡¿quedo claro!

Yoh:… si anita

Anna: muy bien

Yoh:… ¿Anna, te sientes bien?

Anna:…

Yoh: Anna…

No hizo caso, es mas ni siquiera escucho la pregunta de su prometido, estaba tan metida en sus pensamientos que ni importancia le dio, subió las escaleras entrando en su habitación, cerro la puerta fuertemente sentándose de golpe sobre su futón, tenia la cabeza gacha pero se notaba en su rostro un aire de enojo.

Anna: ¿Por qué no viene?

¿Qué estaba sucediendo aquí?

Anna: ya van 9 días que no se aparece el muy idiota, acaso cree que puede desaparecer así como si nada, sin decir nada, pero cuando lo vea… me va a escuchar.

¿9 días, si, 9 días ya iba sin que el shaman de fuego apareciera, después de varios meses donde su presencia era diaria como que el Sol salía todos los días, Hao Asakura no se acerco a esa casa. Pero… que tanto le preocupaba a ella, es mas, si ya no viene es por que por fin se alejo de ellos, ahora si están libres de él, Yoh ya no correría peligro, pero por que no le agradaba que él ya no volviera a esa casa

Anna: Hao Asakura… yo…

Menciono estas palabras mientras apretaba su puño con fuerza, luego de un par de minutos los soltó, se levanto para cambiarse de ropa, para después echarse a dormir envolviéndose en las sabanas blancas. Tenia la miraba fija en el techo de su cuarto, por su cabeza pasaban escenas de cuando Hao estaba con ella, discutiendo muy a menudo, bueno solo ella, ya que él siempre mantenía la calma, era tan parecido a Yoh en ese aspecto, cualquiera diría que ese no era Hao Asakura, el shaman quien es dueño del Espíritu de Fuego, pero ella sabia que si lo era, le agradaba que se comportara así con ella, solo con ella…

Anna: maldición, solo pienso estupideces

Golpeo el piso pero no muy fuerte, sino su prometido escucharía eso y de seguro vendría a ver que sucedía. Y sin quererlo pasó por su mente aquella vez que la beso, en sus labios se dibujo una pequeña sonrisa, paso sus dedos sobre ellos, recordaba aquel instante…

Anna: ¡ha! Maldita sea, en que demonios estoy pensando

Se reprendió ella misma, no le gustaba pensar en eso, o mejor dicho no le eran correctos, por que cada vez que por su memoria salía a la luz aquella escena, siempre sonreía, aunque eso no era muy notorio.

Anna: ¿y si ya no viene?

Aquella pregunta surgió, sonando con un aire de… ¿tristeza, melancolía, aquella era una idea que no era de mucho gusto para la itako, mientras mantenía la imagen del rostro de Hao Asakura en su mente, se imagino que nunca mas volvería a verlo, un pequeño nudo se formo en su garganta, no pudo identificar por que eso, solo que "ya" había algo…

Anna: sino vuelve será mejor así, su presencia es… una amenaza latente

Claro, era una amenaza, pero no para lo que ella quería creer, una amenaza que ya surgió efecto, ya era…tarde, aunque con sus palabras quería hacerse creer que eso jamás ocurriría.

¿: Ya paso el tiempo suficiente, mañana realizare… otra "visita" jajaja

Ese tipo de comentarios, solo podían ser de alguien, el mayor de los Asakura se encontraba ante la luz que le ofrecía una fogata, en su refugio temporal, el cual consistía en las ruinas de una construcción ya muy antigua, la cual había sido invadida por la vegetación. Había decidido que había que ponerle a esto un poco de suspenso, su ausencia repentina seria muy buena, así la sacerdotisa se intrigaría por ello, las cosas le estaban saliendo muy bien a este joven de 17 años.

Hao: mañana volveré a verte, anita jajaja

Si claro, mañana volvería a verla, pero lo movía mas que su simple deseo de venganza, era su propio deseo de admirar nuevamente aquel rostro, contemplar sus ojos negros, ver el Sol reflejado en sus cabellos dorados, y si también tiene la fortuna de ver aquella sonrisa, una sonrisa que solo pudo observar una vez en todo el tiempo que llevaba viéndola, ni siquiera supo que hizo o dijo, pero sonrío, para él, ese fue un momento inolvidable el cual deseba volver a vivir (un momento Kodak jajaja nn). Si, aquí también había algo más que sus deseos de venganza, algo…

Hao: muy pronto querido hermanito querrás no haber nacido, desearas haber muerto antes de experimentar el dolor que se te avecina, jajaja

Si, también eso era cierto, el plan de este shaman consistía en enamorar a la sacerdotisa, alejarla de él, romperle el corazón en tantos pedazos como estrellas en el cielo, y el sufrimiento de este seria la mas dulce venganza, en cuanto a ella, una vez logrado su objetivo, simplemente, deshacerse de esa carga, ya que una vez cumplido su meta, ya no le serviría para nada, y eliminarla también seria otro golpe muy duro para el menor de los Asakura, jajaja ciertamente todo estaba fríamente calculado, todo, nada podía salir mal, después de cumplir con ese asunto se apoderaría de los grandes espíritus, y así eliminaría a todos los humanos de la faz de la tierra, y su mundo de shamanes estaría hecho, claro si antes no surge algo, aunque eso era imposible, ¿que podría salir mal, si todo ya estaba en su lugar, solo faltaba el ultimo paso…

Bueno aquí esta el… el… ¿Qué capitulo era?... ¡aya, ya me acorde, capitulo 8, bueno algunas cosas ya están por cumplirse, espero que estén entendiendo la historia, aquí se ve el nacimiento de… algo, bueno ahora mátenme, aun falta mucho, bueno eso todo por esta noche, dos capítulos en una noche no esta nada mal, sigan la historia, chau.