Infidelidad o amor

Capítulo 17

Vuelve…

La voluptuosa mujer que se aproximaba por las escaleras echó unas miradas inmediatas a su alrededor. Enseguida la fijó en Remus, colocando una exagerada sonrisa en sus labios. Hizo un gesto en señal de saludo con la mano y prosiguió a encaminarse a él. Mientras más se acercaba, más miradas se fijaban en sus resaltantes curvas. Sirius suplicaba que ocurriese algo inesperado, pero el encuentro parecía ser inevitable.

- ¡Remsie! – Exclamó la mujer, dando a conocer una seductora voz – Tan tierno como siempre… ¿Dónde está mi bebé?

- ¿Bebé? ¿Qué bebé? – Contestó éste con nervios.

- Vamos… No te hagas, Siri lindo, ¿Dónde está? ¡El descarado ese no me invitó ni a su boda! Hay que ver… que malagradecido, con todo lo que le ense

- Sí… de eso no tengo dudas… Mira… Sirius está… arreglando unos asuntos con el padre así que… por qué no esperas allá… porfa, ¿Sí?

- ¿Allá? ¿Alejada de la civilización? ¿Por qué? ¿Acaso soy un estorbo?

- Sss… no… sólo hazlo, y te prometo que Sirius irá para allá – Dijo señalando de nuevo el lado izquierdo de las escaleras.

- ¡Después me presentas a todos esos guapos! – Exclamó mientras se alejaba.

- Claro… - Esperó que la mujer estuviera lo suficientemente lejos para dirigirse a su amigo, el cual estaba bien ocultado tras un matero.

- Shhh, no mires hacia acá… se dará cuenta – Susurró Sirius nervioso.

- No seas bobo, ya se alejó. Escucha… de esta no puedo sacarte, tienes que ir y ofrecerle lugar ahí dentro –Apuntó los asientos – Vamos Sirius… No es el fin del mundo.

- ¡¿Cómo que no?! – Exclamó en susurros - ¡¿Quién es ella?! ¡No es otra ex más! Es la mujer que dejé YO, no ella a MÍ, ¿Entiendes eso? ¡Es un monstruo!

- Oh vamos… siempre hay una primera vez. Ve y salúdala amablemente… es más, siéntala allí dentro lo más rápido posible… antes de que Lys pueda verte con ella. Eso SÍ podría ser un desastre.

El novio cubrió su rostro con ambas manos, suplicó que todo saliera bien y culminó con un suspiro la decisión de levantarse del suelo. Una vez de pie miró altaneramente todo su alrededor, casi preparado para… ¿Continuar de pie tras el matero?

- ¿Qué esperas Sirius? – Preguntó su amigo desesperado.

- Es que… ¿Qué era lo que iba a hacer? – La respuesta de Remus fue un simple jalón, que le impulsó lo suficiente como para quedar a los ojos de la misteriosa mujer.

- ¡Siri Siri! – Gritó ella inmediatamente.

- ¡Ho-Hola!... emm… jeje… - No le llevó más de diez segundos recibir un fuerte abrazo por parte de… - Valeria…

- Sirius… - Nombró ella repitiendo el mismo "saludo" de su "ex" - ¡Eres un descarado! ¡Por qué no me avisaste!

- Es que yo… Sabes… olvido fácilmente… y pues lo olvidé. Además, en sus bodas los novios no anotan de primerito a sus ex…

- Sí, sí… ya entiendo ¡Pero de igual forma!, ¡Ahora somos amigos! ¿O no mi bebito? – Con una mano tomó la mejilla derecha del hombre y la jaló – Pero si sigues sin afeitadito… a mí siempre me querías raspar ¿Eh? Y bueno… yo no te decía nada porque era muy sexy… además me encantaba como se sentía cuando ya empezabas a bajar besándome por el vientre… ¿Recuerdas?

- Ehhhh… sí, claro… Nunca me lo habías dicho.

- No… Perdería la gracia, cosas que mayoritariamente diría yo tras una relación. Dime… ¿Quién es la afortunada?

- Ok… de acuerdo… lo soportaré, pero TÚ tienes que escucharme primero. Como notas, ESTA es una boda muggle… ¿Captamos punto número uno? – Ella asintió – Perfecto… ahora, CERO hechizos o comentarios de magia… ¿Entendido punto número dos? – Ella asintió – Y por último… NI TE ATREVAS a acercarte a Lys, ni siquiera para felicitarla ¿Escuchado, captado, entendido y procesado punto número tres? – Terminó el novio con una mirada amenazadora.

- Bueno… No… no, no, eso NO lo puedo soportar, yo tengo que conocer a la LOGR" traerte al altar ¿Estás loco? ¡Y una muggle!

- ¡No grites! – Dijo él alzando la voz – Perdón… cállate. ¿Sí?, si te atreves a decirle algo… o abrir tu hermosa boca… les diré a todos…

- ¡No, no Siri!

- Les diré a todos que son falsas. Así de duro como lo oyes. Siéntate en la última fila.

- Está bien bebito…

- ¡Y quítame el bebito! – El hombre esperó a que Valeria obedeciera fielmente para poder librar un suspiro ahogado – Listo… Más nada puede ser peor.

- ¡La novia! – Profirieron varios invitados.

A Sirius se le iluminó la mirada, lenta y dramáticamente volteó su rostro hacia donde se encontraba "su chica". Lo primero que logró visualizar fue aquel hermoso vestido blanco. Ginny y Hermione ya habían salido del auto y se proponían a ayudar a la novia ofreciéndole apoyo en sus brazos. Lys llevó sus pies al suelo, y con el apoyo que tenía en las manos de sus amigas logró levantarse. Forzada y nerviosamente esbozó una sonrisa y procedió a dar el primer paso… o lo que se suponía que debería ser el primer paso.

¡PAFF!

- ¿Estás bien Lys? – Preguntaron sus amigas al instante.

- ¡JA, JA, JA! ¡Era sólo una broma! – Rió Lys levantándose lo mejor que pudo, completamente adolorida – Estoy por cargarme a mi madre… estos tacones me van a matar antes de la luna de miel.

- Calma… Ya estamos aquí. ¿Qué harás con la mancha de barro? – Preguntó Ginny inocentemente.

- ¿Mancha de barro? – Respondió ella asustada - ¿Dónde?

- En la cola… - Contestó Hermione – Pero se me acaba de ocurrir una gran idea. Lo cubriremos con los pétalos de rosa que tiene Karol. Aunque primero debemos llegar hasta la puerta, sino se te caerán…

- Bien – Aceptó Lys – Supongo que es lo mejor que podemos hacer…

Con delicadeza y lentitud, Lys logró subir todas las escaleras sin resbalarse. Claro, un poco de ayuda no faltó… Sirius le esperaba sonriente, dispuesto a besarla justo en ese momento. Cuando estuvo apunto de hacerlo, Hermione y Ginny se le adelantaron, deteniéndole el paso. Rieron exageradamente y lo empujaron hacia el altar. Él no pudo rehusarse, dándoles el momento perfecto para cubrir la mancha con pétalos.

Trataron de hacer que quedase lo más disimulado posible, cubriendo la mancha en sí con un montoncito de pétalos pero distribuyendo unos pocos alrededor para que se viese parejo. Después de lograrlo procedió el músico a tocar el piano. Los padres de la novia la saludaron por detrás. Su madre, nerviosa, le ofreció unas sinceras felicitaciones y continuó poniendo todo en orden. Ya lista, esperó a que su padre le tomase del brazo. Sonrió abiertamente y dirigió su mirada al frente. Allí estaba Sirius, esperándola al final de un corto camino… eran pocos los pasos que tenía que dar para llegar a él.

Y cuando llegara… Por fin cumpliría eso que tanto anhelaba. Vivir y ser feliz junto a él.


Tras la feliz ceremonia, los recién casados tomaron asiento en la parte trasera de su correspondiente auto. Apenas cerraron las puertas suspiraron aliviados, ya lo más difícil había pasado. Al final, Draco sí tenía los anillos… Lys procedió a quitarse los tacones y hacerse unos masajes en los pies, mientras Sirius se desajustaba la corbata y el cinturón.

- Muchas gracias…

Le agradeció la mujer a su esposo, recostando su cuerpo en el hombro de éste. Él esbozó una tierna sonrisa y entrelazó sus manos con las de ella. No podía creerse que había asumido aquel compromiso. Era cierto que las situaciones podían cambiar mucho con el transcurso de los años…

No esperaron más para volver a juntar sus labios. Se abrazaron fuertemente y fijaron sus miradas entre sí. Él parecía encantado con la belleza de su esposa, y ella detallaba lo mucho que se había arreglado su guapo Sirius. Ambos se deleitaban con sonrisas y hacían ver el momento un poco dramático. Decidido a besarla de nuevo, llevó una mano a la frente de la mujer, apartando el mechón que caía graciosamente por el lado izquierdo.

- ¿Qué… qué te paso, amor? – Preguntó Sirius asustado - ¿Te caíste de la cama?

- No… es una larga historia, pero nada bueno para contar hoy… Por qué mejor no… sigues con lo que ibas… - Propuso adquiriendo una mirada pícara.

- Ni que pedirlo…

Continuaron a mínima distancia durante la travesía hasta el salón de fiestas. Mientras sentían sus respiraciones tan cercanas y sus corazones latiendo precipitadamente, recordaron todo lo que había ocurrido en sus vidas hasta llegar a ese nivel. Su extraña forma de conocerse… el primer beso… su primera noche juntos… Todo pasaba por sus mentes como una película de amor.

De pronto… todo el pasado se transformó en una película de humor, las discusiones, desacuerdos, molestias… Ya estaban dejadas atrás. Aquel era un nuevo paso de sus vidas, y lo empezarían olvidando los malos momentos del pasado.

Sin fijarse, ya habían llegado al exacto lugar que habían elegido para realizar la fiesta. Los invitados ya estaban adentrándose al salón, todos vestidos elegantemente. La madre de Lys toqueteaba la ventana del auto repetitivamente para hacer entrar en razón a los dos enamorados, pero no lo logró hasta que el conductor bajó el vidrio que daba justo con el puesto de la novia.

- ¡Lys! – Exclamó su madre – Que te vengas a poner el vestido mi niña, mira que con ese ya no te puedes quedar.

- Oh… Sí, sí, claro… - Con tranquilidad abrió la puerta del auto y se bajó olvidando los zapatos - ¡Auch. Auch! ¡Piso quema! ¡¿Dónde está el baño?!

- Nosotras vamos a aquella puerta marroncita – La recién casada no esperó más argumentos y salió corriendo hacia el vestidor – Ya ves con quien te has casado ¿Eh? ¿No es un encanto?

- Ni dudarlo – Contestó Sirius con una sonrisa de oreja a oreja.

- Tú entra de una vez, ya te llevo a tu esposa.

El hombre obedeció enseguida. Caminó derechito a la entrada, y una vez dentro recibió unas merecidas "Felicidades" por parte de todos. El salón parecía bastante lujoso, pero en realidad era la decoración lo que lo hacía parecer. Vio a sus lados y se encontró con varias mesas colocadas estratégicamente ordenadas. En ellas había un tierno centro de mesa con un… ¿Oso de peluche blanco con bombones?

- Seguro que fue idea de Lys – Rió Sirius.

- Hey, bonito arreglo – Comentó su ahijado – Ustedes de veras hacen muy buena pareja. Me alegro mucho que por fin la hayas encontrado.

- Sí… yo no me lo creo. Oye Harry… Tú también la has encontrado.

- ¿Qué dices?

- Sabes a qué me refiero. Mírala… Estoy más que seguro que ella esta esperando que le hables.

- ¿Por qué no lo hace ella? – Preguntó Harry con dureza, luego se alejo de su padrino a servirse una bebida.

Sirius esperaba impaciente a su esposa, pero de mientras se había tomado la tarea de observar las acciones de sus invitados. Un grupo de mujeres se había acomodado en una mesa, supuso él que para chismear… Por igual, los hombres habían formado un círculo pero todos de pie. Los encargados del servir los tragos y pasar por cada mesa repartiendo comida, salieron tranquilamente en hilera para posteriormente distribuirse, como se imaginó él, que habían acordado.

De pronto sintió unas palmaditas en la espalda. Sonrió enseguida, suponiendo que era su Lys la que le llamaba. Volteó murmurando tiernamente una palabra cariñosa, pero vaya sorpresa que se llevó al encontrarse con su ex "novia", la que había tratado de olvidar para no arruinarse la fiesta. Simuló estar sorprendido pero agradado… como que no le salió tan bien.

- Noto tu emoción al verme Siri… - Comentó con ironía - ¿Ya no te parezco atractiva?

- En lo absoluto, no veo a otras mujeres… - Lo siguiente lo dijo en un tono más bajo, tomando concentración cerrando los ojos – Soy un hombre casado… fiel… no tengo ojos para otras mujeres… MENOS para una ex… Fiel, Fiel… fiel…

- Relájate Siri, ya capté el mensaje. No voy a arruinarte la fiesta… Pero sí quisiera estar un rato contigo… Puede que sea nuestro último día juntos…

- ¿Juntos? Eso me suena a mucha gente. Mira… No quiero absolutamente NADA contigo, menos porque eres una mentirosa. Jamás me dijiste que…

- ¡Tía! – Exclamó Draco saludando desde lo lejos.

- ¡Ya voy allá Draqui! – Dijo ella respondiendo el saludo con una sonrisa. Su sobrino asintió.

- Que eras una Malfoy… pero debí suponerlo – Agregó fríamente.

- No te lo dije porque me hubieras roto de una vez, y tu me gustabas tanto.

- Mejor aléjate… No vaya a ser que Lys te vea conmigo y le entre un ataque de celos… quien sabe lo que hace.

- Que amargado te ha puesto esa mujer – Soltó ella cortantemente.

A lo lejos, Lys entraba con un hermoso vestido violeta. Bastante disimulado, pero bien marcaba una esbelta figura. Le llegaba hasta los pies, arrastrándose un poco. Su suave tela se deslizaba tranquilamente por todo su cuerpo, con unos toques brillantes. La sonrisa que imprimía le daba el toque perfecto. Feliz, buscó rápidamente a Sirius con la mirada, y que grata sorpresa se dio al ver a "esa" "desconocida" tan cerca y "confiada" con su esposo.

- Si será… - Una mujer le empujó desde la espalda, al parecer estaba caminando hacia atrás y no había notado su presencia allí – ¡Auch! ¡Eva!

- ¡Lis! ¡Feliz matrimonio! Digo… ehh… ¿Qué se dice en estas ocasiones?

- No sé… un felicidades estaría bien. Eh, no importa, oye Eva esto es un asunto de vida o muerte. ¿Tienes algún vestido de repuesto?

- Has acudido a la persona correcta. Tengo un atuendo perfecto para que te luzcas ante Sirius. Pensaba dárselo a Hermione para que… tu sabes, arregle sus rollos con Harry, pero veo que estás más necesitada entonces…

- Sí, sí, vamos. Afuera hay un vestidor.

Sin ver vista por más nadie, Lys empujó a Eva hacia la salida. Estaba dispuesta a ponerse ese trajecito rojo que su compañera guardaba en el bolso. Aquella rubia no podría ni competir con ella. Rápidamente se metieron ambas en el vestidor, y la novia sin perder tiempo se quitó el bonito traje que llevaba puesto.

- ¿De dónde lo has sacado? – Preguntó Lys curiosa al ver los escotes – A saber a que tienda has ido…

- Bueno… Mi prima los vende, es una excelente diseñadora, ¿A que si? Apriétalo por aquí, sí… realzará tus pechos.

- ¿Te sabes ya todos los trucos?

- ¡Claro! Ya ni recibo lecciones, pero puedo darte muchos consejos. Aunque ya no necesitas nada, estás preciosa.

- Bien… lo único que deseo es que los ojos de Sirius sólo estén posados en mí.

- Pero que egoísta… Jaja, no vale… está bien, seguramente NADIE te los quitará de encima.

- ¿Crees que él se enfade?

- Tú lúcete… y ya – Rió Eva, jalándola del brazo para hacerla entrar de nuevo al salón.

La rubia continuaba al lado de Sirius, aquella vista la hizo querer ajustarse más el vestido. Entró como toda una modelo, y en efecto, la música pareció detenerse al igual que las miradas de todos los invitados en su "trajecito". Su esposo no llegó a verla, puesto que enseguida todos los hombres que se hallaban alrededor habían corrido a "felicitarla". Sin ignorar las felicitaciones pero sí recibiéndolas con un poco de prisa, se alejó de aquel círculo. Su centro de atención era Sirius. Lenta y sensualmente se acercó a él, plantando en sus labios una sonrisa hipócrita hacia la acompañante.

- ¿Ly… Lys? ¿Qué… qué…. Qué es esa cosa? – Preguntó su esposo anonadado.

- Mi vestido cariño… Ahora tú respóndeme… ¿Quién es ESA?

- Tranquila chica, sólo soy una ex de toda la vida, su preferida claro está, pero ahora que está casado… como que me abandona un poco – Respondió Valeria con una sonrisa igualmente hipócrita.

- Con que… un poco… Que graciosa que eres ¿No?

- Sí, mi sentido del humor es una de las cosas que más le atrae a los hombres.

- Ya lo creo, supongo que la atracción nada tiene que ver con tus operaciones.

- Calma Lys… es sólo una amiga. Vamos a que te cambies ese traje, ¿Te parece? – Sugirió él tratando de aliviar la situación.

- ¿No te gusta, cariño? Si lo elegí por ti – Dijo poniendo pucheros.

- Me parece genial… de verdad, me gusta mucho, está muy lindo, pero no me gusta, es decir, sí que me gusta pero no… lo que quiero decir es que está precioso y muy sexy… además de que se te ve muy bien, pero realmente no creo, a pesar de lo guapa que estás, que sea conveniente que uses eso en esta fiesta. ¿Entiendes amor?

- No lo sé, creo que prefiero quedármelo… Ahora… ¿Por qué no bailamos un poquito tú y yo? Así JUNTITOS, sin más MOLESTIAS… Sólo TÚ y YO, ¿Sí?

- De acuerdo… Nos vemos ahora Valeria, quiero decir… algún día… o mejor… Nunca… bueno tampoco como nunca.

- Ay ya basta – Finalizó Lys jalándole hasta la pista de baile.

Al otro extremo del salón Eva conspiraba su maléfico pero simple plan para juntar a Harry y Hermione… y sin querer otros posibles arreglos, más bien un plan bastante productivo. Se acercó al chico de la cicatriz y le aconsejó que sacara a Ginny a bailar un poco, la pobre estaba sentada esperando algo qué hacer. Él no tardó en responderle que sí, y fue tras la pelirroja.

- Que éxito va a resultar – Se dijo a sí misma soltando una risita.

Después de hablar sola, se dirigió hacia Draco, el cual bebía tranquilamente y solo en una mesa apartada. Se acercó a su oído y le murmuró "Saca a Hermione a bailar y cuando yo diga…". Él sonrió misteriosamente y se levantó de la silla. Su antigua rival no estaba muy lejos, le sorprendió por la espalda y ella enseguida aceptó.

Esperó unos minutos y mientras todos bailaban animados subió a la tarima, donde unos músicos tocaban apasionadamente. Se acercó al anfitrión y le pidió el micrófono por unos segundos. Él no se lo permitió, pero entonces ella le pidió un favor al que no pudo negarse. Enseguida se escuchó un cordial saludo.

- ¡Hola a todos! Tranquilos sigan bailando, pero esta vez vamos a hacer un juego ¿Bien? Cuando yo diga ¡Cambio de parejas! ustedes van a cambiar con la pareja más cercana. Y luego la que yo diga pasará al medio a lucirse un poco, ¿De acuerdo?

Todos parecían de acuerdo. Hermione miraba a Draco curiosa, no sabía exactamente cuáles eran sus sentimientos por él en esos momentos. Él en cambio le sonreía abiertamente, guiándola suavemente por la pista de baile. Al rato se escuchó por parte del anfitrión la señal de "Cambio de parejas", ella parecía distraída, pero Draco se encargó de todo. La empujó delicadamente hacia a un lado quedando ella en brazos de… su Harry.

- Vaya destino… - Pronunció él, pasados unos segundos.

No dio tiempo para más pensar. Las luces se apagaron y un foco dio directamente con ellos dos. Quedaron a la vista de todos, pero no lo sintieron… Parecían encontrarse en otra dimensión, la voz del anfitrión animándoles con un "Lúzcanse" parecía distorsionarse en sus oídos. Las miradas de todos sólo eran… vacío. Quedaban ellos dos, tan vacíos como todo, sin embargo, con tanto por dentro.

Harry la guiaba casi torpemente, ninguno sabía qué hacer… ¿Cómo había llegado a ocurrir eso? ¿Qué quería el destino? Lágrimas querían asomarse pero no había ventanas abiertas. Estaban atascadas dentro, haciendo aún más alboroto, creando un caos de sentimientos, luchando por salir a la luz.

Los comentarios entraban y salían enseguida. De pronto el foco ya no les alumbraba, la gente se movía a su alrededor, tantos extraños… sólo querían desvanecerse entre todo eso. Hermione bajó cobardemente su mirada al suelo, dejando caer unas lágrimas. Volteó todo su cuerpo y se encaminó hacia algún lugar… otro lugar. Se estaba perdiendo entre aquella cantidad de extraños, y por alguna razón él sintió que ese sí sería un fin. Aquel era el final triste de la historia.

Cuando ya estuvo fuera de su alcance de vista no lo aguantó más. Corrió entre la multitud acelerada y le buscó con la mirada. No la vio, pero sí la sintió. Cruzó hacia la derecha y se dirigió al balcón. En efecto, estaba de espaldas, mirando un paisaje sin sentido, o quizás simplemente fingiendo que aquello le era agradable. Él esperó unos segundos, y tras hacerlo le tomó el brazo violentamente y la colocó entre sus brazos.

Ella le miraba débilmente. Las lágrimas habían conseguido un huequito por donde escapar. Por su parte, el rencor que transmitían sus ojos verdes sembraba más temor en ella. Sin embargo no dejó tiempo para nada más y unió de golpe sus labios con los de "su Hermione". Aquel desagradable beso… tan violento y lleno furia, tan carente de sentido… tan triste… se estaba convirtiendo en un desahogo para ambos… Un gran desahogo.

Hermione hacía el intento de escapar, pero eso era sólo pretender que quería hacerlo. Ambos estaban quedándose sin respiración, pero parecía exactamente lo que querían. La desunión fue tan violenta como la unión. La rabia permanecía. Sin embargo, las ganas de intercambio de frases estaban lo suficientemente altas como para desatar ese nudo de la garganta.

- Harry…

- ¿Sabes que creo? Que tenemos que desahogarnos, sí, para poder olvidarnos de todo esto. Que lo nuestro sí se acabo y ya no hay regreso.

- ¿Y has pensado un poco en… perdonar?

- Perdonar… ¿De verdad crees que te lo mereces?

- Sí… y ¿Sabes qué? A pesar de lo MUCHO que me gustaría solucionar esto creo que prefiero esperar a que lo pienses un poquito y te encuentres en la capacidad de entender que TODOS cometemos errores.

- ¿Sin importar que sea muy tarde?

- Más vale tarde que nunca. Siempre estaré para esperar una respuesta, aunque sea para volver a ser amigos.

- Y de verdad crees que después de esto… vamos a volver a ser amigos.

- Sí. Yo lo creo. Tengo esperanzas Harry, es algo que ni tú me puedes quitar. Por lo pronto puedes continuar con tu vida, te aseguro que yo lo haré con la mía. Y si piensas que lo mejor es no vernos más, pues perfecto, me desaparezco de esta fiesta y no vuelves a verme. Ya he decidido irme a otro lugar. No tienes por que preocuparte.

- Ah… piensas que con decirme que te vas de aquí vas a hacerte la herida y yo…

- Cállate. Por favor… Deja de decir todas esas tonterías Harry, tú no eres así. Trata de pensar un poco con la cabeza, y después, sí pregúntate si en verdad me amas.

Cuando estaba apunto de abandonarlo, él le volvió a tomar del brazo. Otro beso inesperado surgió, esta vez un poco más calmado. Hermione entendía… él sólo quería averiguar sus sentimientos, pero eso, particularmente a ella, le estaba destrozando. Por favor… Harry… dime que me amas…

- ¿Sabes qué es lo más triste de esto? – Le preguntó Harry con el corazón en la boca. No esperó a que ella contestara ni asintiera – Que te sigo amando Hermi… y tanto.

- Harry…

- Sigo queriéndote, amándote, admirándote… y deseándote como nunca. Pero no me puedo dar el lujo de que me repitas esa experiencia por tercera vez. Y yo como un estúpido… ¿Me entiendes? ¿Tú me entiendes? Sí… soy como un niñito, me cuesta un montón superar esto, seré todo lo inmaduro que puedas decirme que soy, pero…

- Calma… Te entiendo… sabes que sí… - Más inesperado aún, Harry apoyó su cabeza en el pecho de ella – Si quieres llorar… no te prives Harry… aquí no hay más nadie, sólo tú y yo.

- ¿Por qué Hermi? ¿Por qué me lo hiciste? Si tú eras mi ángel… mi santa… mi Hermione no es capaz de hacer esas cosas… ¿Por qué?

- A veces no todo es lo que parece… Siento haberte decepcionado… Pero no te imaginas lo duro que es.

- Mi Hermione…

- Aquí estoy… y aunque no quieras… siempre estaré.


Mientras la música seguía sonando, los invitados continuaban disfrutando de la celebración. Eva que se había quedado sobre la tarima, buscaba con una sonrisa a sus dos tortolitos. Supuso, al no encontrarlos por ningún lado, que estaban hablando y hablando. Éxito total con su plan. Toda una maravilla.

- Ya es mi hora de disfrutar la fiesta – Miró a su izquierda. Se encontró con el guapo guitarrista del grupo. No tardó en sonreírle, sin duda una fiesta de grandes provechos.

- Hola – Saludó él respondiendo la sonrisa - ¿Una pieza?

- Dos, tres, cuatro… ¿Quién lleva cuenta? – Él rió.

- Vaya… pues… ¿Cuál es tu nombre?

- Eva, Evita, nena, baby, el que más te guste – Contestó ella con ánimos - ¿El tuyo?

- Eduard. Un placer conocerte.

- El placer lo obtenemos allá abajo – Comentó graciosamente. Él le miró sorprendido - ¡Tranquilo! Me refería a la pista de baile, no soy tan rápida…

- Claro… ¿Qué habías pensado que pensé?

- Lo que habías pensado – Sin más preámbulos bajaron a disfrutar un poco de la fiesta.

Por su parte, Draco y Ginny que habían quedado juntos tras el famoso "Cambio de parejas", charlaban amenamente. Algo fuera de los planes de todos menos de Eva, que había hecho bien su conspiración. ¿Significaba eso una posible reconciliación? Carol parecía feliz, correteaba alrededor de la mesa con una sonrisa de oreja a oreja.

Sirius y Lys no dejaban de verse encantados. Por fin había llegado el día, y pronto, para su satisfacción, llegaría la esperada luna de miel… Ya parecían hasta un poco impacientes porque aquel rollo de la fiesta finalizara. La madre de Lys ya había dejado de importunarle y no faltaban más de una hora para que se fueran de allí.

- Ya verás todo lo que te haré hoy – Comentó Sirius con un tonito pícaro – Mmm te voy a hacer la mujer más feliz del planeta.

- Siri, no uses frases repetidas – Rió ella – Además, aquí no me salgas con esa que si mi madre te oye le da algo aquí y no nos vamos a ningún lado.

- Que negativa que eres, a ver como te lo quito.

- Bueno… podría pasar.

- Pero no pasará. Además, ya estamos casados… ella tiene que saber que eso implica lo que tu ya sabes.

- No sé, ella pensará que soy más inocente que un bebé.

- Pues yo no lo creo… Vamos… ya, de una vez, no me resisto.

- ¡Siri! Ni que no lo hubiésemos hecho antes…

- Ahora eres mí esposa. Es distinto, además, me aburro.

- Bueno… He de confesarte que yo también. Echémonos una escapada, no creo que le haga mal a nadie… Y mi mamá… Que se aguante.

Salieron divertidos del salón, sin ser vistos por nadie. Estaban muertos de ganas por estar solos pero muy juntitos. Ya los nervios habían pasado, ahora lo único que quedaba era disfrutar… dedicarse a ser felices.

Notas de la autora:

Ufff… no puedo creer que ya me haya terminado la boda esta XD me estaba volviendo loca ya! Necesitaba terminar… -.- con tanto tiempo que llevo así… estancada aquí. Espero que haya sido aunque sea un poco de su agrado, sino… bueno, lo entiendo XD pero eh!! Dos besos de Harry y Hermione… eso dice mucho… O no? XD no les diré, se esperan que ya casi termino este fic. Por fin…

Ahora respondo sus hermosos reviews

Nelly Esp: Buenu… gracias por decir que es divertido, hago todo lo que puedo en cuanto a continuar rápido… creo que eso nunca lo cumplo.

Titi Potter de Parry: Teteeee XDDD tengo flojera de responderte… tu me entiendes verdad? XD yo sé que sí… n.n gracias por siempre dejar reviews, no como Male.

Arabella-G-Potter-Black: Gracias por dejar reviews!! Me alegro de haberte puesto feliz es reconfortante saberlo. Sí… XD pobre Lys

Gaya Lunae: De nada loka!!! Tranquila… Lys no está embarazada, realmente eran sólo delirios de ella. Y pues sí… ya queda poco… UU pero bueeeh, así ya no tienen que esperar más. Gracias por el review lindo!!! Besos iwal.

Paulau undomiel granger: Bueno aquí lo tienes, espero no haberte decepcionado tanto XD sigue dejando reviews!!!

Pgranger: Vaya! Muchísimas gracias por decir que vale la pena! De veras… eso anima mucho. Mira no más… Te lo cumplí, Harry/Hermi hablaron… Sigue leyendo!

Hermione de Potter: Loka!!! MUCHAS gracias por dejar review o.o en serio. A ver si los dejo juntos… vamos a ver… ahora me estoy yendo por el… XDDD a ver qué pasa XD

Lorena Malfoy: Me parece muy buena tu opinión, de hecho… No digo XD creo que no puedo cumplirte lo de actualizar rápido… Sigue leyendo! Gracias!

Miles: Gracias por el review sí… a ver si lo hacen rápido XD

Andy Yogima: Veo que sí se entiendo que me gusta que me llamen Lis XD gracias por hacerlo notar. Jaja!!! XD Me alegro que dejaras review espero que siga así.

Ginny-Shelena: Si XD soy un poco mala…Mira que no me he olvidado de ti!!! Ya viste xD Gracias por estar siempre pendiente (Tan agradecida yo con todo el mundo) JAJA!! XD hablamos see ya. Besos!

Mara: Mujer OO gracias por esos reviews XD eres bien insistente… Gracias por esa suerte! Bien bien recibida!!!! nn sigue leyendo, aquí espero tus reviews. Y a ver cuando continúo…

¡Hasta la próxima actualización!

(Falta)

Pero si no se olvidan de los reviews entonces quizás menos XDDD

Lis Jade Black.