Chapter 3: Living with me

Me dolía la cabeza… Para alguien como yo estar toda la noche en vela es bastante agotador. Me fui al baño para borrar todos los rastros de lágrimas que hay en mi cara (prefiero morirme antes que las vea alguien) y luego bajé las escaleras buscando una aspirina, estaba reventado de tanto pensar…

Pensar qué iba a hacer…

No había que ser muy inteligente para saber que Hanamichi no le gustan los hombres y conquistarlo no sería una tarea fácil. No he visto nada que me pudiera indicar que me dijera que mi pelirrojo se sienta atraído por los chicos ni mucho menos que le atraiga mi persona.

Siento miedo por eso, más que nada, miedo al rechazo…

"Entonces¿dónde quedó ese Kaede Rukawa que no le tiene miedo a los desafíos?"

Me respondo… es fácil esforzarte por algo que depende sólo de ti, mas no lo es así cuando dependes de la voluntad y los sentimientos de otra persona ¡es tan bello y horrible a la vez sentirte dependiente de otra persona!

Pero eso ya no importa… después de todo, soy un luchador…

Termino de bajar las escaleras, estoy filosofando más de la cuenta ¿qué me hiciste?

"…"

Y ahí los vi, jugueteando como si no hubiera nadie más presente. Que luche por él no significa que esto no me duela ni sienta celos. Luego se dan cuenta que yo estoy allí, él sólo me está mirando con cara de incertidumbre y hacia abajo; obvio, recién me doy cuenta que sólo ando en boxers. Me alegro que al menos, le llamé la atención.

"Un momento… si los dos somos hombres, nos hemos visto desnudos y… Nah, ilusiones de un tarado enamorado…"

Me siento a la mesa sin decir ni media palabra, Hotaru me ataja.

- Cariño – comienza a hablar algo dubitativa – espero que apruebes la relación de Hana y yo – "Hana ¿qué se cree?" y no me doy cuenta que continúa – sé que es algo distinto pero…

No la dejé hablar, se me ocurrió algo, es riesgoso…

… pero creo que no había otra alternativa.

- Está bien, yo entiendo – les dije tranquilamente ante la sorpresa de ambos – espero que me disculpes Sakuragi por lo de anoche, no volverá a pasar – me dirijo hacia él.

- De… de acuer…do – me dice casi con la mandíbula en el suelo.

- Pero creo que lo más justo es que Sakuragi se venga a vivir con nosotros – miro a Hotaru muy seriamente.

- Zorrito, estás loco.

- ¿Vives con alguien más? – pregunté.

Me miró y me señaló que no.

- ¿Para qué estás solo cuando puedes venirte a vivir con Hotaru? – pregunto – En serio, no los molestaré.

- Pero…

- Entonces decidido, te vienes – le sentencié al pelirrojo - ¿no hay problema, Hotaru? – le pregunto.

- No, encantada – me dijo la muy perra, pero cayó en la trampa.

Sé que la mayoría me dirá que estoy enfermo o loco para meterlo en la boca del lobo, o mejor dicho, de la 'zorra' pero, en realidad no es tan así. La conozco lo suficiente para decirles con la certeza que es la única forma de levantármelo, sólo hay que esperar.

Ya lo verán…

Y fue así como Hanamichi se fue a vivir a nuestra casa. Si les dijera que aguanté perfectamente a que mi "madre" lo tocara con toda la confianza del mundo, se equivocan; ninguno de los dos es muy recatado en ese sentido. Muchas veces tuve que fingir yendo al baño, cuando la verdad se me partía el alma del dolor y lo único que quería era llorar. Tenía el perfecto conocimiento que eso iba a pasar y que esos eran los sacrificios.

Pero no todo fueron penas, todo también tenía sus ventajas. Ir todos los días con él a la preparatoria era fabuloso, sin embargo, no fue fácil comunicarnos. Dos años de peleas no se iban a ir a la basura así como así… Pero si no fuera por eso, él no sabría que existo y como dicen por ahí 'es mejor el odio que la indiferencia'.

Menos mal que Hotaru se tragó todo lo que le dije y comenzó a ayudarme con esto de 'amigarme con el pelirrojo', no sabe que lo único que quiero es levantárselo y que me haga suyo.

Los días pasaban y los torpes, los tarados, los zorros apestosos eran el pan de cada día, pero cada vez eran más amistosos.

Luego lo invité a salir para 'fraternizar'. Así que salíamos todos los fin de semana, y comenzamos a conocernos. No tenía idea que usaba lentes de contacto o que lo habían rechazado tantas chicas; malditas estúpidas, qué no daría por una oportunidad o por un beso. El se sorprendió cuando le conté la historia de mi vida, que era solitaria, que mi papá se volvió a casar, etc…bueno, le oculté algunas cosas de Hotaru, no iba a hablar mal de ella… que se dé cuenta solo, es parte de la estrategia.

Increíblemente, nuestra relación comenzó a mejorar bastante, a veces salíamos los tres con Hotaru. Me encantaba cuando la gente le decía 'que son guapos sus dos hijos' o que 'su hijo y su amigo son ', no sabía que cara poner para aclararlo.

Y no lo hacía…

Al pelirrojo no les molestaba de primer momento. Era obvio que no era fácil decir que tu pareja te dobla la edad. Tampoco él le había dicho a su ejército la relación que tenía, pero igualmente les era muy sospechoso el hecho que pasara mucho del tiempo conmigo.

Y ahora sólo tenía que esperar…

Por mucho que le guste el pelirrojo, mucho tiempo sin juerga le haría mal para la salud.

Así pasó… un día, Hotaru le dijo al pelirrojo que tenía que irse de viaje de trabajo. Esa no se la cree ni ella. Se despidieron con un beso, de esos que hasta los cursis vomitarían de lo empalagoso que era.

Y…

Quedamos solos…

Todo un fin de semana…

Si fuera como él, pegaría saltitos hasta que me golpeara con algo y cayera semi inconsciente. Pero es mejor guardar las ansias con uno, para esconder sus verdaderas intenciones. Por otro lado, como ya les dije, creo que Hotaru salió de farra, no aguantaría mucho tiempo jugando a ser la "mujer perfecta", aunque al menos mis sacrificios no han sido en vano.

Oh, oh…

Ahora que lo pienso, no me he hecho la pregunta…

¿Cómo conquisto a un heterosexual?

Ya les había mencionado que no sería fácil... Eso es fácil decirlo; pero de ahí a saber cómo hacerlo, ni me lo pregunten, no tengo idea.

Ahhh, y ahora estoy angustiado, está tan cerca y a la vez tan lejos de mí. Justo ahora que mis ánimos están arriba, hay algo que me los pone abajo, eso es algo no muy común en mí.

Debe ser este torpe pelirrojo que me tiene tan alborotado…

Estoy triste y el hecho de que esté nublado y con la amenaza de llover, no me está ayudando a sentirme mucho mejor. Además ya casi son las once y no quiero que mi pelirrojo me diga que la extraña, sería la quinta vez que me lo dijera y si me lo dice una vez más, creo que le volaré la cara.

Menos mal que lo amo, pero para qué estamos con cosas, es un torpe…

Me acuesto, para variar tengo mucho sueño… ¡Maldita sea! Vamos a empezar con los truenos y los relámpagos. Los odio, con los ruidos, no me dejan dormir.

Y hablando de ruidos, Hanamichi está golpeando la puerta

- ¿Qué quieres? – pregunto antes de abrir en un tono muy poco amable que digamos por razones obvias.

En vez de oír el típico 'ay, zorro apestoso, bla bla bla', está bastante asustado y algo sonrojado.

¿Y ahora qué le pasa?

- Es que ehhh…. es que – apenas podía modular con tantos balbuceos y con un rojo en su pelo que competía con su cabello.

Yo sólo levantaba una ceja, mi torpe no es siempre así, y eso me hacía sentir extraño.

De repente, se oye un relámpago. Casi como reflejo, Hanamichi me abraza temblando de miedo, al parecer, le teme a los truenos.

Y ahora… no puedo ver nada…

Genial… se cortó la luz… y no sé si ponerme contento o triste por ello…

¡Mataría por besarlo en la oscuridad! Y él, se está aferrando a mí, como un niño; al parecer, Hotaru aún no se ha robado su inocencia y eso me alegra, de lo contrario, Hanamichi no sería Hanamichi.

- ¿Puedo dormir contigo? – me pregunta casi en un susurro.

No sé si adorar u odiar más dichos truenos porque, de lo que estoy seguro, es que no dormiré nada por esta noche.

- No, me gusta dormir solo – lo digo parcamente, no quiero que su presencia en mi cama me haga más daño.

- Por favor – me lo dice suplicando.

"Si seré idiota¿lo quieres conquistar o no, Kaede?"

- Está bien.

Antes que terminara, ya estaba acostado en mi cama, llamándome que me acostara con él. Este chico está loco y, sin darme cuenta, estoy sonriendo, puesto que a pesar de todo no ha cambiado; menos mal que no puede verme.

Me acuesto y empezamos a dormir. Creo que ha pasado media hora, además ha parado de llover y podría dormir si no fuera por este pequeño gran 'estorbito'. Me rió por eso, no me la creo ni yo, porque ahora la luna está reflejando su rostro, y me parece muy hermoso; estoy pasando mis mano por su cabello y por su rostro, que sólo por esta noche los he alquilado…

"Haber Kaede, espera un poquito, empieza a parar porque estás comenzando a sentir algo extraño en tu cuerpo y eso no está bien. Pero por otro lado, estás locamente tentado por esos labios que te llaman para ser tocados, para sentirlos tuyos. Has estado tantas noches deseándolo, que ahora lo tienes al frente tuyo".

Aunque creo que me gustaría más que él me lo diera con sus cinco sentidos bien despiertos.

Pero sólo es un beso…

Uno…

Ya me estoy acercándome, y no me estoy dando cuenta, pero lo quiero, lo deseo. Sé que no está bien, pero mi corazón dice lo contrario y no puedo frenando. En este momento, estoy rozando mis labios con los suyos y comienzo a besar la comisura de sus labios, los estoy masajeando muy lentamente y no quiero parar por nada; aunque sería fatal si lo despierto, aún así, lo sigo haciendo.

Al parecer, estoy frenando mis pasiones y me cuesta mucho trabajo hacerlo, ya que Hanamichi está a mi total disposición. Y no es nada fácil tamoco, cuando lo único que me molesta para verlo desnudo y para yo estarlo son los boxers, que los tenemos como única prenda para dormir.

Sigo besando suavemente sus labios pero con determinación…

Al terminar, le acarició la cara nuevamente. Con la yema de mis dedos, repaso algunas líneas de su rostro y miro como está durmiendo mi torpe, creo que mañana será un lindo día.

Lo que yo no sabía es que siempre estuvo despierto…

¡Holas! Más de alguien debe estar haciendo una protesta por la falta de actualización. Quiero pedir mil disculpas por lo que hecho, es una falta de respeto para los lectores que la esperan pacientemente. Ahora que salí de vacaciones, no tengo ninguna excusa para no seguir la historia.

Con respecto al fic, bueno Rukawa se puso a la guerra, no iba a dejar que le quitaran a su do'aho tan fácilmente. Aunque creo que se pasó de osado, está bien que el destino te dé una mano pero tampoco hay que tomarse el codo, jejejeje, este zorrito sí que nos salió pervertido ¿cómo reaccionará Hana?

Bueno, espero que pasen una feliz navidad y el mayor abrazo para año nuevo…

Un besito para todos…

Paulyta.

REVIEWS

Elena: ¡Hana vestido de SSC! Ahora sí que llegó el fin del mundo, qué asco. Sí, pobre zorrito, al parecer, ése no era su día, pero es el zorro y por no sólo por la apariencia es así, jejejeje. Un besito.

Aoi-Hikawa: Lo siento mucho, creo que con éste también me demoré, por la sobrecarga académica. Pero ahora estoy en vacaciones y me voy a demorar mucho menos. La madre ya se pasa, pero sí algo no heredó el zorrito, es su falta de neuronas… Espero que continúes leyéndola, besos.

Khira: Me alegra mucho que alguien tan talentoso como tú le guste mi trabajo (me voy a sonrojar)… Y bueno, en lo personal, me gusta más el lemon HanaRu que el RuHana por una cuestión de que Ru es más bajo, pero no me cierro (ya hice un lemon RuHana). Pero como te comenté, no todos serán RuHana, ya lo verás… Un abrazo y un besito.

pau-chan: Yo también amo a Hana-chan, es muy tierno, espero que te guste este capítulo en donde es más tierno que en los anteriores… Cuídate mucho.

Marion Mayfair: Y bien helado, pero Ru lo dice irónicamente, puesto que es lo que menos quiere (y yo también, jajajajaja). Yo también la odio, por lo menos aquí el matricidio no se vería tan mal, jejejeje. Ahora al zorro le tocó difícil pero no imposible, por lo menos empezó a dar marcha a su plan; pero acaba de dar un pequeño tropiezo ¿o no?