Aclaraciones preliminares:

Los personajes de Bayblade no son míos ni nunca lo serán;

Este fanfic se realiza sin fines de lucro

Las acotaciones son

/Lo que el personaje piensa/

oooooooo Cambio de escena

Lo que yo digo

(Algún comentario)

/Un pensamiento de un tercero pensando dentro de la cabeza de alguien, es decir, como cuando alguien recuerda un evento y escucha esas voces en su cabeza o alentándolo/

EPÍLOGO

Un rayo de sol se asomaba por una gran ventana, era de día, un tanto tarde pues había salido ya el sol. En una hermosa recámara dormía una hermosa joven en su cama, sus hermosos ojos color rojo rubí fueron abriéndose poco a poco ante el incesante sonido de su despertador, el cual no se calmaría hasta que ella despertara. Lentamente sacó una mano de debajo de la sábana y, con un solo golpe, apagó el despertador.

Los rayos de sol le daban directo en la cara, le gustaba mucho amanecer de esa forma, así no podía volverse a dormir. Su largo cabello estaba suelto, el flequillo era de un color azul fuerte y el resto era claro. Era una joven muy hermosa. Talló sus ojos con sus manos para espantar el poco sueño que le quedaba y se sentó en su cama. Estaba confundida, extrañada, y no era para menos.

Aiko - ¿Es que acaso… todo fue… un sueño? – Preguntó sumamente confundida – Es de los más extraños que he tenido, todo fue tan real – Vió su reloj despertador - ¡ES TARDE! – Gritó alarmada – Tal vez aún esté dormido – Se levantó

Caminó lentamente al cuarto de baño y tomó un balde, lo llenó de agua fría y salió lentamente de su habitación. Lentamente fue caminando hasta otra puerta, iba al cuarto de su hermano querido, según ella llevaban una buena relación, lo amaba, después de todo era el único hermano que tenía. Siempre se gastaban bromas, bueno de hecho ella siempre le gastaba bromas, él era demasiado inocente para esto. Sacó una llave que colgaba de su cuello, junto a su camafeo, la introdujo en el picaporte, la giró lentamente y escuchó el sonido donde se botaba el seguro. Giró la perilla lentamente, tomó de nuevo el balde y abrió la puerta de golpe

Aiko – Gritando a los cuatro vientos - ¡HERMA…! – Sus palabras quedaron inconclusas - ¡TE VOY A MATAR! – Era muy temprano para los gritos, apenas las seis de la mañana del dos de julio.

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Es de noche, una hermosa chica espera a su novio, no hay nadie en su casa, lleva planeando esto mucho tiempo, ella era tímida pero… su novio lo era más. Esperaba pacientemente (aunque esta no fuera una de sus virtudes) Sus hermosos ojos color café miraban a cada instante el reloj que tenía en frente. Habían quedado de verse a las diez y… eran las nueve cuarenta y cinco, primero de julio. En verdad estaba desesperada. En realidad su novio no sabía nada, ella lo había planeado pero… no estaba preparada para esto.

Diez a las diez, en verdad no tenía paciencia. Comenzaba a estar nerviosa y exasperada, su corazón latía cada vez más rápido… y eso que su novio siempre llegaba más temprano de lo que acordaban. En realidad parecía que cada minuto que pasaba el reloj caminaba dos minutos para atrás. Después… llegó lo que tanto esperaba, el timbre de la puerta sonó. Corrió hasta la puerta de entrada y se detuvo antes de abrirla. Arregló su falda, sacudió una top que traía puesta, arregló un poco su cabello color castaño y… giró la perilla.

¿? - ¿Para qué querías que viniera tan noche y tan urgente? – Entró a la carrera y se queda en el recibidor

Hilary – Acercándosele de forma sensual – Pues verás… - Camina hacia donde está él. Eran del mismo tamaño, aunque el chico fuera un año menor que ella – Hemos sido novios durante… ¿Qué? Medio año y… pues yo creo… que es tiempo… que avancemos al siguiente paso

¿? – Hilary…

Hilary – Gritando - ¡Por Dios Kenny, no te estoy pidiendo un imposible!

Kenny – Pero yo… - Se escucha su laptop sonar y, al mismo tiempo, el teléfono de la casa de Hilary - ¿Quién puede ser? – Abre la laptop

Dizzy – Tienes un e-mail Jefe

Kenny - ¿De quién?

Dizzy – No me lo creerás

Hilary – Resignada – Voy a contestar el teléfono – Descuelga el teléfono - ¿Diga?... ¿Pero es…?... Sí claro, no creo tener problema… Claro que sí… De acuerdo… Nos vemos – Camina hasta donde está Kenny

Hilary/Kenny - ¿Adivina quién era?

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Un chico peliazul está en el dojo de su abuelo, la tarde está cayendo y él, decidió tomarse una siesta, eran alrededor de las siete y media de la tarde del primero de julio. Viéndolo dormir está otro chico, totalmente callado, no quiere despertar a su acompañante. Aunque la idea se formó en su cabeza. De pronto se escuchó cómo alguien llamaba a la puerta principal, llamando la atención del chico rubio y ojos celestes y… por consecuencia… despertando al chico peliazul con ojos de tormenta

Tyson – Bostezando - ¿Pero quién hace tanto escándalo?

Max – No me mires a mí, eh estado aquí toda la tarde

Tyson – Y… ¿Qué has estado haciendo? – Se acerca sensualmente hacia él

Max – Sonrojado – Nada… solo mirarte dormir

Tyson – Acercándose a sus labios – Y… - Lo besa tiernamente - ¿Qué más?

Max – Comenzando a caer – Nada más… - Tratando de permanecer en la tierra – Tyson, aquí no…. Nos puede ver tu abuelo

Tyson - ¿Y?

Max – Con una vez fue más que suficiente

Tyson – Él tuvo la culpa – Comienza a besarle el cuello

¿? – Gritando desde la puerta principal – Paquete para el señor Tyson Granger y Max Tate

Tyson/Max - ¿Max Tate?

Tyson - ¿Será un paquete de tu mamá?

Max – Lo dudo, siempre me llama antes para avisarme que algo me va a llegar

Tyson – Vayamos a ver de quién es – Se levanta y corre a la entrada del dojo

Max – Espérame – Corre tras de Tyson

Tyson – Llegando a la entrada – Pero aquí…

Max – Deteniéndose detrás de Tyson - ¿Qué pasa?

Tyson – No hay nadie – Mira al suelo y hay un par de paquetes – Mira – Recoge los paquetes – Este es tuyo

Max – Gracias – Ve un sobre encima de su paquete – Hay una carta

Tyson – Entretenido abriendo su paquete - ¿De quién es?

Max – No tiene remitente – Abre el sobre – Es de…

Tyson – Al fin descubriendo qué contenía su paquete - ¡Oh por Dios, mira esto Max!

Max – Distrayéndose – Vaya, ¿Quién te lo envía?

Tyson - ¿No fuiste tú?

Max – No

Tyson – Abre el tuyo

Max – Abre su paquete – Vaya, esto si no me lo esperaba

Tyson - ¿Quién habrá sido?

Max – Tal vez lo diga en esta carta – Empieza a leer la carta y Tyson se coloca sobre su hombro para leer también. A ambos se les ensanchan los ojos al leer el contenido – No lo puedo creer – Dijo finalizando de leer la carta - ¿Qué opinas?

Tyson – Vamos

Tyson corre con su paquete en las manos dentro de su casa seguido por Max, ambos están muy asombrados por la carta que recibieron, están dispuestos a resolver todo ese embrollo, costara lo que costara.

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En un lugar muy, muy lejano, en un reino muy, muy lejano No pude resistirme. Acabo de ver al mono verde, para no hacerle promo Una casa se divisa, la tarde estaba sobre ellos, eran alrededor de las tres de la tarde del primero de julio Tal vez debí comenzar por ellos, dentro estaban dos chicos, eran felices, estaban juntos y, a pesar de todo lo que les dijeron cuando regresaron, se tenían a ellos mismos para soportar cualquier cosa.

Una hermosa chica preparaba la comida para su amado, era muy buena cocinera, había aprendido del mejor y, en realidad, lo extrañaba mucho pero, se había jurado a ella misma, que cuando todo el dolor pasara, lo volvería a ver. El dolor había ya pasado ahora, estaba lo difícil, saber dónde estaba. En el comedor estaba un chico, veía a su novia cocinar, le encantaba verla feliz y, además, había cumplido su promesa.

Ene so estaban ambos, la chica cocinando, el chico embelezado en ella. Todo era perfecto pero… dicen que las cosas buenas nunca duran. Alguien tocó a la puerta con fuerza, como si quisiera derrumbarla. El chico se levantó para abrir pero, en cuanto lo hizo, no había nadie, miró para ambos lados y nada. Iba a cerrar la puerta cuando divisó algo en el piso. Era una carta, dirigida para él y su novia. La recogió y corrió para ver si veía a alguien extraño… pero nada. Volvió a su casa y su novia lo miraba con preocupación debido a su extraño comportamiento, le devolvió una mirada de tranquilidad y ella lo hizo, se tranquilizó

¿?- ¿Qué te sucede Lee?

Lee – Nada importante Mariah

Mariah – Viendo el sobre que Lee traía en la mano - ¿De quién es esa carta?

Lee – Viendo el sobre – No lo sé, no tiene remitente y no pude ver quién la entregó

Mariah - ¿Por qué no la abres?

Lee – De acuerdo – Mariah se acerca para leer también. - ¿Tú que opinas? – Dijo al terminar de leer la carta

Mariah – Por mí no hay ningún inconveniente

Lee – Pues entonces, así será

Mariah – De acuerdo. Terminaré de hacer la comida

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Unos hermosos Creo que adoro escribir eso ojos color rojo rubí se abrieron lentamente, esperaron a adaptarse a la oscuridad. Cuando lo hizo, comenzó a recorrer todo lo que había en la habitación, una mesa de noche con una lámpara, una mesita para tomar té con un par de sillas, esas sillas sí que servían, una gran ventana con un hermoso balcón por donde los rayos de la luna llena se dejaban ver intensamente. En verdad era hermoso admirar la luna. Era muy noche aún o… muy temprano, dependiendo del punto de vista. Eran apenas las tres de la mañana del dos de julio.

Sintió claramente cómo algo se removía en su cama, así que decidió girarse hasta topar con lo que fuera que estuviera moviéndose. Era un "minino" travieso que no paraba de moverse, tenía frío y quería el calor de su cuerpo para calentarse, estaba acurrucado. Se acercó a este y lo abrazó por la cintura, haciendo que se estirara. Primero besó su nariz, después su frente y después sus labios. Ante esto, el travieso minino fue perdiendo el sueño y respondiendo el beso.

El chico bicolor no resistía los encantos del gatito, comenzó a desabotonar la parte superior del pijama del minino mientras besaba los labios de este, lentamente y con pereza, el gatito abrió los ojos para encontrase con una seductora mirada color rojo rubí y el bicolor encontrándose con unos hermosos ojos color dorado con rasgos felinos, en verdad amaba aquellos ojos, y eran solamente suyos.

Ray – Entre beso y beso – Kai… es muy temprano

Kai – Y…

Ray – Vamos a despertar a todos

Kai – Tú sabes muy bien que eso no es cierto

Ray – Kai… aún tengo sueño

Kai – Nada más tú y yo estamos a solas en estos momentos

Ray – Esa es tu culpa – Se detuvo – Deberías ponerle un alto

Kai – Acepto sugerencias

Ray – En verdad te falta experiencia – Se levanta de la cama sin la parte superior de su pijama y se dirige al baño – Un día de estos te enseñaré un par de mañas – Saca un balde y lo llena de agua – Este es tu trabajo, no el mío

Kai – No importa

Ray – Poniendo Shampoo, acondicionador y jabón de manos al agua y cualquier otra cosa pegajosa que encontró – Eres incorregible

Kai – No le veo problema

Ray – Sacando con esfuerzos al balde – Esto debe funcionar – Deja el balde en el suelo y va por una silla – Y si no, no sé que lo hará – Va a su cajón y saca un martillo, un clavo No sé cómo se llamen, se parecen a los clavos pero muuuuuuucho más gruesos y una cuerda – Deberías ayudarme

Kai – No gracias, estoy muy cansado

Ray - ¬¬ Y yo no importo

Kai – No – Dijo con tono frío

Ray – Y eso que me quieres

Kai - ¿Quién te dijo esa mentira?

Ray – La escuché por ahí – Se subió a la silla y comenzó a martillar el clavo O como se llame – Eres más alto que yo, ven a hacerlo

Kai - ¿Para qué si ya casi terminas?

Ray – Odioso – Terminó de martillar – Entonces pásame el balde

Kai – No

Ray - ¡No podré hacerlo yo solo!

Kai – Ingéniatelas

Ray – Ingéniatelas, ingéniatelas – Repitió remedándolo – Bien pero… a la próxima serás tú el que lo haga

Kai – Ya veremos

Ray – Exasperado – Eres odioso – Amarró la cuerda alrededor del clavo y siguió hasta la pata de la cama – Así está bien – Caminó hasta el balde – Ahora… esto – Dijo con dificultad al cargar el cubo – Va así – Ató el extremo libre de la cuerda a la manija del balde – Eso es – Dijo exhausto – Ahora… ¿Puedo dormir un poco más? – Dijo caminando hacia la cama y acostándose

Kai – No

Ray - ¿Qué no tienes otra palabra?

Kai – Acercándose a los labios de Ray – No

Ray – Quiero dormir TT

Kai – No

Ray – Por favor T.T

Kai – De acuerdo – Dijo al fin

Ray – ¿De verdad? – Preguntó emocionado

Kai – Cuando hayas saciado mi sed – Dijo finalizando

Ray – Me lo temía

Kai comenzó a besar los labios de Ray, y este sin más opción, respondió el beso. Al principio era pausado y lindo, lentamente se fue convirtiendo en uno más salvaje. Kai comenzó a bajar por el cuello de Ray, dándole pequeños mordiscos y, este por reacción, aventaba su cabeza hacia atrás. Kai se quitó prontamente también la parte superior de su pijama, su piel se quemaba por sentir la del chico chino.

Ray – Perdiendo su mente – Tan siquiera… podrías llevártelo con calma

Kai – Hace mucho que no lo hacemos

Ray – Es apenas una semana

Kai – Para mí es mucho

Ray – Entonces deberías ponerle un alto

Kai – Tú ya lo hiciste

Ray – Me refiero para siempre

Kai – Lo haré

Ray – Espero que esta vez lo cumplas

Su "plática" se detuvo. Kai comenzó a bajar hacia su pecho y cuando encontró una de sus tetillas, comenzó a chuparla con pasión, por su parte Ray no hacía más que responder a las caricias que el bicolor le hacía, sobándole los hombros y empujándolo más hacia abajo. Kai ponía resistencia, quería que el momento durara un poco más. Cuando terminó con esta siguió con la otra, siguiendo el mismo procedimiento, besarla, chuparla y morderla quedamente, hasta que quedara erecta. Sentía su pene palpitando de dolor ante la excitación, estaba emocionándose demasiado pronto.

Kai bajó más cuando su labor estuvo hecha, quitó rápidamente los pantalones de Ray y lo dejó en boxers. Acercó su cara a un bulto que se asomaba por estos, plantó un beso por encima de la tela y después lo lamió también por encima. Las mejillas de Ray estaban sumamente rojas provocadas por la acumulación de sangre. Trataba de no gritar, no quería alarmar a nadie. Aunque en realidad no necesitara hacerlo.

Kai comenzó a darle pequeñísimos mordiscos al ya muy erecto miembro de Ray, todo por encima de la tela, esto estaba volviendo loco al nekojin. Incapaz de seguir inmóvil aventó a Kai quedando encima de este, decidió que quería "jugar" un rato. Así pues comenzó a hacer el mismo recorrido que Kai le había hecho, a su manera, pronto Kai terminó sin pantalones y… sin boxers. Sin pensarlo introdujo el miembro palpante de Kai en su boca. Comenzó a succionarlo, a hacer un movimiento de abajo hacia arriba, las mejillas de Kai adquirieron un tono rosado, ahora muy común cuando estaba con el chino.

Como siempre, los colmillos de Ray raspaban el miembro de Kai, provocándole una especie de dolor y excitación al mismo tiempo que, combinados, lo hacían insoportable. Él se resistía lo más que podía pero… la sensación era indescriptible, a pesar de ya haberlo hecho varias veces, aún era excitante. Sus sentidos se concentraron en aquel punto que Ray trataba, y pronto eyaculó dentro de la boca de Ray, el cual lo bebió sin pensarlo. Le encantaba saber que él era el que provocaba eso en Kai. Al terminar de beberlo besó a Kai y le dedicó una hermosa sonrisa.

Kai probó su misma esencia a través de Ray, estaba extasiado. Kai volteó a Ray quedando como en el principio, se deshizo de los boxers de este y lo preparó. Metió un dedo en su cavidad, después un segundo y sin dejar que pasara mucho tiempo metió el último dedo en él. No bien se había acostumbrado al dolor cuando Ray sintió la punta del miembro de Kai en su entrada. Ray estaba acostado bocabajo con Kai encima de él.

Sus cuerpos eran cubiertos por una fina capa de sudor y sus cuerpos emanaban un calor increíble. Kai comenzó su trabajo, introducía y sacaba su miembro de Ray. En un instante se hincó con su miembro todavía dentro de Ray, Kai besaba los hombros de Ray y con sus manos masturbaba su miembro. Estaba en la gloria. Un entrecortado grito por parte de Ray anunció que tenía un orgasmo y se dejó ir en las manos de Kai. Unos minutos después Kai le siguió. Era maravilloso lo que el chino le hacía sentir, hacer y pensar.

Sus respiraciones agitadas, mejillas sonrojadas y las sábanas llenas de semen. Ray estaba adormilado así que Kai tuvo que pararse por otras sábanas para cambiarlas, cuando lo hizo recostó a Ray, se acostó él y lo abrazó por la cintura. Sus cuerpos aún estaban calientes. Su respiración estaba normalizándose. Ray se volteó y quedó de frente a Kai, admiraban sus cuerpos con la luz que la luna les proporcionaba.

Ray – Rompiendo el silencio – Ya va a venir – Dijo viendo en el reloj que eran las cinco de la mañana

Kai – Lo sé

Ray – Kai… - Se animó a decir – Hace casi un año que estamos juntos… hace más de siete meses que dormimos en la misma habitación y… hace ya medio año que nos hace lo mismo todos los días

Kai – Tu punto

Ray – Mi punto es que ya fue suficiente. Debes ponerle un "hasta aquí"

Kai – Sugerencias

Ray – La respuesta universal. Hablen

Kai – Lo haré

Ray – Y…

Kai – En la mañana

Ray – Es decir que tendré que soportar una mañana más

Kai – Sí

Ray – ¿Ahora sí puedo dormir un rato más? Antes de que venga

Kai – Analizándolo – No lo sé

Ray – Por favor Kai, tengo mucho sueño TT – Dijo con ojos de gatito hambriento

Kai – De acuerdo

Ray - Gracias – Dijo muy contento

Kai – Mañana me las darás

Ray - ¿otra vez mañana?

Kai – Y las veces que yo quiera porque eres mío

Ray – Me van a provocar un día un infarto

Kai – Aún así no te escaparás – Sintió que Ray respiraba tranquilo – Se durmió – Dijo dulcemente ¿Kai? ¿Hablando dulce? Se nota que es un fic – Será mejor descansar un poco antes – Vió el balde colgado sobre la puerta – Espero que eso funcione – Se durmió, eran las cinco de la mañana.

Sus cuerpos estaban desnudos, cubiertos solamente por la delgada sábana, ropa tirada por toda la habitación. El tiempo pasaba, lentamente los rayos de sol se comenzaban a hacer presentes. Ray tenía el sueño ligero (a pesar de todo) y Kai, bueno él lo había adquirido por las circunstancias. Claramente ambos escucharon como el seguro de su puerta se botó, esto los alarmó. Esperaron pacientemente. Se logró escuchar cómo giraban la perilla y… un golpe, la abrieron de golpe, alguien se paró debajo de la puerta. Una sorpresa no muy grata fue la que recibió.

¿? – Gritando a los cuatro vientos - ¡HERMA…! – Sus palabras quedaron inconclusas - ¡TE VOY A MATAR! – Era muy temprano para los gritos, apenas las seis de la mañana del dos de julio.

Ray – Sin abrir los ojos – Te lo buscaste

¿? – Tú… fuiste el culpable… Ray Kon

Ray – Sí y…

¿? – Te voy a matar ¿Sabes cuánto tardaré en quitarme esto del cabello?

Ray – Aiko deja de hacer tanto escándalo, quiero dormir

Aiko – Tardaré dos horas Ray

¿? – Entonces no debiste entrar a nuestro cuarto

Aiko – Pero quería jugar :3. No puedes culparme por eso hermano

Kai – No me digas así

Aiko – Con carita de inocente - ¿Qué no lo eres?

Kai – Empiezo a arrepentirme

Aiko – Convertida en chibi – Pero aún así me adoras

Kai – Eso yo lo dudo

Aiko – Con resignación – Ahora tendré que bañarme. Bueno de cualquier forma lo iba a hacer pero… tardaré mucho

Ray – Bien, genial. Ahora si me permiten quiero dormir un par de horas más. Tú y tu hermano me están volviendo loco. Quiero dormir – Dijo tapándose la cara con la sábana

Aiko – Empezando a cerrar la puerta – Esto no se ha acabado Kon. Ya tuve suficiente con la hamburguesa que trató de comerme

Ray – No importa, sólo quiero dormir – Escuchó cerrarse la puerta

Kai – Ya es tarde

Ray – Sacando la cabeza – Déjame dormir por favor

Kai – Y qué me darás a cambio

Ray – Lo que sea pero… déjame dormir en lo que ella se baña

Kai – Entonces, me lo darás en la noche

Ray – Resignado – De acuerdo TT – Se tapó la cabeza y comenzó a quedarse dormido. Sintió cómo unos brazos le rodeaban para darle calor y, con esto, se volvió a dormir.

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Un cuarto de baño, Un cuarto con azulejos blancos, un denso vapor blanco no dejaba ver claramente el lugar. Había una bañera y un jacuzzi. Dentro la bañera había alguien, cubierto por espuma, relajando su cuerpo por lo que se conjeturaba agua caliente. Estaba intentando quitar lo que sea que fuera que le cayó encima, escuchó a alguien tocando la puerta de su habitación.

Aiko – Pase – Gritó

¿? – Entrando al cuarto de baño - ¿Qué le pasó?

Aiko – Ray – Fue lo único que dijo

¿? – Usted se lo buscó

Aiko – No me regañes Hanna, suficiente trabajo tengo con quitarme esto – Una idea cruzó por su mente y dio una macabra sonrisa – Hanna…

Hanna – Viendo la cara de la chica – ¿Y ahora qué me hará hacer? – Preguntó conociendo las expresiones de la chica

Aiko – Ya sabes, lápiz, papel y mucho esfuerzo por tu parte

Hanna – Saliendo por las cosas – De acuerdo

Aiko – Tomando el lápiz y el papel – Esto… es lo que vas a hacer

Hanna – Viendo lo escrito - ¿Está segura?

Aiko – Bastante

Hanna – De acuerdo señorita – Dijo saliendo

Aiko – Aiko

Hanna – Volteando a verla - ¿Qué?

Aiko – Dime Aiko y no me hables de usted. Casi tenemos la misma edad.

Hanna – Apenada – Eso es imposible, usted es mi jefe, no puedo hacerlo

Aiko – Hanna, siempre has sido mi amiga en todos los momentos, es justo. Eres mi amiga, y los amigos no se mandan

Hanna – Muy apenada – Pero el señor Mitzuku…

Aiko – Si Mitzuku te dice algo yo hablaré con él

Hanna – Relajándose – De acuerdo… Aiko

Aiko – Gracias… - Silencio incómodo – Podrías hacerme ese favor… amiga

Hanna – Dalo por hecho – Salió de la habitación

Aiko – Les dije que tardaré dos horas, estarán tranquilos – Apresuró su baño – Bien, es hora de las travesuras – Dijo con cara de niña traviesa – Y yo soy una experta en eso

Salió del baño a las seis y media de la mañana, salió sin siquiera secarse su cuerpo. Estaba mojando la alfombra, tomó su ropa íntima y se la vistió, tomó un jeans y una blusa pegada a su cuerpo que le caía de los hombros Son de esas que están ahora de moda, que dejan al descubierto los hombros y se la puso, después tomó una blusa muy holgada y un pantalón igual de holgado de color negro, por último tomó un pijama limpio color celeste y se lo puso, se sentía muy pesada pero… todo era parte de su plan.

Cepilló su cabello y tomó una última cosa, la metió en un bolsillo. Tomó a Kaizer, se puso sus calcetas y tenis, y salió de su habitación. Regresó a su cuarto, había olvidado algo, sacó otro balde, lo llenó de agua sumamente fría, salió otra vez como hacía cuarenta minutos lo había hecho, sacó de nuevo la llave de su camafeo pero… la puerta estaba abierta… giró sigilosamente la perilla, abrió la puerta de golpe y, desde fuera del marco de la puerta, les echó el agua helada al par de chicos que dormían tranquilamente en su cama.

Aiko – ¡Hora de despertar!

Ray – Gritando por exasperación - ¡¿Qué es mucho pedir dormir hasta tarde tan siquiera un día!

Kai - ¡Ahora verás!

Aiko – Primero tendrás que alcanzarme, además necesitas ponerte algo

Kai – Levantándose de la cama - ¡Ya verás cuando te atrape! – Tomó sus boxers del suelo y se los puso – Ven aquí – Tomó a Dranzer y su lanzador

Aiko - ¿Qué me creíste tonta? – Se perdió de la vista de los chicos, había corrido por el pasillo

Ray - -- Mi vida es un martirio TT ¡Ahora ya me desperté! – Dijo con resignación y comenzando a parase

Kai – Corriendo tras de Aiko – Ven y enfréntame

Aiko – Ni en broma – Comenzaba a bajar las escaleras

Ray – En la habitación de Kai – Será mejor que me vista. Tengo un mal presentimiento de todo esto TT – Lentamente buscó su ropa y pijama entre toda la revuelta que estaba en el piso

Kai – Bajando las escaleras – Es suficiente, día tras día nos despiertas de la misma forma. Dame esa llave

Aiko – Llegando al tercer piso – No quiero – Siguió bajando

Kai – Llegó al tercer piso – No te la estoy pidiendo, te estoy ordenando –Siguió bajando

Aiko – Si la quieres atrápame – Segundo piso y bajando

Kai – Me tienes miedo. Enfréntame – Segundo piso, sigue a Aiko

Aiko – No te tengo miedo – Primer piso y corrió al recibidor

Kai – Entonces detente y pelea – Sigue a Aiko

Aiko – Deteniéndose frente a la puerta principal - ¿Yo? – Con carita de niña inocente

Kai – Alcanzándola y poniéndose frente a ella – Ya es mucho. Esto tiene que terminar – Dijo muy molesto

Aiko – No quiero 3

Kai – No te estoy preguntando – Prepara su lanzador – Vamos Dranzer

Aiko – Esquivándolo – Abusivo

Hanna – Ya está todo listo – Ve la alfombra - ¡NO POR FAVOR, OTRA VEZ NO!

Aiko – Volviendo a esquivar a Dranzer - ¡MITZUKU!

Mitzuku – Saliendo de Dios sabe dónde – En dos horas la traen señorita

Hanna – Es la tercera esta semana

¿? – Veo que hoy comenzaos más temprano de lo normal

Hanna – Sobresaltándose - ¡Señor Dickenson!

Sr. Dickenson – Viendo a Kai pasar por un lado de él – Buenos días Kai

Kai – Ven aquí niñita

Sr. Dickenson – Viendo a Aiko – Buenos días hija

Aiko – Esquivando quién sabe cómo a Dranzer y parándose junto al Sr. Dickenson – Buenos días tío Stanley – Le da un beso en la mejilla y corre

Hanna – Viendo las maletas del Sr. Dickenson - ¿Se va?

Sr. Dickenson – Sí, es mejor que estén a solas

Hanna - ¿Voy a estar sola con ellos? TT

Sr. Dickenson – Tranquila, Mitzuku y los demás te ayudarán.

Hanna - TT De acuerdo

Sr. Dickenson – Bien me marcho – Tomó su maleta - ¡Nos vemos al final del verano hija!

Aiko – Saltando para esquivar un ataque de Dranzer - ¡Que tengas un buen viaje tío, me traes un recuerdo!

Sr. Dickenson – Je, je, je, de acuerdo

Aiko – Adiós – Pierde de vista a su tío cuando se cierra la puerta – Kai, creo que estás siendo muy severo

Kai – Eso debiste pensarlo antes. ATACALA DRANZER –Gritó determinado

Aiko – Espera – Escuchó el timbre de la puerta - /Perfecto/ A que no me alcanzas – Dijo burlona a Kai y corrió hasta la sala principal – Hanna

Kai – Te arrepentirás – Siguió a Aiko

Hanna – Sí, si, ya voy – Caminó hasta la puerta – Pero… pasen – Dijo al final –Por favor siéntense en un sillón – La mansión había cambiado, había un pequeño cuartito casi a la entrada para que los que llegaban, se pudieran sentar y espera

¿? – Gracias – Siguió a Hanna – Está… - Fue interrumpido por el timbre

Hanna – Discúlpenme por favor, en seguida vuelvo – Salió de la habitación y caminó hasta la entrada principal – Bienvenidos

¿? – Disculpe está…

Hanna – Pasen por favor y síganme

¿? – Pero… - Dijo la persona mientras seguía a Hanna

Hanna –Abriendo la puerta – Aquí esperen por favor

¿?1/¿?2 - ¿Ustedes? – El timbre de nuevo

Hanna – Con cara de cansada – Ahora vuelvo, esperen por favor – Salió de nuevo de aquella habitación y caminó hasta la entrada principal. Abrió - Pasen por favor TT

¿?3 – Muchas gracias yo…

Hanna – Síganme por favor

¿?3 – Pero… - Siguió a la chica – Oh vaya, qué sorpresa – Dijo al ver a las otras personas ahí

Hanna – En seguida…. – Algo la interrumpió

¿? – Hanna, ¿Ha visto a…? Oh cielos – Algo se colgó a su cuello – Pero que…

¿? Chica – ¡¡¡¡¡¡¡Ray!

Ray – ¿Mariah? – Confundido - ¿Qué haces aquí?

Mariah – Haciendo un puchero – Feo, yo que vengo a verte

Ray – Lo siento es que… ¿Lee?

Lee – Hola amigo, tu amigo nos envió una carta para que viniéramos de nuevo. Supongo que a ti también y que llegaste anoche – Dijo esto por su vestimenta

Ray – Pues yo… - Dijo sonrojado y, no era para menos, estaba vestido en pijama, la que Kai le regaló para ser más exacto

¿? – Eso no importa ¿A qué hora sirven el desayuno?

Ray - ¿Tyson?

¿? – No seas descortés

Ray - ¿Hilary?

¿? – Creo que aquí van a haber problemas

Ray - ¿Max?

¿? – Me hubiera quedado en casa

Ray - ¿Jefe? ¿Todos están aquí?

Tyson - ¿Qué no nos ves? ¿Dónde está la paleta de hielo?

Ray - ¿Quién? – Preguntó al no entender las palabras

Max – Creo que se refiere a Kai

Ray – Pues él… - Se escuchó que algo se rompía

Hanna - ¡NO OTRA VEZ! – Salió de aquella habitación dejando la puerta abierta

¿? - ¡MITZUKU!

Mitzuku – Salido otra vez de Dios sabe dónde – La traen en una hora señorita

¿? – Sígueme – Corre hasta quedar en frente de la vista de todos los chicos y voltea a verlos – Hola 3

Hilary – Sumamente sorprendida - ¿Aiko?

Max - ¿La conoces?

Hilary – Claro. ¿Qué haces aquí? ¡Ya sé eres la novia de Alex!

Ray – Diciendo en bajo – Eso lo veo muy difícil

Mariah - ¿Qué dijiste Ray?

Ray – No nada

Aiko – Viendo de reojo a los chicos – Veo que llegaron – Salta hacia atrás – Eres muy lento

¿? – Ven aquí y deja de huir

Tyson – Esa voz

Max – Es de Kai

Kai – En frente de todos – Deja de huir – Se detuvo al sentir las miradas

Ray – Nervioso – He, Kai, verás, parece que los chicos llegaron – El bicolor solamente traía sus boxers

Kai – Sonrojado – Me voy – Dijo con su tono frío

Aiko – Pero si aún no me atrapas

Kai – Le lanzó una mirada – No he terminado contigo

Ray – Kai…

Tyson – Kai…

Max – Estaba…

Kenny – Sonrojado…

Hilary – Eso…

Lee – Es…

Mariah – Imposible

Todos – Explícate Ray

Ray – Nervioso – Pues yo…

Hanna – Recuperada – Usted se va a ir a cambiar jovencito. No puede estar por la casa en pijama

Ray – Sonrojado y caminando a su cuarto – Sí – Era empujado por Hanna

Mariah – Espera…

Hanna – Volteando a ver al resto de los chicos – Por favor síganme – Vió cara de confusión en todos – Voy a mostrarles su cuarto

Aiko – Me voy

Hanna – Espera, no puedes estar en pijama

Aiko – Diles a los chicos que vayan al mismo lugar de siempre. Ellos saben cómo llegar

Hanna – Pero…

Aiko – Estaré esperando – Corrió hasta la salida y se perdió

Hanna – Nunca cambiará

Hilary – Disculpe pero…

Hanna – Prestándole atención – Síganme – Los chicos caminaron tras de ella con sus maletas. Subieron hasta el último piso pero… siguieron hasta el fondo

Hilary - ¿No voy a dormir al principio del pasillo esta vez?

Hanna – No – Caminó hasta la habitación junto a Aiko – Aquí dormirán el joven Tyson y el joven Max – Max se sonrojó bastante – Espero que les agrade – La habitación tenía la combinación de sus dos cuartos, videojuegos y piezas de Beyblade y era de un tono celeste verdoso, la cama era matrimonial, el resto era como lo recordaban. Les entregó la llave

Tyson – Sin inmutarse – Genial – Dejó sus maletas

Max – Muy rojo – Gracias

Hanna – Caminando hasta la habitación de enfrente – Aquí dormirán el joven Lee y la señorita Mariah

Mariah – ¿Para nosotros? Esto es muy sospechoso – Ciñó la mirada

Lee – Dejando sus maletas y la de Mariah – Basta Mariah, somos los invitados

Mariah – De acuerdo

Hanna – Por último – Caminó al frente y junto al cuarto de Tyson y Max – Esta será el cuarto de la señorita Hilary y el joven Kenny

Todos - ¿Qué?

Hilary – No se metan en lo que no les importa

Kai – Sale de su habitación con cara de "Ténganme miedo" y siente las miradas en él - ¿No les gustó el espectáculo? – Dejó a todos congelados

Tyson – De hecho, quisiéramos que la repitieras – Kai le lanzó una mirada asesina

Max – Dándole un codazo – Cállate

Tyson – Pero si yo… - Alguien lo interrumpió

Ray – Saliendo de la misma habitación que Kai

Todos - ¿Qué?

Ray – Sin entender - ¿Qué sucede? – Todos estaban estáticos

Kai - ¿Dónde está?

Hanna – Pues ella… - Dudó en decirle

Ray – Hablándole amablemente – ¿Podría decirnos donde está?

Hanna – Ahora más relajada – Ella dijo que los esperaba donde siempre, que ustedes ya sabían llegar

Kai – Perfecto – Se echó a correr

Ray – Kai espera – Dijo al viento – TT Me quiero morir

Hilary - ¿Qué es todo esto Ray? ¿Dónde está Alex?

Ray – Pues verán… - Analizó sus palabras – Será mejor que me sigan

Ray iba con cara de "Dios por qué me haces esto", caminaban lentamente, salieron de la mansión y caminaron hasta la caballeriza, cuando estuvieron cerca pudieron ver a Kai salir montado en Trueno hacia el bosque, dejando a todos confundidos, Ray siguió caminando sin darle importancia. Caminó hasta Tigre y lo acarició, el caballo estaba contento de verlo, y relinchaba para demostrárselo.

Ray – Acariciando la cabeza del caballo – Ahí están sus caballos chicos – Dijo señalándolos – Los espero – Alguien le llamó, era el chico que cuidaba a los caballos

Chico – Disculpe joven Ray – Llamó la atención de Ray – Estos son para sus otros dos amigos – Dijo refiriéndose a Mariah y Lee

Ray – Gracias – Caminó con los caballos hasta donde estaban ellos – Tomen, montéenlos, no son salvajes

Mariah – Con algo de miedo – Pero…

Lee – Montando en su caballo – Gracias amigo – Mariah hizo lo mismo

Todos cabalgaron a sus respectivos caballos, Ray salió de la caballeriza con paso lento, no llevaba prisa, todos le seguían. Estaban aún muy sorprendidos y confundidos. Se adentraron al bosque y, antes de que los chicos dijeran algo él les mencionó que no había ningún problema así pues, todos se deleitaron con la vista que estaba siendo recorrida hasta que… Ray se de dio cuenta de algo… Rayo no estaba en su lugar… Esto se iba a poner feo

Ray – TT Matenme por favor

oooooooooooooooooooooooooooooooooo

Una chica había llegado al lugar que esperaba, rápidamente comenzó a quitarse la ropa quedando en un pantalón y una camisa muy holgada de color negro, sacó una gorra de su pantalón y recogió su largo cabello dentro de esta. Ahora estaba preparada. Escuchó como un caballo se acercaba rápidamente. Sonrió ante esto, todo estaba saliendo tal y como lo planeó. Era tiempo.

Aiko – Al ver a otra persona frente de ella - ¿Te gustó mi sorpresa?

Kai – No

Aiko – Qué lastima

Kai - ¿Por qué estás vestida así?

Aiko – Guiñándole un ojo – Ya verás

Kai – Eso no me importa

Aiko – Lo sé

Kai – Me las pagarás

Aiko – Ahora estoy dispuesta

Kai – Prepárate

Kai/Aiko – Tres… dos… uno… LET IT RIP!

Sus blades chocaron en el aire y después bajaron por efecto de la gravedad Aunque admítanlo, esos trompitos desobedecen cualquier ley física que exista Chocaron entre sí y siguieron su camino, salieron en caminos diferentes chocando contra un árbol cada uno y luego se juntaron de nuevo en el centro. Todo era muy reñido, todo era muy parejo pero… Kai estaba enfadado y ese era un punto a su favor

oooooooooooooooooooooooooooooooooo

Siete chicos Y no son los digielegidos seguían su camino por aquel sendero que, el que los guiaba, ya conocía de memoria. Pronto llegarían al lugar, aunque el chino no quería. El resto no decía nada. Pronto lograron escuchar el sonido de los metales que chocaban entre sí y apresuraron su caminata. Cuando lograron divisarlos se bajaron de los caballos y los dejaron que anduvieron sueltos. Ray estaba asombrado y… el resto también

Ray – Gritándoles - ¡¿Qué creen qué hacen!

Kai – No te metas

Ray – No pensaba hacerlo pero…

Tyson - ¡Qué bien! Una beybatalla, yo quiero participar – Se detuvo en seco al ver al contrincante - ¿Alex?

Alex – No es tu turno Tyson. Esta es una pelea entre Kai y yo

Ray – Todas las mañanas es lo mismo

Hilary - ¿Dónde está Aiko?

Alex – Sin perder concentración – Ahora la verán ¡ATACA KAIZER! – Su blade comenzó a brillar y la bestia salió

Ray – Para qué se molestan. Siempre empatan

Kai – No esta vez – Dijo en bajo - ¡Pagarás lo que hiciste! ¡VAMOS DRANZER! – Dranzer salió de su blade y comenzó a pelear con Kaizer

Todos estaban asombrados por el poder de aquellso seresque, en lo que ellos respectaban, no eran humanos. Kenny, para el fastidio de su novia, abrió a Dizzy para analizar el poder de pelea de sus blades y su sorpresa fue mayor que, en sólo un año, su poder había aumentado a casi el doble. Cuando se los dijo a los demás a todos les sorprendió menos a Ray quien ya casi preparaba una cuerda para colgarse, no quería ver cómo terminaría aquello.

Dos blades chocando en el suelo y dos seres poderosos peleando en el cielo. Era digno de verse, ambos estaban luchando con todo lo que tenían pero, había algo extraño en aquella situación. Pronto descubrieron qué era. Kai firmemente avanzó quitándole terreno a Alex el cual empezaba a dar tropiezos hacia atrás. Esto estaba pasando a mayores y Ray corrió al lado de Kai.

Kai – Hablándole a Ray – Quédate atrás

Ray – Pero…

Kai – Viéndolo de reojo y dándole una sonrisa – Estaremos bien

Ray – De acuerdo – Dio unos pasos hacia atrás para estar a salvo

Kai – Es hora de terminar – Dijo a Alex

Alex – Ya lo creo así que… ¡ATAQUE FINAL KAIZER!

Kai – Pero esta vez… ¡ACÁBALA DRANZER!

El blade de Kai comenzó a dar especies de golpes por medio del viento, rasguñando la ropa de Alex y lastimando a Kaizer el cual rápidamente iba perdiendo terreno. En un movimiento rápido Dranzer empujó a Kaizer el cual salió disparado hacia donde estaba Alex, pasó por enfrente de ella, avanzó hacia arriba y, por el efecto de la gravedad, cayó al suelo sin girar. Kai había ganado

Tyson – Kai ganó

Max – Eso es asombroso

Hilary - ¿Alex estás bien? – Preguntó ante la mirada perdida del chico – Pero…

La ropa de Alex comenzó a desgarrarse al punto de haber quedado hechos jirones, por el mismo peso de ella misma calló al suelo, tanto su camisa, como su pantalón, como la gorra que había sido partida a la mitad. Esta última había sido cortada por su propio blade al ser empujado por Kaizer. Estaba feliz. Kai la había derrotado. Ahora era el momento. Era hora de la verdad.

Todos miraban asombrados, creyeron por un instante que el chico iba a quedar desnudo frente a ellos pero, si esta iba a ser una sorpresa, lo que vieron fue mayor. Primero que nada no quedó desnudo. Segundo llevaba debajo de aquella ropa otra, una blusa ajustada a su cuerpo con hombros descubiertos, un jeans a la cadera y… su cabello era largo. Tenía senos. Era increíble

Hilary – Salió primero del asombro - ¿Aiko?

Aiko – Fuiste muy hábil Kai

Kai – Tu también – Tocó su pecho, su bufanda de desgarró por completo

Tyson - ¿Kai admitió que esa chica era buena?

Max – Disculpen pero… ¿Quién eres?

Hilary – Viendo el cuello de Kai y luego el de Aiko – Sus medallones. Tienen medallones iguales

Aiko – Camafeos

Ray – Acercándose a Kai – Veo que ahora le ganaste

Kai – Sí

Ray – Son camafeos – Dijo a Hilary – Son especiales – Sacó algo de su cuello – Solo se pueden abrir juntos

Mariah – Muy bien Ray Kon, explícate.

Ray – Pues verás resulta que estos camafeos solamente se pueden abrir con ayuda del de Kai, el de él tiene una saliente que puede introducirse en el mío y en el de Aiko para abrirse

Mariah – No me refería a eso

Aiko – Caminando hasta Kai – Lo lograste :3 – Se arrojó a su cuello - ¡Te quiero eres el mejor!

Todos – O.O

Aiko – Me venciste al fin hermano

Todos - ¡¿Hermano!

Kai – Sueltame – Dijo con su tono frío

Aiko – Volteando a ver a los otros y sin soltar a Kai – Me presentaré soy Aiko Sumeragui, sobrina de Stanley Dickenson y hermana gemela de Kai Hiwatari – Vió a todos con una cara de pregunta – Soy Alex, el que conocieron al principio – Caminó hasta un lugar que había pasado desapercibido por todos - ¿Quieren comer? – Los invitó a lo que parecía un picnic, con un mantel en el suelo y cientos de platillos ahí – Yo invito

Todos los chicos se acercaron lentamente a donde la chica los esperaba, Ray y Kai fueron los primeros en llegar y se sentaron juntos. Era temprano, las nueve de la mañana. Ante la mirada de pregunta de todos comenzó a relatarles quién era, desde su niñez en la abadía, el desprecio por parte de Voltaire, su adopción por parte de los Sumeragui, la muerte de ellos y su hermano Haku, su determinación de decirle a Kai quien era ella, hasta la actualidad. Todo sin omitir ningún detalle aunque, dejando sin decir lo que creyó prudente. La mañana avanzó y el medio día llegó

Aiko – Eso es todo

Mariah – Es imposible

Lee – Es algo extraño lo admito

Kenny – Lo que me sorprendió fue su avance en tan poco tiempo

Ray – Estos bárbaros no hacen más que entrenar

Max – Y se quedaron aquí desde hace un año

Ray – Exacto

Tyson - ¿Haciendo qué picarones? – Provocó que Ray se pusiera más rojo que un semáforo y Kai un leve sonrojo

Hilary – No seas descarado – Se calmó - ¡Qué hermoso lugar! ¿Por eso no querías que viniéramos aquí?

Aiko – Sí – Se paró de donde estaba sentada – Hanna ya les mostró sus habitaciones. Son a prueba de sonido, ningún sonido sale de ahí así que, pueden estar tranquilos de hacer lo que quieran – Sonrojo por parte de todos - ¿Quieren nadar?

Hilary – Yo no traigo mi traje de baño puesto

Aiko – Tú sabes que todo eso lo arreglo yo. Mitzuku

Mitzuku – Salido por tercera vez de quién sabe donde – Aquí están señorita – Instaló unos vestidores portátiles. Nueve en total. Cada uno tenía un traje para cada chico identificado por una etiqueta con el nombre de cada uno en la puerta – Que la pase bien señorita

Aiko – Gracias – Se dirigió a los chicos – Adelante

Nueve chicos se metieron a sus respetivos vestidores y salieron al cabo de unos instantes. Las chicas vestían trajes de dos piezas, Mariah uno de color rosa, Aiko uno color azul fuerte y azul claro y Hilary uno color café. Los chicos salieron con un traje en forma de short, el de Max era verde, el de Tyson color azul eléctrico, el de Lee era negro, el de Ray negro con blanco y por último el de Kai que era azul claro con oscuro. En realidad no resultó admirable que el color de su traje de baño fuera igual al de Aiko sino que, estuviera en traje de baño.

Hilary - ¿Permaneceremos aquí todo el verano otra vez?

Aiko – Si es lo que quieren

Todos – SI

Aiko – Así será

Mariah y Lee se metieron al agua juntos, Tyson y Max jugaban a echarse clavados, Hilary peleaba por que Kenny dejara a Dizzy y entrara con ella al agua (su relación ya había quedado en claro, al principio les asombró pero eso pasó pronto) Ray forcejeaba con Aiko para no entrar al agua. Kai llevaba tiempo enseñándole pero, aún tenía miedo y, Kai por su parte, hacía como quien no estaba escuchando y se dedicaba a asolearse. Ray estaba al borde de la desesperación hasta que sintió que alguien lo jaló y lo recostó a su lado.

Ray – Gracias

Kai – Me lo pagarás a la noche

Ray - ¿Podré dormir más en la mañana?

Kai – Veremos

Ray – De acuerdo

Aiko – Haciendo un puchero – Eso no es justo – Cambió su cara a una de felicidad – Todo ha terminado

Kai – Y a fin de cuentas cumplimos tus caprichos – Dijo con la mirada al cielo "asoleándose"

Aiko – Sí 3 – Eleva su mirada al cielo, estaba sentada en una orilla con su cuerpo bajo el agua - /Al final de cuentas era cierto lo que me decía mi papá, todo sucede por una razón. Tuve que sufrir para encontrar la felicidad nuevamente y, no me arrepiento. Los extraño pero, estoy segura que si yo estoy feliz ellos también lo estarán. Aún lo recuerdo…

FLASH BACK

Aiko – Mi cuerpo pesa mucho, mis ojos, por más que lo intente, no puedo abrirlos.

Ray - ¿Vendrás?

Aiko – Estoy cansada. Quiero descansar por siempre

Kai – Acercándose a Aiko – Entonces ven

Aiko - ¿Para qué? No soy una Hiwatari, no soy una Sumeragui y tampoco soy una Dickenson, no soy nadie.

Ray – Acercándose también a Aiko – Eso es porque no puedes ser uno sin dejar de ser el otro. No eres únicamente una Hiwatari, una Sumeragui o una Dickenson porque…

Kai – Tú eres una Dickenson, una Sumeragui y una Hiwatari al mismo tiempo

Ray – Creciste con los tres, no puedes ser solamente uno

Aiko - ¿Soy los tres? También una Hiwatari

Ray – Por supuesto

Aiko – Eso quiere decir… - Su cuerpo comenzó a pesar mucho

Kai – Es hora de irnos – Se hincó junto a Aiko

Aiko – Gracias Ray, gracias Kai, son los mejores – Su mente se fue sumiendo en un mundo de oscuridad absoluta, sintió cómo su peso fue mayor – Gracias papá, mamá, hermano, los extraño – Dijo casi en un susurro antes de que la oscuridad fuera mayor – Gracias Kai, hermano – Logró decir antes de que su mente dejara de funcionar, antes de que su peso cayera por un vacío, la oscuridad se hizo presente. Antes de esto, logró escuchar unas últimas palabras

Kai – Vamonos a casa hermana - Después, nada. Sintió como su cuerpo pesó a niveles inconsiderables y, al mismo tiempo, cómo flotaba. La pesadilla terminó. Sintió unos fuertes brazos bajo su cuerpo, Kai la cargaba, le daba la sensación de estar flotando, se sentía pesada y a la vez ligera.

Su cuerpo ya no respondió. Su mundo se hizo nada, y en esa nada, al fin pudo descansar como lo deseó desde que recordó su pasado. En paz. Una oscuridad profunda, una oscuridad eterna, ningún sonido entraba, ningún sonido salía. Eso era… lo que esperó por tanto tiempo… la paz eterna y… ahora la había conseguido… al final… todo pasa por una razón… todo había terminado.

FIN FLASH BACK

Aiko – Viendo al cielo - /Gracias mamá, gracias papá, gracias hermano Haku porque sé que siempre estuvieron conmigo en todo momento. Nunca estuve sola, a pesar de que lo pensé y lo sentí, siempre estuvieron a mi lado. Ahora soy feliz, y ustedes pueden descansar en paz/ - Sintió algo frío recorrer su cuerpo - ¡Está helado!

Kai – Nunca lanzo amenazas en vano – Siente que su cuerpo pierde el equilibrio y cae al agua - ¡Kon!

Ray – No descuides tu retaguardia – Siente también el equilibrio y cae el agua junto a Kai

Aiko – Y tu tampoco

Todo era tranquilidad, nueve chicos divirtiéndose. La escena se va alejando de aquel lugar, Kenny al fin había cerrado a Dizzy y nadaba junto con Hilary, Mariah estaba acostada asoleándose con Lee vigilándola, Max y Tyson dándose besos mientras juegan en el agua. Por último Aiko y Kai intentan meter a un muy asustado minino Ray al agua el cual pide auxilio a gritos (aunque en realidad la profundidad en la orilla no era mucha) a fin de cuentas terminó perdiendo. Kai y Ray estaban en la orilla hablando. Aiko por su parte estaba nadando y disfrutando. Era feliz y nada lo cambiaría. La escena se vuelve totalmente oscura.

Sign of Wish »»

tsukame ta yume wa itsumo

katachi wo kaete shimau kara

kidzuka nai uchi ni subete nakushiteru kotomo aru deshou

dakedo kitto

sugita kinou wo furikaeru tabi

kokoro ga itamu kara

wasure kaketeta omoi no kakera

mienai asuni sagasou yo

"i believe in my dream" hakanai kedo

kono sekai no katasumi de

sabishisa wo korae nagara

kagayaku hi wo matte iru

itsumade mo kienai

"a sign of wish"

nemuranai yoru ni hitori ibasho wo sagashi tsudzuketeru

kiesouna hoshi ni hitotsu negai wo todoke rarerumade

kimi wa motto

tsuyoku narukoto kodoku datte koto

mou wakatteru kara

tooi maboroshi oikakeru you ni

mezame sora ni tobi tatou

nanairono niji ni tokeru

zenia no saku ano okade

taiyouga warai kakeru

mabushii yume shinjiteru

itsumademo mitsumete

"a sign of wish"

"i believe in my dream" hakanai kedo

kono sekai no katasumi de

sabishisa wo korae nagara

kagayaku hi wo matte iru

itsumade mo kienai

"a sign of wish"

Aiko – Solamente escuchándosele la voz – Al final, todo sucede por una razón….

NOTAS DE LA AUTORA

OEEEEEEEEEEEEEEEE, lo terminé (agregar baile de victoria de azukaangel) (tarareando) Lo terminé, lo terminé, lo terminé lo… ¿Lo terminé? (se detiene en seco) TT Ahora estoy triste. Lo terminé. Bueno, espero que les haya gustado. Al final me quedó algo cursi (y largo) pero tenía que terminarlo feliz y no dejarlo incluso. Me gusta que el final quede claro. Gracias a todos los que siguieron este fic a lo largo de su trayectoria. Ojalá y el final les haya gustado. Y a todos los que lo leyeron después de que se terminó, espero que les agradara y no se hayan aburrido. Intenté por todos los medios mantenerlos en suspenso para no aburrirlos. Creo que esa es la base de una buena historia. Eso no importa. Gracias a los que me animaron para terminarla, en especial a Sigel quien no dejó de enviarme e-mails. Aquí está el final amiga. Y para los que lo van leyendo o apenas lo ven, no dejen de enviarme reviews para saber qué opinan del fic, no importa que ya lo haya terminado, quiero saber su opinión. Gracias

Sayonara.

Espero tu opinión ;)