Disclaimer: Kubo! Kubo! Kubo es pistonudo! Como Kubo... No hay ninguno! Uhm... creo que este disclaimer ya lo use una vez... Pero en fin, que quereis. Es dificil decir que los derechos de Bleach pertenecen a Kubotite-sensei una y otra y otra vez y que yo solo le tomo un poco el pelo a el y a los Estudios Pierrot xDDD


ADIOS

Abrió los ojos esperando ver algo distinto, tal vez mejor.

De nuevo, el peso de la realidad le decepcionó con su visión.

Titilaban en su mirada las luces tenues que iluminaban la habitación, reflejando en ella el calor de sus llamas… la lejanía del alma de aquel hombre.

Una vez más, el destino le depositaba allí, ante la imagen de su esposa, cuya ausencia no conseguía nada más que reforzar su presencia en el corazón de Byakuya.

Durante mucho tiempo, ella había sido la única, en su corazón y en su mente.

Incluso ahora, Hisana lo era casi todo para él. Casi.

Of all the things I've believed in
I just want to get it over with
Tears form behind my eyes
But I do not cry
Counting the days that pass me by

¿Qué pensaría ella si ahora le viese? Encogido frente a su altar, herido física y psicológicamente. Incapaz de cumplir con las misiones que le fueron asignadas.

No pudo detener a los traidores; no supo mantener la paz en la Sociedad de las Almas, hacer respetar las normas, dar ejemplo.

No supo proteger a la hermana de Hisana como solo ella merecía, y tan sólo gracias a un golpe de suerte ambos seguían vivos. Aunque no sabía bien a que precio.

Sin su honor, sin su palabra, sin uno solo de los ideales que le guiaron a lo largo de una vida vacía… ¿Qué le quedaba?

Nada.

Hisana, como todo y como todos los demás, le había repudiado, le había abandonado.

O quizá… Tal vez sólo le quedaba ella. Rukia…

I've been searching deep down in my soul
Words that I'm hearing are starting to get old
It feels like I'm starting all over again
The last three years were just pretend

Ella le había escuchado, le había comprendido y le había perdonado, lavando sus errores con su sola presencia.

Él había estado a punto de matarla, pero Rukia… Simplemente, le estrechó entre sus brazos, protegiéndolo del enemigo con su cuerpo debilitado, con su propia vida.

Byakuya se levantó, no sin dificultad, dirigiéndose hacia el retrato de su esposa, que parecía mirarle, leyendo en su alma todo su miedo y su culpabilidad, como una vez hizo en vida.

El hombre apoyó con suavidad sus manos en el marco del cuadro, tomándolo con infinita delicadeza.

- Ahora… Por fin te comprendo, Hisana. La protegeré de todo lo malo que pueda ocurrirle.

Volviendo a depositar en su lugar el retrato, Byakuya se alejó unos pasos, hasta la salida de la habitación.

- Lo juro. Adiós, Hisana.

Goodbye to you
Goodbye to everything I thought I knew
You were the one I loved
The one thing that I tried to hold on to

Byakuya caminaba por los enormes pasillos de la casa, meditando sus propias palabras.

Proteger a Rukia. De la guerra, del dolor, del sufrimiento, de la oscuridad que se cernía sobre todos ellos desde la huida de los traidores.

Pero no era ese el único de los peligros.

Quizá el mayor de todos ellos era él mismo.

I still get lost in your eyes
And it seems that I can't live a day without you

Como si hubiese escuchado cada uno de sus pensamientos, Rukia apareció de repente frente a él, como una aparición llegada de mundos desconocidos.

El océano encerrado en sus ojos, la delicada porcelana de su piel… El sol brillaba con fuerza en el exterior, colándose por las ventanas, iluminando la figura de la mujer como si, en efecto, su silueta dibujada sobre la penumbra otoñal de aquel pasillo vacío, fuese un regalo realizado especialmente para hipnotizarlo.

Para torturarlo.

Closing my eyes and you chase my thoughts away
To a place where I am blinded by the light
But it's not right

Rukia le observó con timidez, como siempre hacía, y su hermano le devolvió una mirada hueca, vacía de todas las emociones que en ese momento le recorrían.

- ¿Te encuentras mejor, nii-sama? – preguntó.

- Sí, Rukia – respondió él con sequedad.

- Unohana-taicho me dijo que tus heridas estaban casi cerradas. Que pronto estarías del todo recuperado.

- Eso espero.

El hombre prosiguió su camino, cruzándose en él con Rukia, cuya presencia embriagadora, asfixiante, hizo que, por unos momentos, Byakuya de detuviese, dudando sobre su determinación.

La cercanía de ambos le permitió escuchar la respiración agitada de la mujer, como si su simple roce provocase en ella emoción contenida, un cúmulo de esperanzas inciertas…

Byakuya inspiró profundamente antes de continuar caminando, alejándose de ella.

Goodbye to you
Goodbye to everything I thought I knew
You were the one I loved
The one thing that I tried to hold on to

- ¡Byakuya-sama!

El hombre detuvo el paso, volviéndose hacia su hermana lentamente; temiendo ver a Rukia, temiendo que lo que ella pudiese decirle diese al traste con su aplomo, que una sola palabra surgida de sus labios le llevase a cometer alguna locura, como tanto tiempo llevaba deseando hacer.

- Yo… - empezó a decir la mujer con un hilo de voz – Nunca te he dado las gracias por salvarme en el Duo Terminal. Ni por ayudarme... durante todo este tiempo…

- No tienes porqué darlas – cortó el hombre con amargura en su voz.

Tanto daño como le había hecho, todos los peligros que había corrido por su culpa… ¿y ahora le daba las gracias?

¿Por qué? Debería ser él quien le rogase perdón por torturarle con su despotismo, por exponerla a una muerte segura y no mover un dedo por impedirlo.

- Byakuya, yo quisiera…

Por amarla desde que la conoció; el mayor de todos sus errores. Porque aquella dulzura, aquella fuerza… Él no merecía aquello.

Aunque una parte de su mismo supiese que Rukia sentía lo mismo por él… Rukia se había ganado…Rukia necesitaba algo mucho mejor.

And it hurts to want everything and nothing at the same time
I want what's yours and I want what's mine
I want you
But I'm not giving in this time

- Ahora que conoces la verdad sobre Hisana, espero que no me decepciones. No me gustaría incumplir la palabra que le di a la única mujer que he amado, Rukia.
Breve, sutil, directo al corazón.

Byakuya casi pudo sentir como el alma de Rukia se estremecía, como sus anhelos se rompían como el cristal más delicado al oír aquellas palabras.

El hombre se giró de nuevo, prosiguiendo con su camino, mientras Rukia sentía como sus ojos comenzaban a empañarse tras el último desplante de su hermano.

De un manotazo, se quitó con furia las lágrimas que asomaban a sus ojos.

Se sentía estúpida por amarlo y por no haber notado que ella era tan solo una sombra, un accesorio más a la memoria de Hisana, aquella mujer que le había arrebatado todo.

La mujer se volvió, caminando en la dirección contraria a la que había tomado su hermano.

Tan fuerte era su determinación de seguir adelante, de olvidar a aquel hombre y expulsarlo fuera de su corazón, que no sintió como una mirada se clavaba en ella.

Byakuya se había detenido y la observaba marcharse, con tristeza en la mirada y el corazón roto una vez más.

Goodbye to you
Goodbye to everything I thought I knew
You were the one I loved
The one thing that I tried to hold on to
The one thing that I tried to hold on to

A su propio dolor se sumaba el de ella, pero Byakuya supo que, por primera vez, había obrado correctamente.

Aquel era un amor prohibido, condenado a permanecer aletargado eternamente dentro de él.

Algún día, Rukia sería feliz, estaba seguro de ello. Y tal vez entonces, de nuevo volviese a sentir la alegría, el alivio, la tranquilidad de saber que lo que amaba estaba a salvo, en un lugar seguro para siempre.

Porque llegaría el momento en el que las dos mujeres que el más había querido, y que jamás llegaría a querer finalmente obtendrían la paz.

Entre Renato, Byakuya tan sólo podía permanecer allí, inmóvil, observando como la figura de Rukia se alejaba poco a poco. De él… de su vida… de su mundo…

And when the stars fall I will lie awake

Aquel suspiro, aquel susurro cargado de sentimientos, jamás llegó a los oídos de Rukia. Lo que, en la distancia, si pudo notar, fue la oscuridad… Una negrura absoluta encerrando a su hermano, apartándole de ella.

Al girar una esquina, Rukia no pudo soportarlo más y rompió a llorar.

Al otro lado del pasillo, Byakuya volvió a susurrar una única palabra.

You're my shooting star

- Adiós…

- FIN -


Muy buenassssssss! Buneo, me costo mi trabajito (y mi tiempo de reflexion xD), pero finalmente termine con la trilogia de Angels. Yuju por mi! xDDD
Adios es un fic bastante distinto a los otros dos, quizá porque el final este totalmente desprovisto de esperanza. Al final, los dos asumen que todo es imposible, una quimera, y que lo mejor que puede pasar es que ambos se alejen para siempre, aunque en realidad no sea su deseo.
Com siempre he dicho, hay algo precioso y verdaderamente agradable de leer y de escribir en los fics Angst como este, en esos amores prohibidos pero a la vez tan bellos; y la verdad es que una pareja como la de Byakuya y Rukia es perfecta para todo ello, asi que espero que os guste tanto leerlo como a mi escribir sobre ellos.
La cancion que he utilizado en el fic se llama Goddbye to you, de Michelle Brach, una preciosa cancion de amor y de adios que os recomiendo queos bajeis, porque en mi personal opinion, el fic gana mucho si se lee con la letra y la voz de Michelle de fondo.
Bueno, muchos besitos a todos, muchas gracias por leer hasta aqui y espero volver a vernos pronto. Y por supuesto, muy Fliz Naviad y Prospero Año Nuevo para todos!
Byeeeeeeeeeeee!

Ela :)