Infidelidad o Amor.

De lis.

Capítulo 1

Infiel.

-Por favor Verónica, te suplico que te tranquilices- Harry se estaba desesperando un poco- deja que presente a los niños nuevos

-Pero Harry... Nosotras no queremos conocer niños, por lo menos de mi parte, porque como tú eres mi novio...

-¡Claro que no!, no seas tonta Vero, Harry me quiere es a mí ¿Verdad Harry?

-Niñas cálmense. Y si te quiero mucho Gabriela.

-Pues déjenme decirles que están todas muy pero muy pero muy rete equivocadas, porque mi queridito Harry solo tiene ojos para mí. Claro no para ustedes par de enanas sin cerebro

-Vanesa, por favor. Ya sé que eres mayor pero...

-Pues les aviso yo también, que Harry nunca podría tener ojos para unas como ustedes. Sólo mírense, parecen una par de vacas andantes. Claro, sólo existe una Erika, y SÓLO UNA para Harry.

Santo cielo, de dónde demonios saqué yo este trabajo

-Bueno ahora sí niñas, les suplico que hagan silencio para que no los intimiden.- Bueno, al menos se callaron. Harry abrió la puerta para dar paso a dos niños de aproximadamente siete años. Uno era bajo, de ojos café y cabello castaño, y otro de cabellos lisos y ojos azules claros. Todas las niñas se les quedaron mirando perplejas. De seguro pensaban que era mentira que iban a entrar hombres a ese colegio.

-Bueno niñas, les presento a Daniel y a Jorge. Espero que los traten bien, y traten de integrarlos a sus grupos.

Por unos segundos, ninguna dio seña de movimiento alguno, todas parecían un poco apenadas y desorientadas. Cristina había borrado su habitual sonrisa, dándole miraditas al suelo. Gabriela no se movió ni dio señales de que quisiera llorar, Andrea se quedó parada enfrente de Harry y las demás no hacían más que cuchichear. Y mucho más lejos, se encontraban Liliana y Mariana mirando hacia los chicos con cara de asco.

Un niño se le acercó a Harry y le dijo en voz baja algo que ni su compañero pudo escuchar. Erika se les acercó a los dos, sonriéndoles de una manera excesiva. Los dos chicos sintieron un poco de miedo, y no era precisamente porque fuera niña, más bien, porque su sonrisa la hacía ver... un poco... extraña, por decir.

-Mucho gusto, mi nombre es Erika.- Dijo con su tono habitual de sifrinería total- Si quieren, vengan conmigo, porque ahí si que es verdad, que si se juntan con ese par de enanas, van a terminar como ellas.

Sólo Jorge pareció responderle bien a Erika, ya que Daniel parecía más interesado en Andrea; que miraba cabizbaja. Optó por acercársele y saludarla, aunque los dos parecían muy tímidos como para dar la primera palabra.

Harry miraba aquellas escenas con una leve sonrisa, pronto sonaría el timbre para la comida, y tal vez se acabaría el silencio de todas (Bueno, casi todas...). Oyó el timbre y fue a abrir, en la puerta, se encontraba Hermione. Llorando.



-Ginny, cariño, dónde dejé la túnica azul. No la encuentro por ningún lado. Ya se hace tarde para llevar a Carol al colegio.

-No sé cariño, no la habías puesto en la mesa donde estaba comiendo Carol.

Los dos se echaron una mirada preocupada, y caminaron hacia la sala. Y precisamente lo que temían ya había pasado. Carolina había tomado la túnica azul de Draco y la había baboseado toda, hasta con la comida que tenía en la mesa. Ginny, trató de reírse un poco para calmar la situación, porque Draco tenía una cara...

-No te preocupes amor... este... yo- Ginny no dejaba de reírse nerviosamente- Mejor te busco otra túnica ¿Sí?- No esperó a que respondiera y se marchó con pasos largos a la habitación.

-¡Papá!- Carolina no dejaba de reírse (Como si aquello fuera un chiste), pero como siempre, Draco le perdonaba todo a su hija (Que consentidor)

-Aquí tienes amor- Ginny le entregó una túnica negra- Y aquí tienes tu portafolios ¿Necesitas algo más?

-No gracias cariño- Dijo mientras alzaba de lado a lado a Carolina- Ya está todo listo. Regreso a las tres, y vamos los tres a reunirnos con Harry.

Draco salió de la casa cargando muy animado a su hija. Si había algo que el adoraba eran su esposa y su hija. Por todo el camino al colegio, Carolina fue observando cada cosa como si fuera algo espeluznante y nuevo (aunque para ella sí lo era) mientras decía unas cuantas palabras sin sentido.

Llegaron a la puerta del colegio para Brujas y Brujos menores de diez años. Era un lugar con un gran patio trasero, un lago (Que era igual que una piscina) y un pequeño parque. Tenía las paredes de color azul celeste y con un gran letrero que decía "Haktter".

-Llegamos Carol, ahora verá a tu padrino- Draco caminaba tranquilamente con su hija en las manos, hasta que notó algo extraño. El carro de Hermione estaba allí. Era muy extraño que ella estuviera allí un lunes.

-¡Malina!- A Carol le encantaba ver a su madrina Hermione.

Carol tocó el timbre, pues le encantaba hacerlo cuando llegaban tarde. Nadie respondía, así que Draco optó por entrar. En los pasillos no había nadie, rara cosa siendo la hora del recreo. Paseó un poco hasta llegar al salón. Todas las niñas estaban calladas. Fijó su mente en los dos niños nuevos y se imaginó que causaba tanto silencio.

-Cristina, ¿Dónde está Harry?

-Pues... pues... es que vino Hermione y estaba llorando, entonces Harry la tomó y se la llevó a no se donde, luego...

-Ya gracias, ya entendí. Voy a buscarlo.

-Ese maldito cobarde...

-Cálmate Hermi, el llorar así no te hace bien- Harry no sabía como consolar a su mejor amiga, hacía tiempo que faltaban pretextos para hacerlo.

-Sólo quería darle una sorpresa y mira.

-A ver, dime, ¿Qué fue lo que pasó?

-Es que...

--------Flash back--------

-Mariale, ¿Por qué no vamos este fin de semana a la playa?, le puedo decir a Hermione que me iré de viaje porque tengo un caso que resolver. La podríamos pasar de lo mejor.

-No sé Ronnie, y si comienza a sospechar. No quiero que eches tu vida a perder por mí. Sabes, yo te quiero mucho pero...

-Yo también te amo.

--------Fin del flash back-------

-¡Y se besaron!, Ese bastardo. Se besó con ella- Hermione no aguantaba más. Reventó en un llanto fuerte, las lágrimas caían fluidamente por sus mejillas y su boca emitía sonidos de sufrimiento.

-Hermi, te suplico que te calmes...

-Es que ahora mismo se las va a ver conmigo.

-Hermi, así no se resuelven las cosas.

-Pero yo las resolveré a mí manera.

En ese momento entró Draco a la habitación, viendo aquella escena. Hermione salió corriendo y se perdió de vista.

-¿Qué le pasa?

-Ven, siéntate y te cuento.

Mientras Carol jugaba con un peluche que le había dado Harry, este le contaba lo que había pasado entre Ron y Hermione. No era difícil de creer para ellos dos. Después de lo de Cho...

Draco se despidió de Harry y de Carol y se marchó, tenía demasiado trabajo como para seguir perdiendo tiempo. Harry tomó a Carol y se la llevó al aula que aún estaba repleta de silencio. Los dos niños por un lado y las niñas por el otro, muy calladas.

-Niñas, salgan a comer... Daniel, Jorge, traten de hablar con ellas, parece que ellas por su parte no piensan hacerlo.

Los dos asintieron y se fueron corriendo detrás de las pequeñas. Este sería un día agotador.

-Harry, por qué no vas a comer tú también- Rosa, la enfermera de la escuela tenía cara de querer mostrarle algo a Harry, por eso este asintió y fue detrás de ella.

-La encontré corriendo por los pasillos, así que hice un "Infas" y cayó desmayada. ¿Qué le pasa?, de seguro tú debes saberlo. Nunca había visto a Hermione actuar así.

-Lo que pasa es que Ron...

Comenzó a contarle todo lo que había pasado de patas a cabeza. Rosa cada vez más impresionada, tomaba su desayuno con desespero. Ponía expresiones como "Nunca pensé eso del joven Ron" o "No te creo, ¿De verdad?"

Él chico se quedó en la enfermería el resto del recreo. Hermione se veía tan triste. Tan sola. En estos momentos, era donde más tenía que mostrar su apoyo, sobre todo, siendo ella. Hermione.

El resto del día se vio totalmente normal. Hermione se quedó en la enfermería inconsciente. Las niñas charlaban dulcemente con los dos chicos y su ahijada estaba completamente feliz. Pero sin embargo, no sabía por qué sentía unas enormes ganas de romperle la cara al que alguna vez fue su "Mejor amigo".

-Adiós Harry.

-Hasta luego.

-Nos vemos mañana.

No hacía más que sonreír mientras cargaba a Carolina. En realidad, no tanto como sonreír, sino observar fijamente. En pocas palabras, su cabeza estaba totalmente separada de su cuerpo. No hacía más que pensar en Ron (No en aquel sentido), ¿Cómo pudo haberle hecho eso a Hermione? ¿Cómo tenía cara para verla todos los días, después que la acariciaba a ella? Y ¿Qué le daba aquella chica, que no pudiera darle Hermione?. Que él mismo supiera, Hermione era una gran chica, capaz de satisfacer los deseos de un hombre. Entonces ¿Por qué serle infiel?

Caminó lentamente hasta llegar a la enfermería. Carol no hablaba, pareciese como si también estuviese pensando en algo. Que extraño, ¿En qué podrían pensar las niñas de su edad?, Quizás nadie lo sepa.

-Ya despertó Harry, no hace más que preguntar por ti.

Penetró en la habitación en silencio. Le dejó a Carol, a Rosa y se sentó al lado de su mejor amiga. Ella tenía la cara roja al igual que los ojos, por donde se notaban algunas lágrimas mezcladas con maquillaje. Ella trató de sonreírle, pero Harry sabía muy bien, que no era el momento.

-Harry, no quiero verlo. Ahora que lo pienso mejor, no quiero verlo. Más nunca en mi vida. Ese miserable no se merece nada ¡NADA!

-Hermione... primero quiero que te calmes. Ven, sólo... llora...

Ella sabía perfectamente a lo que se refería él. Hace algunos años, cuando estaban en Hogwarts, Hermione lloró y maldijo incansablemente a un chico (Su novio), que la había engañado con otra (Tal y como pasó ahora). En ese entonces, Harry y ella eran muy unidos. Él le ofreció su pecho, para desahogarse y desde ese entonces, nunca más tuvo que hacerlo.

Se acostó en su pecho y comenzó a llorar más fuerte aún.

-Yo no nací para amar ni ser amada...

Harry quería decir algo, pero frefirió quedarse callado. No siempre era bueno lanzar las cosas tan rápido. Desde ese entonces, Harry la abrazó y no se sintió más que un terrible silencio. A la mañana Siguiente.

Ya eran más de las seis y media de la mañana. Hermione había llegado hacía unas horas a su apartamento. Tenía manchas rojas en la cara y los ojos hinchados. Dentro de algunos minutos llegaría Ron, y no podía mostrar que estuvo llorando por toda la noche... menos mal que para eso existía el maquillaje.

Desayunó lo más rápido posible para comenzar con su "arreglo de rostro". No tenía ganas de hacerlo, pero ella sabía muy bien cómo jugar con Ron y eso es lo que haría.

Así como lo tenía calculado, Ron llegó treinta minutos después. Venía muy alegre (¡Claro! ¿Quién no?, Pasar unas vacaciones de puro placer después de tanto trabajo), Hermione le sirvió su desayuno, (deseándole haber puesto veneno), como si nada hubiera pasado. Ron daba su charla (Como todos los días) de la cantidad de trabajo (Sobre todo trabajo) que tenía. Que si tengo que ir para allá, que sí para acá, ¡Claro!, Ahora sí podía entender los motivos. Pero igual, actuó lo más normal posible, para que siguiera creyendo que ella se lo estaba tragando completito. Cuando por fin tocó el tema de su "supuesto viaje de negocios"

-Cariño, por cierto, tenía que contarte. Hoy tengo que irme de viaje a...

-¿En serio? Y ¿A dónde vas?- Ron se quedó un poco perplejo al notar la reacción de Hermione. Normalmente siempre se ponía triste, ahí se veía algo raro.

-Tengo que ir con un amigo a resolver unos negocios. Por allá en... tu sabes- Tomó un sorbo de café. Desde que Hermione le preparó por primera vez esa bebida muggle, no dejaba de tomarla por las mañanas. Pero claro que Hermione solo pensaba en quemarle la cara con aquella taza...

-Que bueno. Unas merecidas vacaciones para un HOMBRE que no para de TRABAJAR- Dijo resaltando aquellas dos frases.

-Bueno, no exageres cariño.

-¡AY no!, Pero RONNIE, no digas que no. Tu muy bien sabes que no paras de trabajar. No vas a fiestas, ni de paseo, ni mucho MENOS, sales con otras chicas. Porque sólo tienes ojos para mí ¿Verdad que sí RONNIE?- Ron no creía lo que estaba escuchando, Hermione podía llamarle hasta cabeza de zanahoria, pero nunca, NUNCA Ronnie... pues la única que lo llamaba así era... pues era la otra.

-Cariño te noto algo extraña ¿Te sientes bien?

-De maravilla, es más nunca me he sentido mejor en la vida.

-Por cierto, te ves muy bonita.

-Claro, como tu no ves a NINGUNA otra mujer, piensas que yo soy la más hermosa de todas ¿O me equivoco? ¿No es así Ronnie?

-Este... sí claro. El color verde te resalta muy bien- Dijo tratando de cambiar el tema, señalando con su mirada su sombra verde.

-¿No es tarde ya?, sal de una vez para que no te retrases. Te q-u-i-e-r-o -Eso también le hizo recordar algo. Hermione siempre decía TE AMO, y no-TE QUIERO como Ma. Alejandra. Había algo raro ahí, de eso estaba seguro.

-Que te vaya bien Ronnie- Prácticamente le trancó la puerta en la cara. Tenía que arreglarse para llevar a cabo el plan que tenía pensado. Si se fijó bien, la chica tenía una camisa excesivamente corta, con unos pantalones ciertamente pegados. Tenía algo por el estilo, la vez que se disfrazó de muggle en Hogwarts. Se vistió volando para poder perseguir a Ron. Lástima que Harry no pudiese acompañarla, porque a ese sí; No le menciones a Ron ni en pintura.

Se sentía como si le hubiesen quitado más de la mitad de la camisa y como si se hubiese puesto una pantalón de cuando tenía tres años. Le gustaban mucho los pantalones a ese estilo, pero ese... La camisa... bueno, sólo solía ponérselas así de cortas cuando hacía ejercicio, que eran normalmente dos veces a la semana.

Salió los más rápido que pudo de su apartamento. Ron estaba allí hablando con el vigilante'tranquilamente. Era perfecto, tenía todo el tiempo del mundo. De seguro el avión salía más tarde. Prendió su carro y espero a que él hiciera lo mismo.

Todo iba marchando a la perfección, pero aún así, Hermione tenía los nervios subidos. Nunca antes había hecho una cosa por el estilo, pero en este... se lo merecía. Prendió la radio, no hacían más que pasar canciones románticas, que en este momento, no ayudaban en nada.

Iba cambiando las emisoras, hasta que curiosamente llegó a una donde la canción decía:

Infiel Quien traiciona un gran amor es un infiel El que tiene doble vida La legal y la escondida Aunque diga lo que diga es un infiel Y tú

Hermione decidió hacer algo muy curioso, precisamente ahora que Ron se estaba montando, haría como dicen, un toquecito a la varita para ponerle precisamente esa emisora.

Así tal cual lo hizo. Ron pareció primero voltear, había sentido aquel toque de magia, pero no se dio de cuenta. Así que avanzó.

-¿De donde demonios saqué yo esta emisora?- Ron estaba apunto de cambiarla hasta que escuchó la palabra "Infiel"

Y ahora qué Qué me dices- qué me cuentas Si yo misma te encontré Abrazándote con ella Y ahora qué Ni me digas- ni me cuentes Te me vas yendo de aquí Un infiel no es para mí

-Definitivamente, hoy todo es raro.- Ya había cambiado la emisora, pero había algo en su conciencia que no lo dejaba tranquilo. Pero no sabía precisamente qué.

Ron trató de hacer lo posible por dejar de pensar en aquella canción y comenzar a pensar en lo bien que la pasaría unas horas después.



En el aeropuerto.

-Ronnie, cariñito mío te estaba esperando. La vamos a pasar pero de lo mejor- Tenía el mismo look de siempre, ese que a Ron tanto le encantaba. Sus camisas descotadas y abiertas por ciertos lados. Aquellos pantalones pegados con ciertos toques que le hacían ver interesante. Se dieron un beso y corrieron hacia un lugar apartado. Hermione por su lado los perseguía a dondequiera que fueran. Tal cual como una detective.

Después que se separaron, esperó unos segundos y avanzó hasta Ron.

-¡Hola MI RONNIE!

-¡ ¿Hermione? !- Ron estaba estupefacto, no podía creer lo que sus ojos mostraban. Era Hermione, realmente lo era...

-Pensé en hacerte una sorpresa antes de que te fueras- Sonrió maliciosamente. Tenía unas ganas de agarrarse a puños con esa... esa... - No me habías presentado a tu compañera de TRABAJO, ¿Qué te ayuda a hacer?

-Este... bueno... ella es mi-mi. Ella... ¡Organiza mis papeles!- Ron trató de sonar lo más convincente posible, pero sabía muy bien que no lo hizo, y que Hermione sabía perfectamente bien lo que pasaba entre él y ella.

-Me parece que hay alguien que debe aclarar las cosas aquí- Hermione sonaba enfadada y triste a la vez, se sacó un pequeño anillo del dedo y lo lanzó por la ventana- Creíste que mantendrías esta mentira por mucho tiempo ¿No?, pues figúrate que caíste redondito porque ya NO TE CREO ni MÁS NUNCA voy a hacerlo. Debí estar con Harry siempre. Él tenía razón sobre ti. Eres un desgraciado, imbécil, es más ¿sabes qué? Vete a la mierda, con tu amante.

-Mira ridícula, a mí no me vengas a insultar. Si perdiste a Ronnie fue por TU culpa.

-Cállate, si no quieres que te diga tus verdades.

Se callaron por un segundo. Ron no movía ni un dedo y Ma. Alejandra la miraba con una cara muy ofendida. Hermione comenzó a llorar, pero como no quería que Ron viese sus lágrimas se fue corriendo. Lo había perdido todo (Él), lo había echado todo por la borda... a Hermione y a la mitad de su vida... y mucho peor, a su honra como hombre.





-No puedo más Harry... sólo quiero morir...

-Hermi, escucha, no quiero que te me pongas así. Por favor, deja de llorar. Mira no más que bonita te veías antes- Harry ya no encontraba palabras. Tenía ganas de golpear a Ron, pero verlo a la cara sería suficiente para querer matarlo.

Hermione no dejaba de llorar y ya Harry no sabía qué hacer. Era difícil consolar a una mujer, eran tan frágiles, débiles, parecían rosas que se marchitaban rápidamente y caían por una simple lluvia. Claro, que en este caso era muy distinto. Como él tenía el valor de hacerle eso a la mujer que alguna vez fue su mejor amiga. Y peor aún... a una como Hermione.

-Hermione cálmate cariño- Rosa siempre tenía cierta delicadeza en estos casos- La vida no se acaba aquí, todavía quedan muchos hombres como Harry. Míralo no más, que guapo, que mono es.

Hermione sonrió un poco. -Viste, ya le saqué una sonrisa. Y con sólo alagarte mi Harry. Me suena a amor.

-Que cosas dices Rosi. Ay que ver las cosas que inventas. Voy a ver a los niños, acompáñame Hermi, vamos a ver si ellos te levantan el humor.

Los dos se fueron paseando por los pasillos del Colegio. Hermione se apoyaba en su hombre y trataba de hacer grandes esfuerzos por sonreír. En cambio Harry sonreía y la tomaba de la cintura para que se sintiera más protegida.

-¡Hola Hermione!, Nosotras te vamos a aliviar ese dolorcito. Te concedemos un beso de Harry (El hombre más guapo del mundo) para que se te quite esa carita ¿No es cierto muchachas? Y mira que él no nos lo ha dado a nosotras- Dijo Cristina alegremente.

-Ay no ¡Qué asco!- Daniel tenía en la cara una expresión de asco- Lo hacen pero no aquí

-Eso. Es. Porque. No. Lo. Has. Probado- Andrea se acercó a él dando saltos grandes como un sapito y enseguida le dio un beso en la boca, corto y rápido.

-O.K chicos. Hace tiempo que no me doy un beso yo y estoy viendo a dos niños de seis y siete años dándose besitos.

Todos se rieron un poco y por segunda vez en el día, Hermione le dedicó a aquellos niños una hermosa sonrisa y se rió débilmente.

-¡Vieron!, yo fui la que la hice sonreír- Andrea saltaba de alegría.

-Quien no se ríe con tu carita de pelotita- Liliana se rió entre dientes- Hay que ver, hasta payasa salió. Eres una niñita aún, además un chico como Daniel no merecía que su primer beso fuera con una escuincla como tú- Las dos se sacaron las lenguas.

-No quiero que se empiecen a pelear de nuevo niñas.

Pero entonces todas empezaron a exclamar ¡Beso! ¡Beso!. Hermione, que ya de por sí estaba roja, quedó como un tomate. Nunca había pensado en Harry como algo más que un amigo. O bueno... sí, pero eso era cuando era chica... Ya no había pensado más en eso.

Mientras ella se recordaba de aquellos tiempos, las niñas planeaban algo en secreto. Se dieron las manos y comenzaron su operación.

-Hermi, si quieres te llevo a que comas algo, estas chiquillas no te dejarán en paz nunca, créeme.

Ella solo sonrió, pero fue allí donde Verónica empujó a Mariana, que empujó a Liliana que cayó sobre Hermione, que cayó sobre Harry en una posición no muy educativa que digamos. Sus bocas se unieron por varios segundos, pero enseguida se separaron rápido. Harry tenía todo el rostro rojo, y no era justamente por lo que acababa de pasar, más bien era que Hermione había caído con la pierna sobre un lugar, que precisamente no era de mucho agrado para un hombre. No se dio cuenta hasta que Jorge lo mencionó.

-Pobre Harry, nunca había visto en la vida real algo como eso. Después de esto, eso le va a parecer una serpiente aplastada.

La chica, ya roja de vergüenza, se movió hacia un lado para dejar que Harry respirara. Todas las chicas reían. Mientras que Harry no movía ni un dedo. Se quedó recostado en el suelo por un largo rato, hasta que logró moverse gracias a Daniel y Jorge.

-Lo... siento mucho... no era mi intención

-No, si es que agradezco al cielo que Yo me olvidé del amor, porque sino...

-Ay Harry, igual que todos...

-Algo bueno tenía que tener- Los dos se rieron por un buen rato. Hermione ya no parecía recordar lo que había pasado. Así que hasta ahora todo iba bien.

-Harry- Rosa había llegado a la habitación con mucha seriedad- esa tal Cho, está aquí y te quiere ver.



-Ginny, amor, voy a buscar a Carol

-Yo te acompaño cariño. Deja que me vista. Espero que Caro, esté bien, con las vomitadas que se echó ayer por aquel parque.

-Sí, también tengo que averiguar bien sobre Hermione. Me tiene preocupado, sabía que esto no tardaría en pasar. Y todavía ese degenerado tiene el valor de pedirle matrimonio.

-Sí... yo también hablaré con ella. Mi hermano se pasó esta vez más que nunca. Es más, ya se las verá conmigo, esto no puede seguir así. Ya me imagino como debe de estar sufriendo Hermione en estos momentos. Pobrecita.



-¿Qué haces aquí Cho?

-Harry, por favor escúchame. Yo no tuve la culpa...





Notas de la autora: Lo sé, lo sé. Está muy corto el capítulo, pero es que no voy a tener tiempo luego, y al menos quería dejar el primer cap. Vamos a ver como se dan las cosas

Hermione de Potter: ¿Ves que pronto acabé con aquella relación? Jejejejeje. Bueno espero que te haya gustado el capítulo ¿Disfrutaste mucho tu beso con Dan? Weno, gachas por tu review!!!!!!!!

La chica lavigne: Gachas por tu review tit. Siempre tan bonita la muchachita, no enserio gracias

Fram: Bueno muchas gracias de veras por tu review! Me encanta recibir reviews jejejeje

Vane: Que bueno que decidiste dejarme un review y con respecto a lo de que si tu vas a quedarte con Harry o.o, tienes 9 años, no lo olvides jijijijijijijijijijjiji tranqui que si lo amas

Berenu: Espero no decepcionarte. Ni a los demás tampoco jijijijijijijijijiji. Y cualquier cosa, díganme lo que ustedes quieran que pase jejeje

Bárbara: espero que te haya llegado el dibujo que te mandé. Gracias por tu review!!!!!!!!!!!!^u^

NATTY: Intenté mandarte un dibujo pero no pude... sorry Gracias por tu review, y voy a tomar tu idea muy a cuenta

Instantkarma: Gracias! Fuiste el primero o era que me dejó un review. GACHAS!!!!!!!!!!!!!!!!!

Padme relena: Gracias por tu review, y espero que de verdad si esté buena

Los dejo

Byesssssssssss

Lis

Reviews!!!!!!!!!!!1