SOMOS CHICOS DE HIELO

By Tenshi Lain & Neko-chan

Notas en tinta verde:

Esta historia está basada en el manga de Wataru Yoshizumi "Somos chicos de menta" (o "Mint na bokura" en japonés) con los personajes de YuYuHakusho (que pertenecen a Yoshihiro Togashi). Ninguna de estas obras me pertenecen, solo hago esto para divertirme (y porque Neko-chan me insistió mucho para que escribiera una parodia con los personajes de YuYu. Puede llegar a ser muy pesada --'). También advierto que habrá un poco de Shonen ai (AMOR entre chicos, NO sexo... mal pensada/os ¬¬')

Reparto de personajes

Noel Minamino: Hiei

María Minamino: Yukina

Ryuji Sasa: Kurama (NdTL: no le pongo su nombre humano porque la liamos ;P)

Miyu Makimura: Maya

Yoshiaki Hirobe: Yusuke Urameshi

Daisuke Sakurai: Kazuma Kuwabara

Kanako Asou: Botan

Karin Tachihara: Keiko Yukimura

Jiro Kuriso (Chris): Kuronoe

Ren: Koenma

Directora Morinomiya: Maestra Genkai

Cap. 3

Era martes. Las hermanas Minamino, Botan y Maya estaban en el patio charlando sobre el próximo examen de lengua y literatura.

- ¡A quien se le ocurre ponerlo a primera hora¡Yo no soy persona hasta las once! Fijo que me duermo sobre el folio...

- Venga, no exageres - dijo Maya divertida. Ahora que tenía gente con quien compartir su secreto, era mucho más sociable con sus compañeros.

- ¡Botan ven un momento! - llamó la delegada de curso desde la ventana del pasillo.

- Ahora vengo chicas - y se fue correteando hacia la ventana.

- Por cierto Maya - dijo Yukina en voz baja buscando algo en su mochila. Al momento sacó una pequeña cajita y de esta un colgante con una preciosa perla nacarada -. Este amuleto complementará al que ya tienes y lo hará más efectivo.

- Es precioso - dijo la morena observando el obsequio -, pero parece muy valioso, no sé si debo aceptarlo.

- No te preocupes por eso, es cortesía de Hiei - dijo mirando de reojo a su hermano, el cual desvió la vista molesto. Aquella era una de la lágrimas que Yukina había llorado el día que fueron a la feria.

- Bueno, pues muchas gracias - aceptó la chica poniéndose el colgante. Ambos hermanos respiraron aliviados. Aquella perla no solo protegería a Maya sino que haría que ellos dos no estuvieran tan incómodos en presencia del otro amuleto.

- Buen yo me voy ya - dijo Hiei poniéndose en pie y sacudiéndose el uniforme.

- ¿Has quedado con Sasa? - preguntó Yukina con cara seria.

- Si, me prometió que me enseñaría a jugar al World-rally. Jamás pensé que los videojuegos fueran tan divertidos.

- Hiei, respecto a lo que hablamos...

- Que si, que si... - se desentendió el chico marchándose del lugar.

- ¿Por qué no me escucha? - se lamentó Yukina.

- ¿Hay algún problema con que quede con Kurama? - preguntó Maya viendo tan preocupada a su nueva amiga.

- Más o menos... - contestó pero entonces cayó en algo - Le has llamado Kurama ¿es que lo conoces?

- Si, veras, es que...

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Hiei entró en la sala de recreativos y vio a su pelirrojo amigo sentado cerca de las máquinas de tiro láser.

- Llegas tarde - le reprendió.

- Es que estaba hablando con mi hermana y Maya y se me pasó el tiempo...

- Maya es tu compañera de cuarto ¿no?

- Si.

- ¿Os lleváis bien?

- Si bastante. Al principio me pareció un poco seria, pero es muy maja.

- Ya - dijo llanamente con una sonrisa.

Pasaron toda la tarde corriendo por las dunas del desierto del Sahara en el simulador. A Hiei le costó un poco cogerle el truco a eso del volante y la palanca de cambios, pero al final consiguió hacer el recorrido sin salirse de la pista y con buen tiempo.

- ¡Si, toma ya! - dijo Hiei levantando un puño en señal de victoria.

- Muy bien Minamino.

- Llámame Hiei - dijo el Youkai, pensando que ya le tenía bastante confianza al pelirrojo.

- Pues tú llámame Kurama - dijo con una sonrisa - oye ¿Nos hacemos unas fotopegatinas?

- ¿Qué es eso? - preguntó con curiosidad.

- Son unas fotos pequeñas que puedes pegar en cualquier parte. Venga, de recuerdo.

- Vale - aceptó Hiei, no parecía nada malo y ya estaba un poco cansado de juegos violentos.

Fueron hasta una especie de cabina telefónica con cortina y entraron. Un poco estrecho para dos personas... pensó.

- Mira - empezó a explicar Kurama -, pones una moneda aquí... Luego con estos botones seleccionas un marco - fue pasando modelos hasta que paró en uno en el que se veían los cuerpos de un angelito y un diablillo. Hiei iba a protestar por ese marco, pero la mano de Kurama en su hombro y la proximidad entre ambos, lo hizo callar - Tienes que colocar la cara de forma que encaje con el dibujo - seguía explicando. Hiei no sabía porque lo ponía tan nervioso aquella cercanía -. Ahora mira ese punto que parpadea.

Hiei pedía interiormente que la foto se hiciera ya. Estaba poniéndose MUY nervioso. Un leve chasquido anunció que la foto estaba hecha. Hiei respiró aliviado con intención de salir de la pequeña cabina pero la mano de Kurama no le dejó salir.

- ¿Pero que...? - no pudo decir nada más antes de tener los labios de Kurama sobre los suyos.

Se quedó estático, su mente totalmente en blanco, no podía reaccionar de ninguna manera. Ni siquiera era consciente de lo que ocurría a su alrededor. Tan solo sentía los cálidos labios del pelirrojo sobre los suyos... el pelirrojo... su amigo ningen... ¡los amigos no se besan!

Le dio un empujón apartándolo. Al salir de la cabina tropezó y cayó sentado al suelo.

- Hiei ¿te has hecho daño? - preguntó Kurama al verlo en el suelo con aquella postura tan cómica (Nd N-C: menos mal que llevaba pantalones cortos debajo de la falda XD) - Lo siento ha sido un reflejo...

- ... - Hiei seguía demasiado impresionado para poder decir nada.

- No sé porque te sorprendes tanto. Ya sabes que me gustas.

Hiei se levantó de un salto y salió corriendo como un cobarde mientras las palabras de Kurama resonaban en su cabeza "me gustas... me gustas..." A Hiei también le gustaba Sasa... ¡Pero no de esa manera!

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- ¿Y te ha besado! - exclamó Yukina con los ojos muy abiertos.

- Venga grita más, en Hokkaido no te han oído ¬/¬

- Te advertí que dejaras las cosas claras con él desde el principio...

- ¡No, tu no me has dicho nada de eso! .

- ... ¬¬'

- ¿Cómo iba a imaginarme que solo con ir disfrazado de chica, los chicos se iban a fijar en mí? - dijo mientras se tapaba la cara - Aaah ¿Ahora que hago?

- Hiei... - dijo Yukina con cara triste, pero no pudo contener una pequeña risa.

- ¡No te rías, esto no es divertido! - le gritó su hermano.

- Lo siento, lo siento... Aunque pobre Sasa...

- ¿Pobre? - dijo con tono escéptico Hiei - ¿como que pobre...

- Bueno, es que tal como lo has tratado, seguro que pensaba que él también te gustaba a ti.

- O.O ¡Genial! Y ahora encima será culpa mía... - dijo tapándose la cara con las manos - ¿Qué hago ahora Yukina?

- Pues lo primero es disculparte por salir corriendo. Luego tendrás que explicarle que tú no pretendías darle falsas esperanzas y que no puedes verlo como un novio, pero que quieres seguir siendo amiga suya.

- Lo haré... - dijo con voz apagada, maldiciéndose por meterse en semejante lío.

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Media hora más tarde Hiei y Kurama se encontraban en la parte del patio más alejada. Allí podrían hablar sin que nadie les molestara.

- Mira Kurama... siento haberme ido de esa manera - dijo sonrojándose ¡el nunca pedía disculpas! Era vergonzoso... pero no había otra forma de arreglar aquel entuerto -. Pero es que me has pillado por sorpresa... Además... yo no puedo verte como a un novio ¿entiendes? Pero quiero que sigamos siendo amigos.

No podía saber que pasaba por la mente del pelirrojo en aquellos momentos. Tenía cara de póker ¿Estaría enfadado, decepcionado, molesto...?

- Es decir que te caigo bien pero como novio no te gusto ¿verdad?

- Si... digo ¡no! - se corrigió Hiei - me caes bien, eres un buen tío... pero yo no quiero ninguna relación y menos con un... - se mordió la lengua, no podía decir "humano"

- ¿Con un ningen? - los ojos de Hiei se abrieron al máximo ¿pero que acababa de decir! - Sí, se que no eres humana, aunque no estoy seguro de que eres en realidad... y la verdad no me importa. Pero si no quieres saber nada de mí lo entiendo - y sin más se fue dejando a Hiei tan impresionado que para cuando reaccionó, Kurama ya no estaba.

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Al día siguiente todos en el comedor comentaban el extraño fenómeno ¡Hiei Minamino y Kurama Sasa estaban comiendo separados! Traducción: la pareja se había peleado. Todo tipo de rumores corrían por el lugar a cada cual más absurdo, porque en realidad nadie sabía que había pasado para que se distanciaran tan de repente.

Yukina observaba desde lejos a su hermano, parecía tan sumido en sus pensamientos... jamás lo había visto tan ensimismado. De verdad que aquella discusión con su amigo humano lo había afectado. Pero a ella no le había contado nada... cuando quisiera hablar le escucharía.

Hiei no hacía más que darle vueltas al asunto. Kurama sabía que no era normal ¿desde cuando¿Cómo lo descubrió¿Por qué nunca le había comentado nada al respecto¿Había dicho en serio que le gustaba pese a no ser humano...?

Le dolía la cabeza, no estaba acostumbrado a pensar tanto en un mismo tema. Sin embargo un desagradable sentimiento le invadió ¿y si se chivaba? No, imposible. Kurama no haría eso. Era una buena persona pese a todo. Además de que podría haber aprovechado la oportunidad. Chantajearle para que salieran juntos o algo así... y no lo había hecho. Tenía que hablar con él y aclarar todas sus dudas.
Decidido se levantó y fue hasta el pupitre de Kurama.

- Tenemos que hablar - le dijo, aunque más bien sonó a orden.

- Creo que todo quedó claro ayer - dijo pasando la página de la revista que estaba leyendo sin mirar a Hiei.

- Y un cuerno, ahora todo está más confuso - Kurama lo miró arqueando una ceja -. Espérame después de clase en la entrada de la residencia femenina.

- Pero...

- ¡Por favor! - dijo Hiei con determinación.

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Por la tarde los dos se encontraban en la habitación de Hiei.

- Como nos pillen nos meteremos en un buen lío - comentó el pelirrojo sentándose en una de las camas. Hiei por su parte estaba rebuscando en uno de los cajones de su escritorio.

- No hables tan alto y no nos pillarán - le replicó sacando un pequeño frasquito de cristal.

- ¿Y eso para que es? - Hiei dio un trago sin contestar - ¿No irás a emborracharte?

- Claro que no - replicó sentándose a su lado - ¿Por qué dijiste ayer que yo no era humana?

- Porque no lo eres - dijo con simplicidad -. Por mucho que ocultes tu aura con esa cinta, a mi no me engañas.

- Que oculto... - dijo llevándose una mano a la frente. Claro, el sello de Genkai que impedía que Maya se percatara de su verdadera naturaleza - ¿Y que crees que soy?

- Un ser sobrenatural - dijo con total calma y una sonrisa -, hay muchos por aquí. Así que no sería de extrañar.

- ¿Los sientes?

- Pues claro y si te quitaras esa cinta tú también lo harías. No es prudente ir con las defensas bajas, ni siquiera aquí...

- Me dijeron que aquí los seres sobrenaturales respetaban las normas para no pelearse...

- Si, bueno... Genkai puede decir misa... - ante la cara de asombro de Hiei rió - Sí, sé que la directora está al corriente de todo. Además ella misma me dio el mismo sermón...

- ¿Como? - Cada vez todo era más confuso.

- Quítate la cinta y lo entenderás - le animó.

Un tanto dubitativo lo hizo. Al momento sintió un gran alivio (NdTL: Como cuando te quitas las botas después de salir de marcha XD). Volvía a tener todas sus capacidades al máximo sin aquel "corsé" espiritual. Pero también sintió algo que lo sobresaltó. La presencia de un Youkai muy cerca de él y uno bastante poderoso por cierto. Abrió mucho los ojos mientras Kurama acentuaba su sonrisa.

- Tú eres... - susurró Hiei.

- Un youkai, como tú. De la clase Youko (zorro espiritual) y ahora que siento tu aura completa... - dijo mirándolo de arriba a bajo - ¡Vaya! Un Youkai de fuego... y con un Jagan... Todo un espécimen.

- Pero tú... - empezó a decir Hiei.

Estaba enfadado ¡y mucho¿Cómo se atrevía a tomarle el pelo de aquella manera? Con lo que había padecido pensando que lo había herido... ¡y resultaba que él también le ocultaba cosas¡Un Youko nada más! Con razón decían que llevaban el engaño en la sangre... Claro que aquello también explicaba que le cayera bien el pelirrojo... ¡A buenas horas hubiera hecho amistad con un humano de otra manera!

- Y ¿para que querías que nos viéramos aquí? - preguntó Kurama cortando sus pensamientos y sintiendo como la rabia inundaba a su pequeña amiga.

Hiei palideció y miró con susto la botella de la que había bebido. Demasiado tarde. Su cabello empezó a oscurecerse y a ponerse de punta.

- ¡Vaya! Así que ese es tu verdadero aspecto - comentó Kurama sorprendido - pero entonces... ¿Eres chico?

- A ti que te parece - dijo con disgusto Hiei con su masculina voz de adolescente. Estaba enfadado. Estaba dispuesto a revelar su secreto si así conservaba la amistad de Kurama, pero ahora que había descubierto que el pelirrojo también le había estado ocultando cosas, no sabía que pensar -. Por eso te dije que no podíamos ser novios ¡Los dos somos hombres!

- Y Youkais - le recordó poniéndose en pie y encarándolo - deberías saber que para nosotros la cuestión del sexo es indiferente cuando nos gusta alguien...

- Pues anda que... - se interrumpió al pensar lo que acababa de oír - ¿Qué quieres decir con eso?

- Pues que seas hombre y youkai no me importa - rodeó con sus brazos la cintura de Hiei - así tenemos más en común - y le dio un beso.

- ¿De verdad te gusto? - preguntó al separarse. Sabía de la mala fama de los Youkos.

- Si no me gustaras no te habría besado en la máquina de fotopegatinas... y tampoco ahora. Entonces ¿qué me dices¿sales conmigo?

- Yo... no sé... nunca he tenido pareja... - confesó sonrojado - y esto es muy repentino...

- Piénsalo entonces - dijo dándole un beso en su jagan y recogiendo sus cosas - Y vuelve a disfrazarte. No quiero que Maya se lleve un susto al verte así. Nos vemos mañana.

Hiei acarició el lugar donde le había besado aun con las mejillas rojas. Si lo que no le pasara a él...

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- Entonces le dijo que Yayoi decía que Mieko se había chivado a la profe de física, pero Mika asegura que Ruri fue la que... - iba diciendo Botan a Yukina mientras se acercaban al aula. Pero la koorime no la escuchaba. Estaba más preocupada por su hermano y en como habría acabado la conversación con el pelirrojo. No había podido hablar con Hiei y además estaba lo que Maya le había dicho...

- ¡Botan, Yukina! - llamó una de sus compañeras de clase, haciéndoles señas para que se acercaran a ellas desde la puerta del aula.

- ¿Qué pasa? - preguntó Botan al llegar.

- Mirad, mirad - dijeron entusiasmadas señalando hacia dentro. Cuando las dos se asomaron se quedaron muy sorprendidas. El pelirrojo y la otra gemela Minamino estaban sentados uno al lado del otro revisando los deberes.

- ¡Kurama y Hiei se han reconciliado! - exclamó Botan con una sonrisa - Me sabe mal que se me haya escapado Kurama, pero viendo la buena pareja que hacen se lo perdono...

Yukina sonrió al ver a su hermano más animado y charlando tan alegremente con el pelirrojo. Al parecer todo había salido bien. Después hablaría con más calma con su "hermana".

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- Así que tu hermana se ha enamorado de Yusuke y tú has venido hasta aquí para disuadirla y regresar al Makai...

- Así es - admitió Hiei después de contarle toda la historia.

- Pues me alegro de que no lo hayas conseguido - dijo Kurma con su sonrisa más sincera.

- No sé como tomarme ese comentario.

Replicó Hiei mientras apalizaba a su oponente en el King Fighter XIII.

- Pues porque si lo hubiera hecho, tú y yo ya no podríamos estar juntos.

- No lo digas así - dijo Hiei colorado con el comentario.

- ¿Por qué no? - preguntó divertido. Le encantaba sonrojar a Hiei era tan... mono.

El youkai de fuego se desfogó atizando con fuerza al contrario y ganando el round.

- Buen golpe - dijo una voz que conocía muy bien a su espalda.

- Yukina - dijo Hiei al volverse - ¿Qué haces aquí?

- Quería hablar con vosotros - dijo. Los tres fueron hacía el bar de los recreativos y se sentaron en una mesa bastante apartada. Hiei de vez en cuando cogía una patata frita del recipiente que tenía delante.

- Dispara - dijo Hiei una vez sentados.

- Tú eres un Youko ¿verdad? - dijo sin más rodeos mirando al pelirrojo. A Hiei se el resbaló el codo del borde de la mesa y casi cae al suelo.

- Tienes buen ojo - dijo Kurama sonriendo.

- ¿Cómo es que...? - empezó a decir Hiei (NdN-C: Todos se dan cuenta menos él XD)

- ¿Te tengo que recordar que yo también puedo percibir a los demás youkais?

- No, claro... - dijo Hiei algo chafado.

- Ya lo sabes todo ¿no? - más bien era una afirmación. Kurama asintió con la cabeza - En tal caso iré al grano ¿Qué intenciones tienes con mi hermano? - Hiei se calló del asiento.

- ¿Pero que demonios dices! - gritó Hiei colorado ante el rumbo que su hermana le estaba dando a la conversación.

- Oye, si tú te interesas por mis asuntos amorosos yo también puedo hacerlo con los tuyos - dijo con seriedad.

- Pero... pero... - tartamudeó Hiei totalmente rojo.

- A mi me gusta mucho Hiei - dijo Kurama con tono serio haciendo que el pequeño Youkai de fuego lo mirara sorprendido -. Y te aseguro que no tengo malas intenciones para con él. Te prometo que lo respetaré y lo cuidaré siempre...

- ¡Pero no hables así que parece que le estés pidiendo mi mano! - rugió Hiei consiguiendo que la mitad de los que estaban allí se volvieran a mirar - ¡Y vosotros que miráis!

- Hiei, cálmate - pidió Yukina con voz serena -, además, ahora que sé sus intenciones me siento más tranquila. Por favor cuida de mi hermano - dijo inclinando la cabeza respetuosamente.

- No te preocupes - dijo Kurama devolviéndole la formalidad.

- ¿Por qué a mí? - gimió Hiei tapándose la cara con las manos - Además ¿Por qué te metes en esto? tú no dejas que me acerque a Yusuke para hablar con él...

- Porque lo único que hablarías con él sería "ahora morirás por acercarte a mi hermana" - dijo Yukina. Un pequeño puñal cayó sobre Hiei al verse descubierto -. Bueno yo me voy. He quedado con Botan. Adiós Hiei, adiós "hermano" - dijo refiriéndose a Kurama. El Youko se limitó a despedirla agitando la mano con una gran sonrisa.

- Genial, ya te ha incluido en la familia - se quejó Hiei.

- Se me hace raro ver a un youkai de fuego con una hermana koorime - dijo el pelirrojo, pero sin malas intenciones en su comentario.

- Si, bueno... - dijo Hiei terminando las patatas fritas -. Puede que la igualdad de sexo no sea un problema en el Makai, pero la diferencia de casta si lo es. Nuestros padres tuvieron muchos problemas con sus familias.

- Bueno pero nosotros no las tendremos. A nadie le importa mucho con quien se case un youko.

- ¿Quién ha dicho nada de casarse! - rugió espantado Hiei, pero se quedó callado al ver como Kurama le arrebataba la patata que tenía en la mano dejando que sus labios rozaran levemente sus dedos.

- Tiempo al tiempo... - dijo con su habitual sonrisa.

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- "Tiempo al tiempo"... si es que... - murmuraba Hiei mientras pasaba distraídamente las páginas de una revista - este pelirrojo...

- Buenas noches - dijo una muy alegre Maya entrando por la ventana del cuarto.

- Hola - saludó Hiei sin inmutarse.

Ya estaba acostumbrado a que su compañera de cuarto entrara por la ventana cuando se pasaba el toque de queda, aunque nunca le preguntó que hacía ese tiempo... Se sintió observado y finalmente alzó la mirada ¿Por qué diablos Maya la miraba tan sonriente?

- ¿Pasa algo? - la chica se sentó enfrente de él.

- Nada en especial, pero... por ahí se dice que estas saliendo con Kurama Sasa... - las mejillas de Hiei mutaron de color. Malditos chismosos...

- Ah... - dijo vagamente agachando la cara.

- Ya veo... - dijo Maya divertida con la reacción de su amiga -. Y ¿Qué te parece como persona?

- Como persona... - bueno ante la gente vale, pero era un Youko así que por naturaleza... pero no le podía decir eso - Pues, es muy simpático y muy agradable. Me gusta hablar con él...

- ¿Y no te parece guapo? - insistió Maya. Vale ¿a dónde quería llegar su compañera?

- ¿Por qué me preguntas eso? No me digas que te gusta...

- No, no es eso - negó la morena -. Pero me gustaría saber que te ha hecho fijarte en mi primo.

- Pues... ¿En tu qué! O.O ¿Eres familia de Kurama?

- Sí, mi padre y su madre son hermanos. Así que Kurama y yo somos primos hermanos.

Entonces ella sabe que es un youko... ¡Y que yo soy un demonio! o tal vez no lo sepa. Tal vez solo quiera saber, porque le preocupa que una chica normal salga con su primo demonio o... me estoy rayando .

- ¿Hiei? - llamó Maya al verlo debatiendo consigo mismo.

- ¿Eh? Sí, perdón ¿decías?

- Verás, es que si mi primo te gusta no voy a decir nada, pero tienes que saber que él es un tanto... "especial". No es nada malo - se apresuró a añadir -, solo que bueno...

Maya quería decirle que su primo era diferente ¡Eso ya lo sabía! Pero si iba en ese plan era porque Maya no sospechaba de la verdadera identidad de Hiei... Mejor así.

- Ya he notado que no es un tipo corriente, no te apures por eso - le tranquilizó Hiei.

- Oh, pues mejor así. Aunque es cierto. Tú también puedes sentirlos... - obviamente se refería a los seres sobrenaturales - Je je ¿sabes? Creo que Kurama empezó a interesarse en ti por mi culpa.

- ¿Y eso? - cuestionó Hiei desconcertado.

- La primera vez que te vi me diste una impresión muy rara. Parecida a la que me dan algunos de... "ellos". Pero no tan fuerte y amenazadora. Así que le pedí a Kurama que te investigara por decirlo de alguna manera. Él me dijo que no eras peligrosa, pero que tenías un "algo interesante". Desde ese momento supe que le habías gustado.

- Ah, vaya... - ¡Entonces ese maldito Youko lo había estado siguiendo desde que llegó al internado! Tendría una laaaarga charla con él.

- ¿Estás enfadada?

- No, que va. Es solo que me ha sorprendido.

- Menos mal. Si quieres saber cualquier cosa sobre Kura-chan solo tienes que preguntarme.

- ¿Kura-chan?

- Es que le llamo así desde que éramos pequeños... n.n

- Vaya... y... ¿Cómo era de pequeño? - preguntó con una sonrisa un tanto malvada.

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Yukina caminaba rumbo a la biblioteca cuando algo llamó su atención: Yusuke estaba sentado en uno de los banco de madera con cara de concentración. Los codos apoyados en las rodillas y la barbilla sobre el dorso de las manos.

- "Que sexy se ve así" - pensó Yukina mirándolo con corazoncitos en los ojos.
En ese momento Yusuke se sintió observado y alzó la mirada encontrándose con Yukina, le sonrió y la koorime pensó que no podía existir tanta felicidad.

- ¿Vas a la biblioteca? - preguntó Yusuke.

- Eh, si... ¿Estás bien? Te veo preocupado.

- No te preocupes, no es nada que no se arregle hablando - entonces se fijó en algo - Esa es la pulsera de la suerte de la feria.

- Sí, la llevo siempre encima ¿y la tuya? - preguntó al ver que solo llevaba el reloj.

- Ah, la regalé. Es que no era para mí... y de todas formas no me gustan esas cosas.

Yukina sintió como si una tonelada le cayera sobre la cabeza ¡Ya no tenía la pulsera¡La había regalado! Un espantoso presentimiento se hizo presente en su cabeza...

- Y... ¿a quien se la reglaste? - susurró rogando porque la respuesta no fuera la que se temía.

- A mi novia - dijo Yusuke con su sonrisa más dulce. El suelo se hundía a los pies de Yukina y en el cielo retumbaban truenos.

- ¿TI... TINES NOVIA!

- Pues sí - dijo con un leve gesto de vergüenza - estudia en un instituto femenino que hay en Chiba, solo podemos vernos los fines de semana.

- Va... vaya - consiguió decir. Una novia no entraba en sus planes...

- Nos conocemos desde que íbamos a la guardería - explicó con voz nostálgica -, siempre nos estabamos peleando y me reñía cuando no hacía los deberes o me peleaba con los otros niños. En principio era como mi hermana mayor...

- ¿En principio?

- Después ella se fue a hacer la secundaria a ese instituto femenino y ya no nos veíamos tanto. Tal vez fue por eso que cuando nos volvimos a encontrar la noté tan diferente - sonrió melancólicamente -. Hasta entonces ni siquiera había pensado en ella como en una chica, solo como mi mejor amiga desde la infancia... pero al verla tan cambiada, algo se removió aquí - dijo con una mano sobre el corazón.

- ¿Os declarasteis? - preguntó Yukina con voz neutra.

- Si, y ella aceptó. Pero verse solo los fines de semana no es suficiente para mantener una relación. Con la distancia de por medio todo es más difícil y cuesta deshacer los malentendidos. Precisamente le regalé aquella pulsera porque sabía que tenía exámenes. No pude dársela en persona y se la mandé por correo. Pero llegó tarde, justo cuando ya tenía las notas. Tenía un suspenso y estaba muy preocupada... y justo entonces va y recibe la pulsera - dijo con sarcasmo -, creyó que me estaba burlando...

- ¡Pero eso no es cierto! - replicó Yukina.

- Lo sé, pero hasta que nos den las vacaciones no puedo volver a casa y me temo que hasta entonces no podré hablar con ella. Keiko es muy terca, cada vez que la llamo me cuelga el teléfono o le pide a su madre que me diga que no está. A veces es tan infantil... - pese a todo Yukina notó el amor en las palabras de Yusuke, le gustaba esa tal Keiko de aquella manera, aunque no quisiera hablar con él.

Envidió a aquella chica por estar tan adentro del corazón de su querido Yusuke...

- Si puedo hacer algo... - dijo Yukina.

- No te preocupes. Además si estamos destinados a no estar juntos, no hay nada que hacer... - dijo con tristeza.

- ¡Pero no te pongas así hombre¡Me tienes a mí! - dijo Yukina en un arrebato de valor.

- ¿Eh? O.o? - dijo Yusuke con los ojos muy abiertos.

- ¡A mi me gustas Yusuke! - continuó la koorime con energía - quería la pulsera para que me ayudara a conseguir tu amor... yo... ¿yo no te sirvo como novia?

- Minamino... - dijo Yusuke aun impresionado con la declaración. Ni se le pasó por la cabeza algo así... (NdN-C: Son bastante cortitos en este fic ¿verdad? x3) - Lo siento, no me había dado cuenta de que tú... pero es que yo...

- ¡No te estoy pidiendo que salgas conmigo! - se apresuró a explicar Yukina - pero si rompieras con tu novia, entonces... ¿podrías ponerme en la lista de espera? Te esperaré... ¡te esperaré para siempre!

- Gracias - dijo finalmente Yusuke ¿Qué otra cosa podía decir tras aquella declaración tan sincera?

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- ¿QUÉ YUSUKE TIENE NOVIA! - gritó un sorprendido Hiei sin ocultar muy bien su euforia -. Bueno entonces no hay nada que puedas hacer ¡No te preocupes seguro que hay tíos mucho mejores que ese¡Podemos regresar al Makai! - dijo eufórico.

- No - aquella corta y contundente respuesta lo dejó cortado -. Yusuke dijo que tenía problemas con su novia, tal vez corten y todo... y yo me he ofrecido para sustituirla. Yusuke me ha sonreído y me ha dicho "Gracias".

- ¿Qué...?

- No me voy a rendir tan fácilmente. Me gusta mucho... además - dijo mirando a su hermano con el ceño fruncido - ¿Qué pasa con Kurama?

- ¿Qué pasa de que? - preguntó desconcertado con el brusco cambio de tema.

- Pues que si regresamos al Makai, ya no podrás verle, hombre.

Hiei no contestó. No había contemplado esa posibilidad... ¡y que si no volvía a ver a ese youko descarado! Apenas hacía dos meses que lo conocía y la mitad del tiempo había estado escondiéndole cosas... Claro que él había hecho lo mismo... Pero no podían desvelar su verdadera identidad, era la ley. Además había conocido a mucha gente en el ningenkai y había descubierto que no todos los humanos eran estúpidos y patéticos (aunque algunos sí)

- No volver a ver a Kurama - murmuró a la vez que un desagradable sentimiento de vacío nacía en la boca de su estómago ¿qué quería decir eso?

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Una semana después de todo esto, en el gimnasio del internado Morinomiya se llevaban a cabo los entrenamientos de los equipos de baloncesto masculino y el de voleibol femenino.

Hiei intentaba concentrarse en su trabajo, pero le estaba costando mucho por culpa de cierto grandullón pelirrojo. El balón de voley salió rodando por la pista y acabó a los pies de un tipo alto con un curioso tono zanahoria en el pelo. Cogió el esférico y se acercó a devolverlo.

- Gracias Kuwabara - dijo Yukina con amabilidad. El otro le dedicó una sonrisa que a Hiei le parecía tremendamente estúpida y patética.

- Pareces molesto ¿ocurre algo? - dijo Kurama acercándose.

- Es ese estúpido grandullón - dijo refiriéndose al dorsal seis del equipo de baloncesto -, no me gusta como trata a mi hermana.

- Pero si Kuwabara siempre es caballeroso con las chicas. En especial con Yukina. Creía que ya sabías que le iba detrás.

- ¡Claro que lo sabía! Pero desde hace unos días que está más insistente que nunca. Como siga así tendré que intervenir.

- Venga, no te sulfures. No es ningún peligro, te lo aseguro.

- Mmh... - dijo no muy convencido mientas veía a Yukina riendo por algo que había dicho aquel patán. Suficiente.

Le quitó de las manos el balón a Kurama y se lo lanzó dándole en el centro de la espalda. Kuwabara se volvió buscando el origen de aquel ataque rastrero y se topó con los furiosos ojos de la otra hermana Minamino.

- ¿Estás bien Kuwabara? - preguntó Yukina temiendo lo que su hermano estuviera maquinando en esos momentos.

- Si, no es nada. Y ya te dije que me llamaras Kazuma - dijo con su mejor sonrisa.

- Sí... Kazuma. No te enfades con Hiei...

- Tranquila, no está en mi naturaleza pelearme con chicas. Aunque he de admitir que tira con bastante fuerza - dijo sobándose la espalda.

- Je je... - rió nerviosamente Yukina.

Hiei estaba insoportable, no hacía más que picarse con Kuwabara a la mínima. Al parecer, ya no consideraba a Yusuke un peligro y ahora centraba toda su atención en molestar al pelirrojo de cualquier forma. Este ya le habría partido la cara a cualquier otro, lo único que frenaba a Kuwabara de pegarse con Hiei es que pensaba que era mujer. Si descubría que en realidad era un chico, la batalla entre ellos sería apoteósica.

- Venga sigamos con el entrenamiento - llamó Yusuke. Kuwabara regresó a su parte del gimnasio. El moreno observó a las chicas del otro equipo un momento y luego comentó a su mejor amigo -. No te rindes ¿eh?

- Claro que no. Ahora que Yukina sabe que tu estás cogido ¡Es mi oportunidad.!

- Ella dijo que me esperaría... - le dijo Yusuke solo para chincharlo.

- Pues la haré cambiar de opinión - dijo muy seguro de si mismo.

Desde que Kuwabara vio a Yukina por primera vez que se quedó colgado por ella. Por eso a Yusuke le había chocado tanto que se le declarara precisamente a él. Cuando se lo contó a su amigo por poco le arranca la cabeza en un ataque de furiosos celos. Pero después le hizo ver que así era mejor. Que ahora que la chica ya empezaba a hacerse a la idea de que nunca podría tener nada con Yusuke, Kuwabara tendría una oportunidad con ella.

El pelirrojo no había perdido el tiempo y había hecho todo lo posible por conquistarla, pese a los constantes saboteos de la hermana de esta. Era increíble lo protectora que era Hiei con Yukina.

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- Yo creo que le gustas a Kuwabara pero de verdad, de verdad - decía Botan mientras regresaban al internado después del entrenamiento.

- Ya me había dado cuenta - aseguró Yukina -, pero él no me ha dicho nada claro, además a mi Yusuke...

- Pero él ya tiene novia y por lo que he averiguado, van para largo. Si te quedas esperándolo, te quedarás para vestir santos. Olvídale, hazme caso. Intenta hablar más con Kuwabara n.n, parece un buen tipo... Bueno si Hiei te deja ¬¬ Mira que es posesiva tu hermana, ella ya tiene novio ¿Por qué no te deja a ti salir con quien quieras?

- Kurama no es su novio, de momento son amigos.

- ¿De momento?

- Kurama se le declaró, pero Hiei no le ha dado una respuesta...

- ¡Eso no es justo! - se indignó la chica de ojos rosas - ¡no tiene derecho a tratar así a mi Kurama!

- ¿Pero no habías dicho que lo dejarías estar?

- Si salen juntos sí. Pero si está indecisa...

- No creo que la indecisión le dure mucho - dijo Yukina con una sonrisa conciliadora mientras veía a su amiga subirse por las paredes ante su oportunidad perdida. Sin saber que alguien más había escuchado la conversación.

CONTINUARÁ...

¡Hola, je sui le petite Neko-chan (perdón pero estoy leyendo el libro del vampiro Lestat XD) ¡Capi tres arriba!

¡Casi lo subo! La semana pasada no hubo forma de ponerlo. La página estaba estúpida... ¬¬

Espero que os vaya gustando nuestra adaptación n.n claro que como tal hay muchas variaciones. No todo lo que sale en los 6 tomos convenía :P

¡Ah! alguien nos preguntó como conseguir el manga... pues, por Internet no tengo ni idea, pero aquí en España, el cómic fue publicado en formato cómic book (NdTL: el más HORRIBLE de los formatos .) y en tomo por la editorial Planeta de Agostini. Tal vez en su página web encontréis más información.

Agradecemos de todo corazón los reviws de: SenKo-Kun, Franita-Chan (ya ves que si pasan muchas cosas XD), Hiyu de Jaganshi, hitomi chizu, KeRu-ChAn-kitsunne (Ya ves, Maya no está enamorada de Kura-chan pero se quieren como hermanos :P), Eiri Saiyuki, maggie.d (no creas que es tan raro, he visto algunos fanarts en los que Hiei va vestido de chica y está MONÍSIMO n.n), kyo-chan (tranquila que el fic está escrito hasta el final, pero cuando a la página le dan teleles...),

Ja ne!